TEMA 4 (2008-2009) LA EVALUACIÓN DEL IMPACTO AMBIENTAL

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TEMA 4 (2008-2009)
LA
EVALUACIÓN
DEL
IMPACTO
AMBIENTAL:
LOS
SISTEMAS
DE
INDICADORES EN LA OCDE Y LA UNIÓN EUROPEA
1. Los indicadores ambientales en la toma de decisiones de la política de
evaluación ambiental.
Los indicadores son muy útiles en los estudio de impacto ambiental en la medida en la pueden
ayudar a identificar los impactos ambientales siempre que cumplan los siguientes objetivos:
a. Resumir los datos ambientales existentes.
b. Comunicar información sobre la calidad del medio afectado.
c. Evaluar la vulnerabilidad o susceptibilidad a la contaminación de una determinada
categoría ambiental.
d. Centrarse selectivamente en los factores ambientales claves.
e. Servir como base para la expresión del impacto al predecir las diferencias entre el
valor del índice con proyecto y su valor sin proyecto
Además son considerados como una etapa imprescindible en el proceso de toma de
decisiones de política económica ambiental. Concretamente éste tiende a concretarse en dos
etapas diferenciadas:
1º. Establecer objetivos ambientales en base a una serie de INDICADORES que
definen el nivel en el que han de protegerse las capacidades medioambientales
(tema 4), y la implantación de procedimientos de contabilidad integrados (tema 5).
Al establecer los objetivos ambientales nos encontramos dos tipos de indicadores:
-
Los indicadores primarios son los que miden cantidades y calidades de las
características claves del medio ambiente cuyos valores queremos mantener
constantes como, por ejemplo, el uso de la tierra, los recursos acuáticos
disponibles, los stocks de recursos no renovables o la diversidad de especies y
estabilidad de los hábitats.
-
Los indicadores secundarios son los que miden las actividades económicas
causantes de cambios en los indicadores anteriores; en definitiva se ocupan de
medir los flujos de entradas y salidas de los stocks mencionados en los
indicadores primarios. Por ejemplo, índices de emisión y descarga de
contaminantes, uso de agroquímicos, deforestación y reforestación o tasas de
reciclaje y generación de residuos sólidos. El establecimiento de metas para
estos indicadores permitirá hacer operativos los objetivos para los primarios.
2º. Influir en la actividad económica empleando una serie de instrumentos voluntarios
o dirigidos que limiten la conducta nociva de los individuos y empresas hacia el
medio ambiente (tema 6). Para mantener la economía dentro de las restricciones de
sostenibilidad fijadas en la primera etapa por los objetivos primarios y secundarios,
debe limitarse la actividad económica a través de una serie de instrumentos
económicos que pretenden influir en el comportamiento de las empresas y de los
consumidores sin restringir su libertad de tomar decisiones. Básicamente
distinguimos cuatro tipos de instrumentos: Mecanismos voluntarios, regulaciones,
gasto gubernamental e incentivos económicos.
Centrándonos ya en el uso de indicadores existen básicamente dos enfoques diferentes, no
necesariamente
excluyentes
entre
sí,
que
pretenden
definir
nuevos
indicadores
medioambientales:
Mientras una corriente científica reformista (Economía Ambiental) (1) apunta hacia
procedimientos de ajuste del sistema clásico de medición del PNB y de la contabilización
económica similar a la analizada anteriormente, (2) la corriente crítica (Economía Ecológica),
sin embargo, propone una transformación de ese sistema clásico, incluyendo nuevas
definiciones y medidas de las interacciones entre medio ambiente, desarrollo y bienestar.
Para ello se propone elaborar un marco de referencia de indicadores capaces de estructurar e
integrar las distintas fuentes de información, configurados de manera progresiva a medida que
avanzan determinados métodos de medición de los aspectos económicos, sociales y
ambientales.
2. Reajuste ambiental e insuficiencias socioeconómicas del PNB
Las insuficiencias socioeconómicas del PNB emanan fundamentalmente de su
desconsideración de la economía social traducida en una ausencia de medición de factores
relacionados con la calidad de vida que no son directamente valorados por el sistema
económico como el ocio o el trabajo doméstico y de su ignorancia de la dependencia del
hombre actual del mundo natural (figura 7.3, pág 233, capítulo 7 de Jiménez Herrero).
Por ello, el PNB, considerado como el indicador básico del éxito económico requiere
ser ajustado con nuevas técnicas de “reverdecimiento” con el fin de tener en cuenta que,
aunque la creación de riqueza y el crecimiento de la renta permita mayor consumo y mayores
niveles de vida, la degradación del medio ambiente acaba reduciendo el bienestar de la
población y la capacidad de la economía para producir en un futuro.
De esta manera, el PNB podría definirse y cuantificarse de una forma más realista desde el
punto de vista medioambiental si se pudieran realizar tres tipos de ajuste por:
1- La depreciación de los capitales naturales y otras formas de capital cultural hechas por el
hombre
2- La inclusión de la degradación ambiental en los gastos defensivos para controlar las
contaminaciones ambientales y hacer frente a los gastos de compensación (limpieza,
enfermedades)
3- La degradación del medio ambiente según el daño permanente o residual.
4- De esta manera podríamos referirnos al Producto Nacional Neto (PNN), como un tipo
de PNB ajustado por la degradación del medio ambiente definido del siguiente modo:
PNN= PNB –Depreciación del Capital Hecho por el Hombre – Depreciación del
Capital Natural – Gastos defensivos del Medio Ambiente – Daño ambiental residual.
Cuando se trata de evaluar la depreciación del capital natural no siempre es necesario
conocer el valor del bien o del servicio ambiental perdido, bastaría con conocer lo que
costaría reemplazarlo por otro similar. Sin embargo, la estimación de los gastos defensivos y
daños residuales es fundamental para calcular económicamente las pérdidas infringidas al
medio ambiente.
El ajuste del PNB por los gastos defensivos de protección ambiental implica analizar
como compensar los perjuicios ambientales y los costes sociales derivados de inadecuados
procesos de producción y consumo. En definitiva, se trata de tener en cuenta que si un
proceso económico causa un daño al medio ambiente, cualquier medida para su corrección o
prevención no es una contribución al Valor Añadido y es lógico restarla puesto que no se ha
producido un incremento de bienestar.
En estos términos, los conceptos que habría que descontar del PNB para lograr un PNN
ambientalmente ajustado serían:
a) El coste de las medidas de protección del medio ambiente del sector público, las
empresas y de las familias, así como de sus actividades de consumo.
b) Los efectos ambientales de la salud y otros aspectos del capital humano.
c) Los efectos ambientales negativos causados en un país por las actividades de
producción de otros países.
El ajuste del PNB por el daño ambiental residual consiste en descontar los costes
equivalentes a cualquier degradación residual o permanente en el medio ambiente.
En todos los casos considerados, la principal dificultad para conectar el ajuste ambiental
del PNB estriba en la valoración y traducción monetaria de los costes de protección y del
daño ambiental para contar con unidades homogéneas en los sustraendos. Estas dificultades
han propiciado un notable acuerdo en el mundo científico para definir un marco de referencia
que contemple nuevos indicadores más apropiados a la realidad compleja y global.
3. Marco de referencia de indicadores de desarrollo sostenible
Desde los años setenta, el análisis de los indicadores se está orientando hacia la medición
de aspectos parciales del desarrollo, la calidad de vida y el bienestar general. Algunos
ejemplos son el Índice de Desarrollo Humano (IDH) (PNUD) y el Índice de Bienestar
Económico Sostenible (IBES) (Daly y Coob), el Índice de sosteniblidad ambiental (ISA), la
huella ecológica o el Índice del Planeta Vivo (más detalle de cada uno de ellos en
http://www.itesm.mx/va/cvds/docs/IndicadoresONUpaises.pdf). A modo de ejemplo, el
primero de ellos, clasifica el nivel de desarrollo relativo de los países ajustando la Renta
Nacional por habitante e incluye variables como la esperanza de vida, el analfabetismo y la
mediana de años de escolarización. Sin embargo, adolece de carencias como la omisión de
consideraciones sobre los derechos humanos o la tendencia a orientarse hacia otras cuestiones
trascendentales como el medio ambiente laboral o la igualdad de la mujer que se desmarcan
de cuestiones específicamente ambientales.
El segundo de los mencionados, el Índice de Bienestar Económico Sostenible (IBES) de
Daly y Coob, trata de medir el bienestar económico otorgando un lugar preeminente al medio
ambiente, teniendo en cuenta aspectos habitualmente no contemplados como el trabajo
doméstico, los gastos defensivos desde una perspectiva no contributiva al bienestar salvo por
la prevención de ciertos males y las externalidades ambientales. No obstante, algunas de las
variables incluidas, como los daños a largo plazo sobre los sistemas ambientales globales son
susceptibles de arbitrariedad y subjetividad por su valoración monetaria indirecta a través de
un mercado en el que esos daños pueden producirse en condiciones cambiantes e inesperadas.
No obstante, más allá de la elaboración de índices la principal tendencia apunta a la
elaboración de un marco de referencia integral de las distintas dimensiones humanas y
ambientales donde se plantea que son necesarias indicaciones de la presión del desarrollo
sobre el medio ambiente y de la influencia de la variación ambiental sobre la actividad
económica. En esta correspondencia biunívoca, la utilización de indicadores físicos
desmarcados de una exigencia de valoración económica absoluta tendría una gran
trascendencia, de manera que si los índices físicos empeoraran (disminución de la calidad del
aire, mayor pérdida de bosques y tierra erosionada,etc) la “capacidad ambiental” de la
economía disminuiría y nos alejaríamos de los niveles apropiados de sostenibilidad ecológica.
A este respecto
la forma de ordenación de los indicadores de sostenibilidad más
consensuada suelen distinguir tres grupos de indicadores de sostenibilidad tal y como los
define la OCDE (figura 7.4, pág 249, capítulo 7 de Jiménez Herrero):
-
Indicadores de presión: orientados a las causas que originan los problemas (flujos
de emisiones, uso de recursos naturales, etc).
-
Indicadores de Estado, efecto o calidad: tratan de relacionar la calidad del medio
ambiente con los efectos de las acciones humanas.
-
Indicadores de Respuesta: tratan de medir la reacción social en relación a las
mejoras del medio ambiente.
No obstante, no es posible especificar una correspondencia única entre cada tipo de
indicador, su naturaleza y los objetivos de su uso. Una posible solución a este problema la
proporcionan indicadores integrados bajo una perspectiva interdisciplinar que contemplen los
aspectos económicos, sociales, ecológicos e institucionales. En esta línea, los indicadores de
sostenibilidad suelen ordenarse bajo un marco integral de referencia donde el Banco Mundial,
siguiendo los trabajos pioneros de la OCDE y las orientaciones de la Comisión de Desarrollo
Sostenible sobre indicadores, ha elaborado una “Matriz de Sostenibilidad” que incluye cuatro
aspectos principales: ambiental, social, económico e institucional (MÁS DETALLE EN
http://www.oecd.org/topic/0,3373,en_2649_34441_1_1_1_1_37425,00.html )
“Sostenibilidad en España 2007”
Observatorio de Sostenibilidad
•PRESENTACIÓN DEL INFORME: informe sosteniblidad
2007 conclusiones\Presentacioninforme2007.pdf
•EVALUACIÓN DE INDICADORES DE DESARROLLO
SOSTENIBLE: informe sosteniblidad 2007
conclusiones\EvaluaciónIntegrada.pdf
“Perfil ambiental en España”
INDICADORES AMBIENTALES
•LISTADO DE INDICADORES: perfil ambiental en
España\Perfil Ambiental de España 2006.doc
•RESUMEN DE RESULTADOS: perfil ambiental en
España\perfilamb2006_resumen.pdf
LECTURAS BÁSICAS:
o Jacobs, M (1996): Capítulo 18: La medición del éxito, en Jacobs, M (1996): La
economía verde. Icaria-Fuhem, Barcelona.
o Jiménez Herrero, L.M. (1997): Capítulo 7: Economía ecológica aplicada e
integración económico-ecológica: Contabilidad ambiental e indicadores de
desarrollo sostenible, páginas 209-259.
o OECD (2003): “OECD Environmental indicators: development, measurement and
use”,
OECDE,
París
(también
disponible
en
http://www.oecd.org/topic/0,3373,en_2649_34441_1_1_1_1_37425,00.html).
LECTURAS OBLIGATORIAS TEMA 4:
o OCDE: “Desarrollo Sustentable. Estrategias de la OCDE para el siglo XXI”,
Capítulo 3 : Evaluación del desempeño ambiental.
ENLACES WEB SOBRE INDICADORES (UTILES PARA ACTUALIZACIÓN
DE INDICADORES AMBIETALES Y DE SOSTENIBILIDAD)
ENLACES WEB SOBRE INDICADORES
•Agencia Europea del medio ambiente AEMA:
•http://local.es.eea.europa.eu/
•Conjunto básico de indicadores AEMA:
•http://themes.eea.europa.eu/IMS/CSI
•Observatorio de sostenibilidad en España. Informe 2007:
•http://www.sostenibilidades.org/observatorio%20sostenibilidad/
•Perfil ambiental en España:
•http://www.mma.es/portal/secciones/calidad_contami
nacion/indicadores_ambientales/perfil_ambiental_2006
/index.htm
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