Formación Instrumental 2º Maestro/a E. Ed. Musical Universidad de Jaén Isabel Ayala CONSEJOS BÁSICOS PARA LA INSTRUMENTACIÓN DE TEXTOS Consiste en la elaboración de una composición instrumental a partir de un texto dado, normalmente poético. PASOS A SEGUIR: 1. ESQUEMA. Realizar un esquema previo en el que determinaremos la estructura del texto (tipo de estrofa, rima, número de sílabas por verso, carácter) que nos dará pistas a la hora de estructurar la música: forma básica, número de compases por verso y sección, etc. Repasar los principales tipos de estrofas de la lírica popular española. 2. RITMO. En primer lugar, buscar los acentos de la prosodia del texto y en base a ellos elaborar el esquema rítmico, teniendo en cuenta para la elección del compás y las figuraciones adecuarnos al ciclo de Primaria que se exija. Poner énfasis en algunos aspectos claves como el tipo de comienzo-carácter del texto: anacrúsico, tético, acéfalo, buscar la cuadratura procurando dar el mismo número de compases a los versos con igual número de sílabas, elección de fórmulas rítmicas claves que sean susceptibles de posterior trabajo (comenzar con el trabajo de la blanca, negra, corchea, semicorchea y en ciclos superiores introducir poco a poco las síncopas, los grupos de valoración especial). Hemos de procurar que tanto el ritmo como la melodía mantengan en lo posible una estrecha relación con el texto: notas por sílaba (se recomiendan para empezar las relaciones silábicas, aunque paulatinamente introduciremos neumas y melismas), formal (conocer las principales estrofas de la literatura castellana –principalmente arte menor: romances, seguidillas, redondillas, cuartetas, tercetas, pareados- así como la estructura de la música popular española: jotas, fandango, seguidilla, por si el texto se correspondiera con alguna de ellas) y semántica (relacionar con el significado del texto, su carácter a la hora de establecer las indicaciones de tempo – rápido, medio, lento-, la presencia de palabras que se relacionen con el ritmo – marchar, pasodoble, himno, rock, etc.: binario; saltar, danzar, minué, fandango, etc: ternario). El método Orff Schulwerk (trad. española Sanuy y González Sarmiento) trabaja mucho las cuestiones de prosodia con el trabajo rítmico de refranes en distintos compases (“Oro parece, plata no es”). Sería un buen comienzo en este sentido. 3. ACOMPAÑAMIENTO RÍTMICO. Algunos de los recursos más utilizados son los ostinatos prosódicos, realizados sobre palabras del mismo texto o relacionadas con él; ostinatos rítmicos con percusiones corporales (que han de representarse adecuadamente en tetragrama), acompañamientos con instrumentos de percusión). 4. REALIZACIÓN DE LA MELODÍA Escoger la escala más adecuada según el carácter del texto y la edad del alumnado: desde melodías de dos o tres notas- sol mi-, a la escala pentafónica (do re mi sol la), de la escala diatónica mayor o menor –utilizando todas o parte de las notas- hasta los modos populares (frigio, mixolidio). Cuidado con los giros melódicos, la interválica (jugar con el trabajo del acorde mayor, menor, partir de movimientos conjuntos y saltos de tercera para trabajar posteriormente los saltos) el ámbito de la melodía (se recomiendado es una 6ª; una 8ª como máximo). Buscar una estructura cuadrada (preferentemente frases de cuatro compases, agrupadas en períodos), la recurrencia en partes iguales y el contraste o la variación en secciones distintas. Intentar que el acompañamiento armónico se intuya sólo con escuchar la melodía. Lograr, en la medida de lo posible, una melodía cantabile (que se pegue al oído), bella, estructurada (tensiónreposo) y fácil de recordar. Formación Instrumental 2º Maestro/a E. Ed. Musical Universidad de Jaén Isabel Ayala 5. ACOMPAÑAMIENTO MELÓDICO-ARMÓNICO. Utilizaremos preferentemente la propia voz y los instrumentos de la orquesta escolar (Orff): acompañamiento rítmico, acompañamiento armónico y realización de series melódicas, melódicos. Hemos de conocer sus símbolos a la hora de plasmar la partitura. Tampoco podemos olvidar los instrumentos folklóricos o populares ni los de elaboración casera (cotidiáfonos). Acompañamiento rítmico: Destinado a instrumentos de percusión. Tener en cuenta el amortiguamiento del sonido en cada instrumento para asignarle unas figuras u otras. Importante: optimizar recursos (intentar no repetir esquemas parecidos en distintos instrumentos). Acompañamiento armónico: Análisis básico de la melodía con los acordes fundamentales y cadencias principales y va a ir determinado en función al ciclo de edad. El acompañamiento armónico está destinado preferentemente a los instrumentos de placas (uso escolar) que pueden realizar varias notas simultáneas o alternadas. También se puede acompañar con cualquier instrumento polifónico (guitarra, piano). Diferenciar entre los registros de los instrumentos: los xilófonos y metalófonos bajos-altos se recomiendan para realización de bordones, notas fundamentales de los acordes, ostinatos, con notas simultáneas o alternadas. Los xilófonos y metalófonos sopranos y carillones se utilizan para enriquecer la armonía (arpegios, notas extrañas a la armonía, segundas voces) con figuraciones más rápidas usualmente y ostinatos. Es fundamental conocer la técnica de estos instrumentos así como la del enlace de acordes para la realización de esta parte. Tener en cuenta la técnica de cada instrumento de placas, alternacia de brazos, figuraciones recomendadas, etc. Acompañamiento melódico: Las segundas voces se suelen utilizar en las repeticiones de secciones ya escuchadas para enriquecerlas. Podemos realizar segundas voces con flauta dulce o la misma voz. Se recomienda la textura homofónica para tal efecto con melodías a distancia de tercera o sexta, o en todo caso, que busquen la consonancia. En general, la textura básica en la instrumentación de canciones es la melodía acompañada pero podemos trabajar la homofonía y la polifonía (canon, imitaciones, contestaciones) en algunos casos. 6. SECUENCIACIÓN, ORGANIZACIÓN DE LA INSTRUMENTACION APLICACIÓN DIDÁCTICA DE LA MISMA EN EL AULA. Y ¿Cómo vamos a estructurar la instrumentación? Presencia de introducciones instrumentales e interludios, partes vocales solas y con acompañamiento instrumental, matices de dinámica y agógica, para dar variedad a la composición. Programar la sesión/sesiones necesarias para el montaje de la instrumentación, teniendo en cuenta todos los elementos de la programación y que la instrumentación no debiera ser sólo un fin en sí misma sino un medio para el aprendizaje integral. Ejemplo: “Alta va la luna” (Nocturnos de la ventana) Federico García Lorca