NUBES NEGRAS La modorra que algunas personas sufren en verano hace que sus mentes entren en un letargo estacional que reduce o anula sus cerebros, solo activos cuando piensan en el baño, la sandía, el gazpacho, o la cerveza fresquita. Por lo general, es el verano en nuestras latitudes una época de andar a cámara lenta , de esperar a que llegue el otoño como si fuera una primavera creativa anticipada al propio invierno donde el frío, ahora tan deseado, se convierta en enemigo y se busque el calorcito de una buena manta zamorana de pura lana. La Poesía Visual y los que la producen, no están ajenos a este fenómeno; en verano, los que la practican, se prodigan menos, hay menos convocatorias, es como si también Esta se fuese de vacaciones para recargar energías y si la crisis que nos atenaza se lo permite, florecer en septiembre; “Cuando llegue septiembre todo será maravilloso”, decía la letra de una antigua y ya trasnochada canción… ¿Cómo será este septiembre? Hemos asistido a una década maravillosa; había dinero de sobra y esto también se notaba en este campo. Si lo comparamos con tiempos pretéritos, veremos la diferencia que hay entre las antiguas publicaciones a fotocopia en blanco y negro, sobre papel normal y las magníficas facturas de las últimas en las que el lujo, el color, el número de páginas y las calidades evidenciaban que detrás había medios más que suficientes. El viejo cuento bíblico de las vacas flacas y gordas puede llegar a repetirse y a lo peor esta pasada “DECADA DE ENTUSIASMO” comience a declinar en la siguiente. Cuando el “Poderoso caballero Don Dinero” escasea, la cultura se resiente antes que otras cosas. “Malos tiempos para la lírica”. ¿Habrá alcanzado el péndulo que marca los ritmos de lo poético visual su punto máximo? La fuerza de la gravedad es así y cuando lo que sube se queda sin fuelle, ya se sabe lo que pasa. Ahora que se estaba saliendo de las catacumbas, que se ha llegado a la Universidad, que importantes editoriales han puesto sus ojos el Ella, que hay más poetas visuales que nunca, que…Ha tenido que venir la crisis a estropear también aquí las cosas. Pero vendrá septiembre y ya veremos, pues lo cierto es que algunos proyectos hay pendientes ya que por suerte, la modorra al principio aludida no la sufren todos. Ojala que las nubes negras que penden sobre el territorio no descarguen tormenta de granizo y esta crónica con inclinaciones pesimistas solo demuestre que el que la ha escrito no venía para profeta, ya que también es cierto que la historia nos ha demostrado que para practicarla no se necesitan grandes medios, que estos siempre pueden ser suplidos por una buena voluntad y mejores ideas. Ahora las cosas son más sencillas; por poner un ejemplo anotar que tenemos Internet, que no es moco de pavo. Habrá que ponerse a trabajar el ingenio, que como ya quedó demostrado en nuestro Siglo de Oro, tiende a agudizarse cuando vienen mal dadas. Saludos a toda la familia de lo poético visual y “ARRIBA LOS CORAZONES”, que decían los romanos en latín para dar ánimos. Manuel Calvarro Sánchez Colaborador del BOEK861 Huelva 30-7-2012 http://www.manuelcalvarro.com/