Métrica 1. El verso endecasílabo es el instrumento fundamental de la métrica imitada de los italianos. Aunque en España apareció con los primeros trovadores catalanes y gallegos, procedente de Provenza, Francia e Italia, donde se usaba comúnmente, en Castilla se utilizó de forma esporádica, hasta que en el siglo XV Francisco Imperial y el marqués de Santillana hicieron los primeros intentos de adaptarlo al español. Será a partir de Boscán y los primeros renacentistas cuando se convertirá en el metro constante y más representativo de la nueva poesía. 2. El predominio de la rima consonante, más culta que la asonancia, será casi absoluto. 3. Las composiciones poéticas y estrofas más frecuentes fueron: 1. El soneto, consagrado por Petrarca en su Canzionere. 2. El terceto encadenado, empleado por Dante en La Divina Comedia, fue usado para epístolas y elegías. 3. La lira la introdujo Garcilaso de la Vega en su Canción V, Ad florem Gnidi , por influencia de Bernardo Tasso. 4. La octava real, ya usada por Boccaccio, adquiere su máxima importancia en la Égloga III de Garcilaso. 5. La silva es una combinación libre de no menos de veinte endecasílabos y heptasílabos. 6. La canción petrarquista se compone de un número indeterminado de endecasílabos y heptasílabos que riman al gusto del poeta; ahora bien, la estrofa que marca la primera estancia la repiten las demás. 4. Estas nuevas estrofas se usaron en una serie de composiciones fijadas por la Antigüedad y el Renacimiento italiano. Así la égloga, que proviene de Virgilio y es propia de la poesía bucólica y pastoril; 1. la elegía, que se usará en poemas de dolor y desgracia; 2. la canción y la oda se asocian a los temas amorosos; 3. la epístola horaciana, que se utilizará para los temas familiares, doctrinales y literarios. Temas El amor humano Es el tema renacentista más importante. Se continúa con la tradición de amor cortés, pero filtrado por el tratamiento que le da Petrarca y por el neoplatonismo del Dolce Stil Nuovo, que hace del amor el elemento cohesionador del cosmos. La mujer es ahora reflejo de la Belleza divina y camino de perfección hacia Dios. El amor divino Si al poeta del amor humano le es casi imposible consumarlo, el poeta religioso sí puede desear abiertamente y aspirar al éxtasis místico. La dificultad que estos poetas encuentran para expresar adecuadamente esta experiencia unitiva hace comprensible que hayan recurrido a los tópicos e imágenes del amor humano. La naturaleza Marca la pauta el bucolismo, cuyos orígenes están en los Idilios, de Teócrito, las Bucólicas, de Virgilio, la Arcadia, de Sannazaro y los Ninfali de Boccaccio. A ellos se suman dos tópicos: por un lado, el del Beatus ille horaciano, que canta la paz y el reposo en un marco natural que perfecciona al hombre y le ayuda en la conquista de la sabiduría; por otro el de la Edad de Oro, ucronía de un tiempo primigenio en el que reinaban las leyes naturales en armonía con la libertad del hombre. La mitología Se basa en Las metamorfosis, de Ovidio, de donde se toman seres mitológicos clásicos como símbolos de fuerzas y fenómenos naturales -así, amor es Venus; Marte, la guerra, Hércules la fuerza, etc.- y de cualidades físicas, morales y de experiencias humanas -como la belleza de Apolo, el orgullo de Ícaro, o las historias de Apolo y Dafne, Orfeo y Eurídice, Dido y Eneas-. Lo moral Bajo esta denominación general se agrupan varios subtemas tales como: 1. La consideración del paso del tiempo. 2. El carpe diem o collige, virgo, rosas, que surge de la contemplación de los estragos del tiempo.