Formato de impresión Las almas muertas 2015-03-29- Columnas-VoxPopuli Len Garca Soler, La Jornada Los rarmuris explotados, esclavizados en los cultivos agrcolas de la rica regin de Los Cabos, Baja California Sur, fueron rescatados por el secretario del Trabajo del Ejecutivo federal y devueltos a sus altas tierras de la miseria Tarahumara. Al norte, en las frtiles tierras de los valles de Ensenada, alzaron la voz y se rebelaron los miles de jornaleros agrcolas trados del sur, mixtecos la mayor parte de ellos; ms de medio siglo de servidumbre, paga miserable y ausencia de derechos. Pero bloquearon la carretera transpeninsular y negocian con los patrones con la carga adicional de los lderes sindicales. No aceptaron los aumentos ofrecidos por los agricultores de la modernidad exportadora. Los dirigentes de la otrora revolucionaria CNC han sido invitados de piedra, desplazados finalmente por la CTM y el reformismo salinista. En la capital de la Repblica, a un lado del Monumento a la Revolucin, el ltimo de la gerontocracia cetemista, Joaqun Gamboa Pascoe, sonre y goza al pie de la estatua que l mand erigir en su honor. As dice el lugar comn. Y nada ms comn que un lder obrero enriquecido que se sobrevive a s mismo y posa para su selfie. Los mixtecos de Baja California han decidido ya no ser como las Almas muertas de Gogol. En Colima hubo conflicto, brotes de la terca realidad y de la esclavitud que lleg al tercer milenio: Los mixtecos tienen sus tierras all dijo una traductora, pero no tienen con qu trabajarlas. Ser por eso. O por la terquedad de los tecncratas que durante ya ms de 30 aos decidieron obedecer el dogma neoconservador: el rigor fiscal y la austeridad, la insistente disminucin del Estado, hasta que desaparezca todo rastro de rectora posible y nada regule el librrimo trfico financiero. Y la consecuente acumulacin del Capital, con C mayscula, en cada vez menos manos, ms llenas, ms rentistas y ms poderosas. Dgalo Paul Krugman, o los mozos de estribo de los dueos del dinero: La gente ya se cans de esperar el milagro mexicano; la gran liberalizacin ya tiene 30 aos y claramente eso por s mismo no bast. Dicho en la Convencin Anual de la Canacintra, la que fue alguna vez llamada cmara empresarial nacionalista. Krugman sabe que la vecindad con el mayor mercado del mundo es una gran ventaja. Pensaron que la apertura de los aos 80 reducira la desigualdad, porque se exportaran muchos productos y tendran mucha demanda de manos de obra, pero sucedi todo lo contrario y hubo ms desigualdad. El comercio no necesariamente es una buena herramienta para abatirla. Hubo reconocimiento a lo logrado en la ingente tarea de reducir la desigualdad, capacitar ms a la mano de obra y lograr un aumento significativo en el gasto social. Casi les dio el remedio y el trapito. Pero al tiempo, ante una consulta directa, respondi el Premio Nobel: Yo soy economista y si ustedes son el sector privado deberan saber lo que estn haciendo. Difcilmente puedo darles consejos. A menos que estuviramos ante un vuelco portentoso y los del sector pblico escucharan a quienes saben que la poltica debe regir la economa y no al revs. O, como sola bromear B. Jack Copeland, pionero de la era de la informacin, matemtico ingls que descifr el formidable cdigo enigma de la maquinaria nazi de guerra: Por qu en el espejo vemos invertidos el lado izquierdo y el derecho del rostro, y no de arriba y abajo? De pronto, el cono sur de la Amrica nuestra se vea a la izquierda. Y nos informa en primera plana El Pas, del sbado 28 de marzo de 2015: El ministro de Economa argentino, Axel Kicillof, justific ayer que el gobierno de la presidenta Cristina Fernndez haya dejado de medir el porcentaje de pobres en la poblacin por considerar que es un dato estigmatizante. Si no mides cuntos son pobres y cuntos estn en la pobreza extrema, al filo de la hambruna, nadie dir que subestimas el problema, como dijeron del gobierno argentino por la cifras publicadas entre 2007 y 2013. Los jornaleros mixtecos esclavizados en Colima tienen sus parcelas en su tierra. Y los modernos agricultores de Baja California, como los de Sinaloa y Sonora, siembran en tierras ejidales y comunales, adems de las de propiedad privada, porque a ellos s les dan crditos, avo, semillas y asistencia agropecuaria. Con las reformas salinistas al 27 constitucional vendran inversiones del exterior y sociedades con capitalistas nacionales: no lleg ni un dlar. Nadie iba a invertir en los pramos de temporal de los que salen los miserables jornaleros, nmadas en su propia tierra. Donde hay buenas tierras, con riego rodado y cultivos de exportacin, ya haca muchos aos que se haban asociado los agricultores de la burguesa rural con los ejidatarios y comuneros que la economa rectora de la poltica haba dejado en el abandono y haban dejado de contar en las cifras del Ejecutivo. Cansados de esperar el milagro mexicano, dice Krugman. Cansados del recuento de pobres que se confunde con el de las vctimas de la violencia, con el caos anarquizante que se desat con el crimen de Ayotzinapa y la ausencia de sensibilidad poltica, la inconcebible lentitud del Ejecutivo federal para reaccionar y detener a los autores intelectuales y materiales. Tanto que la desconfianza es el estigma del poder constituido. Y el sistema plural de partidos se refugia en combates imaginarios, despreciado y envilecido, sin ideas, sin ideologa alguna. En pleno proceso electoral ningn dirigente de los 10 partidos contendientes ha reaccionado a la inesperada toma de posicin del presidente Enrique Pea Nieto, del rechazo al desprecio de los neoliberales por la adopcin de una poltica industrial especfica para apoyar distintos sectores de la economa. Una poltica industrial, deca Ernesto Zedillo, seala ganadores y perdedores de antemano. Como si el mercado no lo hiciera o fuera realmente libre. Los voceros de Los Pinos, en lugar de realzar ese discurso, dieron vuelo a declaraciones de banqueta, a sbitas evasiones del poder constituido: no actuar para que le pongan medallitas... Voceros o heraldos, no han logrado disolver la desconfianza y la incredulidad ciudadana, ni consolidar una autntica poltica de comunicacin social. A pesar de todo, llevan ventaja en los augurios; 12 aos bastaron para levantar una carpa cirquera en la que marchan los de Madero en sentido contrario a los de Caldern. Rumbo a la derrota, pero el PRD se hunde y los que se salvan de los despropsitos de Carlos Navarrete reciben golpes directos de Lpez Obrador y sus desconsolados fieles. La pluralidad partidista como el Rosario de Amozoc. Con el riesgo de volar sobre el pantano en el que se ensuciaron las alas quienes pasaron al servicio del Pan que no se come; engordaron a la sombra de Elba Esther Gordillo y con el favor de gobernadores dispuestos a cambiar de chaqueta al grito de viva el que vence! Dicen los lectores de nubes que por eso hay norte en el golfo. Que de Tampico a Coatzacoalcos truena y relampaguea por la reaparicin de Carlos Olmos, experto en cuidar honras ajenas, la imagen de gobernadores vctimas de la desmemoria. Nadie traa a cuento la deuda de cientos de millones desaparecidos en el cambio sexenal; ni las cartas marcadas a do por Carlos Olmos y Alejandra Sota en la campaa presidencial. De ah a comunicador del Senado, pero viejos y nuevos escndalos hicieron que Emilio Gamboa pidiera baraja nueva y se deshiciera de quien supo hacer amigos al andar por las veredas. Parece que va a llover. Pero en el golfo ven la tempestad y no se hincan. Copyright ElPeriodicodeMexico.com