LA PESQUERÍA DEL CALAMAR GIGANTE (Dosidicus gigas) EN EL GOLFO DE CALIFORNIA. RECOMENDACIONES DE INVESTIGACIÓN Y TÁCTICAS DE REGULACIÓN Autores: Susana Martínez-Aguilar 1 , Enrique Morales-Bojórquez1, Juan Gabriel Díaz-Uribe1, Ma. Del Carmen Suárez-Higuera1, Agustín Hernández-Herrera 2 . ISBN 970-9892-01-0 1 Instituto Nacional de la Pesca. Centro Regional de Investigación Pesquera Unidad La Paz, Carretera a Pichilingue Km.1 s/n. CP 23020. La Paz, Baja California Sur, México. 2 Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas. Instituto Politécnico Nacional, Av. I.P.N. s/n, Colonia Palo de Santa Rita. Apartado Postal 592, CP 23000. La Paz, Baja California Sur, México. i DIRECTORIO JAVIER BERNARDO USABIAGA ARROYO Secretario de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación COMISION NACIONAL DE ACUACULTURA Y PESCA INSTITUTO NACIONAL DE LA PESCA Ramón Corral Avila Comisionado Nacional Guillermo Compeán Jiménez Director en Jefe del Instituto Nacional de la Pesca Prisciliano Meléndrez Barrios Director General de Ordenamiento Pesquero y Acuícola Luis Beléndez Moreno Director General de Investigación Pesquera del Pacífico Norte Raúl Villaseñor Talavera Director de Normalización Claudia de la Garza Montaño Directora del Centro Regional de Investigación Pesquera de La Paz, B.C.S. ii PREPARACION DE ESTE DOCUMENTO Este documento fue elaborado en el Centro Regional de Investigación Pesquera de La Paz, Baja California Sur y sometido a revisión y edición en las instalaciones de la CONAPESCA en Mazatlán, Sinaloa. La revisión editorial de este documento se efectuó en la Dirección General de Ordenamiento Pesquero y Acuícola de la CONAPESCA, y estuvo a cargo de Raúl Villaseñor y Omar C. Carrillo Sandoval. Las citas bibliográficas, así como la referencia de los autores en la cita de este documento, se presentan tal y como fueron proporcionadas por los autores. CITA DE ESTE DOCUMENTO Martínez-Aguilar , S., Morales-Bojórquez, E., Díaz-Uribe, J. G., Suárez-Higuera, M. C. y Hernández-Herrera, A., 2004. La Pesquería del Calamar Gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California. Recomendaciones de Investigación y Tácticas de Regulación. Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca, Instituto Nacional de la Pesca, Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación. México. 77 p. ii Contenido PRÓLOGO ...........................................................................................................5 RESUMEN ............................................................................................................6 INTRODUCCIÓN ..................................................................................................7 ANTECEDENTES.................................................................................................9 La pesquería.................................................................................................................... 9 Evaluación de stock .................................................................................................... 12 Biología reproductiva ................................................................................................. 13 ÁREA DE ESTUDIO...........................................................................................14 MATERIAL Y MÉTODOS...................................................................................15 Fuente de datos............................................................................................................ 15 Modelos .......................................................................................................................... 16 Reclutamiento y escape proporcional..................................................................... 16 Cambios del coeficiente de capturabilidad ( q ), en función de la longitud........ 17 Cambios relativos de q con el tiempo ..................................................................... 18 Abundancia de la población ..................................................................................... 19 Ciclo de reproducción ................................................................................................ 19 Definición de grupos de longitud de manto ......................................................... 21 RESULTADOS ...................................................................................................21 Reclutamiento y escape proporcional ................................................................... 22 Coeficiente de capturabilidad ( q )............................................................................ 22 Ciclo de reproducción ................................................................................................ 23 DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES.......................................................................26 iii RECOMENDACIONES DE MANEJO ................................................................32 RECOMENDACIONES DE INVESTIGACIÓN....................................................33 AGRADECIMIENTOS ........................................................................................33 LITERATURA CITADA ......................................................................................35 LISTA DE FIGURAS. .........................................................................................39 FIGURAS............................................................................................................41 TABLAS .............................................................................................................62 iv PRÓLOGO La pesquería de calamar gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California inicia en 1974 y actualmente es capturado en las zonas de Santa Rosalía, B.C.S., Guaymas, Son. y Mazatlán, Sin.. El área de pesca de Santa Rosalía, B.C.S., constituye el 70% del volumen nacional de captura de esta especie en peso fresco. Por esta razón, también tiene la flota ribereña más importante en cuanto al número de licencias que participan de la pesca, con casi 1200 embarcaciones menores distribuidas desde Loreto hasta Santa Rosalía, B.C.S.. Desde el punto de vista económico, el recurso ha representado una importante entrada de divisas a la pesca artesanal; la población de Santa Rosalía, B.C.S. ha reiniciado una recuperación económica por la oferta de empleos directos e indirectos, debido a las altas abundancias del recurso, ya que el principal mercado es de exportación, principalmente hacia Oriente, donde Corea es el consumidor más importante. En cuanto al manejo, la principal dificultad para regular la pesquería radica en los cambios anuales que presenta en abundancia y composición de tallas. La abundancia de estos organismos es variable, pero su distribución cercana a la costa de la península, hace al recurso disponible durante casi todo el año. En esta zona se observan continuamente organismos tanto de tallas (longitud de manto) pequeñas como grandes, debido a la entrada y salida a la zona de pesca de calamares provenientes de diferentes épocas de reproducción. La composición de la estructura de tallas observada en esta zona no ha sido reportada para Guaymas, Son.. Existen indicios de que la zona de pesca de Santa Rosalía es un importante núcleo de reproducción para la especie, diversos cruceros de investigación han colectado información sobre individuos de D. gigas con tallas pequeñas. La producción de calamares de la zona de Santa Rosalía, mantiene la pesquería en el área de Guaymas, Son. durante toda la temporada. Cuando la captura en Guaymas se agota, los barcos camaroneros adaptados a la pesca del calamar gigante viajan a los caladeros de Santa Rosalía, ocasionando algunos conflictos con la flota ribereña de la región. De esta manera, la importancia del recurso calamar gigante (D. gigas) en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., es debido a que existen las condiciones que favorecen su ciclo de vida y a que funciona como centro de dispersión hacia otras zonas del Golfo de California, razón por la cual podría constituir una unidad de manejo independiente de Guaymas, Son. RESUMEN Para el análisis de la pesquería de calamar gigante (Dosidicus gigas) del Golfo de California se realizaron muestreos quincenales en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., durante el periodo comprendido entre Mayo y Octubre del 2002. Se observó la tendencia de la distribución de tallas y la relación peso longitud encontrada en las capturas comerciales fue P = 0.00003 L 2 .9 , con un factor de correlación de 0.94. El intervalo de longitud de manto (LM) de la captura comercial estuvo entre los 30 y 90 cm. Del total de organismos obtenidos de las capturas comerciales el 44% eran machos y el 56% hembras, con una proporción de sexos variable durante el periodo de muestreo. Los resultados de la estimación del reclutamiento mostraron una subestimación, debido a que la captura por unidad de esfuerzo ( CPUE ) exhibió dos picos a lo largo de la temporada. Este comportamiento no se había observado antes y todo indica que la pesquería está sustentada por dos cohortes, por lo que la estimación del reclutamiento requiere de consideraciones para poblaciones con cohortes múltiples. El rendimiento también fue analizado a través de estimaciones quincenales del coeficiente de capturabilidad ( q ) en función de la LM, con el método de proyección de matrices. El patrón promedio de q no muestra una tendencia definida, pero el comportamiento sugiere que la captura en la primera mitad de la temporada de pesca estuvo sustentada por una cohorte. La variación de q en función de LM con el tiempo, fue determinada con la tasa de cambio de la CPUE quincenal respecto al promedio del tiempo total analizado. La tendencia fue muy variable en el periodo de estudio observándose a los calamares de LM más pequeña en el mes de julio. El proceso de maduración sexual de las hembras de calamar gigante, se examinó por métodos histológicos, para validar las fases de madurez gonadal morfocromática. Las muestras fueron obtenidas quincenalmente en el área de Santa Rosalía, B.C.S., durante el periodo comprendido entre Junio del 2001 a Noviembre del 2002. Los distintos tipos de ovocitos observados en el tejido, fueron cuantificados, encontrándose una composición diferente para cada una de las fases morfocromáticas. La proporción ovocitos, se utilizó para determinar estadísticamente las fases de madurez gonadal aplicando un estimador denominado índice de madurez (IM). El IM permitió diferenciar claramente las gónadas reproductivamente inactivas (fases I, II y III.) de las activas (fases IV, V y VI). De acuerdo a los resultados del IM, la mayoría de hembras de Dosidicus gigas son maduras entre los 70 y 75 cm de LM, con dos probables picos de actividad reproductiva durante verano y otoño. Introducción En los últimos años, la abundancia del recurso calamar gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California (Figura 1), se ha incrementado. Caddy y Rodhouse (1998), mencionan que la abundancia de algunos recursos de peces ha sido reducida por sobrepesca y los calamares que son de vida corta y ecológicamente oportunistas, se han incrementado debido a la reducción en la presión por depredación y la debilitada competencia por alimento. La variación en la abundancia de calamares también ha sido explicada por la variabilidad en los parámetros ambientales (Roberts, 1998; Robin y Denis, 1999; Waluda et al., 1999, 2001; Agnew et al, 2000; Sakurai et al, 2000). En el Golfo de California las variaciones interanuales de la captura (Figura 2), han sido relacionadas con las fluctuaciones ambientales, migraciones extensivas del recurso y con la interacción existente entre las pesquerías de calamar y camarón, (MoralesBojórquez et al. 2001d). La información biológica y pesquera de Dosidicus gigas en el Golfo de California es todavía escasa. El problema con mayor atención ha sido la estimación de biomasa del recurso (Hernández-Herrera et al. 1998, Nevárez-Martínez et al. 2000, MoralesBojórquez et al. 2001b). Estas estimaciones se han basado en el modelo de Rosenberg et al. (1990). El modelo asume que la población explotada está compuesta por una cohorte que se agota a través del tiempo (Leslie y Davis 1939, De Lury 1947, Ricker 1975), de tal forma, que resulta relativamente simple evaluar la abundancia poblacional a partir de un estimado del tamaño inicial (reclutamiento). Sin embargo, el valor de la pendiente asociada a la capturabilidad, no permanece constante (Hilborn y Walters 1992), en algunos casos el modelo lineal se cuelga, mostrando una curvatura en lugar de describir una línea (Gould y Pollock 1997, Gould et al. 1997, Morales-Bojórquez y Nevárez-Martínez 2002). En los modelos de extracción sucesiva, las medidas del esfuerzo pesquero y la captura son fundamentales en la estimación del reclutamiento y la capturabilidad, ya que con ellos se define la estrategia de explotación del recurso, calculando el escape proporcional constante, que se asume es necesario para mantener a la población dentro de límites que permitan su continua recuperación de acuerdo con los patrones de explotación (Rosenberg et al., 1990). 7 En recientes análisis, los resultados indican la presencia de más de una cohorte en la población (Morales-Bojórquez et al. 2001d). Esta situación ha creado dudas sobre la dinámica del recurso y la forma de evaluarlo, cambiando la perspectiva de administración del calamar, ya que se debe estimar con precisión la magnitud de cada cohorte así como su contribución a la reproducción, lo cual influye sobre la tasa de reemplazo de la población. El porcentaje más alto de la captura total en peso fresco obtenida en el Golfo de California es aportado por la pesca realizada en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., seguido por Guaymas, Son, y Mazatlán, Sin.. Desde el punto de vista económico, el recurso ha representado una importante entrada de divisas a la pesca artesanal; poblaciones como Santa Rosalía, B.C.S. han reiniciado una recuperación económica por la oferta de empleos directos e indirectos, debido a las altas abundancias del recurso, ya que el principal mercado es de exportación, principalmente hacia Oriente, donde Corea es el consumidor más importante. Santa Rosalía concentra la más importante flota ribereña, con casi las 1,200 embarcaciones menores (pangas) con motor fuera de borda, distribuidas desde Loreto hasta Santa Rosalía, B.C.S. En cuanto al manejo, la principal dificultad para regular la pesquería radica en los cambios anuales que presenta en abundancia y estructura de tallas. En Santa Rosalía se observan continuamente organismos de diferentes tallas (longitud de manto), lo que supone la existencia de distintas cohortes. Esta composición en la estructura de longitud de manto no ha sido reportado para Guaymas, Sonora. Por otro lado, la zona costera de Baja California Sur es considerada como área de desove, debido a que se han registrado altas tasas de apareamiento, cuantificadas por la presencia de espermatóforos adheridos a la membrana oral de las hembras (Sato, 1975, 1976; Markaida y Sosa-Nishizaki, 2001; Tafur et al. 2001). La importancia que tiene la zona de Santa Rosalía, en cuanto a volumen de captura y su probable contribución al reclutamiento, así como, las fuertes implicaciones de manejo que tiene la existencia de más de una cohorte en la pesquería de calamar gigante, fue la base para evaluar la abundancia del calamar gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California, analizando las variaciones del coeficiente de capturabilidad y el desarrollo gonádico. 8 ANTECEDENTES La pesquería En el Golfo de California, los primeros estudios sobre calamar gigante se realizaron al principio de la década de los 80’s por Ehrhardt et al. (1983) y Klett (1996). Se intentó explicar la dinámica de la población a partir de datos de captura y esfuerzo, cruceros de investigación e información biológica básica. Sin embrago, el recurso desapareció repentinamente y la hipótesis que pareció más razonable es que el calentamiento de la corriente de California (El Niño) fue la causa (Klett 1996). El recurso no fue estudiado de nuevo hasta que en 1995 la pesquería resurgió (Morales-Bojórquez et al. 1997, 2001c). El recurso ha mostrado variaciones importantes en disponibilidad, observando en la temporada de 1997-1998 una nueva caída que se asoció con la presencia de otro evento El Niño (Morales-Bojórquez et al. 2001c). El esquema de manejo se ha basado en mantener una biomasa del 40% al final de cada temporada de pesca, la cual es calculada en el momento mismo que el reclutamiento es observado durante los meses de mayo y junio (Morales-Bojórquez et al. 1997, 2001b, 2001d; Hernández-Herrera et al. 1998). Así las tácticas de manejo del recurso son controlar el esfuerzo de pesca a través de la asignación de licencias o permisos de pesca (Nevárez-Martínez y Morales-Bojórquez 1997). Adicionalmente, cuando no se obtiene información veraz sobre el tamaño del reclutamiento a partir de datos de captura y esfuerzo, se utiliza un sistema de cuotas de captura que permiten simultáneamente obtener información de la pesquería y plantear recomendaciones de administración. El Instituto Nacional de la Pesca, basa sus estimaciones y recomendaciones sobre análisis de datos de captura y esfuerzo, así como de la información obtenida por cruceros de investigación (Nevárez-Martínez et al. 2000). Las medidas de regulación establecidas a través del Diario Oficial de la Federación, publicado el 15 de Marzo del 2004; segunda sección), menciona el uso de talla mínima, 9 que no es útil en esta pesquería. Incluso, el mismo documento no hace referencia a talla alguna. A diferencia de Sonora (en donde ha habido un ambiente de cooperación reflejado no sólo en la aceptación de las propuestas de manejo, sino en el apoyo económico de los industriales y Gobierno del Estado de Sonora a la investigación pesquera), en la parte de Santa Rosalía, B.C.S. no existen comités, sectores gubernamentales o grupos de productores que en colaboración con el Instituto Nacional de la Pesca conformen grupos de trabajo que permitan analizar, discutir o sugerir las bases de manejo del recurso. Aunque existe buena disposición hacia compartir sus bases de datos tanto de captura como sus principales indicadores económicos. La elevada abundancia del recurso durante 1996 creó expectativas sobre la pesquería (Hernández-Herrera et al. 1998), ya que representó una alternativa rentable que se complementó bien con la pesquería del camarón del Pacífico Mexicano, prácticamente cuando los rendimientos del camarón disminuyen hacia los meses de diciembre y enero, los barcos camaroneros se adaptan con sistemas de pesca para calamar gigante, y a su vez, cuando la temporada de camarón del Pacífico Mexicano inicia, entonces la presión de pesca sobre el calamar disminuye (Morales-Bojórquez et al. 2001d). Las flotas que explotan el recurso son de dos tipos: La flota de pangas caracterizada por embarcaciones con motor fuera de borda de 40 a 75 caballos de fuerza, y dos pescadores por panga. La actividad de la flota en la zona de Santa Rosalía. B.C.S. inicia a partir de las 16:00 horas y puede concluir hasta las 2:00 horas del día siguiente, sin embargo el tiempo de pesca efectivo de cada embarcación varía entre 4 y 5 horas, con rendimientos promedios de 400 o 500 kilos de manto en los meses de mayor abundancia (primavera). Los sistemas de luz de las pangas son variables, usan desde focos de automóvil o tipo “árbol de Navidad” hasta focos caseros de pocos watss. La flota de barcos camaroneros adaptados a la pesca de calamar gigante. A estas embarcaciones se les acoplan carretes manuales de poteras, o bien, la pesca es 10 manual con solo una línea y su potera correspondiente. También se les adaptan sistemas de iluminación variables. Pueden ser linternas que tienen cuatro lámparas de 100 wats y 100 volts, con luminosidad de 6,840 lúmenes por linterna, o bien lámparas de 2,000 wats y 200 volts, con luminosidad de 30,000 lúmenes. Morales-Bojórquez et al. 1997, sugieren que las zonas de Santa Rosalía, B.C.S. y Guaymas, Son., explotan “un stock” localizado en la parte central del Golfo de California, el cual está conformado por una cohorte o generación dominante. Los individuos de esa cohorte también han mostrado un movimiento entre ambas costas, lo cual beneficia la pesca en las dos localidades. También se ha observado que el recurso se concentra desde el centro del Golfo de California hasta Santa Rosalía, B.C.S. lo que promueve el desplazamiento de los barcos de Sonora hacia las zonas de pesca de Santa Rosalía, B.C.S. La pesquería tiene una variabilidad en las capturas que hasta el momento no se ha podido explicar de manera concluyente. Al parecer no hay evidencias de sobreexplotación y la disminución de 1998-1999 se asoció con la presencia de un calentamiento de la corriente de California, donde incluso el recurso mostró un patrón de movimiento que lo llevó de la parte centro norte del Golfo de California hacia el Pacífico (Bahía Magdalena, BCS). En la temporada 1999-2000 se observaron problemas de precio en el recurso, ya que se pagaba barato el kilo de calamar, así los patrones de captura a través del tiempo siguieron las tendencias del mercado internacional del calamar. En algunos años, aunque la abundancia fue alta, la captura permaneció baja en comparación con el periodo de mayor captura 160,000 t (1996), lo que coincidió con la caída en el precio del recurso en 1999 para Santa Rosalía, B.C.S. y de Sonora en el 2000. Desde el punto de vista de la evaluación del stock explotado, la pesquería cuenta con modelos explícitos para la estimación de biomasa, los cuales se apoyan en modelos de extracción sucesiva. Las predicciones de captura pueden hacerse puesto que la escala de tiempo usada son periodos semanales o quincenales. El recurso capturado a lo largo de la temporada depende del reclutamiento a la pesquería y de la eficiencia de las flotas correspondientes (capturabilidad). Así, la evaluación del recurso depende de la veracidad de los registros de captura y esfuerzo, los cuales no son de fácil acceso en la 11 zona de Santa Rosalía, B.C.S., debido principalmente a la existencia de varios sitios de desembarco del recurso. Evaluación de stock La mayoría de las especies de calamar tienen un ciclo de vida anual y su abundancia presenta grandes variaciones de un año al siguiente. Para evaluar la población, se asume que la pesquería es sostenida por una sola cohorte, proveniente de un pulso máximo de reclutamiento. El número de animales sobrevivientes al final del año afectan la pesquería del año siguiente sólo a través de la cantidad de los productos del desove. La evaluación se orienta a determinar el número de reclutas al inicio de la temporada de pesca, la tasa de explotación durante la temporada y el número de organismos reproductores que sobreviven hasta el final de la temporada de pesca. El modelo generalmente utilizado es el análisis de reducción de stock de Delury (Rosenberg et al., 1990), N t = No − At , descrito en términos de la captura por unidad de esfuerzo, CPUE , por: CPUE = Ct = qN o − qAt Et Donde, N t es la abundancia en número de individuos en el tiempo t , Ct es la captura en número de individuos, Et es el esfuerzo pesquero, At es la captura acumulada desde el inicio de la estación de pesca al tiempo t , No es la abundancia inicial en número de individuos (reclutamiento) al inicio de la temporada de pesca y q , es el coeficiente de capturabilidad. Esta relación supone proporcionalidad entre la captura por unidad de esfuerzo y la abundancia del recurso y que la capturabilidad es constante a través del tiempo. Con esta función, Rosenberg et al. (1990), plantearon el escape proporcional de reproductores como estrategia de manejo del calamar Illex argentinus en las islas Falkland, con un nivel permisible de K = 40% y desde entonces el escape proporcional también se ha considerado en otras pesquerías de calamar en el mundo (Beddington et al., 1990, Hernández-Herrera et al. 1998). El escape proporcional es definido como K = e − F , donde F es la tasa instantánea de mortalidad por pesca definida por F = q ⋅ E . 12 La principal limitación observada para la utilización del método de Delury, es cuando la CPUE , se incrementa al final de la estación incrementando también la abundancia estimada del stock, esto descarta, el supuesto de que cada temporada de pesca representa una cohorte separada. Además del incremento de CPUE , se ha observado disminución de la longitud media de las capturas y picos de la CPUE durante la temporada de pesca, que son evidencias del ingreso de más de una cohorte a la pesquería (Agnew et al. 1998, Hatfield and Des Clers, 1998). Para probar la existencia de más de una cohorte, Agnew et al. (1998) utilizó los valores del coeficiente de capturabilidad y señala que grupos de valores de q , evaluados con el método de Delury, corresponden a cohortes individuales. Para la pesquería de calamar gigante (Dosidicus gigas) del Golfo de California, Morales-Bojórquez et al. (2001d), evaluaron el coeficiente de capturabilidad en función de la longitud del manto, para una temporada de pesca a través del método determinístico de capturabilidad (MDC ) , (Arreguín-Sánchez, 1996, Martínez-Aguilar, et al. 1997) observando grupos de valores de q en diferentes intervalos de longitud de manto considerando que dichos grupos corresponden a distintas cohortes. Los trabajos de Agnew et al. y Morales-Bojórquez et al. op cit., aportan información muy importante, que tiene implicaciones fuertes en la evaluación y manejo de la pesquería de calamar, no obstante, los valores de q , siguen manteniendo su consideración de constancia a través del tiempo, dentro de la temporada de pesca. Biología reproductiva El proceso de maduración en Dosidicus gigas ha sido estudiado en sus dos áreas principales de distribución: en el Pacífico Sur (Nesis 1970; Tafur y Rabí 1997; Tafur et al. 2001) y en el Pacífico Norte incluyendo el Golfo de California (Michel et al. 1986; Markaida y Sosa-Nishisaki 2000). Nesis (1970), define la primera escala de madurez específica para Dosidicus gigas y propone la presencia de tres grupos en función de la distribución de los fotóforos como respuesta al aislamiento geográfico entre el grupo de Sudamérica y los grupos de Centroamérica y México. Sato (1976) sugiere que las costas de la península de Baja California pueden funcionar como áreas de desove debido a las altas tasas de apareamiento que encontró en las hembras de calamar 13 gigante. Michel et al. (1986) describen por primera vez las fases de desarrollo de los gametos del calamar gigante, sin embargo no describen los cambios en la composición de gametos conforme la gónada madura. Según Ehrhardt et al. (1983, 1986) en una temporada, el ciclo reproductivo de Dosidicus gigas, no está fijo, varía con las condiciones oceanográficas. En 1980 encontraron hembras maduras a lo largo de todo el año con tres picos de reproducción, el más importante en Diciembre/Enero en el Noreste del Golfo de California (cerca de Guaymas) y el talud continental al Oeste de la península de Baja California. Este pico genera los individuos que se reclutan a la pesquería en Marzo/Abril y sostienen la pesquería en Septiembre. Los otros dos picos ocurren en Mayo/Junio y en Septiembre cerca de Santa Rosalía, observando reclutamientos a la pesquería en Septiembre y Enero/Febrero respectivamente. En contraste, Markaida y Sosa-Nishisaki (2000) no encontraron ningún pico reproductivo entre 1995-1997 y argumentan que la época de reproducción podría extenderse todo el año. Además, plantean que Dosidicus gigas utiliza la región central del Golfo de California como área de alimentación y no de reproducción, ya que la proporción de hembras maduras con respecto a los machos maduros es muy baja a lo largo de todo el año. Los análisis de madurez gonadal y ciclo reproductivo en Dosidicus gigas se han basado primordialmente en las características morfocromáticas de las gónadas y para ello se utilizan distintas escalas de madurez, sin que estas se hayan contrastado con los cambios que ocurren a nivel de tejido. La disparidad de escalas es probablemente una de las razones por las que no ha sido fácil definir los períodos reproductivos del calamar (Markaida y Sosa-Nishisaki 2000). ÁREA DE ESTUDIO La localidad de Santa Rosalía, B.C.S. se localiza en los 27o 20’ LN y los 112o 16’ de LO (Figura 1). Se ubica a 552.5 Km al Norte de La Paz, B.C.S., por la carretera transpeninsular con una elevación sobre el nivel medio del mar de 40 m, presenta un 14 clima BW(h’) que corresponde al tipo muy seco, muy cálido y cálido con una temperatura media anual de 22.6o C. MATERIAL Y MÉTODOS Fuente de datos. Se realizaron diez muestreos en la captura comercial de la flota artesanal ubicada en Santa Rosalía, B.C.S., con una periodicidad quincenal correspondientes al periodo del 6 de mayo al 22 de octubre del 2002. En cada muestra se procesaron aproximadamente cien calamares, registrando para cada organismo: peso total del cuerpo, longitud y peso del manto. De una pequeña fracción de la muestra (∼30%) se determinó el sexo y estadio de madurez sexual, con base en escala reportada por Lipinski (1995), (Tabla 1). Las gónadas fueron fijadas en solución de Davidson (Bell y Lighter 1988) para ser transportadas y almacenadas hasta su procesamiento histológico. Además, se colectaron estatolitos, para análisis de edad, picos para el estudio de relaciones tróficas y estómagos para identificar hábitos alimenticios. Así mismo, se extrajeron parásitos de los ovarios para su posterior identificación. El estatolito y los parásitos se sumergieron en alcohol al 70%, y el estómago y pico fueron congelados para su preservación. La captura total por clase de longitud de manto (LM), en número de calamares por cada 2 cm de clase de LM, fue obtenida de la combinación de las estadísticas diarias de captura (en kilogramos), agrupada en periodos quincenales y la estructura de LM, obtenida de los muestreos quincenales de las capturas comerciales. Los registros del esfuerzo pesquero (noches de pesca), fueron proporcionados por la Subdelegación de pesca de La Paz, Baja California Sur. La captura total por clase de LM y el esfuerzo de pesca se usaron para estimar el índice de abundancia relativo de la pesquería, en este caso la CPUE . 15 Modelos Reclutamiento y escape proporcional Se utilizó el modelo de extracción propuesto por Rosenberg et al. (1990) y aplicado por Morales-Bojórquez et al. (1997) en la pesquería de calamar gigante. El modelo tiene la siguiente forma: t −1 CPUE t = qN 0 e − (t − 0.5 )M − q ∑ C i e − (t −1)M i =0 donde q representa el coeficiente de capturabilidad, N0 el reclutamiento en número de individuos, M la mortalidad natural (constante), Ci la captura acumulada en número de individuos para cada unidad de tiempo t. Para este análisis M = 0.202 por quincena (Hernández-Herrera et al.,1998), que fue estimado con el método Silliman descrito por Ricker (1975) y Morales-Bojórquez et al. (1997). Dado que la información de esfuerzo estuvo incompleta se simularon valores de esfuerzo, asumiendo una distribución lognormal del mismo (Hilborn y Walters, 1992). Con este enfoque, se analizó una hipótesis de error de observación (Hilborn y Walters, 1992; Polacheck et al., 1993). El error de observación fue simulado 2,000 veces de acuerdo con el siguiente estimador: f sim = f i e ⎛ σ δ2 ⎜δ − ⎜ 2 ⎝ ⎞ ⎟ ⎟ ⎠ Así el valor estimado de CPUE que se utilizó para fines de parametrizar el modelo fue el valor promedio de los datos simulados (Hilborn y Walters, 1992). Finalmente la CPUE fue estimada con el dato observado de captura (en número de individuos) y el esfuerzo simulado, de acuerdo con: 16 Ci fie ⎛ σ δ2 ⎜δ − ⎜ 2 ⎝ ⎞ ⎟ ⎟ ⎠ = qN 0 e − (t − 0.5 )M t −1 − q ∑ C i e − (t −1)M i =0 Cambios del coeficiente de capturabilidad ( q ), en función de la longitud Con base en el análisis de la captura por unidad de esfuerzo por clase de longitud de manto se realizaron estimaciones de q con el método determinístico de capturabilidad (MDC), de la forma propuesta por Arreguín-Sánchez (1996). El modelo estima la capturabilidad por clase de longitud ( l ), con base en una matriz de transición descrita como: N l , t +1 = A ⋅ N l , t donde N l , t es el vector del tamaño del stock en número al tiempo t (quincenas). Nl,t y Nl ,t +1 son representados por la ( CPUE ). A es la matriz de transición expresada por: A = G ⋅ S donde G es la matriz de probabilidad de crecimiento y S es la matriz de supervivencia. Cada uno de los elementos de S son obtenidos de Si ,t = exp − Z l ,t = exp− ( M + q ⋅ Et ) donde Z i,t es la mortalidad total y M es la mortalidad natural para el i th grupo de longitud al tiempo t . La matriz de crecimiento, G , es definida suponiendo que los organismos crecen de acuerdo al modelo de vonBertalanffy, las probabilidades son calculadas con el método descrito por Shepherd (1987), (Morales-Bojórquez et al. 2001d). N l , t +1 se resuelve con el algoritmo de mínimos cuadrados utilizando dos rutinas de búsqueda directa no lineal. La primera calcula valores aproximados de A . Los valores de A son aceptados cuando las ~ diferencias al cuadrado del valor observado de N l , t +1 y el calculado N l , t +1 alcanzan su valor mínimo. Como G es conocida y A = G ⋅ S , la segunda rutina calcula valores aproximados de S y sus valores son aceptados cuando las diferencias al cuadrado de ~ A y su nueva estimación A , son mínimas. Como los valores de conocidos qL , t fue despejada de Si , t = exp − ( M + q ⋅ Et ) . S , M y E son Finalmente se estimó un valor promedio de q por clase de longitud qL , t . 17 Los parámetros de crecimiento del modelo de von Bertalanffy ( k = 0.033 /quincena L∞ = 87 cm) fueron tomados de Hernández-Herrera (1998). La mortalidad natural estimada con el método de Silliman (Ricker 1975), fue considerada constante con un valor de, M = 0.2 por quincena. Cambios relativos de q con el tiempo Los cambios relativos de la capturabilidad en función de la longitud del manto en el tiempo, son expresados por la relación de la tasa anual de CPUE por clase de longitud de la quincena al tiempo t , CPUE L ,t , respecto al promedio de la temporada analizada CPUE L , y . De acuerdo con Arreguín-Sánchez (1996), la relación en su forma lineal es expresada como: Ln [ CPUE L, t ] = α L, t + β L,t ⋅ L CPUE L, y Donde: β L, t , representa las diferencias relativas en el patrón de cambio de q con la longitud de la quincena t respecto a CPUE L , y ; α L, t representa las diferencias relativas en la abundancia de organismos más pequeños presentes en la captura de la quincena t , respecto a CPUE L , y . El signo de la pendiente β L,t y de la ordenada al origen α L,t indica los grupos de longitud que son más abundantes. Entonces si β L,t es positivo y α L,t negativo, los organismos grandes son más abundantes que los pequeños y viceversa. 18 Abundancia de la población La mortalidad por pesca ( F ), fue calculada de la expresión general F = q ⋅ E (Ricker 1975, Gulland 1983). Para las estimaciones de abundancia ( N t ) en número de calamares, F fue determinada con la misma ecuación pero expresada para cada clase de LM y para cada quincena ( t ). FL ,t = q L ,t ⋅ Et La N t , se obtuvo de la siguiente expresión general: ⎛ FL ,t + M N L ,t = ⎜ ⎜ F ⋅ 1 − exp −( FL .t + M ) ⎝ L ,t ( ) ⎞ ⎟ ⋅ C L ,t ⎟ ⎠ Donde: C L ,t representa la captura en número de individuos por clase de LM, para cada tiempo t correspondiente. El peso promedio por clase de LM obtenido de la relación pesolongitud se utilizó para transformar la abundancia en número de calamares a biomasa en toneladas. Ciclo de reproducción En el laboratorio, de cada gónada se extrajo una muestra de tejido de 1 cc aproximadamente. La muestra se deshidrató en alcohol etílico, se transparentó con Hemo-De y se incluyó en parafina de punto de fusión alto. Para obtener las laminillas se hicieron cortes transversales de 7 μm de espesor con un micrótomo de rotación manual y fueron teñidas con la técnica hematoxilina-eosina (H&E). La lectura de cada laminilla consistió en seleccionar un campo visual de 0.5 cm2 para contar los ovocitos en cada una de sus fases de desarrollo. Con base en las características morfológicas y del epitelio folicular que rodea a los ovocitos, se definieron sus fases de desarrollo. Las diferencias entre los estadios de madurez macroscópica asignados en el campo a partir 19 de las propiedades morfocromáticas de las gónadas, fueron evaluadas con la ecuación descrita por Sauer y Lipinski (1990): 5 IM = ∑ (n s =0 s × s) 5 ∑n s =0 s donde: IM es el índice de madurez, s es un número discreto entre 0 y 5 asignado a cada nivel de desarrollo del ovocito y ns es el número de ovocitos contados en el estadio s. Se aplicó un análisis de varianza de una vía y pruebas de Tukey para comparación múltiple de factores. La hipótesis planteada para esta prueba fue: si los estadios de madurez macroscópica son un buen indicador del nivel de desarrollo de los ovocitos en las gónadas, entonces, cada estadio macroscópico tendrá un IM significativamente distinto al siguiente estadio. Además, el IM se utilizó para evaluar los cambios en el nivel de maduración a través del tiempo. La talla de primera madurez (Lm ) en la cual el 50% de las hembras son sexualmente maduras, se obtuvo del análisis de la proporción de hembras maduras por intervalo de LM. Para ello, se estimó la frecuencia acumulada de hembras maduras en cada intervalo de talla, y se ajustó por el método de mínimos cuadrados a una curva logística de la siguiente forma: Pi = 1 1 + e ( a −bLi ) donde: Pi es la frecuencia relativa acumulada de hembras maduras en el intervalo de longitud i, Li es la marca de clase del intervalo i en términos de LM, a y b son las constantes de regresión y cumplen con la condición a/b = Lm. 20 Definición de grupos de longitud de manto La división de la longitud de los calamares en grupos, fue usada como marco de referencia, en la descripción de los diferentes procesos que involucra el estudio de este recurso. Por esta razón, se estableció la división de la estructura de longitud del manto, para machos y hembras mezclados en tres grupos: pequeños, medianos y grandes, definiendo los intervalos de talla de13-34cm, 36-60 cm y >62-120 cm de LM, para cada grupo respectivamente. Nigmatullin et al. (2001) proporcionaron la base para la definición de los grupos. Los autores dividieron la estructura de longitud de manto por separado de machos y hembras adultos de esta especie. Los machos pequeños los definen entre los 13 y 26 cm de LM, los medianos entre los 24 y 42 cm de LM y los grandes los >40-50 cm de LM. Para hembras pequeñas los organismos de 14-34 cm de LM, las medianas de 28-60 cm de LM y las grandes entre los 55 y 65 a los 100 y 120 cm de LM. En este estudio la división fue el resultado de la integración de la estructura de longitud de manto de machos y hembras, con intervalos de longitud del manto de los grupos sin sobrelapamiento. RESULTADOS El intervalo de LM en las muestras de las capturas comerciales estuvo entre los 30 cm y los 90 cm de LM, (Figura 3). La estructura mostró una gran variabilidad en su composición, observándose alternadamente presencia de organismos pequeños y grandes. En el mes de Octubre se registraron los calamares de longitud de manto más pequeña. Para extrapolar la estructura de longitud de las muestras a la captura total (Figura 4) y obtener la captura por unidad de esfuerzo por clase de LM (CPUE), se calculó la relación peso longitud: P = 0.00003 ⋅ L2.91 con un factor de correlación de 0.94, (Figura 5). De las muestras de las capturas comerciales el 44% eran machos y 56% hembras con una proporción de sexos variable durante el periodo en estudio. La proporción macho:hembra se presenta en la Tabla 2. En el mes de septiembre se observó la mayor proporción de hembras por cada macho. 21 Reclutamiento y escape proporcional Los resultados mostraron una subestimación del reclutamiento 2,302,284 calamares con error estándar ( ES ) de 1,118,363 (P< .375). El valor de la capturabilidad fue de 0.00015 con ES = 0.00014 (P< .375) y r2 = 0.21 (Figura 6). La tendencia de la captura por unidad de esfuerzo a través del tiempo mostró una caída a partir de la quincena 4 (Figura 7), esto implicó que el aparente pico de reclutamiento se observara en Julio, es decir, dos meses después del tiempo esperado en el cual el reclutamiento sucede. Además se observó una mezcla de distintas tallas a lo largo de toda la temporada, indicando el flujo continuo de organismos hacia la estructura de la población (Figura 3). La variabilidad en tallas observada en el periodo de julio a octubre del 2002 es un comportamiento muy extraño, al parecer los organismos pequeños (entre 30 y 36 cm de longitud de manto) aparecen hasta octubre, mientras que en julio su presencia es escasa, aunque suficiente para tener impacto sobre la CPUE . Sin embargo la presencia de organismos grandes (mayores a 66 cm de LM ) que aparecieron en agosto, puede ser que incorporaran una alta biomasa a la población que es difícil de medir. Los cambios repentinos en la CPUE no son una tendencia común en recursos con una sola cohorte o generación anual. La subestimación del reclutamiento y la falta de ajuste del modelo, solo mostraron que la serie de tiempo tiene al menos dos picos de reclutamiento (Julio y Octubre). Coeficiente de capturabilidad ( q ). La variación del valor promedio del coeficiente de capturabilidad por clase de LM se presenta en la Figura 8. El promedio general fue de 0.0014, (d.s.=0.003) y los valores mínimo y máximo observados fueron 0.0003 y 0.014 respectivamente. La capturabilidad muestra el valor más alto a los 72 cm de LM. La desviación estándar es alta debido a las variaciones del coeficiente de capturabilidad con la LM y con el tiempo. Las tendencias en los cambios relativos quincenales de la tasa de captura en función de LM, respecto al promedio periodo analizado (6 de Mayo al 26 de Julio), presentaron una gran variabilidad (Figura 9). En los meses de mayo y julio se capturaron calamares de intervalos de longitud mediana (36-60 cm de LM), con predominio en la primera 22 quincena del mes de Mayo y la segunda de Julio. Con excepción de las quincenas antes mencionadas, la presencia de calamares de LM mediana es escasa. En Julio la abundancia de calamares pequeños y grandes en la captura fue alta, observándose las longitudes más pequeñas (30-36 cm de LM) en la primera quincena. La Tabla 3 presenta las constantes del modelo lineal ajustado a las tendencias de los cambios relativos observados de la CPUE por clase de LM y el coeficiente de correlación. La pendiente del modelo β , indica el cambio relativo de capturabilidad en función de la LM y α , la abundancia de los organismos más pequeños presentes en la captura. Los valores duplicados de las constantes, con distinto signo, en la misma quincena, indica la presencia simultánea de calamares pequeños y grandes en las capturas. El índice de capturabilidad β , en función de la cantidad de pesca mostró una tendencia descendente con una disminución aproximada del esfuerzo pesquero del 35% entre el 29 de Mayo y 26 de Julio (Figura 10). Los valores negativos de β en la figura indican que la captura estuvo sustentada principalmente por calamares de longitudes pequeñas. La abundancia fue calculada con base en las estimaciones de q y el esfuerzo pesquero ejercido en cada quincena, el valor total de biomasa para el periodo analizado fue de 31, 244 toneladas (Figura 11). Ciclo de reproducción El análisis histológico se hizo con las bases de datos obtenidas de Junio a Noviembre del 2001 y de Mayo a Octubre del 2002. Durante estos período se colectaron un total de 428 organismos, de los cuales el 71% fueron hembras, el 27% machos y el 2% indiferenciados (Tabla 4). En 2001 el muestreo se dirigió casi exclusivamente a las hembras, mientras que en el 2002 se colectaron tanto hembras como machos. A finales de la temporada 2001, la actividad ciclónica no permitió que la pesca de calamar se realizara con regularidad, por lo que no hay registros en la segunda quincena de agosto y el mes de septiembre. 23 Con los cortes histológicos se identificaron cinco tipos de ovocitos en el tejido que representan diferentes estadios de desarrollo, desde inmaduros hasta ovocitos a punto de ser expulsados (Tabla 5). Los primeros dos estadios describieron no consecutivas, en las que el ovocito no está disponible para la actividad reproductiva. Para el cálculo del IM a estos dos estadios se les asignó S= 1 y 2 respectivamente. Los otros tres estadios representaron etapas de maduración consecutivas en las que se consideró que el ovocito estaba en preparación o disponible para la actividad reproductiva. A estos estadios se les asignaron valores de S= 3, 4 y 5 respectivamente. En términos generales, las categorías de maduración establecidas de acuerdo a las propiedades morfocromáticas de las gónadas estuvieron correlacionadas con las características histológicas del propio órgano. Se pudo observar que la composición de los distintos tipos de ovocitos en la gónada cambia conforme el organismo madura sexualmente (Tabla 6). En las gónadas de juveniles (Fase I), solamente se observaron ovocitos 1, sin embargo, un 7% de los organismos clasificados como juveniles fueron organismos que ya habían desovado o se encontraban en reposo, y por lo tanto no eran propiamente juveniles. En la fase II, los ovocitos 2 y 3 empiezan a ser más abundantes (~10% cada uno), sin embargo los ovocitos 1 siguen predominando (~75%). En la fase III, los ovocitos 1 disminuyen al 60% y el resto se encuentran madurando, principalmente en estadios 3 y 4. Cuando las gónadas alcanzan la fase IV de madurez, alrededor del 90% de los ovocitos se han desarrollado hasta los estadios 3 y 4 en una proporción 0.4:1. En la fase V, se observó la mayor abundancia de ovocitos 5 con un 18% de las células contadas. El resto de los ovocitos se distribuyó homogéneamente en comparación con los otros estadios de madurez. En la fase VI, se observaron dos casos, uno en donde el tejido presentó restos de ovocitos maduros y tejido conjuntivo en abundancia y el otro en el que más del 80 % de los ovocitos estuvieron en el estadio 1 ó 3. Aunque estos cambios también se reflejaron en el IM (Figura 13) y en el análisis de varianza cuyo valor de F fue significativo, la prueba de comparaciones múltiples de Tukey solo detectó una diferencia significativa entre las fases III y IV (Tabla 7). Es decir, la composición de ovocitos en las gónadas fue tan variable que la escala de madurez macroscópica solo permitió identificar con confianza a los organismos que se encontraron en fase de reproducción activa de la inactiva. Por esta razón, el análisis temporal de la maduración 24 y la determinación de la LM de primera madurez se trabajó con las lecturas histológicas del tejido de la gónada. Durante 2001, el promedio más alto del IM de las hembras se presentó en la primera quincena de octubre, con un valor significativamente >2. En esa quincena más del 90% de los ovocitos estaban desarrollados entre los tipos 3 y 5 con una predominancia de los ovocitos 4 (~62%). En la segunda quincena de Junio y primera de Julio el índice promedio es igual a 2, sin embargo fueron los periodos de mayor dispersión del IM . En estas quincenas la predominancia de ovocitos 1 (~60-70%) está compensada por la presencia de ovocitos 4 y 5 (~20-25%). Lo anterior indica una transición entre un periodo reproductivamente activo a uno inactivo. La primera quincena de agosto, el IM es similar al de las dos quincenas anteriores, sin embargo la composición de ovocitos es diferente, en la que predominan los ovocitos 2. En 2002, se observaron dos picos en los que el IM fue significativamente >2 (Figura 13). En la segunda quincena de mayo los ovocitos en el tejido fueron del 3 al 5 de estadio de desarrollo comprendieron el 57% , en la que los de tipo 3 fueron los predominantes (38%). En la segunda quincena de agosto los ovocitos 3 a 5 comprendieron el 73% de los ovocitos en el tejido, de los cuales, los ovocitos 4 fueron los más abundantes (31%). En los otros meses el IM fue <2 debido a la predominancia de ovocitos 1 y a la ausencia propiamente de ovocitos 5. Las tallas de las hembras en los muestreos oscilaron entre 33 y 91 cm de LM, observándose la mayor frecuencia entre 50 y 80 cm (Figura 14a). Más del 90% de las hembras adultas fueron mayores de 50 cm de LM, principalmente entre 75 y 80 cm de LM. La hembra madura más pequeña que se registro fue de 33 cm de LM. El análisis de frecuencia acumulada indica que Dosidicus gigas alcanza la talla de primera madurez a los 72 cm de LM, (Figura 14b). 25 DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES La captura comercial de calamar gigante (Dosidicus gigas) en el área de Santa Rosalía, B.C.S. mostró gran variabilidad, con el pico más alto en el mes de Julio. En estudios previos (Roberts 1998. Robin y Denis, 1999; Waluda et al., 1999 y 2001; Agnew et al, 2000; Sakurai et al, 2000, Morales-Bojórquez et al. 2001d), se han planteado diferentes factores que influyen en la variación de la abundancia, sin embargo, en la variación de la captura comercial en el Golfo de California, influyen también factores tales como los desacuerdos entre la industria y los pescadores en el precio por kilo y la capacidad de procesamiento que tienen las plantas, que en ocasiones, cuando el recurso es muy abundante, limitan la cantidad de captura que reciben, provocando problemas en la evaluación del recurso pues esta depende primordialmente de los datos de captura y esfuerzo. El calamar gigante es una especie migratoria y las variaciones de disponibilidad del recurso dependen de este comportamiento, por lo que es importante describir el patrón migratorio dentro del Golfo de California. Sin embargo, este tipo de estudios se hacen con métodos de marcaje y recaptura, que resultan muy costosos y a la fecha no existen reportes al respecto. En las muestras obtenidas la proporción de sexos fue variable durante el periodo de estudio, con una dominancia de hembras de 9:1 en el mes de Septiembre. Markaida y Sosa-Nishizaki (2001), mencionan que la proporción sexual es casi igual durante la estación de desove y en el pico de desove, las hembras maduras dominan entre un 70% y 80% del total. En este trabajo la proporción sexual observada fue considerada como un elemento auxiliar en la determinación del pico de desove. En cuanto a la relación peso-longitud, debido a las variaciones que se presentan en la estructura de peso y longitud de manto, es conveniente hacer el estimado con una periodicidad anual. La relación peso-longitud en este estudio es una estimación anual. Los muestreos quincenales del recurso calamar proporcionan información sobre la estructura de longitud del manto y su variación en el tiempo y permiten observar el periodo de reclutamiento y hacer el seguimiento de la cohorte o cohortes presentes en la población. La estrategia de manejo establecida para esta especie se basa en un 26 modelo que asume la existencia de una sola cohorte anual, lo que hace importante, el monitoreo de la estructura de longitud del manto en periodos cortos de tiempo y la determinación del ciclo reproductivo. En este trabajo la estructura de longitud de manto registrada, presentó una gran variabilidad, observándose en las frecuencias de longitud, modas alternantes de organismos pequeños y grandes, que no permitieron, por este medio, identificar la cohorte o cohortes presentes durante el periodo de estudio. El patrón de cambio observado en los picos de abundancia relativa de la CPUE , sugieren la presencia de dos cohortes de calamar en la temporada 2002. La parametrización del modelo de extracción sucesiva no fue estadísticamente exitosa, ya que el valor de N0 estimado en julio fue insuficiente para soportar el incremento en CPUE debido a la presencia de la cohorte de octubre (Figura 3), además del patrón irregular observado de los organismos grandes dentro de la zona de estudio. MoralesBojórquez et al. (2001b) registraron la presencia de tres cohortes de calamar gigante en el Golfo de California, sin embargo, para la zona de Guaymas la explotación del recurso se sustenta en una cohorte principal (Hernández-Herrera et al. 1998). Los datos mostraron la presencia de organismos medianos de mayo a julio, mientras que en el periodo de agosto a octubre dominaron los organismos de talla pequeña, con una mezcla de baja abundancia para tallas medianas y grandes (Figura 3). Los cambios en la CPUE de la pesquería del calamar gigante parecen tener relación con los cambios en la composición de tallas de la captura, pero no con la abundancia. La pesquería muestra signos de hiperestabilidad, definida por la concentración de esfuerzo en zonas donde el calamar es más abundante, de tal forma que la CPUE se mantiene mientras que la abundancia declina (Hilborn y Walters 1992), sin embargo, los cambios repentinos de abundancia por la entrada o salida de una nueva cohorte, pueden provocar hiperdepleción, es decir, que la CPUE decline más rápido que la abundancia (Hilborn y Walters 1992). La dinámica del recurso no permite por ahora, conocer con precisión qué fenómeno se está presentando, pero el tamaño del reclutamiento y el tamaño de la población a diferentes tiempos es posible evaluarlos a través de cruceros de investigación y otros métodos alternos de análisis de CPUE , como el método determinístico de capturabilidad ( MDC ) que se aplicó en este estudio. 27 Los cambios repentinos en la estructura de la población puede tener relación con cambios en las tasa de mortalidad y de la capturabilidad, el comportamiento de la flota depende de la disponibilidad, de mercado y precio, y esta variación tiene su impacto sobre la CPUE comercial. Al margen de esta observación, la población de calamar que se pesca en Santa Rosalía parece tener dos cohortes que son explotadas, comportamiento que no había sido observado y que dificulta la estimación de los parámetros del modelo. La posibilidad de tener dos cohortes sugiere éxito en la supervivencia, aunque cabe la posibilidad de que sea el resultado de la mezcla de stocks diferentes, la cual es una hipótesis a comprobar. En cualquier caso, esto puede implicar que la población sea más grande de lo que las estimaciones mostraron. Aunque la estructura de tallas no permitió identificar claramente el número de cohortes presentes en esta temporada de pesca, la presencia de picos de q indican el ingreso de más de una cohorte a la pesquería. Sin embargo el grupo más conspicuo de valores de q estuvo entre los 54 y 82 cm de LM con el valor más alto en los 72 cm de LM, lo cual indico la presencia de una cohorte principal en la porción de tiempo de la temporada de pesca analizada con el MDC. Basson et al. 1996 y Agnew et al. (1998) señalaron que diferentes grupos del coeficiente de capturabilidad indican dos o más cohortes en la pesquería. Con el propósito de comprobar si el comportamiento observado en cuanto a estructura de LM y coeficiente de capturabilidad en la temporada 2002, era un patrón repetido, se analizó la temporada 2001 de la misma forma que la del 2002 (Figura 15). Además, se determinó la estructura de LM total para cada una de las temporadas y se evalúo q por clase de LM de la temporada 2001 (Figura 16). En ambos casos q mostró una gran variabilidad respecto a la LM. No obstante, la tendencia general observada para los organismos pequeños a medianos es que la capturabilidad decrece conforme se incrementa la LM, y en los calamares medianos a grandes la capturabilidad se incrementa conforme se incrementa la LM. El cambio en la tendencia está precisamente en los organismos de LM mediana, los cuales son escasos en la estructura de la captura comercial y son precisamente las tallas en donde las hembras empiezan a madurar aunque no se trata propiamente de la talla crítica o talla de primera madurez, que corresponde al 50% de hembras maduras. En la evaluación de calamares, la 28 suposición general es que la capturabilidad es constante para una estación de pesca determinada, sin embargo, dado que se pescan durante gran parte de su ciclo de vida y el comportamiento cambia conforme crece de juvenil a adulto era de esperarse encontrar cambios en capturabilidad entre organismos de tallas pequeñas y grandes, pero el flujo de calamares hacia adentro o fuera del área produce una gran variabilidad en los valores de q . En el área de Santa Rosalía este comportamiento es diferente a lo que hasta ahora se conoce, y seguramente está relacionado con la dinámica del recurso. Esto merece más atención por las fuertes implicaciones que tiene el manejo del recurso, ya que esta zona es la que mayor volumen aporta a la captura total. Los cambios relativos de la capturabilidad en función de la LM, con el tiempo presentaron una gran variabilidad en su tendencia. En los gráficos, los valores negativos denotan cantidades bajas de calamares en las capturas de la LM correspondiente, y los positivos cantidades altas. La variación en la tendencia se debe a la presencia alternada, en la captura, de calamares de tallas pequeñas (13-34 cm de LM) y grandes (62-120 cm de LM). Con excepción de la primera quincena de Mayo y la segunda de Julio , es notoria la ausencia o baja presencia de calamares de LM medianas (36-60 cm de LM). Markaida y Sosa-Nishizaki (2001) en su análisis de distribución por LM, sexo y estadio de madurez, mencionan que la escasez de calamares de tallas medianas, puede ser efecto de la selectividad de la potera, de la segregación diferencial de calamares por LM, o por una dominancia en la población de calamares de LM grande. Nosotros consideramos que son necesarios estudios específicos para determinar la razón de la ausencia de este grupo de intervalos de LM en las capturas. En el gráfico de β en función del esfuerzo pesquero (Figura 10), se observó que la captura, durante el tiempo analizado, está sustentada principalmente de tallas pequeñas, con una disminución del esfuerzo pesquero conforme se incrementa el tiempo. La disminución del esfuerzo puede estar asociado a la presencia de calamares grandes, ya que existe una preferencia por calamares de tallas pequeñas en las plantas procesadoras. La escasez de datos de esfuerzo limitó el análisis de la variación de q respecto a la LM, así como, el seguimiento de sus cambios relativos en función del tiempo y del esfuerzo 29 pesquero. No obstante, los resultados permiten concluir que el coeficiente de capturabilidad varía con la talla y con el tiempo. La presencia de más de una cohorte en la pesquería de calamar produce una mezcla en la estructura de tallas y considerando el tamaño y peso de especie Dosidicus gigas, esto provocó que la captura en número de calamares no reflejara la captura total en peso, aún cuando la transformación se hizo con el peso promedio correspondiente a cada intervalo de LM. Esto no pasaría de existir sólo una cohorte en la pesquería. En cuanto a madurez gonádica, de las diversas escalas de madurez descritas para calamares (Juanicó 1983) varias han sido utilizadas para Dosidicus gigas (Michel et al. 1986; Ehrhardt et al. 1986; Tafur y Rabí 1997). Sin embargo ninguna de ellas ha sido validada histológicamente. La escala de madurez utilizada en este trabajo fue validada para Loligo vulgaris (Cephalopoda: Liliginidae) (Sauer y Lipinski 1990) Sin embargo, esta misma escala solo es parcialmente válida para Dosidicus gigas, ya que de los seis niveles de madurez sólo se pudieron distinguir dos grupos: reproductivamente activos e inactivos. identificaron dos grupos, los cuales fueron separados en dos grupos: reproductivamente activos e inactivos. La reproducción es un proceso continuo y bien definido, pero la escala de madurez es en realidad un punto de referencia arbitrario. Dependiendo de los objetivos del análisis, se puede elegir una escala de dos niveles (maduros e inmaduros) o una escala de varios niveles (varias etapas inmaduras, varias etapas maduras) (Jaunicó 1983). Aunque una escala multinivel proporciona información más fina del proceso reproductivo, requiere también de propiedades morfocromáticas definidas con más precisión y fácilmente identificables. De no cumplirse esta condición la probabilidad de traslapo entre los distintos niveles aumenta considerablemente. Dado que la escala empleada en este estudio es una de las que tiene más niveles de maduración, es probable que el uso de una escala con menor número de niveles se correlacione mejor con los cambios histológicos de la gónada. Este cambio debe considerar que para analizar el ciclo reproductivo, es necesario segregar a los organismos maduros de los que ya han desovado, mientras que para el análisis de la talla de maduración es necesario distinguir a los juveniles de los adultos que están en reposo. 30 Aunque existen huecos de información en la serie de tiempo analizada, los resultados obtenidos del seguimiento de los estadios de maduración en función del desarrollo los ovocitos fueron consistentes con los reportes de otros autores. Ehrhardt et al. (1983) identificaron tres picos reproductivos en 1980: 1) Diciembre-Enero, basado en la presencia de hembras maduras; 2) Mayo-Junio, basado en la presencia de hembras desovadas y 3) Septiembre, basado en la presencia de hembras maduras. Ramírez y Klett (1985) definen también un pico en Mayo-Junio durante 1981 y una predominancia de hembras maduras en Agosto-Septiembre. Estos picos mantienen cierta correspondencia con los valores altos del IM encontrados en mayo y agosto del 2002. Con respecto a 2001, el período de transición descrito para junio y julio hacen suponer que debió haber un pico reproductivo en mayo, lo cual coincide con los estudios previos y el 2002. Sin embargo, el pico observado en octubre de 2001, dado el hueco de información en agosto y septiembre, no es fácil de interpretar. Bien puede representar un período reproductivo prolongado, si el calamar empezó su temporada en agostoseptiembre, o bien puede representar un retraso en el período reproductivo. Considerando que hasta antes de la década de los 80s, los calamares mayores de 40 cm LM no habían sido reconocidos en el hemisferio norte (Markaida 2001), la frecuencia de tallas registrada en este estudio demuestra que la pesquería de calamar en el Golfo de California se sostiene por un intervalo amplio de tallas. Sin embargo, la talla de primera madurez estimada en 72 cm de LM, implica que el 60% de las hembras capturadas son juveniles. Durante 1996, Markaida y Sosa-Nishisaki, encontraron que la mayor parte de las hembras capturadas en Santa. Rosalía maduraban en los 74 cm de LM (Markaida y Sosa-Nishisaki 2001). La constancia de la talla de primera madurez en un período de 5 años puede ser reflejo de estabilidad en la población, sin embargo sería recomendable evaluar de manera más precisa el impacto que la captura de juveniles puede tener en la dinámica del stock. 31 RECOMENDACIONES DE MANEJO 1.-Sería favorable para el manejo del recurso, que el permiso de pesca se autorice por panga o embarcación, esto permitiría tener un mejor control del esfuerzo pesquero y la vigilancia seria mas eficiente, pues cada panga traería su documentación. 2.-Realizar un sistema de libretas de campo en los sitios pesqueros. Esta libreta puede ser solicitada a los permisionarios o pescadores cada vez que entreguen los avisos de arribo y mientras se procesa la información darles otra y así irlas rotando con una periodicidad preferentemente semanal o quincenal. Generalmente, en cada sitio los permisionarios anotan en un cuaderno la captura en peso que descarga cada pescador por día de pesca para después pagarles. Los registros en el cuaderno, hechos por el encargado del sitio pesquero, proporcionan información de captura y de esfuerzo que son esenciales para la evaluación de la población de calamar y en consecuencia para el manejo. 3.-Mantener la dimensión actual del esfuerzo pesquero, es decir, no incrementar el número de permisos de pesca hasta que se tengan resultados del sistema de libretas de campo. Con esta medida, la variabilidad en la dimensión del esfuerzo se mantendría dentro de un intervalo que sería más fácil de medir. Sostener el esfuerzo pesquero no afectaría social y económicamente la región, pues cuando la abundancia del recurso ha sido alta, la captura se ve limitada por la capacidad de las plantas procesadoras de calamar. El sistema de libretas de campo aplicado al calamar gigante (Dosidicus gigas) en el área de Santa Rosalía, B.C.S. sería una prueba para medir la captura y el esfuerzo pesquero y de funcionar podría aplicarse a otras pesquerías artesanales en las que este tipo de información es difícil de obtener. 3.-El proyecto del sistema de libretas de campo podría iniciarse en el área de Santa Rosalía, B.C.S. por el personal del proyecto calamar del Centro Regional de Investigación Pesquera, La Paz, B.C.S., quienes proporcionarían la información obtenida a la oficina de Administración de pesquerías de la subdelegación estatal de la SAGARPA. Para hacer esto posible, la solicitud de la libreta a los permisionarios, tendría que ser un requisito oficial para renovar los permisos de pesca y hacerse a través de la autoridad correspondiente con el apoyo de la oficina de pesca, donde se reciben los avisos de arribo. RECOMENDACIONES DE INVESTIGACIÓN Realizar estudios bio-económicos, puesto que, en la variación de la captura influyen factores tales como, el precio del producto y la capacidad de procesamiento del recurso en las plantas procesadoras. Esto produce problemas en la evaluación de la pesquería y en consecuencia en el manejo. Ejecutar estudios para describir los movimientos migratorios de la especie, dentro del Golfo de California, pues de esto depende la disponibilidad del recurso a la pesquería. Efectuar por lo menos, otro ciclo de análisis histológico, que incluya la época de invierno, para completar o corroborar las fases de madurez identificadas, y establecer una escala de madurez gonádica particular para el calamar gigante. Continuar con el monitoreo de la pesquería de calamar gigante (Dosidicus gigas), en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., pues los cambios repentinos en la CPUE no son una tendencia común en recursos de una sola cohorte o generación anual y la alta variación observada en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., no había sido reportada. Esto tiene impacto en las medidas de administración del recurso y es probable que se necesite implementar medidas de manejo propias para esta zona. AGRADECIMIENTOS Los autores agradecen a la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA), Dirección General de Ordenamiento Pesquero y Acuícola, por el financiamiento para llevar a cabo este estudio. A las Plantas procesadoras de calamar, por la información y el apoyo brindado durante los muestreos, especialmente a sus gerentes: Ing. Regulo 33 López, C.P. Miguel Tito Cota y C.P. Etelvina Carvajal. A la Subdelegación de Pesca de la SAGARPA por la información brindada, especialmente al Biól. José Hernández Lizardi, Jjefe del Departamento de Administración de Pesquerías. Al personal de campo: Raúl Zamarrón Daniels, Leonardo Méndez López, Luis Arturo Robles Vázquez y Armando Hernández López. 34 LITERATURA CITADA Agnew, D.J., R. Baranowsky, J.R. Beddington, S. Des Clers, C.P. Nolangneew. 1998. Approaches to assessing stocks of Loligo gahi around the Falkland Island. Fish. Res. 35,155-169. Agnew, D.J., S. Hill, J.R. Beddington. 2000. Predicting recruitment strength of annual squid stock: Loligo gahi around the Falkland Islands. Can. J. Fish. Aquat. Sci. 57, 24792487. Arreguín-Sánchez, F. 1996. Catchability a key parameter for fish stocks assessment. Rev. Fish Biol. Fish. 6, 221-242. 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Estimaciones quincenales promedio del coeficiente de capturabilidad en función de la longitud de manto para el periodo comprendido entre el 6 de Mayo al 26 Julio del 2002. Figura 9. Cambios relativos quincenales de la tasa de captura en función de la longitud de manto, respecto al promedio del periodo analizado (6 de mayo al 26 de Julio). Figura 10. Diferencias relativas quincenales de capturabilidad ( β t ) en función del esfuerzo pesquero (número de viajes). Figura 11. Estimaciones de abundancia en número de calamares y abundancia en toneladas. Figura 12. Índice de madurez estimado en cada fase de madurez gonádica. Cada barra representa el valor promedio y su intervalo al 95% de confianza. La línea horizontal representa el valor promedio estimado para el total de los calamares analizados. Figura 13. Composición de ovocitos (izquierda) e Índice de Madurez quincenal (derecha). Ovocitos 1; Ovocitos 2; Ovocitos 3; Ovocitos 4; Ovocitos 5. Las barras representan el promedio, el intervalo de confianza y el intervalo máximo y mínimo de los índices de madurez estimados en cada quincena. Figura 14. (a) Proporción de organismos maduros por clase longitud de manto. Las barras negras representan el total de organismos y las grises el número de organismos maduros.(b) Frecuencia acumulada de organismos maduros. Se muestra la longitud de manto de primera madurez. Figura 15. Estimaciones quincenales promedio del coeficiente de capturabilidad en función de la longitud de manto para el periodo comprendido entre el 9 de Mayo a 19 de Julio del 2001. Figura 16. Estimaciones anuales promedio del coeficiente de capturabilidad en función de la longitud de manto para la temporada 2001. N t : 9 de Mayo a 19 de Julio del 2001 y N t +1 : 6 de Mayo al 26 Julio del 2002. Figura 17. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Primer estadio: ovocito inmaduro o primario. Figura 18. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Segundo estadio: reposo o postdesove, ovocito primario cuboidal. Figura 19. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Tercer estadio: madurando, epitelio invadiendo el ovocito. Figura 20. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Cuarto estadio: maduro, desplazamiento del epitelio folicular. Figura 21. Estadio microscópico del desarrollo de los ovocitos. Quinto estadio: ovocito listo para ser liberado. 40 FIGURAS o 32 o 31 MÉXICO o 30 o 29 Guaymas o 28 Santa Rosalía o 27 o 26 Océano Pacífico Golfo de California o 25 o 24 o 23 o 116 o 115 o 114 o 113 o 112 o 111 o 110 o 109 o 108 o 107 o 106 Figura 1. 41 Captura (miles de toneladas) 160 140 Total 120 Baja Cal. Sur. 100 80 60 40 20 0 Tiem po (años ) Figura 2. 42 Frecuencia (%) Mayo-6 25 20 15 10 5 0 Agosto-7 25 20 15 10 5 0 30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 30 36 42 48 54 60 66 72 78 Frecuencia (%) Mayo-29 25 20 15 10 5 0 Agosto-30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 30 36 42 48 54 60 66 72 Frecuencia (%) Junio-12 25 20 15 10 5 0 78 84 90 Septiembre-12 20 15 10 5 ` 0 30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 Octubre-8 Julio-2 Frecuencia (%) 90 25 20 15 10 5 0 30 20 25 20 15 10 5 0 15 10 5 0 30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 30 36 42 48 54 60 66 72 Julio-26 Frecuencia (%) 84 84 90 Octubre-22 25 20 20 15 15 78 10 10 5 5 0 0 30 36 42 48 54 60 66 72 Longitud de manto (cm) 78 84 90 30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 Longitud de manto (cm) Figura 3. 43 Captura (numero de calamares) x 10 3 500 400 300 200 100 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 Tiempo (quincenas) Figura 4. 44 25 15 CPUE Peso de manto (Kg) 20 10 5 0 400 350 300 250 200 150 100 50 0 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 22 26 30 34 38 42 46 Tiempo 50 54 58 62 66 70 74 78 82 86 90 (quincenas) Longitud de manto (cm). Figura 5. 45 300 y = -0.0001x + 343.36 2 R = 0.2155 CPUE 250 200 150 100 50 0 600,000 800,000 1,000,000 1,200,000 1,400,000 Captura acumulada Figura 6. 46 400 CPUE 300 200 100 0 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 Tiempo (quincenas) Figura 7. 47 0.003 Capturabilidad 0.0025 0.002 0.0015 0.001 0.0005 0 28 32 36 40 44 48 52 56 60 64 68 72 76 80 84 88 Longitud de manto (cm) Figura 8. 48 6_May 2_Jul 4 2 3 1.5 1 1 0 -130 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96 -2 Ln(U/Uprom) Ln(U/Uprom) 2 0.5 0 -0.530 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96 -1 -3 -1.5 -4 -2 -5 -2.5 26_Jul 2 3 1 2 0 -130 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96 -2 -3 Ln(U/Uprom) Ln(U/Uprom) 20_May 1 0 -130 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96 -2 -4 -3 -5 -4 Longitud de manto (cm) 12_Jun Ln(U/Uprom) 3 2 1 0 30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 96 -1 Longitud de manto (cm) Figura 9. 49 0.1 29_May 2_Jul 0.05 26_Jul 0 βt 0 -0.05 500 1000 1500 2000 2500 12_Jun 2_Jul 26_Jul -0.1 6_May -0.15 Esfuerzo pesquero Figura 10. 50 2,500,000 22,000 Bt 2,000,000 17,000 1,500,000 12,000 1,000,000 7,000 500,000 2,000 0 Bt (toneladas) Nt (numero de calmares) Nt -3,000 1 2 3 4 Tiempo (quincenas) Figura 11. 51 Indice de Madurez (IM) 5 4 3 2 1 0 I II III IV V VI Madurez Macroscópica Figura 12 52 5 0.8 4 Índice de Madurez Frecuencia Relativa 1.0 0.6 0.4 0.2 0.0 MAY 2001 3 2 1 0 JUN JUL AGO SEP OCT NOV MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV 5 1.0 4 0.8 Índice de Madurez Frecuencia Relativa 2002 0.6 0.4 0.2 0.0 MAY 3 2 1 0 JUN JUL AGO SEP OCT NOV MAY JUN JUL AGO SEP OCT NOV Figura 13 53 20 Frecuencia (%) 16 12 8 4 0 33 43 53 63 73 83 93 Longitud del Manto (cm) Hembras Maduras (%Acum) 1.0 0.8 0.6 0.4 0.2 72 0.0 0 10 20 30 40 50 60 70 80 90 100 Longitud del Manto (cm) Figura 14 54 0.0025 Capturabilidad 0.002 0.0015 0.001 0.0005 0 28 32 36 40 44 48 52 56 60 64 68 72 76 80 84 88 Longitud de manto (cm) Figura 15 55 0.00016 Capturabilidad 0.00014 0.00012 0.0001 0.00008 0.00006 0.00004 0.00002 0 30 36 42 48 54 60 66 72 78 84 90 Longitud de manto (cm) Figura 16 56 Figura 17 57 Figura 18 58 Figura 19 59 Figura 20 60 Figura 21 61 TABLAS Tabla 1. Descripción morfológica de las fases de maduración gonádica usada en calamares (Sauer y Lipinski 1990). Fase de Maduración I Juvenil II Reposo III Preparatorio IV Madurando V Maduro VI Desovado Características morfológicas Glándulas nidamentales como bandas transparentes. El resto de las estructuras no son visibles a simple vista Conducto ovárico visible. El ovario es homogéneo Conducto ovárico extendido. Huevos inmaduros visibles Glándulas nidamentales grandes. Se observan algunos huevos maduros (amarillos) en el ovario. No existen huevos maduros en el oviducto Huevos maduros en el oviducto. Hay secreción en las glándulas nidamentales Indefinido 62 Tabla 2. Proporción macho:hembra, registrado en los muestreos masivos de la capturas comerciales de calamar gigante (Dosidicus gigas) en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., durante el periodo comprendido entre Mayo y Octubre del 2002. Quincena Mayo-6 Mayo-29 Junio-12 Julio-2 Julio-26 Agosto-7 Agosto-30 Septiembre-26 Octubre-8 Octubre-22 Macho-Hembra 1:1.2 1:3.5 1:1 1:1 3:1 1:1.2 1:1.2 1:9 1:1 1:3.5 Tabla 3. Índice de los cambios relativos de capturabilidad en función de la longitud de manto ( β ) y el índice de la abundancia de los calamares más pequeños presentes en la captura ( α ), para el periodo de tiempo analizado. R (factor de correlación). Quincena Mayo-6 Mayo-29 Junio-12 Julio-2 Julio-26 -0.1267 0.0715 -0.0533 -0.0515 0.0407 -0.0923 -0.0371 6.7285 -6.197 3.7225 2.6294 -2.0446 4.7932 -2.0548 R 0.7 0.6 0.8 0.9 0.9 0.9 0.6 63 Tabla 4. Número de machos y hembras registrados en lo muestreos biológicos de la capturas comerciales de calamar gigante (Dosidicus gigas) en la zona de Santa Rosalía, B.C.S., durante el periodo comprendido entre junio y noviembre del 2001 y de mayo a noviembre del 2002. QNA (quincena). Número de calamares Mes Quincena Indiferenciados Hembras JUN/2001 1 0 11 2 2 10 JUL 1 0 16 2 0 16 0 6 AGO 1 2 SEP 1 2 OCT 1 0 18 2 NOV 1 0 20 2 0 20 MAY/2002 1 0 17 2 0 36 JUN 1 0 21 2 JUL 1 0 11 2 0 9 AGO 1 3 16 2 0 22 SEP 1 0 21 2 2 17 OCT 1 1 3 2 2 14 TOTAL 19 10 304 Machos 0 7 1 0 0 0 0 0 9 10 25 16 20 6 7 9 0 2 2 114 64 Tabla 5. Descripción de las etapas de desarrollo de los ovocitos de Dosidicus gigas. Estadio del Ovocito Nivel de Desarrollo (S) Inmaduro 1 Reposo o Postdesove Madurando Maduro A punto de expulsión 2 3 4 5 Características celulares Ovocito con núcleo esférico con uno o varios nucleolos, rodeados por un citoplasma eosinófilo. Se observa una capa delgada de células germinales alrededor del ovocito. (Figura 17) Solo se observan restos de ovocitos maduros. Tejido conjuntivo abundante y desorganizado, lo cual dificulta el conteo de ovocitos (Figura 18). Ovocitos de mayor tamaño con nucleolos menos aparentes. Proliferan las células germinales que se adhieren al ovocito y junto con el epitelio folicular, comienzan a invadir el ovocito formando interdigitaciones. Su morfología cambia de cuadrada a cúbica (Figura 19). El núcleo migra hacia uno de los polos del ovocito. Las interdigitaciones se retiran hacia la periferia y su morfología cambia de cúbica a columnar (Figura 20). El núcleo y los nucleolos disminuyen de talla hasta desaparecer. Las células foliculares se retraen y forman una estructura laminar alrededor del óvulo. Hay formación de vitelo y se incrementa el citoplasma eosinófilo (Figura 21). 65 Tabla 6. Composición de ovocitos y promedio del índice de madures (IM) en cada fase de madurez gonádica. Tamaño de la muestra (N). Madurez Nivel de desarrollo de los ovocitos Gonadal 1 93.0 I 2 3 4 5 IM N 7.0 - - - 1.070 43 II 74.3 12.1 8.8 4.6 0.2 1.443 91 III 61.8 - 28.6 9.5 0.2 1.863 35 IV 1.9 5.9 25.3 62.3 4.6 3.618 17 V 17.7 - 30.9 33.0 18.4 3.345 39 33.3 - 48.0 12.5 6.1 2.581 3 - 100.0 - - - 2.000 3 VI 66 Tabla 7. Resultados del análisis de varianza del promedio del índice de madurez (IM), y de la prueba de Tukey para comparación múltiple de factores que se aplicó después de que el análisis de varianza resultó significativo. El nivel de confianza (1-α) de referencia es del 95%. Pruebas altamente significativas con P ≤ 0.01 (***) y no significativas (NS), (P > 0.05). Suma de Cuadrado Fuente Cuadrados g.l. Medio F Prob. IM 180.777 5 36.155 49.783 6.99x10-30 *** Error 163.408 225 0.726 Total 344.185 230 Prueba de Tukey para diferentes tamaños de muestra Etapas comparadas P I-II 0.3232 NS II-III 0.3103 NS III-IV 2.03x10-5 *** IV-V 0.9370 NS V-VI 0.2653 NS 67 “La pesquería del calamar gigante (Dosidicus gigas) en el Golfo de California. Recomendaciones de Investigación y Tácticas de Regulación “ se terminó de imprimir en Diciembre del 2004 en Talleres Gráficos de México. Se tiraron 500 ejemplares. 68