rrer de 10s ailos y de las octavas reales, como el amigo de sus ene- ben con Garcia Hurtado de Mendoza, su jefe. Leal a Felipe I1 en cuya corte fuera educado, se embared en PanamB, de regreso a Espaiia. en una expedici6n fallida en contra del loco de Lope de Aguirre. Como toda vida pu las vidas, el generoso joven fue avaro en su vejez. “Con el tiempo