14 EL DIAde Baleares 30 Junio 1984 local La función de ASIMA en Mallorca Equipo Formentera Si repasamos la historia del pueblo mallorquín descubriremos que pocas han sido las veces en las que se ha emprendido una acción colectiva. No somos, a lo racionalidad de nuestra estructura productiva. En realidad era una labor imposible. El sistema de economía de mercado se mueve tros empresarios se convirtiesen en función de rendimientos, de en simples capitalistas, en sim ples negociantes. Y esta distin rentabilidades de los recursos in vertidos. El sector que más rendi mientos ofrece es el que absorve, se quiera o no, el capital y el trabajo. Tal es el sistema, tal es la lógica capitalista. Y ese sector que se ve, personas propicias a la actuación conjunta a pesar, sin embargo, de que en las pocas ocasiones en que lo hemos inten tado nos acompañó el éxito e hicimos posible momentos de glo ria y prosperidad. Y no hace falta remontarnos a tiempos remotos para tener pruebas de este aserto: sostenimiento de la actividad in dustrial en Mallorca era una uto las dos únicas veces en las que se pía, un hermoso proyecto ínviable. ha actuado de una manera era, desde el año 1964 el turismo. En estas condiciones luchar por el Pero los hombres de ASIMA lo conjunta en lo que va de siglo, han hicieron. Lo hicieron y lograron marcado un hito no sólo en nues tra historia sino también en el triunfando en dos frentes. quehacer y vida de la totalidad de una serie de actividades industria España. Estas dos solitarias oca siones, por mucho que parezca ocioso nombrarlas, fueron las que dieron lugar al nacimiento del Fomento del Turismo y a la Aso mallorquína, los empresarios ma llorquines. Ellos impidieron con su ejemplo y su esfuerzo que nues En primer lugar mantuvieron les que sin su esfuerzo hubieran desaparecido. El boom turístico ción hemos de entenderla en el sentido de que un empresario es un elemento dinámico de la socie dad, un innovador, un hombre que arriesga, un creador, mientras que el capitalismo reduce su campo de actuación a la búsqueda, hono rable pero poco creadora, de la rentabilidad más alta para su capital. Esta labor de sostenimiento del empresariado la llevaron a cabo a través de dos cauces de actuación: en primer lugar me diante la participación del empre sario en el movimiento asociativo de ASIMA, donde se creaba a tragaba todo. Y a ellos se debe, les debemos, la supervivencia de unas industrias que ahora, con la dos cada vez a mayores dificulta ciación Sindical de Industriales de existencia de un Gobierno Balear des, Mallorca, ASIMA. Del primer logro se ha hablado mucho, del segun do muy poco. Tan poco que quizá sea el gran desconocido de Ma llorca en cuanto a su proyección y Autónomo, pueden ser la base de empresarios en su misma situa la reindustríalización de nuestra ción, se rompía la soledad y se fomentaba el apoyo mutuo. En segundo lugar a través de los méritos. La importancia de ASIMA no radica, a nuestro entender, en la construcción de dos polígonos industriales en la isla de Mallorca sino en el revulsivo que su naci miento representó dentro de la sociedad mallorquína de aquel tiempo. Los promotores de ASIMA tierra; la punta de lanza de nues tro esfuerzon inversor. Y es que no hemos de olvidar que buena parte del desequilibrio de nuestra estructura económica radica en el hecho de que los centros de decisión no estaban en Baleares y a que nuestros intereses estaban supeditados, en cierta forma, a otros respetables pero foráneos. Tenemos que pensar que las industrias que sostuvieron los lo que hicieron fue replantear, en hombres de ASIMA, los hombres el inicio del de los polígonos, han de ser la base de nuestra futura política industrial y reestructuradora. boom turístico, la problemática de los más genuinos intereses de la población de Ma llorca y, sí bien no consiguieron alcanzar plenamente sus objeti su logro mas importante, los hom un período de reflexión que dio que está fuera de toda valoración excelentes por alta que sea. Ellos mantuvie ron, sustentaron, hicieron perdu rar y multiplicaron nuestro grupo empresarial, la clase empresarial vos, lo cierto es que lograron abrir resultados a medio plazo. ASIMA fue, sin duda, el último intento de los. empresarios de nuestra tierra por conservar la En segundo lugar, y éste es bres de ASIMA consiguieron algo diario un espíritu de lucha y espe ranza. Los empresarios, someti encontraban en ASIMA a Centro de Formación y en espe cial del IBEDE. No sólo era nece sario sostener al empresario, sino que era preciso procurar una adap tación del empresario a los nuevos modos, a las nuevas co rrientes de la sociedad, a las nuevas ideas. Y los Centros de Formación de ASIMA lo lograron con una notable eficacia. Creemos que nadie puede negar que fue ASIMA la que sostuvo el espíritu de los empre sarios industriales; que nadie pue de negar que fue ASIMAquien dio ASIMA fue unrevulsivo parala sociedad mallorquína quien ha mantenido hasta la fecha la clase de empresarios industría to servicios a la colectividad donde nació. ASIMA nos ha dado les en Mallorca. Y esta labor callada es, sin duda, la más etapa actual. Ahora solo hace importante de las realizadas por ASIMA por cuanto un empresario no nace de la nada, no se repro duce del aire ni de una coyuntura favorable. Se precisa una tradi ción industrial, una larga historia de triunfos y fracasos, para hacer un empresario. Esta ha sido, a nuestro enten der, la gran labor de ASIMA: conservar para las generaciones actuales un amplio plantel de empresarios con conciencia de su responsabilidad. Si hoy en día podemos hablar de una futura reindustrializacióri' de Mallorca es porque disponemos de empresa rios industríales capaces de diri los empresarios precisos para la falta que sepamos comprenderles y, permítasenos la expresión, utili zarlos. Y es en este momento donde se podrá apreciar sí ASIMA ha logrado el éxito en sus propósitos o se ha quedado a medio camino. ASIMA es ahora precisa para proceder a la reindustríalización de Mallorca, para proceder a la mejor utilización' de los empresaríos e industrias que ayudó a nacer y conservar. Su labor futura es más importante si cabe que la pasada; el reto más grave la ocasión jriás propicia. Nuestra razón para luchar, una razón para girla, de llevarla a buen término. Y opinión es que, en el momento de hacer frente a la nueva revolución, ello es fruto, única y exclusiva en sostener sus industrias, una razón mente de práctica, por fin, sus ideales, ASI a los empresarios industríales una para mantener sus industrias para las generaciones venideras o pre sentes y creemos que todos he mos de reconocer que fue ASIMA la labor callada de ASIMA. Sospechamos que ningu na asociación del tipo de las que forma parte ASIMA puede sentir se más orgullosa que ella en cuan el momento de llevar a la MA no defraudará y cumplirá tal como corresponde a quien labor tan ingente y necesaria ha sabido hacer.