El concepto del Reino de Cristo en la espiritualidad del Regnum Christi. P. Stephen Howe, LC I. INTRODUCCIÓN La finalidad de este documento es la de explorar qué quiere decir el termino “Reino de Cristo” en conexión con el movimiento Regnum Christi. Voy a intentar demostrar que hay una conexión estrecha y inseparable entre la espiritualidad de Cristo Rey y la del Sagrado Corazón. Con esta finalidad voy a tomar de varias fuentes que son especificas del movimiento, pero usando como base principal la teología del Reino que emerge en la encíclica Quas Primas con la cual el Papa Pio XI instituyó la fiesta de Cristo Rey. El 17 de septiembre de 2012, Cardenal Velasio de Paolis escribió unas reflexiones sobre el carisma del Regnum Christi, que solo acaban de salir este mes en una antología de textos.1 Tiene muchos puntos de contacto con el documento "lineamientos sobre el carisma," que salió en 2012.2 En ambos documentos, se enfatiza mucho el concepto del “Reino de Cristo” al centro de nuestro carisma. Él comenta en una sesión de preguntas: ¿Cuál es el misterio de Cristo que vosotros queréis que sea referencia en vuestra vida? Damos por descontado que es el Reino de Cristo, instaurar su Reino en el mundo. Creo que debemos partir de aquí para dar unidad a la vida.”3 Habiendo sido Delegado Pontificio de la Legión durante unos tres años, el Cardenal de Paolis tiene una perspectiva muy bien formada sobre nuestra espiritualidad, pero es interesante notar que en varias conversaciones con miembros del movimiento, he notado que muchos se habían sorprendido al recibir el documento de los lineamientos. Pues percibieron un nuevo énfasis sobre el concepto del Reino que antes no había sido tan evidenciado. Sin embargo, todos comentaron que esta sorpresa inicial se había ido convirtiendo poco a poco en un aprecio creciente por la presencia de Cristo Rey en el centro de nuestro carisma. Como comentó un consagrado del Regnum Christi, “no es tanto que lo pusiéramos el nombre “Cristo Rey” [en nuestro trato personal con el Señor], pero en el fondo eso es lo que vivimos.” A pesar de una respuesta básicamente positiva a los lineamientos aprobados por el Cardenal de Paolis, varios han comentado que les pareció que faltaba un énfasis más profundo sobre la dimensión del Sagrado Corazón—para evidenciar que Cristo no es solo Rey para nosotros, sino también Amigo. En general había un acuerdo de que tenemos que tomar en serio la invitación del Cardenal de Paolis a profundizar en nuestra espiritualidad de la Señoría de Cristo: “Estoy convencido de que tenéis una espiritualidad, de que está elaborada de algún modo, pero os falta profundizarla. El misterio de Cristo Rey es un misterio grande, es el término de la historia. Tenemos que asimilar lo que significa que todo tiende a la plena realización del misterio de Cristo.”4 Ojala que estas páginas sean una contribución por pequeño que sea a este proceso de profundización. 1 Antologia de textos del Delegado Pontificio y sus consajeros para la Congregación de los Legionarios de Cristo y miembros del movimiento Regnum Christi, Card. V. DE PAOLIS Reflexion sobre el carisma del Regnum Christi, Roma, 21 de septiembre, 2012, 225-233 2 Antologia de textos… Card. V. DE PAOLIS, Carta de presentación de los Lineamientos del carisma del Movimiento Regnum Christi, 19 de octubre de 2012, 125-127. 3 Antologia de textos…, Encuentro con los directores territoriales, Roma, 17 de septiembre de 2012, 213. 4 Antologia de textos…, Encuentro con los directores territoriales, Roma, 17 de septiembre de 2012, 214. 1 II. SITUANDO EL CONCEPTO DEL REINO DENTRO DE LA ESPIRITUALIDAD DEL REGNUM CHRISTI. Durante el período desde abril 2012 hasta noviembre 2013, los Padres Patrick Langan y Owen Kearns visitaron la gran mayoría de los territorios donde está presente Regnum Christi, hablando con más de cien grupos en la búsqueda del ‘corazón de su carisma.’ Acabaron exponiendo tres elementos esenciales del “nucleo” del carisma del Regnum Christi y la Legión de Cristo, que son espiritualidad, comunidad y misión. La espiritualidad tiene que ver con mi relación con Cristo que me llama a ser miembro de este movimiento. La comunión tiene que ver con mi relación con los demás miembros de este movimiento. La misión trata de mi relación con las almas a los cuales soy enviado por Cristo. Aunque la espiritualidad del Reino se manifiesta en todas las tres áreas de la esfera arriba (de manera muy obvia en la de la misión), todo fluye de la relación con Cristo que los padres Kearns y Langan han querido expresar como encuentro con Cristo Señor de mi vida con correspondiente respuesta de entrega. Esta parte de mi experiencia con Cristo no puede ser separado del ‘valor correlativo’5 de mi relación con Cristo Amigo.6 Se podría decir que estos dos aspectos representen nuestra asimilación de la espiritualidad de Cristo Rey y del Sagrado Corazón. Un sacerdote legionario me dijo que viendo el diagrama arriba explicando nuestro carisma, él había entendido por primera vez la conexión entre la espiritualidad de Cristo Rey y el Sagrado Corazón. Esperando que ayude a otros a entender mejor también, he querido incluir este diagrama. Voy a seguir más de cerca la explicación de los Padres Owen y Patrick sobre los componentes de la espiritualidad, que se podría ver como el “corazón del corazón” del carisma. a. Intimidad (Sagrado corazón—Cristo como Amigo). Para los Padres Kearns y Langan, los “valores correlativos” son valores que si se tomasen solo independientemente, se prestarían a exageraciones y distorsiones. Cuando se tienen los dos, establecen un equilibrio dinámico. 6 C.f. O. KEARNS, P. LANGAN, Regnum Christi buscando el Corazon de su carisma, Amazon, Middletown, 2015, 156-163. 5 2 En el próximo capítulo voy a hablar sobre la encíclica del Papa Pío XI, en el cual se hace muy claro la conexión entre las devoción a Cristo Rey y la devoción al Sagrado Corazón de Jesús. No se entiende la espiritualidad de Cristo Rey sin la del Sagrado Corazón. Son complementarias. Esta primera dimensión de la intimidad corresponde a mi reacción al ver el corazón de Cristo traspasado por amor de mí. Se podría decir que este ‘derrame’ del corazón de Cristo comienza espiritualmente con sus palabras en la última cena. En nuestra espiritualidad las frases de estos capítulos de Juan han sido fuente de mucha inspiración. Cristo dice a los discípulos en la última cena, “permaneced en mí, y yo en vosotros.” (Juan 15:4). Este permanecer juntos como amigos es parte de la experiencia espiritual del Regnum Christi. El padre Owen comparte: “En la historia de mi llamado, ocurrió la experiencia de Cristo en el tabernáculo …revelándose como amigo.”7 Él nota: “Es típico de los miembros del Regnum Christi en Australia subrayar que es en el Movimiento donde descubrieron que Cristo es real. De ser una figura abstracta, lejana, desconectada, Jesucristo pasó a ser para ellos una persona real y viva.”8 b. Entrega. (Cristo como Rey) Pero si viéramos a Cristo puramente como un amigo cualquiera, como uno igual a mí, nos faltaría darle el respeto que merece como Dios y señor. Como Señor, siempre tenemos que obedecerle, algo que no podríamos decir siempre de nuestros otros amigos.9 Jesús dice a sus amigos, “si guardaréis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor, así como yo he guardado los mandamientos de mi padre y permanezco en su amor.” (Juan 15:10) El padre Owen comparte: “En la historia de mi llamado, después de la lucha larga, vino la decisión de ser sacerdote. Aún entonces, yo sabía que implicaba mucho más que visitar algún seminario. Significaba confiarle mi vida y mi futuro; en efecto, dar la vida por él. Cristo revelándose como el Señor de mi vida.”10 Jesús es un Amigo muy especial, que siendo Señor, puede exigir como ningún otro amigo se atrevería hacer. c. Un equilibrio dinámico. El aspecto de nuestra espiritualidad que percibe Cristo como un Amigo muy cercano y muy presente en mi vida es un “valor correlativo” que asegura que no se crea una distancia falsa por una imagen que se podría distorsionar hacia la de un rey mundano, que suele ser en otro nivel de sus sujetos, de acceso muy difícil. Si es un amigo muy especial, Cristo también es un Rey (el otro “valor correlativo”) muy especial, el Reino de quien no es como los reinos de este mundo, como él dice a Pilatos. Es un Rey muy cercano a sus sujetos, un Rey que los llama amigos y los sirve lavándoles los pies. Con este equilibrio entre intimidad y entrega, podemos ver una dimensión de intimidad más parecido a la de nuestro patrón San Juan, y otro de entrega que se parece más a la relación que tuvo San Pablo Apóstol entregado a Cristo. 7 8 9 Ibid., 158. Ibid., 160. Aquí creo que es importante enfatizar que no hay que crear separaciones y contraposiciones falsas. Intentamos distinguir dimensiones de la única persona de Jesús, pero al final es siempre él mismo. Siendo un Amigo que es Dios, le obedecemos también en cuanto Amigo, porque confiamos en él totalmente. Así, la obediencia y entrega total ya está implícita dentro del concepto de Cristo como Amigo divino en la espiritualidad del Sagrado Corazón, pero la espiritualidad de Cristo Rey lo puede subrayar y explicitar más. Igualmente, la espiritualidad del Sagrado Corazón podrá hacer ayudar a hacer más explicito aspectos de Jesús que ya están presentes en el Rey (pues es un Rey muy especial), pero no tan obvios. 10 O. KEARNS, P. LANGAN, Regnum Christi buscando…, 158. 3 III. QUAS PRIMAS Y LA ESPIRITUALIDAD DEL REINO. a. Historia de la fiesta litúrgica. Aunque no es algo nuevo hablar de Cristo como Rey, la solemnidad de Jesucristo, Rey del universo fue promulgada en tiempos recientes. El papa Pío XI, el día 11 de diciembre 1925, en ocasión de su encíclica Quas Primas, instituyó la fiesta en un año jubilar en el cual se conmemoraba 1600 años desde el primer concilio de Nicea. (Esta fecha tuvo una particular relevancia dado que este concilio promulgó el credo, incluyendo el concepto de Cristo Rey con las palabras “y su Reino no tendrá fin.”) El Papa Pío XI estableció para la fiesta el domingo anterior al día de todos los santos, queriendo así poner la solemnidad cerca al final del año litúrgico para mostrar la dignidad de Cristo Rey: cuando su Reino llega a la perfección, se cumple definitivamente el tiempo. Desde 1970 la solemnidad se celebra en el último domingo del año litúrgico, mostrando incluso mejor la soberanía de Cristo Rey. La fecundidad de esta espiritualidad de Cristo Rey se ve en el hecho de que haya inspirado la fundación de ocho familias religiosas dedicadas a él. El hecho de que todas menos una de estas comunidades se fundaron después de 1800 (y cuatro después de en 1925) muestra que la devoción a Cristo Rey se ha vuelto más fuerte en los últimos siglos. También es interesante notar que, a diferencia de muchas otras fiestas católicas, esta fiesta es un punto de unidad entre católicos y protestantes, pues las iglesias protestantes que usan el leccionario común revisado observan la fiesta de Cristo Rey como el último domingo del año litúrgico también. En la historia de la espiritualidad del Regnum Christi, las circunstancias históricas en el país de México donde se fundaron el movimiento y la congregación de los Legionarios de Cristo son muy importantes. En México hubo una revolución que terminó en 1917, con la nueva constitución en la cual los derechos de la iglesia vinieron negados. Como respuesta a esta situación injusta, entre 1926 y 1928, hubo una guerra en la cual murieron muchos soldados mártires. Los “Cristeros” tuvieron como lema “!Viva Cristo Rey!” Es claro que la lucha de los Cristeros tuvo un influjo muy grande sobre el fundador del Regnum Christi, quien había crecido en Michoacán, un estado donde la resistencia de los ‘Cristeros’ era muy fuerte. b. La Realeza de Cristo en Quas Primas. Dado que mucha de la espiritualidad de Cristo Rey que influía en nuestro fundador venía del influjo de la encíclica del Papa Pío XI proclamando la fiesta de Cristo Rey, vale la pena analizar algunas líneas fundamentales que emergen allí. El Papa escribe en tiempos turbulentos, y busca fomentar la paz a través de la adhesión a Cristo Rey, pues “no hay medio más eficaz para restablecer y vigorizar la paz que procurar la restauración del reinado de Jesucristo.”11 Respecto a la realeza de Cristo voy a plantear cuatro preguntas, intentando responder con lo que el Papa nos dice en la encíclica. También voy a usar otras fuentes y reflexiones personales para intentar aplicar las enseñanzas de esta encíclica a la situación del Regnum Christi y la Legión de Cristo. 1. ¿Por qué se instituyó esta fiesta? 11 4 PIO XI, Quas Primas, 11 de diciembre de 1925, N. 1. Es tradición instituir fiestas cuando hay necesidad de defenderse contra un ataque y crecer en una verdad de la fe. (Como se ve en las fiestas de Corpus Christi y el Sagrado Corazón). La fiesta de Cristo Rey es para combatir lo que el Papa llama ‘la peste de nuestros tiempos,’ el laicismo, con el cual “Se comenzó por negar el imperio de Cristo sobre todas las gentes.”12 Esta tendencia se veía llevada al extremo en los regímenes ateos y totalitaristas del siglo pasado. Es interesante notar que en su reflexión sobre el carisma de la Legión y el Regnum Christi, el Cardenal de Paolis usa los sinónimos ‘secularización’ y ‘descristianización’ para describir los problemas más fuertes contra los cuales tienen que luchar los miembros del Regnum Christi.13 Pio XI se lamenta de la “apatía y timidez de los buenos, que se abstienen de luchar o resisten débilmente; con lo cual es fuerza que los adversarios de la Iglesia cobren mayor temeridad y audacia.”14 Insiste en la necesidad de animarse a luchar: “Pero si los fieles todos comprenden que deben militar con infatigable esfuerzo bajo la bandera de Cristo Rey, entonces, inflamándose en el fuego del apostolado, se dedicarán a llevar a Dios de nuevo los rebeldes e ignorantes, y trabajarán animosos por mantener incólumes los derechos del Señor.”15 San Juan Pablo II habló del impulso luchador de misionero que anima al legionario a “adquirir esa solidez interior que desafía la lluvia, los ríos y los vientos, para construir el Reino de Dios en la sociedad actual…”16 En otra ocasión dijo: Habéis extendido vuestra labor a otros muchos países, siempre con el afán de hacer conocer y amar a Cristo, y de extender su Reino en el corazón de los hombres, vuestros hermanos y hermanas…Con la vitalidad y alegría que os caracterizan, tenéis la posibilidad de contribuir – a través también del Movimiento Regnum Christi, que difunde vuestra espiritualidad entre los laicos, jóvenes y adultos – a la renovación cristiana de la sociedad según las exigencias del Evangelio17. Aquí tenemos una confirmación de que la finalidad por la cual se instituyó la fiesta de Cristo Rey es la misma por la cual existe el movimiento Regnum Christi y la Legión de Cristo. 2. ¿Cuál es la conexión entre la devoción a Cristo Rey y la devoción del Sagrado Corazón? El Papa Pio XI hace muy explícito la estrecha conexión entre estas dos fiestas: “Asimismo ordenamos que en ese día [de la fiesta de Cristo Rey] se renueve todos los años la consagración de todo el género humano al Sacratísimo Corazón de Jesús.” 18 Quizás se podría especular que él percibe que es necesario tener presente el aspecto del Jesús humano y íntimo que nos ofrece la devoción al Sagrado Corazón, para complementar el aspecto de soberanía y poder y divinidad que evoca la imagen de Cristo como Rey. Así se evitaría un posible peligro de crear demasiada distancia entre nosotros y Jesús. Jesús es un Rey que reina con el amor, atrayendo nuestros corazones con él calor del suyo. Esta conexión entre las dos devociones se ve muy claramente en las constituciones de la Legión de Cristo: 12 PIO XI, Quas Primas…, N. 23. C.f. Antología de textos… Card. V. DE PAOLIS Reflexión sobre el carisma del Regnum Christi, Roma, 21 de septiembre, 2012, 226. 14 Ibid., N. 25. 15 Ibid.,N. 25. 16 Juan Pablo II, Misa en los jardines vaticanos, 28 de junio de 1979. 17 Juan Pablo II, Discurso al segundo capítulo ordinario, 18 de diciembre, 1992. 18 PIO XI, Quas Primas…, N. 30. 13 5 El legionario tiene en el culto al Sagrado Corazón un camino privilegiado para formar un corazón sacerdotal manso y humilde y propagar su Reino en el mundo (cf. Mt 11, 28-30). En el Corazón de Cristo encuentra el amor misericordioso de Dios que le lleva a abrazar la Cruz en la propia vida, reparar por los pecados y entregarse a los hombres.19 Es evidente también en los estatutos de las consagradas del Regnum Christi: La consagrada vive desde la experiencia del amor personal, real, apasionado y fiel de Cristo. Fija su mirada en el corazón de Cristo Rey que vino a este mundo a instaurar su Reino entre los hombres y en la sociedad, revelando el amor misericordioso de su corazón manifestado desde la Encarnación, hasta el momento culminante en la cruz y resurrección. Se deja penetrar por el amor de Cristo conformándose con sus sentimientos, asociándose así como madre espiritual en la obra de redención. 20 Sin una experiencia del amor de Cristo quien murió por mí, es muy difícil animarme a luchar para la extensión de su Reino. Si Cristo no reina en mí por amor, no puedo hacer que reine en los demás. Habiendo hecho la experiencia del amor de Dios por él en Jesús, el miembro del movimiento Regnum Christi “tiene un solo y único anhelo: que Jesucristo reine en el corazón de los hombres, en el seno de los hogares, en las esperanzas de las sociedades, en el alma de los pueblos.”21 3. ¿Extender el Reino quiere decir ir fuera o dentro de la Iglesia Católica? Instaurar el Reino implica las dos cosas, pues hay que luchar para “que todos cuantos se hallan fuera de su Reino deseen y reciban el suave yugo de Cristo” Pero también “que todos cuantos por su misericordia somos ya sus súbditos e hijos llevemos este yugo no de mala gana, sino con gusto, con amor y santidad, y que nuestra vida, conformada siempre a las leyes del Reino divino, sea rica en hermosos y abundantes frutos…”22 En el movimiento Regnum Christi el impulso a ir hacía los que todavía no están en el rebaño del buen pastor es muy visible en eventos como las misiones de Juventud y Familia Misionera que se tienen cada año en México y en muchos lugares del mundo, y donde miles de miembros del movimiento sale a las calles a evangelizar puerta a puerta, invitando a los que pertenecen a las sectas a acercarse a la fe Católica. Pero también se trata de un impulso para ayudar a los que ya son Católicos, incluidos los propios misioneros, a formarse para llegar a ser líderes apóstoles que pueden vivir su cristianismo con radicalidad, así atrayendo a muchas almas al Señor. 4. ¿El campo de la realeza de Cristo es en lo espiritual o lo temporal? Es en los dos campos: a) En lo espiritual: el Papa declara que el Reino de Cristo es interior sobre todo: “los textos que hemos citado de la Escritura demuestran evidentísimamente, y el mismo Jesucristo lo confirma con su modo de obrar, que este Reino es principalmente espiritual y se refiere a las cosas espirituales.” Por eso, el modo de entrar en ello es por la fe y el bautismo. El enemigo contra quien 19 Las constituciones de la Legión de Cristo, N. 9. Los estatutos de las Consagradas del Regnum Christi, N. 8. (Los miembros de la rama masculina tienen un número muy parecido, el número 10 de sus estatutos.) 21 Manual del Regnum Christi, N.36. 22 PIO XI, Quas Primas…, N. 35. 20 6 se lucha es espiritual: “Este Reino únicamente se opone al reino de Satanás y a la potestad de las tinieblas…”23 Como Reino espiritual, la realeza de Cristo consiste primariamente en que él reina en las inteligencias, voluntades y corazones: Esta potestad abraza a toda la naturaleza humana, claramente se ve que no hay en nosotros ninguna facultad que se sustraiga a tan alta soberanía. Es, pues, necesario que Cristo reine en la inteligencia del hombre, la cual, con perfecto acatamiento, ha de asentir firme y constantemente a las verdades reveladas y a la doctrina de Cristo; es necesario que reine en la voluntad, la cual ha de obedecer a las leyes y preceptos divinos; es necesario que reine en el corazón, el cual, posponiendo los efectos naturales, ha de amar a Dios sobre todas las cosas, y sólo a El estar unido; es necesario que reine en el cuerpo y en sus miembros, como instrumentos24. b) En lo temporal: La primacía del Reino espiritual no quiere decir que el Reino de Cristo sea algo puramente interior sin ninguna repercusión en la sociedad. Pues “su regia dignidad exige que la sociedad entera se ajuste a los mandamientos divinos y a los principios cristianos, ora al establecer las leyes, ora al administrar justicia, ora finalmente al formar las almas de los jóvenes en la sana doctrina y en la rectitud de costumbres.” 25 El Reino interior de Cristo en los suyos tiene que tener efectos externos: “Por otra parte, erraría gravemente el que negase a Cristo-Hombre el poder sobre todas las cosas humanas y temporales…mientras vivió sobre la tierra se abstuvo enteramente de ejercitar este poder…sin embargo, bajo la potestad de Jesús se halla todo el género humano.”26 La soberanía de Cristo en toda la sociedad y cultura es un Reino de derecho pero aún no de hecho. Esta es nuestra misión y tendrá los hermosos frutos de la armonía que trae un buen rey: “Y si el Reino de Cristo abrazase de hecho a todos los hombres, como los abraza de derecho, ¿por qué no habríamos de esperar aquella paz que el Rey pacífico trajo a la tierra?”27 El prefacio de la fiesta de Cristo Rey habla de lo que queremos obtener a través de la soberanía de Cristo: “Un Reino eterno y universal, Reino de verdad y de vida, Reino de santidad y de gracia, Reino de justicia, de amor y de paz.” IV. CONCLUSIÓN. El Reino hacía el cual invitamos a las personas (y a nosotros mismos) ya se comienza a vivir aquí en la tierra. Ya está presente a través de la Iglesia de Cristo, y su signo más evidente es la vivencia de la caridad, virtud reina de cada miembro del Regnum Christi que busca vivir como los primeros cristianos que eran “de un corazón y mente” (Hechos 4:32). Pero su perfección es en el cielo, para que “lleguemos a ser con Él participantes del Reino celestial, de su eterna felicidad y gloria.”28 En cuanto Dios, Cristo ya tuvo pleno derecho a ser soberano supremo. También en cuanto hombre, por su unión hipostática. Pero Él no estaba satisfecho con este derecho natural: “Cristo impera sobre nosotros, no sólo por derecho de naturaleza, sino también por derecho de conquista, adquirido a costa de la redención.”29 Jesús no escogió una victoria fácil y nuestra lucha para que 23 Ibid., N. 14. PIO XI, Quas Primas…,, N. 34. 25 Ibid., N. 33. 26 Ibid., N. 15. 27 Ibid., N. 19. 28 PIO XI, Quas Primas…, N. 35. 29 Ibid., N. 12. 24 7 Cristo reine en nosotros y en todos tampoco será fácil. Asegurar que la conquista de Cristo se extienda a cada rincón de mi corazón y a todo el mundo es la misión del miembro del Regnum Christi. El Reino de Cristo es un proyecto. Entenderlo mejor nos debe ayudar a animarnos a luchar mejor por ello. Con esto en mente, seria provechoso recordar brevemente lo que hemos visto en estas páginas para sacar algunas conclusiones. Comenzamos viendo que la dimensión espiritual de nuestro carisma se podría explicar como una relación con Jesús caracterizado por la intimidad y la entrega: Cristo como Amigo y como Rey. Esto implica que en el movimiento tendremos que buscar siempre este equilibrio entre respeto por la majestuosidad de Cristo (evidenciado en la reverencia de nuestra liturgia por ejemplo), y la cercanía, espontaneidad y naturalidad de trato que conviene tener con un amigo (que se evidencia por ejemplo en nuestra practica de hacer visitas espontaneas a la Eucaristía). Estas dimensiones de Cristo como Rey y Amigo fluyen de las devociones a Cristo Rey y al Sagrado Corazón. Quas Primas muestra claramente la conexión entre estas dos devociones, que han sido muy importantes en la historia del movimiento Regnum Christi. Luego vimos donde es el campo del ejercicio del Reinado de Cristo. Vimos que aunque él tiene derecho de reinar en lo temporal, su dominio es principalmente de ejercitarse en las inteligencias, voluntades y corazones. Él no tendría ningún interés en reinar si fuera sin nuestra libre adhesión a su voluntad en el amor. En el Regnum Christi, siempre hemos resaltado el dominio de Cristo como un dominio principalmente interior, pero sin negar que tiene que tener consecuencias externas. Se ve esta dinámica en el equilibrio que tenemos entre formación individual y apostolado. Nos llenamos del Reinado de Cristo para poder luego llevarlo a otros. Este apostolado externo para extender el Reino de Cristo es una parte importante de nuestro carisma, y toma la invitación del Papa Pio XI que escribió su encíclica para luchar contra tendencias secularizantes, que quisieran relegar la fe a la esfera puramente personal. Estas tendencias que son muy prevalentes en la sociedad son también presentes dentro de la Iglesia, por el cual nuestro campo de acción como miembros del Regnum Christi tiene que ser tanto dentro como fuera de Iglesia, para que finalmente, Cristo llegue al mayor número de personas. Este deseo para hacer reinar al Señor se exprime en el lema “Caritas Christi urget nos.” (2 Cor 5:14) V. BIBLIOGRAFÍA DE PAOLIS, Card. V., Carta de presentación de los Lineamientos del carisma del Movimiento Regnum Christi, 19 de octubre de 2012. PIO XI, Quas Primas, 11 de diciembre de 1925. KEARNS O., LANGAN P., Regnum Christi buscando el Corazon de su carisma, Amazon, Middletown, 2015. 8