118 CUNE BARRY LYNDON ¿ÉPOCA PASADA O SOCIEDAD ACTUAL? Mario A. Carmen*lia La sociedad ausente Con Barry Lyndon. película basada en una novela de Thackeray, Stanley Kubrick parece operar una doble inversión en relación a sus principales obras anteriores, tiran creador de escenografías y ambientes, nos había acostumbrado a la profecía y a la indagación de mundos futuros, imaginando épocas o extrapolando rasgos parciales de nuestra sociedad. En tales creaciones, 2.001, Odisea del Espacio o La Naranja Mecánica, por citar sólo dos. la relación hotnbre-técnica-naturaleza, la lucha por la vida, la dinámica contradictoria del progreso, los instintos de violencia y agresividad, eran presentados en una suerte de vacío social, de sociedad sin historia. Podía el espectador imaginarse en el ojo desorbitado de la última escena de 2.001 los efectos y costos sociales del progreso, o extrapolar la escena del mendigo golpeado en La Naranja Mecánica a las relaciones entre grupos sociales. Pero las obras del director no introducían centralmente la mediación históricosocial en la tensión hombre-ambiente, Fn Barry Lyndon. en cambio. Kubrick hurga el pasado y nos remonta a la Inglaterra de |orge III. Por olio lado, explora fundamentalmente un mundo social, el de la nobleza y "gente de condición" de aquella época. Parece que esta vez la sociedad es el objeto de su gran creación cinematográfica. bu sorprendente capacidad de crear o recrear ambientes, de aprovechar el máximo de avances técnicos en la obtención de ios efectos .sensoriales deseados, de combinar poesía, plástica y música para desplegar un mundo completo ame el espectador llega aquí a una muy alta expresión. Todo ello ha sido ya suficientemente descrito y analizado. Por eso vamos a centrar este comen tario en loa aspectos sociales de la película, que para muchos han pasado desapercibidos. Pero el mundo social a que se nos introduce esta vez parece también flotar en un vacío. Personajes fatuos y carentes de interioridaJ. sentimientos persona les que se transan como mercancía. Pompa, lujo. Mundo de juego y mentiras en el que los maquillajes ocultan las personas y en el que la "existencia transcurre en el mareo de alfombras y cuadros". Ausencia de trabajo, ausencia de historia y de proyectos sociales. Mundo en el que el libreto esiá escrito de una vez para siempre, en el que el destino es inmutable y en el que los persunnjes aparecen como marionetas de una comedia vacía, intrascendente. Y sin embargo, es la época en que se gestan graneles cambios en Europa y en que se realiza la independencia de las colonias inglesas de América del Norte. Son los albores de la revolución industrial con las profundas transformaciones tanto en el medio físico como en las relaciones entre los hombres. La Revolución Francesa está a el porlas. LOS viejos adores sociales son cuestionados por nuevos grupos que emergen. Pero los nobles no lo perciben y no saben hasta que punto los pilares en los cuales de&cansd su vida están a punto de derrumbarse. Es, precisamente, la ausencia de esta referencia a un mundo en gestación, o mejor, la "presencia ausente" de este mundo, la que le da el carácter banal, vacío, carente de trascendencia, tü medio social en que se moverá Barry Lyndon. lis esta distancia la que configura su carácter deue. más allá de la grandeza aparente con que se recubre. "Hablan los señores de su edad dorada, Pero recordad a los siervos y labriegos que ellos mandaban, lira con esos tristes •"lientos con los que hacían sus güeñas y hazañas criminales". La voz del narrador, siempre crítica e irónica, nos recuerda estíi sociedad ausente. Ni héroe ni antihéroe: el destino del arribista Este es el mundo en que le loca vivir a Redmond Barry, joven irlandés de buena familia. Ni héroe ni antihéroe, su destino es la aventura. Sus sentimientos sanos son ahogados muy temprano en su juventud. Primero por -ii prima de quien Redmond está enamorado y que juega con él y lo humilla públicamentf Luego por sus tíos y primos que ven en el matrimonio de la joven pretendida con un "capitán 3 y hombre de hacienda" la oportunidad de salvar una difícil situación económica y que engañan al ¡oven Redmond al lograr expulsarlo del lugar bajo el pretexto de haber matado en duelo a! capitán inglés. L£I robo de su pequeño capital por parte de un asaltante de camine otras tantas experiencias que se resumen en "cinco años en el tito" terminan de disipar las ideas románticas ele Redmond sobre la vida y el amor. De ahí para adelante, sus movimientos serán los del oportunista y arribista sin principios que busca 119 Condenado por una sociedad sin futuro conquistar un puesto en la cumbre de La esfera social y que para ello no se detiene ante nada. Pero la Facilidad con que gana riqueza y posición es equivalente a hi facultad con que las pierde. Su destino final, anunciado sin piedad por el narrador, será el 'morir pobre, solo y sin hijos". Ejército, juego, gran señorío y relaciones personales A través de las aventuras de Redmond Barry, se nos muestran algunas de las instituciones de la época. En primer lugar aparecerá el Ejército. Obsesionados con la idea de la guerra y de la agresión por parte de Francia, los nobles y "señores de condición" levantan [cálmente ejércitos para lo cual recluían a jóvenes libres que "quieran alcanzar la nobleza por la vía de las armas". La sociedad "vibra al son de los aires marciales", aun cuando la mayor parte sólo vivirá los trágicos efectos de las guerras. Scrán "las casacas y los aires bravucones" propios del Ejército, los que llenarán de envidia el corazón del joven Barry y lo llevarán a enrolarse. Pero una cosa "es soñar con la guerra desde un lejano sillón y otra cosa es vivir sus dramas". En el Ejército —tanlo en el inglés corno en el prusiano aliado en el que cae luego de intentar desertar— Barry conocerá la miseria humana, la mezquindad, el escaso valor que se le otorga a la vida. La bravuconería vacía y la corrupción. Se hará ahí un "experto en la ciencia de la mala con ducta". Reconocido por su valentía pero también por su carencia tic principios y por ver "un mal ejemplo para el resto" será destinado por las mismas autoridades militares, en virtud de estos "méritos", a tareas de onaje. Su capacidad de mentir y engañar es positivamente evaluada. Pero, al raido por los s de gran señor del Chevalier de Balivari a quien tiene que vigilar y denunciar, y desilusionado ya de las posibilidades de alcanzar altas posiciones a través del oficio de las armas, el joven espía engañará a MI vez a sus empleadores y se asociará a! Chevalier. [unto con él se introducirá en el mundo del juego y hará de el su profesión. En esa condición será iicogido en todas las corles europeas por una nobleza ociosa que dilapida así su riqueza y admira a los maestros de ese iirte. L'l juego es el riesgo, y es también la especulación y la trampa. Lo que no pudo obtener a través del Ejército lo obtiene Barry a través de su nueva profesión, pero será siempre la "habilidad con que maneja la espada lo que mantiene la solidez de la empresa". El acercamiento a las altas esferas sociales es siempre precario, las roza, pero no logra consolidarse en ellas. Y es por eso que Redmond Barry buscará estabilizar su relación con el mundo a que aspira. Lo que no pudo el Ejército, lo que tangenciabnente logró el juego, lo conseguirá Barry a través del malrimonio con tina noble, la Condesa Lyndon, dueña de una cuantiosa fortuna. El rol tendrá su esposa en su vida, nos dirá el narrador, es el mismo "que icndnín los cuadros y alfombras" v desde el inicio 15arry aprovechará su nueva posición para una fácil vida Llena de lujos c infidelidades condenando a Lady Lyndon al aislamiento y la melancolía. Barry Lyndon —desde ahora— desempeiui con la misma facilidad que el de soldado y jugador, el rol de gran señOF, perú en la preca ria condición de irlandés y sin poseer título propio de nobleza. Para eilo, fíarry debe jugar el juego del mundo social que lo rodea: comprar tierras y obras de arte a muchas veces su valor real, agasajar en grandes fiestas ¡i los nobles que puedan obtener el favor del rey, sobornar a los más til Los miembros de la Corle. Pero ello será en vano. Sus pésimas relaciones con su hijastro. Lord Bullingdon, que lo desprecia tanto por sus condiciones humanas —evidenciadas especialmente en el trato que Barry le da 11 Lady Lyndon, madre de IJullingdon— como por su posición social de "irlandés oportunista", le harán dar un mal paso y perder rápidamente el favor social que se le dispensaba. El enfrentamiemo final en duelo con su hijastro, en el que Barry quedará inválido, es no sólo el enfrentamiento de dos odios personales, sino también el encuentro enlre dos mundos sociales y la revancha que loma una noble/..i "cobarde y débil" contra una dase que se ha ¡do apoderando poco a poco de su riqueza y su dominio y que busca compartir su goce y señorío. Ejército, juego y alta posición social, tres esferas de la época descritas en forma descarnada j cuyas interrclaciones son evidentes. El mundo del trabajo ausente las revela en su vaciedad. Sin objetivo trascendente, hay sólo auloreferencia y uutodestrucción: todo ello con "estilo", dentro de reglas precisas, y sin bajar o subir el tono, en el mareo de una grandeza apárenle. ¿Qué queda de las relacionepersonales entre los seres humanos? Tal como se nos presentan, no hay sentimientos profundos. El sentimiento religioso aparece encamado en el ambiguo personaje del nitor de la familia Lyndon. El representa a la Iglesia Anglicana en esa sociedad, al lado de los señores poderosos, cuidando de la interferencia de ele(Pasa al frente de la pág. i20) CINE (de la pág. 119) memos L'\;r.ii ¡guardandu .. ¿libio equilibrio terrenal y •• ciendo el consuelo del más allá .. uando sobrevienen drarn la muerte. 1.1 amor o el m; muniu tienen su precio en rí< v\\ o posición. Fragilidad de Li^ calores o relación utln ñor la madre de lí; i de lu modo i 1L.. i : i. - • • ' • • • de l i . o .i tu muerte tu hija queda .i merced de tu li La amistud lidaridad tiesu precio > su ; ii - liniii. -.ni d i í l i n i is .i las re] las cosus. Pareciera que el sentimiento de Redmond Barry hacin su hijo fuera u . pción LI lev general. N i' sin eml . rilo pji. he-.¡.•;- n¡irc¡?¡ tieo. de ¡L ••iu v i n c u l u c i t j n a una niela r de la entre .: la le> del i I urnuidu. de que tienen riquezu o .1 auloproyeetión. L|III •H|VI1\ ;;i!i:!:,il cii.'m;ii E-ILI II11 Ll pt n la • 1 . mu un ' Epilogo de marionel ualquiera sea 1¡ I l-! I pi dutuile •• mundo distante de KKUI I.I narro hahUí ck1 la tuiiliilaü del mundo ;. lescrito. ' I os p que balli eroii \ lujhi ¿i pobres, lierniüi-os u k.\'-. buenos . malo>, son h Cuando LUÍ mund< :¡ • • huniíu ai pii - len -u apn- impuesto los íielore sonnji • • S-'ién condena i él. A ii .;><-•- de la magnífica c mi pla-cable pinLuru de un pasada Kubrick WÍY.- habí.I tam bien <!•-• un;i épi>ja y una dad actuales.