ESTUDIO SOBRE LA ALEGRÍA EN MEDIO DEL SUFRIMIENTO EN LA CARTA A LOS FILIPENSES VALERIO MEJÍA ARAÚJO PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE TEOLOGÍA PROGRAMAS DE POSGRADO MAESTRÍA EN TEOLOGÍA BOGOTA, D.C. 2010 ESTUDIO SOBRE LA ALEGRÍA EN MEDIO DEL SUFRIMIENTO EN LA CARTA A LOS FILIPENSES VALERIO MEJÍA ARAÚJO Trabajo monográfico presentado para optar por el título de Magister Civil en Teología Director Pedro Ortiz Valdivieso, S.J. Doctor en Sagrada Escritura PONTIFICIA UNIVERSIDAD JAVERIANA FACULTAD DE TEOLOGÍA PROGRAMAS DE POSGRADO MAESTRÍA EN TEOLOGÍA BOGOTA, D.C. 2010 Nota de Aceptación: ________________________________ ________________________________ ________________________________ ________________________________ _________________________________ Director Comité de Posgrados _________________________________ Firma del Tutor _________________________________ Firma del Segundo Examinador Bogotá, D.C. Enero de 2010. 3 DEDICATORIA En honor de aquel delante de quien un día, ―toda rodilla se doblará y toda lengua confesará que Él es el Kyrios para gloria de Dios Padre‖. Flp 2:10-11 “Al Rey de los siglos, inmortal, invisible, al único y sabio Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén”. 1Tm 1:17 4 AGRADECIMIENTOS Inmensa gratitud para el Reverendo Padre Pedro Ortiz Valdivieso, S.J. por su sabia y paciente orientación en todos los vericuetos de la presente investigación. “… dichosos estos servidores tuyos que están siempre en tu presencia y escuchan tu sabiduría”. 1R 10:8b A la Doctora María Lucía Jiménez de Zitzman, dedicada facilitadora del Grupo de Investigación Bíblica Soter, por concebir el estudio de las Sagradas Escrituras como algo agradable y fácil. “Tus dictámenes son mi herencia perpetua, ellos son la alegría de mi corazón. Inclino mi corazón a cumplir tus preceptos, que son recompensa para siempre” Sal 119: 111-112 A Blanca Cecilia Cely, Pablo Emilio Moreno, William Alcides Rodriguez y Francisco Sojka, mis solidarios compañeros de clases, quienes a través del tiempo y las circunstancias, han honrado nuestra amistad. “El hombre que tiene amigos debe ser amistoso, y amigos hay más unidos que un hermano”. Pr 18:24 A Maríamercedes, precioso regalo de las manos de Dios. Por su constante motivación para continuar a pesar del cansancio y las distracciones del camino. ―Ya la higuera ha dado sus higos y las vides en cierne, su olor. ¡Amada mía, hermosa mía, levántate y ven!”. Ct 2.13 5 CONTENIDO pág. RESUMEN 8 INTRODUCCIÓN 10 1. EL NIVEL HISTÓRICO 13 1.1 OCASIÓN Y PROPÓSITO DE LA CARTA 13 1.2 LUGAR Y FECHA 13 1.3 LA CIUDAD DE FILIPOS 18 1.4 AMBIENTE SOCIAL, POLÍTICO Y FILOSÓFICO 20 1.5 EL AUTOR 21 1.6 LA IGLESIA DE FILIPOS 21 2. EL NIVEL LITERARIO 25 2.1 ESTILO DE LA CARTA 25 2.2 UNIDAD LITERARIA 26 2.3 AUTENTICIDAD 31 2.4 EL TEXTO DE FILIPENSES 31 2.5 CONTENIDO GENERAL 32 2.6 GÉNERO LITERARIO 34 2.7 ANÁLISIS TEXTOS SOBRE LA ALEGRÍA 35 2.8 ANÁLISIS TEXTOS SOBRE ELSUFRIMIENTO 52 3. EL NIVEL TEOLÓGICO 62 3.1 LÍNEAS DE SENTIDO 62 6 3.2 POSIBLES CAMPOS SEMÁNTICOS 63 3.3 COMENTARIO SOBRE LA ALEGRÍA 63 3.4 COMENTARIO SOBRE EL SUFRIMIENTO 67 4. EL NIVEL ACTUALIZANTE 71 4.1 PROPUESTA TEOLÓGICA ACTUALIZANTE 71 4.2 MOMENTO DE CONFRONTACIÓN 72 4.3 ACTUALIZACIÓN SOBRE LA ALEGRÍA 75 4.4 ACTUALIZACIÓN SOBRE EL SUFRIMIENTO 76 5. CONCLUSIONES 79 BIBLIOGRAFÍA 82 7 RESUMEN Se hará una aproximación al estudio de la alegría y el sufrimiento, como ejes transversales dentro de la Carta a los Filipenses. En medio de circunstancias difíciles, Pablo estando prisionero, resalta la victoria y la alegría. Tomando como marco la experiencia del Apóstol Pablo y su relación de amor con la comunidad de Filipos, se estudiarán algunas características relacionadas con los términos de alegría y sufrimiento: Χαίρω 1:18; 2:17-18, 28; 3:1; 4:4, 10. χαρ 1:4, 25; 2:2; 4:1. συγχαίρω 2:17-18 θλι̂ψι 1:17; 4:14 πάθ μ 3:10 πάσχ 1:29 Esta pequeña carta de tan sólo cuatro capítulos, nos cuenta la historia de un hombre, quien en medio de las circunstancias más adversas logró encontrar la paz y la alegría, a tal punto que aprendió a contentarse cualquiera fuera su situación, porque todo lo podía puesto que Cristo era su fortaleza. Luego él podía exhortar: ―Regocijaos siempre en el Señor, regocijaos…‖ En un mundo moderno saturado de secularismo ateo, incredulidad y materialismo, y muy a menudo colmado de lujos y diversiones sin paralelos de la vida moderna, puede parecer a primera vista que una carta escrita por un preso encadenado y esperando ser sentenciado a muerte, no tiene ninguna relevancia para nuestra escena contemporánea. No obstante, se insiste, el estudio cuidadoso de esa epístola, en la que se nos revela el asombroso triunfo del apóstol, incluso en medio de grandes sufrimientos, pronto sacude la capa de la moderna superficialidad de nuestro mundo actual y pone al lector de cara con los valores espirituales últimos, que son los únicos que pueden satisfacer el corazón y traer alegría y paz en una manera en que ninguna comodidad o placer modernos podrían imitar. Parte fundamental de esta mirada esperanzada hacia el futuro es el llamado a la alegría —al gozo y regocijo— en el cual insiste el Apóstol. Se ejemplifica en su propio gozo, del cual 8 estudiaremos varias referencias, a pesar de las condiciones de prisionero en las cuales se encuentra. La nota pastoral está dirigida a fortalecer a la iglesia para que pueda cumplir su misión en el mundo, y esa misión es el eje central alrededor del cual gira la personalidad del escritor, sus tristezas, alegrías, sufrimientos y esperanzas. En el centro y en la base de todo está Cristo y tanto el autor como los destinatarios están en Cristo. Esta Carta a los Filipenses permanecerá siempre como un tributo a la actitud del apóstol frente a sus sufrimientos. Por la gracia de Dios puede regocijarse bajo las circunstancias más adversas de su cautividad y su inminente destino futuro. Sus constantes llamados a regocijarse es una característica distintiva. El secreto de ese gozo es la comunión con el Señor que es el centro de su vida, sea lo que fuere que le depare el futuro (1:20–21). 9 INTRODUCCIÓN Se pretende a través del presente trabajo de investigación, demostrar: Que se han alcanzado los objetivos generales y particulares del programa de Maestría. Que se es competente en la selección razonada y en la aplicación conveniente de uno de los métodos en la disciplina teológica. Que se es capaz de diseñar una estrategia de investigación. Que se puede tratar individualmente un asunto, tema, problema o autor pertinente a la teología disciplinar o profesional. Que se ha adquirido destreza para levantar un protocolo aceptable y viable, según la metodología propia para trabajos de investigación científica. Que se muestra idoneidad para la percepción analítica de los contextos de situación, para la interpretación metódica de los textos de tradición y para la aplicabilidad esclarecedora y dinamizadora de la situación. Que se muestra competencia para comunicar a otros los resultados y dinamizar nuevos procesos de conocimiento, de transferencia y de aplicabilidad. Que podemos ser declarados con solvencia, Magister por la facultad de Teología de la Universidad Javeriana1 El objetivo general es lograr una aproximación al estudio de la alegría en medio del sufrimiento en la Carta a los Filipenses, tomando como ejes transversales el tema de la Alegría y el tema del Sufrimiento. Para ello se hará necesario: Desarrollar una seria investigación bajo la dirección de un tutor personal. Estudiar la Carta a los Filipenses, conocida como la Epístola del Gozo. Sistematizar lo aprendido en términos de desarrollo cognitivo. Elaborar unas ideas que sirvan de estimulo para combatir la falta de gozo y significado. Aplicar un camino epistemológico como método de investigación Consignar los resultados de la investigación como un aporte de solución a la problemática planteada. El proceso se llevará a cabo a través de cuatro (4) capítulos: Uno de nivel histórico relacionado con el contexto de la carta. El segundo de nivel literario relacionado con los textos a estudiar. El tercero de nivel teológico relacionado con el mensaje que nos arrojan 1 Programación 2009, Facultad de Teología,150-152 10 esos textos y el cuarto de nivel actualizante relacionado con la aplicación o actualización de esos mismos textos. Con una conclusión sobre la temática tratada. La justificación: Las circunstancias de este hombre, en reclusión y esperando un fallo de ejecución, nos obligan a considerar con detenimiento el tema de la Alegría y el Sufrimiento en la Carta. La Carta a los Filipenses tiene su propio encanto y un lugar importante dentro del Corpus Paulino, allí se respira el perfume del gozo y la paz cristiana dentro de un contexto de sufrimiento. Combinando lo práctico con lo teológico, se ofrece el triunfo de la vida en Cristo, incluso en medio de grandes sufrimientos, para todos aquellos que tienen la vida de Cristo. El estudio nuevo y desprevenido de la carta, en el contexto de un mundo moderno a la luz de los problemas contemporáneos, prácticos y teológicos, nos debe ofrecer un desafío de imitación para cualquier lector; haciendo que la obra de Jesús sea exaltada y que su palabra escrita tenga aún peso de dirección sobre nuestras vidas. Como características del proyecto, se pretende investigar en la Carta a los Filipenses acerca del gozo y la manera de alcanzar la plenitud en Cristo. El Método de investigación que seguiremos es el denominado ―Proceso Hermenéutico‖, sustentado por Tirso Cepedal R.2 y enseñado en los seminarios de ―La interpretación Bíblica y sus métodos‖ en el programa de Maestría en la Facultad de Teología. El presente método tiene como finalidad hacer una adecuada lectura de la Biblia a través de tres niveles de interpretación: Un nivel histórico-literario, otro nivel de interpretación teológico-bíblico. Y un tercer nivel de actualización que pretende traducir el lenguaje e interpretar el mensaje para el hombre de hoy Como marco conceptual de la carta: Más de 16 veces encontramos la palabra ―regocijo‖, o alguna de sus formas, en los 104 versículos de la epístola. Pablo amonestaba a la iglesia a gozarse en Cristo a pesar de las circunstancias (cap. 1), de las personas (cap. 2), de las cosas (cap. 3) y de las preocupaciones (cap. 4). El creyente tiene que aprender a estar gozoso, pues tiene el gozo de Cristo. En el capítulo 1, Pablo escribe del gozo y de las maneras en que éste se puede aumentar aun en el sufrimiento, e incluye un informe muy positivo de sus propias circunstancias (1:12– 26). El segundo capítulo contiene varias ilustraciones del gozo al servir, comenzando con el ejemplo por excelencia: la humildad y exaltación de Cristo mismo (2:1–11). Las cosas que acompañan el gozo de la salvación de los creyentes están enfocadas en el capítulo 3. Los filipenses son advertidos acerca de algunos que andaban abogando por las buenas obras como substituto de la justicia que se recibe por fe (3:2–11). 2 Cepedal, T., Curso de Biblia, 45-89 11 Finalmente, en el capítulo 4, Pablo escribe acerca de lo que produce el gozo. El agradece a los filipenses por sus generosos donativos (4:15–20) y su contribución para los creyentes de Jerusalén. Técnicas de recolección de información y datos: (Metodología) Investigación del tema y nueva revisión bibliográfica Revisión y corrección al material existente. Descripción de acciones de alegría y sus opuestos. Listado de los textos relacionados. Exégesis de textos. Comentario Teológico Actualización y conclusiones Resultados esperados: Mediante la Exégesis Bíblica, procuraremos descubrir: Cómo estar gozosos a pesar del lugar en que nos encontremos, la gente con la que estemos y las circunstancias alrededor de nosotros. Específicamente: En razón de nuestro ministerio eclesial, esperamos que se puedan establecer seminarios entre los grupos de jóvenes, mujeres, y parejas para socializar los resultados de la investigación. 12 1. EL NIVEL HISTÓRICO 1.1 OCASIÓN Y PROPÓSITO DE LA CARTA Cuando leemos la Carta a los Filipenses, podemos señalar que hubo varias razones que motivaron el escrito paulino: Pablo quería agradecer la ofrenda que sus amigos de Filipos le habían enviado (4:10, 14– 18). Quería hacerles conocer su propia situación, y especialmente darles la seguridad de que su encarcelamiento no implicaba un retroceso del evangelio (1:12–26). Además, quería decirles de su plan de enviarles a Timoteo con otras noticias (2:19–24), aunque tenía la esperanza de que sería liberado e ir él mismo. Pablo necesitaba explicar por qué enviaba de regreso a Epafrodito, cuando los filipenses habían tenido la intención de que permaneciera junto a Pablo ayudándolo de cualquier manera que necesitase (2:25–30). Había llegado a conocimiento del Apóstol el partidismo y potencial desunión de la iglesia de Filipos, y quería instarlos a vivir, actuar y testimoniar en la unidad del Espíritu (1:27; 2:1–11; 4:2, 3). Pablo se había dado cuenta del peligro que corrían los filipenses de ser influenciados en dirección al legalismo judaico, por lo que quiso dejar completamente claro que ello sería una contradicción básica con el evangelio (3:1–11). A la vez, estaba consciente del peligro de una idea errónea acerca de alcanzar la perfección (3:12–16), y de las presiones del materialismo sobre los cristianos en Filipos (3:18–21). Su escrito fue también una oportunidad de animar a los cristianos a soportar el sufrimiento con valentía, a vivir en una sola mente y confiar sus vidas a su Señor en todas las cosas y bajo toda circunstancia (1:27–30; 2:12–18; 3:17–21; 4:4–9). El apóstol aprovecha para hacer otras recomendaciones: A mantener la firmeza en la fe, aun en medio de los sufrimientos, a tener en todo momento la alegría que da la fe cristiana.3 1.2 LUGAR Y FECHA Hay básicamente tres hipótesis respecto al lugar desde el cual se escribió la carta, y ellas también tienen que ver con la fecha. 3 Ortiz, Filipenses, 12 13 Brown R. lo resume así: Los detalles: Estaba en prisión. En su lugar de encarcelamiento había guardia pretoriana y cristianos de la casa del César. Se menciona la posibilidad que pueda morir. Alberga la esperanza de ser liberado. Timoteo estaba con Pablo. Ciertos cristianos de la zona, se han sentido impulsados a predicar la palabra. Ha habido ciertos contactos entre Pablo y Filipos a través de mensajeros. ¿Qué lugares pueden encajar con esos detalles? Cesarea (58-60) Propuesta por primera vez en 1799. Roma (61-63). Éfeso (54-56) Propuesta a principios del siglo XX. No hay posibilidad de decidir definitivamente esta cuestión; pero los mejores argumentos parecen estar al lado de la propuesta efesia, y los más débiles al de Cesarea. 4 Ramírez, F. sostiene: Tres son, pues, los lugares que se han postulado: en Éfeso, en torno a los años 5355, y por tanto después de la primera evangelización de Macedonia y Acaya, antes de iniciar el viaje final a Jerusalén. En Cesarea, después de la detención en Jerusalén y antes de iniciar el viaje a Roma (hacia el 55-56). En la misma Roma, lugar donde acaban las noticias que de Pablo nos da el libro de Hch. Reconociendo, pues, las dificultades de cualquiera de estas opciones, consideramos más probable la de Éfeso como lugar donde la carta fue escrita. Creemos, sin embargo, que ninguna de las opciones puede descartarse con certeza, y que ninguna de ellas condiciona decisivamente la interpretación de la carta, aunque en algún momento, especialmente cuando Pablo habla de aquellos que predican a Cristo por «envidia y rivalidad», la elección de una u otra ciudad nos obligará a considerar diversas posibilidades de interpretación. 5 Legasse, S. afirma: Y aquí es donde surge la hipótesis de una tercera cautividad: ni Roma, ni Cesarea, sino Éfeso. Esa es la ciudad en la que Pablo prisionero habría compuesto la carta a los Filipenses. Así pues, ¿escribió Pablo a los Filipenses desde Roma? … Por consiguiente, no hay pruebas perentorias a favor de Roma ¿Y Cesarea? Son muy pocos sus partidarios. Si se opta –con los menores riesgos posibles- por la composición de nuestra carta durante la cautividad romana de Pablo, esto permite 4 Brown, R., Introducción al NT, 645-649. 5 Ramírez, F., Gálatas y Filipenses, 112-113. 14 situarla en un período que va desde la primavera del 61 hasta alrededor del año 67, fecha aproximada de la muerte del apóstol. 6 Ortiz, dice: Ninguna de las localizaciones propuestas puede considerarse cierta. En 2Co 6:5; 11.23 Pablo habla de varias prisiones, sin especificar. No podemos saber con absoluta certeza en qué ciudad estaba preso al escribir Flp. … Tampoco, se puede fijar con certeza la fecha en que fue escrita esta carta. 7 Comentario sobre la investigación: No hay completo acuerdo respecto al lugar desde el cual fue escrita la carta. Pablo afirma que escribe desde una prisión (1:7, 13, 17), en la cual se encuentra por la causa del evangelio. Algunos pasajes de la carta hacen pensar que al escribirla el autor estaba en peligro de muerte inminente (1:21–24), quizás como resultado de un proceso judicial, pero no hay indicaciones precisas sobre el lugar donde se encuentra. Por otra parte, en el texto de la carta se mencionan una serie de viajes entre Filipos y el lugar donde está Pablo cuando escribe, de manera que podemos reconstruir los acontecimientos de la siguiente manera: Hasta Filipos habían llegado noticias acerca de la prisión de Pablo y los filipenses le enviaron una ofrenda o regalo con Epafrodito (2:25; 4:18). En el curso de su visita a Pablo, Epafrodito se enfermó y la noticia de su dolencia llegó hasta los filipenses (2:26). Luego Epafrodito a su vez se enteró de la preocupación de los filipenses por su salud, y ello llegó a causarle angustia (2:26). Al escribirse la carta Epafrodito está a punto de viajar hacia Filipos, y tanto él como Pablo tienen un fuerte sentido de urgencia respecto a ese viaje (2:25, 28). Pablo también tiene planes de enviar a Timoteo hacia Filipos, en cuanto se aclare su propia situación (2:23), en lo que evidentemente aparece como una visita pastoral (2:19, 20). Pablo mismo espera viajar para visitar a los filipenses, si es que llega a salir en libertad. ¿Dónde entonces fue escrita la carta? ¿En qué ciudad estaba la prisión desde la cual Pablo escribió? El Apóstol estuvo preso muchas veces (2Cor 11:23) y tenemos en Hechos el relato de tres encarcelamientos: Uno en la misma ciudad de Filipos al inicio de la obra misionera allí (Hch 16:23–40), otro en Cesarea (Hch 21:32–26:32) y otro en Roma (Hch 28:16–31), que realmente es continuación del anterior. La teoría más antigua sostiene que Pablo escribió esta Carta a los Filipenses desde la prisión en Roma, tomando en cuenta las referencias al Pretorio (1:13) y a la casa del César 6 Legasse, S., La carta a los Filipenses, la carta a Filemón, 8-9 7 Ortiz, Filipenses, 14 15 (4:22). Sin embargo el peligro de muerte al que la carta hace referencia, y la situación difícil que atraviesa el autor, no parecen armonizar con el relato de Lucas (Hch 28:30, 31), según el cual en su prisión en Roma Pablo disfrutaba de una relativa comodidad y no hay evidencia de un inminente peligro de muerte. Nada quita que las circunstancias pudiesen haber empeorado como resultado de un cambio político. Aunque no hay seguridad absoluta, existen bases sólidas para la idea de que la carta se escribió desde Roma, ya que además de las razones señaladas arriba, Roma tenía ya una comunidad cristiana numerosa y la duración del cautiverio habría permitido todos los viajes que la carta menciona. Además, las referencias al probable veredicto como algo definitivo (1:20; 2:17; 3:11) sugieren que se trata de la apelación final al César, mencionada en Hechos (25:10–12; 26:32), y no únicamente de un juicio ante una autoridad provincial. Si la carta se escribió desde Roma la fecha sería tardía, entre los años 60 a 62. La segunda hipótesis sostiene que la carta se escribió en Cesarea, mientras Pablo esperaba el resultado de su apelación al César (Hch 25:12; 26:32). Sin embargo, el tiempo que duró la prisión del Apóstol en Cesarea, según los datos de Hechos, no habría permitido todos los viajes e informes a los cuales la carta hace referencia. Tampoco había allí una comunidad cristiana numerosa como la que se puede presuponer por las alusiones de Pablo al comienzo de la carta (1:12–14). Si fue escrita desde Cesarea, podría haber sido entre 57–59. La tercera hipótesis señala a Efeso como el lugar de la prisión, pero para ésta no hay evidencia histórica. El libro de Hechos, que cuenta detalladamente el relato de un prolongado período de ministerio de Pablo en Efeso, no dice nada sobre un encarcelamiento en esa ciudad. Tampoco los otros escritos de Pablo lo mencionan. La hipótesis acerca de Efeso se basa fundamentalmente en inferencias de pasajes como 1Cor 15:32. Si la carta fue escrita desde Efeso, la fecha de su confección podría haber sido entre 54–55 Argumentos a favor o en contra: Los argumentos a favor de Cesarea como el lugar desde donde fue escrita la carta, son: Hch 23:25 se refiere al encarcelamiento en Cesarea siendo en el pretorio de Herodes, y la carta menciona el hecho de que sus “prisiones por la causa de Cristo se han hecho evidentes en todo el pretorio como a “todos los demás” (1:13). Los dos años de prisión en Cesarea (Hch 24:27) le habrían dado tiempo para una comunicación entre el lugar en que estaba prisionero y Filipos, lo cual está implícito en la carta. En Fil 1:7 Pablo menciona una defensa que él había hecho, pero estaba todavía en prisión. El caso fue cierto en Cesarea donde él hizo una defensa de sí mismo ante Félix y luego continuó confinado durante los siguientes dos años. En esta carta Pablo no hace mención de la colecta para los pobres en Judea lo cual fue muy importante en las primeras etapas de su trabajo. Cuando Pablo estaba en Cesarea ese donativo ya había sido entregado en Jerusalén, y así en la carta Pablo podía escribir de los ―dones‖ sin aludir a esta colecta. 16 Hay algo de fuerza en estos argumentos. Sin embargo, en contra de ellos debe decirse que en Cesarea Pablo no enfrentaba una posibilidad inmediata de ejecución, sino camino a Roma cuando se presentaría al tribunal delante del emperador debido a la apelación que hiciera al César (Hch 25:11). Las alternativas de muerte y liberación acerca de las cuales Pablo escribe específicamente en 1:20–24, y de la esperanza de ir a visitar Filipos (ver 2:24), no eran realmente las que tenía durante su prisión en Cesarea. Los argumentos en relación con Efeso, como el lugar de origen de la carta: La carta indica al menos cuatro viajes entre Filipos y el lugar donde Pablo estaba encarcelado: En el primero, Pablo toma conocimiento de la situación cuando Epafrodito viene desde Filipos; un mensaje llegó a Filipos informando acerca de la enfermedad de Epafrodito, y subsecuentemente se recibieron noticias de los filipenses interesándose por él (2:25–30). El viaje de Filipos a Efeso habría tomado de siete a diez días, lo que no representaría mucha dificultad para que esos viajeros hubieran hecho esos viajes. Hch 19:22 nos relata que Timoteo fue enviado desde Efeso a Macedonia y esto coincidiría con Fil 2:19–22. De los pasajes mencionados arriba indicando el encarcelamiento, podríamos ver que Pablo enfrentó realmente la pena de muerte (cfr. 1:20–23). Sin embargo, es cuestionable si Pablo habría enfrentado un prolongado encarcelamiento en Efeso, un encarcelamiento con el tiempo necesario para que tales situaciones se desarrollaran como se describe en 1:12–18. Cuando Pablo estaba en Efeso realmente consideró y hasta concretó su esperanza de llegar a Macedonia y Grecia. Por otro lado, vale preguntar si Pablo podría haber escrito 2:24 desde Roma cuando parece que al mismo tiempo sus ojos miraban hacia el oeste y no esperaba regresar al este otra vez (ver Hch 20:25 y Rm 15:18, 19). Existirían grandes similitudes entre esta carta y las primeras cartas de Pablo, más que con las últimas. En particular con la cuestión de los judaizantes, como los encontramos en Gálatas y Romanos, tema éste que mantuvo siempre la atención del Apóstol. En pasajes como 1:30 y 4:15, 16 se ve una predicación del evangelio en Filipos mucho más reciente que los 11 o 12 años que hubieran sido necesarios si Pablo hubiera escrito desde Roma. Los argumentos a favor de la perspectiva tradicional de Roma: En Roma, mientras esperaba ser juzgado ante el emperador, Pablo tenía dos posibilidades frente a él: ser declarado inocente y ser liberado o ser condenado a muerte. Pablo habla de estas dos alternativas en 1:19–26. Aunque el trayecto entre Roma y Filipos podría haber tomado más tiempo que entre Filipos y Efeso, no hubieran necesitado más que siete u ocho semanas para cada uno. Aun cuando Pablo pensó en ir a Roma, tenía en mente ir más al oeste, a España (Rm 15:23–28), hay evidencia para sugerir que mientras el Apóstol estaba en Roma, sus pensamientos se volvieron hacia las tierras del este donde él ya había trabajado, y donde las iglesias que había fundado estaban necesitando su ayuda. 17 Si bien hay similitudes entre Filipenses y las primeras cartas de Pablo, hay también evidentes diferencias, y aun en el tiempo de las cartas a Timoteo y Tito la iglesia todavía estaba amenazada por el legalismo de los judaizantes. Aunque puedan darse explicaciones acerca del ―pretorio‖ (1:13) y de la ―casa del César‖ (4:22) en relación con Efeso (o aun Cesarea), ambas expresiones bien podrían ser naturalmente usadas para referirse a Roma. La ausencia de alguna mención en Filipenses de la colecta para los creyentes de Jerusalén ha sido referida antes como un argumento para ubicar en Cesarea el origen de la carta en vez de Efeso. Es también un fuerte argumento para pensar en Roma, si Cesarea se excluye como lugar de escritura. En 2Cor 8:1–5 y 9:1–4 vemos el involucramiento de los cristianos macedonios en todo el proyecto, y así el silencio en relación con ello sugeriría que fue una cosa del pasado. Conclusión: Para nuestra comprensión de la carta, sin embargo, la ubicación es menos importante que la apreciación del hecho de que fue una carta escrita dentro de una experiencia de encarcelamiento. 1.3 LA CIUDAD DE FILIPOS8 La historia de Filipos, ha recorrido un largo camino. Antes del 360 a. de J.C. se ubicó en el lugar un pequeño poblado traciano. La ciudad misma fue fundada por quien le diera su nombre: Filipo de Macedonia, el padre de Alejandro el Grande, considerándola un lugar estratégico desde el punto de vista geográfico. Filipos cayó en manos de los romanos en 168 a. de J.C. Después de la batalla de Pidna. En 42 a. de J.C. Antonio, después que él y Octaviano derrotaran a Bruto y Casio, ubicó allí a algunos veteranos de guerra desbandados, dando a Filipos su rango de colonia romana. Entonces en 30 a. de J.C. cuando Octaviano derrotó a Antonio y Cleopatra en la batalla de Actium, envió más ―colonos‖ desde Italia a Filipos con el objeto de ubicar en un lugar más cercano al suelo patrio a sus propios veteranos de guerra. El alto concepto de los privilegios del ciudadano romano en Filipos se manifiesta en Hch 16:20, 21, 35–39 y probablemente se refleja en la misma carta en 1:27 y 3:20. Se encontraba al este de Macedonia y al norte de lo que hoy conocemos como Grecia. Estaba situada en la importante ruta comercial que existía entre Europa y Asia. Era rica en minas de oro y plata; su tierra era fértil y su comercio abundante. Era una situación geográfica estratégica para la iglesia cristiana, puesto que ahí sus visitantes podían escuchar el evangelio y llevarlo a sus lugares de origen. Era una ciudad importante en la provincia romana de Macedonia, y disponía de la particular posición de ser una colonia romana (Hch 16:12). Esto significaba que era considerada como 8 Fuente: Hendriksen,W., Filipenses, 10-14 18 un pequeño trozo de la misma Roma en el lugar. La lengua común era el latín; la ley romana controlaba la administración local y el régimen de impuestos, y muchos aspectos de la vida pública eran como en Roma misma, y muchos de los oficiales tenían el mismo título que en Roma. Los Hechos de los apóstoles nos informan que la ciudad de Filipos tenía derechos de colonia romana (16, 12). Por ella pasaba la vía Egnatia, una de las más importantes en aquel tiempo, que unía a Occidente con el Oriente. Esta ciudad era como la puerta de entrada para el continente europeo y de salida de éste para el Asia y el Oriente. En relación con muchas otras ciudades, Filipos gozaba de ciertos privilegios, en razón de que muchos de sus habitantes eran militares del Imperio Romano estacionados allí. Se supone, por tanto, que el culto al emperador era muy fuerte en esta ciudad, y coexistía con otras religiones venidas del Oriente, llamadas religiones mistéricas. En aquel tiempo era común creer que la autoridad, sobre todo la persona del emperador, era la divinidad misma encarnada en las personas. Por lo tanto, obedecer a la autoridad era obedecer a Dios. Para Pablo y sus compañeros hay un solo Señor, Jesucristo, el Hijo de Dios, que dio toda su vida como servicio. El es la verdadera encarnación de Dios. Por lo tanto, cosas o personas que pretenden pasar por Dios no son más que ídolos que mantienen una sociedad desigual e injusta.9 Así pues, Filipos no contaba con una población judía significativa (Hch 16:20, 21). Puesto que la ciudad carecía del mínimo de diez hombres para formar una sinagoga, Pablo y Silas ministraron en un área pública a la orilla de un río donde varias mujeres estaban reunidas para orar (Hch 16:13). Lidia, una mujer de negocios que viajaba de Tiatira, Asia, estaba entre los que escucharon a Pablo un día de reposo. Ella puso su fe en Cristo en respuesta a la predicación de Pablo. También una adivinadora fue liberada de posesión demoníaca (Hch 16:16–18). Los agentes de esta adivinadora, enojados a causa de la pérdida de ingresos, hicieron que Pablo y Silas fueran echados a la cárcel (Hch 16:19–24). Como a medianoche ocurrió un terremoto (Hch 16:25, 26); el carcelero se convirtió y fue bautizado junto con otros de su familia (Hch 16:31–34). En el curso de sus viajes apostólicos Pablo recibió en una visión la invitación del hombre de Macedonia que imploraba diciendo: ―Pasa a Macedonia y ayúdanos” (Hch 16.9). Interpretando este ruego como un llamado de Dios, Pablo y su comitiva navegaron hacia Neápolis, el puerto de Filipos, 13 km al S de la ciudad y punto terminal de la vía Egnatia, ruta militar que vinculaba a Roma con oriente como línea de comunicación de gran valor. 9 Bortolini, J., Cómo leer la carta a los F, 10-11. 19 La ruta imperial llamada Vía Ignacia, el principal camino desde Roma hacia el Este, culminaba precisamente en Neápolis, el puerto que servía a Filipos. Si se observa el mapa, se puede notar que para los viajeros que venían de Asia Menor rumbo a Roma, Filipos era la puerta de entrada hacia Europa. Desde la perspectiva misiológica fue también el punto de entrada del evangelio a la región que constituía el centro del Imperio. El relato de Hechos refleja que su autor tenía una clara conciencia de la trascendencia de este momento. El arribo a Filipos se indica en Hch 16.12 con una descripción de la ciudad: ―La primera [principal] ciudad de la provincia de Macedonia, y colonia [romana].‖ Después de la primera visita del apóstol con su predicación, encarcelamiento, y liberación, su contacto posterior con la ciudad se infiere de las referencias en 1Co 16.5; 2Co 2:13; Hch 20:1,6; 1Ti 1:3. Para ampliación sobre el tema del aspecto histórico de Filipos, vale la pena citar a H.H. Hendrix10 y Brown R11 10 Hendrix, En artículo Philippi: The Anchor Bible Dictionary 5, 313ss Doubleday, New York, 1992 11 Brown, Introducción al NT: La Situación de Filipos, Vol II, 638-640 20 1.4 AMBIENTE SOCIAL, POLÍTICO Y FILOSOFICO De alguna manera, la Carta a los Filipenses refleja el ambiente social, político y filosófico del lugar y de la época.12 Existen algunas pistas que nos introducen el ambiente político relacionado con la situación de Provincia romana que ostentaba la ciudad, así como la situación de reo de Pablo y toda la jurisprudencia Romana alrededor. En el ambiente filosófico, se puede percibir un interés más bien ecléctico; pues se escogían elementos atractivos de los diferentes sistemas filosóficos de origen grecorromanos: Platonismo. Cínicos. Epicúreos. Estoicismo. Sofistas. También influyó en el ambiente, la combinación de motivos judíos y paganos, especialmente los escritos de Filón de Alejandría y el gnosticismo. Para ampliación sobre el ambiente filosófico, nos podemos remitir a la obra de Brown R.13 Pero de todas maneras no podemos perder de vista la verdadera intención de la carta; cual es, el sentido bíblico y eclesial que le imprime a su doctrina y a su experiencia de fe. El orgullo cívico de los filipenses (a quienes se otorga el equivalente de su nombre latino, filipenses, en la carta de Pablo, 4.15) es un rasgo del relato de Hechos, y reaparece en alusiones que hace el apóstol en la epístola. Véase Hch 16:21; cfr. 16:37. Se usan nombres oficiales (duoviri en 16:20, 22, y ―lictores‖ o ―alguaciles‖ en 16:35). La palabra gr. trad. ―sin sentencia‖ en 16:37 probablemente refleja el latín re incognita o indicta causa, e. d. ―sin examen‖. En la carta a la iglesia de Filipos dos pasajes, 1:27 y 3:20, hablan de ―ciudadanía‖, término que tendría un atractivo especial para los lectores; y las virtudes enumeradas en 4:8 son aquellas que la mente romana habría de apreciar en forma especial.14 1.5 EL AUTOR Según el texto de las primeras líneas de esta carta su autor es el apóstol Pablo, quien al momento de escribir estaba acompañado de Timoteo, su discípulo y compañero en la tarea misionera de anunciar el evangelio y establecer iglesias. La carta va dirigida a los santos en Cristo Jesús que están en Filipos. El propio Pablo había sido quien predicó por primera vez el evangelio en Filipos durante su segundo viaje misionero (Hch 16:12–40), y al salir de esa 12 13 14 Douglas, J.D.: Nuevo Diccionario Bíblico, 235-236. Brown, Introducción al NT, Vol I, 146-152 Lockward, A., Nuevo Diccionario De La Biblia, 403 21 ciudad dejó ya una iglesia formada (Hch 16:40). Se acepta como auténtica la afirmación de la carta de que Pablo es el autor, y no ha habido razones de peso para poner en duda ese dato. El mismo asienta su firma al principio de ella y utiliza a Timoteo como un testigo silencioso (1:1). El estilo es el de una carta sencilla, afectuosa y no estudiada. Brota de un corazón amoroso y agradecido que expresa su sentir personal como un padre que escribe a su hijo. Además, los temas y el estilo reflejan algunas de las notas características del resto de la literatura paulina. 1.6 LA IGLESIA DE FILIPOS Así resume Bortolini, la importancia de la fundación de la comunidad de Filipo: En primer lugar, los Hechos de los Apóstoles quieren mostrar que, al llegar a Filipos, Pablo y sus compañeros están introduciendo el Evangelio en Europa. Cerca de dos décadas después de la muerte y resurrección de Jesús, su mensaje ya está llagando a otros continentes. Si es verdad que el Evangelio no tiene fronteras, también lo es que él fuerza a las personas a tomar posición. Al anunciarse la Buena Nueva a los pobres y oprimidos, rápidamente provoca una reacción de los que no quieren cambios sociales. Podemos, por tanto, afirmar que Evangelio y conflicto son dos realidades que se tocan. Quien se dispone a anunciar el Evangelio, se dispone igualmente a enfrentar los conflictos, malos tratos, difamación y prisión. Puesto que Filipos es ―una de las principales ciudades de Macedonia‖ (Hch 16, 12), la fundación de un núcleo cristiano en esta ciudad nos lleva a pensar en la evangelización de los grandes centros urbanos del pasado y del presente. Pablo es un hombre que evangeliza metrópolis y personas no pertenecientes al pueblo judío, al contrario de Jesús, que se dirigió preferencialmente a su pueblo y, dentro de éste, a las personas del campo. El cambio del ambiente rural al de la ciudad requiere de nuevas formas d evangelización, pues el hombre de la ciudad es portador de culturas y valores propios. El Evangelio, por tanto, necesita encarnarse en nuevas realidades y culturas. La ciudad de Filipos tiene una organización propia, de acuerdo con el modo como los romanos administran las ciudades. Pablo aprovechó este factor cultural, dando a la comunidad fundada una organización semejante (Cfr. Flp 1: 1, donde se habla de diferentes funciones como epíscopos y diáconos). En Filipos nace una comunidad cristiana sin ninguna vinculación con la sinagoga, pues las personas se reunían para la oración fuera de la ciudad, a orillas del río (Hch 16, 13). Así aprendemos que el Evangelio poco a poco se va distanciando del tipo 22 de organización religiosa propia del pueblo judío. De este modo la comunidad cristiana va adquiriendo una identidad propia. Al reunir a las personas en las casas, el Evangelio permite a las mujeres asumir funciones importantes de liderazgo en las comunidades. Esto puede ser una excelente oportunidad para redimensionar hoy la pastoral urbana, todavía centralizada en la parroquia y en el clero. El auditorio de Pablo en Filipos se compone de mujeres, y a partir de la casa de una mujer (Lidia) nace la comunidad de los filipenses (Cf. Hch 16, 15). En la Carta a los Filipenses aparecen los nombres de dos mujeres –Evodia y Síntique-, lo que nos lleva a pensar que esta comunidad era liderada por mujeres, La Carta afirma que ellas ayudaron a Pablo en la lucha por el Evangelio (Cfr. 4: 2). Se tiene la impresión de que la presencia y el liderazgo de mujeres al frente de esta comunidad suscitaron una sensibilidad mayor en relación con el desarrollo de la evangelización. El hecho es que la comunidad de Filipos mantuvo con Pablo una relación sin igual. Vale la pena recordar un trozo de la Carta que él escribió en la cárcel: (Flp 4: 10.15-16). Esto nos hace pensar en dos cosas: ¿De dónde nació tanta sensibilidad y afecto para con Pablo? ¿Por qué acepta él la colaboración material de los filipenses, cuando siempre tuvo como norma no recibir nada de las comunidades a cambio de su acción pastoral? 15 La comunidad de Filipos nace a partir de un grupo de mujeres. En Filipos, en casa de una mujer que no era de esa ciudad, nace la comunidad cristiana que más alegrará a Pablo en sus tribulaciones del Evangelio. Comentario: Una oportunidad impedida en Asia (Hch 16:6–8); un misionero respondiendo al llamamiento de Dios para ir a servir en otro continente (Hch 16:9, 10); una exitosa mujer de negocios de visita en lo que hoy es Grecia (Hch 16:14). Estas circunstancias llegaron a ser la fórmula que Dios usó y que produjo el primer convertido a la fe cristiana en Europa. De principios tan sencillos se desarrolló la iglesia en Filipos (Hch 16:12–40). El apóstol Pablo se encontraba en su segundo viaje misionero con Silas y Timoteo, sus compañeros de viaje esa vez, que fueron testigos de los interesantes factores anteriores. En cuanto al estado de la iglesia, colegimos de 2Co 8:1, 2 que sus miembros eran pobres pero muy liberales; y de Fil 1:28–30, que estaban sobrellevando persecuciones. La única reprensión recordada tocante al carácter de ellos fue, de parte de algunos miembros, la tendencia a disensiones. Por tanto, la amonestación del apóstol sobre la disputa (1:27; 2:1– 4, 12, 14; 4:2). Así pues, Pablo y sus compañeros entraron a Filipos por expresa indicación del Espíritu Santo. A partir de Hch 16:10 el relato pasa a la primera persona plural, indicando que Lucas 15 Bortolini, J., Cómo leer la carta a los F, 15-17. 23 se ha unido al grupo. Los acontecimientos de las intensas y dramáticas jornadas que narra este capítulo dejan su marca decisiva en la actitud y la conducta de esta iglesia, la cual iba a ocupar un lugar muy especial en el afecto del Apóstol. En contraste con otras iglesias, los filipenses no se negaron a participar financieramente en la misión paulina, y lo hicieron con generosidad (Fil 4:10–16). En el relato lucano, las personas que resultan afectadas por el evangelio constituyen una variedad representativa de diferentes estratos sociales, y el impacto de su conversión afecta también la estructura de la cual forman parte, de manera que se puede decir que toda la ciudad es tocada por el impacto de este singular comienzo. El relato de Lucas nos presenta a los misioneros Pablo y Silas usando como punto de contacto la colonia judía o judaizada, es decir el lugar de oración en un día de reposo junto al río (Hch 16:13). Allí Lidia, una comerciante pudiente y piadosa, de origen gentil, se entregó al Señor, y ofreció su casa para que sirviese de alojamiento a los evangelistas, proveyendo de esa manera una base para la misión (vv.15, 40). La ―casa‖ (óikos, palabra griega de la cual deriva la palabra economía) de Lidia no era únicamente su lugar de habitación sino su centro de trabajo, el local de su empresa, y la palabra incluía tanto a los familiares cercanos como a la familia extendida y los esclavos que trabajaban para ella. Este ejemplo de generosidad llegó a ser una marca distintiva de esa iglesia, según se lee claramente en esta epístola a los Filipenses (4:15–19) y en otras (2Co 8:1–7). Según el relato de Hechos, después de la conversión de Lidia, Pablo curó a una esclava poseída por un espíritu, y él y Silas tuvieron que enfrentar la consiguiente persecución de aquellos cuyos intereses económicos habían sido afectados. En la cárcel mostraron su espíritu de contentamiento aun en medio del dolor (Hch 16:17–25), tema que también aparece en forma destacada en esta epístola. El celo evangelizador y el testimonio de Pablo y Silas llevaron a la conversión del carcelero, cuya actitud también es transformada, de manera que deja de ser el simple funcionario endurecido. Al salir de la cárcel para proseguir su viaje, los misioneros muestran una clara conciencia de las realidades urbanas, civiles y políticas, y de la manera en que pueden afectar su propio trabajo y la vida de las jóvenes iglesias (Hch 16:35–40). Referencias a la mencionada conciencia ciudadana, tan importante para los filipenses, aparecen en el propio vocabulario de la epístola, bien como exhortación ética (1:27) o como analogía de verdades espirituales (3:20). El llamado macedónico se ha considerado como el acto que cambió el curso de la historia occidental. Por medio de él, el evangelio inició su viaje hacia el occidente para penetrar por primera vez en el continente europeo. Desde su misma fundación, la iglesia de Filipos mantuvo una estrecha relación de amor con el apóstol Pablo, apoyándole financieramente en sus empresas misioneras ―... por vuestra comunión en el evangelio, desde el primer día hasta ahora‖ (Fil 1:5). Eso lo hicieron a pesar de su ―profunda pobreza‖ (2Co 8:1–3). Cuando estaba en Tesalónica, le enviaron una ofrenda (Fil 4:16). Lo mismo cuando estaba en Corinto (2Co 11:9). Cuando supieron que el apóstol estaba preso, le enviaron otra ofrenda por mano de Epafrodito, que la llevó corriendo muchos riesgos (Fil 2:25, 30). Así 24 se enteró Pablo del estado de la iglesia, en el cual sobresalían algunas divisiones internas, así como otras dificultades. Por eso decide escribirles una carta de agradecimiento, aprovechando la ocasión para dar consejos pertinentes a la fe y los problemas que enfrentaban. 25 2. EL NIVEL LITERARIO 2.1 ESTILO DE LA CARTA Sobresale el tono personal de la carta, su cordialidad y las reiteradas menciones de la palabra ―gozo‖ que realiza (unas dieciséis veces, en forma de verbo o sustantivo). Es maravilloso contemplar al apóstol Pablo hablar en esta forma cuando las circunstancias que le rodeaban eran tan negativas. Pero la clave está en la centralización que hace de la persona de Cristo, a quien menciona constantemente. Esto se manifiesta por la continua mención de frases como ―en Cristo‖, ―en él‖, o ―en el Señor‖. Y también por el uso frecuente de la idea de comunión (Koinonía) o participación, que aparece en Fil 1:5, 7; 2:1; 3:10; 4:14–15. Otra palabra que se menciona mucho (siete veces) es ―evangelio‖ (1:5, 7, 12, 27; 2:22; 4:3, 15). El tono y lenguaje de esta epístola muestran una relación de afecto mutuo y profundo entre el autor y sus destinatarios. Ello se ve confirmado por el material que encontramos en Hechos 16 sobre la forma en que entró el evangelio en la ciudad de Filipos, y las referencias igualmente cariñosas en otras epístolas paulinas (2Co 8:1–5; Rm 15:26-27), donde el Apóstol nombra a toda la provincia de Macedonia, que incluye a Filipos y Tesalónica. Esta es una de las pocas iglesias en las cuales aparentemente no había los graves problemas morales o doctrinales que enfrentaban otras comunidades. El tono general de la carta es más bien el de un desafío a que los filipenses sigan siendo excelentes y crezcan hacia la madurez. La clave del contenido de esta carta es Cristológica. El propio autor afirma que su vida gira alrededor de la lealtad a Cristo, que su anhelo es crecer en semejanza a Cristo y participar tanto de las victorias como de los sufrimientos de Cristo. Al mismo tiempo, su descripción de los destinatarios se basa en que éstos tienen una relación particular y personal con Cristo a la cual el autor puede apelar cuando les pide que vivan conforme a ciertos valores fundamentales. Toda esta cristología de la vida misma y de la práctica se relaciona con una visión de Cristo que alcanza su máxima expresión en el hermoso himno cristológico (2:6– 11), uno de los pasajes bíblicos más completos y también más ricos en contenido respecto a la persona de Jesucristo. En vista de lo anterior, resulta sorprendente que en medio de un lenguaje tan diáfano y afectivo aparezcan de pronto las referencias a los perros a partir de 3:2. El estilo es abrupto, llevándole su fervor de afecto a pasar rápidamente de un tema a otro (2:18, 19–24. 25–30; 3:1, 2, 3, 4–14, 15). En ninguna otra Epístola emplea expresiones de amor tan calurosas. En el 4:1 parece que está confuso por falta de palabras que expresen el alcance y el ardor de su afecto por los filipenses: “Hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor”. La mención de obispos y diáconos en el 1:1 se puede deber a la 26 fecha tardía de la Epístola, cuando la iglesia ya hubo empezado a asumir aquel orden propuesto en las Epístolas Pastorales y que siguió siendo el orden prevaleciente en los primeros y más puros tiempos del cristianismo. 2.2 UNIDAD LITERARIA Se presentan algunas hipótesis para explicar algunos problemas literarios y de contenido recurriendo a la negación de la unidad literaria de la carta, donde la actual carta sería una combinación de dos o tres cartas, escritas en diversos momentos y situaciones. Y también hay otra hipótesis que niega las anteriores, sosteniendo que esta carta es única y que fue escrita por el mismo Pablo con algunas interrupciones en el discurso. La teoría de Bortolini, respecto a cómo se formó la Carta a los Filipenses es así: Es probable que la Carta a los filipenses, en la forma como ha llegado a nosotros, sea una colección de cartas escritas en tiempos y lugares diferentes. De hecho, al comienzo del capítulo 3 tenemos la impresión de que la Carta está llegando a su fin, pues Pablo afirma: ―Por lo demás, hermanos míos, permanezcan alegres en el Señor‖ (3:1a). Pero, en vez de terminar, comienza una dura polémica con sus adversarios, llamándolos perros, malos obreros y falsos circuncisos (Cfr. 3:2). Según los estudiosos, aquí tenemos el comienzo de una boleta escrita en otra ocasión y con otro estado de ánimo. Encontramos en el capítulo 4, la misma situación. Al leer los vv. 4-9, se nos lleva a creer que la Carta está terminando. Sin embargo, aparece un nuevo tema, el del agradecimiento por la ayuda que los filipenses le enviaron a Pablo en la prisión. Por lo tanto, todo lleva a creer que la Carta a los filipenses es un conjunto de tres cartas distintas. Los estudiosos del asunto afirman que el trecho más antiguo se encuentra en 4, 10-20 (primera carta); en seguida viene la parte más larga: 1, 1-3, 1 + 4, 27.21-23 (segunda carta) y, finalmente, 3, 2-4, 1+4, 8-9 (tercera carta). La primera carta (4, 10-20) agradece la solidaridad de los filipenses. Sabiendo que Pablo estaba en la cárcel, la comunidad le envió, por medio de Epafrodito (Cf. 4, 18), una ayuda para aliviar sus necesidades (Cf. 4, 16). Por lo tanto, es un billete de agradecimiento que ayuda a reflexionar sobre la solidaridad con los que son aprisionados a causa de la evangelización. Cuando escribió la segunda carta (1, 1-3, 1 + 4, 2-7.21-23), Pablo todavía está en la misma prisión. En ese espacio de tiempo, Epafrodito cayó gravemente enfermo. Probablemente él es el portador de la segunda carta: (2, 25-30). Pablo piensa también enviar a Timoteo a Filipos, a fin de que, a su regreso, pueda traer noticias de aquella comunidad (Cf. 2, 19). En el periodo entre la primera carta y la segunda, Pablo hizo una revisión de vida. Para él ―el vivir es 27 Cristo, y el morir una ganancia‖ (1, 21). Está dispuesto a morir: ―Mi deseo es partir de esta vida y estar con Cristo, y esto es mucho mejor‖ (1, 23). Pero la evangelización reclama su presencia y sus energías: ―Pero para ustedes es más provechoso que yo siga viviendo. Esto me convence: seguramente quedaré y permaneceré con todos ustedes, para que puedan progresar y alegrarse en su fe‖ (1, 24-25). Probablemente Pablo tomó la decisión de hacer valer sus derechos de ciudadano romano. Con este recurso obtendrá nuevamente la libertad y podrá ver de nuevo a la comunidad de Filipos: ―Tengo fe en el Señor de que yo mismo podré ir pronto hasta ustedes‖ (2, 24). La primera y la segunda carta fueron escritas desde la prisión. Es difícil establecer con exactitud el lugar y la fecha de las mismas. Es probable que hayan sido escritas en Efeso. Pero los Hechos de los Apóstoles no hablan de la prisión de Pablo en esa ciudad. Más tarde, al escribir a los corintios, recuerda los conflictos que enfrentó en la región de Asia (es decir, en Efeso): ―Hermanos, no queremos que ustedes ignoren esto: la tribulación que sufrimos en Asia nos hizo sufrir mucho, más allá de nuestras fuerzas, hasta el punto de perder la esperanza de sobrevivir. Sí, nos sentíamos como condenados a muerte: nuestra confianza ya no podía apoyarse en nosotros mismos, sino en Dios que resucita a los muertos. Fue Dios quien nos libró de esa muerte…‖ (2Co 1, 8-10). La tercera carta (3, 2-4, 1+ 4, 8-9) no habla de prisión. Pablo, ya liberado, habría visitado a la comunidad de Filipos. Estando en otra ciudad – quizá Corinto-, llega a saber los graves conflictos provocados por falsos misioneros en la comunidad filipense. Ellos pretenden obligar a la circuncisión a los miembros de la comunidad. Son judíos convertidos que desean imponer a la comunidad la Ley de Moisés como condición para llegar a la salvación. Se trata de un movimiento reformista: para ser cristiano es preciso, antes, ser judío y observar la Ley y las costumbres de los judíos. Pablo quiere que la comunidad reaccione con fuerza a este movimiento. Así nace la tercera carta, marcada por la confrontación con el anuncio de un evangelio acomodado.16 Ramírez, escribe así: Existen dudas sobre la unidad literaria de la Carta a los Filipenses. En 3:1 y en 4,8 Pablo comienza con una expresión «por lo demás», «por último», dando la impresión de que está acabando la carta. Está, sin embargo, continua. En 4, 10 comienza con la expresión «mi alegría como creyente ha sido grande», seguida de una acción de gracias, todo ello más propio de un comienzo de carta que de unos párrafos conclusivos. Según algunos, en 4, 10 comenzaba una carta distinta. Unos 16 Ibid., 19-22. 28 comentaristas hablan de dos cartas: - carta A: 1,1-3,1a y 4,2-7,10-23 - carta B: 3, 1b-4,1 y 4,8-9 Otros autores afirman la existencia de tres cartas, suponiendo que 4,10-20 es una carta, o parte de una carta distinta de las otras dos: -carta A: 4,10-20 (ó 4,10-23 carta B: 1,1-3,1a y 4,2-7, 21-23 -carta C: 3,1b-4, 1 y 4,8-9.17 Legasse, escribe así: Pablo está en la cárcel cuando escribe a los cristianos de Filipos. En la carta habla de sus «cadenas» (1, 13.14.17) y considera el martirio como posible (1, 20-21; 2, 17). Pero estas alusiones no figuran más que en los dos primeros capítulos. Sin duda, podrían verse otra en 4, 14, cuando Pablo felicita a los Filipenses por haber participado en su «dificultad». Esto no impide que esta carta, de la que nadie discute que es un producto genuino de Pablo, ofrezca algunos datos que han permitido a algunos exégetas contemporáneos ver en ella, no una carta única, sino una colección de varias cartas dirigidas a la misma comunidad de Filipos. Examinemos Flp 3, 1. Pablo empieza aquí una exhortación a que se alegren en el Señor. Pero esta exhortación acaba enseguida y desemboca en un discurso más bien severo, de tono especialmente virulento: «¡Ojo con esos perros, ojo con esos malos obreros!» No hay nada en los dos primeros capítulos que dejen prever este tipo de advertencia. Por otra parte, en este capítulo 3, Pablo no menciona su situación de encarcelado ni expresa su preocupación por su propia suerte. En fin, ¿no es extraño que aguarde al final de la carta para dar las gracias a los Filipenses? (4, 10-20). Por estos motivos y algunos otros, hoy se está fácilmente por la separación, aunque con algunas variantes. He aquí un ejemplo, sacado del reciente comentario de J. F. Collage. El autor distingue tres cartas, en el siguiente orden cronológico: 1)- carta A (4, 10-20 o 10-23): unas palabras de gratitud por la ayuda que le han enviado los Filipenses. 2)- carta B (1, 1-3, 1ª; 4, 2-7 y quizás 4, 21-23) comprende, además de una introducción (1, 3-11), un eco de la situación personal de Pablo en la cárcel (1, 21-26), algunos consejos a propósito de la vida comunitaria de los Filipenses (1, 272, 18), algunos proyectos para el futuro (2, 19-30) y varias exhortaciones. 3)– carta C (3, 1b-4, 1.8.9): una pieza de artillería dirigida contra los propagandistas antipaulinos y en la que Pablo hace su apología. Sin alusión alguna a la cautividad, esta carta podría ser posterior a la misma, a no ser que se prefiera –dada la ausencia de eco alguno de la polémica en las cartas A y B- fijar la composición de la carta C después de la liberación de Pablo. 17 Ramírez, F., Gálatas y Filipenses, 113-114. 29 Si se admite esta teoría u otra parecida, hay que admitir igualmente que algún recopilador lo juntó todo para hacer de las tres cartas una sola. Así pudo poner al final los saludos y unos deseos (4:21-23) que pertenecían primitivamente a una carta incorporada más arriba. También hay que suponer que les quitó a dichas cartas la introducción o la conclusión, o quizás ambas. Pero ¿se imponen con certeza estas operaciones?. Realmente no es así. En primer lugar, ¿por qué realizar esa fusión? Si se responde que las cartas así reunidas eran demasiado cortas para subsistir ellas solas, es fácil responder que la antigüedad nos ha transmitido un gran número de cartas muy breves y que, en lo que afecta al Nuevo Testamento, la carta a Filemón, así como la segunda y la tercera carta de Juan, son poco más largas que la nota identificada en Flp 4: 10-20. Por otra parte, ¿se habrían atrevido a mutilar unas cartas que se consideraban, si no ya como Escritura sagrada (Cfr. 2Pe 3: 16), al menos como dignas de especial veneración? Ignoramos, Por otra parte, el tiempo que necesitó Pablo para dictar esta carta; pero es cierto que escribir exigía entonces mucho más tiempo que hoy, teniendo en cuenta sobre todo el material empleado. Además, Pablo estaba encarcelado, lo cual no facilita desde luego una redacción ininterrumpida; pudo dejar que transcurriera cierto tiempo entre dos dictados, un tiempo durante el cual pudieron surgir nuevos factores o acontecimientos que provocasen a continuación un cambio de tono que nadie podía prever.18 Comentario: Nos gustaría retomar las palabras de Ramírez: Cualquier división de estas características es una hipótesis razonable, aunque no tiene apoyo textual en los manuscritos antiguos. Tampoco tenemos ejemplos de que en el mundo antiguo algún escriba hiciera compilaciones de cartas a bases de cortar y pegar cartas distintas, que es lo que se supone que alguien hizo con estas dos o tres cartas de Pablo. Por último, si asumimos que un escriba cogió tres cartas, las «corto en trocitos» y las mezcló, ¿por qué fue tan torpe de dejar en medio de la carta un texto que parece una despedida en 3, 1 («por lo demás, hermanos míos, alegraos en el Señor»)? o ¿por qué insertó de modo tan abrupto el texto de 3,2ss, interrumpiendo el discurso natural de Pablo? ¿Qué hizo, en fin, este escriba con los saludos iniciales, las despedidas, y las partes de las otras cartas que no incluyo en su compilación? Desde otro punto de vista, la carta goza, tal como hoy la conocemos, de una gran unidad temática. Esta unidad se aprecia desde los primeros momentos. Si los saludos iniciales de Pablo normalmente anticipan el tema de la carta, no es Filipenses una excepción: el ser socio en el evangelio (1, 3-4) reaparece en 4, 10-20; 18 Legasse, S., La carta a los F 10-11 30 el amarse cada vez más es el tema de 1, 27 – 2, 18; los frutos de la justicia en el v. 11 y la urgencia apocalíptica de los vv. 6.10 aparecen en 3, 4-14. En resumen, a pesar de que resultan atractivas las teorías que segmentan la carta en varias cartas primitivas, resultan para Filipenses excesivamente hipotéticas. Es preferible considerar que estamos ante una única carta escrita por el mismo Pablo, con algunas interrupciones del discurso, repeticiones y los cambios abruptos que vemos en otras cartas de Pablo y que no son extrañas a la retórica ni al género epistolar.19 Las otras objeciones a la unidad de la carta que se han mencionado responden a un punto de vista, y para cada uno de ellos hay respuesta razonable. Nos basta señalar las diferentes hipótesis propuestas. Pero nos remitimos al ―texto canónico‖ actual, sobre el cual ha habido aceptación en la tradición de todas las denominaciones e iglesias cristianas. Ortiz, defiende esta posición citando los estudios de V. Koperski: ―Estudia detenidamente los argumentos presentados para apoyar la teoría de la composición literaria y muestra que no tienen la fuerza que algunos pretenden darles‖20 Así, en el presente trabajo adoptamos la perspectiva de que la carta puede verse como un todo unitario, y la estudiaremos en la forma en que ha sido transmitida desde los primeros tiempos, como una unidad cuyas diferentes partes reflejan diferentes facetas de la personalidad y estilo del Apóstol, correspondientes a sus diferentes estados de ánimo y a diferentes necesidades pastorales de sus destinatarios. Es más, cuando se observa con detenimiento el contenido y tono de la totalidad de la epístola se percibe mejor la situación pastoral a la cual Pablo responde. La iglesia de Filipos está amenazada por la presencia de algunos misioneros judaizantes cuyo énfasis en la circuncisión y cuya arrogancia espiritual (3:2, 3) parecerían vincularlos con los enemigos de Pablo en Corinto (2Cor 10–13). Promovían una religiosidad basada en prácticas externas, pero cuyo móvil último era la ambición material (3:18, 19). Su influencia parece haber hecho surgir en la iglesia de Filipos un sector que sostenía cierto perfeccionismo espiritual de tipo individualista en el cual no cabía la idea de sufrimiento, sacrificio o limitación ni tampoco la de solidaridad con los hermanos. El Apóstol responde con un mensaje que regresa a lo fundamental de la enseñanza apostólica sobre Jesucristo, su encarnación, su resurrección y su señorío (2:5–11). Sobre esa base describe la naturaleza de la vida en Cristo que él mismo como apóstol ejemplificaba al aceptar el privilegio del sufrimiento (1:29, 30), las limitaciones del presente (1:7, 12–18; 2:17, 18; 3:12, 13; 4:10–14) y la esperanza del futuro (1:7, 19–23; 19 20 Ramírez, F., Gálatas y Filipenses, 113-114. Koperski,V., Citado por Ortiz en Filipenses, 10 31 2:16; 3:10, 11, 20, 21; 4:19, 20). Toda la enseñanza doctrinal y ética de esta carta pasa a tener sentido desde esta perspectiva. 2.3 AUTENTICIDAD La evidencia interna de la autenticidad de esta Epístola es fuerte. El estilo, la forma del pensamiento, y la doctrina, concuerdan con los de Pablo. Paley, cita la mención al propósito del viaje de Epafrodito, la contribución filipense para las necesidades del apóstol, la enfermedad de Epafrodito (1:7; 2:25–30; 4:10–18), el hecho de que Timoteo estuvo largo tiempo con Pablo en Filipos (1:1; 2:19), la referencia a su encarcelamiento ya de larga duración (1:12–14; 2:17–28), su voluntad de morir (cf. 1:23 con 2Co 5:8), la referencia al hecho de que los filipenses habían visto su ultraje sufrido allí (1:29, 30; 2:1, 2.).21 La evidencia externa es igualmente decisiva: Policarpo, ad Philippenses, sec. 3. y 11; Ireneo, Adversus Haereses, 4:18, sec. 4; Clemente de Alejandría, Paedagogus, 1. 1, pág. 107; La Epístola de las iglesias de Lyon y de Viena, en Eusebio, Historia Eclesiástica, 5.2; Tertuliano, Resurrectio carnis, c. 23; Orígenes, Celsus, 1:3, pág. 122; Cipriano, Testimonios contra los Judíos, 3.39. Señala Mattew Henry: ―Esta epístola aparece en todos los cánones de escritura durante el segundo siglo. Su origen paulino es reconocido‖. 22 2.4 EL TEXTO DE FILIPENSES23 Aquí se podrá hablar de los manuscritos griegos que por razón de su importancia son citados como Testigos Constantes, en su orden: Papiros, Códices Unciales o Mayúsculos y Códices Minúsculos. SÍMBOLO 46 SIGNIFICADO ÉPOCA-LUGAR CONTENIDO Papiro 46 200. Dublin. Chester Beatty 1; 1:5-15.17-28; 1:302:12.14-27; 2:29-3:8. 10-21; 4:2-12.14-23. 21 Paley, Horae Paulinae, cap. 7. 22 Henry, M., Comentario De La Biblia, 951 23 Nestle-Aland., novum Testamentum Graece, Introducción 32 Papiro 16 III/IV. Cairo, Egyptian Mus. 3:10-17; 4:2-8 Papiro 61 700. New York, Pierpont Morgan Lib. 3:5-9.12-16 Códice Sinaítico IV. London Brit.Libr. Eapr (Evangelio, Hechos, Pablo, Revelación) Códice Alejandrino V. London, Brit.Libr. Eapr. Códice Uncial Vaticano IV. Cittá del Vaticano, Bibl Vat. Eap. Códice 04 V. Paris, Bibli.Nat. Eapr. 1:1-22; 3:5-fin. Códice de Beza VI. París, Bibl.nat. p (016) Códice 016 V. Washington, Smithsonian Inst. 1:1-14.11-13.20-23; 2:13.12-14.25-27; 3:4-6.1417; 4:3-6.13-15 048 Códice 048 V. Cittá del Vat.Bibl.Vat. 1:8-23; 2:1-4.6-8 (010) Códice 010 IX. Cambridge, Trin.Coll. p (012) Códice 012 IX. Dresden, Sachs. Landesbibl. p Códice 044 IX/X.Athos, Lavra. eap Códices Unciales. X, IX, VI. Athen, Sinaí, Sinaí. p, 1:1-3:4; 4:12-13.1721.2.22-24; 3:6-8 Códices Minúsculos IX, X, XIV. París, Athos, Sinai. Eap, ap, ap . (01) 33 2.5 CONTENIDO GENERAL DE LA CARTA Saludo 1:1-2 La calurosa y entrañable relación de Pablo y Timoteo con la iglesia de Filipos, queda reflejado en este saludo. Casual, afectuoso, familiar, incluyente. Acción de gracias y súplica 1.3-11 Pablo, como siervo gozoso, da gracias por la fidelidad y aprecio de los cristianos en Filipos, su corazón rebosaba al rememorar cómo Dios había obrado en Filipos, guiándolos a la salvación, y hace una oración pidiendo que puedan estar llenos de frutos de justicia. Situación personal: El vivir es Cristo. 1:12-26 Pablo se goza en sus prisiones; lo que ha acontecido ha contribuido para el progreso del Evangelio y en el hecho de que Cristo será magnificado en su persona, o por vida o por muerte. La lucha por la fe 1:27-30 Pablo exhorta a los filipenses a permanecer firmes, unidos y sin temor. La humillación y exaltación de Cristo 2:1-11 Por medios del llamamiento a un cuádruple incentivo, exhorta a los filipenses a vivir una vida de concordia, de humildad y de servicio, imitando a Cristo Jesús, quien se humilló a sí mismo hasta la muerte de cruz y a quien Dios exaltó hasta el lugar sumo. El trabajo en la Salvación 2:12-18 Exhortación a brillar como estrellas en medio de una generación mala y perversa, pues haciéndolo así, el corazón de Pablo y el de ellos se colmará de gozo La misión de Timoteo y Epafrodito 2:19-3:1a. Pablo les promete enviar a Timoteo, -Él mismo espera ir pronto a verlos- y les anuncia el envío de Epafrodito, ya recuperado de su enfermedad. El proseguir a la meta 3:1b-4:1 Amonesta contra los malos obreros, quienes poniendo su confianza en la carne, tratan de establecer su propia justicia. Pablo confía plenamente en la justicia de Cristo, en la cual prosigue como su meta de perfección. Exhorta a los filipenses a imitarle, a honrar a los amigos y a tener cuidado con los enemigos de la cruz, quienes solo piensas en lo terrenal. 34 El regocijo en el Señor 4:2-9 Ruega a Evodia y Síntique a ser de un mismo sentir. Exhorta a los hermanos de Filipo a permanecer firmes. Alienta a los filipenses a regocijarse en el Señor y a ser bondadosos con todos, presentando sus oraciones delante de Dios, pensando en aquello que es digno de alabanza, para que el Dios de paz esté con ellos. La gratitud por la ayuda recibida 4:10-20 Se goza en la generosidad de los filipenses, y testifica que ha aprendido a contentarse y a estar preparado para cualquier situación. Confiesa su fe en Dios en quien todo lo puede y quien suplirá todo faltante. Despedida 4:21-23. Pablo concluye su carta con palabras de saludo y bendición 2.6 GÉNERO LITERARIO Los géneros literarios son las diversas formas de expresión que usualmente se emplean para transmisión de unos determinados contenidos y que responde a una concreta intención del escritor. ―Dentro de la biblia suelen distinguirse siete grandes géneros literarios: Narrativa, ley, profecía, lírica, sabiduría, apocalíptica y carta.‖24 El género literario es Epistolar o de Cartas, las cuales podían variar desde notas breves e intimas a amigos e integrantes de la familia, hasta tratados detallados destinados a una audiencia más amplia. En la carta, predominan como tipos de texto: Las noticias personales, las exhortaciones, la polémica, la argumentación, la acción de gracias, además del himno cristológico del capítulo segundo. La literatura Epistolar se caracteriza por el contenido de la formula: Introducción o Saludo, Cuerpo y Cierre o Despedida. La forma o tipo de texto podría ser: las noticias personales, las exhortaciones, el discurso argumentativo, la acción de gracias. El género literario de un escrito se suele deducir de un conjunto de elementos como su forma, su contenido, su finalidad, su origen. En el caso de la literatura epistolar lo decisivo suele se la forma. Tanto en la antigüedad como en la época actual las cartas 24 Cepedal, T., Curso de Biblia, 53-54 35 tienen una forma tradicional, caracterizada por la utilización de ciertas formulas convencionales. Lo cual no impide que el autor muestre hasta cierto punto su originalidad. Las más tradicionales son las formulas introductorias y las conclusivas. Entre las formulas introductorias se distingue: el saludo inicial (praescriptum) Una acción de gracias a Dios, y las noticias personales. Entre las formulas conclusivas (postcriptum) se pueden señalar los saludos personales y los deseos de bienestar para los receptores. Todos los elementos se encuentran en Flp, lo que no deja duda sobre el carácter epistolar de este escrito.25 2.7 ANÁLISIS DE TEXTOS RELACIONADOS CON LA ALEGRÍA26 (Alegrarse , estar bien. Salud, ¡viva!, buenos días, buenas noches, ¡felicitacio nes!27 25 1:18 (2) 2:17 ¿Qué, Y aunque pues? Que sea no derramado obstante, en libación de todas sobre el maneras, o sacrificio por y servicio pretexto o de vuestra por fe, me verdad, gozo y Cristo es regocijo anunciado; con todos y en esto vosotros. me gozo y ( me gozaré siempre, ( 2:18 2:28 3:1 4:4 (2) Asimismo Así que Por lo Regocijaos gozaos y me demás, en el Señor regocijaos apresuro a hermanos, siempre. también enviarlo, gozaos en Otra vez vosotros para que al el Señor. digo: conmigo. verlo de Para mí no ¡Regocijaos es ! nuevo, os gocéis, y molestia el yo esté escribiros con menos las mismas tristeza. cosas, y para ( vosotros es útil. 4:10 En gran manera me gocé en el Señor de que ya al fin habéis revivido vuestro interés por mí; ciertament e lo teníais, pero os faltaba la oportunida d para manifestar lo. ( Ortiz, Filipenses,15 26 GARCÍA-PELAYO., Pequeño LAROUSSE, p.41. “Grato y vivo movimiento del ánimo que se manifiesta con signos exteriores: Exclamación, gozo, dicha, humor, jovialidad, hilaridad, alborozo, júbilo, placer. 27 ORTIZ, Concordancia Manual y Diccionario Griego-Español del N.T. (5292) p.401. 36 1:4 1.25 2:2 2:29 4:1 Alegría, gozo, motivo de alegría.28 Siempre en todas mis oraciones ruego con gozo por todos vosotros, Y confiado en esto, sé que quedaré, que aún permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe, completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, sintiendo una misma cosa. Recibidlo, pues, en el Señor, con todo gozo, y tened en estima a los que son como él, Así que, hermanos míos amados y deseados, gozo y corona mía, estad así firmes en el Señor, amados. ( ( ( ( ( Alegrarse junto con.29 2:17 Y aunque sea derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y regocijo con todos vosotros. 2:18 Asimismo gozaos y regocijaos también vosotros conmigo. ( ( 2.7.1 Categorías fundamentales de la alegría en Filipenses: 1:18 2.1718 2:2829 3:1 4:4 4:10 1:4 1:25 2:2 4:1 El anuncio de Cristo El Sacrificio y servicio de la fe La amistad La persona del Señor El mandato La generosidad La oración El ministerio La unidad La comunión 28 Ibid., (5308) p.402 29 Ibid., (4638) p.363 37 2.7.2 Textos paralelos en Pablo: Romanos 12.12 gozosos en la esperanza, Romanos 12.15 Gozaos con los que se sufridos en la tribulación, constantes en la gozan; llorad con los que lloran. oración. Romanos 16.19 Vuestra obediencia ha venido a ser notoria a todos, y por eso me gozo de vosotros. Pero quiero que seáis sabios para el bien e ingenuos para el mal. 1 Corintios 7.30 los que lloran, como si no lloraran; los que se alegran, como si no se alegraran; los que compran, como si no poseyeran, 1 Corintios 13.6 no se goza de la injusticia, 1 Corintios 16.17 Me regocijo con la venida sino que se goza de la verdad. de Estéfanas, de Fortunato y de Acaico, pues ellos han suplido vuestra ausencia, 2 Corintios 2.3 Por eso os escribí como lo hice, para que, cuando llegue, no tenga tristeza de parte de aquellos de quienes me debiera gozar, confiado en que mi gozo es el de todos vosotros. 2 Corintios 6.10 como entristecidos, pero siempre gozosos; como pobres, pero enriqueciendo a muchos; como no teniendo nada, pero poseyéndolo todo. 2 Corintios 7.7 y no solo con su venida, sino también con la consolación con que él había sido consolado en cuanto a vosotros, haciéndonos saber vuestro gran afecto, vuestro llanto, vuestra preocupación por mí, de manera que me regocijé aún más. 2 Corintios 7.9 Ahora me gozo, no porque hayáis sido entristecidos, sino porque fuisteis entristecidos para arrepentimiento, porque habéis sido entristecidos según Dios, para que ninguna pérdida padecierais por nuestra parte. 2 Corintios 7.13 Por esto hemos sido 2 Corintios 7.16 Me gozo de que en todo consolados en vuestra consolación. Pero tengo confianza en vosotros. mucho más nos gozamos por el gozo de Tito, que haya sido confortado su espíritu por todos vosotros. 2 Corintios 13.9 Por lo cual nos gozamos de que seamos nosotros débiles, y que vosotros estéis fuertes; y aun oramos por vuestra perfección. 2 Corintios 13.11 Por lo demás, hermanos, tened gozo, perfeccionaos, consolaos, sed de un mismo sentir y vivid en paz; y el Dios de paz y de amor estará con vosotros. 38 Colosenses 1.24 Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia. Colosenses 2.5 porque aunque estoy ausente en cuerpo, no obstante, en espíritu estoy con vosotros, gozándome y mirando vuestro buen orden y la firmeza de vuestra fe en Cristo. 1 Tesalonicenses 3.9 Por lo cual, ¿qué 1 Tesalonicenses acción de gracias podremos dar a Dios por gozosos. vosotros, por todo el gozo con que nos gozamos a causa de vosotros delante de nuestro Dios, 5.16 Estad siempre Romanos 14.17 porque el reino de Dios no Romanos 15.13 Y el Dios de la esperanza es comida ni bebida, sino justicia, paz y os llene de todo gozo y paz en la fe, para gozo en el Espíritu Santo. que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo. Romanos 15.32 para que, si es la voluntad 2 Corintios 1.24 No que nos enseñoreemos de Dios, llegue con gozo a vosotros y pueda de vuestra fe, sino que colaboramos para descansar entre vosotros. vuestro gozo porque por la fe estáis firmes. 2 Corintios 2.3 Por eso os escribí como lo hice, para que, cuando llegue, no tenga tristeza de parte de aquellos de quienes me debiera gozar, confiado en que mi gozo es el de todos vosotros. 2 Corintios 7.4 Mucha franqueza tengo con vosotros; mucho me glorío con respecto de vosotros. Estoy lleno de consuelo y sobreabundo de gozo en medio de todas nuestras tribulaciones. 2 Corintios 7.13 Por esto hemos sido consolados en vuestra consolación. Pero mucho más nos gozamos por el gozo de Tito, que haya sido confortado su espíritu por todos vosotros. 2 Corintios 8.2 porque, en las grandes tribulaciones con que han sido probadas, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. Gálatas 5.22 Pero el fruto del Espíritu es Colosenses 1.11-12 Fortalecidos con todo amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, poder, conforme a la potencia de su gloria, obtendréis fortaleza y paciencia, Colosenses 39 bondad, fe, y, con gozo, daréis gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz. 1 Tesalonicenses 1.6 Vosotros vinisteis a ser imitadores nuestros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con el gozo que da el Espíritu Santo. 1 Tesalonicenses 2.19-20 pues ¿cuál es nuestra esperanza, gozo o corona de que me gloríe? ¿No lo sois vosotros, delante de nuestro Señor Jesucristo, en su venida? 20 Vosotros sois nuestra gloria y gozo. 1 Tesalonicenses 3.9 Por lo cual, ¿qué 2 Timoteo 1.4 Al acordarme de tus acción de gracias podremos dar a Dios por lágrimas, siento deseo de verte, para vosotros, por todo el gozo con que nos llenarme de gozo, gozamos a causa de vosotros delante de nuestro Dios, Filemón 7 pues tenemos gran gozo y consolación en tu amor, porque por ti, hermano, han sido confortados los corazones de los santos. 1 Corintios 12.26 De manera que si un 1 Corintios 13.6 no se goza de la injusticia, miembro padece, todos los miembros se sino que se goza de la verdad. duelen con él, y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan. Comentario de textos afines: Los textos muestran una estructura lingüístico-sintáctica parecida; con una secuencia de elementos y de estructura parecida 2.7.3 Categorías fundamentales de la alegría en Pablo: Se observan categorías fundamentales de la alegría en Pablo, como: La esperanza, la obediencia, la verdad, el compañerismo , la amistad, la consolación, el arrepentimiento, la confianza, el buen orden, la firmeza en la fe, la fortaleza, la unidad, el padecimiento por Cristo, el crecimiento de sus discípulos, la fidelidad de los hermanos, el desarrollo de la obra del Señor. 40 2.7.4 Comparación de traducciones: TEXTO RVR-95 NBJ-98 NVI-99 1:18 ¿Qué, pues? Que no obstante, de todas maneras, o por pretexto o por verdad, Cristo es anunciado; y en esto me gozo y me gozaré siempre, Pero ¿y qué? Al fin y al cabo, hipócrita o sinceramente, Cristo es anunciado, y esto me alegra y seguirá alegrándome. ¿Qué importa? Al fin y al cabo, y sea como sea, con motivos falsos o con sinceridad, se predica a Cristo. Por eso me alegro; es más, seguiré alegrándome 2:17-18 Y aunque sea derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y regocijo con todos vosotros. 18 Asimismo gozaos y regocijaos también vosotros conmigo. 2:28-29 Así que me apresuro a enviarlo, para que al verlo de nuevo, os gocéis, y yo esté con menos tristeza. 29 Recibidlo, pues, en el Señor, con todo gozo, y tened en estima a los que son como él, 3:1 Por lo demás, Y aun cuando mi Y aunque mi vida sangre fuera fuera derramada derramada como sobre el sacrificio y libación sobre el servicio que sacrificio y la proceden de su fe, ofrenda de vuestra me alegro y fe, me alegraría y comparto con todos congratularía con ustedes mi alegría. 18 vosotros. Así también ustedes, De igual manera alégrense y también vosotros compartan su alegría alegraos y conmigo. congratulaos conmigo. Así pues, me Así que lo envío apresuro a enviarle urgentemente para para que viéndole de que, al verlo de nuevo os llenéis de nuevo, ustedes se alegría y yo quede alegren y yo esté aliviado en mi menos preocupado. 29 tristeza. Recíbanlo en el Recibidle, pues, en Señor con toda el Señor con toda alegría y honren a alegría, y tened en los que son como él, estima a los hombres como él, Por lo demás, Por lo demás, 41 hermanos, gozaos en el Señor. Para mí no es molestia el escribiros las mismas cosas, y para vosotros es útil. 4:4 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! hermanos míos, alegraos en el Señor... Volver a escribiros las mismas cosas, a mí no me es molestia, y a vosotros os da seguridad. Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres. 4:10 En gran manera me gocé en el Señor de que ya al fin habéis revivido vuestro interés por mí; ciertamente lo teníais, pero os faltaba la oportunidad para manifestarlo. Me alegré mucho en Me alegro el Señor de que ya al muchísimo en el fin hayan florecido Señor de que al fin vuestros buenos hayan vuelto a sentimientos para interesarse en mí. conmigo. Ya los Claro está que tenían teníais, sólo que os interés, sólo que no faltaba ocasión de habían tenido la manifestarlos. oportunidad de demostrarlo. 1:4 Siempre en todas mis oraciones ruego con gozo por todos vosotros, 1:25 Y confiado en esto, sé que quedaré, que aún permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe, rogando siempre y en todas mis oraciones con alegría por todos vosotros Y, persuadido de esto, sé que me quedaré y permaneceré con todos vosotros para progreso y gozo de vuestra fe, Convencido de esto, sé que permaneceré y continuaré con todos ustedes para contribuir a su jubiloso avance en la fe. 2:2 completad mi gozo, sintiendo lo mismo, teniendo el mismo amor, unánimes, que colméis mi alegría, siendo todos del mismo sentir, con un mismo amor, llénenme de alegría teniendo un mismo parecer, un mismo amor, unidos en 42 hermanos míos, alégrense en el Señor. Para mí no es molestia volver a escribirles lo mismo, y a ustedes les da seguridad. Alégrense siempre en el Señor. Insisto: ¡Alégrense! En todas mis oraciones por todos ustedes, siempre oro con alegría, sintiendo una misma cosa. un mismo espíritu, unos mismos sentimientos. Así que, hermanos Por tanto, hermanos míos amados y míos queridos y deseados, gozo y añorados, mi gozo y corona mía, estad así mi corona, firmes en el Señor, manteneos así firmes amados. en el Señor, queridos. 4:1 alma y pensamiento. Por lo tanto, queridos hermanos míos, a quienes amo y extraño mucho, ustedes que son mi alegría y mi corona, manténganse así firmes en el Señor. Comentario de traducciones: La comparación se realiza con tres versiones: Una traducción textual Protestante, otra textual Católica y una tercera traducción dinámica de las Sociedades Bíblicas Internacional con cierta aceptación ecuménica y moderna. Se observa que en términos generales, las tres versiones acogen el texto, con algunos cambios de palabras que no afectan el sentido del texto. 2.7.5 Comentario exegético sobre los textos de la alegría: 2.7.5.1 Cristo es anunciado: 1:18 σί1 γάπ2 • πλὴν3 ← ¿Qué, pues? Que no → πανσὶ4 σπόπῳ5 εἴσε6 → ππουάςει7 εἴσε8 → obstante, de todas maneras, o por pretexto o por ἀληθείᾳ9 Χπιςσὸρ10 → κασαγγέλλεσαι11 καὶ12 ἐν13 σούσῳ14 → φαίπψ15 καὶ17 → verdad, Cristo es anunciado; y en esto me gozo, y me φαπήςομαι18 ἀλλὰ16 gozaré aún. Crítica Textual: Sustitución mayor de la tradición de la expresión: πλὴν ὅτι. (No obstante, de todas maneras, en todo caso, sin embargo) Sustituida en un aparte de la tradición por: ὅτι, respaldada por el Códice Uncial Vaticano (B). Otra tradición, respaldada por los Unciales: Cambridge (D), Códice 044 ( ), el minúsculo 1881, la mayoría de la Koiné ( ) y algunas versiones siriacas (sy), respaldan la expresión: πλὴν. Sin embargo, el aparato crítico positivo respalda el texto completo con el Papiro 46 y los Unciales: , A, F, G, P, 43 048. 075. 0278. Los minúsculos 33. 81. 104. 365. 614. 1175. 1241. 1739. 2464 y otros pocos. En razón de la mayor antigüedad e importancia de los testigos del texto y de la teoría de ―Lección larga‖; optamos por la expresión que aparece en el texto. Ayuda Gramatical: Πανσὶ σπόπῳ se usa como un dativo instrumental: de todas maneras. Ἀλλά no es un término contradictorio, sino climático sí, en verdad; introduce una fuerte adición; enfático Χαπήςομαι se usa como un futuro progresivo: y en esto me gozo, sí, y continuaré regocijándome Πλήν significa: solo en cualquier caso; y se usa para concluir una discusión y destacar lo esencial del argumento.30 Peculiaridades del contexto: Al igual que todos los otros textos, el contexto remoto se ubica dentro del N.T. Epístolas de San Pablo y específicamente la Carta a los Filipenses. El contexto próximo se ubica dentro de la situación personal de Pablo, en donde expresa que para él, el vivir es Cristo y el anuncio de Cristo es realizado por pretexto o verdad, con hipocresía o sinceridad. Las expresiones que enmarcan los límites son: de inicio, ¿Qué pues? Y de cierre, la afirmación ―en esto‖ me gozo y me gozaré siempre. Comentarios al texto: Pablo se propuso no sentirse provocado o permitir que el asunto se transformara en una lucha de personalidades; todo lo que le interesaba era que Cristo es anunciado. 2.7.5.2 El sacrificio y servicio de la fe produce alegría compartida: 2:17-18 → ἀλλʼ1 εἰ2 καὶ3 → ςπένδομαι4 ← ← Y aunque • • sea derramado ἐπὶ5 σῇ6 θτςίᾳ7 καὶ8 λεισοτπγίᾳ9 en libación sobre el sacrificio y servicio ►11 ὑμῶν12 ‹σῆρ10 πίςσεψρ11› → φαίπψ13 καὶ14 ςτγφαίπψ15 → πᾶςιν16 ὑμῖν17 de vuestra fe, y me gozo regocijo δʼ2 ‹σὸ1 αὐσὸ3› φαίπεσε6 καὶ7 ςτγφαίπεσέ8 καὶ4 Y también vosotros asimismo gozaos y regocijaos ὑμεῖρ5 con todos vosotros. μοι9 conmigo. Crítica Textual: No hay lugares variantes. Ayuda Gramatical: Ya que el artículo σῇ no se repite, tanto θτςίᾳ como λεισοτπγίᾳ se toman conjuntamente: el sacrificio y servicio. 30 Hanna, Roberto., Ayuda Gramatical Para El Estudio Del Nuevo Testamento Griego, 534 44 Εἰ se usa aquí en una cláusula concesiva, que corresponde a la primera clase de cláusula condicional (y denota una declaración de hecho): aunque yo sea derramado. Τὸ αὐσό se usa como un acusativo adverbial que significa: de la misma manera31 Peculiaridades del contexto: Enmarcado dentro del párrafo: El trabajo de la Salvación 2:1218. Pablo hace una exhortación a resplandecer como lumbreras en medio de las situaciones de malignidad y perversidad de su generación; y el compromiso de asirse de la Palabra para poder gloriarse en el día de Cristo y así gozarse compartidamente con los filipenses. Pablo alude a la costumbre judía y griega de las libaciones en los sacrificios, aplicándola metafóricamente al culto espiritual de los tiempos nuevos: la sangre derramada en el martirio vendría a añadirse al sacrificio que entre los cristianos constituye el servicio de la fe. (Cfr. 3:3, 4:18)32 Comentarios al texto: El pensamiento de la muerte como posible desenlace de su prisión vuelve a la mente del Apóstol otra vez. Su muerte sería una ofrenda a Dios, pero sólo como una libación derramada sobre un sacrificio mucho más significativo: La fe de los filipenses, la calidad de su vida y el servicio producido por la fe (Cfr. 2Tm 4:6 y Rm 12:1). Pablo ha llegado al punto de regocijarse en cualquier circunstancia, sea ésta de vida o sea de muerte, y anhela que sus amigos en Filipos tomen la misma actitud. 2.7.5.3 El envío de Epafrodito: 2:28-29 οὖν2 ← αὐσὸν4 ἔπεμχα3 → → Así que le envío ςποτδαιοσέπψρ1 ἵνα5 ← → con mayor solicitud, para que al ‹ἰδόνσερ6 αὐσὸν7› → πάλιν8 → φαπῆσε9 → κἀγὼ10 ὦ12 → → verle de nuevo, os gocéis, y yo ἀλτπόσεπορ11 esté con menos tristeza. ‹πποςδέφεςθε1 αὐσὸν3› οὖν2 ἐν4 → Κτπίῳ5 μεσὰ6 πάςηρ7 φαπᾶρ8 καὶ9 ἔφεσε13 → Recibidle, pues, en con ἐνσίμοτρ12 → σοὺρ10 • estima a los • → que son como el Señor, σοιούσοτρ11 él; Crítica Textual: No hay lugares variantes. 31 Ibid. 538 32 BIBLIA DE JERUSALÉN, nota 2:17. 1727. 45 todo gozo, y tened en Ayuda gramatical: El adverbio comparativo ςποτδαιοσέπψρ se usa como un superlativo intensivo: muy solícitamente. Ἔπεμχα se usa como un aoristo epistolar: la acción habrá sido completada cuando la carta les llegue. El doble acusativo aparece en καὶ σοὺρ σοιούσοτρ ἐνσίμοτρ ἔφεσε (tener a alguien en estima. [Τοὺρ σοιούσορ es el complemento directo del verbo, mientras que ἐνσίμοτρ está en aposición con el (se refiere) complemento directo.]33 Peculiaridades del contexto: El contexto está determinado por la intención de enviar a Timoteo en el pronto futuro y el envío inmediato de Epafrodito ya recuperado de su enfermedad, quien sería motivo de alegría por la alta estima y consideración de que gozaba. Las expresiones que enmarcan el relato son: De inicio, Espero en el Señor Jesús; y de cierre, por lo demás hermanos. Comentarios al texto: Algo había sucedido que hizo que Pablo enviara a Epafrodito a Filipos en vez de mantenerlo consigo. Epafrodito había estado gravemente enfermo, pero por la misericordia de Dios (tal como Pablo consideró lo acontecido) se recuperó. El informe de la gravedad de la enfermedad de Epafrodito había llegado a los filipenses y la noticia de la ansiedad de sus amigos de Filipos había llegado de vuelta. Esto le causó angustia al mismo Epafrodito cuyo corazón comenzó a añorar a los suyos en Filipos (angustiado es una palabra muy fuerte en el gr., usada en el NT sólo aquí y para describir el sentir de nuestro Señor en el Getsemaní en Mt 26:37 y Mc 14:33). Así que Pablo consideró que lo mejor para Epafrodito era regresar a su ciudad. Pablo, sin embargo, fue sensible a la situación. Estaba la posibilidad de que los filipenses no comprendieran la razón del regreso de su mensajero. Así les pide que reciban a Epafrodito con una calurosa bienvenida cristiana, no sólo como uno de sus compañeros que regresa del extranjero, sino como alguien altamente calificado por su fidelidad y el alto costo del servicio encomendado. No sabemos de qué manera Epafrodito estuvo cercano a la muerte, arriesgando su vida. Pudo haber sido simplemente el estar identificado con Pablo como prisionero. Este hombre se jugó la vida al servir a Pablo, pero fue un riesgo a correr por causa de Dios, y él ganó. 2.7.5.4 Alégrense en el Señor: 3:1 ►2 Τὸ1 λοιπόν2 ἀδελυοί3 μοτ4 φαίπεσε5 ἐν6 → Κτπίῳ7 → ἐμοὶ12 οὐκ14 • • Por lo demás, hermanos, • gozaos en el Señor. μὲν13 ὀκνηπόν15 → ‹γπάυειν10 ὑμῖν11› σὰ8 αὐσὰ9 ← 33 A mí no me es δὲ17 → ὑμῖν16 • Hanna, Roberto., Ayuda Gramatical Para El Estudio Del Nuevo Testamento Griego, 539 46 • molesto el escribiros las mismas cosas, y para vosotros es ἀςυαλέρ18 seguro. Crítica Textual: Una parte de la tradición adiciona el artículo pero su presencia figura solamente en algunos testigos minoritarios Ayuda gramatical: μῶν ἐμοί es un ejemplo no común del orden de las palabras. [Los dos pronombres se colocan juntos para indicar contraste agudo (Cfr. 2:25).] Τὸ λοιπόν se usa como un acusativo adverbial y significa: finalmente. El presente de infinitivo representa el sentido lineal: estar escribiéndoles las mismas cosas, en realidad no es molesto para mí (el infinitivo se usa en la construcción de esta oración como el sujeto del verbo implícito.34 Peculiaridades del contexto: La primera parte del texto, tiene el mismo contexto próximo que el texto anterior. Pero se nota como si fuera la conclusión de una carta. Pablo inicia un nuevo tema. Este nuevo comienzo hace pensar que la siguiente estructura (3:1b-4:1) había sido un escrito anterior e independiente.35 Comentarios al texto: Parece que Pablo estaba por cerrar su carta cuando usa el término: Por lo demás… que puede traducirse como: Finalmente. Pero, por alguna razón, siente que debe dar una advertencia con relación a aquellos que querían que todos los gentiles convertidos llegasen a ser judíos. Esto lo lleva a declarar su confianza sólo en Cristo Jesús para ser acepto ante Dios, y a referirse a sus más grandes ambiciones para su vida espiritual y para la de los filipenses. 2.7.5.5 Siempre alegres: 4:4 Χαίπεσε1 ἐν2 → Κτπίῳ3 πάνσοσε4 πάλιν5 ← ἐπῶ6 φαίπεσε7 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! Crítica textual: No presenta modificación. 34 Ibid. 35 BIBLIA DE JERUSALÉN, nota 3:1. 1727. 47 Peculiaridades del contexto: El contexto (4:2-9) está determinado por el ruego a Evodia y Síntique a ser de un mismo sentir y la exhortación a los hermanos a permanecer firmes, alentándolos a ser bondadosos y a presentar sus oraciones delante de Dios. Esta sección, sería la continuación natural de 3:1a, especialmente por el uso de por lo demás hermanos (v 3:1ª y 4:8) y el uso del imperativo de alegraos en el Señor. Alegraos en el Señor siempre, otra vez digo: ¡alegraos! Los límites del párrafo son: De inicio, ruego a Evodia y Síntique; y de cierre, el Dios de paz estará con ellos. Comentarios al texto: Habiendo tratado en términos generales de las divisiones y el espíritu partidista en la iglesia Pablo sentía que ahora debe tratar específicamente una disputa que estaba comprometiendo seriamente sus vidas. No sabemos nada más acerca de Evodia y Síntique, pero Pablo se refiere a ellas en términos muy cálidos, como hermanas que lucharon junto conmigo en el evangelio, mujeres que habían tenido de veras un ministerio. Sin embargo, él tuvo que suplicarles: que se pongan de acuerdo en el Señor, y pedir a uno de sus colegas fieles que las ayudara a reconciliarse una con la otra. Menciona a Clemente específicamente, pero reconoce a todos sus consiervos, y lo más grande que pueda decir de ellos es que sus nombres están escritos en el libro de la vida. Otra vez el tema del gozo sobresale en esta carta cuando el Apóstol dice a sus lectores: ¡Regocijaos … siempre!, y agrega en el Señor repitiendo la frase aun otra vez: ―Estad firmes en el Señor … ‖ (1) ―que se pongan de acuerdo en el Señor‖ (2), y ahora: ¡Regocijaos en el Señor … ! El total del vivir cristiano es un asunto de esa relación con el Señor Jesús viviente, en la atmósfera de su presencia y su gracia que lo hace todo posible. 2.7.5.6 Alegría por las dadivas: 4:10 δὲ2 → μεγάλψρ5 ← • En gran ἀνεθάλεσε9 • revivido en el Señor de que ya al fin habéis ‹σὸ10 υπονεῖν13› ὑπὲπ11 ἐμοῦ12 ἐυʼ14 ᾧ15 ← καὶ16 → vuestro cuidado ἐυπονεῖσε17 δέ19 → → solícitos, → Ἐφάπην1 ἐν3 → Κτπίῳ4 → ὅσι6 ἤδη7 → ποσὲ8 → manera me gocé de mí; de lo cual también estabais → ἠκαιπεῖςθε18 pero os faltaba la oportunidad. Crítica Textual: Presenta una sustitución del artículo por La falta de testigos sugiere mantener el primero. Ayuda gramatical: Ἥδε ποσέ denota más la idea de culminación (ya al fin) que la de tiempo. Φπονέψ con la preposición ὑπέπ significa: pensar en. 48 ¿La frase ἑυʼ ᾧ puede significar: puesto que, o más probablemente con relación a lo cual (es decir, σὸ ὑπὲπ ἐμοῦ υπονεῖν)? (Tiene un sentido causal en este versículo). [La segunda sugerencia parece la más favorable, ya que Pablo usa esta frase prepositiva para introducir una cláusula que suaviza la dureza de la declaración previa.]36 Peculiaridades del contexto: Enmarcado en los versos 10-20, con el agradecimiento por la ayuda económica recibida. Pablo se alegra en la generosidad de los filipenses y testifica que ha aprendido a contentarse, cualquiera que sea su situación. Confiesa su fe en el Dios que suple y provee. Dada la extensión y la intensidad de su gratitud, se esperaría que hubiera manifestado antes ese sentimiento en la misma carta. Sin embargo, sólo se encuentran dos alusiones en 1:5 y 2:30, que además hace suponer que ya se han dado las gracias a los portadores. En consecuencia, esta sección la consideran algunos la primera de las cartas de Pablo a los filipenses.37 Comentarios al texto: En este párrafo el Apóstol siente la necesidad de hacer dos cosas: expresar su aprecio por las ofrendas enviadas de Filipos y, al mismo tiempo, y con mucho tacto, enfatizar el principio de la dependencia espiritual en el Señor. Pablo se regocija en la ayuda financiera recibida. Estas ofrendas representan el renovado florecimiento de su ministerio anterior a favor de Pablo. Por mucho tiempo a los filipenses les había faltado la oportunidad de mostrar su interés por él. Las ofrendas de los filipenses lo habían alegrado y animado, pero Pablo no estaba dependiendo de ellas ni, al escribir esto, estaba solicitando más ayuda. Podría decir honestamente que había aprendido el secreto del contentamiento con las circunstancias externas, si tenía poco o mucho. Sabía que su Señor no faltaría en darle todo lo que fuera necesario y fortalecerlo para enfrentar cualquier situación. El secreto del vivir de Pablo era uno abierto, disponible para todo aquel que camine en la senda de Cristo. Era el secreto del contentamiento, puesto que el conocer a Cristo y ser llamado para servirle, constituían las inescrutables riquezas. 2.7.5.7 La alegría de la oración: 1:4 πάνσοσε1 ἐν2 πάςῃ3 μοτ5 δεήςει4 ‹σὴν11 δέηςιν12 ποιούμενορ13› μεσὰ9 φαπᾶρ10 siempre en todas mis oraciones rogando con gozo ὑπὲπ6 πάνσψν7 ὑμῶν8 por todos vosotros, 36 Hanna, Roberto., Ayuda Gramatical Para El Estudio Del Nuevo Testamento Griego, 543 37 BIBLIA DE JERUSALÉN, nota 4:10. 1729. Véase lo dicho en la Introducción. 49 Crítica Textual: El texto presenta una inclusión de la conjunción Para la comprensión del texto, no afecta la omisión de esta inclusión. Peculiaridades del contexto: Acción de gracias y súplica (1.3-11) Pablo da gracias por la fidelidad y comunión de los filipenses, pide en oración que el amor de ellos abunde en conocimiento y comprensión y que sean llenos de frutos de justicia. La alegría es una de las notas características de esta epístola. Inicia dando gracias a Dios y cierra augurando gloria y alabanza a Dios. Comentarios al texto: Pablo une alabanza y oración, tal como insta a otros a hacerlo. Incluye a todos los creyentes filipenses y siente gozo al orar por ellos. Su gran alegría fue a causa de su participación en el evangelio desde el mismo momento en que les fuera predicado. 2.7.5.8 La alegría de la fe: 1:25 καὶ1 πεποιθὼρ3 → σοῦσο2 οἶδα4 ὅσι5 μενῶ6 καὶ7 ← ςτμπαπαμενῶ8 → πᾶςιν9 Y confiado en esto, sé que quedaré, que aún permaneceré con todos ὑμῖν10 εἰρ11 ὑμῶν13 ‹σὴν12 πποκοπὴν14› καὶ15 φαπὰν16 ►18 σῆρ17 πίςσεψρ18 vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe, Crítica Textual: Sustitución de la palabra: (Permaneceré) Sustituida en una parte de la tradición por la palabra: . Atestiguada por segundo corrector de D2, los Códices 075. 0278 y la mayoría de los textos de la Koiné ( ). El aparato crítico positivo respaldado por: 46 y los Unciales: , A, B, C, primera mano de D* , F, G, , primera mano de 0278*, Los minúsculos 6. 33. 81. 104. 323. 1175. 1739. 21881 y otros pocos. Dada la contundencia de los testigos, optamos por la forma que aparece en el texto de N-A. Ayuda Gramatical: La preposición del verbo compuesto παπαμενῶ simplemente significa: junto con.38 Peculiaridades del contexto: Situación personal de Pablo: El vivir es Cristo (1:12-26) Pablo se alegra porque lo acontecido ha contribuido para el progreso del Evangelio. Sintiéndose apremiado por el deseo de partir y estar con Cristo y el deseo de quedarse para beneficio de los filipenses; persuadido de esto, sabe que permanecerá para provecho y gozo de la fe de ellos. 38 Hanna, Roberto., Ayuda Gramatical Para El Estudio Del Nuevo Testamento Griego, 535 50 Comentarios al texto: Pablo supo del interés de los filipenses por él, y por ello les envió noticias suyas. Pudo contarles cómo sus prisiones habían redundado en un avance del evangelio, cómo en ese lugar de prisión Cristo estaba siendo proclamado (si bien con una variedad de motivos), y cómo consideraba las posibles alternativas de su confinamiento, liberación y posterior ser vicio o muerte. Con referencia al pasado, al presente y a las posibilidades del futuro, Pablo pudo decir me alegro. Pablo contempla las alternativas y, aunque no dice que conoce cuál le otorgará Dios, comienza a sentir que está siendo llamado a permanecer en el mundo para un servicio futuro. Para Pablo era más ventajoso ir con el Señor, pero para otros sería más provechoso (y más necesario) que continuara en esta vida. Desarrollo, crecimiento en la fe y un gozo desbordante es lo que buscó para otros 2.7.5.9 La alegría en la unidad: 2:2 πληπώςασέ1 μοτ2 ‹σὴν3 φαπὰν4› ἵνα5 υπονῆσε8 σὸ6 αὐσὸ7 ἔφονσερ12 σὴν9 completad mi • gozo, sintiendo lo mismo, teniendo αὐσὴν10 ἀγάπην11 ςύμχτφοι13 υπονοῦνσερ16 ‹σὸ14 ἓν15› ← mismo amor, unánimes, sintiendo una el ← misma cosa. Crítica Textual: Sustitución de la palabra: En, dentro de, entre, por, con, durante, con ayuda de, en virtud de) Sustituida en una parte de la tradición por: Mismo) atestiguada en: *, A, C, I, , 33.81. 1241. 2464 y otros pocos. El aparato crítico positivo, respalda el texto con el testimonio de: 46, B, D, F, G, 075. 0278. 1739. 1881. Versiones de la vulgata y siriacas y otros padres, lo que permite optar por el texto y no por la variante. Ayuda Gramatical: Ἵνα se usa para denotar contenido: completen mi gozo, que sean de un mismo pensamiento (la cláusula encabezada por ἵνα describe lo que el escritor quiere dar a entender cuando les dice que completen su gozo: completen mi gozo, teniendo un mismo punto de vista. 39 Peculiaridades del contexto: La unidad en la humildad, humillación y exaltación de Cristo (2:1-11) Pablo exhorta a los filipenses a vivir unidos en la humildad, la concordia y el servicio, imitando a Jesús nuestro modelo perfecto, quien se humilló y luego Dios lo exaltó hasta el lugar sumo. Esta apremiante exhortación a la unidad permite adivinar que existían divisiones internas que amenazaban la comunidad de Filipos. (Cfr. 1:15-17, 27; 2.14; 4:2) 39 Ibid., 536 51 Tal vez de allí surge el sentido incluyente, de totalidad que pablo pone en la carta. (Cfr. 1: 1,4,7,8,25; 2.17,26: 4.1) Inicia y cierra el párrafo con la expresión: por tanto. Así pues. Comentarios al texto: Estos versículos nos dejan la más fuerte apelación posible para la unidad cristiana, En el v. 1 Pablo da cuatro razones para tal unidad; en el v. 2 cuatro formas para describirla. La palabra traducida aliento puede significar ―consuelo‖ o ―llamamiento‖ y así podría entenderse en el sentido de que el consuelo encontrado en Cristo debe ser compartido con otros, o que tenemos su apelación a la unidad Si conocemos la bendición de su amor, deberíamos mostrarlo a otros sin reservas ni discriminación. Entonces, si conocemos en Cristo el afecto profundo y la compasión, tales deberían marcar todas nuestras relaciones con los demás. No hay mucha diferencia entre las cuatro frases aquí, pero notemos que dos de ellas se refieren a la mente o al pensamiento y este es un énfasis que se encuentra en otros lugares en Filipenses. El Apóstol supo bien que el pensamiento y las actitudes son la base del habla y la acción y así dirigen todo el curso de la vida de las personas. 2.7.5.10 La alegría de la comunión: 4:1 Ὥςσε1 ← ἀδελυοί2 μοτ3 ἀγαπησοὶ4 καὶ5 ἐπιπόθησοι6 φαπὰ7 καὶ8 ςσέυανόρ9 Así que, hermanos míos amados μοτ10 ςσήκεσε12 οὕσψ11 • mía, estad así y deseados, gozo y corona ἐν13 → Κτπίῳ14 ἀγαπησοί15 firmes en el Señor, amados. Crítica Textual: Sustitución del pronombre personal pero los testigos son minoritarios. Además se mota una clara intención por mantener el estilo del texto. Ayuda gramatical:Ὥστε se usa como una partícula de inferencia, que significa: Así que, por eso.40 Peculiaridades del contexto: El contexto está determinado por el tema: Proseguir a la meta (3:1b-4:1) Pablo amonesta contra los que pretenden establecer su propia justicia, mientras él se gloría en la justicia de Cristo. Exhorta a los filipenses a tener cuidado con los enemigos de la cruz y a mantenerse firmes en el Señor. Comentarios al texto: La expresión así que con la que comienza este versículo indica que la exhortación de Pablo está basada sobre lo que ha dicho anteriormente: el peligro de aquellos que quieren que los cristianos se conviertan al judaísmo y su desilusión con los que viven conforme a los deseos de la carne. Las palabras usadas por Pablo aquí muestran 40 Ibid., 543 52 la profundidad de sus sentimientos mientras escribía a sus amigos filipenses. Dos veces en el versículo usa la palabra amados. Pablo se goza en ellos, los considera como una corona sobre su cabeza, los ama y los añora. Más que cualquier otra cosa, los alienta a estar firmes en el Señor (1:27), como soldados determinados a no retroceder cualesquiera sean las fuerzas en su contra. 2.8 ANÁLISIS DE TEXTOS RELACIONADOS CON EL SUFRIMIENTO41 1:17 4:14 Tribulación, aflicción, sufrimiento.42 Los unos anuncian a Cristo por rivalidad, no sinceramente, pensando añadir aflicción a mis prisiones; (v16) Sin embargo, bien hicisteis en participar conmigo en mi tribulación. ( 3:10 Sufrimiento, pasión.43 Quiero conocerlo a él y el poder de su resurrección, y participar de sus padecimientos hasta llegar a ser semejante a él en su muerte, 1:29 Padecer, sufrir, experimentar.44 A vosotros os es concedido a causa de Cristo, no solo que creáis en él, sino 41 GARCÍA-PELAYO., Pequeño LAROUSSE, p.841. “Padecer, aguantar, llevar, soportar, sostener, permitir, tolerar” 42 ORTIZ, Concordancia Manual y Diccionario Griego-Español del N.T.., (2329) p.218 43 Ibid., (3667) p.305 44 Ibid., (3819) p.313 53 también que padezcáis por él, 2.8.1 Categorías fundamentales del sufrimiento en Filipenses: 1:17 Anuncio de Cristo por rivalidad. La prisión 4:14 Tribulación por la escasez 3:10 La comunión en los padecimientos y la semejanza en la muerte de Cristo. 1:29 La gracia de creer y padecer por Cristo 2.8.2 Textos paralelos en Pablo: Romanos 2.9 Tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, sobre el judío en primer lugar, y también sobre el griego; Romanos 5.3 Y no solo esto, sino que también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia; Romanos 8.35 ¿Quién nos separará del Romanos 12.12 gozosos en la esperanza, amor de Cristo? ¿Tribulación, angustia, sufridos en la tribulación, constantes en la persecución, hambre, desnudez, peligro o oración. espada? 1 Corintios 7.28 Ahora bien, si te casas, no pecas; y si la doncella se casa, no peca; pero los que se casan tendrán aflicción de la carne, y yo os la quisiera evitar. 2 Corintios 1.4 el cual nos consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación con que nosotros somos consolados por Dios. 2 Corintios 1.8 Hermanos, no queremos que ignoréis acerca de la tribulación que nos sobrevino en Asia, pues fuimos abrumados en gran manera más allá de nuestras fuerzas, de tal modo que aun perdimos la esperanza de conservar la vida. 2 Corintios 2.4 Por la mucha tribulación y angustia del corazón os escribí con muchas lágrimas, no para que fuerais entristecidos, sino para que supierais cuán grande es el amor que os tengo. 2 Corintios 4.17 pues esta leve tribulación 2 Corintios 6.4 Antes bien, nos momentánea produce en nosotros un cada recomendamos en todo como ministros de 54 vez más excelente y eterno peso de gloria; Dios, en mucha paciencia, en tribulaciones, en necesidades, en angustias, 2 Corintios 7.4 Mucha franqueza tengo con vosotros; mucho me glorío con respecto de vosotros. Estoy lleno de consuelo y sobreabundo de gozo en medio de todas nuestras tribulaciones. 2 Corintios 8.2 porque, en las grandes tribulaciones con que han sido probadas, la abundancia de su gozo y su profunda pobreza abundaron en riquezas de su generosidad. 2 Corintios 8.13 No digo esto para que haya Efesios 3.13 Por eso, pido que no desmayéis para otros holgura y para vosotros escasez, a causa de mis tribulaciones por vosotros, las cuales son vuestra gloria. Colosenses 1.24 Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia. 1 Tesalonicenses 1.6 Vosotros vinisteis a ser imitadores nuestros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con el gozo que da el Espíritu Santo. 1 Tesalonicenses 3.3 a fin de que nadie se inquiete por estas tribulaciones, porque vosotros mismos sabéis que para esto estamos puestos. 2 Tesalonicenses 1.4 Tanto es así que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, por vuestra paciencia y fe en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que soportáis. 1 Tesalonicenses 3.7 Por eso, hermanos, en 2 Tesalonicenses 1.6 Es justo delante de medio de toda nuestra necesidad y aflicción Dios pagar con tribulación a los que os fuimos consolados al saber de vuestra fe. atribulan, Romanos 8.18 Tengo por cierto que las aflicciones del tiempo presente no son comparables con la gloria venidera que en nosotros ha de manifestarse, 2 Corintios 1.5 Así como abundan en nosotros las aflicciones de Cristo, así abunda también por el mismo Cristo nuestra consolación 55 2 Corintios 1.6 Pero si somos atribulados es para vuestra consolación y salvación; o si somos consolados es para vuestra consolación y salvación, la cual se realiza en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos. 2 Corintios 1.7 Y nuestra esperanza respecto de vosotros es firme, pues sabemos que así como sois compañeros en las aflicciones, también lo sois en la consolación. 2 Timoteo 3.11 persecuciones, padecimientos, como los que me sobrevinieron en Antioquía, en Iconio, en Listra; persecuciones que he sufrido, pero de todas me ha librado el Señor. Colosenses 1.24 Ahora me gozo en lo que padezco por vosotros y cumplo en mi carne lo que falta de las aflicciones de Cristo por su cuerpo, que es la iglesia. 1 Corintios 12.26 De manera que si un miembro padece, todos los miembros se duelen con él, y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se gozan. 2 Corintios 1.6 Pero si somos atribulados es para vuestra consolación y salvación; o si somos consolados es para vuestra consolación y salvación, la cual se realiza en el sufrir las mismas aflicciones que nosotros también padecemos. Gálatas 3.4 ¿Tantas cosas habéis padecido 1 Tesalonicenses 2.14 Vosotros, hermanos, en vano? Si es que realmente fue en vano. vinisteis a ser imitadores de las iglesias de Dios en Cristo Jesús que están en Judea, pues habéis padecido de los de vuestra propia nación las mismas cosas que ellas padecieron de los judíos. 2 Tesalonicenses 1.5 Esto es demostración del justo juicio de Dios, para que seáis tenidos por dignos del reino de Dios, por el cual asimismo padecéis. 2 Timoteo 1.12 por lo cual asimismo padezco esto. Pero no me avergüenzo, porque yo sé a quién he creído y estoy seguro de que es poderoso para guardar mi depósito para aquel día. Comentario de textos afines: En el aspecto del campo semántico, la comparación se sitúa en la semejanza de los temas y la comparación dinámica de la situación. 56 2.8.3 Categorías fundamentales del sufrimiento en Pablo: La palabra puede tener dos significados diferentes: uno moral (pasión pecaminosa), otro físico (padecimiento). Aquí nos interesa el sentido físico. Se pueden observar categorías fundamentales del sufrimiento en Pablo, como son: la maldad, la separación del amor de Dios, el matrimonio y el ocuparse de la carne, la falta de consuelo, la inminencia de la muerte, la falta de esperanza, las necesidades apremiantes, las angustias de la cotidianidad, la pobreza y la escasez, las persecuciones y habladurías, el ser tenidos por dignos para sufrir por Cristo. 2.8.4 Comparación de traducciones: TEXTO 1:17 16 RVR-95 Los unos anuncian a Cristo por rivalidad, no sinceramente, pensando añadir aflicción a mis prisiones; NBJ-98 aquéllos, por rivalidad, no con puras intenciones, creyendo que aumentan la tribulación de mis cadenas. NVI-99 Aquéllos predican a Cristo por ambición personal y no por motivos puros, creyendo que así van a aumentar las angustias que sufro en mi prisión. 4:4 Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! Estad siempre alegres en el Señor; os lo repito, estad alegres. Alégrense siempre en el Señor. Insisto: ¡Alégrense! 3:10 Quiero conocerlo a él y el poder de su resurrección, y participar de sus padecimientos hasta llegar a ser semejante a él en su muerte, y conocerle a él, el poder de su resurrección y la comunión en sus padecimientos hasta hacerme semejante a él en su muerte, Lo he perdido todo a fin de conocer a Cristo, experimentar el poder que se manifestó en su resurrección, participar en sus sufrimientos y llegar a ser semejante a él en su muerte. 1:29 A vosotros os es concedido a causa Pues a vosotros se os ha concedido la Porque a ustedes se les ha concedido no 57 de Cristo, no solo que creáis en él, sino también que padezcáis por él, 1:23 gracia de que por Cristo... no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él, Me siento apremiado por las dos partes: por una parte, deseo partir y estar con Cristo, lo cual, ciertamente, es con mucho lo mejor; De ambas cosas estoy puesto en estrecho, teniendo deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor; sólo creer en Cristo, sino también sufrir por él, Me siento presionado por dos posibilidades: deseo partir y estar con Cristo, que es muchísimo mejor, Comentario de traducciones: La comparación se realiza con tres versiones: Una traducción textual Protestante, otra textual Católica y una tercera traducción dinámica de las Sociedades Bíblicas Internacional con cierta aceptación ecuménica y moderna. Se observa que en términos generales, las tres versiones acogen el texto, con algunos cambios de palabras que no afectan el sentido del texto. 2.8.5 Comentario exegético sobre textos del sufrimiento: 2.8.5.1 Añadir aflicción a sus prisiones: 1:17 οἱ1 μὲν2 κασαγγέλλοτςιν7 → ‹σὸν5 Χπιςσὸν6› ἐξ3 ἐπιθείαρ4 οὐφ8 Los unos * • ἁγνῶρ9 anuncian a Cristo por contención, no οἰόμενοι10 ἐπιυέπειν12 θλῖχιν11 ►14 μοτ15 ‹σοῖρ13 δεςμοῖρ14› sinceramente, pensando añadir aflicción a mis prisiones; Crítica Textual: Las palabras de los versos 16 y 17 aparecen invertidas. En una parte de la tradición aparecen invertidas las palabras; ἱ ὲ ἱ ὲEstos… aquellos; los unos… los otros) Estos por amor… Aquellos por rivalidad. Los unos por rivalidad… los otros por amor. Respaldado por: D1, syh, y otros. Mientras que los testigos del texto son: 46 A, B, D*, F, G, P, 048.075.0278.33.81.365.629.1175.1241. 1739.1881.2464 y otros pocos de versiones latinas y siriacas. Ante la abrumadora colección de testigos, se opta por aceptar el texto. Sustitución de la palabra: Levantar, aumentar) Sustituida en un aparte de la tradición por: Incitar, indisponer) atestiguada en D2 P. En otra parte de la 58 tradición es sustituida por: (Sobrellevar, sobrecargar)en: D1 sy. El texto está respaldado por los siguientes testigos: A B D* F G (P) 33. (81). 104. 326. 365. 1175. 1241.1739. 1881. 2464 y otros pocos latinos y coptos. Optamos por el texto y la idea de aumentar la tribulación... Peculiaridades del contexto: Está dentro del contexto de la situación personal de Pablo y su alegría de vivir por Cristo (1:12-26) Aquí Pablo se goza en sus prisiones y en la predicación del Evangelio sin importar las motivaciones internas de rivalidad o amor que tienen los que lo hacen. También por el hecho que Cristo será magnificado en su persona, sea por vida o sea por muerte. Comentarios al texto: Después de todo lo que pudo decir a modo de agradecimiento sobre los avances del evangelio a través de sus prisiones, es triste que Pablo tuviera que señalar que había algunos que predicaban a Cristo por envidia y contienda, por ambición egoísta, aun con el deseo de hacer las cosas más difíciles para sus prisiones. No conocemos las circunstancias. Es claro que Pablo no desafía el contenido de la predicación, sino su motivación. Quizá se trataba de líderes de la iglesia en el lugar del encarcelamiento de Pablo antes de llegar él, y ahora estaban celosos de su reputación por causa de sus labores apostólicas, y estaban decididos a superarlo y muy dispuestos a causarle angustia. 2.8.5.2 Participando en la tribulación de la escasez: 4:14 πλὴν1 ← Sin καλῶρ2 ἐποιήςασε3 → ςτγκοινψνήςανσέρ4 ← embargo, bien hicisteis en participar σῇ6 μοτ5 conmigo en mi θλίχει7 tribulación. Crítica Textual: No hay lugares variantes. Ayuda gramatical: Pablo usa πλήν al final de un argumento para destacar el punto principal. El pronombre personal μοῦ tiene un grado de énfasis por causa de su posición no común (antes del nombre, en vez de ir después: mi tribulación).45 Peculiaridades del contexto: Inicia con me alegré mucho… y cierra con al Dios y Padre sea la gloria… El tema central es la gratitud por la ayuda recibida (4:10-20) Aun cuando él era suficiente por cuanto Cristo lo fortalecía, reconoce el bien que le proporcionaron los 45 Ibid., 544 59 filipenses en medio de su tribulación, siendo ellos los únicos que le brindaron ayuda financiera. Comentarios al texto: A pesar de lo que se dice sobre este principio espiritual básico de dependencia en Dios, Pablo quiere afirmar que apreciaba la bondad de los filipenses; ésta lo sostuvo en sus tribulaciones. El habla de aquel tiempo del comienzo del evangelio. Pablo había salido de Macedonia, la provincia en la cual Filipos estaba situada, he ido a Tesalónica. Mientras estaba allí, los creyentes filipenses le enviaron ayuda una y otra vez. Es de notar también cómo habla de la relación de socios que existía entre ellos, un compartir en cuanto a dar y recibir. El compañerismo real es un proceso de doble vía. 2.8.5.3 El poder de la resurrección en medio del sufrimiento: 3:10 → → σοῦ1 ‹γνῶναι2 αὐσὸν3› καὶ4 σὴν5 δύναμιν6 ►8 αὐσοῦ9 ‹σῆρ7 ἀναςσάςεψρ8› a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, καὶ10 → ‹σὴν11 κοινψνίαν12› ►14 αὐσοῦ15 ‹σῶν13 παθημάσψν14› y la participación ςτμμοπυούμενορ16 de ►18 llegando a ser semejante a él * en sus padecimientos, αὐσοῦ19 ‹σῷ17 θανάσῳ18› su muerte, Crítica Textual: Omisión del artículo: (La, Para). La omisión entre corchetes sencillos, estaba antes en el texto de N-A y ahora figura solamente en el aparato crítico, indicando la duda de si las palabras allí incluidas pertenecen o no al texto original. Aquí se presupone que son parte del texto y que los testigos a favor del texto, la apoyan. Testigos a favor de la omisión: 46 A B 1241. 2464 y otros pocos. A favor del texto están los testigos: D F G 075.33.1739.1881. En conclusión, dada la antigüedad de los testigos, (siglos IV y V) y la presencia del papiro 46, optamos por la variante. Aunque no afecte el sentido del texto. Omisión del artículo: [] (Los) Los corchetes simples indican la misma situación de la variante anterior. A favor de la omisión están los testigos: 2 están: A D F G 075. 33. 1739. 1881. por favorecer la variante. 46 * B. A favor del texto Por las mismas razones anteriores, optamos Ayuda gramatical: Τοῦ con el infinitivo γνῶναι puede denotar un sentido final (es decir, de propósito) paralelo a la cláusula ἵνα que le precede; o puede ser consecutivo, para expresar el resultado de las condiciones previas (equivalente a ὥςσε con un infinitivo); o puede ser aun explicativo, para aclarar más la afirmación anterior. [Pablo generalmente emplea alguna construcción que no es σοῦ con un infinitivo para expresar una cláusula de 60 propósito. El significado usual de esta construcción es explicativo (Cfr. Fil 3:21). En consecuencia, es preferible considerar que es explicativo en este pasaje.]46 Peculiaridades del contexto: Inicia con: no es molestia el escribir las mismas cosas y cierra con: estad firmes en el Señor. El tema central es el proseguir a la meta. Pablo expresa el deseo de conocer más a Jesús, el poder de su resurrección y la comunión en los padecimientos de Cristo, hasta llegar a ser semejantes a él en su muerte. Comentarios al texto: Pablo, quiere vivir en el conocimiento de Cristo, es decir, ser identificado con el Cristo crucificado y resucitado. Esto significa el conocer el poder de su resurrección en una experiencia diaria. Y participar en sus padecimientos, muriendo a una vida egocéntrica que para nosotros es natural, y estar dispuesto a encarar la dificultad y padecimiento que el evangelio de salvación pueda acarrear. Estas dos realidades deben siempre pertenecer juntas en toda vida cristiana genuina. 2.8.5.4 La gracia de creer y padecer por Cristo: 1:29 ὅσι1 → ὑμῖν2 → → ἐφαπίςθη3 σὸ4 → ὑπὲπ5 → Χπιςσοῦ6 οὐ7 μόνον8 σὸ9 Porque a vosotros os es concedido • a causa de Cristo, no sólo que πιςσεύειν12 εἰρ10 αὐσὸν11 ἀλλὰ13 καὶ14 σὸ15 πάςφειν18 ὑπὲπ16 αὐσοῦ17 creáis en él, sino también que padezcáis por él, Crítica Textual: Adición de probablemente durante la transcripción del texto. Ayuda gramatical:Ὑπέπ significa: por causa de. Los dos infinitivos con artículo se usan para explicar el artículo inicial σό: que es por causa de Cristo, no sólo creer …, sino también sufrir.47 Peculiaridades del contexto: Está enmarcado dentro del tema: La lucha por la fe (1:27-30) Pablo exhorta a los filipenses a permanecer firmes, combatientes por la fe del Evangelio y sin dejarse intimidar por los que se oponen. Por causa de Cristo tenían el honor no sólo de creer en Cristo, sino también de sufrir por él, lo cual produce el conflicto que el mismo Pablo está experimentando por su cautiverio y su proceso. 46 Ibid., 541 47 Ibid., 536 61 Comentarios al texto: Detrás de las palabras se os ha concedido está el pensamiento de un regalo de la gracia, como es para los cristianos el privilegio de creer, pero también (por esa extraña contradicción con los modelos del mundo) el sufrir por Cristo. 62 3. EL NIVEL TEOLÓGICO 3.1 LÍNEAS DE SENTIDO No 01 TÉRMINO TEXTO 1:18 LÍNEA ALEGRÍA El anuncio del Evangelio 2:17-18 El sacrificio y servicio de la Fe La amistad y compañerismo La persona del Señor 02 03 2:28-29 04 3:1 05 06 4:10 07 1:4 1:25 El ministerio cristiano 2:2 La unidad y unanimidad 4:1 La comunión y firmeza 11 Un mandato: En la persona del Señor. Por siempre. La generosidad y solidaridad La oración y ruego 12 4:14 13 3:10 14 1:29 08 09 10 4:4 1:17 LÍNEA SUFRIMIENTO La envidia y rivalidad para predicar. El encarcelamiento La tribulación de la escasez económica La comunión en los padecimientos y la semejanza en la muerte de Cristo. La gracia de creer y padecer por Cristo 63 3.2 IDENTIFICACIÓN DE POSIBLES CAMPOS SEMÁNTICOS No TEXTO CAMPOS SEMÁNTICOS DE ALEGRÍA 01 1:4 La Oración 02 1:18 La Evangelización 03 1:25 El Ministerio 04 2:2 La Comunión 05 2:17-18 La Fe 06 2:28-29 La Amistad 07 3:1 El Señorío de JC 08 4:1 La Firmeza 09 4:4 La Alegría 10 4:10 Solidaridad No TEXTO CAMPOS SEMÁNTICOS DE SUFRIMIENTO 11 1:17 El Encarcelamiento 12 1:29 Los Padecimientos por creer en JC 13 3:10 La semejanza en la muerte de JC 14 4:14 La Escasez económica 3.3 COMENTARIO SOBRE LOS CAMPOS SEMÁNTICOS DE ALEGRÍA 3.3.1 La Oración. En la Biblia la oración es adoración que incluye todas las actitudes del espíritu humano en su acercamiento a Dios. El cristiano adora a Dios cuando le ofrece culto, confesión, alabanza, y súplica por medio de la oración. Pablo es un hombre de oración y en cuatro distintas oportunidades ora por sus discípulos: Ef 1:15-23; 3:14-19; Flp 1:9-11; Col 1:9-12. El apóstol fue maltratado en Filipos y vio poco fruto de su labor, pero recuerda con gozo a los filipenses. Debemos agradecer a nuestro Dios las gracias y consuelos, los dones y el servicio de otros, cuando recibimos el beneficio 64 y Dios recibe la gloria. La gente es querida por sus ministros cuando reciben el beneficio de su ministerio. 3.3.2 La Evangelización. Es comunicar las Buenas Nuevas de salvación. El evangelio constituye las buenas nuevas de que Dios en Jesucristo ha cumplido sus promesas, y de que se ha abierto un camino de salvación para todos. El apóstol estaba preso y para borrar el vituperio de la cruz muestra la sabiduría y la bondad de Dios en sus sufrimientos. Debido a ellos algunos se interesaron en el evangelio. Sufrió de parte de los falsos amigos y de los enemigos. Miserable carácter el de los que predican a Cristo por envidia y contienda y añaden aflicción a las cadenas que oprimían a éste. La evangelización fue la razón de la vida de este gran misionero. Además, Debemos regocijarnos, puesto que nuestros trastornos pueden hacer bien a muchos. 3.3.3 El Ministerio. La muerte para el creyente verdadero es ganancia, porque es el fin de todas sus debilidades y miserias. Le libra de todos los males de la vida y le lleva a poseer el bien principal. La disyuntiva del apóstol no era entre vivir en este mundo y vivir en el cielo; entre ellos no hay comparación; era entre servir a Cristo en este mundo y disfrutar de Él en el otro. No entre dos cosas malas, sino entre dos cosas buenas: vivir para Cristo o estar con Él. El poder de la fe y de la gracia divina puede hacernos dispuestos para morir. En este mundo estamos rodeados de pecado, pero estando con Cristo escaparemos del pecado y de la tentación, la tristeza y la muerte para siempre. Pero quienes tienen más razón para partir deben estar dispuestos a quedarse en el mundo en la medida que Dios tenga alguna obra para que ellos hagan. Mientras más inesperadas sean las misericordias antes que ellos se vayan, más de Dios se verá en ellos. Pablo, amaba el ministerio y el servicio al cual Dios le había llamado. 3.3.4 La Comunión. Traducido diversamente ―comunicación‖, ―participación‖, ―contribución‖, ―compañía‖, ―común‖. La connotación fundamental es la de participar de algo con alguien. Estas son exhortaciones a los deberes cristianos; a la unanimidad, a la humildad, conforme al ejemplo del Señor Jesús. La bondad es la ley del reino de Cristo, la lección de su escuela, el uniforme de su familia. Se mencionan diversos motivos para el amor fraternal. Es el gozo de los ministros ver la unanimidad de su gente. Aquí, Pablo hace una solicitud de unidad y unanimidad como motivo de gozo. 65 3.3.5 La Fe. Es la gracia mediante la cual Dios capacita al hombre para creer en él y confiar plenamente en sus promesas. Debemos ser diligentes en el uso de todos los medios que llevan a nuestra salvación perseverando en ellos hasta el fin, con mucho cuidado no sea que con todas nuestras ventajas no lleguemos. Esto nos anima a hacer lo más que podamos porque nuestro trabajo no será en vano; aún debemos depender de la gracia de Dios. La obra de la gracia de Dios en nosotros es vivificar y comprometer nuestros esfuerzos y sacrificios y servicio en la fe. La buena voluntad de Dios para nosotros es la causa de su buena obra en nosotros. La voluntad de Dios es que los creyentes estén con mucho regocijo; y los que estén tan felices por tener buenos ministros, tienen mucha razón para regocijarse con ellos. 3.3.6 La Amistad. La cualidad o estado de no ser múltiple, sino ser uno de común acuerdo. Es la condición esencial para la armonía y el entendimiento en un grupo. No anula la singularidad de los individuos, pero los reúne en torno a objetivos y creencias comunes. Los que compartimos la misma fe bíblica debemos estar estrechamente unidos en comunión, trabajo y testimonio. Necesitamos promover más visiblemente nuestra amistad en la diversidad. Epafrodito estaba dispuesto a ir donde los filipenses para que fuera consolado con los que se habían condolido con él cuando estuvo enfermo. Parece que su enfermedad fue causada por la obra de Dios. El apóstol les pide que le amen más por esa razón. Es doblemente agradable que Dios restaure nuestras misericordias, después del gran peligro de perderlas; y esto debiera hacerlas mucho más valiosas. Lo dado en respuesta a la oración debe recibirse con gran gratitud y gozo. 3.3.7 El Señorío de JC. En el ministerio de Jesús la proclamación y la diaconía iban juntas, de la mano. Palabras y obras surgen del señorío de Jesús, porque él nos envía al mundo a predicar y servir. El gozo como fruto de una relación de amor con Jesús era el secreto para mantenerse a flote, pese a las circunstancias. En efecto, tan estrecho es el lazo entre la proclamación y el servicio, que produce gozo. 3.3.8 La Firmeza. La esperanza y la perspectiva creyente de la vida eterna deben afirmarnos y hacernos constantes en nuestra carrera cristiana. Hay diferencia de dones y gracias, pero estando renovados por el mismo Espíritu, somos hermanos. Estar firmes en el Señor es afirmarse en su fuerza y por su gracia. Los filipenses eran no solamente sus hermanos, sino también su alegría y su corona o motivo de honor. 66 3.3.9 La Alegría misma. El gozo en Dios es de gran importancia en la vida cristiana; es necesario llamar continuamente a ello a los cristianos. El gozo supera ampliamente todas las causas de pesar. Es nuestro deber mostrar cuidadosa diligencia en armonía con una sabia previsión y con la debida preocupación; Dios quiere que le demostremos que valoramos su misericordia y sentimos que dependemos de Él. La alegría con Dios, esa sensación consoladora de estar reconciliados con Dios, y de tener parte de su favor, y la esperanza de la bendición celestial, son un bien mucho más grande de lo que puede expresarse con plenitud. Esta alegría mantendrá nuestros corazones y mentes en Jesucristo; nos impedirá pecar cuando estemos sometidos a tribulaciones y de hundirnos debajo de ellas; nos mantendrá calmos y con una satisfacción interior. El apóstol es un ejemplo. Su doctrina armonizaba con su vida. La inminente venida del Señor, debe producir un estado permanente de alegría por la espera; y la manera de tener al Dios de paz con nosotros es mantenernos dedicados a nuestro deber. 3.3.10 La Solidaridad. Es la habilidad especial que Dios da a ciertos miembros del cuerpo de Cristo para contribuir con sus recursos materiales a la obra del Señor con liberalidad y alegría. Pablo se goza que el Señor hubiera revivido el interés de los filipenses por colaborar con sus necesidades. Conclusiones al comentario teológico sobre la alegría: La alegría de la condición cristiana, sólo puede poseerse en paradójica alternancia con la tristeza, la tribulación y la inquietud. Esta alegría se sitúa más allá de los sentimientos, porque es una alegría en el Señor, y por consiguiente, no depende de nosotros mismos. Pablo puede recordarla, llamarla y exhorta a ella; es la alegría de la fe. Se fundamenta en la esperanza y confianza que a través de todas las luchas y angustias está segura de la justificación por Cristo. Pablo opone decididamente a la alegría, tanto la aflicción por la tribulación externa, con la angustia por las correcciones internas. No es la resignación ni la tristeza mortal del mundo, las que deben tener la última palabra, sino la alegría de una fe pura. La Carta a los Filipenses fue escrita desde la prisión y se puede vislumbrarse una cierta soledad del Apóstol, la recta predicación puede estar en peligro, por consiguiente, hay motivo de preocupación; pero también acción de gracias y alegría inquebrantable por la participación de los filipenses en el Evangelio: Aunque existan motivos de preocupación, qué más da si Cristo es exaltado. La alegría es un obstinado ―sin embargo‖ que se repite y cuyo fundamento es la oración infatigable que se orienta a la difusión del Evangelio e invoca el crecimiento de las comunidades. El tiempo del sufrimiento y persecución es 67 limitado ¡El Señor está cerca! Por eso la alegría se funda sobretodo en la esperanza de ser glorificado también con Cristo en el sufrimiento; este esperar alegre y consolador en el día de Cristo, relativiza el presente. La alegría en el Señor, engendra la verdadera equidad, puesto que libera la solidaridad con el prójimo y por otra, relega las alegrías y los sufrimientos presentes al ámbito de lo temporal y pasajero. Este tipo de enseñanza paulina de la alegría en medio del sufrimiento y de la tribulación, es puesta a prueba en la época en la que las persecuciones a los cristianos, ponen a prueba y amenazan las comunidades. El despojo de los bienes materiales, no puede arrebatar en bien de la alegría, pero esto no significa que la persecución no siga siendo una tribulación real y calamitosa. Tal vez por eso, se exhorta a la paciencia, a permanecer firmes en la doctrina.48 Cristo ha renunciado voluntariamente a la alegría y ha tomado sobre sí el oprobio de la cruz; únicamente poniendo los ojos en Él pueden los que sufren tribulación tener paciencia y mantenerse firmes. 3.4 COMENTARIO SOBRE LOS CAMPOS SEMÁNTICOS DE SUFRIMIENTO 3.4.1 El Encarcelamiento. Estas aflicciones no se derivan sólo de la persecución. Son «luchas por fuera, angustias por dentro». Hay que decir que todas estas aflicciones tienen un sentido positivo. Por eso, no hay que avergonzarse de ellas, sino que hay que gloriarse incluso (―porque sabemos que la tribulación produce paciencia, y la paciencia, carácter probado…‖ Rm 5:3). La tribulación fomenta la paciencia (12: 12), y ésta – a su vez – ofrece la posibilidad de dar buena cuenta de sí, es decir, la tribulación hace que la persona afectada experimente que ella se cuenta entre los que tienen la esperanza de ser participes de la gloria de Dios. Pablo llega incluso a escribir: ―Esta aflicción leve y pasajera nos produce un eterno peso de gloria que sobrepasa toda comparación‖ (2Co 4: 17), es decir, la gloria futura no admite punto de comparación con la calamidad del momento y la tribulación misma del encarcelamiento contribuye a la inmensa abundancia de gloria. Pablo, por el consuelo experimentado en medio de la tribulación, puede consolar también a otros que se hallan afligidos (2Co 1: 4). Más aún, la aflicción sucede ―para vuestro consuelo y salvación‖ ―para vuestra gloria‖; Cómo sucede esto, no nos lo dice Pablo expresamente; pero, desde luego, se halla relacionado de manera muy intima con el hecho de que esas aflicciones, que se experimentan como ―padecimiento de Cristo‖, por amor de Cristo y en comunión con Cristo, sirve para que se manifieste la vida comunicada por Cristo y el motivo correcto para la predicación salga a la luz.. 48 Beyreuther E., / Finkenrath, G., En Diccionario Teológico del NT. 81 68 3.4.2 El Padecimiento por creer en JC. Los que profesan el evangelio de Cristo deben vivir como corresponde a los que creen las verdades del evangelio, se someten a las leyes del evangelio y dependen de las promesas del evangelio. En la fe del evangelio existe aquello por lo cual vale la pena esforzarse; hay mucha oposición y se necesita esfuerzo. La fe es el don de Dios por medio de Cristo; la habilidad y la disposición para creer son de Dios. Si sufrimos reproche y pérdida por Cristo, tenemos que contarlos como dádiva y apreciarlos como tales. Pero la salvación no debe atribuirse a las aflicciones corporales, como si las aflicciones y las persecuciones mundanas la hicieran merecer; la salvación es únicamente de Dios: la fe y la paciencia son sus dádivas. El creer en Cristo seguramente traerá conflictos que nos harán padecer. En 1Ts 2: 14, que es el testimonio más antiguo, designa el sufrimiento de los cristianos en las persecuciones. Es una gracia ―sufrir por él (Cristo), es decir estar expuesto a las persecuciones por amor de Cristo, ya que esto es señal de la futura gloria y de los especiales lazos con el Crucificado. Para referirse a las propias tribulaciones, Pablo utiliza el verbo en 2Co 1: 6 (Cfr. Rm 8:17). 3.4.3 La Semejanza en la muerte de JC. Los cristianos sinceros se regocijan en Cristo Jesús. Aquellos que imponen las obras humanas oponiéndolas a la fe de Cristo, Pablo los llama hacedores de iniquidad. Los trata de mutiladores, porque rasgan la Iglesia de Cristo y la despedazan. La obra de la religión no tiene propósito alguno si el corazón no está en ella; debemos adorar a Dios con la fuerza y la gracia del Espíritu divino. Ellos se regocijan en Cristo Jesús, no solo en el deleite y cumplimiento externo. Pablo, había sufrido la pérdida de todo por los privilegios de ser cristiano. Sí, no sólo los consideraba como pérdida, sino como basura, sobras tiradas; no sólo menos valiosas que Cristo, sino en sumo grado despreciables cuando se las compara con Él. Es por fe en la sangre de Cristo que somos hechos conformes a la muerte de Cristo cuando morimos al pecado como Él murió por el pecado; y el mundo nos es crucificado como nosotros al mundo por la cruz de Cristo. El apóstol está dispuesto a hacer o sufrir cualquier cosa para alcanzar la gloriosa resurrección de los santos. Esta esperanza y perspectiva lo hacen pasar por todas las dificultades de su obra. No espera lograrlo por su mérito ni su justicia propia sino por el mérito y la justicia de Jesucristo. El ―conocer o experimentar‖ la comunión con sus sufrimientos (los de Cristo) es, juntamente con la experiencia cotidiana del ―poder de su resurrección‖ la forma de estar unido con Cristo y de alcanzar la resurrección. Los sufrimientos son aquí los sufrimientos propios de Cristo, en los que el apóstol participa por sus tribulaciones diarias y con las que Pablo llega así a ―hacerse semejante a Él en su muerte‖. 69 3.4.4 La Escasez económica. La naturaleza de la verdadera simpatía cristiana no es tan sólo sentirse preocupados por nuestros amigos en sus problemas, sino hacer lo que podamos para ayudarlos. El apóstol solía estar en cadenas, prisiones y necesidades, pero en todo aprendió a estar contento, a llevar su mente a ese estado, y aprovechar el máximo de eso. El orgullo, la incredulidad, el vano insistir en algo que no tenemos y el descontento variable por las cosas presentes, hacen que los hombres estén disgustados aun en circunstancias favorables. Declarémonos en sumisión paciente y en esperanza cuando estemos aplastados; en humildad y una mente celestial cuando estemos jubilosos. Es gracia especial tener siempre un temperamento mental sereno. Cuando estemos humillados no perdamos nuestro consuelo en Dios ni desconfiemos de su providencia, ni tomemos un camino malo para nuestra satisfacción. En estado próspero no seamos orgullosos ni nos sintamos seguros ni mundanos. Esta es una lección mucho más difícil que la otra, porque las tentaciones de la plenitud y de la prosperidad son más que las de la aflicción y la necesidad. El apóstol no tenía la intención de moverlos a dar más, sino exhortarlos a una bondad que tendrá una recompensa gloriosa en el más allá. Por medio de Cristo tenemos la gracia para hacer lo que es bueno, y por medio de Él hemos de esperar la recompensa; como tenemos todas las cosas por Él, hagamos todas las cosas por Él y para su gloria. Conclusiones al comentario teológico sobre el sufrimiento: Se considera que el concepto teológico acerca del sufrimiento, está en estrecha relación con el sufrimiento de Cristo. La pasión de Jesús no es casual, sino que está situada bajo el peso de la unción profética, adquiriendo una dimensión soteriológica. Sin embargo, la pasión vicaria de Jesús no significa para sus seguidores, la liberación del sufrimiento humano, sino el ejemplo a seguir en cuanto a ser sin pecado, el aprendizaje de la obediencia y la positiva y permanente actitud de cara a la vida misma. Su sufrimiento contiene la exigencia de seguirle en el sufrir. En la vida comunitaria, del sufrimiento surge la solidaridad. De la Koinonía surge la idea del sacrificio. El que tenga los mismos sentimientos de Jesús, tiene que sufrir, y esto no solamente se relaciona con la identificación en los sufrimientos y padecimientos de Cristo; sino también basados en esa unión mística entre Cristo y su iglesia, en la identificación y solidaridad con la comunidad. Esto exige no solamente tener compasión, sino compromiso existencial y solidaridad en el sufrimiento. Ahora bien, no todo sufrimiento es por Cristo. Sería esencial para un autentico sufrimiento por Cristo, por parte del ministro o de la comunidad, que ellos sufran por razón del servicio o vocación. Que se sufra como cristiano, que el sufrimiento sea injusto, que no se sufra por ser ladrón, homicida o malhechor. El sufrimiento correcto es según el designio de Dios, en nombre de Cristo, por el Evangelio, de sufrimiento por nuestra experiencia con Dios, de 70 sufrimiento por la justicia, dentro de una perspectiva de esperanza, de sufrimiento por el Reino de Dios. Sobre el aspecto escatológico del sufrimiento, vale decir que así como para Cristo, el sufrimiento no es un fin en sí mismo, sino un medio para ser perfecto o acabado en el amor; así también debe ser para sus seguidores. Es decisivo para los cristianos el hecho de padecer por el objetivo o la meta y frente a la esperanza de la gloria eterna, se desvanece el tiempo de padecer. Pablo menciona como objetivo de su nuevo modo de vida su conocimiento existencial y su experiencia, en primer lugar de la fuerza de la resurrección y luego la solidaridad con los sufrimientos de Cristo. En el N.T. se nombran juntas la pasión y la glorificación; así como la pasión y la paciencia; y así concibe Pablo su solidaridad, como una comunión en los sufrimientos y en el consuelo. Más aún, Pablo puede trasponer la provisionalidad del sufrimiento que precede a la glorificación, a toda la creación y no sólo al hombre. Así toda la creación sufre mientras camina hacia la redención plena. Así el cristiano no aguarda pasivamente el final, sino que tiene los ojos puestos en el objetivo, o la finalidad del sufrimiento, puesto que el Cristo resucitado no es sólo consuelo en el sufrimiento, sino también la garantía de las promesas de Dios en contra del sufrimiento.49 49 Gärtner, B., En Diccionario Teológico del N.T.685 71 4. EL NIVEL ACTUALIZANTE El mundo moderno, y con él la iglesia moderna, ha sido asolado con incredulidad, secularismo y materialismo que han deteriorado su fe, entenebrecido su visión, y distorsionado su vida hacia lo simplemente temporal. La importancia eterna de la Palabra de Dios como un todo se ilustra efectivamente en esta Carta a los Filipenses, escrita hace tanto tiempo. En la actualidad como nunca antes, el creyente en Cristo precisa de una clara visión de su Salvador, un entrañable andar en comunión, paz y poder internos que provienen de una asociación así, y la esperanza de la vida que ha de venir por su resurrección de entre los muertos, su cuerpo glorioso, y su cumplimiento en la presencia del Señor. En el contexto del triunfo sobre las circunstancias, su autor humano, sufriendo en prisión por causa de Cristo, escaso de bienes terrenos, y muy a pesar de ello, rebosando de poder y gozo espiritual, la epístola está diseñada para hablar al corazón de los hombres acerca de Cristo, llamándolos a poner su atención en la verdad revelada. Es una epístola que se debiera leer a menudo, digna de ser meditada y que provee sanidad espiritual para aquellos que están heridos por el mundo actual. Es la palabra de Dios triunfante para aquellos que deseen triunfar en Cristo hoy, así como lo fue para los que triunfaron ayer. 4.1 PROPUESTA TEOLÓGÍCA ACTUALIZANTE “El hombre, sólo puede alcanzar su plenitud fundamental, su paz, su alegría, yendo más allá de los campos del sentido común, de la teoría y de la interioridad, hasta el campo en el que Dios es conocido y amado”50 ¡San Pablo encontró el secreto de la alegría y nos lo reveló entrelazados en las líneas de la Carta a los Filipenses! Jesucristo en Jn 10:10 prometió que Él había venido para que todas las personas tuvieran vida y vida en abundancia, dice Jn 6:63 que Él vino a darnos vida, y cuando habla de vida, se está refiriendo a contento, a realización, a gozo, a alegría, a felicidad, a plenitud; ese es el tipo de vida que Jesús vino a entregarnos, esa es la clase de vida que Jesús vino a darnos. 50 Lonergan, Método, 86. 72 Jesús prometió en Jn 15:11, que Él nos dejaba su gozo. El mundo dará muchas fórmulas, para aprender a ser feliz, pero sólo en Jesucristo se podrá encontrar alegría verdadera. Ahora, se invita a revisar en esta carta lo que él dice, porque aquí hay un secreto: Este hombre sabía algo que muchos aún no saben, este hombre estaba experimentando una comunión y una relación que no tenemos, este hombre sabía algo, y en esta pequeña carta, nos revela el secreto de cómo estar alegres, a pesar del lugar en que nos encontremos, cómo estar alegres a pesar de la gente con la que estemos, cómo estar alegres a pesar de la persona que seamos, no importa si somos extrovertidos o introvertidos, no importa si somos alegres o melancólicos. Es importante para nosotros descubrir lo que él sabía. Descubrir el secreto de Pablo, saber cómo ser alegres a pesar de las circunstancias, la adversidad y la prueba en la cual se encontraba. En ocasiones, distorsionamos las cosas y nos acostumbramos a las recompensas inmediatas, pensamos que la alegría es un estado, que la alegría es un momento, que la alegría es simplemente la cosecha de algo que hemos sembrado en este instante, entonces vamos como de pico en pico, pero sin entender que existen valles entre pico y pico, estos a veces son largos, bastante largos, mientras subimos otra vez la cuesta, y mientras se disfruta otra vez, el siguiente pico, mucho tiempo puede pasar. 4.2 MOMENTO DE CONFRONTACIÓN ENTRE EL TEXTO Y LA VIDA Los conflictos fueron compañeros inseparables de Pablo. Desde la conversión hasta el martirio pudo sentir en su propia piel el rechazo de la acción evangelizadora que libera. Los textos bíblicos no emplean la palabra ―conflicto‖. En el Nuevo Testamento el término más próximo es tribulación. Este sí se repite muchas veces, sobre todo en las Cartas de Pablo. Esta palabra recuerda las opresiones y represiones de que son víctimas los anunciadores del Evangelio encarnado en las realidades humanas. Los poderosos, haciendo uso de su poder, con presiones y opresiones tratan de reducir el alcance del testimonio cristiano para que éste no incomode a nadie, ni provoque cambios en la sociedad. En este sentido, Pablo es hombre de conflictos. Los filipenses saben esto, pues la represión se ensañó contra él con ocasión del nacimiento de la comunidad y, al escribir esta Carta, él se encuentra nuevamente en la prisión. Los primeros cristianos consideraban las tribulaciones como prueba genuina de que estaban en el camino cierto. Esto queda muy claro desde el primer texto escrito del Nuevo Testamento, la primera Carta a los tesalonicenses (Cfr. 1:6). La resistencia a los conflictos provoca adhesión de más personas al Evangelio. Los propios tesalonicenses creyeron en la 73 Palabra de Dios anunciada por Pablo y Silas, que todavía traían en sí las marcas de las torturas sufridas en Filipos. Llevados de la euforia desmedida, los primeros cristianos comenzaron a atribuir un valor sin igual al martirio. Ahora bien, Pablo está en la prisión. Los filipenses (y también los cristianos de Éfeso) esperan que él dé pruebas cabales de su fe, enfrentando el martirio. A pesar de que el martirio es la prueba más elevada del amor por el Reino, los cristianos deben luchar para que sea evitado, pues donde hay mártires, es señal de que todavía la justicia no ha sido implantada. Y las comunidades prefieren sus líderes vivos y actuantes en la transformación de la sociedad injusta que intenta ahogar las voces proféticas. Nuestra lucha debe ser en el sentido de implantar la justicia y no en el de buscar a toda costa el martirio. La comunidad de Filipos tenía conflictos dentro y fuera. Los de dentro vienen del análisis de las recomendaciones hechas en la Carta: ¿Qué estaba sucediendo? Tenemos la impresión de que en ella no existía aquella opción de vida de Jesús que se hizo siervo. Por el contrario, la rivalidad, el deseo de recibir elogios, el considerarse superior a los demás; todo esto estaba presente en la comunidad. Los conflictos venían también de fuera, evidentemente. Sabemos que el Evangelio sufrió oposición sistemática por parte de falsos agentes de pastoral, que se centraban en una falsa concepción del Evangelio y en el rechazo continuo de la persona de Pablo como anunciador de la Palabra de Dios. Los cristianos reformistas buscan suavizar el conflicto y rehuir el martirio mediante el anuncio de un evangelio acomodado. De esta manera escapan de la necesidad de encarnarse en las realidades humanas más dolorosas. En el fondo, lo que pretenden es defender sus intereses y privilegios, al no desprenderse de su status social. Jesús, que es Señor por haberse hecho siervo, encarnado en las realidades humanas, muerto en la cruz como bandido rechazado por todos. Es la ―perfección‖ propuesta por la Carta a los Filipenses. La Carta a los Filipenses, como la mayoría de los escritos de Pablo, fue dirigida a una comunidad concreta. El final de la Carta supone un contexto celebrativo, donde la fraternidad ayuda a superar los conflictos, al permitir que todos se consideren hermanos los unos de los otros. Pablo logró formar, encarcelado, una comunidad de hermanos. ―Los de la casa del César‖ son personas convertidas por Pablo. A pesar de que todavía estaban al servicio del emperador y del sistema que busca aprisionar la Palabra de vida –como sucedió con el carcelero en ocasión de la fundación de la comunidad-, ya son considerados 74 hermanos. Pablo, que en la prisión encarna el servicio de Jesús hasta la donación de la propia vida, les anunció un evangelio muy concreto, hecho de resistencia, encarnación y alegría. Esto porque el espíritu que lo anima es la práctica de Jesús (Cfr. 2: 6-11). Se rescata del estudio de Bortolini,51 un pequeño resumen acerca de lo que se considera los más importantes aportes de actualización, teniendo como marco vivencial la comunidad como lugar de Encarnación: La comunidad del futuro: Pablo apunta hacia la comunidad del futuro: unión de sentimientos (sin murmuraciones y sin críticas), búsqueda comunitaria de la verdad (íntegros) en un mundo marcado por la corrupción (en medio de gente pecadora y corrompida). La comunidad es invitada a ser ―luz del mundo‖, exactamente como lo había dicho Jesús en el Sermón del Monte (Cfr. Mt 5:14). El cree que la misión produce resultados cuando toda la comunidad llega a la unión de sentimientos y de acciones. En las Cartas de Pablo aparece con frecuencia la idea de que su trabajo no es lucha aislada de una persona, sino resultado del esfuerzo conjunto de todos. Y para esto se pone a disposición. Ternura y lucha: La Carta a los Filipenses fue llamada, y con toda razón, la carta de la alegría. La alegría de Pablo brota, paradójicamente, de situaciones de conflicto y sufrimiento. Él alcanzó la difícil síntesis entre lucha y ternura, no permitiendo que los conflictos endurecieran su espíritu. Lejos de ser una persona amargada y de mal humor –cosa que aparece comúnmente en el rostro y gestos de un presidiario- él se deja invadir por la alegría bañada de esperanza. Además, se ve a través de la Carta una preocupación sin igual por los sentimientos de la comunidad. Solidaridad: Los filipenses enviaron a Epafrodito para que atendiera las necesidades de Pablo (2:25). Epafrodito sintió añoranza de la comunidad, cayó enfermo, y los filipenses quedaron muy preocupados (2:26-27). Pablo lo envía de regreso, aceptando vivir en la privación para que la comunidad dejara de preocuparse. Los sufrimientos son una ocasión importante para manifestar solidaridad. Compartiéndolos las personas aprenden a encarnarse. Se manifiesta la solidaridad también en el compartir de los bienes. La solidaridad suscita gratitud. La Carta, en este sentido, rebosa gratitud. En 2Co 6.4 Pablo cita como la primera prueba de la autenticidad de su ministerio la fortaleza para soportar las tribulaciones, las angustias, los sufrimientos. 51 Bortolini, J., Cómo leer la carta a los F, 44-47 75 Oración: La mayoría de las Cartas de Pablo tienen un lugar común: deberían leerse cuando la comunidad se reunía para las celebraciones. Esta es una importante clave de lectura para la comprensión de todos los textos paulinos. Pablo no sabe escribir sin orar. El escribe orando y ora escribiendo. Él agradece las cosas buenas que van sucediendo a lo largo del camino. A la acción de gracias añade la intercesión. La oración, por tanto, es el termómetro de la comunidad: por medio de ella descubrimos que Dios está caminando con nosotros, y esto nos lleva a agradecer las conquistas de la marcha; al mismo tiempo, provoca el discernimiento acerca del proyecto de Dios, clarificando las situaciones difíciles y dando valor para la lucha. La Carta a los Filipenses es el anuncio de Jesús encarnado en las realidades humanas más dolorosas. Así aprendemos que la encarnación es la condición primera e indispensable para que el anuncio del evangelio sea verdadero y eficaz. 4.3 ACTUALIZACIÓN SOBRE LA ALEGRÍA 52 El don neotestamentario de la alegría es un regalo de Dios. Nace de la sonrisa de Dios a la existencia rota con el hombre que vive en el pecado, la preocupación, el egoísmo, el sufrimiento y en las garras de la muerte. Dios al otorgarle su presencia, el perdón, hacerle su hijo, darle un propósito nuevo y asegurarle la vida eterna, le libra de las inquietantes acusaciones de frustrar su vida y le llama a un nuevo estado de relación con Él. Así pues, se considera que la alegría está enraizada en la salvación gratuita. Esa íntima relación de amor y de cercanía con Dios posibilita el derecho de disfrutar una herencia espiritual y de relacionarnos libremente con el prójimo. El efecto benéfico que esa doble relación proporciona a la vida es lo que se puede llamar: Alegría. Las manifestaciones de alegría en el AT, como expresión de alabanza y gratitud a Dios en lo familiar y colectivo, también tiene un equivalente en el NT, cuya comunidad se alegra de la salvación de Dios y lo expresa por medio sus cultos colectivos y sus eucaristías. Pero la alegría por la salvación permanece en tensión con la tribulación, por todos aquellos factores que amenazan la estabilidad de todo ser humano: Enigmas, absurdos y situaciones incomprensibles de la existencia humana; esta tensión ha de combatirse con la fe. Pablo demuestra cómo en medio de situaciones difíciles, hay consuelo en la tribulación, quedando 52 Fuente: Coenen,L y otros., Diccionario Teológico del NT, Vol I y II, 74-83 76 iluminada por una alegría en aquel Dios que a menudo resulta incomprensible, pero en quien, se debe confiar siempre. Toda alegría es un gozo anticipado, orientado escatológicamente hacia lo que Dios ha preparado para los que le aman. Así bien puede entenderse la invitación a la alegría. El anhelo a la alegría es totalmente natural, la Escritura testifica de un Dios que diseñó al hombre para la alegría y que derramó sobre él su bendición. Este enfoque sobre la alegría como bien preciado del hombre fue mal entendido por el ascetismo y aún hoy engendra un cierto odio hacia el cuerpo y a toda manifestación de placer. Con una mejor comprensión de la alegría, el cristiano ha de vivir en mejor relación con el medio que puede brindar una cultura de la alegría muy desarrollada, conocida como la industria de la diversión. Se debe adoptar una sana actitud frente a la vida, y con nuestro ser y conducta llamar la atención sobre la alegría que permanece, que trasciende y se transfigura, que no se extingue en la tribulación, sino que crece y madura. Quizá sería una verdadera revolución de la alegría, si los cristianos fuesen capaces de alegrarse por y con los demás. Sólo a partir de una actitud que no expresa su disgusto frente a lo negativo de un modo inflexible, y que no considere el trabajo bajo la maldición de la tristeza, se podría integrar plenamente la vida personal y familiar. Además, frente al proceso creciente de secularismo ateo que afecta nuestra sociedad, no queda sino mostrar en la práctica el camino de los cristianos, y guiar hacia las verdaderas raíces de aquella alegría, en la que las alegrías terrestres no quedan asfixiadas en la angustia y tribulación de la temporalidad, sino que aceptan una autentica expresión y jerarquización de valores. 4.4 ACTUALIZACIÓN SOBRE EL SUFRIMIENTO53 Una correcta enseñanza acerca del sufrimiento, supone saber de los sufrimientos de Cristo, pero también de los sufrimientos de la comunidad en la que vive. Perder de vista al hombre mismo cargado de dolor y aflicción e ignorar el sufrimiento de su comunidad es desconocer la Teología antropológica y negar la efectividad del mensaje social del Evangelio; pero si mira únicamente al hombre en su sufrimiento concreto y pierde de vista la pasión del Hijo de Dios, tampoco puede ser muy efectivo en la ayuda del Evangelio. 53 Ibid., vol II, 680-690 77 Es importante advertir que el sufrimiento en sentido bíblico, afecta al hombre integral: Espíritu, alma y cuerpo. Una reducción del sufrimiento a lo puramente corporal es demasiado superficial y no se adecua al sufrimiento de Jesús. Frente a la adversidad y pruebas producidas por desgracias, enfermedades o fenómenos naturales, cabría preguntarnos: ¿Son castigos de Dios? ¿Son esos sufrimientos, medios que muestran al hombre su imperfección y que pretenden llevarlo a los brazos de Dios? Lo mismo podría decirse del sufrimiento que procede de represalias externas como persecuciones. Lo que sí parece cierto, es que el sufrimiento de Cristo o por Cristo, no es tanto ideal sino existencial en la experiencia humana. Así pues, seguir a Jesús en el sufrimiento significa llevarlo en mi situación personal e intransferible, cargando su propia cruz. Lo que vincula al cristiano con el Cristo paciente, no es tanto el modo y la manera del sufrimiento sino en modo en que se lleva ese sufrimiento particular impuesto a cada uno. Debemos guardarnos de dos posibles errores: primero, el seguimiento con la cruz no significa buscar el sufrimiento. Tampoco Jesús lo busco sino que le fue impuesto. Una doctrina del sufrimiento, que busca y ansía el dolor, que pretende directamente el sufrimiento y la muerte, no está en línea de seguimiento con el verdadero significado de la cruz. No podemos hacer una apología del sufrimiento, divinizando o idolatrando el dolor. Buscar el sufrimiento de esta manera, es pretender autojustificarse y olvidarse de la función redentora de Jesús. Segundo, aceptar el sufrimiento de una manera estoica o resignada y pasar por el sufrimiento ajeno encogiéndose de hombros no significa seguir a aquel que no reprimió su propio dolor frente a su propio sufrimiento y al sufrimiento ajeno. La contemplación resignada es imposible de aceptar porque la comunidad primitiva conoció la necesidad de preocuparse por los que sufrían. En condiciones normales, nuestras comunidades no sufren situaciones de persecución, lo cual nos impide comprender el real significado de la pasión y muerte de Jesús. Los altos niveles de confort en que vive la sociedad moderna, impiden valorar el significado y la necesidad de un salvador sufriente. Lo que el NT dice acerca del sufrimiento de Jesús y sus seguidores es complejo y difícil de entender. Preguntas como: ¿Por qué permite Dios que suframos? ¿Por qué existe un sufrimiento humano tan grande en el mundo? Ubicaría a Dios distante y ajeno a nuestro dolor. Al contrario, se advierte que Dios no está fuera de nuestro dolor, sino que se sitúa dentro del mismo. La fe cristiana no se dirige hacia un Dios que está por encima de todas las cosas, que ve cómo se sufre, y que asevera que ama a los hombres; sino a un Dios cercano, personal que está ahí con ellos en todo momento, incluso en medio del sufrimiento. La pregunta correcta en ese caso sería: ¿Cómo puede Dios amarnos tanto que se solidariza con nuestro dolor? La búsqueda de la respuesta a esa pregunta, con respecto al sufrimiento, a la miseria y a la muerte, sería no sólo un signo de confianza, sino también un signo de que Dios en su revelación sigue siendo el amigo oculto pero siempre presente. Lo 78 cierto es que lo enigmático del Evangelio no es el sufrimiento del hombre sino el amor perenne de Dios. Los cristianos deberíamos identificarnos con el hecho que Cristo resucitó y por ello el sufrimiento, la enfermedad y la muerte no deben tener la última palabra. La superación del sufrimiento no puede ser relegada al futuro lejano, sino que aquí y ahora en medio de la comunidad en que estemos, debemos participar de las protestas de Dios contra el sufrimiento, puesto que el mundo en que Jesús, sanó, resucitó, dio pan y curó heridas no puede convertirse en bellas historias sino en realidades para hoy día. La resurrección, pone en evidencia que Dios no sólo penetra en el dolor humano, sino quiere vencerlo y superarlo. La humanidad sufre hoy bajo el hambre, la enfermedad, la guerra y las privaciones, haciendo de nuestro paso por la tierra algo indeseable y no algo agradable como preparación para el viaje a la eternidad. Surge para los cristianos y para la iglesia en general, el compromiso de liberar las almas del sufrimiento, lo cual exige estar prontos a intervenir más allá del ámbito privado y eclesial. Predicar el conformismo y la paciencia frente al sufrimiento, niega la esencia misma del cristianismo. Luchar contra cualquier forma o manifestación de sufrimiento es identificarnos plenamente con Jesús, no solamente en su muerte, sino también en el poder de su resurrección. 79 5. CONCLUSIONES El sufrimiento y la alegría: El sufrimiento y la alegría se hallan a menudo tan íntimamente entrelazados, que el que sufre debe gozarse en el sufrimiento y de sus sufrimientos. Porque lo que viene después del sufrimiento es mucho más glorioso, de tal manera que el sufrimiento adquiere el carácter de una fase preliminar necesaria. Las expresiones de esta idea varían. Según Jn 14: 28, los discípulos deben alegrarse porque Jesús se va. En Jn 11: 15 Jesús se alegra de que Lázaro haya muerto, dando así la ocasión para que se manifieste la gloria en un milagro. En Col 1: 24 el apóstol se alegra de su sufrimiento, porque es «en favor de» la comunidad. Según 1 Pe 4: 13, la comunidad debe gozarse de tener comunión con los sufrimientos de Cristo, para poder alegrarse cuando llegue la revelación de la gloria. Y, así, Pedro y Juan, según Hch 5: 41, se alegran de «haber sido considerados dignos de sufrir oprobios a causa del Nombre ». Por tanto, aquí, lo mismo que en otros textos de NT, lo de alegrarse significa la orientación hacia el valor central, el gozarse de él y el hallarse determinado por la motivación y la emoción que de él dimana. Una experiencia negativa en el presente se valora como prerrequisito para lo mayor que está llegando. La alegría durante y después del sufrimiento: La conducta cristiana en medio del sufrimiento injusto y en la tribulación se describe como la superación de los mismos. Así lo vemos en 1 Pe 1: 6-8 (alegría en el tiempo de la tristeza, de la tentación y de las pruebas de la fe, y esa alegría precisamente como consecuencia de la fe); St 1:2 (alegría en el tiempo de la tentación y de las pruebas de la fe, en este caso acompañada de la paciencia); 1Ts 1: 6 ( la tribulación , al aceptarse la palabra, es superada por medio de la alegría); Hb 10: 34 (renuncia con alegría a los bienes; aquí también se trata seguramente de la pérdida de bienes a causa de la conversión). Por eso, el apóstol en medio de todas las tribulaciones, puede experimentar precisamente alegría, (2Co 7: 4); de la misma manera, en la comunidad, las pruebas en medio de las tribulaciones tuvieron como consecuencia alegría, y la pobreza tuvo como consecuencia riqueza en dadivosidad (2Co 8: 2). De forma parecida, en Col 1: 11, la fuerza para la paciencia y la perseverancia se hallan junto a la alegría. En Hb 12: 2 el sufrimiento del cristiano se considera como etapa previa para la alegría que se halla delante de él, y en 12:11 ese sufrimiento se aplica a la disciplina actual de la comunidad. Por el contrario, acentuemos una vez más, basándonos en Mt 5: 11s; St 1: 2.12; 1P 4:13s, que existe intima relación entre la bienaventuranza por el sufrimiento actual de los justos y la alegría. El principio teológico que respalda todos los enunciados acerca de la «alegría en el sufrimiento» (o la alegría después del sufrimiento) es el siguiente: si se tiene en cuenta la total oposición entre la injusticia y la justicia, los sufrimientos y las persecuciones actuales 80 de los justos son para estos una razón para la alegría. La justicia se demuestra precisamente en la persecución actual. En todo ello no se ve siempre una relación con el sufrimiento y la gloria de Cristo. Sin embargo la alegría se escapa una y otra vez para todos los que la buscamos en las cosas, la excitación de relaciones nuevas y diferentes, el dinero, el poder aparente que da la posición social, la riqueza. La alegría es como un cuadro naif, en la que cientos de pequeños puntos toman sentido cuando tomamos distancia. La alegría es una actitud que requiere haber ahondado quedo y profundo en los océanos de nuestro corazón. O quizá haber sufrido mucho y haber aprendido de una manera inequívoca que todo pasa, todo se transforma. Que el dolor y el gozo se alternan en un baile eterno y que sólo es nuestra actitud ante las circunstancias la que puede cambiar la visión de la vida. Mi experiencia de alegría me dice que se trata de fluir, abandonarse, disfrutar con lo que tenemos, ser agradecido, tener un propósito elevado en la vida, amar y ser amado, soñar y trabajar por nuestros sueños, compartir nuestro tiempo con la familia, los amigos o aquellas personas que no tienen la suerte de ser queridos, gustar de las cosas sencillas, desarrollar con pasión nuestras aficiones, hacer el trabajo con excelencia ¡Todos ansiamos estar alegres! Pero la alegría tiene sus bases en un terreno más sólido y permanente que las meras adquisiciones materiales. Sin soluciones para nuestros problemas íntimos y profundos, nuestra vida carecerá de un significado permanente y satisfactorio y estará llena de infelicidad y desasosiego. Las circunstancias de este hombre, en reclusión y esperando un fallo de ejecución, nos obligan a considerar con detenimiento las conclusiones del estudio de esta carta: Ella nos reveló el secreteo de la alegría; y la manera cómo esta puede obtenerse. Nos mostró las características personales del hombre que ha aprendido este secreto y la manera de derramar su corazón sobre aquellos a quienes ama profundamente. Nos reveló al Cristo, quien le enseñó el secreto para estar alegre. En ella se nos presenta a Cristo como nuestra razón de ser y existir. Nuestro modelo de vida a seguir. Nuestra meta a alcanzar y nuestra suficiencia y fortaleza. (1:21; 2:5-11; 3:14: 4:13) Respecto al vivir cristiano hay ciertas conclusiones que vale la pena resaltar en la carta: Gozo: Pablo habla del gozo en la oración (1:4), gozo en los frutos de su trabajo (4:1) y gozo en el sufrimiento, aun al enfrentar la muerte (2:17). Pablo se regocija donde hay unidad y 81 compañerismo (2:2), encuentra gozo en la ayuda de sus amigos (4:10), y tiene gozo al saber que otros están predicando a Cristo. Anima a sus lectores a regocijarse en su fe, en su relación con el Señor (1:25; 3:1; 4:4) y en la acogida y recibimiento dados a hermanos en Cristo (2:28, 29). Compañerismo y unidad: Pablo escribe agradecido por el compañerismo de los filipenses manifestado desde el principio (1:5), participando con él de la gracia de Dios y posibilitando la defensa y confirmación del evangelio (1:7). Es un compañerismo en términos de ―dar y recibir‖ que Pablo conoció de los filipenses (4:15). Los anima a mantenerse ―firmes en un mismo espíritu, combatiendo juntos y unánimes por la fe del evangelio‖ (1:27). La alegría del Apóstol sería completa si ellos tuvieran ― … el mismo amor, unánimes, pensando en una misma cosa‖ (2:2). Pablo quería asegurarse de que la iglesia de Filipos no estuviera contemporizando con el egoísmo, orgullo o partidismo (2:1– 4). Donde hubiera desacuerdo entre creyentes, era necesario ayudar a fin de que la unidad, el compañerismo y testimonio del cuerpo no fuesen malogrados (4:2, 3). Expectativa espiritual de Pablo: Ninguna otra carta muestra esto más vívidamente. Contemplamos lo completo del compromiso de Pablo con Cristo Jesús, y su único deseo de conocerlo y ser conocido por él. Esto es mostrado más claramente en 3:7–14, y es allí donde ubicamos la esperanza de Pablo también expresada en 1:20 de que él nunca sería avergonzado, sino que con valentía estaba seguro de que Cristo sería ―exaltado en su cuerpo, ya sea por la vida o por la muerte‖. En 4:11-13 puede hablar de su contentamiento en cualquier circunstancia, en privaciones y dificultades, con tal de que Cristo lo fortaleciera para sobrellevarlas y que Cristo fuera glorificado por esas experiencias. En conclusión: Esta Carta a los Filipenses permanecerá siempre como un tributo a la actitud del apóstol frente a sus sufrimientos. Por la gracia de Dios puede regocijarse bajo las circunstancias más adversas de su cautividad y su inminente destino futuro. Sus constantes llamados a regocijarse es una característica distintiva. El secreto de ese gozo es la comunión con el Señor que es el centro de su vida, sea lo que fuere que le depare el futuro (1:20–21). ¡Que Dios nos dé la gracia de mantenernos alegres a pesar de las adversidades y circunstancias de la vida! ―Por tanto, os ruego que me imitéis‖ Pablo. (1Co 4:16) 82 BIBLIOGRAFÍA ALETTI, J.N., Saint Paul épitre aux Philippiens, Paris, Gabalda et Cia, 2005. BAENA G., S.J. El método histórico – crítico en Theologica Xaveriana No 122, 47/2, 1997. pp. 155-179. BALZ, H., y SCHNEIDER,G., Diccionario Exegético del NT, Vol IyII. Salamanca: Sígueme, 1996. BARBAGLIO, G., La teología de San Pablo, Salamanca: Secretariado Trinitario, 2006. 486 pp. BERKHOF, L., Teología Sistemática, Grand Rapids: T.E.L.L. 1974. BIBLIA DE JERUSALÉN, Bilbao: Editorial Desclée, 1998. BORTOLINI, J., Cómo leer la carta a los Filipenses: el Evangelio Encarnado, Bogotá: San Pablo, 1999. 48 p. BROWN, R., Introducción al Nuevo Testamento, Editorial Trotta, Madrid: 2002, vol. 2, 566-575. 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