(41) H1ST0GÉNESIS Y EVOLUCIÓN DE LA MICROGLÍA 253 caracteres de la microglía no difieren ostensiblemente, puesto que c o n su definitivo emplazamiento coincide su a c o m o d a c i ó n morfológica a las estructuras que la rodean y la adquisición d e caracteres fijos e inmutables en el estado b) EN LOS ANIMALES fisiológico. ADULTOS A s í c o m o en el cerebro la región más poblada de microglía es la substancia gris cortical, así también en el cerebelo adulto es la zona plexiforme de las circunvoluciones la más rica en e l e ­ mentos m e s o d é r m i c o s intersticiales, que no faltan, sin e m b a r g o , en las estratificaciones s u b y a c e n t e s de la corteza, en la substan­ cia blanca lamelar ni en los territorios profundos del centro medular. Cualquier mamífero es bueno para hacer la demostración del emplazamiento y caracteres de la microglía cerebelosa; pues, aunque siempre es de facilísima coloración, quizá sea el c e r e b e l o el órgano d o n d e m á s c o m p l e t a m e n t e se i m p r e g n a c o n el c a r b o ­ nato de plata. S i se explora, pues, el cerebelo del h o m b r e , del m o n o , d e l gato, del conejo, etc., previa tinción c o n el carbonato argéntico, hállase un contenido microglial c u y o s caracteres topográficos y morfológicos coinciden puntualmente, así en lo q u e respecta a sus cualidades específicas c o m o a los detalles de orden secunda­ rio. Cuando, partiendo de la superficie, r e c o r r e m o s los diferentes estratos de una laminilla cerebelosa, v e m o s pronto que no existe en la microglía nada que se salga de la descripción general, y que de nuevo se confirman nuestras fundamentales afirmaciones respecto a la m a y o r abundancia de aquélla en la substancia gris que en la blanca, al variable número, dentro de ciertos límites, en las diferentes zonas de una misma región, y a la influencia d e la arquitectura nerviosa local en la forma de los microgliocitos. Zona plexiforme. — N o se aprecia marcada diferencia cuanti­ tativa en la microglía huésped de los diferentes planos de la zona molecular (fig. 1 9 , A ) , c u y a total extensión se encuentra s e m ­ brada de corpúsculos m e s o d é r m i c o s , repartidos c o n bastante igualdad. E x i s t e n ciertamente parajes donde aquéllos se e n c u e n Mem. de la R. Soc. Esp. de Hist. Nat., t. X I , 1 9 2 1 .