Situación geográfica de la Rep. Checa La República Checa está definida geográfica y culturalmente por tres grandes regiones: Bohemia, Moravia y Silesia. Tiene una población de 10.432.774 (censo de 1995) y una extensión de 78.864 km2. Enclaustrada en el corazón de Centroeuropa, el país tiene fronteras al sur con Austria, al oeste con Alemania, al norte con Polonia y al este con Eslovaquia. Esta situación estratégica ha marcado desde el principio su historia, indispensable para comprender la evolución del continente europeo desde la Edad Media. El macizo de Bohemia forma al suroeste la Selva de Bohemia, al noroeste, en la frontera alemana, este macizo se une al Krusné Hory y al norte con los montes Jizerske Hory y Krkonose (Montañas Gigantes), cuya máxima altura es el Monte Snezka, con 1.602 m. Las laderas de los Montes Metálicos están salpicadas de pequeños valles y bosques salvajes de gran belleza. A sus pies se encuentra la fosa tectónica del Ohre-Bílina que le separa de la meseta checa y que es, en realidad, un valle de más de 100 kilómetros de longitud con manantiales de agua caliente y estaciones termales de fama mundial. El macizo de Bohemia continúa en el norte de Moravia con dos cordilleras: Jeseniky y Beskydy, que forman parte de la frontera con Eslovaquia, en el Norte, así como los Cárpatos Blancos, en el Sur. Junto con Hungría, Austria y Suiza, la República Checa es el único país europeo sin salida al mar, aunque suple esta carencia con una abundante red fluvial, representada principalmente por el Elba, que desemboca en el Mar del Norte, el Morava, que alimenta al Danubio en su camino al Mar Negro, y el Odra. La República Checa tiene un clima continental con grandes variaciones de temperatura. En Bohemia, las diferencias se extreman por la pantalla de macizos que rodean la meseta checa siendo las lluvias más escasas que en el resto del país. En Praga, el índice de pluviosidad es de 500 mm., mientras que las Montañas del Cuadrilátero son mucho más húmedas con abundantes lluvias. Las cumbres más altas de este Cuadrilátero son los montes Metálicos Krusné Hory, Montes Gigantes Krkonose, Montes Sumava, Selva de Bohemia y las colinas Jesenik y Beskydy en Moravia, que cierran el Cuadrilátero por el Este. El macizo bohemio se divide en las siguientes zonas, una deprimida formada por dos regiones, la Meseta Checa, bastante industrializada y la Llanura de Polabí al norte, muy fértil. Entre la llanura de Polabi y la selva de Bohemia se ubica la meseta checa, terreno ondulado, que se eleva progresivamente al mismo tiempo que disminuye su fertilidad. La Selva de Bohemia, que forma frontera con Alemania en el Este, está formada por una larga alineación, de 700 a 1.000 m. de altura, que se comunica con el país vecino a través del corredor de Cheb. La meseta está regada por los ríos Mze y Radbuza. De distinta formación geológica, la cuenca del río Moldava, entre la Selva Bohemia y la Llanura de Polabí, es terreno granítico, cubierto de lagos y zonas pantanosas cuya riqueza principal son los yacimientos de grafito y caolín alrededor de České Budejovice. La cuenca del Berounka es un sinclinal de materiales primarios más fértil. En el punto de unión entre la meseta central de Bohemia y la llanura de Polabí se encuentra la capital de la nación, Praga. Situada en la confluencia de los dos valles principales del país, la capital de la República Checa señala el lugar de convergencia de las rutas internacionales. Moravia es la segunda gran región de la República Checa y comprende el territorio situado en la cuenca del río Morava y que se va ensanchando a medida que avanza hacia la Llanura de Panonia hacia su confluencia con el Danubio. El río Moldava, que nace al suroeste de la República Checa, en los Montes Sumava y cruza Český Krumlov, České Budejovice y Praga para continuar por el valle y desembocar en el Elba es un refugio ornitológico de gran riqueza. Más de 5.000 aves llegan a estos parajes huyendo de los lagos helados. A ambos lados del Morava se levantan las colinas de Moravia que la separan de la meseta checa al oeste, al este, los Cárpatos Occidentales denominados Beskydy y los Cárpatos Blancos que limitan con Eslovaquia. Más al sur, en el piedemonte de las alturas de Moravia, se encuentra la cuenca de Brno, la capital de Moravia y la segunda ciudad en importancia de la República Checa. Ya en el bajo Morava se ubica la cuenca de Hodonín, una comarca agrícola que participa de los caracteres climáticos meridionales de la llanura eslovaca. El territorio de la República Checa se divide a su vez en las siguientes regiones turísticas: Praga, Alrededores de Praga, Bohemia del Sur, Sumava, Región de Plzen, Balnearios de la Bohemia del Este, Bohemia del Noroeste, Bohemia del Norte, Paraíso Checo, Bohemia del Este, Región de Vysocina, Moravia del Sur, Moravia Central, Región de Moravia del Norte y Silesia y Krkonose