EL HOBBIT Esteban: “En un agujero en el suelo vivía un Hobbit” y dice Tolkien que esa frase le salió quién sabe de dónde, ni él sabe bien cómo, un buen día y a partir de allí, nació esto que luego se convirtió en una obra fundamental para la realización de posteriores escritos. Estamos hablando Ezequiel de “El Hobbit”. Ezequiel: Sí. Sabes Esteban que el término “Hobbit” es una derivación de un término anglosajón, Tolkien era filólogo, especialista en Anglosajón, e hizo una derivación de una palabra Anglosajona para derivar la palabra Hobbit, de modo que Hobbit significa “persona que vive en una cueva”. Tolkien creó una raza de seres fantásticos que son los Hobbits, están emparentados (como vimos en la tremenda trilogía del Señor De los Anillos) con los hombres. Son una especie de seres humanos pigmeos, o pequeños. Esteban: Pero de los cuales huyen, se esconden, se evaden, porque esos otros seres más grandes son un tanto amenazadores para el Hobbit. Ezequiel: Y porque ellos miden entre setenta centímetros y un metro de altitud, de modo que son muy pequeños, le dicen los medianos porque están en una altura intermedia, se caracterizan por tener los pies bastantes grandes y las plantas de los pies muy curtidas, por tanto no necesitan usar calzado, tienen pelo en el empeine del pie, y generalmente no tienen barba, en contradicción con los enanos bárbaros que transitan por la mitología anglosajona y circulan también por la obra de Tolkien. Esteban: Podemos decir entonces que es una especie original creada por Tolkien. Ezequiel: Sí, es una especie creada por él, mientras que el resto de las razas no, es decir Orcos existían antes, Delfos también, eran elementos clásicos de la mitología anglosajona, celtas y de la zona central y del norte de Europa. Esta raza fue inventada originalmente por él. Esteban: Inventó también, por ejemplo, un alfabeto, una forma de hablar, toda una manera de ver el mundo y la vida. Ezequiel: Tolkien estuvo obsesionado con su Tierra Media, en su búsqueda de darle consistencia incluso creó varios idiomas que se hablan dentro del universo de fantasía anclado claramente en la Edad Media que él va generando. Es una construcción única, la que él hace. Esteban: Ahora, el Hobbit tampoco es alguien marginal, escondido u oscuro, todo lo contrario, cuando uno pinta el Hobbit encuentra que es alguien que vive con gran comodidad como él dice. Ezequiel: Quisiera que algún día me inviten a tomar un té con los Hobbits porque me parecen seres maravillosos, muy amables, muy afectos a la comida, algo a lo cual también soy afecto, entonces me gustaría mucho ir en algún momento a comer con ellos. Esteban: Además son buenos anfitriones. Ezequiel: Sí, muy buenos, son seres absolutamente entrañables dentro de la trama que va produciendo Tolkien, que por momentos se pone oscuro con los seres humanos. A los últimos, Tolkien le tiene mucha menos compasión que por ejemplo a los Hobbits, porque a estos los concibe como unos seres cuasi primigenios, con una bondad natural, al contrario de los hombres que tienen que pelear contra sus pulsiones interiores, por eso elige a un Hobbit dentro del Señor de los Anillos, a Frodo, para que lleve el anillo, porque por esa pureza interior natural que tiene es menos factible que el anillo lo corrompa, por eso no lo puede llevar ninguno de los seres humanos que participan de la saga, porque ellos son fácilmente corruptibles, mientras que el Hobbit no se puede corromper, eso lo vamos viendo a lo largo de los libros y las películas, es más difícil, y el proceso es más lento, porque tienen una especie de “pureza y bondad primordial” que el ser humano no posee. Es un cachetazo para el ser humano de parte de Tolkien, porque en el Hobbit nos muestra lo que el ser humano debería ser, o como hubiera sido si el hombre continuara en el jardín del Edén, sería algo similar a esto, porque son seres de una bondad primigenia, viven en los huecos que se forman en la tierra y según las palabras del mismo autor, son muy confortables, no estamos hablando de cuevas incómodas y húmedas, sino casas muy confortables, excavadas dentro de colinas, generalmente se las representa con puertas redondas y muchísimo confort, porque los Hobbits son seres a los que les gusta eso. Esteban: También son seres con vidas bastantes tranquilas a los cuales no les gusta la aventura, sin embargo Tolkien pone a este Hobbit en medio de una aventura de las más removedoras. Ezequiel: No les gusta la aventura, son lo que nosotros catalogaríamos como burgueses, ellos están en su casa no les gusta salir, tal vez irán de vacaciones a la costa o a la playa, pero no les gusta complicarse la vida, están ahí, quieren sus seis comidas diarias, fumar sus pipas, son de las cosas que más les gusta según lo que dice el imaginario de Tolkien... de algún modo son seres absolutamente pacíficos y quieren que sus vidas transcurran en absoluta calma y tranquilidad. Son personas que quieren disfrutar de la vida sin sobresaltos. Esteban: A Bolsón le cambia la vida cuando aparece Gandalf en escena con una propuesta a la cual no tiene opción de rehusar, tiene inexorablemente que asumirla. Ezequiel: Exactamente. Hay dos historias que escribió Tolkien protagonizadas por Hobbits, la más conocida hasta hace unos años atrás, el Señor de los Anillos, protagonizada por Frodo Bolsón, portador del famoso anillo que da título al libro y a las películas y tiene que llevarlo hasta Mordor para hacerlo desaparecer. Pero anteriormente a esto, Tolkien había escrito una historia, muy famosa en este tiempo por el estreno reciente de la película dirigida por Peter Jackson, el director del Señor de los Anillos, que se llama: “El Hobbit, Historia de una vida y una vuelta”. Es un título sensacional, ahora vamos a explicar por qué. El Hobbit es la primera historia que escribe, está protagonizada por Bilbo Bolsón, el Tío de Frodo, hay una relación familiar, pero no son los mismos personajes los de una historia y otra. Comienza contando la historia del Hobbit que vive su vida de pequeño burgués, tranquilo, esa vida será modificada por la irrupción de Gandalf, el mago gris, famoso dentro del universo Tolkien, viene a buscarlo para decirle, que va a encabezar un periplo para buscar un tesoro que está custodiado por un dragón. En ese viaje lo acompañarán algunos enanos, una especie de Cofradía. Los enanos, (aclaro esto porque a veces no está bien comprendido el concepto), son una raza similar a los Hobbit, pero no es lo que llamamos personas con enanismo o una persona pequeña como lo decimos habitualmente, cuando dentro de la mitología anglosajona, celta y dentro de la mitología creada por Tolkien, partiendo de esto se habla de enanos, de seres míticos, es decir, una raza aparte, son seres absolutamente distintos, no son personas que sufren acondroplasia, sino que es una raza aparte, maravillosa. Es importante tenerlo en cuenta, porque no tiene nada que ver un concepto con otro y por lo tanto tampoco tendría que ser ofensivo para la gente pequeña el tema de estos enanos que aparecen en la obra de Tolkien, porque él lo que hace es crear un ejército maravilloso que tiene vida propia dentro de su obra. Esto lo explico, porque a veces hay confusión. Por otro lado dentro del universo de Tolkien, los Hobbits y los enanos son dos razas distintas, no es que un Hobbit es un enano afeitado, sino que es algo totalmente distinto. Los enanos dentro del universo de Tolkien están dedicados a la explotación minera, acostumbrados a excavar colinas, pero no como los Hobbits, sino excavaciones mucho mayores y además son una raza de guerreros mientras que los Hobbits son como decíamos, una raza absolutamente pacífica. PAUSA... Esteban: Estamos hablando de una de las obras de Tolkien, el Hobbits que tiene repercusión debido a producciones cinematográficas, pero esta es una obra de los años treinta, Ezequiel. Ezequiel: Sí, surge como un relato que Tolkien le hace a sus hijos, luego ese relato va creciendo en su imaginación, Tolkien tenía una imaginación muy fecunda, pero siempre la enfocó en esa Tierra Media, de hecho lo único que escribió está concerniente con eso. Tiene algunas novelas breves que se relacionan con otros universos fantásticos, pero digamos que el 95 por ciento de su obra está dirigida o vinculada con la Tierra Media. De modo que fue desarrollando esta historia que es el pilar para todo lo que creó posteriormente en relación con la Tierra Media en la cual se fue desarrollando el Señor de los Anillos. El Hobbits surgió de esa manera, se lo va contando a sus hijos, a ellos les iba gustando, lo convirtió en un libro, se publicó, tuvo un éxito relativo, pero lo suficientemente importante como para que su editor le pidiera que publicara otra obra con Hobbits y ahí empieza pensar en el Señor de los Anillos, que es una historia mucho más adulta, porque ya la pensó desde una visión mucho más amplia, los vínculos en esos casos son trazados de una forma mucho más madura y la historia es mucho más compleja en su historia narrativa. El Hobbit como dice el título es la historia de una vida y una vuelta. Este título es bien pensado, porque se descubrió que dentro de las historias míticas protagonizada por héroes hay una historia que siempre se repite, esto lo descubrió el mitólogo norteamericano Joseph Campbell, que estudió mitos protagonizados por héroes escritos por distintas culturas, descubrió que siempre hay un periplo que el héroe siempre repite, lo llamó “mono-mito”, es algo muy conocido dentro del mundo de la mitología, explicó ese sistema reiterativo y en muchos casos no tienen conexión entre sí, sin embargo todos respetan el mismo esquema, porque de algún modo es un esquema mental muy propio del ser humano que se convierte en historia y se ve repitiendo. Esa historia o periplo del héroe es lo que le va a pasar a Bilbo Bolsón en esta fábula. Joseph Campbell decía que el héroe sale de su universo conocido, es lo que le sucede a Bilbo Bolsón, que va a ser sacado por Gandalf de su hoyo súper confortable, es trasladado por lo que se denomina el llamado de la aventura, en este caso la imposición de Gandalf de que tiene que acompañar a los enanos. Es sacado e insertado en un universo no conocido, este universo, para Bilbo Bolsón es todo menos la comarca donde él vive. En las películas del Señor de los Anillos hay una escena incluida en el libro que es muy notable con respecto a eso, hay un momento en que los cuatro Hobbits protagonistas están caminando y uno de ellos dice si doy un paso más voy a estar más lejos de mi comarca, lo cual no estuve en toda mi vida, de alguna manera es entrar en terreno desconocido, el llamado de la aventura lleva al personaje a lo desconocido y allí el héroe debe intentar insertarse dentro de un universo nuevo, diferente, con reglas distintas a las cuales vivía hasta ese momento, de manera que Bilbo se encuentra con dos enanos, nunca antes había estado con dos enanos, se encuentra escalando montañas cosa que nunca había hecho, se pierde en un momento y ahí es donde se produce el famoso encuentro con Gollum, quien le da el anillo que luego va a trasladar a su sobrino en el Señor de los Anillos, encuentra el anillo, tiene que enfrentar al dragón, se convierte de algún modo en un aventurero, es decir, va cambiando, porque el hecho de insertarnos en un ambiente desconocido hace necesariamente que cambiemos, si pensamos todo esto tiene un correlato con la vida de las personas, todos en algún momento salimos del ambiente conocido de nuestras familias y nos insertamos en la escuela primaria, en la secundaria, en la universidad, en la vida siempre estamos intentando salir de espacios conocidos para meternos en los desconocidos, la historia de héroes en los mitos, intenta inspirarnos para que podamos conquistar esos espacios donde todavía nos sentimos como se dice habitualmente, como “sapos de otro pozo”, que no somos parte de ese lugar, una vez que el héroe conquista eso y Bilbo Bolsón lo logra, porque encuentra el gran tesoro que se esconde debajo del Dragón guardián, (dicho sea de paso, el dragón es otra gran figura de la mitología), una vez que se logra entender eso regresa, desde el comienzo sabemos que Bilbo va a volver, ese es el periplo del héroe, sale, va a lo desconocido y vuelve al ambiente conocido, para trasladar esa sabiduría a las personas que tiene cerca. Bilbo vuelve, pero lo hace cambiado, porque el viaje siempre nos cambia, nos hace personas distintas y vuelve con la añoranza o deseo de volver a salir, su esencia Hobbit, Burguesa como decíamos, desapareció. Se transformó en una persona diferente que va a añorar esos aires de aventura, esos territorios, va a soñar con la posibilidad de volver a enfrentar al dragón, de volver a vivir una gran hazaña. De modo que la historia es de cambios, en la cual el personaje empieza de un modo y termina de otro. Siento que esto del periplo del héroe que se representa tan bien en el Hobbit, a veces tenemos que salir a pelear, a enfrentarnos a situaciones y un mundo que no conocemos y muchas veces nos resulta adverso, es algo que todos hacemos, de algún modo las historias de los héroes que nos cuentan desde nuestra infancia nos ayudan también a darnos cuenta que podemos enfrentarnos a lo desconocido, podemos animarnos a salir de la comodidad. Uno de los grandes temas del Hobbit es la comodidad. Muchas veces estamos muy cómodos en los lugares donde estamos y creo que no hay peor enemigo para el crecimiento personal que la comodidad. Sentirnos cómodos hace que nos quedemos... ¿quién se quiere ir de donde está cómodo? Uno cuando se tira en un sillón, no se quiere mover para agarrar el control remoto, ni para leer un libro, ni para servirse un vaso de agua. Uno no quiere perder la comodidad que tiene. La historia del Hobbits es un alegato en contra de eso, no podemos vivir vidas cómodas, la plenitud está reñida con la comodidad, a veces necesitamos situaciones incómodas, porque la vida misma nos llevará a ello, a veces porque lo precisamos para crecer, saber salir de la burbuja de comodidad que vamos generando. Vivimos para intentar tener “agujeros Hobbits”, cómodos, confortables, con todo lo necesario y no nos damos cuenta que lo verdaderamente importante está más allá. Esteban: El crecimiento incluso está más allá. Ezequiel: Claro, porque nadie crece por ejemplo, comprando un auto. Hay personas que dicen: “crecí mucho, me compre un auto” “arreglé mi casa” y uno piensa y se da cuenta que eso no es crecer. Espiritualmente nos pasa lo mismo, a veces estamos dentro de nuestras iglesias, mirando solamente todo lo que aprendemos o lo que sabemos, haciendo las mejores oraciones, escuchando las mejores predicaciones y no nos damos cuenta que el gran campo de trabajo está ahí afuera, tenemos que saber romper con la comodidad que nos vamos poniendo, debemos mirar para otro lado. Tenemos que empezar a todo eso que sabemos y aprendemos y esas oraciones maravillosas que podemos hacer, debemos comenzar a aplicarlas para ayudar al otro. Esteban: Es que cuando Tolkien escribió este libro, lo hizo pensando en sus propios niños, para mostrarles el proceso de maduración por el cual iban a pasar en sus propias vidas. Ezequiel: Seguro, es un proceso de maduración por el cual todos necesitamos pasar. Dios es un experto en ponernos en situaciones incómodas, si leemos la Biblia, a los grandes hombres de Dios y voy a poner un solo ejemplo, clarísimo, Dios los puso en situaciones incómodas. Job estuvo en una situación incomodísima, no lo puso Dios directamente, pero fue permitido por Él, en realidad esas situaciones “incómodas” son permitidas para que crezcamos. Dios no recurre al asistencialismo, tan nombrado en nuestra América Latina, Él sabe que necesitamos hacer el esfuerzo y siempre intentará sacar lo mejor de nosotros y si para ello, tiene que sacudirnos, lo hará. Debemos entender y aprender, que cada sacudida que tenemos en la vida es un desafío a crecer, para romper esa burbuja de comodidad y arrojarnos de lleno a las manos de Dios y decirle, confío en lo que puedes hacer por mí. Confío en tu poder, lo único que necesito para tener poder en mi vida es tomarme de tu mano, salir de la burbuja de nuestra propia vida y a veces nos metemos en las burbujas de nuestras propias Iglesias, entender que el lugar de lucha es incómodo, si no, nunca encontraremos la victoria, Dios quiere que la alcancemos, para ello, tenemos que pasar necesariamente por el lugar de la incomodidad, dejar lo que creemos seguro, es lo que los cristianos llamamos “salto de fe”, consiste ponernos en el lugar incómodo, para intentar llegar a un estadio superior en nuestra vida espiritual, le propongo a nuestros oyentes que se animen a dar el salto de fe, a ponerse en el lugar incómodo, pues la única forma de crecer, es asumir esos lugares de lucha para poder avanzar de la mano de Dios, entender que Él está cuando estamos cómodos, pero brilla (como dice Pablo) en medio de las dificultades y la incomodidad.