IV. CONTEMPLATIO ¿Qué me lleva a hacer el texto? Motivación: Así entiende San Vicente, la compasión que debemos tener con lo que sufren: Todos los hombres componen un cuerpo místico; todos somos miembros unos de otros. Nunca se ha oído que un miembro, ni siquiera en los animales, haya sido insensible al dolor de los demás miembros; que una parte del hombre haya quedado magullada, herida o violentada, y que las demás no lo hayan sentido. Es imposible. Todos nuestros miembros están tan unidos y trabados que el mal de uno es mal de los otros. Con mucha más razón, los cristianos, que son miembros de un mismo cuerpo y miembros entre sí, tienen que padecer juntos. ¡Cómo! ¡ser cristiano y ver afligido a un hermano, sin llorar con él ni sentirse enfermo con él! Eso es no tener caridad; es ser cristiano en pintura; es carecer de humanidad; es ser peor que las bestias. (XI,561) • Compromiso: ¿Qué nos proponemos hacer concretamente para actuar como el buen samaritano? LECTIO DIVINA – DOMINGO 15º T.O. ¡VETE Y HAZ TÚ LO MISMO! LA PALABRA HOY: Deuteronomio 30,10-14; Salmo 68; Colosences 1,15-20; Lucas 10, 25-37 Ambientación: Colocar un botiquín junto al que habremos colocado fotos de personas necesitadas y esta frase: “Vete y haz tú lo mismo” Cantos sugeridos: Cristo te necesita para amar; Con nosotros está AMBIENTACIÓN: El ejercicio de la misericordia debe ser un rasgo distintivo e indiscutible de un discípulo de Jesús. Para profundizar en esto leeremos uno de los relatos más impresionantes y conocidos de todo el Evangelio: la Parábola del Buen Samaritano; un relato que pone en crisis la mediocridad de nuestra capacidad de amar. 1. Oración inicial Oración final Fuentes: www.lectionautas.com; “Tú tienes palabras de vida, Ciclo “C”; obras completas de San Vicente de Paúl. Señor Jesús nos dejas esta parábola del Buen Samaritano para ayudarnos a ver la actitud y la disposición que debemos tener con todos los que nos rodean, haciéndonos ver que creer en ti, no es sólo levantar el corazón al cielo y olvidarnos de los demás, sino que el amor que te profesamos pasa por una cercanía y un compromiso con los que nos rodean, para actuar y amar como Tú lo hiciste. Por eso, Señor, derrama tu gracia en mi corazón, y ayúdame a vivir la fe en ti con actitudes y gestos que manifiesten mi disposición y voluntad de identificarme contigo. Que así sea. DOMINGO 15º TIEMPO ORDINARIO - C – Lectio Divina - DOMINGO 15º TIEMPO ORDINARIO - C – Lectio Divina - Gracias, Padre, porque en Cristo, el buen samaritano, sales siempre al encuentro del hombre maltrecho y caído. Tú no nos dejas nunca solos en las lágrimas y en la noche, sino que nos recoges en el hogar de tus manos de padre. Con su ejemplo nos enseñó Jesús a no pasar de largo, ignorando al hermano necesitado que encontramos en la ruta. Concédenos, Señor, imitar tu compasión y tu misericordia, para que, portándonos como prójimos de todo hombre y mujer que nos acompaña en la común travesía del desierto de la vida, nos entreguemos a la apasionante tarea de amar a los hermanos. Así el amor será nuestra vida y nuestra identificación. Amén. I. LECTIO ¿Qué dice el texto? – Lc 10,25-37 Motivación: Lucas ha sido llamado el evangelista de la Misericordia porque en sus páginas refleja lo que supone poner en práctica el mandamiento del amor al prójimo. Dejémonos interpelar por esta parábola • Forma de leerlo: 1. Proclamar el texto en voz alta (todos de pie). 2. Cada uno puede leer en voz alta el versículo que más le llamó la atención (sentados). • Preguntas para la lectura: • ¿Qué debo hacer para alcanzar la vida eterna? ¿Cómo responde Jesús al letrado? ¿Qué decía la ley al respecto? • ¿Quién es mi prójimo? Jesús responde con una parábola. • ¿Cómo reacciona cada personaje de la parábola frente al herido que está tirado junto al camino? ¿Por qué lo hacen? • El sacerdote y el levita cumplen la ley, pero no practican la misericordia. Su cercanía a Dios no les ayuda a acercarse a quien lo necesita. ¿Qué pregunta hace Jesús al final de todo? ¿Qué relación tiene con la pregunta inicial? • Otros textos bíblicos para confrontar: Mc 12, 28-34; Mt 22,34-35; Jn 13, 12-15 II. MEDITATIO ¿Qué me dice? ¿Qué nos dice el Texto? Motivación: También a nosotros nos sirve de muy poco saber de memoria los mandamientos. Si en la práctica no “hacemos” como el samaritano y nos portamos como prójimos de quienes vamos encontrando por el camino, nuestra vida dará continuos rodeos y nos alejaremos cada vez más del camino que conduce a la vida. • eterna?…(Lc 10,25)?, ¿es actual esta pregunta?, ¿le importa a la gente ese tema? ¿Cuáles son las personas de mi entorno que más necesitan de mí y a quienes algunas veces he negado mi ayuda oportuna? Si es posible las identifico con el nombre. ¿Qué ayuda me pide cada una de ellas? ¿Cómo me haré prójimo de ellas? ¿Alguna vez he actuado como el sacerdote o el levita y siendo consciente de alguna necesidad, he preferido “hacerme el de la vista gorda”? ¿Por qué lo he hecho?, ¿Qué he sentido después? ¿Qué propósitos me hago hoy al respecto? Recuerdo la última vez que actué como el buen samaritano. ¿Con quién fue?, ¿qué hice?, ¿qué intereses y necesidades personales pasaron a segundo plano? ¿La mano que tendí esa vez fue sólo de momento o aún hoy continúo brindando mi ayuda generosa? Luego de un tiempo de meditación personal, compartimos con sencillez nuestra reflexión, lo que el texto ME dice a mi propia realidad y situación personal. III. ORATIO ¿Qué le digo al Señor motivado por su Palabra? Motivación: Jesús es el Buen Samaritano por excelencia. Él se ha hecho nuestro prójimo para poder así curar nuestras heridas con el pan y el vino de su misericordia. • • Luego de un tiempo de oración personal, podemos compartir en voz alta nuestra oración, siempre dirigiéndonos a Dios mediante la alabanza, la acción de gracias o la súplica confiada. Se puede, también, recitar el salmo responsorial que corresponde a este domingo: Salmo 68. ¿Qué actualidad tiene para nosotros la pregunta del maestro de la ley: “…¿qué debo hacer para conseguir la vida DOMINGO 15º TIEMPO ORDINARIO - C – Lectio Divina - DOMINGO 15º TIEMPO ORDINARIO - C – Lectio Divina -