Mi experiencia en la Clínica Mayo, Rochester (Minnesota)

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MÉDICOS ESPECIALISTAS EN FORMACIÓN
Documento descargado de http://www.elsevier.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato.
Mi experiencia en la Clínica Mayo,
Rochester (Minnesota)
Por RAÚL DE LOS SANTOS REAL
Hospital Universitario de la Princesa
Durante los meses de abril y mayo de 2005
tuve la oportunidad de visitar la Clínica Mayo en
Rochester, gracias a la “bolsa de viaje” concedida por la SECOT.
La Clínica Mayo consta de varios edificios,
destacando 6 de ellos por ser los más representativos: 2 hospitales (St. Mary’s y Methodist
hospital), 2 edificios destinados a consultas externas y pruebas diagnósticas (Mayo y Gonda
building) y otros 2 destinados a trámites burocráticos y administrativos (Siebens y Plummer).
Este último además acoge la biblioteca y la librería.
Permanecí en miembro superior durante
1 mes, con los Dres. Cofield, Sánchez Sotelo y
Morrey; y en miembro inferior otro mes con los
Dres. Cabanela, Sánchez Sotelo, Pagnano y
Lewollen.
Al llegar allí lo primero que me llamó la atención fué lo protocolizada que tienen la actividad asistencial.
La jornada comienza sobre las 6:30, bien
con una sesión general para todos los servicios
o bien con sesiones clínicas en los distintos
servicios. Tras dicha sesión, alrededor de las
7:30, se inicia la actividad asistencial: quirófano
o consulta. Cada equipo médico (médico adjunto + “asistente del médico” + fellow y/o uno o
dos residentes) atiende el quirófano o la consulta a días alternos.
El quirófano comienza inmediatamente después de la sesión, mientras que la consulta se
inicia 1 hora más tarde aprovechando este intervalo de tiempo para pasar planta. El día quirúrgico el pase de planta se realiza al final de
la jornada.
Dependiendo de la disponibilidad de quirófanos cada equipo médico utiliza 1 o 2 quirófanos
en la jornada, llevando a cabo de 3 a 6-8 cirugías
en el día.
El sistema de visita en consulta se basa en diversos boxes para visitar a los pacientes, con
una 1.ª valoración realizada por los residentes, el
“fellow” o el “asistente del médico” tras la cual
el médico adjunto decide la pauta a seguir. Se
ven al día entre 25-35 pacientes.
La hora de finalización de la jornada no está
prefijada. Dependiendo de la fluidez o dificultad de la jornada, la actividad asistencial suele
terminar entre las 15 h y las 21 h.
Los primeros días de mi estancia fueron con
el Dr. Cabanela, al que debo agradecer su gran
ayuda para poder acceder a la Clínica. Con él
pude apreciar lo fácil que pueden llegar a parecer las siempre difíciles cirugías de revisión
protésicas de cadera y rodilla.
Posteriormente roté con el Dr. Cofield, siempre accesible y encantado de responder cuantas preguntas le planteas. Pude observar una
sistemática en la implantación de prótesis total
de hombro.
Con el Dr. Sánchez Sotelo pude compartir
2 semanas. Tuve la ocasión de participar en
gran diversidad de cirugías: desde ligamentoplastias coracoclaviculares, transposición de
pectoral mayor, artroplastia de hombro, artroplastia de interposición y sustitución de codo...
hasta artroscopias de diversas articulaciones y
artroplastia primaria de cadera y rodilla. Además de su docencia, debo agradecerle el exquisito comportamiento que tuvo conmigo, tanto dentro como fuera de la Clínica.
A continuación estuve con el Dr. Pagnano,
antiguo residente de la Clínica y “ex-Felow” del
Dr. Insall, con el que pude participar de la implantación de prótesis total de cadera mediante abordaje mini-invasivo único o doble abordaje. También pude observar una sistemática
en la artroplastia total o unicompartimental de
rodilla primaria a través de abordaje subvasto
y cirugías de revisión.
Posteriormente pude estar con el Dr. Morrey,
del que me maravilló la habilidad y rapidez para
abordar una articulación como el codo. Destacaría de él su gran consideración con los residentes, tanto de la propia Clínica como con los
extranjeros.
Finalmente, los últimos días fueron con el Dr.
Lewollen. Tuve la oportunidad de ver el uso de
los materiales de metal trabecular (Tantalio) y
sus diferentes aplicaciones en multitud de cirugías primarias y de revisión de cadera y rodilla.
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MÉDICOS ESPECIALISTAS
EN FORMACIÓN
Mi experiencia en la Clínica Mayo, Rochester (Minnesota)
Durante mi estancia en Rochester tuve la
suerte de coincidir con dos cursos de codo impartidos por los especialistas de la Clínica
Mayo, uno de ellos con cadáveres.
La experiencia ha sido muy enriquecedora,
tanto a nivel personal como profesional. La estancia en un centro pionero de EE.UU. me ha
permitido reconocer los grandes medios materiales de los que disponen, así como la efectividad de la gran capacidad organizativa. Además, he podido disfrutar de la experiencia de
grandes especialistas de la ortopedia.
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Por otro lado he podido comparar y comprobar con satisfacción la excelente calidad de los
cirujanos de nuestro país.
Quiero finalizar esta carta agradeciendo a
la Fundación SECOT la ayuda prestada para
esta rotación. Del mismo modo agradecer a los
miembros del Servicio de COT del Hospital
Universitatio de La Princesa su apoyo, y en especial a mis compañeros residentes, sin cuya
paciencia y comprensión no hubiera sido posible haber disfrutado de una experiencia inolvidable.
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