La Peregrinación de Despedida En el año 632 DC, el Profeta (sws) se preparó para efectuar la peregrinación (Hayy) y anunció a la gente que se prepararan para acompañarlo en el rito. Se dice que entre 70000 y 100000 personas efectuaron el peregrinaje. En esa ocasión el Profeta (sws) dio un sermón que es conocido como el “Discurso de Despedida” y enuncia lo siguiente: “¡Pueblo! Escuchadme atentamente, porque no sé, si después de este año, he de encontrarme con vosotros nuevamente.” “¡Pueblo! ¡Escuchadme! Por cierto que vuestra vida y propiedad son tan sagradas e inviolables como este día sagrado, en este mes sagrado, en esta ciudad sagrada. Todo lo referente al paganismo queda completamente abolido. Abolida también está la venganza de sangre de los días del paganismo. El primer reclamo nuestro de venganza de sangre que anulo es la del hijo de Rabi´ah bin Al-Hariz. Y la usura del periodo preislámico queda abolida, y la primera usura en ser abolida es la de Abbas Ibn Abdul Muttalib, todo queda abolido.” “Sean temerosos de Allah en vuestro trato con los mujeres. Las habéis tomado como esposas concertando un pacto con Allah, y habéis mantenido relación sexual con ellas en nombre de Allah. Vosotros tenéis derechos sobre ellas: no deben permitir el ingreso a sus hogares de quienes os disgusten. Si esto cometieran, regañadla, pero sin severidad. Ellas tienen derechos sobre vosotros: debéis proveerles comida y vestimenta adecuada. Dejo con vosotros el Libro de Allah, si se aferran a él, no se desviarán. Serán preguntados sobre mí (en el Día de la Resurrección), ¿Qué dirán?”. Respondieron: “Atestiguaremos que has comunicado (el mensaje), cumplido (la misión de Profeta) y has dado sabios (y sinceros) consejos.” El (narrador) dijo: Entonces (el Profeta) levantó su dedo índice hacia el cielo y señalándolo a la gente (dijo): “Oh Allah, se testigo, Oh Allah se testigo, Oh Allah se testigo”. “El tiempo ha tomado la forma original que tuvo cuando Allah creó los cielos y la tierra. El año consiste de doce meses, cuatro de los cuales son sagrados, y de éstos (cuatro) tres son sucesivos: Dhul-Qa´dah, Dhul-Hiyyah y Muharram, y el cuarto Rayab, que se encuentra (entre los meses de) Yumada y Sha´ban.” Luego preguntó: “¿Qué mes es éste?” Respondieron: “Allah y Su Mensajero saben mejor”. El Profeta permaneció en silencioso por tanto tiempo que pensamos que lo llamaría con otro nombre. Entonces dijo:” ¿No es el día del sacrificio (An-Nahr)? Respondimos: “Sí.”. Dijo: 1 Nuestros Artículos www.cciar.com “Así, vuestra vida, propiedades y honor son tan sagrados como la santidad de este día, este pueblo y este mes. Por cierto que han de reunirse con vuestro Señor, y Él les preguntará sobre vuestras acciones. ¡Tenéd cuidado! No seáis como aquellos que se desviaron como (incrédulos) después de mí, cortándose los cuellos unos a otros. Es obligatorio sobre todos los que hoy están presentes comunicar este mensaje a aquellos que están ausentes. Puede que aquellos a quienes les comuniquen el mensaje lo comprendan mejor que los presentes.” El Profeta completó la peregrinación enseñando a la gente sus ritos y procedimientos. El Profeta regresó luego a Al-Madinah, consciente de que se acercaba el final de su misión, y por ello pasaba la mayoría del tiempo alabando y glorificando a Allah (swt) quien le había concedido éxito tras éxito durante veintitrés años de Profecía. Las personas continuaban aceptando el Islam en multitudes. Durante esos días el Profeta (sws) envió emisarios a los reyes y jefe de estados invitándolos al Islam. El Profeta comenzó a sufrir una enfermedad de la cual murió cuatro meses después de regresar de la Peregrinación. Signos de la Inminente Muerte del Profeta La muerte del Mensajero de Allah (sws) fue una catástrofe para los musulmanes. Cuando comenzaron las punzadas de la muerte, la fuerza del Profeta comenzó a disminuir, Aisha, su esposa, lo abrazaba, y cuando su hermano Abdur Rahman ingresó con un Miswak (cepillo dental natural) Aisha observó que el Profeta lo miraba, así que le preguntó si lo deseaba y él afirmó con la cabeza. Ella lo tomó, y luego de suavizarlo, se lo entregó. Una escudilla con agua se mantenía cerca del Profeta en el cual él sumergía sus manos y se lavaba el rostro diciendo: “No existe otro Dios excepto Allah. Por cierto éstas son las punzadas de la muerte.” Levantaba sus manos o indicaba con su dedo índice hacia el cielo. Su voz estaba debilitada, pero Aisha podía escucharlo hablar al levantar sus ojos y repetir tres veces: “¡Junto a los bendecidos de entre los Profetas, los verídicos, los mártires, y los piadosos! ¡Oh Allah perdóname y ten misericordia de mí! Elijo estar junto a los compañeros alabados. ¡Oh Allah, junto a lo compañeros alabados!” 2 Nuestros Artículos www.cciar.com La Preocupación de los Compañeros sobre la Muerte del Profeta La noticia de la gran pérdida pronto fue de conocimiento de todos en AlMadinah. Una oscura pena se propagó por los horizontes de Al-Madinah. Anas (ra) un compañero del Profeta dijo: “Nunca presencié un día mejor y más brillante que el día en el cual el Mensajero de Allah vino a nosotros; y nunca presencié un día peor y más oscuro que el día en el cual murió el Mensajero de Allah.” Cuando murió, su hija Fátima dijo: “¡Oh Padre a quien Tu Señor respondió tus súplicas! ¡Oh Padre cuya morada es el Paraíso! ¡Oh Padre a quien anunció tu muerte Gabriel!” Título: “¿Quién es tu Señor y Quién es tu Profeta? Traducción: Dr. Abdulkhabeer Muhammad Syracuse University College of Law 3 Nuestros Artículos www.cciar.com