PERDICIÓN, de Billy Wilder Trabajo realizado por Víctor Julio Sánchez Pollo Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN Billy Wilder es uno de los directores más conocidos y aclamados de la historia del cine. Cuando se habla de cine clásico, uno de los primeros nombres en aparecer suele ser el suyo. Sus comienzos en el cine se producen en Alemania, donde empezó a trabajar como guionista para la UFA. De ascendencia judía, pertenece a la generación que abandonó Alemania dirección Hollywood al ascender Hitler al poder (en su caso tras un breve paso por Francia). En sus primeros años en tierras americanas siguió dedicándose fundamentalmente a la escritura de guiones, colaborando con grandes directores como Ernst Lubitsch o Howard Hawks. Dirigió (junto a Alexandre Esway) su primera película, Curvas Peligrosas, en Francia en 1934; pero no fue hasta 1942, año en que estrenó su segunda película, La mayor y la menor, cuando comenzó su andadura como director hollywoodiense. Fue guionista de todas sus películas y participó como productor en la gran mayoría. Billy Wilder es recordado como un director de comedias; sin embargo en su filmografía pueden diferenciarse dos bloques. El primero, hasta Traidor en el infierno (1953), compuesto principalmente por películas bélicas y dramáticas; y el segundo, a partir de Sabrina (1954), centrado, éste sí, en la comedia. De hecho, algunas de sus mejores películas no son cómicas, como es el caso de Perdición (1944), El crepúsculo de los dioses (1950) o Testigo de Cargo (1957). Los filmes de Billy Wilder se sitúan dentro del modo de representación estandarizado de la época dorada de Hollywood. En palabras de Juan Carlos Rentero: "Todo el cine de Wilder se puede sintetizar en un excelente toque de guión, en una gran dirección de actores y en un transparente sentido de la «puesta en escena», aunado a una narración sutilmente firme, donde el ritmo en proyección juega un papel preponderante". A él se le atribuye la frase de que la mejor puesta en escena es aquella que no se nota, muestra de su defensa de un estilo transparente. Sus historias se caracterizan por una aguda ironía y una intención desmitificadora y decididamente sarcástica. El cinismo y la crueldad de sus películas se muestran a través de unos personajes perdedores y perdidos, aunque muchas veces entrañables. Pero ante todo, Billy Wilder pensaba en el público y tenía como máxima el entretenimiento; como él mismo dijo: "No hay más que una ley, yo no conozco otra: prohibido aburrir.". Perdición "Desde Perdición, las dos palabras más importantes en el mundo del cine son Billy Wilder". Esta frase corresponde a un telegrama que envió Hitchcock al director austrohúngaro tras el estreno de la película. Ésta logró una gran acogida por parte del público y la crítica, lo 1 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN que supuso la consagración de Wilder, quien obtuvo su primera nominación al Oscar como director. Perdición (Double Indemnity) es una adaptación de la novela negra homónima (en su versión original) de James M. Cain (autor también de El cartero siempre llama dos veces), la cual está basada a su vez en hechos reales. Se estrenó en 1944, el mismo año que Laura, de Otto Preminger y La mujer del cuadro, de Fritz Lang, representantes también del cine negro europeizado, más oscuro y psicológico. La película que nos ocupa, no solo fue importante en la trayectoria del director, sino que sentó algunas de las bases del género y marcó un referente para posteriores películas. SINOPSIS Walter Neff (Fred McMurray) es un vendedor de seguros que, junto a Phyllis Dietrichson (Barbara Stanwyck), elabora un plan para asesinar al marido de ella y cobrar el seguro de vida que ellos mismos le han realizado a sus espaldas. La investigación corre a cargo de Barton Keyes (Edward G. Robinson), infalible investigador de la empresa de seguros y amigo de Walter. ESTRUCTURA La película comienza con Walter Neff dirigiéndose, herido, a la agencia de seguros donde trabaja con el fin de grabar en un dictáfono una confesión de asesinato dirigida a Barton Keyes. En este momento, se produce un enorme flashback en el cual descubrimos toda la historia hasta volver al punto de partida, creándose así una estructura circular. Durante la narración son frecuentes las irrupciones de la voz en over del protagonista y las breves vueltas al presente para ver, tan solo, a Walter realizando su confesión. Este comienzo es similar al de otra película de Wilder, El crepúsculo de los dioses, con la diferencia de que Joe Gillis estaba muerto y Walter Neff se encuentra malherido. Con esta estructura, característica del cine negro y arriesgada hasta cierto punto (ya que se desvela al espectador información determinante sobre lo que va a ver), Wilder nos muestra la fatalidad de la historia y enfatiza la inevitabilidad del destino al que se va a enfrentar nuestro protagonista. En cierto modo resta importancia a la trama para centrarse en las emociones. PERSONAJES 2 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN La película nos ofrece un conjunto de personajes perfectamente delineados que responden a los perfiles característicos del cine negro: - Walter Neff, nuestro protagonista, se muestra como un hombre inteligente, confiado y con un aire chulesco y seductor. Es un hombre que se implica con sus sentimientos y actúa en consecuencia dejándose llevar. Es por ello que cae rápidamente en las garras de Phyllis, sin apenas oposición ni remordimientos. Arriesga todo por una mujer y por dinero; pero también porque se cree capaz de salir victorioso, sabe cómo hacerlo y quiere medirse con Keyes. Por lo tanto, es un personaje destinado al fatalismo, el perdedor tan característico en el género y en las películas de Billy Wilder. Como tal muestra un cierto arrepentimiento al final de la película, cuando todo está perdido. - Phyllis Dietrichson es la femme fatale. De apariencia frágil y desamparada se muestra como una víctima. Emplea la seducción, tanto física como emocional, como arma de manipulación. Utiliza y destruye a todo el que cae en sus redes y no duda en desprenderse de quien ya no necesita. Esto se refleja claramente en la película. En primer lugar se deshace de la señora Dietrichson para ocupar su lugar atraída por el dinero de su marido. Cuando la fortuna de éste desparece ya no lo necesita y es aquí donde aparece Walter, a quien engatusa como vía para solucionar sus problemas. Pero éste también deja de ser útil y pasa a suponer un problema, por lo que decide matarle y así lo hace finalmente aunque, siendo incapaz de efectuar el disparo definitivo, ella también muere a manos de él. Es éste el único momento en que muestra un poco de humanidad y dice estar ahora enamorada de él; ésta es su redención, pero ya es tarde. También pierde. - Barton Keyes, inteligente, infalible, perspicaz, representa lo que sería el detective privado típico del cine negro (aquí un investigador de seguros). Él es el único bastión de integridad. Dedicado plenamente a su trabajo, la deducción racional, la experiencia y la intuición son sus armas. También aporta el toque humorístico a la película, con unos diálogos sensacionales y una genial ironía. El éxito lo alcanza el detective que es fiel a sus principios y no deja llevarse por sus sentimientos, y aquí es donde falla. Amigo fiel de Walter, no logra descubrirlo ni tampoco salvarlo; asistimos, en cierto modo, a la desmitificación de su personaje. También tienen importancia en la historia otros dos personajes: Lola Dietrichson y, en menor medida, Nino Zachetti. Lola es quien despierta la conciencia de Walter, consiguiendo que se rompa su vínculo con Phyllis, mientras que Nino se perfila como la próxima víctima de la femme fatale. 3 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN TÍTULO El título original es Double Indemnity, que hace referencia a la cláusula que hay en el seguro de vida por la que el beneficiario recibirá una doble indemnización en caso de algunos supuestos extraños que el firmante haya decidido incluir en ella. Ésta es fundamental en el film, puesto que es el motivo del asesinato (o al menos de la forma de realizarlo) y a la vez una de las pistas para sospechar de él. En cambio en España se optó por Perdición, también muy acertado. Éste título refleja muy bien lo que vamos a ver en pantalla y además rezuma esa transcendencia y fatalidad que tan bien le sienta al cine negro. Personalmente, me quedo con éste. SIMBOLISMO Hay dos símbolos que son bastante visibles y destacan en la película: las cerillas que enciende Walter Neff con el pulgar y la pulsera que lleva Phyllis en el tobillo. - Las cerillas: A lo largo de la película se establece un juego metafórico entre Neff y Keyes a través de las cerillas con que el primero enciende los cigarros al segundo. Con este gesto se simboliza la relación de afecto y amistad que hay entre ambos. Alcanza su momento culminante en la escena final de la película, cuando es Keyes quien enciende el cigarro a un moribundo Walter de forma similar a como éste lo hacía, símbolo del aprecio que siente por él. - La pulsera del tobillo: Este elemento acompaña a Phyllis durante toda la película, Walter se fija en ella en su primer encuentro y vuelve a detenerse a observarla tras asesinarla. Se trata de un complemento de seducción, muestra del poderío sexual de Phyllis, de su carácter de mujer fatal. Walter siente una fascinación mórbida hacia la pulsera, fascinación que simboliza el influjo bajo el que se encuentra atrapado. De aquí la importancia de la última mirada hacia el objeto, un breve recuerdo y una despedida. PLANOS, MOVIMIENTOS DE CÁMARA Y FUNDIDOS El mismo Billy Wilder dijo que en sus películas no había grandes movimientos de cámara ni puntos de vista destinados a demostrar que era director de cine. Y esto se muestra en la película; los movimientos de cámara son muy limpios y suaves, prácticamente pasan desapercibidos. La cámara, en la mayoría de los casos, es deudora del encuadre, limitándose a acompañar a la acción de la escena. Peso a ello, destacaría dos movimientos: El primero (27:46 - 28:04) consiste en un encadenamiento de travelling de alejamiento con uno de acercamiento. En la escena se ve a Walter y Phyllis abrazados sentados en un sofá, la cámara comienza a alejarse y, mediante un fundido encadenado, volvemos al presente acercándonos 4 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN lentamente a Walter que prosigue con su confesión. Con este movimiento no solo nos hace cambiar el foco de atención, sino que nos distancia los dos instantes estableciendo un cierto contraste entre ambos. El segundo (31:36 - 31:48) sucede en la presentación de Lola. Se nos muestra un plano de la muchacha, el cual va abriéndose poco a poco hasta que nos deja ver a todos los personajes de la escena. De esta forma centra la atención sobre ella, mostrándonos su importancia en la historia. Wilder también juega con los planos. Mientras que las escenas multitudinarias o con personajes poco importantes están rodadas con planos más largos, en los diálogos entre personajes importantes emplea planos medios y primeros planos, acercándonos de este modo a la psicología y emociones de los personajes. Todas las transiciones se realizan en la película mediante fundidos encadenados. De esta forma se consigue dotar a la narración de fluidez y ritmo. ILUMINACIÓN Como en todo el cine negro, destaca el uso de las luces y las sombras, herencia del expresionismo alemán. Destacan claramente dos elementos, las sombras de las persianas venecianas y la lóbrega iluminación de la casa de los Dietrichson. Las sombras se proyectan sobre la casa y los protagonistas como los barrotes de una celda, imitando sobre Walter el traje de un presidiario y resaltando de esta forma la criminalidad de los personajes. Sobre la iluminación de la casa, Wilder dijo: "Cuando rodamos PERDICIÓN, con la casa de estilo español, ligeramente venida a menos y ligeramente pasada de moda, en la que vive la Stanwyck, quise mostrar un ambiente polvoriento: un matrimonio-prisión del que la mujer quiere huir, aunque sea por medio del asesinato. [...] quería ver polvo en la casa, para hacer visible la atmósfera asfixiante y decadente que reinaba en ella." John Seitz, director de fotografía de la película, probó con distintos métodos, hasta que finalmente consiguieron crear el efecto mediante polvos de plata. ESCENAS SELECCIONADAS Perdición cuenta con algunas escenas muy famosas y ampliamente comentadas; por lo que en lugar de centrarme en ellas, he decidido resaltar determinados elementos que me han llamado la atención. - Créditos iniciales: Un minuto (00:22 - 01:23) es lo que duran los créditos iniciales de Perdición. Durante éstos se ve la silueta de un hombre con muletas que se va acercando a la pantalla acompañado por una punzante y perturbadora partitura extradiegética (obra de 5 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN Miklos Rozsa). Este tiempo le basta a Wilder para crear de manera magistral la atmósfera de fatalidad que impregna la película e introducir al espectador en ella. Créditos iniciales - Phyllis Dietrichson escondida tras la puerta (01:09:06 - 01:09:55): Esta escena es una de las más conocidas. Más allá de su tensión, hay un elemento que llama poderosamente la atención: La puerta se abre hacia fuera. Estamos ante una trampa de Wilder, con la cual rompe el clasicismo. En este sentido recuerda a la escena de John Wayne ante la tumba de su mujer de La legión invencible. Phyllis Dietrichson escondida tras la puerta 6 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN - Interrogatorio al testigo del tren: Durante el interrogatorio Keyes pide al testigo que se siente en una silla que está colocada en el centro de la sala. Tras ello, Neff, que se encontraba tras ella, se desplaza ligeramente creando un fotograma genial (01:47:46). En él vemos al testigo sentado entre ambos, constituyendo al único obstáculo que separa a Keyes de Neff, quien está en claro peligro de ser descubierto y sobre quien se observa la sombra de las persianas venecianas. Interrogatorio al testigo del tren - Primer encuentro de Walter y Phyllis (07:32 - 12:02) versus último encuentro (01:31:07 1:36:50) : Entre estas dos escenas se establece una conexión; con ellas comienza y finaliza el vínculo entre ambos personajes, se abre y se cierra su historia. Destaca especialmente la relación de poder que hay entre ambos en cada una de ella. En la primera es Phyllis quien controla la situación y esto se nos muestra desde el primer momento a través de una diferencia de altura entre ambos personajes, ella se encuentra encima de las escaleras mientras que Walter la mira desde abajo. En cambio, en la segunda escena las tornas han cambiado, ahora es él quien domina la situación, está de pie y ella permanece sentada. 7 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN Primer encuentro entre Phyllis y Walter. Ella en posición dominante. Último encuentro entre Phyllis y Walter- Él en posición dominante. 8 Víctor Julio Sánchez Pollo PERDICIÓN Referencias: - Rentero, Juan Carlos. Billy Wilder. Ediciones JC, 1987. - Wilder, Billy y Karasek, Hellmuth. Nadie es perfecto. Mondadori, 2000. 9