March 6 Bienaventurados los Pobres en Espiritu Blessed are the Poor in Spirit Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. Mateo 5:3 El mundo del capitán Scott O’Grady se derrumbó el 2 de junio 1995 cuando el avión que piloteaba fue alcanzado por un misil mientras sobrevolaba Bosnia. Cuando Scout tocó el suelo y corrió para cubrirse, su mundo cambió para siempre. En su libro: Regresar con Honor, él dijo: “Mientras me protegía en los bosques de Bosnia, no me sentía como el feroz piloto Capitán O´Grady. Solo era un hombre atemorizado llamado Scout. Mis prioridades fueron revisadas en esa semana de junio”. Sí, él había sido rescatado de una forma dramática, pero de acuerdo a su propia confesión, esos siete días cambiaron su vida y prioridades para siempre. Jesús dijo. “Dichosos son los pobres en espíritu porque de ellos es el reino de los cielos”. Mateo 5:3. Scott O´Grady entiende lo que es la pobreza de espíritu porque él ha estado allí. El aprendió que la desesperación del hombre es una oportunidad para Dios. Pregunto: ¿De qué estaba hablando Jesús cuando usó la expresión “pobre en espíritu”? Pobreza en espíritu y golpeados por la pobreza no es la misma cosa. Jesús no está diciendo que ser pobre es una gran cosa, de ninguna manera. El está diciendo que aquellos que no tienen recursos y fuerza y no se pueden ayudar a sí mismos, son candidatos para recibir la ayuda de Dios, recibiendo a la vez el reino de Dios y sus bendiciones. La misma palabra que se traduce como pobre también es usada en el evangelio de Lucas cuando el escritor habla del mendigo Lázaro. Muchos de nosotros, sin embargo, encontramos difícil entender que somos indigentes espiritualmente y que Dios es nuestra única esperanza. No es de sorprenderse que tratemos de solucionar las cosas por nosotros mismos al decir: “Dios, esto está fuera de mi alcance”. Ser pobre en espíritu es la aceptación sincera de que sus recursos se han terminado, que ya no tiene una solución rápida o instantánea, que no hay esperanza fuera de Dios. El Príncipe de Paz mismo no le rechazará, todo lo contrario, abrirá la puerta y le bendecirá. Jesús dijo a sí mismo: “Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos”. Lectura: Mateo 5:31-48 The preceding material was written and produced by Dr. Harold Sala. All rights reserved ©. Reproduction for sale or financial profit is prohibited. Permission to reprint may be obtained by contacting Guidelines International Ministries, Box G, Laguna Hills, CA 92654 USA. Email at guidelines@guidelines.org.