http://www.soenyun.com/Blog/blog/2010/08/04/tulip-mania-paintings/ “Una sátira de la Tulipomanía”, pintura de Pieter Brueghel el Joven (1565 – 1636). ¡Infectadita te ves más bonita! Fernando Vázquez Bravo Ahí viene la plaga… Los tulipanes llegaron oficialmente a Europa a mediados del siglo XVI provenientes del entonces imperio otomano. Ogier de Busquec, el embajador de Austria ante el imperio llevó consigo las primeras semillas y bulbos de tulipanes al jubilarse de su servicio en 1554. De Busquec además de ser un hábil diplomático, era un entusiasta de la botánica. Envió varias de semillas y bulbos que obtuvo a su amigo y reconocido botánico flamenco Carolus Clusius, a quien con el se le consideraría no sólo como el padre del proceso de aclimatación de los tulipanes a las condiciones neerlandesas --hoy Países Bajos--, sino también por su ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 1 detallada observación de un fenómeno de peculiar belleza; la irrupción de colores y formas extravagantes en los pétalos uniformes de algunos tulipanes. Esta irrupción de colores y diseños diversos, muchos de ellos parecidos a flamas, dotaron de una estética peculiar a los tulipanes. Clusius observó, en forma casi romántica, que la peculiar belleza que adquirían estos tulipanes extravagantes venía acompañada con la promesa de una muerte prematura. En general los tulipanes de particular belleza solían perecer más rápido que los tulipanes normales. No fue sino hasta el inicio del siglo XX cuando se demostró de manera fehaciente que el virus Rompe Tulipanes es el causante de esta efímera hermosura pictórica y que es precisamente la infección del tulipán lo que le hace marchitarse con mayor velocidad. En la figura 1 se muestra un tulipán infectado (izquierda) y uno sano (derecha). Figura 1. http://mrbrownthumb.blogspot.mx/2010/05/tulip-viruses.html En 1594 comenzaron a cultivarse los primeros tulipanes en lo que hoy conocemos como Holanda. A partir de ese momento su popularidad ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 2 comenzó a crecer meteóricamente. En los albores de la época de oro neerlandesa (siglo XVII), la expansión económica resultado del éxito del comercio marítimo de los países que conformaban la Unión de Utrecht– grupo de países que se levantaron en contra del dominio español de Felipe II- con el resto de Europa tuvo como resultado el enriquecimiento constante no sólo de los grandes comerciantes neerlandeses sino de una clase media con bríos de crecer económicamente y demostrar su enorme riqueza ante el mundo conocido. Este apetito de reconocimiento social encontró en los tulipanes “rotos” una fascinación exquisita como baluarte de poder económico y distinción social. Con “B” de bulbos y de burbujas especulativas Los tulipanes rotos eran bellos, escasos y caros. Mientras mayor era su escasez, también lo era el precio que se ofrecía por sus bulbos. Los cultivadores de tulipanes solían nombrar a sus variedades con nombres rimbombantes que denotaban estatus social, por ejemplo: Admireal (Almirante) o Generael (General), seguidos del nombre propio de sus compradores o de las ciudades en donde residían; todo esto en una cuidadosa apología snob. En el argot contemporáneo, eran hipsters mucho antes de que ser hipster estuviera de moda. De todas las variedades de tulipanes que se calculan en unas 500 únicamente en la Amsterdam de 1636, la Semper Augustus era reconocida como la más extraña (Bizarden) y cara de todas ellas. Por un bulbo de esta variedad se llegó a pagar un total de 3,000 florines neerlandeses, cantidad equivalente a las ganancias de un artesano altamente calificado en diez años de trabajo. En la figura 2 se encuentran varias acuarelas del tulipán Semper Augustus. ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 3 Figura 2. http://gardenofeaden.blogspot.mx/2009/11/tulip-semper-augustus-does-itstill.html La demanda de tulipanes crecía al mismo ritmo que la riqueza de los holandeses del siglo XVII; sin embargo, la oferta de tulipanes “rotos” no pudo seguir este vertiginoso ritmo por varias razones: la germinación de la semilla, el crecimiento de la planta y la primera floración del bulbo es un proceso de que requiere de siete a 12 años; el periodo de floración del bulbo es anual y, una vez infectados, únicamente los bulbos reproductores (hijos del bulbo madre) son capaces de repetir el patrón del virus en los pétalos después de un periodo de cuidado que va de uno a tres años. Existía un desfase temporal inherente al proceso de cultivo de los tulipanes “rotos” que alentó nuevas formas de comerciar con ellos. A partir de 1634 los bulbos comenzaron a venderse fuera de su periodo de floración. Es decir, no se tenía la certeza del tipo o la calidad de tulipán que se había comprado sino hasta un año después, cuando el bulbo volvía a florecer. Este fenómeno atrajo al mercado de los tulipanes a especuladores holandeses, franceses y a cualquier persona capaz de convencer a otras de pagar un precio exorbitantemente alto por un bulbo independientemente de su calidad o belleza, ambas cualidades ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 4 desconocidas para el comprador al momento de la transacción. La burbuja especulativa en el precio de los tulipanes estaba en marcha… pero, qué es, exactamente, una burbuja especulativa? Tocar lo intangible. Comenzaré esta sección dejando claro un punto: no existe una concepción unánime y clara en economía de qué es y no es una burbuja especulativa. Si atendemos a la reputación de la Real Academia de la Lengua Española, y omitimos las nuevas incorporaciones papichulas aprobadas últimamente, la palabra especular significa: “perderse en sutilezas o hipótesis sin base real”. En el contexto de la tulipomanía del siglo XVII en Holanda, ésta es precisamente la definición que buscamos. Personas que compraban un bulbo a un precio y lograban después, bajo cualquier argucia, vender a otra persona el mismo bulbo a un precio mayor. En general, un especulador intenta obtener una ganancia extraordinaria con una fórmula muy simple: comprar barato y vender caro. La naturaleza de una burbuja especulativa obedece al hecho de comprar un bien (bulbos, granos, acciones, bonos, hipotecas, etc.) y aprovechar el momento en que el precio de este bien aumente exorbitantemente de forma artificial para venderlo después. Para Robert Shiller, premio Nobel de economía en 2013, la definición de burbuja especulativa es: “[…] una situación en la cual los precios son mantenidos temporalmente altos debido al entusiasmo infundado de los inversionistas, por encima de una evaluación consistente de su valor real.” El economista norteamericano Hyman Minsky formuló en su famoso libro Estabilizando una economía inestable, la hipótesis conocida como de Inestabilidad Financiera, que puede ayudarnos a dilucidar las etapas que conforman una burbuja especulativa para poder comprenderlas un poco mejor: ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 5 Figura 3. http://www.allposters.com/-sp/People-Reaching-For-the-Balloons-at-the-Palm-BeachParty-Posters_i3752939_.htm 1. Innovación. Se presenta una innovación (perturbación) en la economía: tecnológica, financiera o de crecimiento económico. 2. Propagación. Los precios de la industria beneficiada por la innovación comienzan a aumentar, pero dentro de los rangos normales (dentro de su valor real de mercado). Aumenta la demanda del bien en cuestión por su relevancia, moda o innovación tecnológica o financiera. 3. Euforia. Se presenta un aumento exorbitante en los precios de los bienes (bonos o acciones) de la industria afectada por la innovación. En general, este proceso viene acompañado por grandes cantidades de crédito ofrecidas por los bancos a tasas de interés muy bajas para poder comprar los bienes (tulipanes) o las acciones deseadas. ¿Por qué deseamos comprar? Es muy fácil, porque tenemos el entusiasmo (infundado) de que el precio ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 6 seguirá aumentando y, ese hecho, nos hará más ricos y nos dará la posibilidad de vender lo que compremos más caro. 4. Límite del precio. En algún momento el precio del bien detiene la tendencia ascendente. Esto se debe a que la percepción de la burbuja es innegable e inevitable; se acepta que el precio del bien se encuentra muy por encima de su valor real y los vendedores dejan de encontrar compradores dispuestos a pagar el precio inflado del bien. 5. Caída y crisis. En ese momento se comienza a vender en masa el bien en cuestión. Esto genera una caída abrupta en el precio. Si no eres capaz de vender tu bien (tulipán, acciones, bonos, etc) antes de que el precio caiga por debajo del precio al cual lo compraste… bueno, entonces tendrás perdidas. Además, recuerda que mucho del dinero que utilizaste para comprar no es tuyo, sino de algún banco al que le pediste prestado. No sólo tienes perdidas, sino que ahora estás endeudado con una institución financiera y serás condenado a recibir llamadas telefónicas los domingos a las 6:00 AM por el resto de tus días. Es importante señalar que la hipótesis seminal de Minsky toma como agente principale al sistema bancario, para este caso utilizamos una generalización que se podría aplicar a cualquier actividad económica. El gran problema es que no somos capaces de identificar una burbuja especulativa sino hasta llegar al punto en que su explosión es inevitable. Una burbuja especulativa es un escenario irracional en el que, por definición, los participantes del mercado no saben que están participando en una burbuja especulativa. Parafraseando al economista norteamerciano Michael Woodford: si supiéramos cómo identificar plenamente una burbuja especulativa, éstas no representarían el problema que son hoy. ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 7 Encuentra las diferencias: tulipanes e hipotecas. Retomemos a nuestros optimistas neerlandeses del siglo XVII. En octubre de 1636 los bulbos fueron plantados para que florecieran en 1637. Sin embargo, a partir de ese momento, el precio de los bulbos comenzó a aumentar dramáticamente, tanto el de los tulipanes rotos como de los normales, la burbuja entró en la fase de euforia. A partir de noviembre de 1636 y hasta febrero de 1637, cuando estalló la burbuja, algunos bulbos fueron revendidos entre cinco y diez veces, siempre a precios mayores. Por ejemplo, los bulbos de Semper Augustus llegaron a ser vendidos a inicios de enero de 1637 a lo equivalente a una mansión completa en Amsterdam (con un valor de 5000 florines neerlandeses). Para el 7 de febrero de 1637 el mercado de bulbos de tulipanes en Holanda había colapsado. Figura 4 En la figura se muestra el desarrollo del índice de precios de los tulipanes en Holanda durante tres meses http://es.wikipedia.org/wiki/Tulipoman%C3%ADa y Imagen obtenida modificada por de Silvia Zenteno de León. Si comparamos la figura anterior con la tendencia del monto total de préstamos hipotecarios subprime (de baja calidad y alto riesgo) que tuvieron un papel central en la crisis financiera mundial de 2007–2009, ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 8 podemos apreciar un patrón de comportamiento que no ha cambiado en más de 500 años. Al menos los tulipanes eran hermosos, ¿no?. Figura 5. Imagen obtenida http://en.wikipedia.org/wiki/Subprime_mortgage_crisis y modificada de por Silvia Zenteno de León. La historia financiera de los tulipanes en Holanda, fue la pequeña historia de la primera burbuja especulativa de la cual existen registros escritos en la historia de la humanidad. Bibliografía: • Shiller, Robert J. Irrational Exuberance. Princeton University Press. 2000 • Minsky, Hyman. Stabilizing an Unstable Economy. Mc Graw Hill. 2008 • Van der Veen, A. Maurits. The Dutch Tulip Mania: The Social Foundations of a Financial Bubble . Department of Government College of William & Mary.2012 • Lessons from history VII - Tulip mania and the ‘bubble’ propaganda of elites Obtenida el 11 de diciembre de 2014 de ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 9 http://www.finance-watch.org/hot-topics/blog/802-lessons-fromhistory-tulip-mania • Tulip mania obtenida el 11 de diciembre de 2014 de http://en.wikipedia.org/wiki/Tulip_mania ¡Infectadita t eves más bonita! / CIENCIORAMA 10