E rase una vez un fantasma novato, que nunca había asustado a nadie, porque cada vez que se acercaba a asustar algún niño era él el que salía asustado. Tampoco sabía atravesar las paredes, por eso sus compañeros de clase siempre se reían de él. El fantasma novato estaba cansado de tanta mofa, de no tener amigos y de que nadie se acercara a él para jugar. Entonces ideó un plan: Apostarles que si conseguía atravesar al menos una pared y asustar por lo menos a un niño o a una niña, sus compañeros de clase dejarían de reírse de él, ya no le llamarían el fantasma novato, y tendrían que jugar con él como otro compañero más. Un poco más tarde, se fue a casa de la Profesora “Fantasmina” para pedirla ayuda. La profesora le dio un manual de instrucciones de cómo tenía que atravesar las paredes y de cómo tenía que asustar a los niños. El fantasma pasaba día tras día aprendiendo cómo hacerlo. Cuando creía que se había estudiado todo el manual, lo ponía en práctica, pero por más que lo intentaba sólo se chocaba una y otra vez contra las paredes; entonces hizo un pequeño descanso y se tomó un chocolate calentito, volvió a leer el manual y se dio cuenta que una parte del manual no se la había leído. Tras un descanso lo intentó de nuevo y para su sorpresa, esta vez sí consiguió atravesar las paredes. Loco de contento con su nueva experiencia, no paraba de intentarlo, así que al cabo de un rato se decidió y se fue a la casa de una niña. Ésta no podía dormir, el fantasma novato aprovechó la ocasión para atravesar la pared de la casa y así darla un buen susto, y así lo hizo. La niña, muerta de miedo, se escondió debajo de la cama. Página 1 Raquel & Noelia El fantasma, muy contento, fue a decirles a sus compañeros que por fin lo había conseguido; pero sus compañeros no le creyeron y le contestaron que tenía que volver a repetirlo delante de ellos. El fantasma novato se enfadó un poquito, pero acabó aceptando la idea. Buscaron una casa que tuviese muchos niños y que fuese muy grande, porque sus malvados compañeros querían ponérselo muy difícil para asegurarse si de verdad sabía atravesar las paredes y asustar a los niños o les estaba tomando el pelo. Ya en la casa les demostró que era todo un campeón asustando a los niños y atravesando las paredes. Sus compañeros no daban crédito a lo que estaban viendo. Tras unos momentos de silencio todos se pusieron a aplaudir. A partir de entonces le llamarían EL GRAN FANTASMA. Después de esa noche todos sus compañeros querían estar siempre con el Gran Fantasma, y él estaba muy orgulloso de su hazaña. Lo mejor de esta historia es que a partir de esa noche todos juntos salieron a asustar a aquellos que no se durmieran pronto. FIN Raquel y Noelia Página 2 Raquel & Noelia