UNIVERSIDAD SIMÓN BOLÍVAR Decanato de Estudios de Postgrado Maestría en Psicología “BIG FIVE”, ESTILOS DE MANEJO DEL CONFLICTO Y RESULTADOS DE LA NEGOCIACIÓN. UN ANÁLISIS DE RUTA Trabajo de grado presentado a la Universidad Simón Bolívar por: Daniela E. Saputi C. Como un requisito parcial para optar al título de Magíster en Psicología Realizado con la tutoría del Profesor: Jorge J. Ramírez L. Octubre de 2008 i “Es justamente la posibilidad de realizar un sueño lo que hace la vida interesante” Paulo Cohelo – El Alquimista A Antonio Gómez, mi amado esposo, por acompañarme con amor en los mejores momentos y en los no tan buenos, convirtiendo este camino en crecimiento profesional y personal. Sin ti, no hubiese sido tan especial. Gracias por todo, te amo. A mi familia Saputi y mi familia Gómez, por su apoyo, confianza y ánimo. ii AGRADECIMIENTOS Al Decanato de Estudios de Postgrado y a la Coordinación de Postgrado en Psicología por sus aportes en la formación como Magíster. Al Profesor Jorge J. Ramírez L. por su apoyo constante e incondicional durante la realización de este trabajo A la Profesora Luisa Angelucci por compartir sus conocimientos y consejos. A la Licenciada Ana Saputi y los Ingenieros Gabriella Saputi y Aldo Steppes por compartir su invaluable sabiduría. A todos los participantes, por colaborar y contribuir desinteresadamente con la ciencia. A todas mis compañeras de clases, porque hicieron de este postgrado interesante, divertido y especial. A mi esposo querido, por su compañía, empuje y ánimo para concretar este reto. iii RESUMEN “BIG FIVE”, ESTILOS DE MANEJO DEL CONFLICTO Y RESULTADOS DE LA NEGOCIACIÓN. UN ANÁLISIS DE RUTA Se analizó la influencia de las dimensiones de personalidad Big Five (Concienzudo, Apertura, Agradable, Neuroticismo y Extraversión) y los Estilos de Manejo del Conflicto (Evitativo, Dominante, Complaciente, Comprometido e Integrador) sobre los Resultados de la Negociación (Funcionales y Disfuncionales), a través de un análisis de ruta. Para la medición de las variables se empleó una adaptación para Venezuela del Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II) de Rahim (1983), por Ramírez y Alvarez (2004); el Cuestionario Big Five (Goldber, 1992); y el Cuestionario de Resultados de la Negociación (Rahim, 2001), estos dos validados y adaptados para Venezuela como parte de la investigación. La muestra fue constituida por 380 participantes voluntarios. Los estilos de manejo del conflicto integrador y comprometido y la dimensión concienzudo del Big Five, son variables que de acuerdo al modelo resultante, contribuyen a explicar la varianza observada en el puntaje de los resultados de la negociación, esto es: (a) la presencia de la dimensión concienzudo del Big Five se relaciona con los resultados funcionales de la negociación e inversamente con los resultados disfuncionales; (b) los estilos de manejo del conflicto comprometido e integrador se relacionan directamente con los resultados disfuncionales de la negociación. Adicionalmente, el estilo integrador se relaciona inversamente con los resultados funcionales de la negociación. Estos resultados son de relevancia, ya que incrementan el conocimiento sobre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación en tanto estos procesos ocurren de manera cotidiana e impactan en la productividad y la satisfacción laboral; así mismo, indican la relación de estas con las dimensiones de personalidad, que suele ser una variable medida en selección de personal. PALABRAS CLAVE: Negociación, Manejo del Conflicto, Personalidad, Big Five. iv ÍNDICE GENERAL pp. Dedicatoria ii Agradecimientos iii Resumen iv Índice de Figuras vii Índice de Tablas viii I. INTRODUCCIÓN 1 CAPÍTULO II. MARCO TEÓRICO 4 1. Personalidad - Big Five 4 2. Conflicto Interpersonal 9 3. Negociación 15 4. Big Five, Estilos de Manejo del Conflicto y Negociación 21 5. Planteamiento del Problema de Investigación 27 6. Objetivos 31 CAPÍTULO III. MÉTODO 33 1. Población y Muestra 33 2. Variables 34 3. Tipo de Estudio y Diseño de la Investigación 38 4. Instrumentos 39 5. Procedimiento 41 6. Consideraciones éticas 42 CAPITULO IV. ANÁLISIS DE RESULTADOS 43 1. Análisis Psicométrico 43 2. Análisis Descriptivos 51 3. Análisis del Diagrama de Ruta Propuesto 58 CAPITULO V. DISCUSIÓN DE RESULTADOS 66 VI. CONCLUSIONES, LIMITACIONES Y RECOMENDACIONES 73 VII. REFERENCIAS 78 ANEXOS Anexo A: Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II) v 85 pp. Anexo B: Cuestionario Big Five 86 Anexo C: Cuestionario de Resultados de la Negociación (Versión Traducido) 87 Anexo D: Modelo de Regresión para los Resultados Disfuncionales de la Negociación 88 Anexo E: Modelo de Regresión para los Resultados Funcionales de la Negociación 89 Anexo F: Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Evitativo 90 Anexo G: Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Complaciente 91 Anexo H: Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Dominante 92 Anexo I: Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Comprometido 93 Anexo J: Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Integrador 94 vi ÍNDICE DE FIGURAS pp Figura 1. Estilos para manejar el conflicto de Thomas y Schmidt (1976) 11 Figura 2. Modelo de dos dimensiones de los estilos interpersonales de manejo de conflictos de Rahim (1983) 13 Figura 3. Modelo conceptual de la relación entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación planteada por Cheung, Wing, y Fung (2006) 19 Figura 4. Diagrama propuesto por Cheung, Wing, y Fung (2006) 19 Figura 5. Resultados obtenidos por Cheung, Wing, y Fung (2006) 20 Figura 6. Diagrama de Ruta Propuesto 32 Figura 7. Box plots de la distribución de las dimensiones de Big Five por Sexo 54 Figura 8. Box plots de la distribución de los Estilos de Manejo del Conflicto por Sexo 56 Figura 9. Box plots de la distribución de los Resultados de la Negociación por Sexo 57 Figura 10. Diagrama de ruta general obtenido con una p < 0.05 64 vii ÍNDICE DE TABLAS Tabla 1. Cuestionario Big Five: Análisis Factorial y Alfa de Cronbach (n=188) Tabla 2. Cuestionario de Resultados de la Negociación: Análisis Factorial y Alfa de Cronbach (n=161) Tabla 3. Descriptivos por Variables Sociodemográfica pp 44 48 52 Tabla 4. Frecuencia por Sexo comparativamente con otras variables sociodemográficas 53 Tabla 5. Distribución de las dimensiones de Big Five por Sexo 54 Tabla 6. Distribución de las dimensiones de los Estilos de Manejo del Conflicto por Sexo 55 Tabla 7. Distribución de las dimensiones de los Resultados de la Negociación por Sexo 57 Tabla 8. Varianza explicada para la escala total de resultados de la negociación disfuncionales 58 Tabla 9. Varianza explicada para la escala total de resultados de la negociación funcionales 59 Tabla 10. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto evitativo 60 Tabla 11. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto complaciente 61 Tabla 12. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto dominante 61 Tabla 13. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto comprometido 62 Tabla 14. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto integrador 63 viii I. INTRODUCCIÓN La negociación es una de las actividades humanas más complejas que implica un proceso dinámico interpersonal. Las personas negocian tanto en sus relaciones personales como dentro y fuera de las organizaciones. El estudio sobre la negociación ha aumentado en los últimos años, desde diferentes disciplinas (Rouwette y Qureshi, 2002; Burnham, McCabe y Smith, 2000; Hastie, 2001; Lewicki y otros, 2003; Weingart, Olekalns y Smith, 2005; Ismet, 2007). Rahim (2001) plantea que los resultados de la negociación son de dos tipos: funcionales, cuando se logran acuerdos beneficiosos para ambas partes; y disfuncionales, en aquellas ocasiones donde no se logran acuerdos o solo benefician a una de las partes. De igual forma, el estilo de manejo del conflicto se ha convertido en un importante campo de estudio del comportamiento organizacional. Esta tendencia pone de manifiesto la mayor aceptación de los conflictos como un fenómeno cotidiano en las relaciones personales y laborales. De acuerdo con Rahim (1992), los estilos de manejo del conflicto están basados en dos dimensiones: concerniente a sí mismo y concerniente a los otros. La combinación de ambas dimensiones, resulta en cinco estilos específicos de manejo del conflicto: integrador, dominante, evitativo, comprometido y complaciente. Recientemente, se ha incrementado el estudio del conflicto y la negociación en conjunto, en tanto algunas investigaciones sugieren que son variables relacionadas (Lewicki, Saunders, Barry y Minton, 2003; Druckman, 2003; Ma, 2005; Cheung, Wing y Fung, 2006; Ismet, 2007). Partiendo de esto, Cheung, Wing y Fung (2006) plantearon un modelo que asocia los estilos de manejo del conflicto con los resultados de la negociación 2 (funcionales/disfuncionales); pero los primeros resultados han sido poco concluyentes; por lo que, sugieren estudiar la relación conflicto-negociación, incluyendo otras variables. La personalidad ha sido otro aspecto que se ha relacionado tanto con los estilos de manejo del conflicto como con los resultados de la negociación. Algunos investigadores han obtenido una consistencia notable entre la solución de los conflictos y los estilos particulares de personalidad, así como entre personalidad y resultados de la negociación (Elfebein y otros, 2007; Mintu-Winsatt, 2002; entre otros). Sin embargo, otras investigaciones se han caracterizado por una falta de resultados consistentes, en parte debido al uso de instrumentos de medida aparentemente sin validación local (Ma, 2005). Por ello, se sugiere el abordaje de la personalidad desde el instrumento de Goldberg (1990) denominado Cuestionario Big Five, el cual será validado como parte del proceso de investigación. Big Five es un cuestionario de auto-percepción que permite evaluar cinco dimensiones de personalidad: extraversión, agradable, apertura a la experiencia, neuroticismo y concienzudo. La extroversión es la dimensión que indica cuán sociable, conversador y activo es la persona; agradable señala el grado en que es flexible, comprensiva y simpática; concienzudo mide el grado en es organizada, cuidadosa, responsable y firme; apertura a la experiencia le define como creativa, imaginativa, curiosa, original y basada en hechos; finalmente, el neuroticismo está relacionado con tensión, ansiedad, inseguridad e irritabilidad. En este sentido, la presente investigación persiguió como objetivo determinar cómo las dimensiones de personalidad según el modelo Big Five y los estilos de manejo del conflicto se relacionan con los resultados de la negociación y cómo éstas se relacionan entre sí. Este estudio se incorpora a una línea de investigación sobre negociación y conflicto, que se viene realizando en el país (Ramírez y Alvarez, 2004 y 2005), 3 permitiendo metodológicamente, continuar con el proceso de validación del modelo de conflicto y negociación de Rahim (1992) en Venezuela, aportando evidencias empíricas a los modelos. La presente investigación también contribuirá metodológicamente con futuras investigaciones al validar un instrumento para medir los resultados de la negociación y para evaluar rasgos de personalidad. Adicionalmente, la aplicación práctica de los conocimientos obtenidos en la presente investigación, significan un aporte para la psicología organizacional en general, proporcionados desde Venezuela y con factibilidad de ser replicado en otros países; especialmente en el área de selección de personal. CAPÍTULO II MARCO TEÓRICO En el presente apartado se presentan los postulados y concepciones teóricas relacionadas con la personalidad y el modelo de Goldberg (1990) denominado Big Five, los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación, enmarcados dentro de la psicología industrial u organizacional. La psicología industrial se inició en 1901 con los estudios de Walter Dill Scott. Durante la Primera Guerra Mundial un grupo de psicólogos elaboró instrumentos de selección para identificar y clasificar un gran número de reclutas del ejército estadounidense. La Segunda Guerra Mundial permitió que se emprendieran estudios psicológicos que facilitaron el manejo de los sistemas hombre-máquina cada vez más complejos. Finalizada la guerra, estos avances se utilizaron en la industria de paz y continuaron su desarrollo. Es así como surge el psicólogo empresarial u organizacional, al estudio del individuo dentro de la empresa considerando las necesidades de las organizaciones de productividad, competitividad y alta eficiencia (Urdaneta, 2005). 1. PERSONALIDAD - BIG FIVE A lo largo de la historia de la psicología, el concepto de personalidad ha experimentado múltiples formulaciones, ni siquiera en la actualidad existe un consenso en torno a su definición. Sin embargo, de acuerdo con Hellriegel y Slocum (2004), la personalidad representa el perfil general o combinación de características estables que diferencian a una persona de otra. Estas características evidencian la forma como la persona piensa, observa, actúa y siente. Varias han sido las teorías construidas en torno al constructo personalidad. 5 Personalidad: Aproximaciones teóricas La tipología más antigua, ideada por Hipócrates en el siglo V a.C. sostiene que existen en el organismo cuatro clases de fluidos llamados humores: sangre, flema, bilis amarilla y bilis negra; que de acuerdo con la cantidad relativa en el organismo, determinan el carácter y el temperamento de cada persona. Un exceso de sangre da lugar a un carácter sanguíneo, que hace a las personas confiadas y optimistas. Cuando el exceso es de flema, origina un carácter flemático, propio de individuos calmosos e inflexibles. La preponderancia de bilis amarilla da lugar a sujetos coléricos, irritables e impacientes. Por último, un exceso de bilis negra origina un carácter melancólico (Frager y Fadiman, 2006). A comienzos de 1900, Freud (cp. Frager y Fadiman, 2006) concibió un sistema tipológico integrado por cuatro componentes: el oral, el anal, el fálico y el genital. La tipología de la persona depende del grado de desarrollo psicosexual que ha alcanzado el individuo, es decir, de la fase en la que su libido ha quedado fijada. Seguidamente, surgieron las denominadas tipologías psicológicas, que suponen una base más psicológica, como las de Heymans-Wiersma y la de C Jung. La tipología de Heymans-Wiersma (s.a.; cp. Frager y Fadiman, 2006) determina tres dimensiones o rasgos básicos: emotividad-no emotividad, actividad-no actividad y primariedad- secundariedad. La primera de ellas se define de acuerdo con la frecuencia e intensidad de las reacciones emocionales en relación a la gravedad de las situaciones que la causan. La dimensión actividad-no actividad se define en función de la multiplicidad y de la energía de las actividades desarrolladas. Por último, la dimensión primariedad-secundariedad se define en relación a la resonancia o duración de las reacciones emocionales. Es posible clasificar a los individuos según pertenezcan a uno u otro polo de cada una de ellas. Mediante la combinación de las tres dimensiones se obtienen ocho temperamentos o tipos fundamentales. 6 La tipología de Jung (1912; cp. Schultz y Schultz, 2002) clasifica a las personas en dos tipos: introvertidos y extrovertidos, según la orientación o actitud que tengan respecto a los polos esenciales de la conducta humana: el mundo y el yo. Los mecanismos de introversión y extroversión coexisten en la vida de todo sujeto, si bien predominará en cada persona una de las dos dimensiones. La dimensión que prevalece se sitúa, por tanto, en el mundo del consciente, en tanto que la reprimida o rechazada permanece en el inconciente. Así pues, entre introversión y extroversión se establece una relación dinámica, que ejerce una función compensatoria y ayuda a la persona a conseguir el equilibrio. En 1920, Kretschmer propuso relaciones estables entre ciertos conjuntos de rasgos físicos o constitucionales y varios grupos de características psíquicas y psicopatológicas, e identificó tres tipologías: pícnico, asténico o leptosomático, displástico o atlético. El leptosomático morfológicamente se caracteriza por una constitución delgada, desprovista de grasa, con un peso corporal menor al que le correspondería por estatura, abundante cabello y resistente en pruebas deportivas; con un comportamiento esquizotímido, es decir, serio, enérgico, de principios morales rígidos, reservados, sensibles, su pensamiento tiende a ser analítico. El tipo pícnico, tiende a ser contrario al anterior, morfológicamente su cuerpo tiende a la acumulación de grasa, una figura regordeta de estatura media; con un comportamiento ciclotímico, son extrovertidos y de gran sociabilidad, son realistas y su pensamiento tiende a lo sintético. El atlético morfológicamente es de hombros anchos tendiendo a estrecharse hacia las extremidades inferiores, con relieves musculares y óseos claramente marcados; su comportamiento es viscoso enequético, esto es, concienzudo, exacto, detallista, tranquilo, en ocasiones algo lento en su actuar (Schultz y Schultz, 2002). En una línea parecida a la de Kretschmer, pero con una metodología más elaborada y precisa, se encuentra la tipología ideada por Sheldon en 1940, quien distinguió tres tipos somáticos básicos, a los cuales denominó en forma similar a la de las tres capas del embrión que generan las distintas partes del cuerpo: endomorfo 7 (concuerda con el pícinico), mesomorfo (similar al atlético), ectomorfo (equivalente al leptosomático). Estas tipologías ha sido objeto de muchas críticas, gran parte de las cuales señalan la inestabilidad de los tipos constitucionales (Schultz y Schultz, 2002). Hellriegel y Slocum (2004), señalan que aquellas teorías más útiles científicamente y en la práctica, son aquellas que contienen pocos factores generales que describen la personalidad. En las pasadas décadas, la investigación y teorización ha convergido y llegado a un consenso en que el Modelo Big Five o de los cinco grandes factores de personalidad (extroversión, apertura a la experiencia, agradable, concienzudo y neuroticismo) ideado por Goldberg (1990), puede ser usado para describir los aspectos más relevantes de la personalidad (Ma, 2005). Salgado (2005) señala que la utilización del modelo de personalidad Big Five ha permitido integrar los resultados de centenares de estudios llevados a cabo para predecir criterios organizacionales, durante más de sesenta años; resaltando la importancia de su uso en futuras investigaciones del ámbito organizacional. Modelo Big Five Este modelo es una aproximación teórica al constructor personalidad. Se caracteriza por una particular concepción de la ciencia (empirismo), una particular metodología (análisis factorial), un particular modelo estructural (rasgos/dimensionales) y una particular tradición investigadora (hipótesis léxica), y propugna que cualquier tipo de personalidad puede ser conceptuada a partir de cinco amplias dimensiones ortogonales (Millon y Davies, 1998). En términos generales este modelo evidencia, mediante el análisis factorial, una solución de cinco factores (extroversión, apertura a la experiencia, agradable, neuroticismo y concienzudo) que tiende a repetirse (Pelechado, De Miguel y Hernández, 1995). Diversos estudios han puesto de manifiesto la gran estabilidad temporal de las medidas obtenidas mediante este modelo (Costa y McCrae, 1998), su consistencia y 8 replicabilidad y su aplicabilidad (De Raad, 1994; Wiggins y Pincus, 1992) y la posibilidad de generalizarlo a diversos entornos culturales (Avia, Sanz, SánchezBernardos, Martínez, Silva, y Graña, 1995; Caprara y Perugini, 1994; Triandis y Eunkook, 2002). Existe evidencia empírica que señala que los cinco factores son producto tanto de factores genéticos como ambientales. Los datos más recientes apuntan a que el 40% de la varianza de estos rasgos de personalidad son aportados por factores genéticos y que es el ambiente el que proporciona el 60% restante (Borkenau, Riemann, Angleitner, y Spinath, 2001). La estructura de personalidad basada en Big Five parece claramente fundamentada en ambos aspectos (genética y ambiente), siendo superior a modelos de más o de menos factores, como la teoría de siete factores de Cloninger basada en psicobiología de la conducta, que plantea cuatro factores de temperamento (evitación del daño, búsqueda de novedad, dependencia de la recompensa, y persistencia) y tres factores del carácter (autodirección, cooperación y autotrascendencia); incluso cuando se estudian muestras de diversas culturas (McCrae, Jang, Livesley, Riexunn, y Angleitner, 2001). La investigación más reciente se centra en la identificación de la parte atribuible a factores genéticos y la que únicamente se fundamenta en elementos ambientales, de cada uno de los rasgos, así como en la expresión fenotípica de los efectos combinados de ambos (Jang, Vernon, y Livesley , 2001). La denominación de tales factores varía entre los diversos investigadores; la más ampliamente utilizada es la sugerida por Costa y McCrae (1992). De acuerdo con ellos, cada uno de los factores es bipolar y se alinean de la siguiente manera: extraversión-introversión, agradable-antagonismo, concienzudo-irresponsabilidad, apertura a la experiencia-cierre a la experiencia, y estabilidad emocionalneuroticismo (Salgado, 2005). De acuerdo con Barrica y Mount (1991), cada factor es considerado de la siguiente forma: 9 Extroversión: se refiere a la medida en que los individuos son gregarios, asertivos, y sociables, conversadores y activos frente a la introversión, lo que se asocia con ser reservado, tímido y tranquilo; Agradable: se refiere al grado en que las personas son cooperativas, cálidas, corteses, flexibles, sinceras, tolerantes, comprensivas y simpáticas; frente al antagonismo, que está relacionado con ser grosero, duro y no sinceros; Concienzudo: mide el grado en que las personas son trabajadoras, organizadas, cuidadoso, responsable, confiables y firmes; frente a indisciplinado, que está relacionado con ser perezoso, desorganizado, poco fiable e indeciso; Apertura a la experiencia: que define a las personas como creativas, imaginativas, curiosas, originales, mente abierta, confortables y basada en hechos; frente a la cercanía, que se asocia con ser conservador en las opiniones y prácticos; Estabilidad emocional: de las personas que se describen en calma, con confianza en sí mismo; frente a neuroticismo que está relacionado con ser tenso, ansioso, deprimido, cansado, inseguro e irritable. Este modelo se ha empleado para estudiar la relación entre conflicto y personalidad (Liu, Friedman y Shu-cheng, 2005; Antonioni, 1998). Big Five captura las características individuales afectivas, experienciales y motivacionales y suelen ser las que mejor predicen las intenciones conductuales de un individuo en situaciones de conflicto (Care y Costa, 1989). 2. CONFLICTO INTERPERSONAL El conflicto es la percepción por dos o más partes de que sus intereses actuales son incompatibles (Mejia y Laca, 2006). De acuerdo con Robbins (1996) a pesar de los diversos significados sobre conflicto, a todos subyacen dos puntos: las partes involucradas deben percibir el problema; y, existe oposición o incompatibilidad en alguna forma de interacción entre las partes. De esta forma, el conflicto es un proceso que comienza cuando una de las partes percibe que la otra la ha afectado 10 en forma negativa o que está por afectarla en algo que la primera considera importante. Para Rahim (1992) el conflicto es definido como un proceso interactivo manifestado en incompatibilidad, desacuerdo o disonancia entre dos entidades sociales, tales como individuos, grupos u organizaciones. Para dicho autor, el conflicto interpersonal ocurre cuando: (a) es necesario involucrarse en una actividad que es incongruente con sus necesidades o intereses; (b) las conductas preferidas para satisfacer sus necesidades son incompatibles con las conductas de la otra persona; (c) ambas partes desean el mismo resultado y este solo es posible para una de las personas; (d) cuando los valores, actitudes, habilidades y metas más sobresalientes, son percibidas como excluyente de los otros; (e) sus conductas están dirigidas exclusivamente a un objetivo; y, (f) existe interdependencia en las conductas, funciones o actividades de los individuos involucrados. En el conflicto, de acuerdo con Hellriegel y Slocum (2004), pueden existir cuatro niveles: 1. Intraindividual: el conflicto ocurre en el interior de una persona, con sentimientos, opiniones, deseos y motivaciones divergentes o antagónicos; 2. Interpersonal: cuando el conflicto involucra dos o más personas; 3. Intergrupal: se presenta en las situaciones en las que los grupos chocan directamente y están en oposición franca; puede ser entre departamentos o entre grupos de diferente nivel jerárquico; 4. Interactivo: ocurre cuando el enfrentamiento es entre equipos de trabajo y personas individuales. En todos estos casos, se pueden desarrollar estilos específicos para afrontar el conflicto, que va desde el deseo de satisfacer sus propios intereses hasta el deseo de satisfacer los de la parte contraria. En cada situación, se manejan los conflictos de forma distinta. Manejar los conflictos significa administrar las divergencias. 11 Los estilos de manejo del conflicto o cómo las personas se comportan en una situación de conflicto ha sido conceptualizada desde diferentes teorías, tal cómo se puede apreciar a continuación. Estilos de Manejo del Conflicto: Aproximaciones Teóricas Blake y Mouton (1961) fueron los primeros en presentar un esquema conceptual para clasificar los estilos de manejo del conflicto interpersonal. Identificaron cinco tipos: imponer u obligar, abandonar, fluir, comprometer y solución de problemas. Los autores describieron los cinco tipos basado en la actitud del gerente: orientado a la producción u orientado a la gente. Este esquema fue reinterpretado por Thomas y Schmidt en 1976. Desde entonces, dos modelos se han utilizado principalmente en la investigación para estudiar el conflicto: el Modelo de Thomas-Killman y el Modelo de Rahim. Thomas y Schmidt (1976) desarrollaron un modelo que describe cinco estilos de manejo de conflicto por medio de dos dimensiones: la dimensión relacionada con el intento por satisfacer los intereses propios denominada asertividad y la dimensión de la cooperación que se refiere al intento por satisfacer la otra parte (ver Figura 1). Colaborador Asertivo Competidor Asertividad Arreglo con concesiones No Asertivo Complaciente Evasor No Cooperativo Cooperativo Cooperación Figura 1. Estilos para manejar el conflicto de Thomas y Schmidt (1976) 12 Hellriegel y Slocum (2004) explican que los cinco estilos de manejo de conflictos interpersonales representan diferentes combinaciones de asertividad y cooperación: 1. Estilo Compulsivo: Representa un enfoque ganar-perder. El uso excesivo del estilo compulsivo por parte del gerente o líder, reduce la motivación de trabajo de los empleados, porque no se consideran sus intereses; 2. Estilo Colaboración: El enfoque es ganar-ganar. Desea llevar al máximo los resultados conjuntos. Quien usa este estilo tiende a ver el conflicto como algo natural y útil, muestra confianza y sinceridad; 3. Estilo Compromiso: se basa en el principio de dar y tomar. Implica ceder en algunos aspectos. Las concesiones logran una satisfacción moderada, pero solo parcial, por ello, no debe ser usado con frecuencia; 4. Estilo Evasión: La persona busca alejarse del conflicto y permanecer neutral. El uso frecuente de este estilo produce rechazo entre los compañeros, puesto que podrían sentir que esta persona no está comprometida con ellos; 5. Estilo complaciente: Cuando se actúa con este estilo, la persona tiende a pensar que el conflicto desaparecerá con el tiempo. Intentará reducir las tensiones y el estrés por medio de la confianza y el respaldo. No es eficaz si se utiliza como estilo predominante. Cada estilo funciona mejor en diferentes situaciones. El comportamiento que elija una persona o grupo dependerá de las exigencias que haya tenido esa parte manejando el conflicto, su propia disposición personal para las relaciones interpersonales, así como los elementos específicos de un episodio particular de un conflicto (Gordon, 1997). Modelo de Rahim Rahim (1983) utilizando una conceptualización similar a la de Blake y Mouton (1961) y Thomas y Schmidt (1976), plantea un modelo en el que el estilo de manejo del conflicto se diferencia en base a dos dimensiones: concerniente a sí mismo y concerniente a los otros (ver Figura 2). La primera dimensión explica el grado (alto, 13 bajo) en el cual la persona trata de satisfacer sus propias necesidades. La segunda dimensión explica el grado (alto, bajo) en el cual la persona trata de satisfacer lo concerniente a los otros. La combinación de las dos dimensiones resulta en cinco estilos específicos de manejo del conflicto interpersonal, tal como se muestra la Figura 2. Concerniente a sí mismo Alto Bajo Integrador Complaciente Comprometido Bajo Concerniente a los otros Alto Dominante Evitativo Figura 2. Modelo de dos dimensiones de los estilos interpersonales de manejo de conflictos de Rahim (1983) Los estilos de manejo del conflicto son descritos de la siguiente manera: 1. Estilo Integrador: alto en concerniente a los otros y a sí mismo. También conocido como solución de problemas. Envuelve la colaboración entre las partes, esto es, apertura, intercambio de información y examinación de las diferencias con el fin de hallar una solución aceptable para ambas partes (Rahim, 2000b). Gray (1989) lo describe como colaborador en un proceso a través del cual las partes pueden constructivamente explorar sus diferencias y buscar diferentes alternativas de solución que vayan más allá de una visión limitada del problema. Prein (1976; cp. Rahim 1992) sugiere que existen dos elementos distintivos para este estilo: la confrontación y la solución del problema. La confrontación involucra comunicación abierta, entendimiento claro y análisis de las causas, inclusive las no evidentes. Este es un prerrequisito para la solución del problema, que envuelve la identificación y solución real del problema, proveyendo la máxima satisfacción a las partes. 14 2. Estilo Complaciente: bajo en concerniente a sí mismo y alto en concerniente a los demás. También denominado estilo acomodativo. Este estilo está asociado con la no atención a las diferencias y el énfasis en los beneficios de satisfacer a los otros. Este es un elemento de autosacrificio; que puede ser entendido por los demás como un acto de generosidad, caridad u obediencia a los otros. La persona que emplea este estilo de manejo del conflicto suele ser considerado una persona poco hostil y muy amiga (Rahim, 1983). 3. Estilo Dominante: alto en concerniente a sí mismo y bajo en concerniente a los otros. Conocido como competitivo; este estilo ha sido identificado con una orientación a ganar y que fuerza las conductas en su propio beneficio. Ganar es siempre su objetivo, y como consecuencia, ignora la necesidad y expectativa de los demás. Defiende su posición aún cuando la otra parte tenga la razón. Generalmente, una persona dominante quiere ganar a cualquier costo. Un supervisor dominante tenderá a hacer prevalecer su posición sobre sus supervisados y les demandará obediencia. Una persona que no posea una posición formal de mando o poder, tenderá al engaño, la mentira, manipular al jefe, entre otros (Rahim, 2000b). 4. Estilo Evitativo: bajo en concerniente a sí mismo y a los otros. Este estilo ha sido asociado con personas que no hablan o lo hacen en baja frecuencia. Busca la forma de posponer el mayor tiempo posible, tratando de disipar la situación a través del tiempo. Este tipo de personas no trata de satisfacer sus propias necesidades ni las de las demás. Es incapaz de reconocer en público la existencia de un conflicto (Rahim, 1992). 5. Estilo Comprometido: intermedio en concerniente a sí mismo y a los otros. Consiste en dar y recibir algo que es mutuamente aceptado. Podría tratar de separar las diferencias, cambiar la concesión o buscar una posición intermedia. El estilo comprometido, presiona menos que el dominante pero no tan poco como el complaciente; es más directo que el evitativo pero no explora tanto como el integrador (Rahim, 2000a). 15 Esta taxonomía también puede ser descrita en términos de ganar-ganar (integrativo), perder-ganar (complaciente), ganar-perder (dominante), perder-perder (evitativo) o ni ganar ni perder, buscar el punto medio (comprometido); que se corresponde con los tipos de negociación propuestos por Hellriegel y Slocum (2004) y Munduate y Martinez (2003). Cada uno de estos estilos de manejo del conflicto puede ser adecuado dependiendo de la situación. Conservando la línea de estudio de Cheung, Wing, y Fung (2006), por ser dichos autores quienes fundamentan la relación matemática entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación empleando el modelo de Rahim (1983), la presente investigación empleará el modelo manejo del conflicto de Rahim (1983). 3. NEGOCIACIÓN La negociación es un fenómeno que reviste una gran complejidad; pero también es una actividad humana básica, que todas las personas realizan al menos en un día normal en el trabajo. Lewicki y col. (2003) sostienen que la negociación es el proceso por el que las partes interesadas resuelven diferencias, acuerdan líneas de conducta, buscan ventajas individuales o colectivas o procuran obtener resultados que sirvan a sus intereses mutuos. Se contempla generalmente como una forma de resolución de conflictos. Ismet (2007) señala que existen diferentes definiciones de negociación, pero que se encuentran los siguientes elementos comunes: (a) es un método de resolución de conflicto; (b) supone un intercambio; (c) demanda una acción conjunta; (d) existe un deseo de llegar a un acuerdo y una búsqueda activa de la resolución. La finalidad de la negociación es crear una nueva realidad por medio del intercambio controlado de información, a través del diálogo libre entre las partes. El objetivo es que la nueva realidad sea lo más ventajosa posible a los propios intereses (García y Domínguez, 2002). 16 En la negociación se pueden identificar tanto el proceso como el resultado. Ma (2007) define el proceso de negociación como la dinámica de interacción entre negociadores por medio de la cual tratan de llegar a un acuerdo sobre el tipo de intercambio y la solución de objetivos incompatibles. Urdaneta (2005) incluye los resultados de la negociación como parte de la última fase, tal como se puede apreciar a continuación. Fases de la Negociación de Urdaneta (2005) De acuerdo con el autor, se pueden establecer o diferenciar tres fases principales que se encadenan entre sí y que constituyen un esquema dentro del desarrollo de una negociación: 1. Fase de iniciación: durante esta fase, cada parte estudia a la otra, la observa. La persona tiene los problemas característicos de la toma de decisiones. Esta es una etapa lenta, de orientación, de toma de contacto, donde se está esperando el movimiento del otro para establecer una estrategia adecuada. 2. Fase de evaluación: esta es la fase central dentro del proceso de negociación. Las partes en conflicto comienzan a confrontar una serie de puntos de vista sobre los cuales se ha llegado a acuerdos o desacuerdos, se evalúan los puntos positivos, se hace un balance sobre lo realizado. Durante el proceso de confrontación de las ideas, las personas se pueden comportar de forma distributiva o integrativa (Hellriegel y Slocum, 2004): La Negociación Distributiva: Este tipo de negociación corresponde a comportamientos competitivos. Es una negociación agresiva donde se juega el todo por el todo. Denominada comúnmente, estrategia ganar-perder, donde lo que gana un negociador necesariamente lo pierde el otro. En este tipo de negociaciones los acuerdos suelen ser de muy poca calidad y existe una clara tendencia al deterioro de las relaciones, obteniendo resultados disfuncionales. 17 Las negociaciones distributivas son típicas de situaciones donde es manifiesto el desbalance de poder, y que da como resultado la imposición. La Negociación Integrativa: denominada también como estrategia ganarganar. El objetivo de la negociación consiste en este caso, en realizar una mejor distribución de los beneficios entre las partes, buscando soluciones conjuntas a sus problemas, con la seguridad de que el conflicto no acarreará consecuencias deteriorantes, de esta forma, se persiguen resultados funcionales (Munduate y Martinez, 2003). 3. Fase de compromiso: esta fase se caracteriza por el logro de un acuerdo o la dificultad de establecer y obtener el compromiso final. Esta concepción de Urdaneta (2005) se corresponde con la de Rahim (2000b) para quien los resultados de la negociación pueden ser dos: (a) funcionales, cuando se logra el acuerdo; y, (b) disfuncional, en aquellos casos donde no se consigue el término de la negociación. Por su parte, Rosh (1988; cp. Cheung, Wing y Fung, 2006) identificó siete posible sub-categorías de los resultados de la negociación; tres para los resultados funcionales: (a) solución de problemas; (b) mantenimiento de las relaciones; (c) reducción del conflicto; y, cuatro para los resultados disfuncionales: (d) inactividad; (e) nuevos desacuerdos; (f) escalada del conflicto; (g) deterioro de las relaciones; sin embargo, los resultados han sido poco concluyentes sobre esta perspectiva teórica, por ello, en la presente investigación se consideran solamente dos posibles resultados de la negociación en funcionales o disfuncionales. A pesar de la diferencia planteada por Ma (2008) y Urdaneta (2005), algunas investigaciones han encontrado que existe un fuerte vínculo entre el proceso y el resultado de las negociaciones (Schelling, 1960; Druckman, 2003). Adicionalmente, Lewicki, Saunders, Barry, y Minton (2003) señalan que existe una correspondencia entre el estilo de manejo del conflicto y la actuación en la fase de evaluación de la negociación. 18 Para Urdaneta (2005), “el conflicto está en el centro de la negociación” (p.382); el conflicto existe porque los grupos o las personas se proponen objetivos que son irreconciliables, dando inicio al proceso de negociación, en el cual, se espera reducir o poner fin a dicho conflicto. Considerando esto, Cheung, Wing y Fung (2006) sostienen que los resultados de la negociación están influenciados por el estilo de manejo de conflicto; y, como cada persona es diferente, la personalidad juega un rol importante en la relación estilo de manejo del conflicto – resultados de la negociación. A continuación de presenta la relación propuesta entre estilos de manejo del conflicto y resultados de la negociación. Relación entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación Cheung, Wing y Fung (2006) plantean que teóricamente los resultados de la negociación están influenciados por los cinco estilos de manejo de conflictos de Rahim (2000a). Dichos autores sugieren al igual que Hellriegel y Slocum (2004) y Munduate y Martínez (2003), que teóricamente los estilos de negociación (ganarganar; ganar-perder) son enmarcados por el estilo de manejo de los conflictos, de tal forma, que al medir estilo de manejo del conflicto se está midiendo también estilo de negociación. Partiendo de estos presupuestos, Cheung, Wing y Fung (2006) plantean que matemática y teóricamente existe relación entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación; tal como se puede observar en la Figura 3. 19 Estilo de manejo del conflicto/ Estilo de negociación Resultados de la negociación Integrador Comprometido Resultados funcionales: 1. Solución de problemas 2. Mantenimiento de las relaciones 3. Reducción del conflicto Dominate Complaciente Evitativo Resultados disfuncionales: 1. Escalada del conflicto 2. Deterioro de las relaciones 3. Inactividad 4. Nuevos desacuerdos Figura 3. Modelo conceptual de la relación entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación planteada por Cheung, Wing y Fung (2006) Los autores antes mencionados diferenciaron los resultados de la negociación en funcionales (solución de conflictos, mantenimiento de las relaciones y reducción del conflicto) y disfuncionales (escalada del conflicto, deterioro de las relaciones, inactividad y nuevos desacuerdos). De esta forma, esperaban que ciertos manejos del conflicto como integrativo y comprometido presentaran una relación directa con resultados funcionales y una relación inversa con resultados disfuncionales; mientras que los estilos de manejo del conflicto dominante, evitativo y complaciente se relacionaran directamente con resultados disfuncionales e inversamente con resultados funcionales; tal cómo se muestra en la Figura 4. Estilo de manejo del conflicto/ Estilo de negociación Resultados de la negociación Integrador Comprometido + - Dominate Complaciente Evitativo + Resultados funcionales: 1. Solución de problemas 2. Mantenimiento de las relaciones 3. Reducción del conflicto Resultados disfuncionales: 1. Escalada del conflicto 2. Deterioro de las relaciones 3. Inactividad 4. Nuevos desacuerdos Figura 4. Diagrama propuesto por Cheung, Wing y Fung (2006) 20 Sin embargo, los datos obtenidos por Cheung, Wing y Fung (2006) no se corresponden completamente con el diagrama propuesto, tal como se aprecia en la Figura 5. Los resultados señalan que: (a) Los estilos de manejo del conflicto dominante, evitativo y complaciente se relacionan con los resultados disfuncionales de negociación (escalada de conflicto, deterioro de la relación y nuevos desacuerdos), mas no se relacionan de forma inversa con los resultados funcionales; (b) El estilo integrador se relaciona con los resultados funcionales de la negociación (solución de problemas, mantenimiento de la relación, reducción del conflicto) y se relaciona inversamente con los resultados disfuncionales de la negociación (escalada de conflicto y deterioro de la relación); (c) El estilo de manejo del conflicto comprometido se relaciona con los resultados funcionales de la negociación (reducción del conflicto) y se relaciona de forma inversa con los resultados funcionales (mantenimiento de las relaciones) y disfuncionales (inacción, escalada, nuevos desacuerdos). Estilo de manejo del conflicto/ Estilo de negociación + + Integrador Comprometido Resultados de la negociación Resultados funcionales: 1. Solución de problemas + -- + - Dominate Complaciente Evitativo + + + - 2. Mantenimiento de las relaciones 3. Reducción del conflicto Resultados disfuncionales: 1. Escalada del conflicto 2. Deterioro de las relaciones 3. Nuevos desacuerdos 4. Inactividad Figura 5. Resultados obtenidos por Cheung, Wing y Fung (2006) Cheung, Wing y Fung (2006) señalan dificultades para identificar el motivo de la diferencia entre los resultados esperados y los obtenidos. Sin embargo, al igual que estos autores, Ma, Wang, Jaeger, Anderson, Wang, y Saunders (2002), Lewicki y col. (2003), Ma (2005) e Ismet (2007), encontraron que los resultados de la negociación son poco concluyentes con el estilo empleado. Estos autores sugieren replicar el 21 estudio incluyendo otras variables. Una variable que se ha relacionado tanto con conflicto como con negociación es personalidad. 4. BIG FIVE, ESTILOS DE MANEJO DEL CONFLICTO Y NEGOCIACIÓN Diversas investigaciones han estudiado la relación entre los estilos de manejo del conflicto y Big Five. A continuación se presentan los resultados obtenidos para cada rasgo del Big Five: Neuroticismo: McCrae y Costa (1989) describen el neuroticismo como una inestabilidad emocional o mal ajuste, caracterizado por emociones negativas tales como rabia, miedo y tristeza, así como un negativo autoconcepto y baja autoestima. Los individuos con una alta puntuación en neuroticismo, son propensos a controlar menos sus impulsos y utilizar estrategias inefectivas de manejo del estrés (McCrae y Costa, 1985). Moberg (2001) señala que, una persona con alta puntuación en este rasgo suele emplear de manera preferente un estilo de manejo del conflicto evitativo o dominante. Por su parte, Antonioni (1998) y Park y Antonioni (2007) encontraron que este rasgo se relaciona con el estilo de manejo del conflicto integrador, y, con el estilo complaciente en el grupo de estudiantes; e inversamente con el estilo dominante. Ma (2007) halló que neuroticismo se relaciona de manera inversa con el estilo comprometido. Extraversión: Este factor se ha considerado un indicador de asertividad, gregario y confidente (Costa y McCrae, 1995). Barry y Friedman (1998) encontraron que extraversión predice el impacto individual de la persona al interactuar en un grupo. Para Antonioni (1998) la extraversión está más relacionado con usar un estilo dominante y menos con un estilo evitativo o complaciente. De acuerdo con los resultados de Antonioni (1998), Ma (2005) y Park y Antonioni (2007) este rasgo se relaciona con los estilos de manejo del conflicto integrador y dominante; e inversamente con el estilo evitativo. 22 Agradable o Amigabilidad: Una alta puntuación en este rasgo caracteriza una persona simpática, colaboradora, cooperativa; mientras que una baja puntuación se refiere a un individuo antagónico, escéptico y competitivo (Costa y McCrae, 1995). Cuando la presencia de este factor es alta, hay mayor preocupación por lo otros y como consecuencia, el estilo de manejo del conflicto preferente es el comprometido (Morberg, 2001). Otras investigaciones como la de Antonioni (1998) y Park y Antonioni (2007) encontraron que este rasgo se relaciona de con los estilos de manejo del conflicto integrador, evitativo y complaciente, y con el estilo comprometido solamente en estudiantes; y, se relaciona inverso con el estilo dominante. Ma (2007) reporta una relación de este rasgo con el estilo comprometido e inversa con el estilo dominante. Apertura a la experiencia: Ha sido frecuentemente definido como una imaginación activa, curiosidad intelectual, preferencia por la variedad y generador de nuevas ideas (Costa y McCrae, 1995). Un individuo con apertura puede tender a preferir un estilo adaptativo y flexible para solucionar los conflictos, es decir a seleccionar un estilo integrador o comprometido (Morberg, 2001). Investigadores como Antonioni (1998) y Park y Antonioni (2007) encontraron que este rasgo se relaciona con el estilo de manejo del conflicto integrador; y, se relaciona de forma inversa con el estilo evitativo. Ma (2007) no encontró relación significativa entre este rasgo y los estilos de manejo del conflicto. Concienzudo: Refleja un estilo obediente, responsable y auto disciplinado (Costa y McCrae, 1989). Barry y Friedman (1998) y Ma (2005) no encontraron relación significativa entre este rasgo y los estilos de manejo del conflicto. Sin embargo, Antonioni (1998) y Park y Antonioni (2007) encontraron que este rasgo se relaciona con el estilo de manejo del conflicto integrador; y de forma inversa con el estilo evitativo. Ante estos resultados, Antonioni (1998) y Park y Antonioni (2007) señalan que son necesarias investigaciones adicionales para identificar los factores específicos 23 de personalidad que predisponen a los individuos a estilos específicos de manejo del conflicto. Dichos autores sostienen que la presencia de resultados contradictorios y poco concluyentes se debe principalmente a que se han utilizado los instrumentos como Big Five y Myers-Briggs sin una validación local. Adicionalmente, los participantes han sido estudiantes y no personas que se encuentran activamente laborando (Iraegui y Quevedo, 2002), por lo que pareciera importante replicar los estudios con una muestra activamente laborando. Considerando los aspectos de validación local y composición de la muestra, se propone el presente estudio superando las dos críticas más importantes al validar y adaptar para Venezuela el Instrumento Big Five de Goldberg (1990) y constituir la muestra de estudio con personas que se encuentran actualmente trabajando. De acuerdo con Ma (2005, 2007) y Ma, Wang, Jaeger, Anderson, Wang, y Saunders (2002), existen relaciones significativas entre los rasgos de personalidad, los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación. El estudio de la personalidad en las psicología del trabajo y de las organizaciones, se ha convertido en un tema de gran interés debido a su utilidad para tomar decisiones en relación con procesos relevantes para el trabajo (Salgado, 2005). Se sabe que los factores agradable y extraversión se relacionan con negociadores que logran obtener mejores beneficios económicos (Liu, Friedman y Shu-cheng, 2005). A pesar que aún no se han reportado investigaciones que estudien de manera directa el Modelo Big Five con la teoría de Resultados de la Negociación de Rahim (2000b), partiendo de las relaciones supuestas por Cheung y col. (2006) entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación funcionales y disfuncionales; y de los resultados obtenidos al estudiar la relación entre las dimensiones del Big Five y los estilos de manejo del conflicto, se podrían suponer las siguientes relaciones entre las dimensiones de Big Five y los resultados de la negociación: 24 (1) La dimensión Apertura del Big Five, se relaciona con los resultados funcionales de la negociación. (2) La dimensión Neuroticismo del Big Five, se relaciona con los resultados disfuncionales de la negociación. (3) La dimensión Agradable del Big Five, se relaciona con los resultados funcionales de la negociación. (4) La dimensión Concienzudo del Big Five, se relaciona con los resultados funcionales de la negociación y se relaciona de manera inversa con los resultados disfuncionales de la negociación. (5) La dimensión Extraversión del Big Five, no se relaciona de ninguna forma con los resultados de la negociación. Adicionalmente, algunas características individuales como sexo, han sido asociadas tanto con personalidad como con conflicto y negociación. A continuación se presentan los resultados obtenidos por algunas investigaciones. Diferencias Individuales, Personalidad, Conflicto y Negociación Las características individuales influyen sobre los negociadores, sin embargo, la diversidad teórica en los estudios de personalidad ocasiona la proliferación de aportaciones difícilmente comparables entre sí (García y Domínguez, 2003; Ismet, 2007). Adicionalmente, a esto se suma la falta de una teorización consistente y respaldada de forma mayoritaria sobre la negociación. Las propuestas más comúnmente utilizadas parecen la de Rubin y Brown (1975) con su dimensión única y la de Thomas y Schmidt (1976) integrando diversas propuestas en su modelo de gestión del conflicto. En este campo son frecuentes los resultados poco concluyentes, Rubin y Brown (1975) y Parghi y Cody (1999) revisaron diversas investigaciones y encontraron que: (a) algunas señalan no existir diferencias entre hombres y mujeres; (b) varias señalaron que los hombres negociaban de modo más cooperador que las mujeres y; (c) otras en las que las mujeres cooperaban más que los hombres. Los autores antes 25 mencionaron, explican que las diferencias pueden ser debidas tanto a problemas teóricos como metodológicos. Entre los problemas teóricos, Rubin y Brown (1975), encontraron que no hay modelos estables de investigación y que los factores de personalidad están incorrectamente definidos. Entre los problemas metodológicos señalan que los instrumentos de medida no permiten detectar unas diferencias individuales que probablemente sí existan; y, las poblaciones elegidas para obtener las muestras son demasiado homogéneas, generalmente estudiantes, para mostrar diferencias sustanciales en las variables de personalidad. En resumen, García y Domínguez (2003) señalan que se pueden establecer las siguientes conclusiones respecto a la influencia de las variables individuales de los negociadores: (a) las variables referidas a atributos individuales han explicado muy poca varianza del comportamiento negociador; (b) cuando se encuentran efectos de las características personales sobre el comportamiento negociador, los factores estructurales situacionales a los que los negociadores son sometidos, reducen o eliminan tales efectos; (c) si bien las diferencias individuales pueden predisponer a los negociadores a un comportamiento particular en las primeras rondas de la negociación, factores estructurales claves como la naturaleza del problema, la relación de poder entre los negociadores, presiones de representantes o simplemente la conducta del otro negociador, podrían rápidamente anular los efectos de cualquier diferencia individual que existiera al comienzo de la negociación; (d) las variables de personalidad pueden interactuar con las variables estructurales de formas complejas e impredecibles. 26 Rubin y Brown (1975) propusieron el uso de una única dimensión denominada la orientación interpersonal. Una persona con esta dimensión alta es un individuo que, ante todo, está interesado y reacciona a las variaciones en la conducta del otro. En la negociación cuando tenga predisposición hacia la cooperación tendrá también confianza en la otra parte y esperará que el otro responda igual. Si no es así, reaccionará defensivamente y con gran rechazo ante el abuso de confianza por el otro. Cuando esté orientado hacia la competición estará vigilante ya que esperará que la otra parte trate de tomar ventaja en cuanto pueda. Una persona con orientación interpersonal baja es un individuo que no estará interesado ni en cooperar o ni en competir con el otro, sino solamente en maximizar su beneficio independientemente del resultado para el otro (Rubin y Brown, 1975). Esta proposición se asemeja al modelo de Rahim, con sus dos dimensiones, concerniente a sí mismo y concerniente a los otros. Rubin y Brown (1975) estudiaron este modelo con diferencias de sexo y no obtuvieron resultados significativos que lo validen. Para Thomas (1992) el desempeño concreto de un estilo de negociación y de manejo del conflicto es producto de dos factores: (a) la naturaleza de la situación conflictiva (los negociadores hacen un cálculo racional de qué estilo es el más adecuado a la situación); y, (b) las tendencias individuales a usar uno u otro estilo, las cuales dependen de otros factores de personalidad: 1. La extroversión se relaciona más con estilos de negociación integradores (evitación: pierdo-pierde; colaboración: gano-gana). 2. La introversión se relaciona más con estilos de negociación distributivos (acomodación: pierdo-gana; competición: gano-pierde). 3. Alta puntuación en maquiavelismo que se relaciona con estilo de compromiso. 4. Baja predisposición al riesgo, mayor control interno, altas necesidades de poder y control y, baja necesidad de afiliación se relaciona más con el estilo competitivo. 27 5. Individuos orientados a la tarea, creativos y capaces de abordar asuntos complejos se relaciona más con el estilo de colaboración. Considerando que el conflicto interpersonal es parte de la cotidianeidad en las organizaciones, y partiendo de la revisión teórica realizada y con pocas o ningunas investigaciones que hayan abordado el tema de manera local, surgen incógnitas sobre la relación entre Big Five, los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación. A continuación se presenta el planteamiento del problema, donde se establece la relación supuesta entre Big Five, estilos de manejo del conflicto y resultados de la negociación. 5. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA El conflicto y la negociación son procesos complejos que ocurren de manera cotidiana entre las personas en sus relaciones personales y laborales, que impactan en las organizaciones, en la productividad y la satisfacción laboral (Nauta y Kluwer, 2004). Lewicki, Saunders, Barry, y Minton (2003) señalan que existe una correspondencia en el uso de los estilos de manejo del conflicto y los estilos de negociación. Algunas investigaciones han encontrado un fuerte vínculo entre el proceso y el resultado de las negociaciones (Schelling, 1960; Druckman, 2003). Partiendo de esto, Cheung, Wing, y Fung (2006) plantean teórica y matemáticamente que los resultados de la negociación están influenciados por el estilo de manejo de conflicto; sin embargo, obtuvieron resultados poco concluyentes, al igual que Ismet (2007), Ma (2005) y Lewicki y otros (2003). Estos autores sugieren replicar el estudio incluyendo otras variables, entre ellas personalidad (Killman y Thomas, 1975; Rahim 1983; Wockman, 1988; Rinehart y Closs, 1991; Antoninioni, 1998; Rahim, Magner, Antonioni y Sahider, 2001; Mintu-Wimsatt, 2002; Liu, Friedman y Shu-cheng, 2004; 2007; Ma, 2005; Greenhalgh, Neslin y Gilkey, 2005; Elfenbein, Curhan, Eisenkraft, Shirako y Baccaro, Park y Antonioni, 2007). 28 Lewicki y otros (2003) reportan que las personas utilizan un estilo de manejo del conflicto de manera constante porque tienen unas características de personalidad que les predisponen para hacerlo. Ismet (2007) señala que al estudiar la influencia de las características de la personalidad sobre los estilos de manejo del conflicto o sobre la negociación, se han empleado una variedad de instrumentos, delimitando los rasgos, factores o características de personalidad en estudio, al instrumento psicométrico empleado. Uno de los más empleados ha sido Big Five (Salgado, 2005). Este modelo de personalidad ha permitido que los resultados sean replicables a través de diferentes muestras, en diferentes culturas, con diferentes lenguajes y diferentes técnicas evaluativas (Salgado, 2005; Ma, 2005), resaltando la importancia de su uso en la investigación. Autores como Killman y Thomas (1975), Rahim (1992), Wockman (1988), Antonioni (1998), Mintu-Wimsatt, (2002), Elfenbein, y otros (2007), reportan que al los factores de personalidad del Big Five (extraversión-introversión, agradable- antagónico, consciencia-irresponsable, apertura a la experiencia-cierre a la experiencia, y estabilidad emocional-neuroticismo) podrían influir en la selección del estilo de manejo del conflicto y de la negociación. Cheung, Wing y Fung (2006) señalan que las características personales permiten diferenciar a los negociantes. Más específicamente, los resultados señalan que: (a) la dimensión de personalidad neuroticismo se relaciona de manera inversa con los estilos de manejo del conflicto comprometido, dominante, complaciente y evitativo (Moberg, 2001; Antonioni, 1998; Park y Antonioni, 2007; Ma, 2005); (b) la dimensión de personalidad extraversión se relaciona de manera directa con los estilos de manejo del conflicto dominante e integrador y de forma inversa con evitativo y complaciente (Costa y McCrae, 1995; Barry y Friedman, 1998; Antonioni, 1998; Park y Antonioni, 2007; Ma, 2005); (c) la dimensión de personalidad agradable tiene una relación directa con los estilos de manejo del conflicto integrador y comprometido e inversa con el estilo dominante(Costa y McCrae, 1989; Morberg, 2001; Antonioni, 1998; Park y Antonioni, 2007; Ma, 2005); (d) la dimensión de personalidad apertura a la experiencia se 29 relaciona de manera directa con los estilos de manejo del conflicto integrador y comprometido e inversa con el estilo complaciente (Costa y McCrae, 1995; Morberg, 2001; Antonioni, 1998; Park y Antonioni, 2007); (e) la dimensión de personalidad concienzudo se relaciona directamente con el estilo de manejo del conflicto integrador y de forma indirecta con el estilo evitativo (Antonioni, 1998; Park y Antonioni, 2007). Hasta el momento no se han reportado investigaciones que estudien de manera directa el Modelo Big Five con la teoría de Resultados de la Negociación de Rahim (2000a, 2000b). Sin embargo, Cheung y col. (2006) plantean teórica y matemáticamente, que el estilo integrador y el estilo comprometido de manejo del conflicto podrían predecir los resultados de negociación funcionales, mientras que el estilo dominante, el estilo complaciente y el estilo evitativo de manejo del conflicto podrían predecir los resultados disfuncionales; partiendo de esta presunción y de acuerdo con los resultados obtenidos que relacionan Big Five y Estilos de Manejo del conflicto, se presuponen las siguientes relaciones entre Big Five y los resultados de la negociación: (a) Las dimensiones del Big Five Apertura, Agradable y Concienzudo se relacionan con los resultados funcionales de la negociación; (b) La dimensión Concienzudo del Big Five se relaciona de manera inversa con los resultados disfuncionales de la negociación; (c) La dimensión del Big Five Neuroticismo podría predecir los resultados disfuncionales de la negociación; (d) La dimensión Extraversión del Big Five no predice de manera directa ninguna forma de resultados de la negociación; mas si a través de los estilos de manejo del conflicto. La presente investigación significa un aporte con relevancia social, en tanto para las organizaciones, obtener información sobre los Estilos del manejo del conflicto, Resultados de la negociación y Big Five, pareciera cobrar especial importancia en tanto benefician procesos tales como selección de personal y desarrollo 30 organizacional. Plotkin (1997) señala que contratar la persona correcta en la posición adecuada, se ha convertido hoy en una necesidad, por ello, la mayoría de las organizaciones se encuentran ávidas de conocimientos que le permitan lograrlo. Adicionalmente, una vez contratada necesitan identificar las áreas no técnicas en las cuales deba desarrollarse la persona, como por ejemplo, en el uso asertivo de ciertos estilos de manejo del conflicto. De igual forma, desde el punto de vista teórico, la presente investigación significa un aporte científico para la psicología organizacional con factibilidad de ser replicado en otros países, en tanto genera conocimiento al permitir conocer la relación entre las variables Big Five, Estilos de manejo del conflicto y resultados de la negociación en una muestra local activamente laborando. Adicionalmente, aporta datos que permitirán confirmar o no, el modelo propuesto de relación entre las tres variable. De igual forma, desde la perspectiva metodológica, contribuye a facilitar y promover futuras investigaciones al adaptar y validar el instrumento de resultados de la negociación y el cuestionario de Big Five. De esta forma, la presente investigación pretendió responder la interrogante ¿cómo la personalidad y el estilo de manejo del conflicto influencian los resultados de la negociación, y cómo ellas se relacionan entre sí?, tal cómo se refleja en la Figura 6. 31 6. OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN OBJETIVO GENERAL Determinar cómo la personalidad y el estilo de manejo del conflicto influencian los resultados de la negociación, y cómo ellas se relacionan entre sí. OBJETIVOS ESPECIFICOS • Describir los participantes de acuerdo con las variables sociodemográficas. • Describir los participantes en relación a los rasgos de personalidad del Big Five (apertura, neuroticismo, extraversión, agradable y concienzudo). • Describir los participantes en relación al estilo de manejo del conflicto (integrador, complaciente, dominante, evitativo y comprometido). • Describir los participantes en relación a los resultados de la negociación funcionales y disfuncionales. • Establecer la influencia de Big Five en los resultados de la negociación. • Establecer la influencia de los estilos de manejo del conflicto en los resultados de la negociación. • Establecer la relación entre Big Five y los estilos de manejo del conflicto. Integrador 7 β2 7+ e β212+ 7β1 β612 + 12 β4 Comprometido β611β6 9+ 11 β7 10 + β511 β4 11 - β111+ 5β2 - Dominante 5 e 9β5 β78+ Concienzudo 8 8+ β2 11 β3 β3 10 - Agradable 9 Resultados funcionales 2 e β15+ β 29+ β2 4- β3 9- β1 6- e β510+ β7 9+ Extraversión 10 β26+ 6 Neuroticismo β14+ Complaciente 4 e Resultados disfuncionales 1 e β23 - Apertura 12 + Β712 3+ β1 β18β38- Evitativo 3 e Figura 6: Diagrama de Ruta Propuesto 32 CAPÍTULO III MÉTODO En el presente capítulo se señalan los elementos relacionados con el abordaje metodológico que permitieron la realización de la investigación, tales como la muestra, las variables, los instrumentos, el procedimiento y las consideraciones éticas. 1. POBLACIÓN Y MUESTRA La población estuvo representada por profesionales venezolanos que se encuentran laborando, con nivel académico con al menos técnico superior universitario, con edades comprendidas entre 18 y 60 años, de ambos sexos, que decidieron participar de manera voluntaria. La cantidad de participantes se estimó en base al criterio propuesto por Hair y col. (1999) relacionado con la cantidad de dimensiones de variables que contiene el estudio, por lo que, la muestra se constituyó por 380 profesionales de ambos géneros, con nivel académico de al menos técnico superior universitario, con edades comprendidas entre 18 y 60 años. La selección de la muestra se llevó a cabo, a través de un muestreo no probabilistico, en el cual se seleccionaron los participantes de manera casual, es decir, basado en características relacionadas con la investigación (Hernández, Fernandez y Baptista, 2003). 34 2. VARIABLES VARIABLE EXÓGENA: FACTORES DE PERSONALIDAD BIG FIVE Definición conceptual: Consiste en la descripción de la personalidad, a través de cinco dimensiones fundamentales e independientes: Extraversión, Agradable, Concienzudo, Neuroticismo y Apertura a la Experiencia (Edo y col. 2005). Dimensiones (Barrica y Mount, 1991): A. Extroversión: se refiere a la medida en que los individuos son gregarios, asertivos, sociables, conversadores y activos. B. Agradable: se refiere al grado en que las personas son cooperativas, cálidas, corteses, flexibles, sinceras, tolerantes, comprensivas y simpáticas. C. Concienzudo: mide el grado en que las personas son trabajadoras, organizadas, cuidadosas, responsables, confiables y firmes. D. Apertura a la experiencia: define a las personas como creativas, imaginativas, curiosas, originales, mente abierta, confortables y basadas en hechos. E. Neuroticismo: que está relacionado con ser tenso, ansioso, deprimido, cansado, inseguro e irritable. Definición operacional: El resultado de Big Five predominante corresponde al factor en el cual el sujeto obtenga la mayor puntuación, mediante la aplicación del Cuestionario Big Five de Goldberg (1990). La escala está conformada por un total de 40 ítems. Cada ítem podrá ser respondido mediante una escala tipo Likert de 5 puntos en donde 1: no es cierto en mi caso, casi nunca soy de esa manera; 2: no es del todo cierto, raramente soy así; 3: ni es cierto ni es falso, o no puedo decidirme; 4: tiene algo de verdad, algunas veces soy así; y 5: totalmente, soy así casi siempre. Dimensiones: A. Apertura: sumatoria obtenida en el Cuestionario Big Five de Goldberg (1990), en los ítems 4,9,14,19,21,24,29,34,39; como resultado de la adaptación y validación realizada en el presente trabajo. 35 B. Neuroticismo: sumatoria obtenida en el Cuestionario Big Five de Goldberg (1990), en los ítems 5,10,15,20,25,30,35,40; como resultado de la adaptación y validación realizada en el presente trabajo. C. Extraversión: sumatoria obtenida en el Cuestionario Big Five de Goldberg (1990), en los ítems 1,6,11,26,31,36; como resultado de la adaptación y validación realizada en el presente trabajo. D. Agradable: sumatoria obtenida en el Cuestionario Big Five de Goldberg (1990), en los ítems 3,8,13,18,23,26,33,38; como resultado de la adaptación y validación realizada en el presente trabajo. En este caso, la interpretación es inversa, mayor puntuación significa menor nivel de agradabilidad. E. Concienzudo: sumatoria obtenida en el Cuestionario Big Five de Goldberg (1990), en los ítems 2,7,12,16,17,22,27,32,37; como resultado de la adaptación y validación realizada en el presente trabajo. VARIABLE ENDÓGENA: ESTILO DE MANEJO DEL CONFLICTO Definición conceptual: Es la respuesta natural de una persona, al interactuar con otra, que comienza cuando un individuo percibe que sus metas, intereses, actitudes, valores o creencias son incongruentes o diferentes con aquellas de otros individuos (Rahim, 2000a). Dimensiones: A. Integrador: tiene una alta preocupación por los otros y por sí mismo. Su visión de la situación es ganar-ganar. Este estilo confronta, empleando una comunicación abierta y directa hasta llegar a la resolución del conflicto (Rahim, 2000a). B. Dominante: involucra una alta preocupación por sí mismo y baja preocupación por los demás. Su visión de la situación es ganar-perder. Busca cumplir sus objetivos y como resultado ignora las necesidades y expectativas de la otra parte (Rahim, 2000a). C. Evitativo: presenta una baja preocupación por los demás y por sí mismo. Pospone el problema hasta un mejor tiempo o simplemente se retira de la situación 36 amenazante. Puede negarse en público a reconocer que existe un conflicto que debe ser abordado (Rahim, 2000a). D. Complaciente: se caracteriza por una baja preocupación por sí mismo y una alta preocupación por los demás. Su visión de la situación es perder-ganar. Un individuo con este estilo, tiende a absorber los problemas de los demás y su reacción a los actos de hostilidad tiende a ser positiva e incluso amigable (Rahim, 2000a). E. Comprometido: tiene una preocupación moderada por sí mismo y por los demás. Ambas partes llegan a decisiones mutuamente aceptables. Se asegura de cumplir los objetivos, a través de los puntos medios de las posiciones (Rahim, 2000a). Definición operacional: El estilo de manejo del conflicto predominante corresponde a la dimensión en la cual el sujeto obtenga la mayor puntuación, mediante la aplicación del Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II), en su forma A de Rahim (1983) y validado para Venezuela por Ramírez y Alvarez (2004). La escala está conformada por un total de 28 ítems. Cada ítem podrá ser respondido mediante una escala tipo Likert de 5 puntos en donde 1: totalmente en desacuerdo, 2: desacuerdo, 3: indiferente, 4: acuerdo, y 5: totalmente de acuerdo. Dimensiones: A. Integrador: sumatoria obtenida en el Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II), en los ítems 1,4,5,12,20,22,23,28. B. Dominante: sumatoria obtenida en el Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II), en los ítems 8,9,18,21,25. C. Evitativo: sumatoria obtenida en el Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II), en los ítems 3,6,16,17,26,27. D. Complaciente: sumatoria obtenida en el Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II), en los ítems 2,10,11,13,19,24. E. Comprometido: sumatoria obtenida en el Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (ROCI-II), en los ítems 7,14,15. 37 VARIABLE ENDÓGENA: RESULTADOS DE LA NEGOCIACIÓN Definición conceptual: Los resultados de la negociación son los efectos que se derivan de las negociaciones que determinan los intercambios posteriores (Lewicki y col. 1997). Dimensiones Rahim, 1992; y, Cheung, Wing, y Fung, 2006): A. Funcionales: consiste en una solución que satisface la necesidad de las partes y donde ambos ganan, algunas de las necesidades de las partes son satisfechas y permite a las personas continuar manteniendo su relación interpersonal o disminuye las posibilidades de conflictos en el futuro en tanto favorece a todos los disputantes. B. Disfuncionales: se caracteriza por un incremento en el nivel del conflicto, la relación con el otro se convierte en el factor crítico al luchar en el conflicto, o se presenta la retirada o el posponer la negociación o, la disputa llega a un punto muerto o de no avance. Definición operacional: El resultado de la negociación predominante corresponde a la dimensión en la cual el sujeto obtenga la mayor puntuación, mediante la aplicación del Cuestionario de Resultados de Negociación de Rahim (1992). La escala está conformada por un total de 21 ítems. Cada ítem podrá ser respondido mediante una escala tipo Likert de 5 puntos en donde 1: totalmente en desacuerdo, 2: desacuerdo, 3: indiferente, 4: acuerdo, y 5: totalmente de acuerdo. Dimensiones: A. Funcionales: sumatoria obtenida en el Cuestionario de Resultados de Negociación de Rahim (1992), en los ítems 1,2,10,11,12,16,20; como resultado de la adaptación y validación realizada en el presente trabajo. 38 B. Disfuncionales: sumatoria obtenida en el Cuestionario de Resultados de Negociación de Rahim (1992), en los ítems 3,4,5,6,7,3,14,15,18,19; como resultado de la adaptación y validación realizada en el presente trabajo. VARIABLES NO CONTROLADAS: VARIABLES SOCIO-DEMOGRÁFICAS Las variables no controladas, fueron variables socio-demográficas, que como se señaló en el marco teórico, se estudiaron con negociación, personalidad y conflicto, y resultó pertinente su control; o que eran importantes para describir la muestra con fines de replicación de la investigación. A. Sexo: es la condición orgánica, masculina o femenina, de los animales y las plantas (Real Academia Española). Consistió en la respuesta del participante a la pregunta a. del cuestionario donde se le presentaron las opciones “Femenino” y “Masculino”. B. Edad: es el tiempo que ha vivido una persona o ciertos animales o vegetales (Real Academia Española). Consistió en la respuesta del participante a la pregunta b. del cuestionario, donde la persona señaló en números su edad (solo años). C. Título del pregrado: se refiere al tipo de estudios que realizó el estudiante para obtener el grado. Consistió en la respuesta del participante a la pregunta c. del cuestionario, donde la persona escribió su carrera de pregrado. C. Posición dentro de la organización: se refirió al tipo de cargo y responsabilidades. Consistió en la respuesta del participante a la pregunta d. del cuestionario, donde la persona indicó a través de selección su partencia a una de las siguientes alternativas: Alta Gerencia, Gerencia Media, Baja Gerencia y Empleado. 3. TIPO DE ESTUDIO Y DISEÑO DE LA INVESTIGACIÓN La presente investigación es de tipo no experimental, explicativa y Ex Post Facto. La investigación no experimental es también conocida como investigación Ex Post Facto, término que proviene del latín y significa después de ocurridos los hechos. De acuerdo con Kerlinger y Lee (2002) la investigación Ex Post Facto es un tipo de investigación sistemática en la que el investigador no tiene control sobre las variables 39 independientes porque ya ocurrieron los hechos o porque no son intrínsecamente manipulables. Es explicativa, puesto que se trató una investigación explicativa, es aquélla que pretende evaluar la relación que existe entre dos o más conceptos, categorías o variables, en un contexto particular (Hernández, Fernández y Baptista, 2003). El diseño de la investigación es no experimental, transversal y de ruta, en donde la información se recolectó a través de cuestionarios aplicados en un solo momento de administración a la muestra. Kerlinger y Lee (2002) señalan que el diseño de ruta es un método gráfico para el estudio de influencias directas e indirectas de las variables, en el cual se supone la existencia de relaciones causa efecto entre las variables, pero ninguna de estas relaciones es recíproca lo que implica un modelo lineal y recursivo. De la misma manera, los errores no deben estar relacionados entre sí por lo que ejercen una influencia aleatoria sobre una variable del modelo y no las demás (Sierra-Bravo, 1981). En el análisis de ruta se distinguen dos tipos de variables; las variables exógenas, que son aquellas que no reciben influencia de otras variables, y, las variables endógenas, las cuales son explicadas por una o más variable (Angelucci, 2007). 4. INSTRUMENTOS Cuestionario Big Five de Goldberg (1990) Es un cuestionario de auto-percepción que permite evaluar las dimensiones de personalidad de una persona, basado en la teoría de Goldberg (1990). Consiste en cinco dimensiones: extraversión, agradable, apertura a la experiencia, neuroticismo y concienzudo. Estructura de la Escala: este cuestionario consta de 40 adjetivos o ítems, en los cuales la persona indica para cada uno, a través de una escala Likert de 5 puntos, que tanto le describe ese palabra. (Ver Anexo II). Confiabilidad y Validez: La validez obtenida en países como España es realizada a través de un análisis factorial de componentes principales con rotación varimax con 40 criterio de Kaiser. Los coeficientes alfa de Cronbach para cada rasgo varían entre 0,82 y 0,97 (Goldberg, 1990). Para Venezuela, la presente investigación, realizó una traducción, adaptación, validación por expertos y análisis factorial. Los coeficientes alfa de Cronbach para Venezuela varían entre 0,70 y 0,84 lo que indican una alta consistencia interna. Forma de corrección: Luego que la persona completó el cuestionario, sus respuestas se suman por rasgo, de acuerdo con las siguientes correspondencias: Apertura: ítems 4,9,14,19,21,24,29,34,39; Extraversión: ítems Neuroticismo: 1,6,11,26,31,36; Agradable: ítems ítems 5,10,15,20,25,30,35,40; 3,8,13,18,23,26,33,38; Concienzudo: ítems 2,7,12,16,17,22,27,32,37 Inventario de Estilos de Manejo del Conflicto (Roci-II- Forma A), de Rahim (1983) Es un cuestionario de auto-percepción que permite evaluar los estilos de manejo del conflicto planteados por Rahim (1983), el cual está basado en dos dimensiones: (a) concerniente a sí mismo o el grado en el cual la persona trata de satisfacer sus necesidades; y (b) concerniente a los otros o grado en el cual la persona trata de satisfacer las necesidades de los otros. La combinación de la dimensión concerniente a sí mismo y concerniente a los otros, resulta en cinco estilos específicos de manejo del conflicto: integrador, dominante, evitativo, comprometido y complaciente. Estructura de la Escala: conformado por 28 ítems que relacionan el grado de acuerdo con la que el individuo muestra conductas de manejo del conflicto interpersonal. Posee cinco sub-escalas que miden 5 dimensiones de comportamientos de manejo del conflicto: integrador, dominante, evitativo, comprometido y complaciente (Ver Anexo I). Confiabilidad y Validez: Para el instrumento original, en idioma inglés, la confiabilidad total de los ítems y para cada escala manejo del conflicto, varía desde 0.70 hasta 0.80 (Rahim, 1983). Para Venezuela, se obtuvo un alfa de Cronbach igual a r = 0.73, lo que indica una alta consistencia interna. Los distintos coeficientes de confiabilidad del instrumento se ubicaron por encima de 0.60. Las correlaciones corregidas ítem- 41 total se encontraron en un rango entre 0,22 y 0,60. Cada correlación inter-ítem fue significativa y positiva al nivel de .001 (Ramirez y Alvarez, 2004). Forma de Corrección: se suman las respuestas por dimensiones, de acuerdo con las siguientes correspondencias: Integrador: ítems 1,4,5,12,20,22,23,28; ítems 8,9,18,21,25; Evitativo: ítems 3,6,16,17,26,27; Dominante: Complaciente: ítems 2,10,11,13,19,24; Comprometido: ítems 7,14,15. Cuestionario de Resultados de la Negociación de Rahim (2001) Es un cuestionario de auto-percepción que permite evaluar los tipos de resultados de la negociación planteados por Rahim (2001), el cual está basado en dos posibles resultados: funcionales y disfuncionales. Estructura de la prueba: está conformado por 21 ítems, que relacionan el grado en el que un individuo muestra un resultado de negociación de manera preferente. Está conformado por dos sub-escalas: funcionales y disfuncionales (Ver Anexo III). Confiabilidad y Validez: La validez obtenida en países como China es realizada a través de un análisis factorial de componentes principales con rotación varimax con criterio de Kaiser. El coeficiente alfa de Cronbach global obtenido es r = 0,66. Para Venezuela, la presente investigación, realizó una traducción, adaptación, validación por expertos y análisis factorial. Los coeficientes alfa de Cronbach para Venezuela son superiores a 0,82 lo que indican una alta consistencia interna. Forma de corrección: se suman las respuestas por dimensiones, de acuerdo con las siguientes correspondencias: Funcionales: ítems 1,2,9,10,11,12,16,17,20; Disfuncionales: ítems 3,4,5,6,7,3,14,15,18,19,21. 5. PROCEDIMIENTO El procedimiento realizado consta de dos fases, una primera donde se realizó la adaptación y validación del Cuestionario de Resultados de Negociación de Rahim (2001) y del Cuestionario Big Five de Goldberg (1990), y posteriormente, la fase de aplicación del protocolo a la muestra y el análisis de los resultados. 42 Fase I: Adaptación y validación del Cuestionario de Resultados de Negociación de Rahim (2001) y del Cuestionario Big Five de Goldberg (1990) 1º Se realizó una revisión por expertos de la traducción del Cuestionario de Resultados de Negociación de Rahim (Ver Anexo IV). 2º Ambos cuestionarios fueron aplicados a una muestra piloto de al menos 150 personas, solicitando los permisos previos a las autoridades competentes así como a los estudiantes; tanto hombres como mujeres, mayores de 18 años, estudiantes de postgrado de la Universidad Simón Bolívar. 3º Se estimó la consistencia interna de cada prueba a través del cálculo del coeficiente alpha de Cronbach; también se determinó la validez de constructo de cada cuestionario a través de un análisis factorial de componentes principales con rotación varimax con criterio de Kaiser; posteriormente, se compararon con los resultados obtenidos por Cheung, Wing y Fung (2006) y Goldberg (1990). Fase II: Ejecución de la investigación 1º Se les aplicó a todos los participantes seleccionados, los cuatro cuestionarios (ROCI-II-Forma A, BIG FIVE, Cuestionario de resultados de la negociación y el Cuestionario sociodemográfico). Una vez respondidos, se trascribieron los datos en el programa de computación para Windows Statistical Package for the Social Sciences (SPSS) versión 12.0. 2º Se procedió a analizar estadísticamente los resultados obtenidos 6. CONSIDERACIONES ÉTICAS La presente investigación se rigió por los lineamientos éticos impuestos por la American Psychological Assotiation (APA), por lo tanto, en el presente estudio se respetó la confidencialidad de los datos, se mantuvo el anonimato, no se coaccionó a las personas a participar en la investigación, y la investigadora se hizo responsable de registrar y analizar los datos de manera clara y completa, así mismo, se asumió la responsabilidad de los créditos de los autores citados y de sus actos en el desarrollo de la investigación. CAPÍTULO IV ANÁLISIS DE RESULTADOS A continuación se procede al análisis de los datos recolectados en tres fases: psicométrica, estadística y prueba del modelo. 1. ANÁLISIS PSICOMÉTRICO Con la finalidad de adaptar y validar el Cuestionario Big Five y el Cuestionario de Resultados de la Negociación de Rahim (2001), se realizó un análisis de confiabilidad de los instrumentos a través del método de Alpha de Cronbach, el cual proporcionó información acerca de la consistencia interna entre cada uno de los reactivos de las escalas utilizadas. Adicionalmente, se llevó a cabo un análisis factorial mediante el método de componentes principales para conocer si los reactivos se agrupan en las dimensiones propuestas en cada escala. CUESTIONARIO BIG FIVE La muestra piloto estuvo constituida por 188 profesionales del Área Metropolitana de Caracas, de los cuales 161 corresponden a estudiantes de postgrado de gerencia de la Universidad Simón Bolívar, de género femenino (98) y masculino (89), cuyas edades estuvieron de 21 a 54 años, quienes de forma voluntaria decidieron completar el formulario de investigación. Para estudiar la estructura factorial, se realizó un análisis factorial de componentes principales con rotación varimax con criterio de Kaiser. Se asumió los criterios teóricos propuestos por Goldberg (1990, 2001) y Aluja y Blanch (2002) en la construcción del instrumento, considerando sólo los ítems con saturación igual o 44 mayor a .15. La varianza total explicada por el instrumento es de 48,47%, en la que el componente I explica el 17,93%, el componente II explica el 8,99%, el componente III explica el 8,12%, el componente IV explica el 7,52% y el componente V explica el 5,91%. La composición de cada componente se explica en la Tabla 1. Tabla 1. Cuestionario Big Five: Análisis Factorial y Alfa de Cronbach (n=188) Ítem 1. Agradable 2. Apertura Dimensiones* 3. Concienzudo 4. Extroversión 5. Neurótico α = .818 α = .716 α (corregido) = .721 α = .780 α (corregido) = .795 α = .741 α (corregido) = .740 α = .841 3 .390 8 .351 13 .342 18 .411 23 .602 28 .518 33 .509 38 .590 4 .655 9 .513 14 .775 19 .449 24 .638 29 .660 34 .381 39 .421 2 7 12 17 22 27 32 37 1 6 11 16 21 .203 26 31 36 5 10 15 20 25 30 35 40 *carga factorial igual o mayor a 0.20 **carga factorial menor a .20 .785 .801 .656 .621 .530 .590 .338 .349 .584 .837 .843 .455 .303 .590 .377 .122** .577 .686 .333 .228 .730 .364 .151 45 Al analizar los elementos que saturan en cada uno de los componentes se observa que se mantienen los cinco aspectos teóricos propuestos por Goldberg (1990), así como la distribución de los ítems que conforman cada componente, con la excepción de los ítems 16, 21 y 26, que en la versión en inglés y española cargan en el factor Extroversión. Esta diferencia no representa modificaciones sobre la estructura factorial, ni sobre los aspectos teóricos de los factores de personalidad propuestos y evaluados en el instrumento. Se procedió a analizar los ítems 16, 21 y 26. El ítem 26, en inglés “Energetic” traducido al español “Energético”, carga por encima de .30 en los factores concienzudo, apertura, neuroticismo y extroversión. Se sugiere para futuras investigaciones, basado en la versión original, sustituir el ítem por “Activo” (active). Para la presente investigación se procedió a conservar tal como está. El ítem 21, en inglés “Daring”, traducido de manera imprecisa como “Osado” por Alauja y Blanch (2002), carga positivo y por encima de .20 en el factor Apertura; por ello, se decidió incorporar a dicho factor. El ítem 16, en inglés “Assertive”, traducido incorrectamente como “Decidido” por Alauja y Blanch (2002), carga por encima de .40 en el factor Concienzudo, por lo que se incluyó en dicho factor. Luego se procedió a calcular la confiabilidad y consistencia interna del instrumento y cada sub-escala. Se utilizó el Alpha de Cronbach, obteniéndose un coeficiente de .70 para el instrumento en general. Para cada una de las cinco subescalas, se obtuvo coeficientes de Alpha entre .70 y .84, tal como puede observarse en la Tabla 1. Al proceder en la incorporación de los ítems 21 en la dimensión Apertura, el ítem 16 en la dimensión Concienzudo, y el conservando el ítem 26, se estimaron nuevamente los estadísticos de consistencia interna de cada factor, y se no se observaron diferencias significativas en los nuevos Alpha de Cronbach, tal como se señala en la Tabla 1, los coeficientes Alpha señalados como “corregidos”. Goldberg (1990) en la versión original compuesta por 100 ítems, obtuvo Alpha entre .82 y .97 en las cinco sub-escalas. Saucier (1994) redujo la cantidad de ítems a 46 40, y halló Alpha entre .78 y .83. Posteriormente, Aluja y Blanch (2002) realizaron una traducción y validación del instrumento reducido, obteniéndose valores de Alpha similares a los de la presente investigación. En las sub-escalas Agradable (.82), Concienzudo (.78) y Neuroticismo (.84) se observa que los valores obtenidos resultaron ser superiores (.77, .75, .75 respectivamente) a los obtenidos por Aluja y Blanch (2002). Por el contrario, en las sub-escalas Extraversión (.74) y Apertura (.72), los valores obtenido son inferiores a los reportado por Aluja y Blanch (2002) (.82 y .79 respectivamente). A continuación se presentan los cinco componentes arrojados por el análisis de componentes principales y su vinculación con la propuesta teórica de Goldberg (1990, 2001) y Aluja y Blanch (2002): Agradable (componente 1): La constitución de este componente coincide con el planteamiento de Goldberg (1990). Se caracteriza a las personas como sensibles, solidarias, simpáticas, consideradas, reflexivas, cooperativas, cálidas. Este factor es evaluado en la prueba con adjetivos contrarios, tales como insensible, indiferente, superficial, frío, irreflexivo, no solidario, necio y despiadado (Aluja y Blanch, 2002). Apertura (componente 2): Este componente coincide con el planteamiento original del autor, sin embargo, además de incluir todos los ítems del instrumento de la versión en inglés (Goldber, 1992), adicionalmente carga el ítem 21, el cual en la versión original constituye el factor Extrovertido. Este componente se caracteriza por personas creativas, imaginativas, innovadoras, intelectuales, listas, sofisticadas, filosóficas y artistas (Aluja y Blanch, 2002). Concienzudo (componente 3): Este componente está constituido por los mismos ítems presentes en la versión en inglés del instrumento (Goldberg, 1990); así como también el ítem 16, que pertenecía en la versión original a la categoría Extrovertido. Este factor se refiere a personas organizadas, ordenadas, metódicas, responsables, constantes, puntuales, minusciosa y eficientes (Aluja y Blanch, 2002). Extroversión (componente 4): Este componente coincide con lo planteado por el autor, a excepción de los ítems 21 y 16, los cuales resultaron ser bajos (-.086, -.020) y cargaron en los factores Apertura y Concienzudo respectivamente; y el ítem 26 que 47 cargó sobre .30 en tres componentes: Concienzudo, Apertura y Extroversión; pero que por su significado, corresponde claramente al factor Extroversión. Este factor involucra a la persona abierta, habladora, extrovertida, enérgica, locuaz y vivaz (Aluja y Blanch, 2002). Neuroticismo (componente 5): Este estilo se refiere a la persona irritable, nerviosa, miedosa, turbable, temperamental, temerosa, excitable y variable. Coincide con lo planteado por el autor y los resultados obtenidos por Aluja y Blanch (2002), con excepción del ítem 5 que cargó por debajo de los estimado, pero que se conservó puesto que no carga de manera significativa en ningún otro factor. Los resultados demuestran que el instrumento se compone por 5 componentes principales obtenidos por el procedimiento de rotación varimax con método Kaiser. Los componentes obtenidos satisfacen los criterios teóricos de la versión original en inglés, y los ítems que conforman cada componente se distribuyen de la misma forma que en la versión original, a excepción de los ítems 16, 21 y 26. Esta variación no representa modificaciones sobre la estructura factorial, ni sobre los aspectos teóricos del enfoque propuesto por Goldberg (1990). La consistencia interna del instrumento (.70) resulta apreciable, así como de cada una de las subescalas (entre .70 y .85). Los resultados obtenidos demuestran la validez de constructo, ya que la presencia de los cinco componentes se interpreta como la medición de los cinco factores de Goldberg (1990). La validez aparente del instrumento se fundamenta en la formulación de sus ítems con adjetivos en primera persona, que permiten a la persona identificar características propias. El contenido evaluado por el instrumento satisface a los planteamientos teóricos según los cuales fue concebido (Goldberg, 1990). 48 CUESTIONARIO RESULTADOS DE LA NEGOCIACIÓN La muestra piloto para este análisis psicométrico estuvo constituida por 161 profesionales del Área Metropolitana de Caracas, estudiantes de postgrado de gerencia de la Universidad Simón Bolívar, de género femenino (86) y masculino (51), cuyas edades estuvieron de 21 a 53 años, quienes de forma voluntaria decidieron completar el formulario de investigación. Se consideraron válidos aquellos formularios completamente respondidos, quedando la muestra constituida por 159 personas. Para estudiar la estructura factorial, se realizó un análisis factorial de componentes principales con rotación varimax con criterio de Kaiser. Se asumió los criterios teóricos propuestos por Cheung, Wing y Fung (2006) en la construcción del instrumento, considerando sólo los ítems con saturación igual o mayor a .30. La varianza total explicada por el instrumento es de 43,08%, donde el componente I explica el 24,08%, y el componente II explica el 18,99%. La composición de cada componente se explica en la Tabla 2. Al analizar los elementos que saturan en cada uno de los componentes se observa que se mantienen los dos aspectos teóricos propuestos por Cheung, Wing y Fung (2006), así como la distribución de los ítems que conforman cada componente, con la excepción de los ítems 9, 17 y 21. Esta diferencia no representa modificaciones sobre la estructura factorial, ni sobre los aspectos teóricos de las dimensiones de los resultados de la negociación propuestos y evaluados en el instrumento. Se procedió a analizar los ítems 9, 17 y 21. El ítem 9 en inglés “Some of each party’s needs were satisfied, but not all of them”, traducido al español “Algunas de las necesidades de una de las partes se satisfacieron, pero no todas”, carga por encima de .30 en la dimensión resultados de la negociación disfuncional. Se procedió a eliminar, en tanto satisfacer una de las necesidades de una de las partes no necesariamente podría ser un resultado funcional. El ítem 17, en inglés “The 49 agreement was difficult to reach”, traducido como “El acuerdo fue difícil de lograr”, carga positivo y por encima de .20 en la dimensión resultados disfuncionales; resulta confuso, en tanto la prueba pretende medir resultados y no el procedimiento por el cual se obtuvo el resultado, por lo que se procedió a su eliminación. El ítem 21, en inglés “The negotiation process was a one-side decision-making process””, traducido como “El proceso de negociación fue la toma de decisiones unilateral”, carga inverso por encima de .30 en la dimensión resultados funcionales, por lo que también se eliminó. Tabla 2. Cuestionario de Resultados de la Negociación: Análisis Factorial y Alfa de Cronbach (n=161) Ítem Dimensiones* 1. Funcionales 2. Disfuncionales α = .630 α (corregido) = .850 1 2 9 10 11 12 16 17 20 3 4 5 6 7 8 13 14 15 18 19 21 α = .831 α (corregido) = .828 .668 .649 .417 .736 .754 .763 .613 .555 .727 .413 .678 .756 .595 .620 .600 .388 .477 .326 .447 .432 -.391 *carga factorial igual o mayor a 0.30 Se procedió a calcular la confiabilidad y consistencia interna del instrumento y cada sub-escala. Se utilizó el Alpha de Cronbach, obteniéndose un coeficiente de 50 .553 para el instrumento en general. Para cada una de las dos sub-escalas, se obtuvo coeficientes de Alpha de .630 para los resultados funcionales y .83 para los resultados disfuncionales, tal como puede observarse en la Tabla 2. Al proceder en la eliminación de los ítems 9, 17 y 21, se estimaron nuevamente los estadísticos de consistencia interna de cada factor, y se observaron diferencias en la dimensión de resultados disfuncionales; y un aumento significativo en la dimensión funcional, tal como se señala en la Tabla 2, los coeficientes Alpha señalados como “corregidos”. Los resultados demuestran que el instrumento se compone por 2 componentes principales obtenidos por el procedimiento de rotación varimax con método Kaiser. Los componentes obtenidos satisfacen los criterios teóricos de la versión original en inglés, y los ítems que conforman cada componente se distribuyen de la misma forma que en la versión original, a excepción de los ítems 9, 17 y 21. Esta variación no representa modificaciones sobre la estructura factorial, ni sobre los aspectos teóricos del enfoque propuesto por Cheung, Wing y Fung (2006). La consistencia interna del instrumento (.44) resulta apreciable, considerando que son sub-escalas independientes, así como de cada una de las sub-escalas (superior a .80). Cheung, Wing y Fung (2006) no presenta los resultados Alpha obtenidos. Sin embargo, de acuerdo con Hernández, Fernández y Baptista (1998) los valores Alpha obtenidos son en general aceptables, y especialmente en la subescala Disfuncionales, es un Alpha elevado. A continuación se presentan los dos componentes arrojados por el análisis de componentes principales y su vinculación con la propuesta teórica Cheung, Wing y Fung (2006): Resultados Funcionales (componente 1): La constitución de este componente coincide con el planteamiento de Cheung, Wing y Fung (2006). Se caracteriza por reducción del conflicto, mantenimiento de las relaciones y solución del conflicto. 51 Resultados Disfuncionales (componente 2): Este componente coincide con el planteamiento original del autor Cheung, Wing y Fung (2006). Este componente se caracteriza por escalada del conflicto, deterioro de las relaciones, inactividad y desarrollo de otros conflictos. Los resultados obtenidos demuestran la validez de constructo, ya que la presencia de los dos componentes se interpreta como lo propone de Cheung, Wing y Fung (2006). El contenido evaluado por el instrumento satisface a los planteamientos teóricos según los cuales fue concebido (Rahim, 1983). Los análisis psicómetricos antes señalados del Cuestionario Big Five de Goldberg (1990) y el Cuestionario de Resultados de la Negociación de Rahim (1983) muestran la adaptación y validez de cada uno de estos cuestionarios en el contexto local, dando así validez metodológica a los resultados de la investigación. 2. ANÁLISIS DESCRIPTIVOS En esta sección, se presentan los estadísticos descriptivos obtenidos a partir del análisis de comportamiento de las variables dentro de la población explorada e implicadas en el diagrama de ruta. La muestra estuvo conformada por 380 participantes. Los resultados señalan que la muestra se caracteriza por una mayor presencia del sexo masculino (56,6%) que del sexo femenino (43,4%), principalmente joven, entre los 25 y 32 años (42,4%) con una media de 32,6 años y una dispersión de 7,76, con estudios de pregrado predominantemente de técnicos universitarios (62,9%) y mayoritariamente en una posición dentro de la empresa como empleado (71,8%). En la siguiente tabla se presenta los resultados: 52 Tabla 3. Descriptivos por Variables Sociodemográfica Variable/ Dimensiones Sexo Femenino Masculino Edad menos de 25 25 - 32 32 - 39 39 - 46 más de 46 No Respondieron Título de Pregrado Ingenieros y Arquitectos Licenciados TSU No respondieron Posición dentro de la organización Empleado Gerencia baja Gerencia media Gerencia alta No respondieron Frecuencia Porcentaje 165 215 43,4 56,6 69 161 79 43 15 6 60 78 239 3 273 73 21 11 2 Asimetría Kurtosis .987 .656 -1.035 -.472 1.980 3.482 18,2 42,4 20,7 11,3 3,4 1,6 15,8 20,5 62,9 0,8 71,8 19,2 5,5 2,9 0,6 La distribución de los puntajes de la Edad, toma una forma de asimetría moderada y positiva, mientras que el escarpamiento de la curva es leptocurtica, lo que indica que buena parte de las observaciones se encuentran concentradas en el centro de la distribución. La asimetría de los puntajes de Nivel de Pregrado es marcada y negativa, lo que indica la presencia mayoritaria de nivel de formación de técnico superior universitario (TSU); la distribución es mesocurtica. La asimetría de la distribución de la Posición dentro de la Organización, es marcada y positiva, lo que indica la existencia de mayor cantidad de empleados; la distribución es claramente leptocurtica; tal como se observa en la Tabla 3. Al analizar la muestra comparativamente por sexo, se observó que la mayoría de los participantes, tanto masculino como femenino, se encuentran en el rango de edad 53 de 25 a 32 años, con título de TSU y una posición dentro de la organización de empleado, tal como se observa en la Tabla 9. Tabla 4. Frecuencia sociodemográficas por Sexo comparativamente con otras variables Femenino Masculino Frecuencia Frecuencia Edad menos de 25 33 36 25 - 32 76 161 32 - 39 33 79 39 - 46 16 43 más de 46 4 22 Ingenieros y Arquitectos 22 38 Licenciados 47 31 TSU 95 144 Empleado 110 163 Gerencia baja 32 41 Gerencia media 16 5 Gerencia alta 6 5 Variable/ Dimensiones Título de Pregrado Posición dentro de la organización De acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística en su web (www.ine.gov.ve; 04/05/08), en el año 2001, el 62% de la población venezolana activamente laborando se encontraba entre los 15 y 64 años. En relación al sexo, señala que la tasa de ocupación para individuos mayores de 15 años, en enero de 2008, es de 78,5% para los hombres y de 48,7% para las mujeres. No se encontraron estadísticas en relación al nivel educativo superior al bachillerato ni las relacionadas con la posición en la organización. Por lo que pareciera probable afirmar, que la muestra participante en el estudio, podría ser una muestra representativa de la población venezolana acorde la edad y la distribución por sexo. 54 Variable Exógena: Big Five El Big Five evaluó cinco dimensiones: neuroticismo, concienzudo, agradable, apertura y extrovertido. De acuerdo con los resultados obtenidos, la muestra se caracteriza principalmente por ser Concienzuda (X=4.48), seguido por Extrovertida (X=4.03) y Agradable (X=3.96). La dimensión menos frecuente fue el Neuroticismo (X=1.69), tal como se puede apreciar en la Tabla 5. Tabla 5. Distribución de las dimensiones de Big Five por Sexo Femenino Masculino Total Dimensiones Min Max Med S Min Max Med S Min Max Med S Neuroticismo 1 4 1.72 .068 1 4 1.66 .104 1 4 1.69 1.279 Concienzudo 1 5 4.50 .058 1 5 4.46 .053 1 5 4.48 .760 Agradable 1 5 3.92 .097 1 5 3.99 .077 1 5 3.96 1.185 Apertura 1 5 3.19 .076 1 5 3.26 .057 1 5 3.23 .903 Extrovertido 1 5 4.05 .068 2 5 4.01 .057 1 5 4.03 .847 La representación gráfica de los datos sería: 5 extrovertido apertura agradable 376 278 276 378 366 173 115 4 concienzudo neurotico 3 2 1 115 204 93 365 265 314 364 116 171 264 364 115 26 292 FEM 110 MASC Sexo Figura 7. Box plots de la distribución de las dimensiones de Big Five por Sexo 55 Al diferenciar a los participantes por sexo, se pudo observar que la presencia de las dimensiones de Big Five es similar a la descrita para la muestra en general, tal como se pude observar en la Figura 7. Las tres dimensiones que más se encuentran presentes son concienzudo (X= 4.50 para las mujeres y X=4.46 para los hombres), extroversión (X=4.05 para las mujeres y X=4.01 para los hombres) y, agradable (X=3.92 para las mujeres y X= 3.99 para los hombres). La menos presente es la dimensión neuroticismo (X=1.72 para las mujeres y X=1.66 para los hombres). Variable Endógena: Estilo de Manejo del Conflicto En los Estilo de Manejo del Conflicto, se evaluaron cinco dimensiones: Evitativo, Comprometido, Integrador, Dominante y Complaciente. Los resultados obtenidos, indican que la muestra se caracteriza principalmente por dimensiones Dominante (X=3.01) y Complaciente (X=2.92), tal como se presentan en la Tabla 6. El estilo de manejo del conflicto menos presente es el estilo Comprometido (X=1.38). Tabla 6. Distribución de las dimensiones de los Estilos de Manejo del Conflicto por Sexo Femenino Dimensiones Min Max Med Masculino S Min Max Med Total S Min Max Med S Evitativo 1 5 2.62 .067 1 5 2.84 .058 1 5 2.74 .861 Integrador 1 4 1.42 .062 1 4 1.60 .067 1 4 1.52 .906 Complaciente 1 5 2.93 .076 1 5 2.92 .073 1 5 2.92 1.023 Dominante 1 5 3.01 .074 1 5 3.01 .066 1 5 3.01 .957 Comprometido 1 5 1.36 .056 1 4 1.39 .045 1 5 1.38 .688 La representación de los datos sería: 56 5 209 318 254 150 26 261 evitativo integrador complaciente dominante comprometido 4 315 335 380 321 3 373 309 314 374 366 364 2 339 329 308 363 2 379 283 348 323 293 370 378 337 371 1 FEM MASC Sexo Figura 8. Box plots de la distribución de los Estilos de Manejo del Conflicto por Sexo Como se puede apreciar en la Figura 8 no existen diferencias significativas por sexo en el estilo de manejo del conflicto evitativo (X=2.62 para las mujeres y X=2.84 para los hombres), el estilo complaciente (X=2.93 para las mujeres y X=2.92 para los hombres), el estilo comprometido (X=1.36 para las mujeres y X=1.39 para los hombres) y el estilo dominante (X=3.01 para las mujeres y X=3.01 para los hombres); solo se observan mayor diferencias por sexo en el estilo de manejo del conflicto integrador (X=1.42 para las mujeres y X=1.60 para los hombres). Variable Endógena: Resultados de la Negociación Los Resultados de la Negociación se evaluaron considerando dos dimensiones: (1) Resultados funcionales; y, (2) Resultados disfuncionales. Los datos obtenidos, indican que la muestra presenta una mayoría significativa de Resultados Funcionales (X=4.03), tal como se puede apreciar en la Tabla 7. 57 Tabla 7. Distribución de las dimensiones de los Resultados de la Negociación por Sexo Femenino Masculino Total Dimensiones Min Max Med S Min Max Med S Min Max Med S Funcionales 2 5 4.10 .059 2 5 3.97 .055 2 5 4.03 .785 Disfuncionales 1 4 2.28 .069 1 4 2.36 .061 1 4 2.33 .889 La representación de los datos sería: funcionales 5 disfuncionales 4 3 2 2 175 338 235 360 260 378 26 1 FEM MASC Sexo Figura 9. Box plots de la distribución de los Resultados de la Negociación por Sexo Como se puede apreciar en la Figura 9 no existen diferencias significativas por sexo en los resultados funcionales de la negociación (X=4.10 para las mujeres y X=3.97 para los hombres) ni en los resultados disfuncionales (X=2.28 para las mujeres y X=2.36 para los hombres). Resumiendo lo obtenido en las tres variables en estudios, se observa la muestra, se caracteriza por las dimensiones concienzudo, agradable y extrovertido de Big Five, con un estilo predominante de manejo del conflicto dominante y complaciente y que obtienen principalmente resultados funcionales de su negociación. 58 3. ANÁLISIS DEL DIAGRAMA DE RUTA PROPUESTO Con el fin de verificar el modelo de ruta propuesto y estudiar las relaciones planteadas, se procedió al computo de las regresiones simples y múltiples para cada una de las variables endógenas propuestas en el modelo y así poder verificar las influencias directas e indirectas que se ejercen entre las mismas, el análisis de realizó de derecha a izquierda. En cuanto a los supuestos del modelo, tal como se puede observar en los valores de Durbin Watson, todos se encuentran cercanos a 2, lo que indica que los errores no están correlacionados. La variable endógena resultados de la negociación funcionales y la variable endógena resultados disfuncionales de la negociación, tal como lo muestran los gráficos (Anexos D,E), se distribuyen de manera cercana a la normal. Para todos las variables endógenas se anexan los resultados de los modelos de regresión (Anexos F, G, H, I, J, K). Resultados Disfuncionales de la Negociación Las variables que se consideraban antecedentes relacionados con los Resultados Disfuncionales de la Negociación fueron los estilos de manejo del conflicto: evitativo, complaciente, dominante, comprometido, integrador; y las dimensiones del Big Five: neuroticismo y concienzudo. Se obtuvo una correlación moderada y positiva (r = .342) entre la combinación lineal de estas variables y Resultados de la Negociación Disfuncionales. Estas variables explican el 10% de la varianza de los resultados disfuncionales de manera significativa (F = 7.042, Sig = 000). Ver Tabla 8 y Anexo D. Tabla 8. Varianza explicada para la escala total de resultados de la negociación disfuncionales Error Tip. R .342 R² .117 R² de Durbin ajustada Estimación Watson .100 .843 1.784 F Sig 7.042 .000 59 La variable que más aporta a la explicación de la varianza de los Resultados Disfuncionales de la Negociación es el estilo de manejo del conflicto integrador. El coeficiente estandarizado beta es bajo y significativo (B = .287) lo que significa que en la medida en que se emplee un estilo de manejo del conflicto integrador, habrá mayores resultados disfuncionales. La segunda variable que más aporta a los antecedentes de los Resultados Disfuncionales de la Negociación es el estilo de manejo del conflicto comprometido que presenta un coeficiente beta estandarizado bajo, significativo y positivo (B = .131), lo que se podría traducir en que mientras más comprometido sea el estilo de manejo del conflicto, mayor será la obtención de resultados disfuncionales. La tercera variable que aporta al modelo es la dimensión Concienzudo del Big Five, con un beta bajo, significativo y negativo (B = -.113). Las variables dominante, evitativo, complaciente y neurótico resultaron no ser significativas. Resultados Funcionales de la Negociación Las variables que se consideraban antecedentes relacionados con los Resultados Funcionales de la Negociación fueron los estilos de manejo del conflicto; evitativo, complaciente, dominante, comprometido e integrador; y las dimensiones del Big Five: concienzudo, agradable y apertura. Se obtuvo una correlación moderada y positiva (r = .456) entre la combinación lineal de estas variables y los Resultados Funcionales de la Negociación. Estas variables explican el 19,1% de la varianza de los Resultados Funcionales de la Negociación de manera significativa (F = 12.200, Sig = 000). Ver Tabla 9 y Anexo E. Tabla 9. Varianza explicada para la escala total de resultados de la negociación funcionales Error Tip. R .456 R² .208 R² de Durbin ajustada Estimación Watson .191 .706 1.918 F Sig 12.200 .000 60 La variable que más aporta a la explicación de la varianza de los Resultados Funcionales de la Negociación es el estilo de manejo del conflicto integrador. El coeficiente estandarizado beta es moderado, negativo y significativo (B = -.424) lo que significa que en la medida en que se emplee un estilo de manejo del conflicto integrador, habrá menores resultados disfuncionales. La segunda variable que más aporta a los antecedentes de los Resultados Funcionales de la Negociación es la dimensión Concienzudo del Big Five, con un beta bajo, significativo y positivo (B =.177), lo que se podría traducir en que mientras más concienzudo, mayor será la obtención de resultados funcionales. Las variables dominante, evitativo, comprometido, complaciente, agradable y apertura resultaron no ser significativas. Estilo de Manejo del Conflicto Evitativo Las variables que se consideraban antecedentes relacionados con el Estilo de Manejo del Conflicto Evitativo fueron las dimensiones del Big Five: concienzudo, extraversión y neuroticismo. La correlación múltiple entre estas variables resultó no ser significativa, por lo que ninguna de estas variables explican alguna varianza del estilo evitativo. Ver Tabla 10 y Anexo F. Tabla 10. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto evitativo Error Tip. R .118 R² .014 R² de Durbin ajustada Estimación Watson .006 .858 1.777 F Sig 1.773 .152 Estilo de Manejo del Conflicto Complaciente Las variables que se consideraban antecedentes relacionados con el Estilo de Manejo del Conflicto Complaciente fueron las dimensiones del Big Five: apertura, 61 neuroticismo, agradable y extraversión. Se obtuvo una correlación baja y positiva (r = .177) entre la combinación lineal de estas variables y Complaciente. Estas variables explican el 2,1% de la varianza del Estilo de Manejo del Conflicto Complaciente manera significativa (F = 3.035 Sig = 018). Ver Tabla 11 y Anexo G. Tabla 11. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto complaciente Error Tip. R .177 R² .031 R² de Durbin ajustada Estimación Watson .021 1.012 1.279 F Sig 3.035 .018 La variable que más aporta a la explicación de la varianza del Estilo de Manejo del Conflicto Complaciente es la dimensión de Agradable de Big Five. El coeficiente estandarizado beta es bajo, positivo y significativo (B = .159) lo que significa que en la medida en que se caracterice por ser agradable, habrá mayor implementación del estilo de manejo del conflicto complaciente. Las variables apertura, neuroticismo y extraversión resultaron no ser significativas. Estilo de Manejo del Conflicto Dominante Las variables que se consideraban antecedentes relacionados con los el Estilo de Manejo del Conflicto Dominante fueron las dimensiones del Big Five: extraversión, neuroticismo y agradable. Se obtuvo una correlación baja y positiva (r = .223) entre la combinación lineal de estas variables y Dominante. Estas variables explican el 4.2% de la varianza de Estilo de Manejo del Conflicto Dominante de manera significativa (F = 6.585, Sig = 000). Ver Tabla 12 y Anexo H. Tabla 12. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto dominante R R² .223 .050 R² Error Tip. de Durbin ajustada Estimación Watson .042 .936 1.669 F 6.585 Sig .000 62 La variable que más aporta a la explicación de la varianza del Estilo de Manejo del Conflicto Dominante es la dimensión de Agradable de Big Five. El coeficiente estandarizado beta es bajo, positivo y significativo (B = .158) lo que significa que en la medida en que se caracterice por ser agradable, habrá mayor implementación del estilo de manejo del conflicto dominante. La segunda variable que más aporta a los antecedentes del Estilo de Manejo del Conflicto Dominante es la dimensión Extraversión del Big Five, con un beta bajo, significativo y positivo (B =.128), lo que se podría traducir en que mientras más extrovertido, mayor será el uso del estilo del manejo del conflicto dominante. La variable neuroticismo resultó no ser significativa. Estilo de Manejo del Conflicto Comprometido Las variables que se consideraban antecedentes relacionados con el Estilo de Manejo del Conflicto Comprometido fueron las dimensiones del Big Five: apertura, agradable y neuroticismo. La regresión múltiple entre estas variables resultó no ser significativa, por lo que ninguna de estas variables explica alguna varianza del estilo comprometido. Ver Tabla 13 y Anexo I. Tabla 13. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto comprometido R R² .100 .010 R² Error Tip. de Durbin ajustada Estimación Watson .002 .687 1.748 F 1.272 Sig .284 Estilo de Manejo del Conflicto Integrador Las variables que se consideraban antecedentes relacionados con el Estilo de Manejo del Conflicto Integrador fueron las dimensiones del Big Five: apertura, agradable, extroversión y concienzudo. La correlación múltiple entre estas variables resultó no ser significativa, por lo que ninguna de estas variables explica alguna varianza del estilo integrador. Ver Tabla 14 y Anexo J. 63 Tabla 14. Varianza explicada para la escala total del estilo de manejo del conflicto integrador R R² .102 .010 R² ajustada .000 Error Tip. de Estimación .906 Durbin Watson .417 F .978 Sig .420 A continuación se presenta el diagrama de ruta obtenido en la Figura 10 en la cual, se resumen de manera gráfica todos los resultados hasta ahora explicados. Integrador -. 4 2 4 .2 87 Extraversión .12 8 Resultados funcionales Comprometido .1 Agradable Dominante .158 .15 9 31 .580 Complaciente 7 .17 Concienzudo .809 .979 -.113 Resultados disfuncionales .900 Figura 10. Diagrama de ruta general obtenido con una p < 0.05 64 65 Tal como se puede observar en la Figura 10 solamente dos estilos de manejo del conflicto se relacionan con los resultados disfuncionales de la negociación. El estilo de manejo del conflicto comprometido presenta una relación directa, esto es, ante su presencia se obtendrán resultados disfuncionales; al igual que el estilo de manejo del conflicto integrador; que a su vez, también se relaciona con los resultados funcionales de la negociación, pero en sentido inverso, esto es, ante la presencia del estilo de manejo del conflicto integrador, habrá menor presencia de resultados funcionales. De igual forma, en dicho gráfico se puede observar que la dimensión concienzudo del Big Five es la única dimensión del Big Five relacionada con los resultados de la negociación. El diagrama señala que la presencia elevada de la dimensión concienzudo se relaciona con una alta presencia de resultados funcionales y una menor presencia de resultados disfuncionales. Por otro lado, la dimensión agradable y la dimensión extraversión del Big Five, se relacionan con el estilo de manejo del conflicto dominante, en tanto mientras más alta sea la presencia de estas dimensiones del Big Five, mayor será la presencia del estilo del manejo del conflicto dominante. Adicionalmente, la dimensión agradable del Big Five, se relaciona con el estilo de manejo del conflicto complaciente, donde la presencia de la dimensión agradable se relaciona con la presencia del estilo de manejo del conflicto complaciente. Es este diagrama de ruta obtenido, la mejor variable predicha es el estilo de manejo del conflicto dominante, con un error igual a .580. CAPÍTULO V DISCUSIÓN DE RESULTADOS El presente estudio tuvo como propósito determinar cómo las dimensiones de personalidad entendidas desde el modelo Big Five y los estilos de manejo del conflicto se relacionan con los resultados de la negociación y cómo éstas se relacionan entre sí. Para identificar las direcciones de la influencia se plantearon relaciones entre estas variables a partir de los resultados empíricos aportados por otras investigaciones y que fueron integradas en el presente estudio a través de un modelo de ruta. Se esperaba que las personas con un estilo de manejo del conflicto integrador o con un estilo comprometido o con dimensión de Big Five concienzudo, con dimensión agradable o con dimensión apertura obtuvieran mayor cantidad de resultados funcionales y menor cantidad de resultados disfuncionales en las negociaciones. De la misma manera, la literatura apuntaba a que los sujetos con un estilo de manejo del conflicto dominante, con un estilo evitativo o con un estilo complaciente, o con dimensión de Big Five de neuroticismo, obtuvieran mayor cantidad de resultados disfuncionales y menor cantidad de resultados funcionales. Se planteó también que la dimensión de Big Five apertura, la dimensión extroversión, la dimensión agradable y la dimensión concienzudo presentarán un estilo predominante de manejo del conflicto integrador; y que la dimensión de Big Five agradable y la dimensión apertura se relacionaran con un estilo de manejo del conflicto comprometido y con resultados funcionales de la negociación. A continuación se presenta la discusión de los resultados, organizada de acuerdo con los objetivos específicos de la investigación. 67 Al describir los participantes de acuerdo con las variables sociodemográficas, los resultados señalan que la muestra es representativa de la población venezolana en la variable edad y en la variable sexo. Esto es, se caracteriza por ser mayoritariamente masculina, joven, con un rango de edad de 20 a 60 años, con una media de 32.6 años; adicionalmente, también se describe principalmente con estudios técnicos universitarios (T.S.U.) y en una posición dentro de la empresa como empleado. Se observó, al describir los participantes en relación a los rasgos de personalidad del Big Five, que se caracterizan por la presencia de la dimensión concienzudo, la dimensión agradable y la dimensión extrovertido, lo que significa que estas personas son trabajadoras, responsables, cuidadosas, cooperativas, cálidas, simpáticas, sociables, conversadoras y gregarias. No se evidenciaron diferencias significativas por género en las dimensiones del Big Five, lo que se corresponde con los resultados obtenidos por Zhang, Kohnstamm, Slotboom, Eric y Cheung (2002). Sin embargo, las mujeres tendieron a puntuar más alto que los hombres en la dimensión concienzudo, la dimensión agradable y la dimensión extrovertido; similar a los resultados obtenidos por Budaev (1999), en agradabilidad, y por Goldberg (2001) en agradable y concienzudo; y Heaven (1996) en concienzudo, agradable y extrovertido. Se encontró al describir los participantes en relación al estilo de manejo del conflicto, que el estilo complaciente y el estilo dominante son los que caracterizan la muestra, lo que implica que estas personas tienden a estar en los extremos: mostrar una preocupación alta por lo demás y baja por sí mismo (complaciente); y, baja preocupación por los demás y alta por sí mismos (dominante). Esto puede deberse a que en la instrucción del cuestionario le solicita al participante que responda pensado en cómo maneja las situaciones de conflicto con su jefe, y siendo la otra parte (el jefe) una persona de autoridad y poder, podría estar induciendo estrategias ganarperder o perder-ganar; lo cual podría ser distinto con compañeros o subordinados. 68 Por otro lado, al describir los participantes en relación a los resultados de la negociación funcionales y disfuncionales, los datos muestran que en términos generales, los puntajes obtenidos de los resultados funcionales se encuentran elevados, lo que significa que los participantes cierran negociaciones exitosas, en donde ambas parten ganan. Una posible explicación se deba a que los participantes son profesionales en ejercicio, con un nivel de instrucción de al menos técnico superior universitario. Otra explicación posible es que dado que la variable fue medida por auto-reporte, ésta sea sensible a la deseabilidad social, y teniendo en cuenta que los comportamientos asociados a los resultados funcionales que se describen en la escala son considerados como positivos, es posible que hayan resultado elevados debido a esto. Al conocer la influencia de Big Five en los resultados de la negociación, se encontró que el único antecedente tanto para los resultados funcionales como los disfuncionales de la negociación, fue la dimensión concienzudo de Big Five, en el sentido que mientras más concienzuda sea la persona, mayor serán sus resultados funcionales y menor serán los resultados disfuncionales en la negociación. Este resultado se corresponde con la propuesta de la presente investigación. Se esperaba, teóricamente, que una persona organizada, analítica y reflexiva fuera capaz de obtener resultados beneficiosos para ambas partes. De igual forma, al conocer la influencia de Big Five en los estilos de manejo del conflicto, se observó que la dimensión concienzudo no se encontró relacionada con ningún estilo de manejo del conflicto, tal como los resultados obtenidos por Ma (2005) y Barry y Friedman (1998). Sin embargo la dimensión agradable de Big Five resultó ser el antecedente más fuerte del estilo de manejo del conflicto dominante, acompañado de la dimensión extroversión. se identificó que mientras más agradable sea la persona, mayor será su uso del estilo de manejo del conflicto dominante. Esta relación es contraria a la obtenida por Ma (2005, 2007) y a la propuesta por la presente investigación. Lo mismo ocurre con la dimensión extroversión; mientras más extrovertida sea la persona, mayor será el uso del estilo de manejo del conflicto 69 dominante. En este caso, el resultado es similar al obtenido por Ma (2005), Antonioni (1998), y Park y Antonioni (2007). Una posible explicación de los resultados obtenidos, podría provenir de estudios de personalidad de marca en los cuales se estudia la personalidad de la población venezolana con fines de mercadeo. Pirela, Villavicencio y Saavedra (2004) encontraron que las dimensiones de personalidad de marca para Venezuela son: Emocionante, Sinceridad, Pasional, Pasividad y Rudeza. La dimensión Emocionante, engloba características tales como chévere, amigable, divertido, atrevido; la dimensión Rudeza se refiere a fuerte de carácter, masculinidad. De esta forma, pareciera que el venezolano combina aspectos aparentemente opuestos como amigable y atrevido y fuerte de carácter, lo que podría explicar la relación entre las dimensiones de personalidad agradable y extrovertido con el estilo de manejo del conflicto dominante. Otra posible explicación para la relación entre la dimensión agradable del Big Five y el estilo de manejo del conflicto dominante, podría deberse al hecho que los ítems que componen dicha dimensión son características contrarias, por lo que, las puntuaciones son invertidas al corregir el instrumento, a diferencia del resto de las dimensiones del cuestionario, y esto podría generar algún sesgo. La dimensión agradable del Big Five también se relaciona con el estilo de manejo del conflicto complaciente, de forma que mientras más agradable, más complaciente será al momento de manejar un conflicto. Este resultado es similar al obtenido por Antonioni (1998), Ma (2005) y Park y Antonioni (2007). Este resultado podría ser explicado partiendo del hecho de que la persona agradable es simpática, colaboradora, cooperativa y especialmente, posee una alta preocupación por los demás, al igual que el estilo de manejo del conflicto complaciente. En relación a la dimensión apertura del Big Five no se encontró relación alguna ni con los estilos de manejo del conflicto ni con los resultados de la negociación. Este 70 resultado concuerda con lo encontrado por Ma (2005, 2007), quien halló que tener una apertura a la experiencia no contribuía a explicar la presencia de alguno de los estilos de manejo del conflicto. De igual forma, la dimensión neuroticismo del Big Five no mostró relación con ninguno de los estilos de manejo del conflicto ni con los resultados de la negociación. Este resultado es diferente a los obtenidos por Moberg (2001), Ma (2005) Antonioni (1998) y Park y Antonioni (2007), quienes obtuvieron relaciones diferentes entre la dimensión neuroticismo y un estilo de manejo del conflicto evitativo, el estilo dominante, el estilo comprometido e el estilo integrador. Una posible explicación pueda deberse al hecho que neuroticismo, entendido como una inestabilidad emocional o mal ajuste, caracterizado por emociones negativas tales como rabia, miedo y tristeza, así como un negativo autoconcepto y baja autoestima, se ha asociado con estudios de desviación de la conducta, por ejemplo en drogodependientes (Pedrero, 2003) y delitos violentos (Ortiz-Tallo, Fierro, Blanca, Cardenal y Sánchez, 2003); y considerando que los participantes estuvieron constituidos por personas activamente laborando, en el que este rasgo fue el menos presente, pareciera que la inexistencia de relaciones con la dimensión neuroticismo del Big Five con los estilos de manejo del conflicto y con los resultados de la negociación, es un resultado acorde a la muestra. Es importante destacar que la única dimensión de Big Five relacionado con los resultados de la negociación fue concienzudo, este resultado es similar al obtenido por Thompson (1990), quien encontró que las características de personalidad contribuyen mínimamente en la explicación de los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación. Finalmente, al conocer la influencia de los estilos de manejo del conflicto en los resultados de la negociación, se encontró que el antecedente más fuerte de los resultados funcionales y disfuncionales de la negociación, es el estilo de manejo del 71 conflicto integrador. Este resultado concuerda con lo encontrado por Cheung y col. (2006), sin embargo, la relación propuesta es contraria. Esto es, Cheung y col. (2006) obtuvieron que mientras la persona emplee un estilo de negociación integrador, mayor será la cantidad de resultados funcionales y menor la cantidad de resultados disfuncionales; sin embargo, los resultados de la presente investigación, plantean una relación inversa, es decir, mientras más utilice la persona un estilo de negociación integrador, menor serán los resultados funcionales y mayor serán los resultados disfuncionales. Una posible explicación de este resultado podría ser dada por Ma (2007), quien encontró que el estilo de manejo del conflicto integrador, durante la negociación muestra una conducta competitiva y procura obtener resultados individuales y satisfacción solo para sí, que corresponde a una ganancia individual, con lo cual, no se orienta a resultados beneficios para ambas partes en la negociación. Otra posible explicación podría ser que el estilo integrador presenta una alta orientación a un beneficio de las dos partes, siempre que las dos partes puedan ganar, y en aquellas ocasiones donde la otra parte no pueda, prefiere solo ganar él a perder solidariamente; obteniendo de esta forma resultados disfuncionales. Este resultado es de gran relevancia, puesto que el estilo de manejo del conflicto integrador, es concebido por Rahim (1992) con una alta preocupación por lo demás y por sí mismo, usando una estrategia ganar-ganar, que emplea una comunicación abierta y directa hasta solucionar el conflicto. Los datos obtenidos se comportan en forma difernete a la propuesta teórica de Rahim (1983). Lo mismo sucede con el estilo de manejo del conflicto comprometido, que resultó ser antecedente de los resultados disfuncionales de la negociación. Este estilo es definido por Rahim (2000a) con una preocupación moderada por sí mismo y por los otros, en el que ambas partes llegan a decisiones mutuamente aceptables. Sin embargo, los datos obtenidos indican que mientras más alto es el estilo de manejo del conflicto comprometido, mayor es la cantidad de resultados disfuncionales de la 72 negociación. Este resultado es contrario al obtenido por Cheung y col. (2006), quienes obtuvieron que a mayor empleo del estilo comprometido, menores eran los resultados disfuncionales. Por otro lado, Ma (2007) no encontró relación entre este estilo de manejo del conflicto y conductas negociadoras ni resultados de la negociación. Considerando que ambos instrumentos, tanto el de estilos de manejo del conflicto como el de resultados de la negociación, fueron adaptados y validados para Venezuela previo a la realización de la investigación y mostraron ser válidos y confiables, es decir, miden lo que pretenden medir, surgen interrogantes en base al planteamiento teórico de Rahim (1983) de los estilos de manejo del conflicto. Finalmente, el estilo de manejo del conflicto evitativo, el estilo dominante y el estilo complaciente, asociados en el planteamiento del problema con resultados disfuncionales de la negociación, no se relacionaron con los resultados de la negociación. Este resultado contrasta con lo obtenido por Cheung, Wing y Fung (2006) y Ma (2005) quienes encontraron relaciones entre estos estilos manejo del conflicto y los resultados funcionales de la negociación. Una posible explicación, considerando que Antonioni (1998) y Park y Antonioni (2007) encontraron diferencias entre estudiantes y gerentes al relacionar las dimensiones del Big Five y los estilos de manejo del conflicto, podría ser debida a que la muestra quedó conformada por profesionales, al menos con un nivel de instrucción de técnico superior y que se encuentran actualmente laborando, con una posición dentro de la organización de empleado. Esto significa una diferencia con Ma (2005, 2007) y Cheung y col. (2006) quienes emplearon estudiantes universitarios. De esta forma, los resultados obtenidos en la presente investigación podrían ser debido a las características particulares de la muestra: profesionales, empleados y jóvenes. VI. CONCLUSIONES, LIMITACIONES Y RECOMENDACIONES La presente investigación pretendía determinar cómo la personalidad y el estilo de manejo del conflicto influencian los resultados de la negociación, y cómo ellas se relacionan entre sí. Para ello, basado en la evidencia empírica de otras investigaciones, se plantearon relaciones esperadas entre personalidad desde el modelo de Big Five y los resultados de la negociación, entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación, y entre personalidad (Big Five) y los estilos de manejo del conflicto. Se adaptaron y validaron para Venezuela el cuestionario de Big Five de Goldberg (1990) y el cuestionario de los resultados de la negociación de Rahim (1983). Para estudiar la estructura factorial, se realizó un análisis factorial de componentes principales con rotación varimax con criterio de Kaiser; y para estudiar la consistencia interna se empleó el Alpha de Conbrach. Los resultados obtenidos en ambos casos demuestran la validez de constructo. De igual forma, se comprobó que el contenido evaluado por cada instrumento satisface a los planteamientos teóricos según los cuales fue concebido. La muestra quedó compuesta por 380 participantes, con nivel de instrucción de al menos técnico universitario, con edades comprendidas entre los 20 y 60 años, que se encuentran actualmente laborando y principalmente con uan posición dentro de la organización de empleado. Los resultados permitieron confirmar parcialmente el modelo propuesto con el fin de determinar la influencia de las dimensiones de personalidad y los estilos de manejo del conflicto sobre los resultados de la negociación. 74 En primer lugar se halló que los participantes se caracterizan principalmente por: (a) ser predominantemente concienzudos, extrovertidos y agradables, en relación a las dimensiones de Big Five, esto es, ser analíticos, reflexivos al mismo tiempo que desenvueltos, simpáticos y conversadores; (b) emplear el estilo dominante y el estilo complaciente de manejo del conflicto en mayor frecuencia, es decir, que la mayoría de los participantes manejan sus conflictos de forma que producen resultados donde gana una de las partes o ninguna, dando prioridad bien a las necesidades de los otros (estilo complaciente) o bien a sus propias necesidades (estilo dominante), sin lograr un balance en el que ganen todos; (c) obtienen resultados funcionales en la negociación, esto es, reducen el conflicto, mantienen las relaciones o solucionan el problema. También se evidenció que la dimensión concienzudo del Big Five, es la única dimensión que se relaciona con los resultados funcionales y disfuncionales de la negociación, en el sentido que aquellos participantes que se caracterizan por ser concienzudos, obtienen mayor cantidad de resultados funcionales y menor cantidad de resultados disfuncionales. Por otro lado, se encontró que la dimensión agradable del Big Five se relaciona con el estilo de manejo del conflicto complaciente y el estilo dominante; al igual que la dimensión de extraversión para el estilo de manejo del conflicto dominante. Esto es, que aquellas personas caracterizadas por ser agradables, tienen mayor frecuencia de uso del estilo de manejo del conflicto complaciente o dominante; y quienes son extrovertidos utilizan un estilo dominante. Adicionalmente, se encontró que los participantes que emplean un estilo de manejo del conflicto integrador o un estilo comprometido, obtienen la menor cantidad de resultados funcionales. En relación al estilo de manejo del conflicto evitativo, el estilo dominante y el estilo complaciente, así como las dimensiones extrovertido, agradable, apertura y neuroticismo del Big Five, se encontró no se relacionan con los resultados de la negociación. 75 Los resultados obtenidos de la presente investigación, permiten concluir que: a) En estos participantes, no se observaron diferencias significativas entre hombres y mujeres en la presencia de las dimensiones del Big Five, de los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación. b) Los participantes pueden ser descritos como principalmente concienzudos, en relación al Big Five; con un estilo de manejo del conflicto dominante; y, que obtienen resultados funcionales. c) Los individuos que se caracterizan por ser concienzudos (Big Five) tenderán a obtener la menor cantidad de resultados disfuncionales y la mayor cantidad de resultados funcionales en la negociación. d) Las personas que se caracterizan por ser agradables (Big Five) tenderán a utilizar un estilo de manejo del conflicto complaciente o dominante. e) Las personas que se caracterizan por ser extrovertidas (Big Five) tenderán a utilizar un estilo de manejo del conflicto dominante. f) Los individuos que utilizan el estilo de manejo del conflicto integrador obtienen mayor cantidad de resultados disfuncionales y menor cantidad de resultados funcionales en la negociación. g) Los resultados de la negociación de quienes emplean un estilo de manejo del conflicto comprometido, son mayoritariamente disfuncionales. La confirmación parcial del modelo propuesto puede deberse a diferentes factores. En primer lugar, destaca que los datos pudieron estar influidos por el tipo de medida utilizado para registrar las variables que son de auto-reporte, los cuales se ven afectados por deseabilidad social o por la distracción de las personas al completar los instrumentos. De esta forma, se recomienda para próximas investigaciones utilizar otro tipo de medidas que sean menos susceptibles a la influencia de la deseabilidad social como son los reportes de los supervisores, e incluso se sugiere utilizar ambos tipos de medidas (auto-reporte y reporte del jefe) para observar la diferencia entre ambas percepciones, y poder validar esta supuesta limitación. 76 Por otro lado, al observar la información teórica que sustenta el presente estudio, se puede verificar que en su mayoría no pertenecen a investigaciones realizadas en Venezuela o en contextos culturales más parecidos como Latinoamérica, lo que pudo haber llevado a plantearse relaciones que no podrían existir en estos contextos. Por esta razón, se recomienda continuar realizando investigaciones en esta área y publicarse para que tengan un acceso más extendido. A nivel metodológico, debido al carácter ex post-facto de la investigación, los hallazgos aquí obtenidos no deberán ser generalizados libremente a poblaciones que posean características diferentes a las estudiadas. Dado que en el presente estudio, la mayoría de las variables incluidas como antecedentes de los resultados de la negociación no resultaron aportaron explicación para esta variable, se recomienda incluir las variables: estructuras de poder (Watson, 1994), roles de los participantes, cultura (Ismet, 2007), y motivación (Thompson, 1990), en futuras investigaciones para estudiar su posible influencia sobre los resultados de la negociación y sobre los estilos de manejo del conflicto. Otra recomendación al emplear el Cuestionario de Big Five, es sustituir los ítems de la dimensión neuroticismo y validar los ítems correspondientes a la polaridad estabilidad emocional; en tanto, neuroticismo se ha asociado con patologías y conductas disruptivas y contribuyó poco o nada a diferencias la muestra participante. También se recomienda realizar este tipo de investigación simultáneamente con una muestra de mayor tamaño, para observar si el comportamiento de las variables en estudio es el mismo o por el contrario difiere. Por último, se puede concluir que la presente investigación representa un aporte teórico, en tanto permite conocer la relación entre la personalidad, el estilo de manejo del conflicto y los resultados de la negociación en una muestra venezolana. Adicionalmente, teóricamente aporta información que podría cuestionar el modelo 77 propuesto por Rahim (1983) sobre los estilos de manejo del conflicto y sus dos dimensiones (concerniente a los otros y concerniente a sí mismo), así como también cuestiona el modelo propuesto por Cheung, Wing y Fung (2006) sobre la relación entre los estilos de manejo del conflicto y los resultados de la negociación. Metodológicamente, esta investigación significa un aporte al adaptar y validar el cuestionario Big Five (1990) y el cuestionario de resultados de la negociación de Rahim (1983), facilitando y promoviendo otras investigaciones en el área. Finalmente, los resultados obtenidos significan una contribución de relevancia social, en tanto evidencian que evaluar a una persona en un proceso de selección solamente por la personalidad, no aporta información suficiente y válida para juzgar su estilo de manejo del conflicto ni los resultados que obtendrá de la negociación; planteando así, la necesidad de ampliar los proceso de selección y desarrollo a la consideración de otras variables distintas de la personalidad. VII. REFERENCIAS Angelucci, L. (2007). Análisis de ruta: concepto básico. Antologías. 9. 31-59. Antonioni, D. (1998). Relationship between the big five personality factors and conflict management styles. International Journal of Conflict Management. 9 (4) 336355. Avia, M., Sanz, J., Sánchez-Bernardos, M.L., Martínez, M., Silva, F. y Graña, J. (1995). The five-factor model. Relations of the NEO-PI with other personality variables. Personality and Individual Differences. 19 (1). 81-97. Barrica, M. y Mount, M. (1991). 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Totalmente Acuerdo Acuerdo Neutro Desacuerdo Totalmente desacuerdo -- intenta recordar alguna situación de desacuerdo reciente -- 1 …trato de investigar junto a mi jefe para encontrar una solución aceptable para nosotros TA A N D TD 2 …generalmente trato de satisfacer las necesidades de mi jefe. TA A N D TD 3 ...evito “poner la torta” y guardo mis conflictos con mi jefe. TA A N D TD 4 …trato de integrar mis ideas con las de mi jefe para tomar decisiones en conjunto. TA A N D TD 5 …intento trabajar con mi jefe para encontrar una solución al problema que satisfaga nuestras expectativas. TA A N D TD 6 …evito comenzar discusiones con mi jefe acerca de mis diferencias. TA A N D TD 7 …trato de encontrar un punto medio para resolver el problema. TA A N D TD 8 …mi influencia la utilizo para conseguir que mis ideas sean aceptadas. TA A N D TD 9 …mi autoridad la utilizo para tomar decisiones a mi favor. TA A N D TD 10 …usualmente me ajusto a los deseos de mi jefe. TA A N D TD 11 …cedo ante los deseos de mi jefe. TA A N D TD 12 …intercambio información precisa con mi jefe para resolver los problemas juntos. TA A N D TD 13 …generalmente hago concesiones a mi jefe. TA A N D TD 14 …usualmente propongo una posición intermedia para romper un posible bloqueo. TA A N D TD 15 …negocio con mi jefe para asegurar que un compromiso sea alcanzado. TA A N D TD 16 …Intento mantenerme alejado de los conflictos con mi jefe. TA A N D TD 17 …evito confrontar las ideas de mi jefe. TA A N D TD 18 …mi experticia la utilizo para tomar decisión a mi favor. TA A N D TD 19 …a menudo ejecuto las sugerencias de mi jefe. TA A N D TD 20 …utilizo el “intercambio constante” con mi jefe para asegurar que los compromisos sean logrados. TA A N D TD 21 …soy generalmente firme en seguir mi visión del problema. 22 …trato de poner de lado todas nuestras diferencias, para asegurar que el problema se resuelva de la mejor TA A N D TD TA A N D TD 23 ...colaboro con mi jefe para llevar a cabo decisiones que nos satisfacen a ambos. TA A N D TD 24 …complazco las expectativas de mi jefe. TA A N D TD 25 …uso mi poder para ganar una situación competitiva. TA A N D TD 26 …trato de guardar mis diferencias con mi jefe para evitar sentimientos fuertes. TA A N D TD 27 …trato de evitar intercambios desagradables con mi jefe. TA A N D TD 28 …trabajo junto a mi jefe para desarrollar un apropiado entendimiento del problema. TA A N D TD En una situación de desacuerdo (con mi jefe)… manera posible. 86 ANEXO B Cuestionario BIG FIVE INSTRUCCIONES: Indique con que exactitud le describen los términos abajo señalados, colocando una X en la casilla correspondiente. No es cierto, casi nunca soy de esa manera 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 29 30 31 32 33 34 35 36 37 38 39 40 Abierto Organizado Insensible Creativo Irritable Hablador Ordenado No solidario Artista Nervioso Extrovertido Metódico Indiferente Imaginativo Miedoso Decidido Responsable Superficial Filosófico Turbulento Osado Constante Frío Innovador Temperamental Enérgico Minucioso Irreflexivo Intelectual Temeroso Locuaz Puntual Necio Listo Excitable Vivaz Eficiente Despiadado Sofisticado Variable No es del todo cierto, raramente soy así Ni es cierto ni falso, o no puedo decidirme Tiene algo de verdad, algunas veces soy así Totalmente, soy así casi siempre 87 ANEXO C Cuestionario de Resultados de Negociación de Rahim INSTRUCCIONES: Intenta recordar alguna situación de conflicto. Por favor, evalúa el grado de acuerdo o desacuerdo en cada afirmación, en relación con los resultados de la negociación que obtuviste. La mejor respuesta será la que exprese tu comportamiento más característico, frente a una situación de conflicto. Cualquier otra respuesta que podría ser considerada como deseable, puede llevar una información engañosa. Completa todas las preguntas. Hazlo en el menor tiempo posible, colocando una X en la casilla correspondiente. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 La solución encontrada satisfizo los objetivos y necesidades de ambas partes. La solución encontrada fue óptima y creativa al problema. Hubo más desacuerdos o escaladas en el conflicto. Se estancó la negociación Se aplazó para un mejor momento. Me retiré de una situación de peligro. Faltó información básica necesaria para solucionar el conflicto. La controversia fue difícil de resolver. Algunas de las necesidades de cada una de las partes se satisfacieron, pero no todas. Se condujo la relación con tacto/cuidado para futuras interacciones. Disminuyeron los niveles de conflicto en el ambiente Se lograron más conductas de cumplimiento de ambas partes Ignoré las necesidades y expectativas de la otra parte. Es probable que la solución encontrada es menos óptima, lo que resulta en desperdicio de recursos Totalmente en desacuerdo Desacuerdo Neutro Acuerdo Totalmente en acuerdo TD D N A TA TD D N A TA TD D N A TA TD TD TD D D D N N N A A A TA TA TA TD D N A TA TD D N A TA TD D N A TA TD D N A TA TD D N A TA TD D N A TA TD D N A TA TD D N A TA 15 Se transformó la tarea-conflicto en relaciónconflicto TD D N A TA 16 17 18 Se redujeron los niveles del conflicto El acuerdo fue difícil de lograr Se experimentó un mayor nivel de conflicto TD TD TD D D D N N N A A A TA TA TA 19 Se experimentó más conflicto en la tarea TD D N A TA 20 Probablemente se lograron menos controversias futuras TD D N A TA 21 El proceso de negociación fue la toma de decisiones unilateral TD D N A TA 88 ANEXO D Modelo de Regresión para los Resultados Disfuncionales de la Negociación Model Summary Model 1 R Adjusted R Square ,100 R Square ,117 ,342a b Std. Error of the Estimate ,843 DurbinWatson 1,784 a. Predictors: (Constant), dominante2, neurotico2, concienzudo2, comprometido2, evitativo2, integrador2, complaciente2 b. Dependent Variable: disfuncionales2 ANOVA Model 1 Sum of Squares 35,046 264,491 299,537 Regression Residual Total df 7 372 379 b Mean Square 5,007 ,711 F Sig. 7,042 a. Predictors: (Constant), dominante2, neurotico2, concienzudo2, comprometido2, evitativo2, integrador2, complaciente2 b. Dependent Variable: disfuncionales2 Coefficientsa Model 1 Unstandardized Coefficients B Std. Error 2,690 ,309 -,132 ,059 ,282 ,064 ,169 ,072 ,014 ,034 -,044 ,058 -,049 ,060 -,064 ,052 (Constant) concienzudo2 integrador2 comprometido2 neurotico2 evitativo2 complaciente2 dominante2 Standardized Coefficients Beta -,113 ,287 ,131 ,020 -,042 -,056 -,069 t 8,692 -2,232 4,381 2,352 ,408 -,753 -,807 -1,239 Sig. ,000 ,026 ,000 ,019 ,683 ,452 ,420 ,216 a. Dependent Variable: disfuncionales2 Residuals Statisticsa Minimum 1,77 -1,808 -1,818 -2,145 Predicted Value Residual Std. Predicted Value Std. Residual Maximum 3,55 2,085 4,015 2,473 Mean 2,33 ,000 ,000 ,000 a. Dependent Variable: disfuncionales2 Normal Q-Q Plot of DISFUNCIONAL 4 Expected Normal 2 0 -2 -4 0 1 2 3 Observed Value 4 5 Std. Deviation ,304 ,835 1,000 ,991 N 380 380 380 380 ,000a 89 ANEXO E Modelo de Regresión para los Resultados Funcionales de la Negociación Model Summaryb Model 1 Adjusted R Square ,191 R R Square ,456a ,208 Std. Error of the Estimate ,706 DurbinWatson 1,918 a. Predictors: (Constant), agradable2, comprometido2, apertura2, evitativo2, dominante2, integrador2, concienzudo2, complaciente2 b. Dependent Variable: funcionales2 ANOVA b Model 1 Sum of Squares 48,683 185,053 233,737 Regression Residual Total df 8 371 379 Mean Square 6,085 ,499 F 12,200 a. Predictors: (Constant), agradable2, comprometido2, apertura2, evitativo2, dominante2, integrador2, concienzudo2, complaciente2 b. Dependent Variable: funcionales2 Coefficientsa Model 1 Unstandardized Coefficients B Std. Error 3,141 ,261 ,182 ,055 -,368 ,054 -,004 ,060 ,050 ,049 ,015 ,051 ,042 ,043 ,066 ,044 ,029 ,033 (Constant) concienzudo2 integrador2 comprometido2 evitativo2 complaciente2 dominante2 apertura2 agradable2 Standardized Coefficients Beta ,177 -,424 -,004 ,055 ,020 ,051 ,076 ,044 t 12,052 3,290 -6,809 -,072 1,028 ,304 ,962 1,504 ,877 Sig. ,000 ,001 ,000 ,943 ,305 ,762 ,337 ,133 ,381 a. Dependent Variable: funcionales2 Residuals Statisticsa Predicted Value Residual Std. Predicted Value Std. Residual Minimum 2,87 -2,353 -3,227 -3,331 Maximum 4,64 1,550 1,711 2,194 Mean 4,03 ,000 ,000 ,000 a. Dependent Variable: funcionales2 Normal Q-Q Plot of FUNCIONAL 3 Expected Normal 2 1 0 -1 -2 -3 2 3 4 Observed Value 5 Std. Deviation ,358 ,699 1,000 ,989 N 380 380 380 380 Sig. ,000a 90 ANEXO F Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Evitativo Model Summaryb Model 1 Adjusted R Square ,006 R R Square ,118a ,014 Std. Error of the Estimate ,858 DurbinWatson 1,777 a. Predictors: (Constant), extroversion2, neurotico2, concienzudo2 b. Dependent Variable: evitativo2 ANOVAb Model 1 Regression Residual Total Sum of Squares 3,915 276,811 280,726 df 3 376 379 Mean Square 1,305 ,736 F 1,773 Sig. ,152a a. Predictors: (Constant), extroversion2, neurotico2, concienzudo2 b. Dependent Variable: evitativo2 Coefficientsa Model 1 (Constant) concienzudo2 neurotico2 extroversion2 Unstandardized Coefficients B Std. Error 2,067 ,305 ,113 ,061 ,004 ,035 ,040 ,055 Standardized Coefficients Beta ,100 ,006 ,039 t 6,775 1,842 ,121 ,728 Sig. ,000 ,066 ,904 ,467 a. Dependent Variable: evitativo2 Residuals Statisticsa Predicted Value Residual Std. Predicted Value Std. Residual Minimum 2,27 -1,850 -4,618 -2,156 Maximum 2,85 2,316 1,062 2,699 a. Dependent Variable: evitativo2 Mean 2,74 ,000 ,000 ,000 Std. Deviation ,102 ,855 1,000 ,996 N 380 380 380 380 91 ANEXO G Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Complaciente Model Summaryb Model 1 Adjusted R Square ,021 R R Square ,177a ,031 Std. Error of the Estimate 1,012 DurbinWatson 1,279 a. Predictors: (Constant), agradable2, apertura2, neurotico2, extroversion2 b. Dependent Variable: complaciente2 ANOVAb Model 1 Regression Residual Total Sum of Squares 12,441 384,345 396,787 df 4 375 379 Mean Square 3,110 1,025 F 3,035 Sig. ,018a a. Predictors: (Constant), agradable2, apertura2, neurotico2, extroversion2 b. Dependent Variable: complaciente2 Coefficientsa Model 1 (Constant) neurotico2 extroversion2 apertura2 agradable2 Unstandardized Coefficients B Std. Error 2,133 ,316 -,003 ,041 ,099 ,072 -,045 ,067 ,137 ,045 Standardized Coefficients Beta -,004 ,082 -,040 ,159 t 6,745 -,082 1,381 -,672 3,062 Sig. ,000 ,935 ,168 ,502 ,002 a. Dependent Variable: complaciente2 Residuals Statisticsa Predicted Value Residual Std. Predicted Value Std. Residual Minimum 2,41 -2,176 -2,833 -2,150 Maximum 3,22 2,427 1,645 2,398 a. Dependent Variable: complaciente2 Mean 2,92 ,000 ,000 ,000 Std. Deviation ,181 1,007 1,000 ,995 N 380 380 380 380 92 ANEXO H Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Dominante Model Summaryb Model 1 Adjusted R Square ,042 R R Square ,223a ,050 Std. Error of the Estimate ,936 DurbinWatson 1,669 a. Predictors: (Constant), agradable2, extroversion2, neurotico2 b. Dependent Variable: dominante2 ANOVAb Model 1 Regression Residual Total Sum of Squares 17,321 329,655 346,976 df 3 376 379 Mean Square 5,774 ,877 F 6,585 Sig. ,000a a. Predictors: (Constant), agradable2, extroversion2, neurotico2 b. Dependent Variable: dominante2 Coefficientsa Model 1 (Constant) neurotico2 extroversion2 agradable2 Unstandardized Coefficients B Std. Error 1,991 ,287 -,042 ,038 ,144 ,057 ,128 ,041 Standardized Coefficients Beta -,056 ,128 ,158 t 6,942 -1,095 2,533 3,089 Sig. ,000 ,274 ,012 ,002 a. Dependent Variable: dominante2 Residuals Statisticsa Predicted Value Residual Std. Predicted Value Std. Residual Minimum 2,22 -2,311 -3,688 -2,468 Maximum 3,31 2,345 1,417 2,504 a. Dependent Variable: dominante2 Mean 3,01 ,000 ,000 ,000 Std. Deviation ,214 ,933 1,000 ,996 N 380 380 380 380 93 ANEXO I Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Comprometido Model Summaryb Model 1 Adjusted R Square ,002 R R Square ,100a ,010 Std. Error of the Estimate ,687 DurbinWatson 1,748 a. Predictors: (Constant), apertura2, neurotico2, agradable2 b. Dependent Variable: comprometido2 ANOVAb Model 1 Regression Residual Total Sum of Squares 1,800 177,387 179,187 df 3 376 379 Mean Square ,600 ,472 F 1,272 Sig. ,284a t 8,379 1,054 ,009 -1,644 Sig. ,000 ,293 ,992 ,101 a. Predictors: (Constant), apertura2, neurotico2, agradable2 b. Dependent Variable: comprometido2 Coefficientsa Model 1 (Constant) neurotico2 agradable2 apertura2 Unstandardized Coefficients B Std. Error 1,533 ,183 ,030 ,028 ,000 ,030 -,064 ,039 Standardized Coefficients Beta ,055 ,000 -,085 a. Dependent Variable: comprometido2 Residuals Statisticsa Predicted Value Residual Std. Predicted Value Std. Residual Minimum 1,24 -,948 -1,961 -1,380 Maximum 1,95 3,600 8,298 5,241 a. Dependent Variable: comprometido2 Mean 1,38 ,000 ,000 ,000 Std. Deviation ,069 ,684 1,000 ,996 N 380 380 380 380 94 ANEXO J Modelo de Regresión para el Estilo de Manejo del Conflicto Integrador Model Summaryb Model 1 Adjusted R Square ,000 R R Square ,102a ,010 Std. Error of the Estimate ,906 DurbinWatson ,417 a. Predictors: (Constant), agradable2, apertura2, concienzudo2, extroversion2 b. Dependent Variable: integrador2 ANOVAb Model 1 Regression Residual Total Sum of Squares 3,208 307,624 310,832 df 4 375 379 Mean Square ,802 ,820 F ,978 Sig. ,420a a. Predictors: (Constant), agradable2, apertura2, concienzudo2, extroversion2 b. Dependent Variable: integrador2 Coefficientsa Model 1 (Constant) apertura2 concienzudo2 extroversion2 agradable2 Unstandardized Coefficients B Std. Error 1,274 ,321 ,055 ,063 -,042 ,071 -,008 ,065 ,074 ,042 Standardized Coefficients Beta ,055 -,036 -,008 ,097 t 3,964 ,881 -,602 -,126 1,775 Sig. ,000 ,379 ,548 ,900 ,077 a. Dependent Variable: integrador2 Residuals Statisticsa Predicted Value Residual Std. Predicted Value Std. Residual Minimum 1,21 -,674 -3,350 -,744 Maximum 1,67 2,685 1,660 2,965 a. Dependent Variable: integrador2 Mean 1,52 ,000 ,000 ,000 Std. Deviation ,092 ,901 1,000 ,995 N 380 380 380 380