2016 pondrá a prueba una vez más la resistencia del mundo al fascismo La humanidad se presenta una vez más este año como un involuntario jugador de ruleta rusa enfrentada a la angustia de no saber en qué momento saldrá y a quien alcanzará la bala disparada, no al azar sino deliberadamente en esa partida trucada del juego en la que EEUU decide a qué pueblo del mundo asestará esta vez el jaque mate en el marco de su demencial afán de adueñarse del planeta. La incertidumbre del mundo se acrecienta tras el anuncio hecho por Alton Carter, secretario de Defensa de EEUU al presentar el miércoles pasado la nueva estrategia militar del Pentágono que advierte que las fuerzas armadas deben estar preparadas para oponerse a Estados revisionistas que desafían las normas internacionales, como China, Rusia, Irán, Corea del Norte y el Estado Islámico” lo cual hace temer que buscan hacer más guerras. Ya 2015 dejó la estela de violencia, destrucción y muerte que dejan todos los años las sangrientas guerras de conquista y las no menos brutales guerras económicas, políticas y financieras, componentes de los “golpes suaves” que desatan EEUU y sus secuaces los gobiernos europeos y las oligarquías criollas para destruir las revoluciones que liberan a los pueblos de sus garras. Y el 2016 encuentra a la Humanidad inmersa en el mismo círculo ciclo del que no ha podido salir desde hace más de 2 siglos asolada por la fuerza de las armas del imperio más poderoso de la historia, cuyos padres fundadores y sus herederos bajo la bandera del Destino Manifiesto se arrogaron el derecho de invadir y sojuzgar pueblos con el pretexto de liberarlos de la barbarie, cuando los bárbaros son ellos. Tal parece que EEUU y sus secuaces pretenden repetir historia que escribieron en Latinoamérica y el Caribe, en el Medio Oriente, Asia Central, el Norte de África y demás partes del mundo de las que una vez se adueñaron y convirtieron en feudos que perdieron cuando los pueblos se rebelaron y reconquistaron su libertad, dignidad y soberanía, hoy más que nunca de nuevo amenazadas. Estos modernos Cruzados van a la guerra como lo hicieron sus antepasados con la excusa de rescatar el Santo Sepulcro, cuando lo hicieron para adueñarse de la ruta de la seda y de las especias, entonces tan valiosas como el oro para conquistar países como hoy lo hace el Imperio y sus aliados para sojuzgar esos y otros pueblos y saquear sus ingentes recursos naturales, de los cuales ellos generalmente carecen. Pero si la decisión de EEUU de declarar a China, Rusia, Irán y Corea del Norte oculta la intención de agredirlos basado en su inmenso poderío militar, (aunque dice que no quiere conflicto alguno con esos países) se equivoca, ya que esas naciones son también grandes potencias militares, que juntos lo superan claramente en poder de fuego y en efectivos militares. Sería un grave error, debido a que está acostumbrado a lo largo de su existencia de casi 240 años que cumplirá en julio, a desatar guerras contra países militarmente inferiores, aventuras bélicas de las que ha salido casi siempre derrotado, por ser los hijos de esos pueblos que ha invadido, moral y dignamente superiores a sus soldados que mueren sin honor ni gloria en el campo de batalla. De allí que este 2016, sea un año crucial para la defensa y consolidación de esos valores cuya recuperación costó ríos de sangre, sudor y lágrimas a las naciones que han padecido los horrores de las guerras de conquista y los “golpes suaves”, el más reciente y brutal de los métodos utilizado por EEUU y sus lacayos para atentar contra los procesos revolucionarios que las liberaron. Lo hicieron en Afganistán, Irak Somalia, Yemen, Libia y otros países, desatando salvajes guerras de conquista y en otros, con apoyo de las oligarquías criollas, “golpes suaves” como en Yugoslavia, lo mismo que en Ucrania y Libia, donde culminaron en sangrientas guerras que dejaron y siguen dejando violencia, destrucción y muerte. En la Patria Grande, gracias a la guerra económica, política, financiera y social que los caracteriza, los golpes suaves alcanzaron recientemente victorias en los comicios presidenciales celebrados en Argentina y en las elecciones parlamentarias de Venezuela, pero están irremediablemente condenados al fracaso por la incapacidad y estupidez de los lacayos que utilizan como cómplices. Y es que emborrachados por sus transitorios triunfos cometen el error de atentar contra la institucionalidad de ambos Estados y las conquistas sociales que hoy disfrutan sus pueblos gracias a las revoluciones que en ellos se dieron, pueblos que se han rebelado contra las medidas ilegítimas e ilegales que para eliminarlas adoptó Macri en Argentina, y Ramos Allup pretende imponer en Venezuela. Y es que envalentonados por esas victorias, los Cruzados del Siglo XXI y sus lacayos piensan ingenuamente que los procesos revolucionarios latinoamericanos y caribeños caerán como fichas, víctimas del letal “Efecto Dominó”. No se dan cuenta, que lo que alcanzaron en las patrias de San Martín y de Bolívar, El hombre de las Dificultades”, son solo triunfos circunstanciales. Porque, así como han sido desalojados de los espacios que conquistaron en Medio Oriente, Asia Central, el Norte de África por los buitres que criaron, los mercenarios que armaron, financiaron y entrenaron, serán igualmente expulsados por los pueblos de Argentina y Venezuela que han despertado del hipnótico letargo en que los sumieron con sus “golpes suaves” plagados de mentiras. Se dieron cuenta de que fueron víctimas de la estafa que escondía la oferta engañosa hecha por el Capitalismo Salvaje y su modelo neoliberal en los recientes comicios presidenciales de Argentina y parlamentarios de Venezuela, con los que pretenden devolver a la Patria de San Martín a las épocas de sumisión e ignominia como la que vivió durante la “Década Perdida” y a la Patria de Bolivar, a los 40 años de la oscura y larga noche de la Cuarta República. Pero no podrán hacerlo, porque los pueblos de Argentina y Venezuela se han levantado otra vez con más fuerza que antes en rebeldía junto con sus demás hermanos de la Patria Grande contra ese imperio en vías de extinción, fiera herida de muerte que lanza sus últimos zarpazos en vano intento por recuperar su pasado esplendor y gloria que lo convirtieron en el más poderoso imperio de la historia. Y su extinción será aún más rápida si ËEUU y sus lacayos cometen el garrafal error de agredir a China, Rusia, Irán y Corea del Norte, como seguramente lo ha pensado Carter al declarar a esas 4 naciones como amenazas para la seguridad de su país, como lo hizo con Venezuela Obama, el Premio Nobel de la Paz que hace la guerra, declaración que siempre precede a una agresión bélica del imperio. Será entonces cuando la justicia finalmente alcance a ese Estado criminal que es EEUU, a sus vasallos europeos, a los apátridas de las oligarquías criollas y a los dueños de los medios mercenarios que conspiraron contra la libertad, soberanía y dignidad del pueblo latinoamericano y caribeño que como el resto de los pueblos oprimidos del planeta buscan hacer realidad la Utopía de ese mundo posible con el que sueñan. Powered by TCPDF (www.tcpdf.org)