A S O 1. NÚm. 6. SIGLO I. PERIÓDICO DE PRIMERA NECESIDAD. Una olla por semana. Un trimestre en Madrid, 5 rs.—ün trimeiitre en proviníias, 6 r3.;nn semestre, It is.—20 rs. al año en f.oda España.-Kittaojero, 8 ns. trimestre, 14 semestre y -26 un ano. —Un ano en Ultramar, M) rs. —Un número suelto atrasailo, 4 cuartos.—La correspondeneia al Director, Magdalena, 19, principal izquierda. Una Jndig:estion csuia ocho áihs. LISONJERO ESTADO DE LA HACIENDA ESPAÑOLA M000.000 Dichoso aquel que tiene su casa á note y hace del fisco mangas y capirotes. Y oliendo á trucho va saliendo adelante con un falucho. Un empréstito me ahoga y otro me salva la vida, de Dios me venga el remedio que estoy muy comprometida. M000.000 A la orilla del rio cantan las ranas: —«El ministro de Hacienda no tiene un cuarto.» ¡Eh, caballero! ¿Ha visto V. la Hacienda? ¿Es aquello que nada? -Sí. —¿Y qué hay encima? —jLa mar! EL GARBANZO, ADVERTElNCIA Accediendo á los deseos manifestados por un g r a n número de p e r s o n a s , hemos hecho una nueva tirada del núm. 1." Los pedidos se dirigirán á la Administración de EL GARBANZO, remitiendo un sello de 50 milésimas. Les pinos se pierden de vista. Cada progresista tiene una breva. ¡Oh! ¡Quién pudiera hacer durable la sabia administración del liortelano de Tablada! A su sombra, aseguran el trigo los liberales. El pan es un general moderno. Cada semana recibe un ascenso. El ministerio de la Gobernación es una granja. Allí dan castañas al í[ue las quiera. Donde quiera que hay eimbrios, hay naranjos. Las almendras están de sobra. Y nada digamos de las tostadas! ;Año feliz, v e r a n o asombroso, administración r''iStica y G o b i e r ; i o silvestre, yo os saludo y venero! , Yo en n o m b r e del país, os contemplo a d m i r a d o , y me h a g o á mí m i s m o esta reflexión de envidioso: Quisiera ser ministro este a ñ o p a r a tener t r i g o , O esta o t r a , que es una consecuencia de la co.secba: I';sfe invierno h a b r á leña. Las cartas que recibimos de toda España nos hacen saber que la cosecha es buena. Excusado es advertir que los corresponsales son progresistas. «Años hacia, dice uno de ellos, que no habiamos visto tanto trig-o junto.» Y efectivamente, este sug-eto tiene mucho trigo. Las almas inocentes creerán que el trigo sirve para liacer pan. Eso era antes. Ahora sirve para hacer levitas. Mi corresponsal, antes de tener trigo, usaba chaquetón. Ahora lleva levita, entre otras razones, porque esta prenda tiene más bolsillos. Hablábamos de la cosecha. Todo género de hortaliza ha echado Dios por esos campos. La corte ha podido convencerse á su paso por esas provincias, de la prosperidad de la verdura en estos tiempos revolucionarios. Los melones abundan como nunca. Están florecientes los alcornoques. Las calabazas privan. Se multiplican los camuesos. La pródiga mano de la Providencia ha centuplicado las hojas del laurel como presiatiendo el alza de las glorias nacionales. Los olmos dan peras. Los gobernadores dan j u g o . En América, como en España, los frutos de la r e volución son maravillosos. Las noticias del empréstito han coincidido con la presentación del coco. Los árboles hablan. Pláta-\no\ han dichos algunos. Volvamos á España. «La cosecha está asegurada» nos] escribe un administrador de Aduanas. «Se despachó toda la cebada» nos dicen de San Sebastian y Galicia. En la costa Cantábrica se teme que no queden p a tatas. Tal es la abundancia de bellotas en Madrid, que nadie duda de que el Gobierno tiene larga vida. Lo notable de todo esto es que coincide con la e n trada de los radicales en el poder, La situación es una viña. Hay más nueces que ruidos El agua del mar está azucarada ARMONÍAS ELECTORALES. Parn ser candidato -e necesita uii;i paña muy larga con una guita; y para cebo anas cuantas pesetas de cuño nuevo. Si quieres que te vote dame un destino que estoy en descubierto con mi sobrino; y aquí en la aldea como no imtes el carro no hay quien te crea. Apeliloso aspecto de un colegio electoral en est.is Jias. LA COSECHA Se pensó en ordenar á la empresa del tram-via que |0S radicales paguen medio asiento. • Por último, se puso sobre el tapete la cuestión del regicidio, y después de pensar mucho rato qué solución se le daria, mandaron traer á Botija y se lo bebieron. CONSEJO DE MINISTROSEl último Consejo de ministros, según un periódico, tuvo cierta importancia. Nos consta. Gracias á la elocuencia aterradora del presidente, oimos desde nuestra casa lo que habla en el ministerio. Los ministros se reunieron como de costumbre a l rededor de la mesa. Un gobierno sin mesa seria indecoroso. Se habló al principio del Tiempo. No faltó quiea dijera que era cosa de suprimirlo. Después se habló de la subida del termómetro. Al general Córdova le parecían pocos treinta grados. Las elecciones fueron objeto de grandes discasiones. —Tanta legalidad me va pareciendo muy rara, dijo uno. —Con legalidad yo no puedo ser ni diputado ni nada, dijo otro. El presidente aseguró que no habrá tanta lega,lidad como creían, supuesto que D. Nicolás habia tenido que ir á Sevilla... Interrumpió otro. —¡Pues de eso me quejo! Si no hubiera legalidad ¿habria tenido que ir? —Estamos en ridículo, añadió uno muy furioso. Se acordó rebajar un 25 por 100 de legalidad. Dióse cuenta de una comunicación del gobernador de Santander (Pita), pidiendo que se eleve á Santander á población de primer orden por aquello del entusiasmo. Ruiz Zorrilla dijo que al primer orden que haya en España se pensará en eso. Echegaray propuso que por de pronto «e eleve el Sardinero al cubo. También propuso el mismo Echegaray que en la construcción de los puentes las cimbras se sustituyan con eimbrios en lo sucesivo. Presentó el de Ultramar un proyecto de ley para abonar sus atrasos á las familias de los soldados de Hernán-Cortés que no cobraron su soldada. Uno de sus colegas objetó que bastaba con un decreto como el que se ha dado para dar fin á los g a t u perios de Santo Domingo y Méjico. Se acordó telegrafiar al ministro de Estado, díciéndole que no se dé prisa en venir, que no hace falta. Habló el de Hacienda sobre el oro de la libertad que se va marchando, y sobre el de la reacción que no viene. Diez veces he votado por los patriotas y á pesar de Zorrilla no tengo botas. Mas ¿quién se aflije? tengo un fusil de aguja, pero no rige. ¿Candidato y no cobras del presupuesto? Yo no sé como diablos puede ser esto. ¿Sirves de balde? Menester es que tengas el padre alcalde. Las cosas de este mundo me martirizan; si voto me colocan .si lio, me atizan. T á lo bolero, hágame usté justicia, señor Rivero. A Zorrilla le votan por su distrito y á Romero Robledo por lo bonito. Y al señor Martos dicen que ha de costarle muy buenos cuartos. Cuatro Cortes he visto desde que imperas las últimas peores que las primeras; aero tú dices cobre yo, y qué se montea en mis narices. Si vienes al Congreso, ven por lo oscuro que si te ve el juzgado no estás seguro. T e l que te vote debe tener los ojos eo el cogote. Ya tenemos Congreso .«e abrió la veda; ia libertad peligra, ;viva el que pueda! ¡Rancho á las doce! Me voy al extranjero; que usté la goce. EL GARBANZO. PAREJAS. 1 8 6 8 . — C a y ó p a r a siempre la raza espúrea de los Borbop.es. 1 8 7 2 . — O a e d a a restablecidos los c o n s u m o s . 1 8 6 8 . — Q u e r e m o s la libertad completa de la prensa y el j u r a d o p a r a t o l a clase de delitos. 1 8 7 2 . — K n correos me h a n quitado inuclios G.\unANZOS. 1 3 7 2 . — í l e perdido la fé y n i ' voy a Tablada. 1 8 7 2 . — E l Sr. Ruiz Zorrilla v i v e ' e n la P u e r t a del Sol, donde tienen \ ' d s . su casa. 1 8 6 8 . -¡.Vbajo las q u i n t a s ! 1 8 6 9 . - A r r á s e m e V. á Gracia sin dejar piedra s o bre p i e d r a . 1 8 6 8 . - E l p a r t i d o absolutista es un partido m u e r t o . 1 8 7 2 . - E l g e n e r a l Baldricli continúa en Vich. 1 8 6 8 . — L a libertad de cultos traerá á E s p a ñ a c a p i tales extranjeros , a u m e n t o de población v m u c h o dinero. 1872 •Se necesita u n j u d i o p a r a t i r a r l e del r a b o . 1868 1872 1868. 1872. -Detestamos el privileg-io. Queremos u n a s i t u a c i ó n e m i n e n t e m e n t e democrática. -Dígale V. al señor conde que m a ñ a n a t r a i g a dos cubas. -Jamás , jamás , jamás! - O j o , o j o , ojo! DEBAJO DE NOVELA LA CAMA ORIGINAL CAPÍTULO PRIMERO. Un hombre desgraciado. H a y narices q u e debian Qntzi- proJiibidas, y una de .ellas es la de D. F r u t o s Melonar, hombre rico, q u e por su apellido y por su nariz, no h a l o g r a d o ser d i choso. Verdad es, q u e por m u y e x t r a ñ o que sea el apellido de D. F r u t o s , no lo es t a n t o como su n a r i z , l a m á s r a r a de c u a n t a s se r e g i s t r a n en los a n a l e s de la narilogia, ciencia moíierna i n v e n t a d a | p o r u n c h a t o que habia aplicado los principios de G a l l , ó sea los de la í r e n o l o g í a , á las narices de la h u m a n i d a d , sacando consecuencias horribles de toda aquella nariz que s o bresale de la c a r a m á s de cinco líneas. Midiendo la nariz de D. F r u t o s Melonar, por el sistema m o d e r n o , podremos fijar¡su l o a g i t u d en ocho c e n t í m e t r o s por cinco de elevación sobre el rostro. • Si Qaevedo hubiese conocido á [ D . F r u t o s , le h u biera parecido pálido s u célebre soneto á un.a nariz, é i n d u d a b l e m e n t e h a b r í a compuesto o t r o m á s d i g n o de la de D. F r u t o s . Hemos dicho y a que, por aquella y por su a p e U i ilo, no habia l o g r a d o .ser dichoso, á pesar de ser d u e ño de u n a f o r t u n a suficiente p a r a v i v i r ] con h o l g u r a , sin necesidad de ocuparse en n a d a . Sí D. F r u t o s , en vez de apellidarse Melonar y de haber nacido con aquella n a r i z , hubiese tenido u n a de formas r e g u l a r e s y un apellido'ménos vegetal, h a bría sido el hombre m á s venturoso de la tierra, p o r q u e si bien s u carácter era de lo más detestable que se c o noce, debía esta condición á su apellido y á sus n a rices. D. F r u t o s fué dichoso h a s t a que coaoció toda la extensión de su n a r i z , y todo el horrible significado de su apellido j u n t o á su n o m b r e . Por su n a r i z , que p r o d u c í a la hilaridad en c u a n t o s la veían por vez p r i m e r a , t u v o muchos lances d e s a gradables en s a j u v e n t u d , él q u e nunca fué de c a r á c ter pendenciero; por su apellido, que producía casi el mismo efecto que su n a r i z , se vio también en la n e c e sidad de a n d a r á g o l p e s v a r í a s veces. Conocer^'is á m u c h a s personas de esas que .siempre al n o m b r a r o s , t a l vez por u n instinto de adulación, os l l a m a n Sr. de t a l , 6 Sr. de c u a l , sin que se les olvide n u n c a esa preposición s e m i - a r i s t ó c r a t i e a . P u e s í i g u r a o s l a impresión que causaría en don F r u t o s , al oír que le l l a m a b a n Sr. de Melonar, ó recibir el sobre de u n a c a r t a , concebido en estos t é r m i nos-. Sr. ü . F r u t o s do Melonar. ¡Frutos de Melonar! ¡Es decir, m e l o n e s , calabazas ó c u a n d o menos .sandias! D í g a n m e Vds. con franqueza sí no era cosa de desesperarse. Un día brotó de su cerebro u n a idea luminosa, idea q u e le hizo por u n m o m e n t o ser feliz y h a s t a o l v i d a r se de sus narices. Aquella idea fué variar de n o m b r e , es decyr, confirmarse. E s t a b a n por entonces precisamente admini-strando el s a c r a m e n t o de la Confirmación en u n a iglesia de Madrid, y fué allá presuroso revolviendo en su m a g í n todos los santos del calendario, p a r a elegir uno t a n poético, que e p í l i b r a s e la horrible prosa del apellido. Decidió, por fin, l l a m a r s e A u g u s t o . Llegó á la i g l e s i a , atestada de g e n t e h a s t a la p u e r t a , y penetró consolado con la idea de que iba á salir dichoso de a q u e l t e m p l o . Como sucede s i e m p r e , los que iban á recibir el s a c r a m e n t o e r a n n i ñ o s á quienes llevaban sus p a d r e s . D. F r u t o s paseó u n a m i r a d a por a q u e l l a m u l t i t u d infantil, y en v a n o buscó entre ella u n a d u l t o . El era el ú n i c o , q u e á a q u e l l a edad (cantaba y a por entonces t r e i n t a años) se p r e s e n t a b a á confirmarse. ¡Si estaré confirmado ya! dijo entonces p a r a su sayo. Y p r o c u r a n d o recordar, le vino á ,las mientes l a m e m o r i a de u n bofetoncito, aplicado á su m e g i l l a por la carnosa m a n o de u n obispo r e v e r e n d o , h a cia y a b a s t a n t e s a ñ o s , y h a s t a recordó el detalle de h a b e r estrenado u n trajecito de color de y e m a de h u e v o , con el que su m a d r e a s e g u r a b a q u e estaba monisinio. Estos recuerdos de la infancia, q u e v i e n e n á l a m e m o r i a en ocasiones d a d a s , se p r e s e n t a n con u n c o lorido t a l , q u e n o dejan l u g a r á d u d a . D. F r u t o s se convenció p l e n a m e n t e de q u e estaba y a confirmado. Sin e m b a r g o , n o recordó si ese s a c r a m e n t o , como el del b a u t i s m o , podia recibirse u n a vez sola, y con objeto de a v e r i g u a r l o , e n t r ó en la sacristía. Un m o n a g i l l o de c a r a picaresca estaba d o b l a n d o u n o s a m i t o s y g u a r d á n d o l o s en u n cajón. D. F r u t o s se acercó á él, y el m u c h a c h o , así que fijó sus ojos e a el a s p i r a n t e á confirmado, soltó u n a carcajada t a n franca y t a n .sonora, q u e h a c i a el e l o g i o de los dotes cómicas qna poseía l a n a r i z de d o n Frutas. Este, a c o s t u m b r a d o y a á semejante efecto, se c o n t u v o como tenia de c o s t u m b r e y dejó a l m u c h a c h o q u e diese á su sonrisa t o d a la e s p a n s i o n q u e le p e r m i t í a u n a educación detestable. Cuando el m o n a g u i l l o acabó de r e i r , D. F r u t o s empezó á h a b l a r . —¿Me dirá V. dónde está el sacristán? — E s t á ocupado con su I l u s t r i s i m a en la c o n f i r mación.. —¿Y n o podría y o hacerle u n a p r e g u n t a ? —No señor. ¿No le d i g o á V. q u e está ocupado? Hoy es el ú l t i m o dia de confirmación y h a y m u chísima g e n t e . Al oir D. F r u t o s q u e era el ú l t i m o dia de confirm a c i ó n , comprendió que h a b i a q u e decidirse á hacerlo sin pérdida de t i e m p o . —¿V. sabe, dijo a l m o n a g o , si puede u n o confirm a r s e dos veces? No puede comparar-se á la p r i m e r a , la s e g u n d a carcajada del chiquillo, al oir la p r e g u n t a de D. F r u tos. El m o n a g u i l l o se a p r e t a b a la b a r r i g a , se r e t o r c í a , llenando las á m b i t o s de l a sacristía con l a risa m á s e s p o n t á n e a que h a salido de labios infantiles, y r e p i t i e n d o e n t r e los casi sollozos que la carcajada le p r o d u c í a : —¡Confirmarse dos veces! ¡.lá, j á , j á ! ¡Qué b a r b a ridad! ¡Confirmarse dos veces! ¡Já, j á , j á , j á ! D. F r u t o s se vio á p u n t o de perder la p a c i e n c i a ; m a s conteniendo el impulso de sus iras , salió de l a sacristía e n t r e iracundo y a v e r g o n z a d o , c o n v e n c i d o hasta la evidencia de que no podia c o n f i r m a r s e , p u e s los m o n a g u i l l o s están perfectamente e n t e r a d o s de e s a s cosas, y aquel h a b i a calificado n a d a menos q u e de b a r b a r i d a d el proposito de D. F r u t o s . Perdido y a este medio de v a r i a r de n o m b r e , l l e g ó a s u m i r l e en u n a tristeza profunda, d é l a c u a l le .sacó otra n u e v a ¡dea, m á s fácil y posible q u e la a n t e r i o r . G e n e r a l m e n t e al b a u t i z a r n o s , se dijo, nos p o n e n m á s de u n n o m b r e , y m u c h o s a d o p t a n el s e g u n d o . ¿Cuál será el mío? N u n c a se me lia ocurrido p r e g u n t a r l o , y acaso .sea u n n o m b r e con todas las condiciones del que y o deseo. E n t o n c e s , m u y a n i m a d o con este p e n s a m i e n t o , buscó su fé de b a u t i s m o . ¡Qué horrible d e s e n g a ñ o ! ¡Su s e g u n d o n o m b r e e r a Silvestre, y n o tenia n i n g ú n otro! Maldijo su estrella y la idea'de sus p a d r e s al l l a m a r l e de aquel m o d o , y volvió á caer en u n a t r i s t e z a , de l a c u a l salió u n a ñ o después, c u a n d o a n t e los a l t a res dio su m a n o de,esposo á la bella s e ñ o r i t a d o ñ a Conchita L a c a l l e , que sin e s c r ú p u l o se h a b i a decidido á ser la señora de M e l o n a r . [Se continuará.) Hablando de la supresión ó traslación del presidio de VaUadolid, el Sr. Ruiz Zorrilla tía resuelto que sea trasladada en carros. Los presidiarios de varios puntos, que temen la p r o n t a llegada del edificio, han suplicado que se encargue la c o n ducción al director de comunicaciones, para dar largas al asunto. * * • Dice un periódico: «Hoy ha debido llegar á Madrid el marqués de...» Pues hombre; ¿si ha debido llegar por qué no ha llegado? * « De la Correspondencia. «Uno de los trenes de Valencia al Grao.^ ha sido apedreado uno de estos dias.» Me choca muchísimo, porque ningún ministro , que yo sepa, ha ido por ese camino. * * r Varias casas extranjeras ofrecen dinero al Gobierao. D. Servando, loco de contento, se ha dado un abrazo á «<í mismo. • Acabo de leer que el Sr. Vico ha llegado á Madrid. En seguida leo que el Sr. Olózaga está en Vico. ¿En qué quedamos? ¿Dónde no está el Sr. Olózaga? * « De los siete ministros hay cinco fuera, y los dos que han quedado no están unidos. Y á lo que estamos, yo tengo un expediente, dale expresiones. * » • —¿Sabe V. lo que pasa? -¿Qué? —Que se ha descubierto en Madrid una fábrica «l« duro» falsos. • —¿Otra? « * Desde que mandamos nosotros, decia Ruiz Zorrilla ayer tarde, está España como una balsa de aceite. —Sí, dijo un caballero que pasaba, de aceite... miaeral. * « Suplico al señor gobernador que deje el destino ó qua cambie de nombre. Lo digo porque un polizonte me ha asegurado que está empleado en el Matadero. * « Diálogo en el ministerio de la Guerra: —¿Qué desea V.? —Vengo á pedir el retiro. —¿Kl Retiro? Eso ea cosa del ayuntamieato. * « * EL GARBANZO. —S'.-ñor ministro ¿me coloca V. ó no? —Ya le he dicho á V. que veremos. —;Rs posible que se entretenga á un hombre como yo ¡que ha estudiado tanto! jA todo un licenciado! —¿Licenciado? ¿de dónde? * * » Y á todo esto el Sr. Echegaray continúa olvidado. Francamente, es una inhumanidad tener así á un hombre ei) tiempos de tanta conversación. FUGA DE CONSONANTES. ..e.e. . ..o.e.e. ..a..a. .e.o.a. ,.e.e. . ..o.e.e. . a..a..o a. .ie.o e.a. .a.a. .o.a..e. . ..o..o.a. .a.a. e. .u..e .o..e.ue. e. .ue.o [La solución en el numerepróatMo.) Solución de l a s del numero a n t e r i o r . » » A las rejas do la cárcel no me vengas á llorar, ya que no me quites penas no me las vengas á dar. JAI huérfana de Madrid, se titula un libro muy agradable (¡D. ha dado á luz el Sr. D. Emilio Mesa. Aplaudo al autor y le suplico que no divulgue su apellido jKirque le van á rodear los radicales, Acertada por D. M. Esiéban; doña C. de Z.; uti garban. cero; D. R. Padilla; D. F . y E.; D. R. M. Esteban; D. E. V. y doña María Cereceda; doña Teresa R.; doña Luisa Sastre y don F. A. M." * « La mujer que poco vela, tarde hace luenga tela. Kl público de los jardines del Buen Retiro es muy deecor1H^ Siempre que oye cantar, «Mira que pavo,» no mira á la < M'iia, y se pone á mirar á la presidencia del Consejo. Solución á. l a s c h a r a d a s del número a n t e r i o r . * * * Comienza á subir el cambio. I). Servando, no sabiendo cómo conjurar este contratiem10, se da golpes en la frente, y no le sale nada. Después de pensar mucho, ha creído que lo que le convi lidria más seria un cambio de frente. Los ladrones de toda España han hecho una exposición Hi Gobierno, ofrecié«d«le el 10 por 100 de lo que roben para •ndtí]- á la Mejora de las carreteras. « * 1.* Galápago.—2.* Puntapié.—3.^ Autores.—4." Beso. Fueron resueltas por D. E. Martin; D. F . S.; D. E Falces; D. M. Aseníio; D. P. García: D. J. Medina; doña O. dé Z.; un garbancere; Sócrates; otro garbancero; doña A. P. Quintanilla; D. F . y E,; D. L. F . de P. y M.; D. E S. y Nebreda; señorita doña B. A. Ardamuy; D. F . Guijon; D. L. Rubi»; D. G. Maclas y D. F . A. M. Nota. En adelante solo se admitirán solucicnes á loe suscritores. GEROGLÍFICO- Al ver al Rey u i aegro perdió el color y murmuró, me alegro. * » « Be un gusano sale la seda. Be una crisálida una mariposa. Be una cebolla una dalia. Pero plante V. á Echegaray en medio del ministerio de F(imento ¿y á que no sale nada? CoB«LARio.—El Sr. Echegaray es un hombre sin salid». OAUTEL.—Secretaría de Fomento. Entrada libre. KBCLAMO.—El ministro de Foniento es un hombre m u y út:!. Hacen falta botos. Plan económico. Única manera de salvar la Hacienda. Suprimir el sueldo da D. Salustiano. Ve«der al embajador <fi lo que él cree que vale. Dedicar el producto á l a compra de talones y echar á correr con ellos á cualquier parte donde no pueda llegar la situación. BIBLIOTECA DE AUTORES PROGRESISTAS Se ha publicado el primer tomo, titulado HISTORIA DE UN BOCADO DE PAN. Este desventurado zoquete, cautivo durante ocho mesea en poder de patriotas, cuenta su historia con una elocuene¡:i que quisiera tener el general Córdova. Véndese á poco precio en la calle de Carretas. * * * * « ESCÁNDALO. A los encargados de la venta de nuestro periódico en Madrid, les robó un mozalvete 100 números. Kl prójimo en cuestión, está libre y sin castigo. Lüs robados fueron detenidos y pagaron una mnlta de 2(i0 reales. No hay necesidad de comentarios. • El problema del número anterior tiene muchas solucioiK's: la más probable es la siguiente: Candidato' ministerial... cero. Candidato de oposición... 3000 duros. Asi lo han comprendido D. F . K. A. B; D. J. L Conde; IJ, I>. Medina; D. A. Berzosa y B . F . A. M. • * « Araiida íe Duere D. D. dol Caz.—Rei'ibidos sellos. Burgos.—D. C. A.—No ha recibido el av¡.5o Je aumento de pod;..!'^ liasta el dia 18.—Le eiu-id dd 6." numero los que pide Jaén.—D. José M.irtine/. Castilla.—Se le enviar«n 100 ejemplarfs d<-i quinto. La c.iusa del exlrav/o averígiieía V. en correos. . Medina del Ganiji».—D. E. Pedraz.—Recibiía libranza. To«i»a.—D. J. B. Fernande/,.—De no ser posible giro mande usted sellos. f aerto de Santa María.—I). B. V.—Si quiere V. números alratado.s ya ,sabe V. el preci» ost.nblecido. JVIadrid.—D.''* .V. P. Quintanilla.—Sa observación es muy justa. Carmona.—D. F. liuion.—liecibidns las dos letras.—La carta ]iiiiendo aumento de pedido, n» llegó á nufstras manos. Cáceres.—I). M Soto.—La íalta do un número está en lo pcsibie, perd 18 no desaparecen sino en virtud de una trasforeneia. Torreperogil.—D. G. M. de Villena.—Se ha servido la suscr¡i:i<.n eun tod.i puítualidad. Torrelavega.—D. M. Calderón.—k 4 rs el 2S.—Si no le tonvicne avise. Barcelona.—D. G. y H.—Recibida letra.—Resulta de su carta que 180 garbanzos que le hemos enviado han sido digeridos p»r un eslútcago desconocido. DESPACHADO POR EL PROPIO COSECHERO * * La temperatura continúa haciéndonos felices. El termómetro oscila entre los 42 y los 45'° á l a sombra. j l ^ siento por Coronel y Ortizl «Correspondencia particula:' de El Garbanzo.» VINO ELECTORAL El ministro de Fomento ha resuelto que en adelante la relación de la circunferencia al diámetro no se llame Pí, por 1 aaones políticas. * * « Y otras muchísimas cosas Que dan en conjunto el todo Y es palabra muy famosa, Mezcla de negocio y farsa Cümpue.sto de venta y compra, Bandera de algún partido Y algo pasada de moda. ANUNCIOS * * « Contribuyamos á la publicidad. En u n establecimiento de comercio 'de esta corte, ha fijado eS du3ño u n cartel, donde se lee: A la señ«ra que am^re } CT valor de diez reales se la echarán unas g otilas. Y liay encima del mostrador un colosal frasco de agua de Colonia. * * « Dicen que ya, viento en popa va el cólera por Europa y de algunos me sé yo que solo al saberlo no les llega al cuerpo la ropa. Cabellos de una señora; Algo que hay en los billares; Un bicho que me incomoda; Lo que tengo en el verano; Una ñera que se doma; Un pariente y un calmante; Algo entre miedo y zozobra; Lo que debe ser el pan; Lo que suelta una pistola; Un pintor de gran renombre; 1,0 que da la prensa toda; Lo que se dan los amantes; Lo que cu Palacio se adora; Aflrmacion; negación; Una legumbre muy roja; Lo que hace todo mini.stro (áiaudo entra á mandar ahora; Una mujer del Oriente; Una enfermedad penosa; Un alboroto, un cochero... EL EMPRES TITO (la solución en el número próximo.) Solución a l geroglifíco del número a n t e r i o r . Entre dos peñas nací, Lss vívoras me criaron, A orillas del m a r crecí, Los moros me cautivaron. Acertado por un garbancero y D. Salvador Quircis. Danza habanera para canto y piano, sotto noce. Se vende en tedas las tabaquerías. TRENES DE RECREO DE IDA T •VUELTA Á VICO PARA E.STUDIAR EL VOLUMEN DE LA DIPLOMACIA ESPAÑOLA Salen de Madrid todos los días. El que sale no vuelve. LOGOGRIFO- TEATRO En quince letras que tengo Hay más de noventa cosas. Una pasión; una flor; Una ciudad populosa; Un licor; un animal; Un naipe y una señora; Un dinero y un tesoro; Uu juego; un mueble; una hora; El nombre del Salvador; Cuatro nombres de personas; Cuatro apellidos famosos De radicales en boga; Un embajador cesante,Lo que sostiene las hojas; Unas flores bien atadas; Un gabán que no está en moda; Lo que hace .indar á los barcos; Lo que le dan á la tropa; Lo que se observa en el mar; Un rio que tiene bocas; La expresión de lo distante; NACIONAL LOS MINISTROS DE VIAJE Y EL PAÍS EN CAMISA (Farsa, nueva.) Hay billetes en la Contaduría... de Hacienda pública. NA SEÑORITA QUE NO TIENE UN CUARTO, PEROciudadano que se presente, la facilidad coa que se casaría si eucentrara novio. Ha recibido una educación brillantísima. Es hija de un fosfarero. Uque sabe de todo un poco, probará á cualquier r j N PROFESOR DE LENGUAS VIVAS, QUE ACTÜALU m e n t e está desocupado, desearía colocarse en casa de UB fondista para hacer estudios prácticos de lenguas muertas. MADRID: 1872. Imprenta á cargo de J. E. Morete, Agnardiente, 6.