MELOMANÍA En al año 2003 la BBC auspició una película llamada “Heroica: el día que cambió la música para siempre”. Se trata de un notable ejercicio fílmico para recrear un acontecimiento decisivo en la historia de la música occidental: el estreno de la 3ª Sinfonía de Beethoven. La idea era mostrar el poder revolucionario de una obra que rompía con todos los cánones establecidos en el modelo clásico de la sinfonía: extensión, orquestación, tratamiento tímbrico de los instrumentos, desarrollo temático, etc.; pero también buscaba hacer patente que con el maestro de Bonn —que en ese momento experimentaba ya notoriamente los trágicos síntomas de la sordera—, surge un artista distinto: aquel que se halla sujeto sólo a su propia energía creativa. La interpretación musical a cargo la Orquesta Revolucionaria y Romántica dirigida por Sir John Eliot Gardiner, rescata, sin duda alguna, la frescura y el poder sonoro innovador de esta sinfonía cuya dedicatoria perdió Napoleón al proclamarse emperador. Nota: Se puede ver completa en: http://youtu.be/M3PzPKD5ACA BIBLIOFILIA En 1960, Italo Calvino decidió reunir en sólo volumen con el título de Nuestros antepasados (Madrid, Siruela, 2004), tres novelas cortas escritas por él en la década anterior. Se trata de El vizconde demediado, El barón rampante y El caballero inexistente. En ellas el escritor italiano (nacido en Cuba, por cierto), demuestra una soberbia maestría para yuxtaponer la realidad histórica (desde Carlomagno hasta el ilustrado siglo XVIII) con la más pura ficción imaginativa (en muchos sentidos anticipatoria del “realismo mágico”). Los tres relatos —en los que disfrutamos (aún en la traducción española) de un lenguaje que revela una inteligencia deslumbrante, una jubilosa lucidez y un fascinante sentido del humor—, ponen de manifiesto el auténtico poder de encantamiento de la literatura y, por ello, su lectura se vuelve un imperativo categórico para aquellos que todavía creen que el arte no es sólo una moda o un mero entretenimiento. Por si fuera poco, la edición española incluye el dibujo que hizo Piccaso para la portada del original libro italiano. Contacto: Publicación a cargo del Mtro. Fernando Aurelio López Hernández. Escuela Nacional Preparatoria Plantel 9 “Pedro de Alba”, Colegio de Filosofía. Correo electrónico: catedraespecial@gmail.com. Twitter @ercastell Página web: estudiosmedievales.jimdo.com Hoja nueve Boletín informativo de la Cátedra Especial Erasmo Castellanos Quinto “Revaloración de la cultura medieval” Escuela Nacional Preparatoria Plantel 9 “Pedro de Alba” Núm. 4/enero de 2015 ERASMO SONETO Sobre el marfil y el ébano del piano Tus manos, como dos alas en vuelo, Van temblorosas escalando el cielo Hasta perderse en el azul lejano. Enmudece en la hondura el océano Escuchando las notas de consuelo Que bajan cabalísticas al suelo Como llovizna música en verano Y hay un temblor sagrado en torno tuyo Que en la negrura si cesar destella Con la florescencia del cocuyo, Como el nimbo dorado de una estrella, Y al pasar el ensueño peregrino, Brilla en la polvareda del camino.* *Erasmo Castellanos Quinto, Poesía inédita, México, Porrúa, 1962, p. 90 FILOSOFIA MEDIEVALIA ¿Cuál es el status de los conceptos universales? La iglesia oriental y el occidente latino Todavía es frecuente encontrar opiniones que sostienen “la pobreza” de la filosofía medieval debido, en buena medida, a su casi indistinción con la teología. Sin embargo, el llamado problema de los universales ha gozado, casi siempre, de cierta atención seguramente porque las implicaciones de las discusiones medievales han trascendido hasta la modernidad e incluso hasta la filosofía analítica o del lenguaje contemporáneas, y porque en ese periodo fue notable la clara delimitación de posturas frente al mismo, la cuales se han convertido en denominaciones paradigmáticas para abordar el tema: realismo vs nominalismo (en los que no faltan, por supuesto, los extremismos y las ponderaciones). Sin embargo, vale la pena señalar que el origen de la discusión medieval sobre los universales surge a partir de los planteamientos que hiciera Porfirio (el célebre discípulo de Plotino) y luego comentados por Boecio. En efecto, se trataba de hallar respuesta a tres preguntas: 1ª (la más relevante, sin duda) Los géneros y las especies (los universales) ¿son conceptos o son entidades subsistentes?; 2ª Si subsisten ¿son materiales o inmateriales?; 3ª ¿Están o no separados de los objetos sensibles? Las soluciones medievales al problema pueden reseñarse, a grandes rasgos, tal y como propone Mauricio Beuchot de la siguiente manera: Nominalismo: Roscelino, Abelardo, Ockham; Realismo extremo: san Agustín, Escuela de Chartres, san Buenaventura; Realismo moderado: san Alberto Magno; santo Tomás, Duns Escoto. El proceso de diferenciación teológica, doctrinal, ritual y cultural entre el cristianismo ortodoxo y el catolicismo romano va de la mano del que se fue gestando a partir de las vicisitudes de orden político: desde la división del Imperio hasta las conquistas de los pueblos germánicos. En este contexto hay que recordar que en el siglo V, en el concilio de Calcedonia, se consagra la pentarquía patriarcal por la cual Roma, Constantinopla, Antioquia, Alejandría y Jerusalén asumen un rol preponderante en la cristiandad. Ello, sin embargo, no impidió que paulatinamente las dos antiguas capitales políticas del imperio pretendieran destacar sobre las demás y sobre la Iglesia universal. Roma, por considerarse la sede sucesoria de la línea de Pedro y Constantinopla por valorarse a sí misma como baluarte auténtica de la tradición más originaria del cristianismo primitivo, cuyos textos canónicos están escritos en griego. Surge, desde entonces en el ámbito de la cristiandad, una visión que opondrá la “latinidad” a la “romanidad”, el occidente frente oriente: el latín y el griego. Con independencia de que las relaciones entre los dos ámbitos fueron por demás complejas desde el surgimiento de la Iglesia, es importante recordar que antes del siglo XI el Papa romano fue tomado en cuenta como una surte de primus inter pares en diversas ocasiones por los patriarcas orientales y por el mismo emperador bizantino; baste señalar en este sentido el papel fundamental que jugaron los papas romanos en la defensa de la ortodoxia durante las disputas iconoclastas y también en el combate de diversas herejías tales como el monofisismo. Pero las diferencias terminarían por imponerse. Desde el punto de vista doctrinal, teológico, suele decirse que fue crucial para la separación o demarcación entre los dos cristianismos un asunto referente a la Trinidad. Mientras que para Oriente el Espíritu proviene sólo del Padre, en Occidente —desde el siglo VI en la Iglesia española para hacer frente al arrianismo—, en la fórmula del Credo se decía “que proviene del Padre y del Hijo”. Esta aseveración se hizo oficial en la cristiandad latina en el siglo XI, justo en el momento en el que las quejas expresadas por Focio un siglo antes eran nuevo motivo de controversia entre Roma y Constantinopla. Como se sabe el momento culminante de estas crisis fueron las mutuas excomuniones en el año de 1054 entre el delgado papal Humberto y Miguel Cerulario. Sin embargo, la ruptura definitiva sobrevendría hasta 1204, año en el que los cruzados de occidente saquean la ciudad bizantina imperial. ÍCONO