1 de julio de 1915 1 de julio de 1974 2 de julio de 1877 2 de julio de 1929 2 de julio de 1961 2 de julio de 1971 4 de julio de 1776 4 de julio de 1884 5 de julio de 1950 6 de julio de 1845 6 de julio de 1907 8 de julio de 1893 8 de julio de 1908 8 de julio de 1960 9 de julio de 1951 10 de julio de 1902 10 de julio de 1929 11 de julio 14 de julio de 1789 15 de julio de 1867 16 de julio de 1908 17 de julio de 1928 18 de julio de 1872 20 de julio de 1923 20 de julio de 1910 20 de julio de 1937 21 de julio de 1969 22 de julio de 1968 23 de julio de 1859 25 de julio de 1863 26 de julio de 1929 26 de julio de 1968 27 de julio de 1814 27 de julio de 1976 28 de julio de 1750 29 de julio de 1890 30 de julio de 1811 30 de julio de 1968 EFEMÉRIDES El licenciado José Natividad Macías asume la rectoría de la Universidad Nacional de México Se institucionaliza el Día Nacional del Ingeniero Natalicio del escritor alemán Herman Hesse Natalicio del escritor mexicano Emanuel Carballo Muerte del novelista estadunidense Ernest Hemingway Muerte del cantante estadunidense Jim Morrison Independencia de los Estados Unidos de América Francia regala a Estados Unidos la Estatua de la Libertad El rector Luis Garrido coloca la primera piedra para la construcción de Ciudad Universitaria Natalicio de la cantante mexicana Ángela Peralta Natalicio de la pintora mexicana Magdalena Carmen Frida Kahlo y Calderón Natalicio de Carmen Mondragón (NAHUI OLIN) Muerte del compositor español Jaime Nunó Se creó la Filmoteca de la UNAM Se crea la Escuela Nacional de Ciencias Políticas y Sociales Natalicio del poeta cubano Nicolás Guillén Se concede la Autonomía a la Universidad Nacional de México Día Mundial de la Población Inicia la Revolución Francesa Entrada triunfal de Benito Juárez a la Ciudad de México Se funda la Sociedad de alumnos de la Escuela Nacional de Ingeniería Asesinato del expresidente mexicano Álvaro Obregón Muerte del expresidente mexicano Benito Juárez García Asesinato del revolucionario mexicano Francisco Villa Se modifica el Plan de Estudios de la Escuela Nacional de Ingeniería Muerte del físico italiano Guglielmo Marconi Neil Armstrong es el primer ser humano que pisa la superficie lunar La policía disolvió un enfrentamiento entre estudiantes de la preparatoria Issac Ochotorena y de la Vocacional 2 del IPN Promulgan las Leyes de Reforma Muerte del insurgente mexicano Juan José Martínez, “El Pípila” Publica el Diario Oficial la Ley Orgánica de la Universidad Nacional Autónoma de México Inicio del movimiento estudiantil mexicano Muerte del insurgente mexicano Hermenegildo Galeana Por acuerdo del Consejo Universitario, el Instituto de Ingeniería pasa a ser oficialmente dependencia universitaria con carácter de Instituto Muerte del músico alemán Johann Sebastian Bach Muerte del pintor holandés Vicent Van Gogh Muerte del insurgente mexicano Miguel Hidalgo y Costilla Asalto militar a la Preparatoria número 1 de la UNAM Sugerencias y aportaciones en la: División de Ciencias Sociales y Humanidades. Lic. José René Gómez Rodríguez. E-mail: gomezro@servidor.unam.mx Tels. 56220857 y 56161397 2 Viene Pág. 10 rechaza a la sociedad para acabar llevando una existencia de vagabundo. Durante la Primera Guerra Mundial, Hesse, que era pacifista, se trasladó a Montagnola, Suiza; se hizo ciudadano suizo en 1923. La desesperanza y la desilusión que le produjeron la guerra y una serie de tragedias domésticas, y sus intentos por encontrar soluciones, se convirtieron en el asunto de su posterior obra novelística. Sus escritos se fueron enfocando hacia la búsqueda espiritual de nuevos objetivos y valores que sustituyeran a los tradicionales, que ya no eran válidos. Demian (1919), por ejemplo, estaba fuertemente influenciada por la obra del psiquiatra suizo Carl Jung, al que Hesse descubrió en el curso de su propio (breve) psicoanálisis. El tratamiento que el libro da a la dualidad simbólica entre Demian, el personaje de sueño, y su homólogo en la vida real, Sinclair, despertó un enorme interés entre los intelectuales europeos coetáneos (fue el primer libro de Hesse traducido al español, y lo hizo Luis López Ballesteros en 1930). Las novelas de Hesse desde entonces se fueron haciendo cada vez más simbólicas y acercándose más al psicoanálisis. Por ejemplo, Viaje al Este (1932) examina en términos junguianos las cualidades míticas de la experiencia humana. Siddharta (1922), por otra parte, refleja el interés de Hesse por el misticismo oriental —el resultado de un viaje a la India—; es una lírica novela corta de la relación entre un padre y un hijo, basada en la vida del joven Buda. El lobo estepario (1927) es quizás la novela más innovadora de Hesse. La doble naturaleza del artistahéroe —humana y licantrópica— le lleva a un laberinto de experiencias llenas de pesadillas; así, la obra simboliza la escisión entre la individualidad rebelde y las convenciones burguesas, al igual que su obra posterior Narciso y Goldmundo (1930). La última novela de Hesse, El juego de abalorios (1943), situada en un futuro utópico, es de hecho una resolución de las inquietudes del autor. También en 1952 se han publicado varios volúmenes de su poesía nostálgica y lúgubre. Hesse, que ganó el Premio Nobel de Literatura en 1946, murió el 9 de agosto de 1962, en Suiza. El lobo estepario (fragmento) “El que haya querido los otros días, los malos, los de los ataques de gota o los del maligno dolor de cabeza clavado detrás de los globos de los ojos, y convirtiendo, por arte del diablo, toda actividad de la vista y del oído de una satisfacción en un tormento, o aquellos días de la agonía del espíritu, aquellos días terribles del vacío interior y de la desesperanza, en los cuales, en medio de la tierra destruida y esquilmada por las sociedades anónimas, nos salen al paso, con sus muecas como un vomitivo, la humanidad y la llamada cultura con su fementido brillo de feria, ordinario y de hojalata, concentrado todo y llevado al colmo de lo insoportable dentro del propio yo enfermo; el que haya querido aquellos días infernales, ése ha de estar muy contento con estos días normales y mediocres como el de hoy; lleno de agradecimiento se sentará junto a la amable chimenea y con agradecimiento comprobará, al leer el periódico de la mañana, que no se ha declarado ninguna nueva guerra ni se ha erigido en ninguna parte ninguna nueva dictadura, ni se ha descubierto en política ni en el mundo de los negocios ningún chanchullo de importancia especial; con agradecimiento habrá de templar las cuerdas de su lira enmohecida para entonar un salmo de gratitud mesurado, regularmente alegre y casi placentero, con el que aburrir a su callado y tranquilo dios contentadizo y mediocre, como anestesiado con un poco de bromuro; y en el ambiente de tibia pesadez de este aburrimiento medio satisfecho, de esta carencia de dolor tan de agradecer, se parecen los dos como hermanos gemelos, el monótono y adormilado dios de la mediocridad y el hombre mediocre algo encanecido que entona el salmo amortiguado”.♦ Colaboración del Lic. José René Gómez Rodríguez 11 NAHUI OLIN. LA MUJER DEL SOL Viene Pág. 6 N ahui es la antítesis, la antiheroína. Ella se expresa a través de su cuerpo, creyó en él hasta el fin, aún mayor se siguió viendo bella, se compraba tres vestidos iguales de distintas tallas "para cuando adelgazara". Carmen Mondragón, nace el 8 de julio de 1893, en la Ciudad de México. Su madre se llamaba Mercedes Valseca, de la cual se conoce poco. Su padre era un militar, llamado Manuel Mondragón, el cual se dedicaba al diseño de artillería, y fungió como Secretario de Guerra y Marina, bajo el gobierno de Victoriano Huerta. De muy pequeña viaja a Francia donde recibe la típica educación de artes y cultura común en las familias acomodadas durante el porfiriato. Desde su infancia comienza a mostrar una personalidad sumamente creativa, la cual se refleja en sus primeros escritos y pintura, con un carácter fuerte e impulsivo, hacia la búsqueda de nuevas experiencias. A los 19 años anuncia a su padre que le gusta un cadete, Manuel Rodríguez Lozano y se casa con él, el 6 de agosto de 1913, en plena Revolución Mexicana. La pareja viaja a Europa, debido a que el General Manuel Mondragón, participa en la Decena Trágica, por lo cual es desterrado del país. Durante los siguientes años (1913-1921) se conoce poco sobre la vida de la pareja, se dice que en esos años conocen a Picasso y Diego Rivera, entre otros personajes. Cuando estalla la Primera Guerra Mundial, viaja a España donde se instalan, hasta su regreso a México. En esta época Manuel Rodríguez Lozano ya había abandonado su carrera de militar, dedicándose a la pintura. Se dice que Carmen resulta embarazada, pero el niño muere a los pocos días. Respecto a esto surgen una serie de controversias, en los cuales Manuel Rodríguez, asegura que Carmen asfixia al niño en un momento de locura. Lo cual resulta incomprobable, también se dice que ella perseguía a Manuel, solo para calmar sus impulsos sexuales y que él no le correspondía, incluso que era homosexual. Todo este conflicto provoca que Carmen al regresar a México en 1921 decida divorciarse, pero sus padres lo impiden. Una vez en México, Manuel Rodríguez Lozano conoce a Abraham Ángel, éste era aprendiz de pintor con solo 17 años. De esta relación se dice, por las cartas escritas de Lozano a Antonieta Rivas Mercado, que Abraham se enamora de Lozano y que el sentimiento es mutuo, y al final Abraham Ángel se suicida, supuestamente por despecho, con una sobredosis de heroína. Carmen Mondragón conoce al Dr. Atl, Gerardo Murillo. A partir de este momento surge una historia de pasión escrita, que dura más de doscientas cartas. Carmen en esta época desafía toda la "moral" y "buenas costumbres" de aquel tiempo, que disfraza la libertad sexual de las mujeres. Rompe con esos esquemas creando escándalo, controversia y rechazo por parte de familiares y amigos. Pronto inician una intensa relación amorosa. Gerardo Murillo tenía tiempo de haberse cambiado el nombre a Dr. Atl (doctor agua), debido a una experiencia sufrida abordo de un barco. Siguiendo con su costumbre le cambia el nombre a Carmen, llamándola Nahui Olin (fecha calendárica mexica, que se refiere al movimiento renovador de los ciclos del cosmos). Entre todos sus momentos de pasión comparten actividades como pintar, escribir y hacer el amor, llevándolos a vivir intensos años de trabajo creativo. Ella se caracteriza por pintar en el estilo naïf imágenes típicas de la sociedad y la cultura mexicana, tales como pulquerías, portales, festejos, etc. Durante estos años, Nahui se mezcla con personalidades como Tina Modotti, Antonieta Rivas Mercado, Frida Kahlo, David Alfaro Siqueiros, Diego Rivera y José Clemente Orozco, entre otros. José Vasconcelos, entonces secretario de educación, fomenta en gran escala el muralismo en México, el cual con sus grandes exponentes, realizan trabajos de gran calidad, entre los cuales figuran como modelos, Nahui Olin, Tina Modotti y Lupe Marín entre otras. En 1923 Nahui conoce a los fotógrafos Tina Modotti y Edward Weston, los cuales viven una relación amorosa. Weston realiza un gran trabajo utilizando como modelo a Carmen. Para finales de 1927, gran parte de México se encuentra en medio de una balacera popular debido a la “Guerra de los Cristeros”. Probablemente este momento de crisis política y social, repercute en la cultura generando un gran número de artistas dentro de los que figuran Salvador Novo, Jaime Torres Bodet, Carlos Chávez, Rufino Tamayo y Manuel Rodríguez Lozano. Y Nahui inicia una relación amorosa con el pintor y caricaturista Carlos Santoyo. Viajan a Hollywood, donde Rex Ingram, director de Greta Garbo, queda deslumbrado de su belleza, y la invita a participar en una película. Sin embrago nunca la filma, decidiendo mejor realizar desnudos como una forma de expresión, posando para Weston y el fotógrafo Antonio Garduño. La década de los treintas cae junto a Julio Antonio Mella compañero de Tina Modotti, el cual es asesinado. Mientras Nahui se enamora de Eugenio Agacino, que es capitán de un barco de la Compañía Trasatlántica Española, por lo cual se traslada frecuentemente al Puerto de Veracruz, hace múltiples pinturas de ambos, en lugares como Manhatan, Cuba, etc. Viaja a España y Francia, donde monta un exposición y ofrece un concierto de piano. Eugenio sufre una intoxicación y muere en 1934. Nahui va quedándose sola. Nahui comienza a dedicarse más a la escritura, pública Energía Cósmica, asume una faceta de compositora detrás de su piano, y adopta actividades esotéricas realizadas sobre la base de la energía y cosas así. En 1945, expone cuatro pinturas en una exposición colectiva en Bellas Artes, entre otros pintores destacan José Clemente Orozco y Pablo O´Higgins. Después de esta exposición Nahui emprende su camino hacia el silencio. En los últimos años, Nahui vive en el centro de la Ciudad de México, rodeada de gatos y apedreada por los niños. Trabajaba de maestra de pintura de una escuela primaria nocturna. Pase Pág. 7 6 Pase Pág. 8 7 Universidad Nacional Autónoma de México Facultad de Ingeniería División de Ciencias Sociales y Humanidades Viene Pág. 1 contextos sagrados, es decir, asociadas a pequeños altares, como en el caso de Tula y Chichén Itzá, a juegos de pelota, o directamente relacionadas con el dios de la lluvia, como lo vemos en el Templo Mayor de los aztecas. Se le han atribuido dos funciones diferentes: como altar en el que se colocaba la ofrenda dedicada al dios, ya fueran alimentos, corazones u otros dones y como piedra de sacrificios. EL NIGROMANTE Boletín Cultural Otro aspecto interesante es que este tipo de escultura corresponde en su mayoría al Posclásico, es decir, a los años 900-1521 de nuestra era. Entre las interpretaciones que se han dado acerca de este personaje están aquellas que lo identifican con un dios específico, como un intermediario entre los ofrendantes y los dioses, o como un guerrero. Quizá no siempre tuvo el mismo significado, pues bien sabemos que una determinada representación puede cambiar con el paso del tiempo. Por ejemplo, entre los belicosos toltecas hubiera podido representar a un guerrero, pues posee atributos muy similares a los de los atlantes: está armado, luce el pectoral de mariposa y lleva un navajón atado en el brazo. En el caso de los Chac Mool encontrados en Tenochtitlán, que tratan de imitar a los toltecas, vemos que guardan estrecha relación con el dios de la lluvia, Tláloc. Un reciente estudio (Alfredo López Austin y Leonardo López Luján, “Los mexicanos y el Chac Mool”, en la revista Arqueología mexicana, México, 2001, pp. 68-73) hace ver que en el caso de estos últimos, que hasta el momento suman una docena, tanto los más tempranos como los de la época imperial están asociados a este dios. El caso más claro es el Chac Mool localizado en su sitio original, frente al adoratorio de Tláloc en el Templo Mayor de Tenochtitlán. A éste hay que sumar la cabeza hallada en el núcleo de la misma etapa constructiva, y cuyo rostro muestra una posible parálisis facial, enfermedad relacionada con Tláloc. Como puede verse, esta figura, por sus peculiares características, siempre ha despertado el interés de los estudiosos. Presente en muchas partes de Mesoamérica, pero sobre todo en Tula y Chichén Itzá, además de la capital azteca, se ha tratado de establecer su función y a quién está dedicado. Nuevos hallazgos habrán de ayudar en la interpretación de este enigmático personaje que, incluso, por su posición inverosímil, llegó a influir en la creatividad de modernos escultores, como el caso de Henry Moore, en figuras recostadas de gran fuerza y dinamismo, tal como sus antecesoras creadas por anónimos escultores mesoamericanos...♦ Fuente: Pasajes de la Historia No. 6 Quetzalcóatl y su época / noviembre 2002 Colaboración del pasante de ingeniería Roberto Carlos Medrano Godínez Actividades Artístico-Culturales en la Facultad de Ingeniería y en la UNAM * Música: “Orquesta Sinfónica de Minería”. XXVI TEMPORADA. Jorge Velasco, director artístico. Sábados 200:00 y domingos 12:00 horas. Sala Nezahualcóyotl. Hasta el 24 de agosto. * Danza: “Ballet VINI-CUBI”. XXX ANIVERSARIO. 30 de agosto a las 12:00 h. 6 y 11 de septiembre a las 12:00 y 18:00 horas respectivamente. Teatro “Carlos Lazo”, de la Facultad de Arquitectura. 12 Año IV, Número 38, julio de 2003 EL ENIGMA DE LOS CHAC MOOL U na de las esculturas más peculiares de la arqueología mexicana es sin duda la que conocemos con el nombre de Chac Mool. Se trata, en la mayoría de los casos, de una figura humana reclinada hacia atrás, con las piernas encogidas y la cabeza girada, en cuyo vientre descansa un recipiente circular o cuadrado. El nombre maya con el cual se le conoce fue asignado por el viajero Auguste Le Plongeon, quien en sus excavaciones en Chichén Itzá encontró una de estas esculturas y la trasladó a Mérida a finales de 1874. Tres años después la figura se envió a la ciudad de México, lo que provocó una fuerte protesta por parte de su descubridor. Posteriormente se han encontrado otras esculturas de este tipo en diferentes lugares de Mesoamérica, si bien son más abundantes en Tula, Hidalgo, y en Chichén Itzá, Yucatán, sin olvidar que en la Ciudad de México se han hallado varias, como la que se recuperó en 1943 en la calle de Venustiano Carranza, que está labrada en el típico estilo azteca, o la excavada frente al adoratorio de Tláloc en la etapa II (1390 d.C.) del Templo Mayor de Tenochtitlán, la cual aún conserva sus colores originales. Como ejemplo de un Chac Mool tolteca traído de Tula a Tenochtitlán está el que encontramos entre los cimientos de la Casa de los Marqueses del Apartado, en la calle de Argentina, frontera al Templo Mayor. Guarda la posición ya conocida y sobre el vientre presenta un recipiente rectangular, pero además lleva amarrado un navajón en el brazo, tal como lo vemos en los Chac Mool de factura tolteca. Posiblemente fue decapitado, pues la cabeza no se encontró en las labores de rescate. Ahora bien, ¿qué representan estas enigmáticas figuras? Hay diversas interpretaciones acerca de su función. Por un lado, cabe aclarar que siempre han sido encontradas en Pase Pág. 12 Viene Pág. 7 Viene Pág. 4 Nahui se consume y aísla cada vez más en su mundo cósmico, sus gatos, escritos y su Alameda Central. Asume su vejez. Cae y se rompe la clavícula, sufre una úlcera y una operación. Pide a sus sobrinas que la trasladen a la recámara donde nació y el 23 de enero de 1978, Carmen Mondragón, Nahui Olin, cierra por siempre sus bellos y enormes ojos verdes. Como no pueden otra cosa y se pasan la vida escuchando lo que ocurre en el mundo exterior, los escorpiones se dan entre sí los más diversos nombres: amor mío, maldito seas, te quiero con toda el alma, por qué llegaste tan tarde, estoy muy sola, cuándo terminará esta vida, déjame, no sabría decirte si te quiero. Palabras que oyen desde el fondo de los ladrillos, desde la podredumbre seca y violenta, entre las vigas de algún hotelucho, o desde los fríos tubos de hierro de un excusado oloroso a creolina. Porque ellos, repetimos, no saben que se llaman escorpiones o alacranes. No lo saben. Y así, sin saberlo, luego se sienten requeridos por alguien en las tinieblas, entre besos húmedos o pobres centavos que suenan sobre una mesa desnuda, y salen entonces para ser muertos y para que se hable de ellos en los lavaderos donde las mujeres reprenden a los niños, y los niños de pecho devoran a sus madres apenas sin sentirlo. Aquello resulta un espantoso fraude –piensan los escorpiones-. ¿Para qué nos dijeron aquellas palabras que nosotros creíamos nuestro nombre? ¿Para qué llamarnos malditos, ni eso de ya no trajiste el gasto otra vez, ni aquello de andas con otro, ni lo absurdamente final de te quiero como a nadie en el mundo, si todo era para matarnos, si todo era para no dejarnos ser testigos de lo que amamos con toda el alma y que a lo mejor es el hombre?♦ Independiente fui, para no permitir pudrirme sin renovarme; hoy, independiente, pudriéndome me renuevo para vivir. Los gusanos no me darán fin -son los grotescos destructivos de materias sin savia, y vida dan, con devorar lo ya podrido del último despojo de mi renovaciónY la madre tierra me parirá y naceré de nuevo, de nuevo ya para no morir.... Para Tomás Zurian: “Mas que corrupción sexual, yo veo en ella una necesidad erótica de afirmar su existencia. Ella bebía vida del erotismo en la proporción en que mucha gente bebe vino”. Es que vivió siempre, hasta el día en que murió, de acuerdo con sus ideas. Los gusanos no me darán fin -son los grotescos destructores de materias sin savia, y vida dan, con devorar lo ya podrido de/ último despojo de mi renovación- Y la madre tierra me parirá y naceré de nuevo, de nuevo ya para no morir... "La niña que corrió desnuda por el mundo”.♦ Colaboración del alumno de ingeniería Fernando Mejía Torres MIEDO Los recuerdos han formado el mito y yo espero en un salón vacío el momento de tu regreso, como náufrago me aferro a tu fotografía y como poeta me voy perdiendo en tu mirada, estoy del otro lado del mar extrañándote, vuelvo a contar aquella vieja historia de cuando el destino me pagó todo sufrimiento en una sonrisa, la tuya. Abro el baúl de mis temores encontrando todavía el de perderte, la música llena de nostalgia se acumula en mi habitación con las paredes tapizadas de tu piel, es mejor no aspirar el ensueño provocado en cada arranque de pasión, es verdad que me encuentro solo, más aun me amarro a la soledad en un pedazo de papel, quisiera encontrar esperanza y libertad, gritar al viento bailando con las alas de mercurio, en esta quietud no alcanzo a oír tu voz, fuimos un gran amor y necesito volver a embriagarme en unos brazos de mujer, que me den consuelo, que me den refugio, pasearme desnudo a tu lado aceptando lo que soy, esta ciudad me sofoca y no tengo tu aliento acompañándome en esta oscuridad, tengo miedo.♦ Colaboración del pasante de ingeniería Roberto Carlos Medrano Godínez 8 José Revueltas. Tomado de cuentos mexicanos inolvidables. Selección y notas Edmundo Valadez Colaboración del Lic. Enrique Fabián Cervantes MISIÓN A TITÁN En el 2005, 350 años después del descubrimiento de Titán, el mayor satélite de Saturno, una misión espacial coordinada por la NASA y la ESA aterrizará en su desconocida superficie. Su densa atmósfera, similar a la que tenía la Tierra en sus tiempos primigenios, oculta los misterios de uno de los cuerpos más interesantes del Sistema Solar. La Cassini-Huygens navega ahora por el espacio rumbo a Saturno y Titán tras haber sobrepasado Júpiter. Si tiene éxito, se convertirá en la misión interplanetaria más ambiciosa jamás realizada. A principios del siglo XVII, en 1610, Galileo Galilei enfocaba su rudimentario telescopio hacia Saturno y descubrió, basándose en sus observaciones, que se trataba de un objeto tricorporeo. “Trátese de que la estrella Saturno no es una sola, sino un agregado de tres que casi se tocan y que nunca se mueven o mudan entre sí”, escribía el sabio italiano, confundiendo los anillos del planeta con dos astros. En 1655 Christiaan Huygens, con un telescopio más desarrollado, descubrió Titán, su mayor satélite, y en 1659 apuntó que en realidad Saturno estaba rodeado de un gran anillo de rocas y polvo. Pocos años después, Giovanni Domenico Cassini halló una división en el centro de los anillos (vista como espacio negro), que hoy lleva su nombre, además de cuatro nuevos satélites (Rhea, Tetis, Dione y Japeto). Ahora se acerca el momento en el que la misión Cassini-Huygens explorará Saturno y sus lunas para aterrizar en Titán, uno de los cuerpos más interesantes del Sistema Solar por sus similitudes con la Tierra primigenia, según los astro biólogos. Será en el 2005, 350 años después de su descubrimiento. Colaboración de la Ing. Carolina Garrido Morelos 5 Viene Pág. 9 LA ESTATUA DE LA LIBERTAD empresario Biacchi se había negado a representar, y que animó a los artistas mexicanos a formar la Sociedad Filarmónica que dio nacimiento al Conservatorio Nacional de Música. El emperador Maximiliano la distinguió, el 30 de enero de ese mismo año, con el nombramiento de “Cantarina de Cámara”. Después hizo una gira por el interior de la República y se casó, el 26 de abril, con su primo Eugenio Castera. El 6 de enero de 1867 salió nuevamente del país: en su recorrido actuó en La Habana, Nueva York, España e Italia. Pero por enfermedad de su esposo regresó a México en 1871; prosiguiendo su labor nacionalista llevó a escena la ópera “Guatimotzin” de Aniceto Ortega, que fue representada el 13 de septiembre de ese año. En 1872 formó su propia compañía de Opera, que debutó el 28 de julio: aparte de las óperas italianas antes citadas, incluyó “La Traviata” y “La forza del destino” de Verdi, “La condesa de Amalfi”, “Ruy Blas” y “La estrella del Norte”. Como en ocasión anterior, realizó una gira por algunas ciudades del interior de la República. Entre las obras que estrenó, en 1883, se cuentan: “Gino Corsi” de Melesio Morales, que fue recibida fríamente por el público, (14 de julio), y “Aída” de Verdi (19 de septiembre), que gustó en forma extraordinaria y le valió un homenaje de los poetas mexicanos que en esa época honraban las letras nacionales: Manuel Ma. Flores, Ignacio Altamirano, Manuel Acuña y Juan de Dios Peza. El 12 de octubre cantó el “Requiem” de Verdi. Actuó posteriormente en diversas partes. Cuando realizaba una gira por las ciudades de la República, fue atacada en Mazatlán, por la fiebre amarilla: allí murió el 30 de agosto de 1883. En Ángela Peralta se confirmó una vez más el triunfo del talento sobre la belleza física, pues carecía de ésta. “Era decía Don Artemio del Valle Arizpe, achaparrada, gorda, de un moreno indígena, con ojos saltones de mirar estrábico”. Escribió algunas piezas de salón que hizo reunir en una colección que llamó “Álbum musical de Ángela Peralta”, que fue publicado en 1875. Sus restos descansan en la Rotonda de los Hombres Ilustres de México.♦ Colaboración del lic. José René Gómez Rodríguez HERMAN HESSE N ovelista y poeta alemán, nacionalizado suizo. A su muerte, se convirtió en una figura de culto en el mundo occidental, en general, por su celebración del misticismo oriental y la búsqueda del propio yo. Hesse nació el 2 de julio de 1877 en Calw, Alemania. Hijo de un antiguo misionero, ingresó en un seminario, pero pronto abandonó la escuela; su rebeldía contra la educación formal la expresó en la novela Bajo las ruedas (1906). En consecuencia, se educó él mismo a base de lecturas. De joven trabajó en una librería y se dedicó al periodismo por ser una profesión que le daba libertad, lo que le inspiró su primera novela, Peter Camenzind (1904), la historia de un escritor bohemio que D e 1892 a 1954 Nueva York dio acogida a 12 millones de inmigrantes que arribaron con temores y vicisitudes con fe y valor para buscar la libertad política y religiosa y mejor oportunidades de vida. Uno de cada dos Estadounidenses de la actualidad entró al país por esta bahía o desciende de alguno que lo hizo. Siendo el mejor testigo de esta una dama majestuosa que todos conocemos y de las cuales les hablaré. La Estatua de la Libertad, gigantesca estatua de cobre erigida en la isla de Bedloe, actualmente Liberty Island, situada en el puerto de Nueva York, recibiendo a tantos turistas, fue donada por Francia a los Estados Unidos para conmemorar la alianza de ambas naciones durante la guerra de independencia norteamericana y como testimonio de la amistad que une a sus pueblos. El escultor francés F.G. Bartholdi encargado de diseñar el monumento, concibió la idea de representar lo más precioso para el hombre “La Libertad” y lo realizó en forma de una mujer majestuosa, con los pies sobre una cadena rota y llevando en la mano izquierda una tabla de la ley, en la que aparece inscrita la fecha de la independencia Norteamericana y en la derecha, con el brazo en alto una antorcha encendida. Bartholdi llamó a su estatua “La libertad iluminando al Mundo” llegó a bordo del barco Isére en 214 cajas y fue inaugurada por el presidente Cleveland el 28 de octubre de 1886. Es la obra escultórica mayor que existe, pues tiene 48 mts. de altura y un peso de 225 toneladas, que sostiene gracias a una estructura de hierro construida por Eiffel. Se alza sobre un enorme pedestal de 45 mts. de altura erigido a su vez sobre la base del antiguo fuerte Wood y los visitantes pueden subir hasta los pies de la estatua en el ascensor y luego, por una doble escalera metálica de caracol (ascendente y descendente) hasta la cabeza, esta tiene una capacidad para 40 personas y desde las ventanas que forman la diadema puede observarse la magnífica vista del puerto, la ciudad con la línea de rascacielos de Manhattan y Nueva Jersey que desde las alturas parece un bordado de diamantes sobre terciopelo negro. Manhattan solo mide 36.5 Km. de largo por 3.7 Km. En su punto más ancho y sin embargo ahí es donde viven 1.5 millones de los 7.3 millones de residentes de la ciudad. Siendo 18 millones en la zona metropolitana que reciben aproximadamente al año a 32 millones de visitantes. La ciudad hace alarde de contar con 60,000 habitaciones de hotel, 17,000 restaurantes, 400 galerías de arte, la flota de vagones de metro más grande del mundo con 6,000 vagones, casi 12,000 taxis registrados, más de 3,500 autobuses, 150 museos de primera, 6 zoológicos y 10,000 boutiques todo es solamente en la Gran Manzana. Por que se conoce a Nueva York como la Gran Manzana: Esta denominación fue utilizada originalmente por los músicos de jazz en los años 20 y 30’s para decir que “hay muchas manzanas en el árbol del éxito”.♦ Colaboración del pasante de ingeniería Roberto Carlos Medrano Godínez Pase pag. 11 10 3 EL SINO DEL ESCORPIÓN ANGELA PERALTA. N INGUNA maldición pesa sobre los escorpiones aparte de la fatalidad de que todo el mundo los considere como tales, de modo que se ven en la necesidad de vivir bajo las piedras húmedas y entre las hendiduras de los edificios, en los rincones sin luz, una vida enormemente secreta y nostálgica, después de haber devorado dulce y lentamente a su madre. Ahí están los escorpiones, sin saber nada de sí mismos, mientras otros animales cuando menos tienen una vaga referencia de su propio ser; pero los escorpiones no. En su tremendo mundo de sombras únicamente les está permitido mirar a sus semejantes, a nadie más. Y aun la enternecedora circunstancia de haber devorado a su madre les impide obtener la información que hubiese podido proporcionarles, respecto al mundo, alguien de mayor experiencia que ellos. Al escorpión sus semejantes lo trastornan y lo hacen sufrir de un modo indecible porque, sobre todo, no sabe si sus semejantes son diferentes a él en absoluto, no se le asemejan en nada, como suele ocurrir. Trata entonces de verse de algún modo y comprende que ninguna mejor forma de verse que la de ser nombrado. Pues él ignora cómo se llama y también que no puede ser visto por nadie. Anhela al mundo. Trata de conocer a los otros seres de la naturaleza, en particular – ignorándolo– a los que menos lo quieren y menos lo comprenden. Se imagina que sería bello estar a su lado, servirles, adornarles la piel con su hermoso cuerpo de oro. Pero es imposible. Así, sufre un sobresalto espantoso cuando, sobre la pared blanca –esa superficie lunar y ambicionada que tan enfermizamente le fascina-, se abate sobre él la persecución injusta y sin sentido, ya que no trataba de hacer mal a nadie. Su estupor no tiene límites: más bien muere de estupor antes de que lo aplasten, porque en cierta forma aquello le parece de una alevosía indigna de aquel ser a quien tanto deseaba observar, contemplar y tal vez amar, ¿por qué no?, si ese ser, que lo hace con otros, se dignara darle algún nombre a él, al pobre escorpión. Nadie ha podido explicarle –por supuesto- que esa secreción suya es veneno. ¿Quién podría decírselo? Ningún otro animal, ningún otro ser viviente podría decírselo, ya que, al solo verlo, sin averiguar sus intenciones, lo matan en seguida y aun él mismo muere, si nadie lo mata, después de hundir sus amorosas tenazas en cualquier cuerpo. (Él piensa que aquello es un simple acto amoroso, unas nupcias en que se comunica con el mundo y se entrega desinteresadamente, sin que cuente siquiera con la parte de suicidio inesperado que tal acto contiene.) De aquí que entre los escorpiones no pueda existir la tradición; ninguno puede decir a sus descendientes: no hagas esto o aquello, no salgas bajo la luz, no aparezcas en las paredes blancas, no te deslices, no trates de acariciar a nadie, pues ninguno de ellos ha vivido para contarlo. Sufren de tal suerte la más increíble soledad, sin saber cuando menos que son bellos. Aparecen, cuando lo hacen, tan sólo por curiosidad de sí mismos: es el único ser de la naturaleza al que le está prohibido ser Narciso y sin embargo se empeña en verse, porque nadie se ve si no lo han visto, ni cuando, si lo ven, muere. I ndudablemente la artista que en el siglo XIX más lauros conquistó para México, por su actuación internacional, fue Ángela Peralta. Poseyó una prodigiosa voz e innatas facultades musicales que desde muy pequeña atrajeron la atención sobre ella. Nació en la Ciudad de México el 6 de julio de 1845. De cuna humilde, sirvió en su mocedad, como doméstica, con una familia de la ciudad la Puebla. Se dice que a los ocho años cantaba la “Cavatina” de la ópera “Belisario” de Bellini, con tal expresión, que le fueron proporcionados profesores para que la iniciaran en el estudio formal de la música: ellos fueron, Manuel Barragán, (Solfeo) y Agustín Balderas (piano y canto). En 1854 la oyó cantar la soprano alemana Enriqueta Sonntang, quien le dijo: “Si tu padre te llevase a Italia, serías una de las más grandes cantantes del mundo”. El 16 de julio de 1860, desempeñó el papel de Leonor de la ópera “El Trovador” de Verdi, obteniendo un éxito tan notable que su padre tomó la resolución de llevarla al extranjero para que perfeccionase sus conocimientos. Salió para Europa el 22 de febrero de 1861. En Cádiz, el periódico “El Imparcial” le dedicó un elogioso comentario, dándole el nombre de “El ruiseñor mexicano”, con que muchas personas la siguieron llamando. En Italia, estudió en Milán con el maestro Francesco Lamporti, quien la elogiaba llamándola “Angélica de voz y de nombre”. A principios de 1862 se presentó en el teatro de Santa Radegunda, cantando el Rondó de “La Sonámbula” y la polca de “Los Puritanos” de Bellini, en un concierto a beneficio de la cantante Karsch; el éxito que obtuvo le dio prestigio necesario para que se le abriesen las puertas de los teatros de más renombre: en la “Scala” de Milán protagonizó el papel principal de “Lucía de Lamermoor” de Donizetti, el 13 de mayo de ese mismo año; después se presentó en Turín, Piacenza, Bergamo, Piza y Cremona. En sus giras llegó hasta Egipto: tuvo oportunidad de actuar al lado de los cantantes más famosos, siempre con éxito creciente, que aumentó la admiración hacia su talento y sus prodigiosas facultades vocales. Las rivalidades que suscitó con otras cantantes llegaron a tener carácter legendario: se cuenta que, en algún lugar de Italia, hubo de actuar después de una notable diva; antes de que cantara nuestra compatriota la cantante de referencia la vio con desprecio y, después de haber recibido aplausos por su actuación, en un alarde de altanería, se colocó junto a ella y dijo: “¡Así se canta en Italia!” Ángela Peralta no contestó nada, pero cantó su pieza con tal maestría, que el público, arrebatado de entusiasmo, no cesaba de aplaudirla. El empresario, en presencia de la que había querido rebajar su mérito, le dijo al felicitarla: “¡Así se canta en la gloria”. Volvió a México, contratada por el empresario Biacchi, en 1865. (En la capital mandaba Maximiliano de Habsburgo). El recibimiento que se otorgó a la eximia cantante fue apoteótico: “Desde más allá de Mexicaltzingo, escribe Enrique Olavarría y Ferrari, salieron multitud de personas a esperar a Ángela Peralta y a darle la bienvenida”. Se presentó en el Teatro Imperial el 28 de noviembre con “La sonámbula” de Bellini, después de su actuación “rompieron los espectadores en frenéticos aplausos que duraron largo tiempo, mientras que el vasto salón se inundaba con una lluvia de versos, flores y coronas”. Aparte de “La sonámbula”, presentó las óperas “Lucía” de Lamermoor, “El barbero de Sevilla” de Rossini, “Marta” de Flotow y “Los Puritanos“ de Bellini. Sin embargo, su éxito más significativo para México, fue haber puesto en escena, el 27 de enero de 1866 la ópera del maestro Melesio Morales, “Ildegonda”, que el Pase Pág. 5 4 Pase pag. 10 9