P E R I Ó D I C O D E L P A R T I D O D E L T R A B A J O D E C O L O M B I A - PTC (moirista) Nº 15 Director: Jorge Santos Núñez $1.000 Bogotá, febrero-marzo 2003 Rechazo del país nacional al referendo 12 de marzo Jornada Nacional de protesta P . 13 ÁG Nace el PTC Entrevista con Marcelo Torres PÁG. 10 Contra la privatización Telecom P . 7 Ecopetrol P . 9 EmCali P . 14 EDT-Barranquilla P ÁG ¡La abstención a la ofensiva! Ver Editorial. Pág. 2 ÁG ÁG ÁG. 15 Reforma laboral Más mano de obra barata P . 6 ÁG El ajuste de Uribe Más impuestos y pobreza por orden del FMI P . 8 ÁG Historia viva Homenaje a Alfredo Iriarte PÁG. 16 América Latina Chávez 2 - EU. 0 PÁG. 18 Marcelo Torres, Secretario General del PTC, cuando intervenía durante la realización del multitudinario acto de lanzamiento de la Campaña Nacional de Abstención al Referendo efectuado el 7 de febrero en el Centro de Convenciones de Bogotá, y organizado por las centrales obreras, los partidos políticos y organizaciones sociales opuestos al proyecto uribista. Caluroso respaldo popular a campaña de firmas pro e-mail:bagatelamoir@hotmail.com WWW:labagatelamoir.org EL PLANETA RECHAZA GUERRA CONTRA IRAK Ver Págs. 17 y 20 2 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 Editorial La campaña de las centrales obreras, partidos políticos y organizaciones contra el proyecto plebiscitario de Uribe Abstención vs. Referendo A l referendo le salió al paso su propio fantasma, la abstención. No cabe duda de que esta se ha abierto camino y configura en las actuales circunstancias un fenómeno político excepcional. Algo muy distinto de esa rutinaria abstención que gravita como un lastre sobre el desarrollo de la conciencia de nuestro pueblo, cuyos rasgos sobresalientes son la abulia política y el atraso ideológico y el resultado es la ineficacia total de tal abstencionismo en las luchas sociales y políticas. La abstención surgida frente al referendo del gobierno de Uribe no tiene parangón en el más de medio siglo último de la historia del país. En Colombia no sucedía nada igual desde que los liberales, perseguidos a sangre y fuego por el gobierno de Ospina Pérez, dieron en adoptar la decisión de abstenerse frente a aquellas singularísimas elecciones presidenciales en las cuales no hubo sino un candidato, Laureano Gómez, el obvio ganador. Ha marcado un hito en los debates públicos recientes, tiene hasta voceros y partidarios de muchas campanillas del añejo establecimiento y, sobre todo, fundió en un consenso vivificador al conjunto del movimiento obrero. Como fuere, puede anticiparse que cualquiera que sea el sinuoso curso de la prueba plebiscitaria, habrá un pulso de fondo. Y este no será entre el Sí y el No sino entre el esfuerzo de la administración Uribe por ungir su período con los sacros óleos de la reelección, que es de lo que se trata, y la brava marejada abstencionista, principal músculo del descontento obrero y popular que frentea, indignada, la pretensión, entre otros varios exabruptos, de que sus contingentes aprueben la congelación bienal de sus propios ingresos salariales. Por lo pronto, la liza ha quedado entablada formalmente con el vistoso lanzamiento el pasado 7 de febrero de la campaña por la abstención activa de las centrales obreras, los partidos políticos y las organizaciones sociales contrarias al referendo. Que fue antecedido, como buen augurio, del pronunciamiento del Consejo Nacional Electoral en defensa de la igualdad de derechos de la abstención respecto del voto positivo o negativo. Colaboracionismo y oposición frente al proyecto uribista La consulta propuesta por Uribe Vélez comenzó como una cruzada contra la corrupción pero por el camino se trocó en un refuerzo mayúsculo del ajuste fiscal fondo- monetarista. En efecto, a primeros de septiembre del año pasado, el apremio del FMI sobre el gobierno de Uribe y su equipo económico llevaron al mismo a disponer la inclusión de un fuerte complemento al ajuste fiscal en el proyecto del referendo. Se trataba esencialmente de otro mandoble contra los ingresos de los asalariados, de nuevos pasos de la privatización del Estado, de la supresión de más entidades públicas y por consiguiente de más despidos masivos. Podía darse por supuesto que el grueso de los servidores del sector público, los más afectados, revirarían sin falta. Y si a eso llegaba a sumársele una eventual gresca con la «clase política» por el empeño presidencial de incluir la revocatoria del Congreso en el referendo, no era descartable que se desatase una temprana crisis política que le complicara las cosas al presidente Uribe; recuérdese que el descenso en picada del gobierno Pastrana estuvo marcado precisamente por otra muy frustrada intentona de referendo. De modo que la inicial temeridad presidencial fue dando paso al más pragmático proceder de archivar, por lo pronto, las amenazas revocatorias para concentrarse en lo principal: cumplir las exigencias del FMI en punto al ajuste fiscal más draconiano de que tenga noticia el país. Sobre todo si se repara que, en fin de cuentas, las castigadas filas de los caciques políticos tradicionales, especialmente de los liberales, empezando por su jefe, Serpa, no sólo habían optado por la colaboración remilgona con el nuevo gobierno sino que en su gran mayoría venían aprobando las últimas reformas neoliberales y se mostraban dispuestos a aprobar el referendo, incluidos los recortes del gasto. Así, durante la segunda semana del mismo septiembre del año anterior se selló aquel ignominioso toma y daca: a cambio de conservar sus curules por los cuatro años del período congresional, las mayorías del liberalismo, a rastras del uribismo, con conocidas excepciones, y la negativa de los independientes, le aprobaron al gobierno su proyecto referendista. El remate de la parodia lo puso la aceptación por el ex candidato presidencial liberal de la colonial sinecura en la OEA. En complemento al ajuste fiscal del FMI A partir de su vigencia, el referendo dispone la congelación por dos años del gasto público de funcionamiento, incluidos los salarios y pensiones superiores a 2 salarios mínimos. Prolonga por otros dos años, 2005 y 2006, dicha congelación a los salarios y a las pensiones de los de servidores públicos de más de 25 salarios mínimos. Arremete a fondo en materia de pensiones: salvo poquísimas excepciones, fija la edad mínima de jubilación en 55 años y la fecha de supresión de la vigencia de los regímenes pensionales exceptuados, especiales y los «provenientes de normas y acuerdos entre nacionales de cualquier naturaleza», el 31 de diciembre de 2007. Se establece que el régimen de transición al respecto será reglamentado por la ley del Sistema General de Pensiones, y lo que es peor, elimina la convención colectiva en materia pensional. También con el referendo, el gobierno quiere suprimir las contralorías territoriales, que podrán emplear apoyo técnico de empresas privadas, y las personerías municipales o distritales, y trasladar sus funciones a otras entidades públicas. Se acelera la regresiva tendencia a la privatización y al desmantelamiento de las entidades y funciones útiles del Estado al debilitar la del control fiscal en el nivel territorial, al menoscabar la defensa del interés público y ciudadano, y en cuanto se abre la puerta al control de la empresa privada sobre la Contraloría. Se echa mano del demagógico argumento habitual del neoliberalismo para justificar privatizaciones: que el producto de la venta, en este caso el del ahorro logrado, se destinará a la inversión social (saneamiento básico y educación). De muy cuestionable eficacia, dado que será a costa de la supresión de la vigilancia territorial del gasto público, y sólo con lo que quede después de canceladas las erogaciones laborales, prestacionales y pensionales ocasionadas por la supresión de contralorías y personerías. Todos estos puntos del referendo buscan fuertes reducciones en el gasto público. Fueron agregados por el gobierno en clarísimo cumplimiento del ajuste fiscal prescrito por el FMI y prorrogado «autónomamente» por la carta de intención del gobierno de Álvaro Uribe a dicha agencia financiera. En síntesis, el referendo complementa las medidas que el FMI le fijó al gobierno en el reciente acuerdo stand by de fines del año pasado, que incluyen la reforma tributaria, la supresión de los regímenes especiales de pensiones, el ajuste financiero del ISS en salud, el remate de la privatización de la banca estatal y la reforma de la Ley sobre contratación pública, amén de las metas en materia de reducción del déficit fiscal, inflación y nivel de reservas internacionales. El único objetivo es que el Estado colombiano pague cumplidamente los intereses y amortizaciones de la deuda externa, suprema norma rectora de la política económica oficial bajo los gobiernos neoliberales, especialmente del actual, sin importar que la economía se termine de ir al diablo ni que el nivel de vida de las mayorías se hunda todavía más. Complementar el ajuste de las finanzas públicas mediante el referendo para satisfacer a los acreedores extranjeros, no sólo materializa otro golpe al nivel de vida de la población trabajadora sino que acentúa varios de los factores de la recesión: la baja de la capacidad adquisitiva de los asalariados, el despido masivo de los servidores públicos y una mayor privatización del Estado. Contra el Congreso y la democracia representativa Entre sus puntos políticos, el referendo plantea la reducción del Senado a 83 miembros, 78 por circunscripción nacional más 2 voceros indígenas y 3 representantes de las minorías políticas. Para los escaños elegibles por circunscripción nacional, establecería el llamado umbral, que en este caso sería del 2% de la votación de Senado, lo que significa que solamente se tienen en cuenta las listas que lo superen, y se asignan las curules, incluidas las de los voceros indígenas, mediante la denominada cifra repartidora. Para la elección de los miembros de la Cámara de Representantes el umbral sería el 50% del cociente y las curules también se asignarían por cifra repartidora; si ninguna lista superara el umbral, todas las curules deberán obtenerse mediante la cifra repartidora. Además, cuatro escaños corresponderían a circunscripciones especiales: dos para negritudes, una indígena, y una de residentes en el exterior. El mecanismo que se aplicaría para elegir la Cámara de Representantes se hace extensivo a Asambleas, Concejos y Juntas Administradoras. La reducción del Congreso no resiste el menor análisis: en muchos países de población mayor, similar o menor que la de Colombia el parlamento tiene muchos más integrantes. Francia, Alemania, Italia, Japón y España tienen todos un número de conPasa a la pág. siguiente PERIÓDICO DEL PARTIDO DEL TRABAJO DE COLOMBIA (MOIRISTA) REGISTRO DE I. C. 246339 DE RES. 36138 DE 09/31/2001 PRESIDENTE DEL CONSEJO EDITORIAL MARCELO TORRES DIRECTOR: JORGE SANTOS NÚÑEZ COMITÉ DE REDACCIÓN Redacción, Jorge E Charry; Estilo, Inés Mejía; Historia Viva, Carlos Zamora; Culturales, Pedro Pablo Rojas L; Fotografía, Marco A González; Internacionales, Edmundo Zárate; Económicas, Galileo Gámez y Silvio Cantor. Edición, César Tovar de León. GERENTE: ALBERTO HERRERA ESGUERRA e-mail: bagatelamoir@hotmail.com www: labagatelamoir.org Bogotá, Colombia 3 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 Viene de la pág. anterior gresistas superior a los 600; Inglaterra sola tiene 1.873. Inclusive Argentina, cuya población es menor a la nuestra, tiene 329 parlamentarios, contra los 268 que tiene Colombia y que el gobierno Uribe quiere reducir todavía más. El engendro referendista busca a todas luces un debilitamiento sustancial de la maltrecha democracia política colombiana. Mas la mengua proyectada no es sólo cuantitativa sino cualitativa. El establecimiento de un umbral del 2% como indispensable para obtener un escaño de Senado suprime el más democrático criterio: el cociente electoral proporcional, tradición que proviene de la Revolución Francesa. Al implicar el mencionado umbral una votación mucho mayor para obtener un escaño (200.000 votos si el total llega a 10’000.000) y al establecerse el procedimiento de la cifra repartidora para repartir los escaños entre la votación de las listas que superen dicho umbral, se implantaría un sistema electoral dominado por listas de grandes electores. Que, en la Colombia de hoy, no serían otros, en su casi totalidad, que los portavoces de las reformas neoliberales dictadas por Washington, a quienes los sectores más plutocráticos del país les suministrarían los multimillonarios recursos necesarios a las campañas capaces de recoger tal caudal de votación. Tan regresiva reforma electoral transformaría, para mal, el actual mapa político de todas las corporaciones públicas; por ejemplo, la composición del Senado, integrada en su inmensa mayoría por miembros de la capa política tradicional elegidos con un residuo menor a los 50 mil votos, cambiaría sustancialmente. Ello tenderá a barrer de ambas Cámaras al grueso de los voceros actuales de los partidos tradicionales y a favorecer abiertamente a los yuppies, tecnócratas de la Escuela de Chicago y altos ex funcionarios de los gobiernos neoliberales. La pugna que durante más de diez años ha librado infructuosamente la capa neoliberal por desplazar a los políticos tradicionales del Congreso, escenario por excelencia de la política colombiana, y por apoderarse del mismo, se coronaría con éxito. Podría pensarse, a primera vista, que el país ganaría con ello y que lo tendría muy merecido la clase política por su fundado desprestigio, su pusilanimidad y su irrefrenable tendencia a la colaboración con el gobierno de turno. Pero nada más superficial y despistado. El reemplazo de los antiguos barones por la hordas neoliberales sólo reproducirá en escala mucho más ampliada la corrupción, la entrega del interés nacional y el carácter antipopular que anida en el parlamento. Cuando el agua se aclare y el país se percate de lo que se le vino encima, las «transformaciones» del referendo distarán mucho de poder registrarse como el gran avance. Simplemente, a la aplastante prevalencia de la casta neoliberal en el Ejecutivo se le agregará su control directo sobre el legislativo. Los politicastros de provincia serán reemplazados por la megacorrupción neoliberal, cuyo símbolo, el actual embajador en Washington, protagonista impune de los escándalos de Chambacú y Banpacífico, es hoy uno de los favoritos premiados por la administración Uribe. militar gringa en Colombia, como su desaforada insistencia en un despliegue militar invasor de Estados Unidos y de los países latinoamericanos en el conflicto interno colombiano, jamás traerán seguridad ni tranquilidad ciudadana pero sí desintegración territorial y esclavización foránea. Por supuesto, contra los partidos opuestos al gobierno y al modelo neoliberal, como a las minorías étnicas, se reservaron las peores invectivas. De entrada, con el umbral y la cifra repartidora se les excluye de la circunscripción nacional de Senado y se les erigen nuevos y mayúsculos escollos para acceder a los escaños de la Cámara. La demagógica circunscripción para minorías queda en suspenso, remitiéndose su reglamentación a una ley futura, pero queda abierta la antidemocrática opción de que sea decidida por el presidente. La supresión de las suplencias golpea sobre todo a las fuerzas minoritarias, mayormente cuando un cociente aumentado por el umbral y la cifra repartidora harían más necesarias que nunca las alianzas entre las minorías políticas para acceder a los cargos de representación. Como si fuera poco, para el reconocimiento legal, a los partidos se les exigirá que obtengan por lo menos el 2% de la votación de las elecciones de Congreso o el 5% de las presidenciales, lo que convertiría en inaccesibles, para las fuerzas minoritarias, las garantías y ventajas que les otorga ese reconocimiento. Como paliativo, se dice que la votación obtenida por las minorías políticas cuando logren elegir un vocero al Senado, en el marco de la circunscripción que una ley futura crearía para ellas, bastaría para que obtuviesen su personería jurídica, pero nadie sabe en qué términos sería establecida dicha circunscripción por el Congreso o, lo que sería peor, por el presidente. Como remate, un mal disimulado paso más en la carrera por la privatización del Estado se dará con la prohibición a los congresistas de participar en la administración del Congreso, la cual, so pretexto de combatir la corrupción parlamentaria, le abre la puerta a la entrega de la administración del Congreso a entidades privadas. En una palabra que, como consecuencia de las modificaciones al Congreso y las nuevas reglas electorales impuestas, las contradicciones políticas del país, en vez de sofocarse o amainar, se tornarán más enconadas. Y mientras ello se aclara, es muy previsible que el prestigio del gobierno, apuntalado diligentemente por los principales medios masivos de comunicación, no presente un deterioro apreciable y que el contexto dentro del cual se efectúe el referendo le continúe siendo favorable. En tales condiciones, es claro que la posición de votar No – empleable y útil en un marco de despertar de la opinión pública contra el gobierno–, agregaría votación para que el referendo alcanzara los 6.2 millones que requiere como mínimo el gobierno para que la consulta sea válida; por ello ha sido descartada como actitud de la mayorías nacionales políticamente activas. Lo justo y eficaz: la abstención La abstención no es únicamente la más justa posición frente al referendo sino la única eficaz. Buena parte del país, constituido principalmente por esa ancha clase media timorata que votó por Uribe, aún tardará un tiempo en establecer la conexión de causalidad entre el empeoramiento de la ruinosa situación económico-social y la política económica del actual gobierno. Y más aún para comprender que, a la postre, la complacencia de Uribe con la intromisión Cuando la propaganda pro referendo hace alharaca sobre la purificación de las costumbres políticas, la campaña abstencionista esgrime una evidencia incontrastable sobre el mastodóntico clientelismo practicado por el Ejecutivo: la pretensión de convertir a los gobernadores, alcaldes, diputados, concejales y ediles de todo el país en jefes de campaña del referendo oficial a través del expediente, cuyo carácter de soborno resulta inequívoco, de prorrogarles a todos el respectivo período. La propuesta del senador gobiernista Rafael Pardo, de que se vote durante varios días el referendo, es indicativa tanto de las dificultades que afronta la iniciativa plebiscitaria como de las aviesas intenciones a través de las cuales quiere fabricársele mayorías. En cambio, la tendencia a la abstención, de origen fundamentalmente económicosocial, cuenta con una base natural que es el movimiento obrero, el único sector organizado que hasta ahora cala crecientemente la naturaleza antipopular y antinacional de la administración Uribe. Que aún no aglutina la fuerza e influencia suficientes para arrastrar detrás suyo al resto de las clases y capas populares, incluida la clase media de marras. Pero que reúne ya el suficiente poder movilizador para presentar pelea, adelantar un formidable debate político y frustrar o emproblemar el objetivo gobiernista de prolongar, mediante la reelección, el período de Uribe apoyado en una aplastante votación pro referendo. Al impulso inicial de los trabajadores se suman, en buena hora, las posiciones que desde las filas de la democracia o ángulos diversos y aun opuestos a los del movimiento obrero, también abrazan la abstención. Es decir, que, entre las opciones posibles, desde la orilla del interés nacional y popular, la más justa, y la única cuya terrenalidad viene demostrándose, es la abstención. La abstención deslinda campos El incremento del terrorismo, factor de descomunal calibre en la situación nacional, gravita negativamente sobre la pugna entablada alrededor del referendo. Tanto el reciente atentado al Club El Nogal, como el de Neiva contra la población inerme, acarrearán sin duda resultados contraproducentes. El clima de zozobra y el repudio público –completamente justo y lógico– frente a los actos terroristas son aprovechados por el gobierno para acentuar su política de mano dura lo que afecta a las organizaciones de masas, las libertades públicas y a la oposición legal. Las resoluciones de condena al terrorismo en Colombia, expedidas tanto por la OEA como por la ONU a instancias del gobierno colombiano, propician la realización de las ruidosas exhortaciones que el presidente Uribe viene repitiendo a Estados Unidos y a los países del continente para que intervengan militarmente en el conflicto interno de Colombia. En el actual cuadro de violencia y conmoción, a Uribe se le facilita seguir fungiendo de cruzado y de salvador en tanto que los golpes oficiales contra el nivel de vida de las masas quieren opacarse tras una nube de pólvora. La campaña de abstención antirreferendo enfrenta ahora un infundio con el cual el gobierno pretende manipular a la opinión pública, el de que tal movilización se alinea en el bando de los alzados en armas. Una falsedad insostenibe; a la cual ya las centrales obreras y los partidos y organizaciones que promueven la abstención frente al referendo replicaron con un rotundo desmentido público: «condenamos el execrable atentado cometido contra las instalaciones del Club El Nogal el pasado 7 de febrero», para consignar enseguida la precisión capital de que «Tales acciones han contribuido a enturbiar el ya confuso panorama nacional y dificultan las batallas democráticas y patrióticas del pueblo colombiano. No hay causa, por noble que parezca, que justifique la utilización de estos métodos». La Central Unitaria de Trabajadores, a su turno, expresó: «No podemos aceptar que ninguna organización, acogiendo el terror como arma de lucha, pretenda atemorizar la opinión nacional para justificar lo injustificable». En reciente declaración, su presidente, Carlos Rodríguez, también reprobó las amenazas proferidas contra la vida de dirigentes políticos que promueven la abstención al referendo. Son avatares de la táctica obrera en medio del mar convulso y riesgoso de la situación colombiana. Que reafirma una orientación valerosa y salvadora: hoy, los obreros de Colombia ni requieren ni respaldan el terrorismo para adelantar sus propias luchas. Por ahora, lo positivo es que la bandera de la abstención fue izada con firmeza por la corriente masiva de los asalariados y sectores democráticos del país. 4 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 ABSTENCIÓN CONTRA EL REFERENDO Mesa directiva del acto de lanzamiento de la Gran Coalición Democrática por la Abstención Activa al referendo. U n aplauso unánime recibió Carlos Rodríguez cuando terminó de leer la “Proclama de la Abstención Activa contra el referendo” suscrita por las centrales obreras, partidos políticos y organizaciones sociales. Más de 3000 partidarios de la abstención al referendo confluyeron en un nutrido acto y se comprometieron a trabajar en conjunto para derrotar el proyecto uribista. El Centro de Convenciones de Bogotá fue insuficiente para albergar a los activos abstencionistas. Con mucho ímpetu despegó la campaña que llama a no votar por un referendo que más restricciones políticas, recortes y ajustes económicos traerá a los colombianos. “De lesivo contra el país entero, de atentado contra el nivel de vida de las masas, de complemento al ajuste fiscal ordenado por el FMI con las reformas laboral, pensional y tributaria”, calificó Marcelo Torres, Secretario General del naciente Partido del Trabajo de Colombia, al referendo. La tarima contaba con importantes figuras de la política nacional. En su intervención Luis Eduardo Garzón señaló que los parlamentarios del Polo Democrático se habían “comprometido por unanimidad con la Abstención Activa al referendo”. Lo acompañaron esa noche Carlos Gaviria, Samuel Moreno, Jaime Dussán, Venus Albeiro Silva, Luis Carlos Avellaneda, Gustavo Petro, Con acto del 7 de febrero arrancó campaña abstencionista Única opción patriótica y popular En corto tiempo la abstención al referendo se convirtió en la opción preferida por los colombianos Los parlamentarios uribistas piden retirarlo Wilson Borja y Alexánder López. También, estuvieron Gerardo Jumi, Germán Navas Talero, Piedad Córdoba, Jorge Robledo, Bernardo Hoyos, Ramón Elejalde, Francisco Pareja y Doris Patricia Niño. Los voceros de las centrales obreras, Míriam Luz Triana de la CGTD y Apecides Álviz de la CTC rechazaron la propuesta de la congelación de salarios, pensiones y regímenes especiales y la supresión de las contralorías territoriales y personerías municipales y anunciaron una dura batalla de todo el movimiento sindical contra la criatura uribista. De la dirección sindical nacional estuvieron entre otros Saúl Peña de Sintraiss, Aldo Cadena de la salud (Sindess), Rafael Baldovino de las telecomunicaciones (USTC), Rodolfo Gutiérrez de la USO, Jorge Guevara de Fecode, Fabio Hernández de Asonal Judicial y Margarita Ávila del Frente Común por la defensa de los Organismos de Control. Marcelo Torres representó al Partido del Trabajo de Colombia, Orlando Fals Borda al Frente Social y Político, Jaime Caicedo al PC, Horacio Duque a la Fundación Diálogo y Convivencia y Patricia Ariza a los Artistas por la paz. Por los liberales con la Abstención subieron a la mesa Juan Manuel López Caballero y el periodista Ramón Jimeno; también estuvo el ex concejal Bruno Díaz. rales y por la paz. Con gran entusiasmo salieron los asistentes a sepultar el referendo en medio del repudio y el boicot del pueblo. Se realizaron actos simultáneos en 30 ciudades más. La ola abstencionista arropa a toda la nación. Participaron además la Alianza Social Indígena, Partido Visionario, Partido Comunitario Opción Siete, Moir, UD, Unámonos, PSOC, Nueva Opción y otros movimientos, así como organizaciones de jóvenes, mujeres, afro-descendientes, padres de familia, usuarios de los servicios públicos, agrarias, cultu- Origen de la Abstención Activa Desde su propuesta inicial el proyecto de referendo fue objeto de severas críticas y al gobierno le tocó tragarse la revocatoria del Congreso para cumplirle al ajuste del FMI y lograr su aprobación. El comité coordinador por la Abstención se formalizó en diciembre, pero fue en el Foro que organizó el Consejo Nacional Electoral en enero, buscando argumentos para definir las reglas de la campaña, que debutaron los abstencionistas. Vale la pena recordar algunas opiniones sobre el referendo expresadas por importantes protagonistas del evento y publicadas en boletín de prensa de la campaña abstencionista: Juan Camilo Restrepo lo definió como “gran manipulación a la opinión pública...y gran improvisación, ...el 5 de agosto no estaba redactado”, y calculó en 50% su contenido para el ajuste económico. Ramiro Bejarano demostró cómo la ampliación del período a los alcaldes es producto de una “reyerta partidista”. Remató: “ahora se ve cuánto improvisó el gobierno”. Jaime Castro dijo que “la abstención es un nuevo acto en la vida pública, válido legalmente, útil para hacer oposición y que ha adquirido una forma de participar activa, militante y beligerante, pacífica y democrática”. Aparecen entre otros, Aldo Cadena, presidente de Sindess, Juan Manuel López Caballero y Ramón Jimeno, de los Liberales por la Abstención. Pasa a la pág. siguiente 5 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 De las centrales obreras, los partidos políticos y las organizaciones sociales contra el referendo ante el atentado al Club El Nogal La abstención contra el referendo rechaza y condena los aleves atentados contra la población colombiana L as centrales obreras, las fuerzas políticas, los sectores sociales y populares, las organizaciones juveniles, campesinas, periodistas independientes, comunales y de mujeres que venimos agitando la bandera de la abstención frente al referendo presentado por el Gobierno, condenamos el execrable atentado cometido contra las instalaciones del Club El Nogal, el pasado 7 de febrero. Tales acciones han contribuido a enturbiar el ya confuso panorama nacional y dificultan las batallas democráticas y patrióticas del pueblo colombiano. No hay causa, por noble que parezca, que justifique la utilización de estos métodos. Quienes hacemos parte de la Gran Coalición Democrática por la Abstención Activa contra el Referendo expresamos nuestro total rechazo al aleve atentado y reiteramos nuestra firme vocación democrática y nuestra determinación de continuar trabajando por el establecimiento de un clima de controversia civilizada, en el que las naturales contradicciones de la sociedad colombiana se resuelvan sin que se acuda al chantaje, la extorsión, el secuestro, el atentado personal y las masacres. De otro lado, censuramos la tendenciosa afirmación, insinuada por algunos medios de comunicación, acerca del supuesto nexo o relación entre nuestra campaña de Abstención y los repudiables hechos del Club El Nogal; procedimientos estos que tanto daño le han causado a las justas luchas patrióticas del pueblo colombiano, en procura de su independencia y bienestar. Continuaremos impulsando la campaña de abstención frente al referendo y exigimos al Gobierno plenas garantías para el ejercicio del derecho de expresar nuestras opiniones, sin ser víctimas de la calumnia y el macartismo. Comisión Nacional por la Abstención Activa contra el Referendo CTC, CUT, CGTD, CPC, Partidos políticos Organizaciones sociales Apecides Álviz Fernández Los trabajadores de las gobernaciones también se unieron a la campaña de Abstención al referendo y estuvieron presentes en el foro organizado por el Consejo Nacional Electoral. Viene de la pág. anterior Carlos Rodríguez a nombre del Comité Nacional por la Abstención lo calificó de “fiscalista... con contenidos impuestos por el FMI” y dijo: “la abstención es un acto lleno de decoro y dignidad frente a quienes entregan los intereses de la nación”. Alfonso Gómez Méndez lo llamó “propuesta engañosa” y señaló que la prórroga del periodo de alcaldes es la mayor politiquería y corrupción. Rafael Pardo, el vocero de Uribe Vélez, solo atinó a pedir profun- dos cambios en la mecánica de la votación, que fuera “automática o electrónica”; que se pudiera votar durante “varios” días y que se publicara y repartiera el formulario del referendo, “varios” días antes de la votación. Algo así como el estudiante que tiene de antemano los puntos del examen y lo lleva resuelto el día de la evaluación. El comité coordinador adoptó el nombre de “Gran Coalición Democrática por la Abstención Activa contra el referendo”, que fue dada a conocer el 5 de febrero en En la rueda de prensa del 5 de febrero en el hotel Bacatá de Bogotá, el Presidente de la CUT, Carlos Rodríguez. Lo acompaña, entre otros dirigentes políticos y sindicales, Marcelo Torres. Boicot del pueblo al referendo uribista Intervención de Marcelo Torres, Secretario General del PTC, en el acto de lanzamiento de la campaña de abstención al referendo realizado en el Centro de Convenciones de Bogotá el 7 de febrero. “ El fantasma de la abstención significativa, actuante y políticamente eficaz, desterrado de la política colombiana desde hace más de cincuenta años, insepulto como se hallaba, ha irrumpido de nuevo en el escenario de las contiendas colombianas. No emergía desde que, en 1949, el liberalismo perseguido a sangre y fuego tuvo que declarar la abstención para las elecciones presidenciales de entonces; hoy, aquí, el espectro reaparece, redivivo, reencarnado en esta movilización nacional de masas, contra el referendo uribista. Y en el fondo, alzado como sepulturero frente al gobierno de Álvaro Uribe Vélez, el más dócil de América ante los planes de anexión económica de Estados Unidos sobre el continente, y el más entusiasta propagandista y colaborador de la intromisión militar gringa en nuestro conflicto interno. una rueda de prensa. Los voceros del uribismo salieron en falso con un sartal de ataques inocuos que se derrumbaron. El CNE reconoció la Abstención como una opción política válida y viable. Del gobierno solo quedó el destemplado cacareo de Santos Calderón que terminó llamando “gallinas” a los abstencionistas. Los titubeantes uribistas encabezados por Vargas Lleras hoy piden retirar el referendo. No se atreven a enfrentar el debate abierto y prometen, eso sí, aprobar todos los puntos a puerta cerrada en el Congreso. De lesivo contra el país entero, de atentado contra el nivel de vida de las masas, de complemento al ajuste fiscal ordenado por el FMI con las reformas laboral, pensional y tributaria, de intentona burda para prorrogar con la reelección el período de Uribe Vélez, así puede calificarse el engendro referendista. A todos sus objetivos, el pueblo le propinará una contundente e incontestable derrota, como ya sucedió con el intento de negarle al país su derecho a la abstención. Ante la pretensión de que los colombianos aprobemos la congelación de salarios, pensiones y regímenes especiales y la supresión de las contralorías territoriales y las personerías municipales y distritales; ante la reducción del Congreso y las implantaciones regresivas del umbral y la cifra repartidora que propiciarían la elitización y la oligarquización de corte neoliberal del Senado y de la Cámara como de las demás corporaciones legislativas del país. Y sobre todo, ante la descomunal maniobra de clientelismo oficial, que quiere convertir en sus jefes de campaña a gobernadores, alcaldes, diputados, concejales y ediles, tenemos que elevar a su punto más alto la indignación pública y la movilización popular. Tiene esta campaña de abstención formalmente inaugurada hoy, que concentra la fuerza de las centrales obreras, los partidos políticos y las organizaciones sociales y de masas, el trascendental cometido de sepultar el referendo uribista en medio del repudio y el boicot del pueblo.” Avances de la abstención √ Después de algunas reuniones con Carlos Rodriguez, coordi- nador de la Abstención al referendo, 36 parlamentarios liberales de la corriente socialdemócrata así como miembros de la dirección de ese partido y dirigentes regionales han adherido a esta pujante coalición. En buena hora y ante las vacilaciones de los liberales uribistas este nuevo contingente refuerza la Gran Coalición por la Abstención al referendo. √ La campaña por la Abstención al referendo ha programado para el 7 de marzo la realización de un gran seminario en Bogotá para la difusión de su posición y la consolidación del equipo nacional. √ Asimismo entre el 10 y 24 de marzo se realizarán seminarios en las 32 capitales de departamento y en cada una de las 20 localidades en que se divide Bogotá. 6 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 La reforma laboral del FMI Mano de obra más barata Por Fabio Arias Segundo Vicepresidente de la CUT. Miembro del Comité Ejecutivo del PTC “ Sin mano de obra barata, no hay neo liberalismo”, así definió esta política Francisco Mosquera, el fundador del MOIR, para caracterizar esta época de recolonización gringa. La mano de obra barata, el altísimo desempleo y el desplazamiento y la quiebra de la producción nacional son condiciones que requieren el gran capital imperialista y, en el futuro inmediato, la imposición del ALCA. La CUT condena acto terrorista El atentado terrorista al Club El Nogal realizado el día 7 de febrero del año en curso, que dejó más de 30 muertos y cerca de 200 heridos, evidencia una actitud demencial y muestra un carácter que raya cualquier posibilidad sensata. Por esa razón, la CUT rechaza y condena este acto terrorista y convoca al conjunto de nuestra militancia a reprobarlo. La Central Unitaria condena la violencia venga de donde venga, es profundamente civilista, y coloca en el centro de la lucha la movilización social como el instrumento idóneo para presionar la solución a los problemas de los trabajadores, de la población más desfavorecida y de la nación. Con la Ley 789, aprobada por el actual Congreso y sancionada por Uribe Vélez el 27 de diciembre de 2002, se consumó la reforma laboral de «segunda generación», que sumada a la de «primera generación», la Ley 50 de 1990, dan el golpe de gracia a las reivindicaciones y los derechos de los trabajadores, conquistados a lo largo de duras jornadas de lucha durante el siglo XX. Una y otra tienen como procedencia las imposiciones del FMI en la era neoliberal. No podemos aceptar que ninguna organización, acogiendo el terror como su arma de lucha, pretenda atemorizar a la opinión nacional para justificar lo injustificable. La CUT fiel a sus principios solidarios y humanistas presenta un sentimiento de pesar para las familias que sufrieron el insuceso comentado y demanda del gobierno a no cerrar ni restringir ningún espacio democrático, pues sólo estos convocarán a la sociedad a repudiar el terrorismo y viabilizar una salida civilista. La realidad es que una y otra se encaminan exclusivamente a abaratar la mano de obra. La ley 789 de 2002 implicará una disminución en la remuneración de los trabajadores que puede llegar a cinco billones de pesos. Fabio Arias y Carlos Rodríguez marchan contra la política laboral del gobierno Bogotá, 10 de febrero de 2003 Seis grandes paquetes de modificaciones establecidas por la Ley a las condiciones de trabajo Carlos Rodríguez Díaz Presidente Fabio Arias Giraldo Reducción en el pago de la mano de obra ♦ ♦ Se aumenta la jornada ordinaria «diurna» hasta las 10 de la noche, lo que permite reducir el pago de horas extras y el recargo por trabajo nocturno. Reducción del pago de dominicales y festivos en un 25%. Se acaba la unidad de empresa ♦ Segundo Vicepresidente La ley autoriza a los grandes consorcios empresariales a mantener diferentes condiciones salariales y prestacionales en sus filiales, debilitando aún más el sindicalismo de industria y la negociación por rama económica. Reducción del valor de la indemnización ♦ Por el primer año se reconocerán 30 días de salario en vez de 45 días. ♦ Para más de 1 año y con salario inferior a 10 SMLV sólo se reconocerán 20 días por cada año, en vez de los hasta 40 días que tenían los trabajadores con más de 10 años de antigüedad. ♦ Reducción drástica de las rentas parafiscales ♦ ♦ Se exceptúan de aportes parafiscales a los nuevos empleos, disminuyéndose los presupuestos del Sena, Icbf y Cajas en un 10%. Reducción del presupuesto del Sena en un 25% (equivale a $137.768 millones), apropiándoselo el Gobierno Nacional para realizar capacitación de desempleados que el Sena ya hace. Los brazos caídos sólo se reconocen hasta 24 meses e interés de mora a partir del mes 25. Antes era hasta el final del proceso Cambios regresivos en el subsidio familiar ♦ El subsidio en dinero sólo se pagará a los hijos menores de 18 años. ♦ El subsidio al desempleo y programas de microcrédito se hace con los dineros de los trabajadores, en desmedro del mismo subsidio familiar. Deslaboralización del contrato de aprendizaje ♦ No es una relación laboral. No da derecho a ninguna prestación, ni es motivo de la negociación colectiva. Se paga como una cuota de sostenimiento. ♦ Se disminuye en un año el contrato. ♦ Se disminuye el reconocimiento en la etapa productiva (en la empresa) del 100% del mínimo convencional o del oficio en la empresa a solo un 75% del SMLV. ♦ Se amplía el contrato de aprendizaje a toda la educación formal (10° y 11° grado, universitario y educación técnica y tecnológica). ♦ No se limita la cuota máxima de aprendices, llegándose al absurdo de poder tener la planta con solo aprendices y devengando menos del SMLV. ♦ Se le permite el reintegro de hasta el 50% de los aportes al Sena a las empresas que adelantan programas de formación. El Partido del Trabajo de Colombia y La Bagatela Expresan su solidaridad con el compañero Julio Roberto Gómez, secretario general de la CGTD, con su familia y con la Confederación sindical que dirige, ante los graves quebrantos de salud que ha sufrido en las últimas semanas. Registramos complacidos su recuperación y hacemos votos para que los trabajadores de Colombia, en pocos días, lo vuelvan a tener al frente de las batallas del movimiento obrero contra la política laboral y el referendo uribista. 12 de Marzo, Jornada Nacional de Protesta 7 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 Unidad y frente común en Telecom La USTC contra privatización uribista Por Marco A. González de la transformación de Telecom hasta la liquidación de la misma o la fusión con otras entidades. Los trabajadores están alerta sobre su situación y la USTC también está alerta sobre el cambio de la estructura jurídica de la empresa, aunque, repito, en este momento, esas posibilidades todavía no están oficializadas por parte del gobierno nacional o de la administración de Telecom, aunque en algunas entrevistas lo que ha dicho el presidente de la empresa es que efectivamente lo que para él se hace necesario hoy es un cambio en la estructura jurídica de Telecom. Eberto López concedió a LA BAGATELA la presente entrevista sobre los últimos acontecimientos que afectan a Telecom y sus trabajadores relativos a la intención del gobierno de cambiar la naturaleza jurídica de la empresa. ¿Cómo podría resumir la situación de Telecom hoy? El aspecto concreto de la empresa hoy es que el gobierno pretende cambiar la estructura jurídica de ella a través de las facultades que tiene el Presidente de la República, y lo más probable es que opte por convertirla en una empresa de servicios públicos de propiedad accionaria. Esto inmediatamente cambiaría las reglas del juego para Telecom por cuanto se abriría un proceso de privatización que únicamente tendría que cumplir con la formalidad que impone la Ley 142, que es ofrecer en primera instancia las acciones al sector solidario y después de eso transarlas en bolsa, para que el mejor postor que quiera entrar al negocio de las telecomunicaciones las adquiera. Obviamente, esto, de hecho, también cambia las reglas del juego para los trabajadores, porque tendrían una clasificación diferente a la que tienen hoy día, que son trabajadores oficiales; empezaría así un proceso acelerado de menoscabo de todas las condiciones de índole laboral, de índole económico, de estabilidad, que tienen los trabajadores de Telecom en este momento. Tan grave como lo anterior sería que los trabajadores que entren a la empresa en un futuro lo harían en unas condiciones laborales diferentes, porque no tendrían estabilidad, no se les aplicaría la Convención Colectiva que hay hoy para los trabajadores oficiales, sino que entrarían con las condiciones laborales del sector privado. ¿Qué es lo que incumpliría hoy el gobierno con respecto a lo firmado en la última convención colectiva cuando se levantó el paro nacional en junio del año pasado? Incumplimiento real del gobierno lo ha habido en el sentido de que se comprometió a fortalecer la empresa y toda su propiedad de telefonía local que tiene a nivel nacional, o sea fortalecer las teleasociadas y ¿Cuál es el balance del Congreso Nacional de la USTC realizado en diciembre del año pasado? Eberto López y Gloria Elena Quiceno, líderes y orientadores de los trabajadores de las telecomunicaciones. Ruth Lora y el compañero Fernando Gil, encabezan listas al Comité Ejecutivo de la USTC. fortalecer la telefonía local que Telecom presta de manera directa. Si la empresa se convierte en una sociedad accionaria incumpliría de hecho este punto, por cuanto podría empezar a desagregarse y las acciones de Telecom serían una cosa y otra cosa entrarían a ser las acciones que Telecom tiene en las telefónicas asociadas; eso daría al traste con uno de los puntos que se firmó en la convención colectiva, que tal vez fue el más traumático, en el que se decía que la empresa fortalecería el manejo y la operación de la telefonía local con el criterio de integrarla completamente a Telecom. ¿Cómo se están preparando los trabajadores y la USTC para enfrentar esta situación? Realmente, en este momento concreto, la transformación de la empresa no se ha oficializado por parte de la administración. Se conoce de la facultad que tienen para hacerlo. No obstante, estamos en un gran proceso de agitación y divulgación del asunto y en una serie de boletines a los trabajadores los alertamos, y advertimos sobre cuáles son las posibilidades reales que el gobierno viene manejando con base en las facultades que tiene para reestructurar el Estado. Esas facultades le permiten ir des- Ese balance es bueno porque la reunión definió, fundamentalmente, tres cosas: una, continuar afincando y fortaleciendo la fusión que se inició en diciembre del año 2001 para hacerla una realidad en todo el sector de las comunicaciones, para poder enraizar aún más el sindicato de industria en este sector. Dos, se acordó una política de mucho acercamiento y de frente común con las telefónicas asociadas y demás empresas del sector porque la amenaza de reestructuración o de liquidación pasa sobre todas las empresas, empezando por la empresa Distrital de Teléfonos de Barranquilla que hoy está en liquidación. Y tres, se definió que este frente debe trabajar con otros sectores en conflicto para enfrentar mejor la pelea que se viene por la privatización o el inicio de la privatización de estas entidades estatales. ¿Cómo se está preparando nuestra fuerza política para las próximas elecciones del sindicato el 6 de marzo? Nuestra fuerza política, nuestra corriente entre los trabajadores de Telecom, ha venido haciendo una seria campaña, porque aspiramos a obtener un mayor número de miembros de los que tenemos en el Comité Ejecutivo, con el propósito de participar con más fuerza en la defensa de la empresa, en la defensa de los intereses de los trabajadores, sobre todo con el criterio de seguir manteniendo a Telecom como empresa del Estado, como patrimonio público, y en esa dirección vamos a presentar tres planchas o listas de aspirantes al Comité Ejecutivo Nacional de la USTC, encabezadas por Gloria Amparo Ortega, Ruth Lora, Fernando Gil y Eberto López. Vote para el Comité Ejecutivo de la USTC por las listas que encabezan Eberto López, Gloria Amparo Ortega, Ruth Lora y Fernando Gil 8 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 APERTURA Y RUINA DE COLOMBIA EL AJUSTE ECONÓMICO DEL GOBIERNO DE URIBE DeAcómo P E Rlos T UEstados RA Unidos inventaron Y RUINA un país y se apropiaron de un canal MÁS IMPUESTOS Y POBREZA POR ORDEN DEL FMI Por Galileo Gámez Redactor económico de LA BAGATELA M ientras en EU, ante los signos de debilidad de su economía, el gobierno de Bush tramita en el congreso un nuevo recorte de impuestos por valor de US$674 mil millones en los próximos 10 años, en Colombia -que lleva soportando 5 años de franco retroceso económico- el gobierno de Uribe le impone a la nación una sobrecarga tributaria que le sustraerá a los colombianos más de $16 billones sólo en los siguientes cuatro años. Este es el resultado neto del paquete de medidas oficiales, contenidas especialmente en la Reforma Tributaria aprobada en diciembre pasado, una de las piezas claves del ajuste fiscal estipulado por el FMI como condición para un crédito stand by por US$ 2.000 millones. Apenas aprobada la reforma, ese organismo le otorgó al Gobierno el citado crédito, tras la firma de un “acuerdo” (ver recuadro) que asegura la continuidad del suscrito por el gobierno de Pastrana. PRINCIPALES METAS Y COMPROMISOS DE COLOMBIA CON EL FMI Asunto Estado en dic.2002 Meta en 2003 Meta en 2004 Déficit fiscal 4.1% del PIB 2.5% del PIB 2.1% del PIB Inflación 6.9% 5.5% Reservas internacionales US$10.300 millones US$10.540 millones Ley de responsabilidad fiscal Aprobada Congreso Reforma regímenes especiales pensiones Implementada Plan de ajuste financiero ISS en salud Aprobado Conpes Implementado Privatización banca pública Venta Bancafé Venta Granahorrar Reforma Ley 80 de contratación pública Aprobada Congreso el desempleo y la pobreza, en aras de asegurar -a corto plazo- las reservas de divisas para el pago al capital financiero. de la demanda frenando la producción y el empleo. Por tanto, los tributos indirectos son en alto grado regresivos. Los tributos y el Estado en el neoliberalismo Las medidas impositivas del Gobierno Apertura, deuda, ajuste fiscal y recesión Los impuestos no son por principio un lastre para el pueblo. Pueden desempeñar un papel positivo cuando están orientados a gravar las rentas del capital y de la propiedad territorial y cuando el Estado cumple un papel de palanca del desarrollo. No se trata, sin embargo, de un préstamo que el país pueda usar libremente para la inversión o el gasto público, ni siquiera para prepagar algunas de las deudas más onerosas. El crédito del FMI tiene como única función servir de garantía para que el Gobierno continúe prolongando la deuda. Así podrá seguir sosteniendo la apertura, cubriendo el saldo negativo de las cuentas externas y alimentando el cuestionado déficit fiscal, que hoy proviene esencialmente del descomunal costo del endeudamiento. De hecho, el servicio de la deuda absorbe ya el 40% del presupuesto nacional (¡$63.000 millones diarios!). De nada han servido siete reformas tributarias realizadas en los diez años anteriores. Tampoco los incontables recortes del gasto público a expensas de los trabajadores y el pueblo, similar a los contenidos en el Referendo. El déficit no es causa sino consecuencia de la deuda y del estancamiento económico. Pero bajo el neoliberalismo, el Estado ha sido cada vez más confinado a servir exclusivamente de soporte de los grandes capitales y obligado a ceder al interés privado toda función económica susceptible de producir ganancia, sin importar los efectos sociales y económicos. Esto se cumple principalmente en los países atrasados, sometidos a la voracidad del capital financiero internacional y a las imposiciones de las potencias industriales lideradas por Estados Unidos, que disponen para ello del FMI, el Banco Mundial y la OMC. Los gobiernos sometidos a sus dictados se limitan a entregar sus mercados y economías a los linces financieros y las multinacionales. Incluso los tributos en estos países, en la medida en que se destinan a cubrir el desequilibrio de la balanza comercial y al pago de la deuda externa, se suman al torrente de riqueza que fluye desde las naciones pobres a la élite burguesa de los países desarrollados. Particularmente, desde la implantación de la apertura en los 90, la estructura tributaria ha evolucionado en la peor dirección. Las reformas neoliberales implicaron nuevos gravámenes a causa del desplazamiento de la producción nacional por las importaciones y por el crecimiento de la deuda. Mediante la “privatización” de la emisión monetaria –o sea, su uso para financiar a los bancos y no al Estado– se ha obligado al país a pagar más impuestos para generar la renta especulativa de los prestamistas externos y locales que cubren el desequilibrio de las cuentas estatales. El acuerdo con el FMI, además de las reformas y privatizaciones contrarias al interés nacional, establece un nuevo apretón fiscal equivalente a $3.5 billones en 2003 y $1 billón adicional en 2004. El impacto de este drástico recorte hundirá aún más la demanda interna con desastrosas consecuencias sobre la producción, el trabajo y el nivel de vida. Contrario a sus propios anuncios de que “el mejor ajuste es el crecimiento”, Uribe Vélez ha aceptado, sin atenuantes, el mundialmente desacreditado recetario del FMI que consiste, precisamente, en sacrificar el crecimiento del país y promover la recesión, El otro aspecto por considerar es la naturaleza de los gravámenes. Los tributos directos que, como el impuesto de renta, se aplican a las empresas y a los individuos, son en general proporcionales a los ingresos y producen una distribución social más equitativa de la carga impositiva. Por el contrario, los impuestos indirectos gravan a las personas independientemente de sus rentas y representan, de por sí, una carga mayor para las clases sociales de menores ingresos. Cuando además se vinculan con los productos de consumo, caso del IVA, los encarecen y con ello limitan el volumen Dentro de este proceso, el modelo económico trajo consigo una profusión y crecimiento de los impuestos indirectos. El IVA pasó del 12% al 16% y se extendió a los bienes de la canasta familiar; se creó el 3 por mil para los usuarios de los bancos, la sobretasa a la gasolina, etc. La contribución del IVA al total de los recaudos fiscales (58%) ha sobrepasado la de los impuestos directos, que tienden a disminuir con la caída de las ganancias de las empresas. Los tributos directos bajan también por las exenciones y deducciones tributarias al impuesto de renta que hoy suman $8 billones, sin contar la evasión y elusión que algunos estiman entre el 3% y el 5% del PIB. La tributación efectiva grava hoy menos las rentas del capital y se descarga mayormente sobre la población. La Reforma Tributaria de Uribe, endurecida por orden expresa del FMI, lejos de intentar corregir esta situación la empeora. Cerca del 60% de los nuevos recaudos corresponden al IVA. Este gravamen se extendió a 100 nuevos bienes, entre ellos 30 de primera necesidad como chocolate, azúcar, pastas alimenticias, café, pañales, etc. Los alimentos que no fueron gravados di- DE COLOMBIA rectamente, como la leche, el pan y los huevos, lo fueron a través de los insumos y servicios para su producción. Sólo quedaron nominalmente por fuera 30 de los 176 artículos de la canasta familiar, pero en el 2005 –a más tardar– estos serán gravados con IVA del 2%, al igual que todo lo aún exento. A esto se suma el aumento de la sobretasa de la gasolina del 20 al 25%, cuyo efecto directo sobre los costos del transporte y la inflación es bien conocido. Sólo por estos conceptos los trabajadores de menores ingresos pierden cerca del 3% de su capacidad adquisitiva, porque mientras los alimentos pesan 14.7% en los sectores de ingresos altos, en las familias de ingresos medios representan el 30.2% y en las de ingresos bajos el 41.4% de su presupuesto1 . Además, si bien es cierto que la inflación promedio fue de 6.99% en el 2002, para el trabajador raso fue de 8.5% y, como el salario mínimo se reajustó sólo el 7.5%, el ingreso real del grueso de la población trabajadora se reduce en otro 1% 2 , sin considerar lo que se le cercenó con las reformas laboral y pensional. Los efectos del ajuste ya empezaron a sentirse: la inflación en enero se disparó al 1.17% según el Dane, debido principalmente al efecto del IVA sobre los alimentos. Eso no es todo. En el impuesto de renta (con sobretasa del 10% para este año y 5% a partir del año entrante), se eliminan gradualmente algunas exenciones para las empresas, pero otras nuevas se establecen por 15 años. En cambio, la porción exenta de los salarios se redujo indefinidamente del 30% al 25%. Como resultado, según la DIAN, de $12.9 billones que recaudará este año por impuesto a la renta, $8.2 billones provendrán de las retenciones tanto a trabajadores por contrato como a independientes.3 ¿Qué le espera a la nación con el gobierno de Uribe? Más allá de la escasez de dignidad nacional que ya no sorprende en sus voceros, la expresión del ministro Junguito al reportar al FMI la “tarea cumplida” constituye una certificación anticipada de la mayor ruina del país. La crisis golpeará, en especial, a la población laboriosa, incluyendo la amplia clase media que en su mayoría eligió y ha venido apoyando al actual gobierno. La realidad de Colombia confirma que el único límite a la degradación de las condiciones materiales del pueblo es la resistencia que éste presente a sus explotadores, como lo enseñó Marx hace 150 años. 1 “El peso del IVA en los pobres” . El Tiempo, octubre 28 de 2002 2 Mauricio Cabrera Galvis, “Inflación promedio y el mínimo”. Portafolio, diciembre 23 de 2002 3 “La bomba social”. El espectador, enero 12 de 2003. 9 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 APERTURA Y RUINA DE COLOMBIA COLOMBIA DEBE RODEAR A SU INDUSTRIA Y A LOS TRABAJADORES PETROLEROS DeAcómo P E Rlos T UEstados RA Unidos inventaron Y RUINA un país y se apropiaron de un canal LA OFENSIVA NEOLIBERAL CONTRA ECOPETROL Y LA USO Por Jorge Santos Núñez Ex senador de la República. Ex presidente de la USO. Miembro del Comité Ejecutivo del PTC y secretario de la Comisión Política L to para reducir la participación del Estado en los contratos, bajándola por ejemplo a un máximo de 10%, en lugar del 30% actual”.1 (La cursiva es nuestra) a política petrolera que se ha venido aplicando en Colombia, especial mente desde la imposición de la apertura económica, ha sido dirigida al debilitamiento de Ecopetrol. En el gobierno de Barco se avanzó en algunos aspectos como el decreto 2782 de 1989 que estableció una tabla para la participación en los contratos de acuerdo a las reservas descubiertas. A mayores reservas, más porcentaje para Ecopetrol. En un yacimiento superior a 150.000 millones de barriles, a la empresa estatal le corresponde el 70% y a la asociada el 30%. Pero esta misma administración impuso el Decreto Ley 38 de 1989 o ley de presupuesto que determina la descapitalización de Ecopetrol al obligarla a entregar sus recursos al gobierno central al final de cada periodo fiscal. De igual manera se le dio al Conpes la facultad de decidir sobre los presupuestos, y al ministro de minas y al director del DNP, Departamento Nacional de Planeación, sobre cómo debe invertir los recursos de la empresa. Armando Montenegro, ex director del DNP durante el gobierno de Gaviria, presidente de la ANIF y perteneciente también al influyente círculo uribista apunta en la misma dirección. Inquiere sobre la caída de la producción de 815.000 bdp (barriles diarios de petróleo) a 580.000 en tres años y sobre la reducción del 80 % de la exploración en la última década, y él mismo responde: “La pasada administración (Pastrana) respondió a la crisis con el diseño y puesta en marcha de una política de estímulo a la exploración centrada en el aumento de la rentabilidad de los contratos de asociación para las transnacionales. El gobierno de Uribe decidió mantenerla, concentrándose, como es lógico, en su ejecución. Si a finales de 2003 la política no ha dado resultado previsto, habrá que mejorar drásticamente la rentabilidad de los contratos para traer inversiones... se podría pensar en una carta todavía sin destapar: aumentar desde ya la rentabilidad de los contratos para las grandes exploraciones.”2 La pérdida de autonomía de Ecopetrol no es consecuencia de un modelo de planificación centralizada por parte del gobierno para fortalecer la industria nacional; por el contrario, responde a la decisión de coartar cualquier posibilidad de desarrollo de una empresa que ha dado muestras de pujanza y eficiencia. A pesar de los billones de pesos que la empresa ha entregado a la nación, de constituirse en la salvación de las finanzas públicas aportando el 5% del PIB y el 30% de los ingresos nacionales, la consigna del cerrado círculo neoliberal que detenta el poder en Colombia en cumplimiento del mandato del FMI y del gobierno de EU es favorecer a las transnacionales y postrar a Ecopetrol. La caída de las reservas y de la exploración es consecuencia directa de las medidas aplicadas contra Ecopetrol y de los privilegios con que se ha rodeado a las transnacionales. Los insignes representantes del neoliberalismo no expresan solamente una postura ideológica, sino que remarcan cómo esta corriente está plenamente al servicio de los intereses de las transnacionales y de los EU. Plantean incluso que se vuelva a ese modelo de rasgos pronunciados de colonialismo como son las concesiones en la explotación petrolera, que se rodeé de más ventajas y gabelas a las petroleras extranjeras y que el Estado con sus recursos le resuelva los problemas de riesgos en la exploración, reduciendo a Ecopetrol a un Reconocidos voceros de las últimas administraciones, y puntales en la elección de Álvaro Uribe, expresan el pensamiento del presidente sobre el tema petrolero. El ex ministro de minas de Pastrana, y actual codirector del Banco de la República, Carlos Caballero, escribe: “La pregunta que hay que formular hoy en día es si no hay necesidad de introducir cambios adicionales para mantener en Colombia a los inversionistas extranjeros por mucho más tiempo hacia el futuro y para atraer nuevos inversionistas... Un primer paso, urgente, es el de buscar una ‘prórroga’ de hecho de los actuales contratos de asociación y evitar la reversión de los campos a Ecopetrol. Esto incentivaría a los asociados para buscar más petróleo en sus áreas y para invertir más. Un segundo paso podría ser la modificación del contra- ente que no les compita. Para eso se han propuesto actuar en dos flancos: 1) Modificando favorablemente aún más la legislación petrolera y 2) Actuando dentro de Ecopetrol como quinta columna para incapacitarlo, atacando y debilitando el mayor obstáculo que tienen para adelantar esta política antinacional: la USO, bastión del proletariado colombiano y de la nación. En el primer aspecto se ha venido trabajando con mucho rigor. Cada administración supera a la anterior en dádivas para las transnacionales. Gaviria le define a Ecopetrol el papel de auxiliar de las petroleras extranjeras. Se le impone la función de calentar zona, es decir, explorar, y una vez establecida la existencia del yacimiento, se le entrega a las transnacionales. Con Samper se aumentan los términos de los contratos de asociación a 33 años y se les reembolsa el 50% de los costos de operación. Pastrana les sube la rentabilidad en los contratos en detrimento de Ecopetrol y les compra el crudo a precios internacionales; a la gasolina se le fija precio internacional para acrecentar las utilidades de las transnacionales. El gobierno de Uribe va más lejos. El 1 de noviembre rubrica el acuerdo con 16 petroleras transnacionales denominado “Pacto para la reactivación del sector de hidrocarburos en Colombia” concediéndoles más garantías y eliminando barreras para que aumenten la rentabilidad a costa de Ecopetrol. En el segundo aspecto han sido muy diligentes: Se priva a Ecopetrol de autonomía en todos los órdenes, se le recorta el presupuesto anualmente, se destinan los rubros de exploración para otras actividades, se le despoja de las áreas concedidas por ley que pasan a manos de sus competidores, se le aplican permanentes reestructuraciones, se acaban vicepresidencias, gerencias y superintendencias que son decisivas para la actividad fun- DE COLOMBIA damental de la empresa, se le saca de la venta en el mercado minorista con la venta de los Terpel, se le reduce su participación porcentual en los contratos de asociación. A pesar de toda esta artillería pesada que ha recibido de parte de sus enemigos, Ecopetrol sigue siendo más eficiente que sus competidores y más productiva. No cabe duda de que existe un nexo entre la política imperial de los EU y las decisiones que se vienen tomando en el sector de hidrocarburos. “Aquí se necesita mano dura” fue el titular de una entrevista a Isaac Yanovich en El Espectador (2 de febrero de 2003, pág. 13A) en la que manifiesta que “hay que recuperar la gobernabilidad de la empresa” y de paso anuncia una nueva reestructuración y la salida de 1400 trabajadores. Engaña a la opinión pública sobre lo que los neoliberales definen como “privilegios” de los trabajadores, pero se cuida de mencionar las inconmensurables ventajas de las que gozan las transnacionales. La misma directiva de la empresa reconoce que los gastos laborales no llegan al 5% del total de gastos de la empresa. Este déspota neoliberal que se halla al frente de la empresa pretende endilgarle a los trabajadores la responsabilidad de la crisis y, cumpliendo con el mandado de arrebatar importantes conquistas laborales, ha denunciado por primera vez en 50 años la convención colectiva firmada con la USO, con la intención de que se renegocien todos los puntos, pero buscando astutamente que los trabajadores, al defender sus derechos, descuiden la línea de tradición de la organización sindical que es elevar a punto convencional la discusión de la política petrolera. Vano intento que naufragará ante la posición erguida, patriótica y democrática del proletariado petrolero que a lo largo de ochenta años de existencia ha tenido como consigna principal la defensa de la nación y sus recursos. El pueblo colombiano rodeará de solidaridad a la USO, porque atacar a la USO y a Ecopetrol es agredir a la nación. 1. UN Periódico No 41, diciembre 15 de 2002, pág. 6. 2. El Espectador, noviembre 24 de 2002, página 24A . Ivitamos a los lectores de LA BAGATELA a visitar nuestra página web y enviarnos sus opiniones y comentarios. WWW:labagatelamoir.org e-mail:bagatelamoir@hotmail.com Cuando era trabajador de Ecopetrol, Jorge Santos en la refinería de Barrancabermeja. 10 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 Entrevista con Marcelo Torres, Secretario General del PTC (moirista) «La lucha principal no es en el seno de la nación sino contra un enemigo externo y sus agentes criollos» sociedad de los trabajadores y que desaparezca el reino de la explotación del hombre por el hombre. Ese es el fin último de la transformación en la cual se inspira nuestro programa. LB. Si la situación mundial se ha caracterizado en los tiempos del neoliberalismo por un prolongado reflujo de los movimientos revolucionarios, ¿cómo se justifica el inicio de este proyecto partidario en la izquierda colombiana? R. Bueno, es cierto que desde un punto de vista histórico la época neoliberal ha sido de reflujo de la revolución a nivel mundial pero ya pasamos el punto más bajo del mismo; se ha iniciado el ascenso de un movimiento contra la llamada globalización y contra la guerra injusta, imperialista. En América Latina avanza una clara tendencia hacia la izquierda. Protestas tumultuosas en todo el mundo repudian la guerra de agresión contra Irak. Los hechos demuestran que se acerca el fin de esa etapa de reflujo y que comienza una nueva marea de rebelión de los pueblos, y es sabido que este es el clima propicio para la cristalización y consolidación de los partidos revolucionarios. La crisis del país demanda una fuerza orientadora que encabece la salida de la debacle. LB. Algunos sostienen que en el mundo actual la clase obrera industrial decrece y que su papel protagónico es cosa del pasado. ¿Cómo se explicaría la persistencia en una filiación proletaria, en un partido fundado sobre la defensa de los intereses de los asalariados? R. Ha habido mucha cháchara seudocientífica sobre la llamada «terciarización» de las economías, entendida como el predominio inevitable de los servicios, especialmente de la informática y las telecomunicaciones, sobre los sectores productivos industriales. Desde luego, está en marcha una revolución tecnológica y científica pero sus tendencias se han adecuado a la necesidad de la oligarquía financiera de contrarrestar la crisis del capitalismo en los países centrales luego de la emergencia de un estancamiento cada vez mayor de la economía norteamericana en la segunda posguerra. La burguesía imperialista resucitó a Milton Friedmann para reanimar la demanda en Estados Unidos mediante la creación de deuda pública y privada, lo cual le dio un impulso a un incontrolado auge financiero jamás visto, implicó el traslado de ingentes bienes y fondos públicos LB. ¿A qué obedece la decisión de adoptar esta nueva sigla en este momento? Mosquera y Marcelo, instantánea perenne. Con motivo de la constitución de Partido del Trabajo de Colombia, PTC, que concreta el proceso de reconstrucción del MOIR, se hacen necesarias nuevas precisiones programáticas y reafirmaciones tácticas. La dirección nacional del PTC viene adelantando una gran campaña para informar ante la opinión sobre estos acontecimientos, la que incluye la tarea primordial de la recolección de firmas para obtener la personería jurídica de la nueva sigla. Para contribuir a ello, LA BAGATELA organizó una reunión con un pequeño número de compañeros de Bogotá para que el Secretario General del PTC, camarada Marcelo Torres, a manera de rueda de prensa, respondiera algunas inquietudes básicas sobre esta nueva situación organizativa del Partido. La siguiente es la edición resumida de esa entrevista. y cuantiosas rebajas de impuestos a favor del capital monopolista privado, y activó una arremetida sin precedentes contra los salarios y las conquistas históricas de los trabajadores. El modelo se extendió a todo el mundo. A los países atrasados les fue impuesta la apertura de sus mercados, el desmantelamiento del intervencionismo estatal en la economía y del sector público, al tiempo con la prohibición de todo proyecto de industrialización nacional. El resultado a nivel global fue un descenso del ritmo del crecimiento mundial, un incremento de la pobreza y el hambre, un exceso en los países desarrollados de las inversiones en los sectores financiero y de nuevas tecnologías con las consiguientes quiebras y, tanto en el centro como en la periferia, el descenso numérico de la clase obrera. Pero esto no fue producto de una fatalidad; se debió a una estrategia escogida por los centros capitalistas del mundo, de agresiva prevalencia de la especulación financiera sobre la expansión productiva. Bajo este esquema de saqueo intensificado de los pueblos, Norteamérica engordó un rato pero al cabo de veintitantos años se desaceleró la economía, resurgieron allí y en los otros países desarrollados el paro forzoso, la protesta social y ambiental con el movimiento antiglobalización y contra la guerra, los escándalos de corrupción de las multinacionales, y en últimas, los rasgos del capitalismo, la lucha y el caos, se recrudecieron. Es el fin del «fin de la historia». El fantasma de Marx cobra nitidez y fuerza. ¿Acaso sus vaticinios no vuelven hoy a resonar como verdades incontestables por todo el planeta? LB. En ese contexto a que usted alude, ¿qué significación tiene el nombre de Partido del Trabajo de Colombia? R. Debe recordarse que este es el nombre con el cual se encabeza el Programa y los Estatutos del MOIR, el que el fundador del Partido, Francisco Mosquera, le propuso a la dirección y al pleno constitutivo del mismo en 1969. El nombre está en plena correspondencia con la naturaleza de clase y con las metas de nuestro Partido en la medida en que expresa que la potencia que debe regir al mundo y a Colombia es el trabajo, para que se realice la R. En primer término por el punto crítico a que llega la crisis en Colombia. El país padece una doble aflicción o una doble tragedia: los estragos económico-sociales producidos en el período neoliberal, y la sangría, la perturbación cada vez mayor generada por una violencia desbordada que amenaza a la nación con la invasión militar extranjera y la desintegración territorial. La salida no puede ser la profundización del modelo neoliberal ni los llamados a Estados Unidos, como a la ONU y a la OEA, para que invadan militarmente al país, tal como lo quiere el gobierno de Uribe Vélez. Tampoco lo es el colaboracionismo de un liberalismo agónico con este gobierno. Lo que demanda el momento es la actuación de una fuerza orientadora capaz no sólo de apreciar correctamente la complejidad de la situación y de trazar un rumbo hacia su solución sino de marchar a la cabeza de tal proceso de cambio y transformaciones. Cuando finiquita una tradición bipartidista más que centenaria es un buen momento para anunciarle al país la constitución de una fuerza que tiene un sello obrero, un sello patriótico, que plantea una salida nacional. En segundo lugar, no debemos seguir actuando bajo el manto de la confusión; hay otros que utilizan la sigla del MOIR y desarrollan una política extraña a las orientaciones genuinas de su fundador para este período. En aras de que el país distinga claramente nuestra posición y de evitar equívocos completamente indeseables, adoptamos la nueva sigla del PTC. Esta decisión corresponde a la necesidad de preservar y llevar adelante la línea de Francisco Mosquera. LB. Entonces, ¿por qué mantener en la propaganda del PTC la connotación de moirista,? R. Mantenemos la denominación de moirista porque obedece a nuestra historia; con ello enviamos un mensaje claro y fuerte: es en este Partido, el PTC, donde sigue vivo y se desarrolla lo que originalmente fue el MOIR. El Partido del Trabajo no surge de un vacío político, tiene una historia que hunde sus raíces, que adquirió su fisonomía y su jefatura en una corriente política que el país conoció como el MOIR. Aquí, en el PTC, se mantiene en alto esa línea, aquí están los principales dirigentes históricos del moirismo. Nosotros jamás renunciaremos a esa herencia; al contrario, es por preservar esa posición, especialmente la planteada en la última etapa con el advenimiento de la era neoliberal, formulada por Mosquera en sus últimos escritos, que nos vimos obligados, luego de su muerte, a abrir un debate de fondo en las filas moristas que desembocó en una ruptura con sus tergiversadores. Es por esta misma razón que hoy, dadas las circunstancias políticas concretas en las cuales se ha venido desarrollando esta pugna, adoptamos la nueva sigla del PTC. LB. ¿Tan de fondo fueron esas diferencias que condujeron a una ruptura? R. Así es. Si el blanco de ataque de las fuerzas de la nación no se reduce a la dominación de Estados Unidos sobre el país y a sus agentes neoliberales, como debe ser, sino que se amplía a otros sectores de la nación, como lo hacen quienes revisaron a Mosquera, por el hecho de que tales sectores no son siempre consecuentes en la lucha y vacilan y tienden a la conciliación e incluso a la capitulación, entonces tenemos una diferencia que no es de poca monta sino una equivocación muy grave producto de un radicalismo y un extremismo tan infantil como nocivo. Lo grave del asunto es que esto conduce a una política de enfrentamiento antagónico con sectores que no son de ninguna manera, por lo menos en principio, los enemigos principales del país. Si además de ello se practica una política que en los hechos excluye de un amplio frente anti Estados Unidos a sectores que no obstante sus vacilaciones y sus intereses de clase tienen contradicciones objetivas con la dominación gringa, y se circunscribe este frente a la mera unidad con sectores de izquierda, como vienen haciéndolo los mismos Pasa a la pág. siguiente 11 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 Viene de la pág. anterior tergiversadores de la línea del MOIR, entonces la cosa pasa de castaño a oscuro. Tal posición no es sólo sectaria sino obtusa. Tanto la primera como la segunda diferencia anotada ameritaron no sólo un gran debate sino la ruptura con quienes se empecinan en ese camino erróneo. Ambas tergiversaciones obstruyen y sabotean la unidad nacional, que es la clave del triunfo contra el dominio extranjero. LB. ¿Cómo resumiría usted la táctica y la estrategia del PTC en este momento? R. La estrategia consiste en que el país logre su independencia política y económica para desarrollarse, en un mundo en que se impuso la ley de hierro de los Estados Unidos para anexar a su órbita económica a los países atrasados y especialmente a los de América Latina. Para ello se requiere de la independencia. Esa es la estrategia, conseguir que el país en una situación mundial de cerco y sometimiento imperial, se pueda desarrollar como nación. La táctica general estriba en practicar una política que contribuya eficazmente a que el país, el pueblo, la nación, identifique y enfrente al enemigo principal, que es, por supuesto, el dominio de los Estados Unidos sobre Colombia, junto con la capa que le sirve de base social en el país: ese estamento de tecnócratas que constituye la corriente neoliberal y dirige el Estado, la que Mosquera llamaba, por referencia al centro ideológico universitario de donde se expandió, la panda de los Andes. El otro aspecto de la táctica consiste en que se requiere una gran alianza, una gran coalición para cumplir la estrategia, para derrotar al enemigo, coalición que consiste en la unidad de la nación, en la unidad de todas las clases, de todas las capas, contra el sojuzgamiento gringo, en la cual jueguen un papel de orientación y de dirección los trabajadores, es decir, una política de frente único de salvación de la nación. En esto se resumen la estrategia y la táctica. L.B. ¿Por qué no nos explica más lo que llama usted unidad nacional contra el sojuzgamiento gringo...? R. Para sacudirse las ataduras que impiden su desarrollo y superar el atraso, Colombia requiere un acuerdo, un gran acuerdo, un compromiso nacional entre todas las clases, es decir, entre las clases trabajadoras, la clase obrera, las demás clases productivas, los campesinos, los pequeños productores, las capas medias, los intelectuales, los artistas, los sectores de la pequeña burguesía, con lo que se puede llamar las clases propietarias, a saber, con la burguesía nacional, la gran burguesía, y los grandes propietarios de tierras. De lo que se trata con este gran compromiso, con esta transacción entre todas las clases, es de sacar el país adelante, de reconstruirlo, de echar las premisas de su desarrollo como nación... LB. ¿No parece un tanto ilusorio un planteamiento que parte de un acuerdo entre las diversas clases sociales para arreglar el país? R. Mire, en la práctica puede suceder que unas clases o algunos sectores de clase atiendan una política de unidad nacional mientras que otras no. Eso se define en los hechos y un partido de los trabajadores guía su acción por una teoría revolucionaria pero sobre la base de los hechos. Esto se definirá a su debido tiempo. Pero lo que debemos resaltar es que ahora, hoy, existen fundamentos reales, realidades concretas que pueden darle piso objetivo, no ilusorio, a una acción común del conjunto de las clases sociales, a una gran coalición nacional contra el enemigo extranjero. Ese fundamento está dado por la nueva época de neoliberalismo y de hegemonía unipolar de Estados Unidos en el mundo. La explotación norteamericana de esta época es más intensa, más profunda y más extendida en nuestro país y los países como el nuestro. A tal punto que no sólo afecta los intereses de la población trabajadora y productora sino también a los principales grupos económicos pese a que ciertos aspectos de la privatización y el neoliberalismo pueden favorecer intereses de la alta burguesía. Al respecto, Francisco Mosquera, el autor de esta tesis rotundamente corroborada por los hechos, en época tan temprana como el inicio de los noventas, llamó la atención sobre cómo American Air Lines podía sacar del ring al grupo Santodomingo y por qué en ese pleito lo nacional era pararle los pies al pulpo gringo. Por la misma razón, afirmó, los reclamos de los estratos altos caben en la retorta de las reivindicaciones de la nación. Otra cosa es que a la hora de la verdad dichos estratos no quieran sumarse a los intereses nacionales; de ocurrir así, la nación, entonces, tendrá derecho a decidir su actitud frente a ellos. Pero mientras los hechos consolidan las tendencias ¿por qué no proponer una acción común con todo el mundo contra el principal enemigo de la nación? LB. Serpa, a quien apoyó esta corriente moirista, terminó de embajador de Uribe ante la OEA. ¿No pone esto en tela de juicio la viabilidad de un frente amplio con sectores burgueses o de los partidos tradicionales? R. No. Que en una situación concreta fallen personajes y sectores, no invalida la política de frente único, que es una necesidad del país. Simplemente, lo que se revela por los hechos es que Serpa no estuvo a la altura de las expectativas a ese respecto. La defección del ex candidato liberal no significa que la política de frente único fracasó; fracasó él como posibilidad de constituirse en líder de un frente de tales dimensiones. Esto, por supuesto, es un traspié que repercute sobre la nación entera, que facilita el liderazgo derechista de Uribe y sus planes contra el país y el pueblo, pero una nación tiene muchos traspiés y no por eso debe abandonarse el esfuerzo de lograr la unidad como condición para alcanzar la independencia. Serpa representa el final de un ciclo en el cual esa corriente política que él personifica tuvo grandes posibilidades, desafortunadamente malgastadas y ahora prácticamente abandonadas. Hay que condenar la claudicación y persistir en la necesidad del frente. Lo que el país necesita es una corriente consecuente con la necesidad de la unidad de la nación; corrientes que tengan una base social, polítiPasa a la pág. siguiente Momentos de la recolección de firmas. Los dirigentes del Partido Aldo Cadena, Eberto López, Alberto Herrera, y Dorys González reciben el respaldo al PTC de la mujer, los jóvenes y los trabajadores de la capital del país. 12 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 La juventud, a la cabeza en la recolección de firmas. ca e ideológica distinta, que puedan encabezar el esfuerzo de unir el país, porque lo que estamos registrando es que las vertientes de los partidos tradicionales no fueron capaces de hacerlo o por lo menos no han tenido la consecuencia para llevar adelante esta empresa histórica. LB. Por vía de ilustración, ¿cuáles serían las bases de un acuerdo tal de unidad nacional? R. Se podrían sintetizar en unos puntos gruesos: la independencia nacional, para hacer posible el desarrollo económico, una democracia de nuevo cuño, la democracia del pueblo, y la elevación del nivel de vida de la población. En realidad ese es nuestro programa inmediato, esas son las grandes necesidades de la nación, es una especie de programa mínimo. El desarrollo económico requiere la firme defensa del mercado interno, este es la madre de todo desarrollo nacional; el respaldo resuelto del Estado a la producción, la búsqueda de la elevación sustancial de la producción de alimentos y la meta de la industrialización propia. Una democracia del pueblo implica que los trabajadores estén en el comando del Estado, al lado de los demás sectores productivos, de la representación de todas las clases sociales, con muchos partidos y organizaciones en un gobierno de coalición. El pilar de esta democracia, unas fuerzas armadas que guarden la soberanía y defiendan el territorio patrio y un régimen político que realice toda la democracia para las masas trabajadoras, donde el sector estatal de la economía dirija y prevalezca sobre el conjunto de las formas mixtas, capitalistas y otras modalidades privadas de propiedad. Estratégicamente, se trata de que la ley del trabajo impere en la nación; de alcanzar, en el largo plazo, una sociedad con un alto nivel de civilización y de mejorar significativamente, en el mediano y corto plazo, la vida material del pueblo. LB.¿Usted cree que los países desarrollados y principalmente Estados Unidos permitirían de buen grado, hoy en día, unas transformaciones de esta naturaleza en un país como el nuestro, en América Latina? R. Los rasgos prevalecientes en el medio ambiente internacional, impuestos desde el Consenso de Washington, no son ciertamente favorables a una evolución de esta clase, sino muy hostiles a ella. Sobre todo en los tiempos de Bush el Cruzado y su doctrina de ataques bélicos “preventivos”. Pero un país atrasado que logre su independencia, si su pueblo logra unirse sólidamente, aprecia bien la situación, no procede con temeridad ni comete errores graves y defiende con resolución su derecho a decidir su propio destino, puede mantenerse erguido mientras soplan mejores vientos sobre el planeta. Esto no tiene que significar una política de aislamiento nacional, al contrario, tendría que proclamarse una política de relaciones de comercio y de intercambio de capitales con el mundo entero, con todos los países del mundo sobre la base de la igualdad y del beneficio recíproco. Al hegemonismo de Estados Unidos ya se le perfilan rivales de no poca monta en la “vieja Europa”. No debería negarse la negociación de empréstitos externos pero sin permitir jamás el condicionamiento esclavizador que conllevan. El Estado tendría una política encaminada a obtener precios internacionales que no signifiquen una desventaja para nuestro trabajo nacional, el ingreso a la OPEP, la unidad y defensa de la producción cafetera mundial y, en cuanto a la inversión extranjera, la negociación de términos con ventajas y de ganancias recíprocas, que sirvan a nuestras industrias nacionales, con una adecuada participación al Estado colombiano, en el marco de una estricta regulación de los movimientos de capital, sin la absurda y anárquica libertad que se les ha otorgado, que han desmantelado las economías y conducido a hecatombes económicas. El PTC plantea y está dispuesto a transitar una política de esta naturaleza y con estos objetivos. principal no es en el seno de la nación, no es en el interior de la sociedad colombiana, sino que el enfrentamiento principal debe ser entre la nación como unidad, contra un enemigo externo, el dominio gringo y sus agentes. La segunda, que las transformaciones revolucionarias que requiere el país son de carácter democrático para abrir el camino hacia un sociedad gobernada por el trabajo: la independencia nacional y la superación del atraso mediante la realización de una serie de cambios que hagan posible el crecimiento económico, el desarrollo del agro, la industrialización propia y la elevación del nivel de vida del pueblo. Y la tercera, que, en las circunstancias actuales de Colombia, no vemos la insurrección armada como una opción viable que exprese la lucha del pueblo, ni somos partidarios del empleo de métodos tales como el atentado personal, el terrorismo, los secuestros, y la extorsión . Hay que impulsar un tipo de lucha acorde con el desarrollo de la conciencia y la fuerza de los sectores de las clases más revolucionarias, de fortalecimiento del movimiento obrero y de los sectores patrióticos y populares, es decir, la lucha de carácter político, a través de los medios que esta supone, con la movilización de las masas y a través del parlamento y los instrumentos legales. Se trata de la resistencia civil, política, masiva, a la política neoliberal del actual gobierno y a la intromisión militar norteamericana en el conflicto interno colombiano. LB. ¿Cómo aprecia el PTC el papel actual de los jóvenes? R. La juventud es el termómetro de la revolución; cuando ésta está en alza, los jóvenes van a la cabeza del movimiento de masas y cuando ésta entra en reflujo, la juventud pierde su norte. En la vida del MOIR, del cual proviene el PTC, la juventud ha jugado un papel vital; debe recordarse que fue como consecuencia de una grandiosa batalla de la juventud, el movimiento estudiantil de 1971, que el Partido pudo contar con una verdadera legión de jóvenes que hicieron posible o, por lo menos, que realizaron un aporte definitivo a la expansión de la corriente moirista a escala nacional. Sin esta hornada de cuadros jóvenes el MOIR nunca habría sido la corriente que el país conoce. En este nuevo arranque que está dándose, hay razones muy fundadas para esperar que la juventud desempeñe un papel de primera línea. Desde hace lustros no se veía la agitación, la tendencia a la movilización y a la protesta que empieza a bullir de nuevo en los colegios, universidades, y barriadas de los centros urbanos. Los efectivos juveniles que provinieron de la lucha contra el 012 realmente son un augurio de los nuevos tiempos, allí se anticipa el porvenir de la revolución… LB. ¿Por qué insiste el PTC en reivindicar el nombre y el aporte de Francisco Mosquera? Mosquera es la figura revolucionaria más importante de nuestro país en el siglo XX. Fundó una corriente que deslindó campos con la influencia infantil de izquierda y defendió la necesidad de constituir un partido basado en el movimiento obrero. Este solo hecho bastaría para que su memoria tuviese asegurado un lugar en la posteridad, pero su contribución va mucho más allá. Mosquera encabezó la construcción del Partido a partir del viejo MOEC que había fundado Antonio Larrota en 1959 y allí le dio origen a una corriente revolucionaria, antiimperialista y propulsora de una revolución democrática de nuevo cuño, de la cual provenimos. Pero con la imposición del modelo neoliberal y la apertura económica, su mayor aporte fue haber avizorado el vuelco que daba el mundo y diseñar una táctica para ese período en que se adentró la humanidad y en el cual aún permanecemos. Señaló que mientras el blanco de ataque, el enemigo del progreso de Colombia, se ha reducido a Estados Unidos y a la pequeña capa que le sirve de apéndice de sus grandes negocios internacionales, el frente de resistencia se ampliaba como nunca antes. Esta consideración, aparentemente simple, fue su gran acierto y tiene una vigencia continental. Los acontecimientos, lejos de desmentir estas geniales apreciaciones de Mosquera, las corroboran de manera abrumadora y rotunda. LB. Si tuviera que resaltar las características distintivas de la política del PTC, ¿cómo las sintetizaría? R. Podemos reducirlas a tres. La primera, ubicamos el enemigo principal a nivel internacional, no dentro sino fuera de la nación: el sojuzgamiento de Estados Unidos sobre Colombia, y por extensión, como su apéndice, los agentes que hacen posible su política en el país, vale decir, los gobiernos neoliberales. Esto se traduce en que la lucha Los veteranos también apoyan el PTC. 13 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 SINDESS. Junta Directiva Nacional Ampliada Contra el gobierno, el país defiende la Sinfónica Durante los días 6,7 y 8 de febrero se realizó en Bogotá la primera Junta Directiva Nacional Ampliada del Sindicato Nacinal de la Salud y la Seguridad Social, SINDESS, presidida por Carlos Rodríguez, presidente nacional de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, y Aldo Cadena, presidente nacional de SINDESS. En ella se analizó la situación del sector salud y se tomaron importantes decisiones para enfrentar la crisis y fortalecer la organización para el presente año. La Orquesta Sinfónica Nacional, una institución que con varias décadas de arduo y paciente trabajo logró consolidar una tradición cultural y un acerbo musical invaluable, recibió del gobierno, por intermedio de su ministra de Cultura, un golpe sin precedentes en este terreno. En descomunal atropello, haciendo gala de ignorancia absoluta, han decidido clausurarla. Sus integrantes se movilizan en las calles contra la decisión uribista y reciben la solidaridad popular. 12 de Marzo, Jornada Nacional de Protesta E l Comando Nacional Estatal, en reunión celebrada el día 14 de febrero de 2003, acordó por unanimidad convocar una Jornada Nacional de Protesta que deberá realizarse en todo el país el día 12 de marzo, con la perspectiva de convertirse en una Paro Nacional, para lo cual se llevará al Comando Nacional Unitario la propuesta respectiva. El objetivo de la jornada es levantar la protesta contra la política económica, social y laboral del gobierno, particularmente, contra los despidos derivados de la nueva reestructuración del Estado, contra las reformas laboral, pensional y tributaria y contra los proyectos antipopulares y antiobreros que cursan en el Congreso de la República, como ocurre con el llamado Plan de Desarrollo. Así mismo, la jornada debe incluir como uno de sus objetivos fundamentales la abstención activa frente al Referendo tramposo que pretende constitucionalizar nuevos atropellos contra el pueblo. De otra parte, la jornada debe servir para levantar la más amplia solidaridad con los trabajadores de Caprecom, Cajanal, Emcali, Ecopetrol, la salud, las telecomunicaciones y los demás sectores en conflicto. Esperamos que todas nuestras organizaciones filiales se vinculen a esta jornada de lucha, en particular, las del sector estatal, a fin de que sea plenamente exitosa y nos sirva de partida para las demás luchas que deberemos librar durante este año. (De la CUT). Patriótica conmemoración obrera 80 años de la Unión Sindical Obrera, USO E l 12 de febrero se conmemoró en todos los distritos petroleros los 80 años de fundación de la Unión Sindical Obrera, organización nacida como expresión de la lucha anti-imperialista del proletariado colombiano frente a los desafueros de las transnacionales petroleras. La figura legendaria de su principal dirigente y fundador de la USO, Raúl Eduardo Mahecha, es resaltado como símbolo del espíritu de resistencia de los obreros colombianos y se le rindió un sentido homenaje. El acto central se realizó en Barrancabermeja al que fueron invitados veteranos dirigentes del sindicato que se distinguieron como agueridos defensores de la nación y de Ecopetrol. Descolló entre los asistentes el compañero Jorge Santos Nuñez, ex presidente nacional de la USO y ex senador, quien intervino para resaltar las brillantes y heroicas luchas de los trabajadores en defensa del interés supremo de la nación. Denunció al gobierno de Uribe por entregar aún más los recursos del país y rodear de más privilegios y ventajas a las transnacionales y de perseguir el marchitamiento de Ecopetrol. La celebración ha coincidido con la feroz arremetida por parte de la dirección de la empresa y del gobierno nacional contra el sindicato en plena negociación del pliego de peticiones. La política de entrega a favor de las transnacionales ha obligado a levantarse de la mesa de discusiones a los negociadores de la USO ante la infame maniobra a los intereses de Colombia por parte de la administración uribista que pretende prorrogar por 12 años más el contrato de explotación del gas de la Guajira. Al rechazo de los trabajadores se sumó la denuncia de tres senadores (Jorge E. Robledo, Hugo Serrano G. y Alba Esther Ramírez ), que alertaron al país sobre el propósito del gobierno que perjudica en grado sumo a Ecopetrol y beneficia a la Chevron-Texaco, pues el contrato finaliza el 31 de diciembre de 2004 y los yacimientos e infraestrutura revierten en su totalidad a la nación. Ecopetrol ha invertido en el proyecto US$ 336,9 millones y se necesita una inversión de US$ 40 millones más y las utilidades calculadas son de cerca de US$ 900 millones, producto de una rentabilidad del 18%. Los parlamentarios señalan: Si Ecopetrol ya invirtió esa suma, por qué no asume sólo los US$ 40 millones restantes del proyecto, lo que permite a Ecopetrol recibir el total de las utilidades. Homenaje a un veterano del Bloque Sindical Independiente de Antioquia Jesús Hernández: 35 años de lucha sindical y política «He servido durante toda mi vida laboral a la noble causa de los oprimidos de Colombia y lo seguiré haciendo» fueron las palabras de Jesús Hernández durante el nutrido homenaje que se le rindió el 14 de diciembre del año pasado cuando se pensionó después de laborar 41 años en Paños Vicuña, y ser presidente de Sintravicuña durante 27. Fue impulsor del Bloque Sindical Independiente de Antioquia hace más de 30 años, y de diversas organizaciones sindicales hasta culminar en la seccional de la CGTD en Antioquia. Al acto de homenaje asistieron dirigentes políticos y sindicales de Antioquia, quienes acompañaron a sus amigos, familiares y compañeros de trabajo. El PTC, a través de su Secretario General, envió un fraternal saludo al homenajeado. LA BAGATELA participó en el homenaje a Jesús Hernández, un líder obrero que ha servido a su causa con esmero, dedicación y lealtad, con el compañero Basilio Calazans. 14 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 APERTURA Y RUINA DE COLOMBIA Por Jairo Gálvez D esde mediados de la década pasada se sucedieron los negocios más escandalosos contra Emcali. En diciembre de 1994 se constituyó TermoEmcali, y en 1997 se firmó el famoso PPA que obliga a Emcali a pagar US$4 millones mensuales, produzca o no la planta. En 1996 se firmó el contrato con Aguas de Colombia con el argumento de reducir las pérdidas de agua en un 20%, contrato que no se cumplió, se fue a un litigio y recientemente el actual gerente interventor lo concilió a precios escandalosos. También en el 96 se compraron acciones por el doble de su valor a la ERT-Celular. En ese fatídico 1996 se inicia la construcción de la PTAR en medio del escándalo por la adjudicación del contrato y la limpieza del lote. En 1996 se trata de desmembrar la empresa y queda convertida en 4 unidades de negocios. En diciembre del 97 se compran acciones en Termocauca, por 6.000 millones de pesos, y hoy se deben 7.000 millones más. En medio de los escándalos por corrupción le entregan a una empresa privada el cobro del alumbrado público. Onerosos y fracasados resultaron también los contratos de consultoría con una serie de firmas internacionales. A lo anterior hay que sumarle el alto endeudamiento externo e interno para entender las causas fundamentales de la crisis financiera de Emcali. Los hechos y las cifras demuestran en forma contundente que los orígenes de la crisis y los responsables de ella no han sido sus trabajadores o el personal jubilado, pues Emcali a mediados de los 90 resistía y daba utilidades. La intervención de la Superintendencia El 4 abril del 2000 la Superintendencia de Servicios Públicos interviene a Emcali tomando posesión de ella con un desfile de gerentes interventores, que en menos de tres años ya suman seis. Por otra parte, el Plan Nacional de Desarrollo, en el tema de servicios públicos, plantea los Fondos de Capitalización Social, y antes de DeA Acómo PPEERRlos TTUUEstados RRAA Unidos inventaron RUINA un país YY RUINA y se apropiaron de un canal No a la privatización de Emcali que sea aprobado en el Congreso de la República, se toma a Emcali como “conejillo de indias”. El Plan es claro al proponer que las empresas de servicios públicos y la política para energía eléctrica y agua potable se implementará en “procesos de privatizaciones y concesiones”. Ese es el norte del gobierno y los caleños no se pueden llamar a engaños. La resolución 141 y la confesión del fracaso Después de casi 3 años de intervención la superintendente, Evamaría Gaviria, tumba la resolución ejecutiva presidencial (¿puede hacerlo?) con la 141 que cambia los términos de la intervención para definirla con fines liquidatorios. La resolución 141 es, en primer término, una confesión del fracaso rotundo de la Superintendencia en su gestión administrativa. Al cabo de 3 años apenas “se han identificado las medidas y acciones por tomar para superar las causas que dieron origen a la toma de posesión para la administración de Emcali, las cuales permitirían dar viabilidad a la entidad”, pero a renglón seguido muestra su verdadera intención: “a partir de la vigencia de la presente resolución, se procederá a realizar los actos necesarios para iniciar el proceso liquidatorio”. La resolución plantea un catálogo de acciones que se pueden resumir así: 1. Reestructurar el contrato con TermoEmcali. 2. Revisar la convención colectiva y firmar una nueva recortando las conquistas mínimas de los trabajadores. 3. Reestructurar la deuda con la banca nacional y los proveedores nacionales y extranjeros. 4. Acordar el pago de las deudas del municipio con Emcali. 5. Celebrar un acuerdo de capitalización de las acreencias en el Fondo de Capitalización Social. Esta es la almendra del tal Fondo, y para que no suene a privatización, dicen que “se estructurará para implementar un modelo de democratización a través de Emcali con la participación voluntaria de los trabajadores y los usuarios”. Así planteado, es un ofrecimiento a los grandes acreedores para que se queden con la empresa, pues la opción «democrática» de invertir en Emcali es imposible para la mayoría de la población que a duras penas tiene con qué pagar las facturas; sin temor a equivocaciones el Fondo es privatizador. La intervención ha sido un desastre, ha multiplicado los problemas y está orientada a debilitar más y más a Emcali, a postrarla para liquidarla o venderla a precio de “huevo”, como mandan los cánones del modelo neoliberal contra el aparato productivo del Estado. Avanza la unidad de los caleños para salvar a Emcali Se debe derogar la Resolución 141 y quitar la “espada de Damocles” que pende sobre el cuello de Emcali. Se deben apoyar las medidas que con claridad defiendan el patrimonio de los caleños y exigir que el gobierno nacional inyecte capital fresco a Emcali, así como desembolsó más de seis billones de El PTC reclama garantías ante Mininterior U na delegación del Partido del Trabajo de Colombia, PTC, encabezada por su Secretario General, Marcelo Torres, se entrevistó el pasado 3 de febrero con el ministro del Interior, Fernando Londoño, para exigir garantías en el desarrollo de su actividad política. La reunión con el titular de la cartera política de la administración Uribe trató sobre las preocupaciones de la dirección nacional del PTC en materia de seguridad para sus dirigentes y en torno a las garantías para la campaña de recolección nacional de firmas por la personería jurídica del PTC. La delegación desvirtuó ante el ministro de la política uribista la serie de peligrosos infundios que se han puesto en circulación en la Gua- jira, particularmente en la zona de San Juan del Cesar, contra Aldo Cadena, miembro de su dirección central y presidente de Sindess, y Fidel Loaiza, secretario regional del Partido en ese departamento y presidente de la seccional del mismo sindicato. Los dirigentes del PTC denunciaron asimismo las amenazas anónimas que han venido teniendo lugar contra Eberto López, igualmente miembro del Comité Ejecutivo Central del Partido y directivo nacional de la USTC, debido a su posición contra la privatización de Telecom y en defensa de los trabajadores de la empresa. En la misma reunión, los voceros del PTC pusieron de presente el hostigamiento que la Policía de Bogotá, en cumplimiento de arbitrarias restricciones de la administración Mockus, viene imponiendo a su campaña nacional de recolección de firmas en la capital del país. Se presentó una protesta formal por el maltrato policial a una compañera en el transcurso de un incidente ocurrido en plena vía pública cuando una brigada del PTC adelantaba la labor de recolección de firmas en el barrio 20 de julio. El ministro Londoño se comprometió a hacer efectivas las garantías a que tiene derecho toda corriente política de adelantar una masiva y pública campaña de recolección de firmas por su personería jurídica, reafirmó “la obligación del Estado a ofrecer protección a los ciudadanos” y anunció las averiguaciones del caso para esclarecer los hechos denunciados. DE COLOMBIA COLOMBIA DE pesos para el capital financiero, y que el pueblo de Cali a través de sus autoridades, organismos de control y entes de representación, tenga injerencia real en la solución de sus problemas. El Concejo Municipal debe producir una resolución que condene la intervención y el embeleco del Fondo de Capitalización Social. El 15 de febrero del presente año se realizó un foro muy representativo convocado por el presidente del Concejo Municipal, Marino del Río. Participaron la Cámara de Comercio; la FES; senadores como José Renán Trujillo y Pinilla Malo; representantes a la Cámara como Ubeimar Delgado y Alexánder López, y 12 concejales; las asociaciones de las JAC y JAL, el sindicato de Emcali, veedores ciudadanos, vocales de control, asociaciones de técnicos como Aciem, Acodal, el personero y la contralora, entre casi 400 líderes. Allí se aprobó recoger un millón de firmas contra la liquidación, el Fondo de Capitalización y la privatización de Emcali, en una jornada que se denominó el Firmatón por Emcali. Persecusión contra vendedores en Risaralda El Comando Departamental Unitario de Risaralada y los presidentes de las organizaciones sindicales de Vendedores Ambulantes y Estacionarios de Pereira han venido denunciando el atropello de la administración contra los informales. En un comunicado que lleva las firmas de Lucía Haydee Trujillo, presidenta subdirectiva CUT Risaralda; Evelio Varela García, presidente Utrar; Jaime Vargas, presidente CGTD; Neftalí Ballesteros, presidente Fedetrar-CTC, afirman: “No nos oponemos al desarrollo y progreso de la ciudad, pero se deben respetar los derechos de los más humildes”. Se ha llegado al extremo de que un contratista privado para el manejo del espacio público atropella y atemoriza a los vendedores ambulantes con el respaldo de la fuerza pública y otros funcionarios los cuales, con el aval de la alcaldesa, Martha Elena Bedoya, se han ensañado con los que ganan el sustento honestamente, persiguiéndolos como si fueran delincuentes. 15 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 AAPPEERRTTUURRAA RUINA YY RUINA DE COLOMBIA COLOMBIA DE Por Orlando de Oro Ibáñez “ Juan, tiene tres minutos”. Fue la advertencia que hizo el presidente Álvaro Uribe a Juan Domingo Polo, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Telefónica de Barranquilla (Sintratel) en la reunión del pasado 7 de diciembre, realizada en la base militar Cacom de Malambo, para “discutir” las salidas a la crisis de dicha empresa. Un escenario acorde con la postura draconiana que el jefe de Estado asumió con los trabajadores y demás asistentes para anunciar de manera unilateral que “esta empresa se liquida”. Frente a la cual, no se hizo esperar la respuesta de Juan Domingo: “Si usted liquida la EDT, será un acto de suma irresponsabilidad con el patrimonio de Barranquilla y con los trabajadores”. Quien sí tuvo la oportunidad de hablar, sin restricciones de tiempo, fue la Superintendente de Servicios, Evamaría Uribe. Ella se limitó a repetir el resumen de las conclusiones del estudio realizado por Armando Montenegro, en el que reitera lo que había recomendado en 1996: vender la empresa al sector privado. Mal le queda a la Superintendencia estar repitiendo lo de Montenegro, pues demuestra que durante más de dos años de intervención, la entidad presidencial aún no tiene una visión propia del asunto de la tele- LOS TRABAJADORES DE TELÉFONOS DE BARRANQUILLA CONTRA LA PRIVATIZACIÓN “Juan, tiene tres minutos” fónica de Barranquilla. Al igual que el caso de Emcali, esta Superintendecia, lejos de resolver los problemas de la EDT, los profundizó. Así lo señalan los trabajadores de la EDT en carta dirigida al Presidente Uribe: Liquidar EDT es una irresponsabilidad que no podemos callar. Esta decisión conlleva la búsqueda de un monto de recursos financieros que hipotecaría a Barranquilla. Todas las obligaciones, incluidas las de largo plazo como el pasivo pensional, más los costos de indemnizaciones, obligaciones financieras, se vuelven exigibles en el inmediato futuro. Agregando las indemnizaciones plenas ocasionadas por la violación de la sustitución patronal pactada en nuestra Convención Colectiva. Proponen además atraer un inversionista, con la liquidación de EDT y la necesidad de duplicar la densidad telefónica en Barranquilla para igualarnos con Cali. Con la primera, Barranquilla perdería su patrimonio y se quedaría con las deudas. Para lo segundo, la Superintendencia lo propone sin ningún estudio previo de mercado. ¿Quién va a cometer la locura de invertir 143 millones de dólares (440.000 millones de pesos) en unas líneas que no se sabe a ciencia cierta si pue- dan venderse? Con el agravante que, mas de la mitad de ese dinero (230.000 millones de pesos) tendría que destinarse para cubrir el costo pasivo pensional. Recabar recursos por medio de la liquidación es una formula tan débil que la señora superintendente, al final de su informe, dice: “Esperamos que los recursos que se logren atraer permitan cubrir las pensiones y todas las acreencias para evitar que estas oscurezcan el panorama fiscal del Distrito de Barranquilla”. Es decir, no están seguros de lograrlo, y si no sale la fórmula, le tocará al Distrito enfrentar esa eventualidad. ta a una competencia que le impide aplicar a una economía de escala. La EDT ha sido manejada sin criterios empresariales. Tomada en asalto por sectores políticos interesados en conveniencias electorales. Montaron un modelo administrativo en el que imperó la contratocracia que llevó a la empresa al estado de caos que hoy padece. La incidencia que tienen los compromisos de la empresa con el sector financiero: la EDT, en un año, paga más por concepto de servicios de la deuda, que lo que vale su nómina básica. Una justa propuesta Sintratel, en una actitud seria y comprometida con el futuro de la Ciudad de Barranquilla y su empresa de telefonía, contrató un estudio que arrojó importantes conclusiones que sirvieron para debatir las conclusiones de Armando Montenegro, hermano de Santiago, el de Planeación Nacional. Ante este panorama no dudamos que la mejor fórmula para sacar adelante a la EDT es: La principal razón de la crisis se origina en el fraccionamiento del mercado, al crearse Metrotel en 1993 impulsada por la corriente neoliberal, que planteaba la competencia como solución al problema del servicio de telefonía que existía en ese momento. Resultado de esta estrategia fue que ni Metrotel sale a flote y Edt se enfren- • No confundir los problemas ad- • Una asociación con Telecom que preserve su naturaleza de empresa estatal, que integre el mercado de la telefonía local y continue siendo patrimonio de Barranquilla y de la nación. ministrativos de la empresa con E n un hecho sin precedentes, la administración Uribe Vélez firmó con el FMI un acuerdo stand by más funesto aun que el de la administración Pastrana. El ministro de hacienda, Roberto Junguito, en una actitud propia de quien representa los intereses de la banca internacional, lo reconoció así cuando apenas estaba “negociando” dicho acuerdo: “El extended fund facility (EFF) es mejor que el stand by que estamos negociando. El EFF tie- ne más plazo y tasas de interés más bajas. Sin embargo, es imposible renegociar un EFF porque ahora están dirigidos a los países más pobres y endeudados” (Revista Dinero, octubre 18 del 2002). Esto quiere decir que en caso de utilizar los recursos del FMI para cumplir puntualmente con los pagos de deuda externa, el gobierno deberá asumir un costo financiero tan alto como el que asume con la banca privada internacional. Precisamente, anticipándose a la firma del acuerdo con el FMI, Junguito chantajeó al Congreso de la República, exigiendo la aprobación de las reformas tributaria, pensional, laboral, y la concesión de facultades extraordinarias al Ejecutivo para reformar al Estado, con el argumento de que era una condición indispensable para asegurar en 2003 el crédito de la banca multilateral (Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo, Corporación Andina de Fomento), en condiciones menos onerosas que las del FMI: “La plata llega si se hacen las reformas” (Revista Dinero citada). Desde luego, las reformas y sus resultados constituyen el centro de atención • Financiar los pasivos que tiene la empresa con el Estado, por medio de la capitalización de las mismas; con la banca internacional, la búsqueda de créditos de fomento para su cancelación; la deuda pensional, por medio de la creación del patrimonio autónomo de la empresa. En la reunión del 7 de diciembre, el presidente Uribe reitera su conducta al tratar los problemas de la economía, delegando, delegando, delegando y para el caso concreto de la EDT, no por casualidad escogió a Santiago y a Armando, el primero de Planeación Nacional y el segundo, el ideólogo de la privatización de los gremios de Barranquilla. Mientras el presidente, hace yoga, los pastusos hacen su negocio. Lo que aún no se ha podido demostrar en el mundo es que el yoga sea un modelo eficaz para resolver los desajustes de la economía. préstamos a Colombia la apoyen” (Minhacienda, La República, enero 23 de 2003). Peor que el firmado por Pastrana Por Silvio Cantor los asuntos de gobierno. Crear una gerencia que aplique criterios técnicos y piense en cómo el desarrollo de la telefonía debe contribuir al desarrollo económico, social y cultural de la ciudad. Resistencia a la privatización de las empresas del Estado El último acuerdo con el FMI Economista, investigador APERTURA Y RUINA DE COLOMBIA del acuerdo, y no sólo tienen el objetivo de obtener recursos inmediatos de los organismos multilaterales para garantizar el cumplido pago de la deuda externa con la banca privada, sino también garantizarles a los banqueros un jugoso negocio en el futuro, y a los inversionistas muy bajos costos laborales: “Si uno, en un país que tiene unos desequilibrios fiscales tan grandes y un nivel tan alto de deuda pública, no ataca los problemas de raíz, no va a conseguir que tanto los empresarios nacionales como los internacionales y la gente que está dispuesta a darle Al tiempo que los empresarios manifiestan que la caída de la demanda interna es el principal factor de crisis económica, como lo muestra una reciente encuesta realizada por la Cámara de Comercio de Bogotá y Fedesarrollo (véase “Baja demanda frena desarrollo empresarial”, La República, febrero 3 de 2003), el gobierno Uribe Vélez amplía la base del IVA a toda la canasta familiar y aumenta las tarifas de dicho impuesto, reduce el gasto público diferente al servicio de la deuda y las fuerzas militares, liquida entidades y despide trabajadores, con el propósito de castigar el consumo de la población y generar forzosamente un ahorro en el gobierno para llenar los bolsillos de los acreedores. 16 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 HISTORIA VIVA Por Carlos Zamora «No me canso de repetirlo: la mixtificación de la historia por las momias académicas y sus epígonos; las colosales maquinarias de escamoteo y alteración de valores que montan y maniobran los culebreros de la historia, son una de muchas formas de oprimir a los pueblos.» Alfredo Iriarte1 E l escritor Alfredo Iriarte fue un bogotano de inmensa cultura universal, que palpitaba con Colombia. Su obra literaria, histórica y periodística tiene un lugar en la identidad cultural de nuestra nación. Su personalidad era vibrante: «La historia de la literatura colombiana te deben las crónicas y las novelas más sabrosas de los últimos cuarenta años. Tus contertulios extrañarán la charla sabrosa, el apunte picante, la erudición oportuna y tu detectivesca vocación de buscar gazapos en todo cuanto se hiciera público en esta Colombia,» escribió sobre él Óscar Collazos.2 Decenas de personalidades de la intelectualidad nacional han exaltado su memoria. LA BAGATELA se une a este homenaje, presentando apartes de sus valerosas crónicas sobre la historia de Colombia y América Latina, publicadas en sus libros Lo que lengua mortal decir no pudo, e Historias en contravía. «Patriarcas» del siglo XlX Sobre el cofundador del partido Conservador, el ex presidente Mariano Ospina Rodríguez, Iriarte reveló: «tuvo la delirante idea... de entregar un país entero.» «El 10 de julio de 1857, el presidente Ospina dirigió a su copartidario el general Pedro LOS INTELECTUALES: MITO Y REALIDAD A propósito del libro: Intelectuales, Estado y nación en colombia de Miguel Ángel Urrego Por Pedro Pablo Rojas Laiton Que hasta la década del sesenta fue más acusada la subordinación de los intelectuales a los partidos tradicionales, dice en su libro el doctor Miguel «Ángel Urrego para luego agregar: A comienzos de los años sesenta se inició la ruptura... Esta perspectiva los llevó a militar en las diversas organizaciones políticas y militares de izquierda... A partir de los ochenta se forjó una lenta y casi imperceptible, nueva relación con el Estado y, por supuesto, con la sociedad. El resultado, muy palpable a mediados de la década, no fue otro que el de la reincorporación de los intelectuales a la tutela del bipartidismo y el Estado». HOMENAJE A ALFREDO IRIARTE 1932- 2002 HISTORIA VIVA En contravía de la historia oficial Alcántara Herrán, a la sazón ministro (embajador) de Colombia en Washington, este histórico mensaje: ‘Me permito llamar la atención sobre este punto: ¿qué inconveniente le resultaría a la Nueva Granada de anexarse a la Unión Americana? La Unión estaría dispuesta a aceptar la anexión. Todos los hombres que tienen sentido común han empezado a preguntarse: siendo cierto que estos países van a ser absorbidos por la Confederación del Norte ¿por qué no se hace de una vez aquella operación pacíficamente?’».3 Sobre la «Ley de los caballos» de Núñez, Iriarte nos dice: «...época en que los más egregios varones de la República poblaron los patíbulos, las cárceles y los caminos del destierro. Fue el tiempo en que la nación vivió bajo el terror de la famosa ‘ley de los caballos’, que convirtió al presidente en un sátrapa, árbitro absoluto de las vidas, libertades y haciendas de los ciudadanos. Fue la época en que las imprentas sucumbieron a los trancazos de las culatas».4 Intervención USA Alfredo Iriarte narró, en virulento cuestionamiento, cómo el presidente Rafael Núñez pidió a Estados Unidos la intervención militar para sofocar la insurrección liberal de 1885, invitación que con celeridad aceptaron. «Un tal almirante Jovett llegó puntualmente al istmo (de Panamá) a la cabeza de sus aguerridos marines para garantizar ‘el libre tránsito de uno a otro mar’, contribuyendo así en forma decisiva al aplastamiento de la insurgencia liberal.»5 Sobre la masacre de más de mil obreros bananeros el 6 de noviembre de El de los intelectuales ha sido un tema recurrente en los medios académico y político, y muy socorrido últimamente, dados los variados sucesos de incumbencia universal y nacional, los cuales demandan la toma de posición pública, no solo teórica sino también práctica, de todos aquellos que la tradición considera como faro de la sociedad debido a su papel como productores y difusores de pensamiento. Este compromiso manifiesto y concreto lo esperamos de aquellos intelectuales a los que en el universo de la creación intelectual y sensible conmueve la tragedia de un mundo globalizado bajo la expoliación de las transnacionales, el terror del máximo imperio de todos los tiempos y la aplanadora de una cultura y un pensamiento únicos. Esperamos este compromiso de aquellos intelectuales que todavía piensan en la razón, el progreso, la soberanía Gaitán están mucho más cerca de la Plaza de Bolívar, del Parque Santander y del obelisco de Washington, que de la Plaza Roja de Moscú ...su movimiento sí tenía una esencia reformista audaz que con razón amedrentaba a las castas dominantes y a sus patrones gringos. En consecuencia, y siendo Gaitán un obstáculo inexpugnable para el establecimiento en Colombia del Estado fascista que requería la nueva situación internacional, no había otra alternativa que eliminarlo.»7 1928, en Ciénaga, Magdalena, Alfredo Iriarte reveló que en el mar, a corta distancia, hubo durante toda la huelga barcos de guerra de Estados Unidos repletos de marines listos a desembarcar. Esta información la obtuvo en una larga entrevista con el secretario de gobierno de la Gobernación del Magdalena en 1928, José Gnecco, un jurista conservador, experto en derecho constitucional. Este le contó que el gobernador José María Núñez Roca le había mostrado los destructores desde la azotea de la gobernación, con un catalejo, en respuesta a su pregunta de: «por qué expresaba con tanta certeza a Bradshaw (gerente de la United Fruit Company) la seguridad de las garantías del ejército colombiano en tanto que la situación se hacía cada vez más incontrolable»6 La violencia de los 50 Sobre el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán, Iriarte afirmó: « Es hora de que se sepa que los asesinos de nacional, la democracia y la emancipación social para Colombia. Para ello, ya es hora de que los intelectuales colombianos se sacudan prejuicios como aquel de que “la política no tiene intelectuales” (Rubén Sierra ), o aquel de que “en En «Historias en contravía» Alfredo Iriarte explica que la violencia que vivió Colombia entre 1949 y «el 13 de junio de 1953»... «trataba... de aniquilar al liberalismo» y fue «una diabólica empresa de exterminio planificada y dirigida desde las altas esferas del gobierno contra el sesenta por ciento o más de los ciudadanos de bien de este país, a quienes se acosó, torturó, humilló, expolió y asesinó por el delito de profesar... ideas diferentes de los matasietes fascistas que detentaban el poder» ...«Ospina... Era un fascista tan convencido como Gómez, pero... solapado, ajeno a toda guisa de alharacas.»8 Agudos cuestionamientos sobre los desastrosos resultados del Frente Nacional, pactado entre los partidos Liberal y Conservador, también hacen parte de Historias en contravía. Crónicas latinoamericanas El escritor bogotano investigó en cada país sus artículos sobre Latinoamérica. Su destape de la corrupción del PRI causó escozor en la dirigencia mejicana. En Bestiario Tropical describió en forma magistral la barbarie de los dictadores amigos de Washing- el momento en que los intelectuales se vinculan a un partido político, claudican a su función y a su deber intelectual” (Rafael Gutiérrez Girardot)... ¿Será que un intelectual como Luis Carlos Restrepo deja de serlo por ocupar el cargo de Alto Comisionado para la paz? O ¿será que “claudicaron a su función y a su deber intelectual” los intelectuales estadounidenses que, el 19 de septiembre pasado, publicaron en The New York Times la declaración “No en nuestro nombre” en la cual llaman a “resistir la guerra y la represión desatada en el mundo por la administración Bush”? Los anteriores ejemplos desenmascaran precisamente aquellos prejuicios que han contribuido a inflar el mito de los intelectuales como seres de una clase social aparte, ubicados más allá del bien y del mal, dotados del derecho a pontificar sobre todo pero sin el deber de establecer compromiso con nada. ton.9 Es estremecedora su crónica sobre la guerra del Chaco entre Paraguay y Bolivia que se libró por ambiciones de petróleo en esta zona fronteriza. L a Standard Oil Company llevó al gobierno de Bolivia a la guerra y la Royal Dutch Shell al de Paraguay, con el saldo en 1935 de 500.000 muertos.10 Iriarte esclareció el papel de personalidades como el presidente Lázaro Cárdenas, quien nacionalizó la industria petrolera mejicana, y exaltó a héroes como el nicaragüense Augusto César Sandino, el «General de Hombres Libres.». Leer a Alfredo Iriarte es comprender que fue un auténtico demócrata, amante de la libertad, de la soberanía de las naciones y de los derechos de los pueblos. Reciba su familia nuestra condolencia y nuestro deseo porque la obra y la memoria de Alfredo, sea cada día más conocida. 1 Iriarte, Alfredo, Lo que lengua mortal decir no pudo,, Ediciones Hombre Nuevo, Medellín, mayo de 1991, Pág. 22. 2 Collazos, Oscar,El Tiempo, 6 de noviembre de 2002, Pág 18 3 Iriarte, Alfredo, «Lo que lengua mortal decir no pudo», Ediciones Hombre Nuevo, Medellín, mayo de 1991, Pág. 68. 4 Idem, Pág 73,74. 5 Idem, Pág 72 6 Idem, Pág 83 7 Idem, Pág 102 8 Iriarte, Alfredo, Historias en contravía, Editorial Espasa Calpe S.A. Bogotá, 1995. Págs, 127, 129 y 107 9 Iriarte,Alfredo, Bestiario Tropical, Ediciones Gama, Bogotá, 1986. 10 Iriarte, Alfredo, «Lo que lengua mortal decir no pudo», Ed cit, Pág 172 Estos y otros aspectos de la naturaleza, la función y la historia de los intelectuales en la Colombia del siglo XX son abordados por el doctor Urrego con objetividad y derroche argumentativo fruto de rigurosa investigación. Mención particular debe hacerse, dentro de este marco de objetividad, del tratamiento que le da a las diversas corrientes de izquierda, entre ellas la del MOIR y a su fundador Francisco Mosquera. De su su lucidez teórica y política en varias coyunturas de los movimientos populares y la revolución colombiana, dice el autor: “Mosquera realizó el aporte más significativo al marxismo colombiano al oponerse, en el momento en el que el resto de la izquierda afirmaba lo contrario, al uso de las armas cuando no existían condiciones para ello e igualmente se opuso al secuestro, la extorsión y el terrorismo (...) sus análisis sobre la guerra y la paz constituyen un documento fundamental en la reflexión sobre la violencia contemporánea”. COVEÑAS ‘PETROLEO ES OBJETIVO DE EU EN COLOMBIA’ 17 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 El Mundo DE LA GLOBALIZACIÓN NEOLIBERAL IRAK:elmundodepiecontra laguerraimperialista Por Edmundo Zárate amenaza de una conflagración nuclear. Se reporta que la edición europea de Time hizo una encuesta para que sus lectores identificaran cuál es el mayor peligro para la paz mundial y, de más de 200.000 respuestas, el 87% afirmó que es EU, mientras el 13% restante se reparte entre Irak y Corea del Norte. E n respuesta a la inminente guerra imperialista promovida por EU para repartir entre sus magnates petroleros a Irak, el planeta asiste, desde comienzos del año, a un auge de manifestaciones de rechazo sin antecedentes en la historia mundial. Para nadie es ya un secreto que el objetivo yanqui es hacerse al control del país que tiene la segunda reserva de petróleo probada del mundo, hoy en manos de un gobierno indócil a sus intereses. El argumento –la supuesta existencia de armas de destrucción masiva en manos de Hussein– no ha convencido a nadie, pues las anunciadas pruebas nunca aparecieron. Los meticulosos inspectores de la ONU –antes denunciados como espías al servicio de EU– no encontraron ninguna evidencia, y los sofisticados servicios de inteligencia del imperio exhibieron como gran cosa un montaje propio de su cine de ciencia ficción. Por ello la más reciente artimaña ha sido sindicar al régimen iraquí de tener contactos con Osama Bin Ladem con la ilusión de usar hasta el último gramo de patrioterismo que pueda quedar entre el pueblo gringo. Pero sobreponiéndose a la campaña de desinformación, literalmente no hay sitio en el globo en el que no haya habido marchas contra la guerra. De los miles de reportes escritos y gráficos que se encuentran en Internet, vale la pena destacar los que informan sobre la turbulencia que se está desatando entre los pueblos árabes gobernados por despóticos jeques afectos a EU. A pesar de la absoluta antidemocracia que caracteriza al vecindario iraquí y del silencio cómplice de la gran prensa mundial, ha habido marchas en las principales ciudades de Líbano, Egipto, Siria, Yemen, Bahrein, Marruecos, Turquía, Pakistán e India. En varios de estos países EU tiene importantes bases militares para realizar su ataque a Irak. Menos posibilidades ha tenido el imperio de tender un manto de silencio sobre las descomunales marchas de repudio que han Jugando con candela Utilizando como suculento cebo los pozos petroleros de Irak, Estados Unidos ha contado con el respaldo obsecuente de los gobiernos de Italia, España y Gran Bretaña –al que Chomsky califica como el perro de caza de los yanquis. Bush: “Aquí alerta: hay una Klara Konexión” ocurrido a todo lo largo de las potencias, empezando por Washington donde en enero hubo concentraciones de un cuarto de millón de enardecidos demócratas y pacifistas, que enfrentaron no solo la inclemencia del invierno boreal sino la agresión de la fuerza pública. En Europa y Japón los manifestantes han ideado una ingeniosa forma de protesta consistente en realizar “inspecciones civiles” sobre los silos atómicos y cuarteles militares de sus países, de la OTAN y de las bases gringas enclavadas en sus países, a fin de demostrar de dónde viene, en realidad, la Otro Tercer Reich: EU. Pero en cambio se ha encontrado con la resistencia de un frente que ha dado en llamarse franco-alemán, alrededor del cual gravitan otros países poco interesados en acolitar a EU, tales como China y Rusia. Su oposición bien puede residir en el pánico a las revueltas de sus pueblos, a que tienen intereses económicos y políticos en el área del conflicto y, además, al temor de que el creciente unipolarismo se traduzca en un mayor peligro para estas economías de segundo nivel. Para enfrentar a las potencias que no han dado su respaldo al atropello contra Irak, Estados Unidos puso en marcha una táctica de imprevisibles consecuencias políticas, económicas y hasta bélicas. En efecto, valiéndose de sus perros de caza europeos, hizo aprobar un documento de apoyo suscrito entre otros por los gobiernos de Italia y Polonia, lo cual produjo una grande fisura entre los países que hoy hacen parte de la Unión Europea o que aspiran a ser admitidos en un inmediato futuro. Igualmente ha ocasionado enfrentamientos en los altos niveles estatales como lo pone de presente la oposición de las Cortes españolas (congreso) al primer ministro Aznar en torno al tema Irak. No es la primera vez que Washington se entromete en los asuntos internos de los europeos –recuérdese por ejemplo el respaldo dado a Turquía cuando la UE decidió aplazar el ingreso de este país a la UE–, pero la diferencia radica en que esta vez ha sido en torno a los intereses estratégicos de Alemania y Francia. El afán imperial es mostrar que su guerra tiene el respaldo de otros países, pues su amenaza de que bombardearía a Irak aun sin la aprobación de la ONU ocasionó una mayor polarización entre las potencias. Con ello los gringos pusieron en marcha otro problema, la división en el seno de la OTAN, alianza militar a la que ha manejado a su antojo, pero que hoy muestra una gigantesca fisura como nunca antes en su historia. De nada han valido ni las mayores mentiras contra Irak ni los esfuerzos diplomáticos del Secretario de Estado Powell para apaciguar los ánimos. Pero cada réplica imperial tiene su contrarréplica. El III Foro Social Mundial de Porto Alegre acordó que el 15 de febrero se realizaría una jornada mundial contra la invasión a Irak, tarea que se tradujo en la literal movilización de varios cientos de millones de personas en trescientas capitales del mundo, por cuenta de las inocultables mayorías democráticas y revolucionarias del planeta. Significativo es que las mayores manifestaciones hayan ocurrido en Washington y Londres, en cada una de las cuales, según la prensa burguesa –para nada interesada en decir la verdad– concurrieron más de un millón de personas. Ícono del Movimiento antiglobalización para la Cumbre de Davos. 18 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 América Latina se enruta en la resistencia al modelo progringo FUERA DEL LIBRETO A pesar del creciente intervencionismo de Estados Unidos en los asuntos internos de los países, día por día se está configurando una especie de contratendencia que se manifiesta en la llegada al gobierno en diversos países de presidentes que actúan a contrapelo de los dictámenes imperiales o que, cuando menos, le hacen el quite a algunas imposiciones. Lula da Silva en Brasil, Hugo Chávez en Venezuela, Lucio Gutiérrez en Ecuador, para solo citar los casos más evidentes en el hemisferio americano, son ejemplos de ello. Evo Morales, el dirigente de los campesinos bolivianos, estuvo ad portas de constituirse en otra expresión de esas fuerzas. No se trata de gobernantes que hayan ganado elecciones anunciando un cambio radical en el modelo de desarrollo imperante, ni mucho menos cualquier cosa que se asemeje a una revolución. Pero sí son personajes que por su extracción social, su historial político y, por supuesto, la presión de grandes masas populares, han planteado una gran diferencia con los gobernantes obsecuentes tipo Vicente Fox en México o Álvaro Uribe en Colombia. La ausencia de un decidido respaldo por parte de los grupos más tradicionales y fuertes en sus propios países, señaladamente los vinculados a las grandes finanzas y a la tierra, acaba de complicar el panorama para la política exterior de Washington. En efecto, esta oleada de dirigentes expresan diferentes versiones y formas de resistencia ante la arremetida política y económica neoliberal, por lo cual su triunfo ocurrió en medio del debilitamiento de los sectores progringos en sus países. El factor determinante del auge de gobernantes por fuera del libreto gringo ha sido el desastre de casi tres lustros de aplicación del modelo neoliberal. Y aunque existan dudas sobre la consecuencia y decisión con que adelantarán esos procesos, en la medida en que un gobernante ose desafiar las imposiciones imperialistas amerita el respaldo de las fuerzas patrióticas, y corresponde aclararle a la población los reales alcances de la situación política en Latinoamérica. Venezuela CHÁVEZ 2 – ESTADOS UNIDOS 0 Por Edmundo Zárate S in que hubieran transcurrido ocho meses desde el fracasado golpe de estado que se fraguó contra el presidente de Venezuela Hugo Chávez, los mismos sectores derrotados –valga decir, Estados Unidos, la oligarquía veneca y un sector desclasado del proletariado de este país– iniciaron un nuevo ataque contra el gobierno constitucional. Como es de suponer, otra vez el objetivo era deponer al presidente, en esta ocasión a través de un paro patronal –en el que participaron las multinacionales gringas con filiales en Venezuela– acolitado por la tecnocracia de la estatal petrolera PDVESA que aboga por su privatización, al igual que por parte de los dirigentes de la principal central obrera del país. Aquí como en Irak, el asunto central es el control del petróleo. El hecho de que el principal proveedor mundial no árabe del aceite no siga a pie juntillas las políticas de Estados Unidos, ha sido suficiente razón para que los magnates petroleros que tienen su asiento en la Casa Blanca arremetan contra Chávez. El ataque de Estados Unidos contra el mundo árabe presuponía desde el principio dificultades en los suministros petroleros por lo cual es indispensable garantizar el control sobre pozos como los venezolanos o los colombianos. Pero desde el inicio de su gobierno Chávez se ha mostrado indócil a los dictados de la política exterior de Washington. Ello explica por qué a tan poco tiempo del primer fracaso se adelantó una nueva intentona en Venezuela. No obstante, los golpistas sistemáticamente han subestimado el respaldo popular que tiene el gobierno de Caracas. Amplios sectores de la población, lo mismo que de las fuerzas armadas, han mostrado su indeclinable decisión de apoyar a su presidente. Cada nueva arremetida de las fuerzas desestabilizadoras es enfrentada con creciente resistencia popular. La actuación de la OEA y de su Secretario General César Gaviria pone de presente la subordinación de esa organización a los intereses imperiales. En el golpe de abril estuvo atenta a reconocer al gobierno espurio de Pedro Carmona y, puesto en marcha el paro de diciembre, su actuación estuvo dedicada a “buscar soluciones”, todas las cuales coincidían, de una u otra manera, en que Chávez abandonase el gobierno. Pero mientras tanto las fuerzas democráticas y progresistas de Latinoamérica dieron muestras de solidaridad contra la agresión. El recientemente posesionado presidente de Brasil, Lula da Silva, dispuso que se enviaran técnicos en petróleo de su país para ayudar a contrarrestar la parálisis en los pozos venezolanos y anunció que su- El III Foro Social Mundial fiel a su principio “Otro mundo es posible” se constituyó en un grito orbital de gran resonancia contra la globalización, las amenazas bélicas norteamericanas, la deuda externa, el ALCA, el hambre y el deterioro del medio ambiente. Al evento de 5 dias (23 al 27 de enero) asistieron mas de 100.000 personas y fue cubierto por 4.094 periodistas de 51 paises. 5.717 organizaciones de más de 150 naciones se hicieron presentes al igual que importantes personalidades de todo el orbe. En el 2001 los debates eran: “quiénes somos nosotros”. En el 2002 sobre los objetivos; y ahora hablamos de las estrategias. Porto Alegre se ha convertido en una importante escuela de formación política y social del mundo. Se acordó participar en las protestas simultaneas el 15 de febrero contra la agresión bélica de los EU contra Irak y en noviembre en Cancún con motivo de la 5ta reunión ministerial de la Organización Mundial de Comercio OMC. ministraría hidrocarburo para poner en marcha las refinerías. Para acrecentar el respaldo popular, Chávez inició un proceso de entrega de tierras a los campesinos y ha dado pasos para desenmascarar los antinacionales intereses que hay detrás del sector obrero adicto a los golpistas. Se trata de un grupo de obreros víctimas de la ideología neoliberal que aspiran a mejorar sus condiciones a costa de la venta del patrimonio público y que ven la solución a sus problemas en un gobierno pronorteamericano y antidemocrático. Hoy los golpistas han quedado de nuevo derrotados, pero el costo ha sido una gran crisis económica derivada de la parálisis en la exploración y exportación de petróleo más de dos meses, lo que menguó de manera significativa los ingresos del Estado y las reservas monetarias internacionales, con el consiguiente debilitamiento de la de por sí agobiada economía, lo que se tradujo en la caída del precio del bolívar. Teniendo en cuenta que las contradicciones que desataron la crisis desde comienzos del 2002 siguen gravitando –es decir, la amenaza contra Irak, la indocilidad de Chávez y la debilidad de la economía de Estados Unidos–, es de suponer que más pronto que tarde el gobierno Bush hará sonar la campana de un nuevo enfrentamiento contra Venezuela. Ante ello corresponde a los demócratas y revolucionarios expresar su irrestricta solidaridad con el régimen constitucional. No sobra recordar que la república democrática siempre ha sido la mejor condición para adelantar las luchas populares. Una de las diversas mesas de trabajo de Foro Social Mundial Capítulo Colombia, relizado en Bogotá en noviembre de 2002. 19 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 Bolivia LOS OBREROS BOLIVIANOS MUESTRAN LA SENDA G racias a un ascenso sostenido de acumulación de fuerzas que tuvo su más reciente confirmación en el proceso electoral que dejó a Evo Morales como virtual ganador de las elecciones, la clase obrera boliviana mostró en sus luchas de febrero la senda que deben seguir los trabajadores de América Latina y del mundo entero. Como se sabe, en cumplimiento de las disposiciones del FMI, el presidente de Bolivia, Gonzalo Sánchez de Lozada, decretó un alza del impuesto sobre salarios del anterior 5,5% a un 12,5%. La reacción organizada y masiva no se hizo esperar. En dos días se desató una huelga de tal envergadura que el gobierno se vio obligado a derogar tan lesiva disposición. Más allá del contundente rechazo y del inobjetable triunfo de los trabajadores bolivianos, debe destacarse la táctica revolucionaria adoptada. Se recurrió a una de las más antiguas, pero no por ello menos efectiva forma de lucha de las masas, la huelga general. Hasta la policía de ese país se unió a la protesta, de manera tal que el gobierno se vio impelido a utilizar al ejército para contener la valerosa resistencia civil. A los medios burgueses los asalta el pánico, temerosos de que el ejemplo del proletariado boliviano, forma de lucha que a través de los siglos ha mostrado ser efectiva en todo momento, se riegue por toda América Latina, ahora que las masas han aprendido que otras tácticas gravitan como lastre en la lucha popular. La marcha por las calles de Roma. Vista parcial de la marcha por las calles de Roma el 15 de febrero en contra de la guerra. Corea del Norte Ejemplo de dignidad de un pueblo P or si los gringos no tuvieran dificultades, el valeroso pueblo norcoreano decidió dar una sonora bofetada a la política imperial de Washington. No de otra manera puede interpretarse el hecho de que la República Democrática de Corea haya decidido reactivar unos reactores nucleares y que después no se haya dejado amedrentar por las amenazas de EU que desde poco después del 11 de Septiembre incluyó a ese país en el “Eje del Mal”. En efecto, el Tío Sam amenazó con llevar el caso ante el Consejo de Seguridad de la ONU para –es de suponer– organizar un ataque “preventivo” contra el país asiáti- co si este no renuncia a utilizar sus reactores. La primera respuesta valiente vino de los amenazados. El embajador norcoreano en la ONU afirmó que: «Ahora consideramos cualquier tipo de sanciones económicas que sean adoptadas por el Consejo de Seguridad como una declaración de guerra». A la inesperada respuesta norcoreana se sumó el descontento de los aliados de EU quienes decidieron prestar poca atención a la teatral salida de Bush que estuvo acompañada de la respectiva campaña de desinformación y mentira. Ni siquiera Corea del Sur mostró interés alguno en acompañar a EU en su nueva tropelía: el segundo hombre en el ejército de Seúl públicamente puso en duda que sus vecinos del Norte poseyeran armas nucleares como afirma el Pentágono, y por simple lógica económica a nadie convence el cuento de que ese arruinado país sea el mayor exportador de misiles balísticos, como temerariamente afirmó el secretario de la Defensa, Rumsfeld. Por ello, a los yanquis no les quedó camino diferente de hacer a un lado su amenaza y dejar en el congelador cualquier medida contra el digno pueblo norcoreano. Arriba, aspectos de las Manifestaciones en Davos y Ginebra. 20 N° 15 Bogotá, febrero 21 de 2003 Melbourne - Australia Amsterdam - Holanda Nueva York - USA Madrid - España Roma - Italia La Antártida Roma - Italia Londres - Inglaterra Berlín - Alemania Madrid - España ¡Elplaneta contra Bush! El 15 de febrero se llevó a cabo en 603 ciudades de 75 países lo que los medios del mundo calificaron «como la movilización más grande en contra de la guerra en la Londres - Inglaterra historia de la humanidad».