PRINCIPIOS DEL PROPOSITO “Mantén tu mente y tu corazón en a dirección correcta, y no deberás preocuparte hacia donde se dirigen tus pies” Un principio es, por definición, una “norma o idea fundamental que rige el pensamiento o la conducta; cada una de las primeras proposiciones o verdades fundamentales de donde derivan las demás” ; además, es la base , origen, o doctrina fundamental”. A partir de los axiomas, deducimos que los principios consisten en verdades fundamentales de aplicación universal, puesto que rigen y revelan la conducta y el funcionamiento normal de cualquier entidad. Por tanto, podemos trazar una comparación entre el concepto de principio y la función del faro en las ciudades costeras, puesto que demuestran que los principios son leyes que no pueden quebrantarse; solo podemos toparnos con ellos. Así como sucede con la ley o principio de gravitación universal, que rige y gobierna la atracción entre la Tierra y la Luna, y la ley o principio de la fuerza centrifuga que controla y da a conocer la rotación de la Tierra alrededor del Sol; lo mismo sucede con los principios y propósitos, pues rigen y manifiestan la función del propósito. Existen siete principios básicos que caracterizan el propósito como Dios lo diseño. PRINCIPIO 1: DIOS ES EL SENOR DEL PROPOSITO Cada creador o fabricante comienza su obra con un propósito. En primer lugar, establece su intención antes de empezar el proceso de producción. Dios es la fuente del propósito. La naturaleza esta llena de pruebas que evidencian que El determina el propósito de algo antes e crearlo. En otras palabras, el Señor nunca hizo cosa alguna con solo el fin de entretenerse. Jamás creo algo para demostrar que podía lograrlo. Antes de que el acto creativo tenga lugar, Dios tienen en su mente el porque y el como de lo que decide realizar. Todo lo que hace, lo realiza con y para un propósito determinado. La naturaleza inventiva del Señor se ve claramente, además, en su interacción con la humanidad. Tuvo la intención de salvar a Noé del diluvio que destruiría La Tierra, antes de ordenarle que construya el arca (vea Génesis 6:9-22). Dios estableció que Esaú, el hijo mayor de Isaac, serviría a Jacob, el menor, antes de que Rebeca diera a luz (vea Génesis 25:19-26) “EL SENOR NUNCA HIZO COSA AL GUNA CON EL SOLO FIN DE ENTRETENERSE” PRINCIPIO 2: EN LA VIDA, TODO TIENE UN PROPOSITO Si Dios es el Señor del propósito y si El creo todo lo existente, entonces en la vida, todo tiene un propósito. Cuando miro a la cucaracha antes de matarla o a la rata en la trampa, me pregunto si Dios tiene un plan y un propósito para cada una de estas criaturas. Los piojos que detestamos y las serpientes a las que les tememos, fueron hechos por Dios para cumplir con un propósito especifico, del mismo modo que sucede con los mosquitos, las aves y los arboles. A Dios le llevo el mismo tiempo crear las arañas y las hormigas, que las mariposas y las flores. Solo porque no entendemos el propósito de una criatura, no significa que no lo tenga. No existe nada en tu cuerpo que no funciones con un propósito vital, aun si observamos el detalle mas pequeño. “LA IGNORANCIA DEL PROPOSITO NO LO INVALIDA COMO TAL” Esta verdad se aplica, también, a la naturaleza. La humanidad descubrió, que cada animal y cada planta, fueron creados para equilibrar el ecosistema. Cualquier interferencia en su propósito afecta el resto del sistema. Además, es necesario advertir que Dios no creo cosa alguna solo para brindara belleza, aunque todo lo que creo sea, efectivamente, muy bello. La belleza es un producto derivado del diseño, en lugar de ser el propósito destinado para determinadas criaturas. De este modo, si Dios diseño los pelos que recubren las patas de las abejas para transportar el polen de una flor a la otra y coloco vello en las fosas nasales y cera en los oídos con un propósito especifico, entonces, debes saber que el Señor tiene un propósito especifico para tu vida. PRINCIPIO 3: NO TODO PROPOSITO ES CONOCIDO Nuestro mundo esta asediado con la ambición de poseer más, más y más. Sin embargo, tener algo no siempre es lo mas importante. Conocer la razón por la cual tu posees algo es mucho mas importante. Existen ocasiones en las cuales, sin embargo, se desconoce esta razón. Este hecho no significa que las cosa, evento o persona carezcan de propósito. La historia de un hombre llamado Jonás, demuestra lo que puede suceder cuando se desconoce el propósito. El libro de Jonás, describe de un propósito. El libro de Jonás, describe las aventuras de un profeta que no deseaba obedecer la orden de Dios. La suerte recayó sorbe Jonás, quien entonces, contesto: “Soy hebreo y temo al Señor, Dios del cielo, que hizo el mar y la tierra firme…” (Jonás 1:9). Mas tarde, conto que huía de Dios y les pidió que lo lanzaran al mar. El problema de los marineros no era la tormenta, sino el propósito desconocido de ella. Si sabían con anterioridad, que la tormenta era la manera de Dios para hablarle a Jonás, no desperdiciarían tanto tiempo intentando salvarse. Su falta de conocimiento no invalido el propósito de la tormenta; solo significaba que no poseían la misma información que Jonás. PRINCIPIO 4: CUANDO SE DESCONOCE EL PROPOSITO, EL MAL USO ES INEVITABLE El mal uso ocurre cuando no utilizamos algo de acuerdo con las intenciones de su creador. En otras palabras, si no conocemos el propósito de algo (o si eliges ignorarlo), no haces otra cosa que usarlo equivocadamente. No importa cuan buenas sean tus intenciones, todas estas se cancelan debido a tu ignorancia. La frase “mal uso” o “uso atípico”. O, en otras palabras, este hecho sucede cuando, aun conociendo el uso propio de algo, lo utilizas de una manera errática y desordenada. El desconocimiento del propósito conduce, además, hacia el “uso indebido” del objeto o entidad, que es una forma mas extrema de la mala utilización. Usar indebidamente algo significa que no entendiste el uso deseado. Aunque el producto tiene un propósito determinado, no lo comprendes y de esta manera, lo utilizas de un modo diferente de la idea proyectada por el creador cuando lo diseño y fabrico. Si no comprendes el propósito del dinero, lo utilizaras de manera equivocada. SI no sabes cual es el propósito de un empleo, harás una mala utilización de el. Por consiguiente, es muy importante que descubras el propósito de todo aquello, con lo cual tienes contacto o te refrenes de usar a esa persona u objeto hasta que adquieras el conocimiento de su naturaleza inminente. El NT nos cuenta la historia de un hombre llamado Simón que vivía en Samaria. Simón era un mago que aseguraba tener grandes poderes. Cuando Pedro y Juan llegaron a Samaria y predicaron el evangelio, este hombre creyó en el mensaje y se bautizo. Sin embargo, sentía envidia de los apóstoles puesto que realizaban grandes milagros. Cuando vio que ellos imponían las mano a los creyentes, a fin de recibir el Espíritu Santo, les ofreció dinero para obtener los mismos poderes. Pedro lo reprendió merecidamente , pues quería comprar los dones de Dios. Las Escrituras son claras en cuanto que los dones espirituales son dados para el beneficio del Cuerpo en su conjunto (Vea 1 Corintios 10:24; 12:7) PRINCIPIO 5: SI DESEAS CONOCER EL PROPOSITO DE ALGO, NO SE LO PREGUNTES “Una cosa o entidad creada jamás puede saber lo que había en la mente del creador cuando la planeo y construyo” Seria ridículo el hecho de pensar en preguntarle a un piano o a un equipo de música la razón de su existencia; también lo es formular las siguientes preguntas, durante mucho tiempo. “Dime , ¿qué sucede? Por que estas aquí? Probablemente y aunque tu amigo te responda, no obtengas la respuesta correcta, porque le formulaste la pregunta equivocada. Nunca descubrirás el propósito para ti, si preguntas a otra persona quien eres, porque los seres humanos y la creación en su conjunto, fuera de su creador, no pueden conocer su propósito. Tal vez, puedes encontrar un propósito que no es divino y pensar que, finalmente, estas en la senda correcta. La futilidad ( poca importancia o ninguna importancia de una cosa)de entender los propósitos divinos, se describe gráficamente en el encuentro entre Dios y Job en la ultima parte del libro de Job. Ese hombre era un adorador fiel del Señor, que perdió todo, cuando Dios le permitió al diablo que probara su fidelidad. 38:2¿Quién es ése que oscurece el consejo Con palabras sin sabiduría? 38:3 Ahora ciñe como varón tus lomos; Yo te preguntaré, y tú me contestarás. 38:4 ¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? Házmelo saber, si tienes inteligencia. 38:6 ¿Sobre qué están fundadas sus bases? ¿O quién puso su piedra angular, 38;18¿Has considerado tú hasta las anchuras de la tierra? Declara si sabes todo esto. 38:19 ¿Por dónde va el camino a la habitación de la luz, Y dónde está el lugar de las tinieblas, 38:33 ¿Supiste tú las ordenanzas de los cielos? ¿Dispondrás tú de su potestad en la tierra? 38:37 ¿Quién puso por cuenta los cielos con sabiduría? Y los odres de los cielos, ¿quién los hace inclinar, 40:1 Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor40:2 Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. PRINCIPIO 6: EL PROPOSITO SOLO SE ENCUENTRA EN LA MENTE DEL CREADOR …..Continúe mi búsqueda en una tienda de regalos. Luego de equivocarme cuatro o cinco veces, le pedí al vendedor que me acompañara y que caminara junto a mi por aquel negocio. A medida que observábamos los diferentes objetos interesantes allí exhibidos, le preguntaba constantemente: “ ¿Qué es esto? ¿Qué es aquello? ¿Para que se usa?. El mismo principio se aplica a cualquier producto. Si deseas conocer el objetivo final de un producto, debes preguntárselo al fabricante o representante autorizado. El producto, en si mismo, no puede decírtelo. Esta es la razón por la cual la mayoría de los fabricantes colocan una etiqueta, en algún lugar de sus productos o proveen información pertinente en el manual de uso. Desean ensenarte sobre el producto y te dan la oportunidad de contactarse con ellos, en caso de tener alguna pregunta sobe su uso, propósito, operación o mantenimiento. Saben que brindaran esta información, a fin de que el producto cumpla con el propósito para el cual fue construido. PRINCIPIO 7: EL PROPOSITO ES LA CLAVE PARA EL ÉXITO DEL PRODUCTO Los fabricantes siempre desean que el consumidor se siente satisfecho con su producto. Las etiquetas y los manuales de instrucciones, son una manera de decirte lo que tenían en mente cuando crearon el producto, a fin de que puedas compararlo con las expectativas del comprador no coinciden, entonces no existe posibilidad de que el producto pueda satisfacer los deseos del consumidor los objetivos del fabricante. Del mismo modo, el propósito destinado para ti es clave en tu vida. Te dicta lo que debes hacer y la razón para ello. Revela la razón detrás de las experiencias de vida; así como también, exige y brinda una visión para el futuro. Además , te da una perspectiva que ofrece sentido y trascendencia para tu vida. Sin propósito, la vida parece ser fortuita y llena de resignación ante la adversidad y los eventos en ella adquieren mas importancia que las razones por lo cual suceden. Básicamente, no experimentaras la paz y la realización personal verdadera hasta que ejecutes el propósito para el cual naciste.