Documento descargado de http://www.elsevier.es el 21/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. ORIGINALES EL SÍNDROME DE USHER: IMPORTANCIA DE UN DIAGNÓSTICO PRECOZ. IMPLICACIONES EDUCATIVAS Por M. L. Perea Costa CNH - Istituto di Psicologia. Reparto di Neuropsicologia del Linguaggio e Sorditá. Roma. Italia. RESUMEN Este artículo pretende ofrecer información clara y concisa sobre el síndrome de Usher, tanto a padres afectados como a profesionales, con el objetivo de conseguir entre todos un diagnóstico precoz que minimice los efectos del síndrome –a través de una intervención educativa temprana y eficaz– y garantice una mayor calidad de vida a todos los afectados desde la misma infancia. Puntos clave del artículo: definición, tipología, signos que pueden alertar a la familia o al personal escolar sobre la presencia de retinitis pigmentosa, implicaciones psico-educativas y asociaciones/organizaciones nacionales e internacionales relacionadas con el síndrome de Usher. Palabras clave: Sordera. Ceguera. Sordoceguera. Retinitis Pigmentosa. Ceguera nocturna. Deslumbramientos. Lengua de Signos. Rev Logop Fon Audiol 2000;XX(1):37-43 SUMMARY This article intend to provide brief and clear information on the Usher Syndrome specially addressed to people with Usher Syndrome, to their relatives and to professionals working in the fields of deafness, blindness and deafblindness. The aim is to get an early detection of the Syndrome which minimize its effects and ensure a greater quality of life to every affected person from his/her earlier childhood. The main contents of the article are: definition, typology, sign that can alert relatives or the school staff of the presence of Retinitis Pigmentosa, educational implications and National-International Contacts. Key words: Deafness. Blindness. Deafblindness. Retinitis Pigmentosa. Night blindness. Glare. Sign Language. 37 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 21/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Perea Costa, M. L.—EL SÍNDROME DE USHER: IMPORTANCIA DE UN DIAGNÓSTICO PRECOZ. IMPLICACIONES EDUCATIVAS INTRODUCCIÓN Gracias a mi experiencia como profesora de sordos y como Intérprete de Lengua de Signos he tenido la suerte de conocer y trabajar con personas con síndrome de Usher. Con el transcurrir del tiempo me quedó patente el largo, arduo y difícil camino que recorrieron desde la aparición de los primeros síntomas hasta lograr una intervención educativa eficaz, pasando por el innecesario trauma de un diagnóstico tardío y mal comunicado. El diagnóstico del síndrome de Usher es siempre un duro golpe, una gran tragedia (aun cuando existan sospechas de que algo sucede con la vista del pequeño) tanto para los padres como para el afectado, pero lo es más si se ofrece poca, ninguna o, lo que es peor, errónea información sobre los aspectos médicos del síndrome y/o sobre dónde recurrir para obtener el apoyo y los servicios necesarios. Este artículo pretende ofrecer información clara y concisa sobre el síndrome de Usher tanto a padres afectados como a profesionales, con el objetivo de conseguir entre todos un diagnóstico precoz que minimice los efectos del síndrome –a través de una intervención educativa temprana y eficaz– y garantice una mayor calidad de vida a todos los afectados desde la misma infancia. QUÉ ES EL SÍNDROME DE USHER El síndrome de Usher es un grupo de características genéticas que implican pérdida auditiva y alteraciones visuales provocadas por la presencia de retinitis pigmentosa. Se trasmite hereditariamente a través de un carácter autosómico (no ligado al sexo1) recesivo (para que el síndrome se transmita a los hijos, ambos padres deben ser portadores del gen). En muchas ocasiones los padres, siendo portadores, descubren tal situación a través del diagnóstico del síndrome en su hijo. La Retinitis Pigmentosa (RP) es una alteración degenerativa de la retina. Debido a un estrangulamiento de los vasos sanguíneos disminuye el flujo de nutrientes en la parte periférica de la retina, apareciendo acumulaciones características de pigmento sobre ella. 1 38 Afecta por tanto a hombres y mujeres. La retina del ojo humano contiene dos tipos de células fotoreceptoras: conos y bastones. Los conos son los responsables de la visión en condiciones de iluminación, así como de la percepción de detalles y de los colores, mientras que los bastones se encargan de la visión nocturna y en condiciones de penumbra y proporcionan percepción sólo en la gama de grises. Es en la parte periférica de la retina donde existe una mayor concentración de bastones, son estas células las que se deterioran en un primer momento. Debido a la falta de nutrientes los bastones mueren y comienza a disminuir la capacidad para ver con claridad en penumbra o en condiciones de escasa iluminación. Esta pérdida de visión conocida como «ceguera nocturna» suele ser el primer síntoma que manifiestan muchas personas con síndrome de Usher. Posteriormente se deterioran los conos provocando la disminución de la visión periférica (restricción del campo visual) así como la disminución de la agudeza visual (incapacidad para percibir detalles). La extensión y velocidad a la cual la visión se deteriora es extremadamente variable de un individuo a otro, o en un mismo individuo (el deterioro de la visión no sigue ritmos estables) por lo que las predicciones son difíciles (Davenport, 1997). Existen tres tipos de síndrome de Usher: Síndrome de Usher Tipo I: las personas afectadas son sordos profundos de nacimiento, presentan retinitis pigmentosa (RP) aunque sus síntomas no sean evidentes (la ceguera nocturna suele aparecer en la infancia aunque puede no hacerlo hasta la adolescencia o la edad adulta) y en ocasiones manifiestan problemas de equilibrio. Síndrome de Usher Tipo II: las personas afectadas suelen presentar una pérdida auditiva estable y moderada (lo que en España se conoce como hipoacúsicos), retinitis pigmentosa, y no presentan problemas de equilibrio. Síndrome de Usher Tipo III: las personas afectadas posiblemente nacieron con una buena audición o con una ligera pérdida que aumentó progresivamente. Presentan retinitis pigmentosa y en algunas ocasiones aparecen problemas de equilibrio. La cegura nocturna aparece en la infancia y/o adolescencia. En los tres casos los adultos suelen estar legalmente reconocidos como «ciegos». En España el síndrome de Usher suele causar el 50% de los casos de sordoceguera (Fundación ONCE). En EE. UU. (Kimberling, Moller, 1995) la frecuencia de apaRev Logop Fon Audiol 2000;XX(1):37-43 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 21/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Perea Costa, M. L.—EL SÍNDROME DE USHER: IMPORTANCIA DE UN DIAGNÓSTICO PRECOZ. IMPLICACIONES EDUCATIVAS rición del síndrome de Usher (Tipo I y II) entre los niños nacidos con problemas de audición es del 3 al 6%. DIAGNÓSTICO PRECOZ Con el diagnóstico de cualquier enfermedad comienza un duro período en el que tanto en el afectado como en sus padres, familiares y amigos afloran sentimientos dolorosos de incertidumbre, miedo, soledad, culpa, rabia, tristeza, desesperanza... en el caso del síndrome de Usher dichos sentimientos se intensifican debido a lo inesperado del diagnóstico (en la mayoría de los casos los padres descubren en este momento que son portadores del síndrome) y, debido al hecho de estar implicados los dos sentidos considerados primordiales (vista y oído). Generalmente los padres buscan la confirmación del diagnóstico visitando numerosos médicos y hospitales; tras dicho peregrinaje suele comenzar la búsqueda de información sobre el síndrome, sobre servicios médicos, educativos y sociales, así como la búsqueda de asociaciones de familiares o afectados en los que poder encontrar apoyo e información veraz. Considero que sólo a través de dicha información se obtendrá la serenidad necesaria para aceptar realmente la situación y comenzar a elaborar la crisis que el diagnóstico provocó. Por este motivo la necesidad de un diagnóstico precoz a través de profesionales que trabajan en el mundo de la sordera o de los propios familiares es de vital importancia a la hora de obtener información útil. Con mucha frecuencia el mundo de la medicina desconoce los aspectos pedagógicos y psicológicos de la sordera, la ceguera y la sordoceguera, por lo que no es extraño encontrarnos con diagnósticos erróneos («su hijo presenta un retraso mental considerable»), diagnósticos mal comunicados («no hay nada que hacer»), pronósticos catastrofistas («su hijo se quedará ciego antes de final de año»), consejos educativos improvisados («lo mejor que puede hacer es llevarle a un colegio para ciegos y enseñarle Braille») (Miner, Cioffi, 1997) y familias «profesionalmente desorientadas». Un diagnóstico precoz del síndrome de Usher realizado a través de profesionales del mundo de la sordera minimizaría la confusión, garantizaría la obtención de información y acercaría los servicios (educativos, médicos, sociales, etc.) y el apoyo psicológico necesario a todos los inteRev Logop Fon Audiol 2000;XX(1):37-43 resados (al propio alumno, así como a los padres, familiares y amigos), en un corto período de tiempo. Pero esto sólo será posible si los profesionales en contacto con el niño sordo durante la etapa escolar conocen el síndrome de Usher y saben reconocer signos de alarma. Dentro de la población escolar sorda los sordos congénitos constituyen un grupo de alto riesgo cuyo seguimiento –de relativa facilidad– debería ser una prioridad. Existen cuestionarios (Davenport, Pitsburgh, 1995) que ayudan a realizar un primer despistaje a través del cual descartar posibles casos de RP o sugerir una revisión ocular más detallada. Hablar de diagnóstico precoz es hablar de calidad de vida, calidad de vida de una familia que ya ha debido afrontar el trauma de la sordera de uno de sus miembros, y, sobre todo, calidad de vida de un niño... un niño que tiene todo un futuro por delante, un niño que tiene todo el futuro que nosotros, como profesionales, seamos capaces de ofrecerle a él, a sus padres y al resto de la sociedad. SIGNOS QUE PUEDEN ALERTAR A LA FAMILIA O AL PERSONAL ESCOLAR SOBRE LA PRESENCIA DE RETINITIS PIGMENTOSA Los primeros signos de retinitis pigmentosa que aparecen en el síndrome de Usher suelen estar relacionados con la pérdida de visión en condiciones de escasa iluminación. Debido a la incapacidad para ver con claridad en dichas condiciones, el chico con síndrome de Usher suele golpear o tropezarse con objetos y personas, tiene problemas para deambular por el hogar o la escuela si hay poca iluminación o durante la noche, no suele salir de noche si no va acompañado o con una linterna, disminuye la comprensión de mensajes tanto a través de la labiolectura como a través de Lengua de Signos, se manifiesta molesto con los cambios de decoración y/o disposición del mobiliario en casa o en la escuela, etc. Un posterior grupo de signos hace evidente la disminución de visión periférica y la restricción del campo visual (en España se conoce como «visión tubular»). De este modo un alumno con síndrome de Usher puede no darse cuenta de que un compañero está intentando lograr su atención para comunicarle algo, o emplea demasiado tiempo en encontrar objetos que le cayeron de la mesa (sobre todo si el pavimento es de bajo contraste), pierde a menudo el renglón de lectura, lee moviendo la cabeza o 39 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 21/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Perea Costa, M. L.—EL SÍNDROME DE USHER: IMPORTANCIA DE UN DIAGNÓSTICO PRECOZ. IMPLICACIONES EDUCATIVAS guiándose con el dedo índice, puede no ver un obstáculo en el suelo, un escalón nuevo en un recorrido habitual, con frecuencia golpea lateralmente con obstáculos y/o personas, puede golpearse la cabeza con señales o mobiliario urbano prominente a media altura, etc. Un tercer grupo de signos refleja la dificultad para adaptarse a los cambios de iluminación y los deslumbramientos. Con muchísima frecuencia podemos encontrar personas con síndrome de Usher que, al enfrentarse a marcados cambios de iluminación, interrumpen la marcha manteniéndose unos minutos quietas en un mismo lugar para continuar adelante una vez realizada la acomodación y adaptación a las nuevas condiciones de iluminación. Esto se produce en el paso de interiores a exteriores o viceversa, al entrar o salir de un cine o teatro, al realizar proyecciones en el aula, etc. Asimismo, para evitar deslumbramientos, estos alumnos suelen llevar gafas de sol incluso en lugares cerrados (sobre todo con iluminación fluorescente) aunque en muchas ocasiones éstas no posean los filtros adecuados. Por otra parte la pérdida de visión se hace más patente no sólo en condiciones de escasa iluminación sino también cuando existe poco contraste figura-fondo. De este modo un alumno con síndrome de Usher puede no encontrar un objeto que le cayó al suelo si el contraste objetopavimento es bajo o nulo, puede tener dificultad en leer fotocopias o manuscritos escritos en color claro, puede vacilar, tropezar e incluso caer en las escaleras si el primer y último peldaño no estaban señalizados adecuadamente, puede no entender un mensaje si el emisor viste ropa rayada, estampada o de bajo contraste con sus manos, etc. En casi la mayoría de los casos durante un primer período en que comienzan a aparecer síntomas de retinitis pigmentosa se produce una compensación natural del sujeto a las limitaciones que ellos implican, de modo que improvisan «técnicas» que les permitan leer sin perder el renglón, explorar constantemente el espacio visual para no perder información, arrastrar los pies para rastrear el pavimento y evitar caídas, llevar siempre un lupa, una linterna, gafas de sol, etc. Es por ello que a menudo no se atribuyen ciertos signos a problemas visuales sino a la torpeza o el despiste del chaval y se demora el diagnóstico y la intervención hasta un segundo momento en que una grave caída, un accidente o el aislamiento del chico sugieren una revisión ocular detallada. 40 IMPLICACIONES EDUCATIVAS Una vez diagnosticado el síndrome de Usher se hacen imprescindibles algunos cambios tanto en la escuela como en el hogar. A nivel práctico y de cara a reducir barreras arquitectónicas y facilitar la orientación y movilidad del alumno con síndrome de Usher sería aconsejable: – Evitar zonas de penumbra o escasa iluminación (aulas, pasillos, escaleras, ascensores, comedor, biblioteca, escritorio, cuarto de baño, armario, etc.). – Evitar cambios inesperados (disposición interna, mobiliario, pavimentación, colocación de objetos, etc.) en casa y en el aula e informar en caso de que se produzcan. – Informar de cualquier cambio arquitectónico producido en los trayectos que habitualmente realiza el alumno con síndrome de Usher. Cambio arquitectónico puede ser la desaparición de un árbol, una papelera o cualquier objeto que servía de punto de referencia, la aparición de señales prominentes a media altura con las que poder golpearse en la cabeza, el cambio de una parada de autobús, el cambio de pavimentación, la realización de obras, desaparición-aparición de tiendas (ej: un horno de pan, una pescadería, un bar son importantes puntos de referencia), etc. – Procurar mantener rutinariamente las puertas (habitaciones, armarios, muebles) y cajones cerrados para evitar golpes y caídas. – Colocar barandilla en todas las escaleras y marcar el primer y último peldaño de cada tramo. – Seguir las sugerencias de un técnico o profesional experto en orientación y movilidad, etc. Con frecuencia la evolución de la retinitis pigmentosa provoca la incapacidad por parte del alumno para mantener un adecuado nivel de comprensión en el aula, especialmente en los casos de síndrome de Usher tipo 1; la restricción del campo visual impide al alumno buscar y localizar a los distintos interlocutores en tiempos reales por lo que no puede seguir las intervenciones del profesor y/o de sus compañeros, apareciendo síntomas de fatiga visual, baja comprensión, aislamiento social y descenso del rendimiento académico. De cara a reducir barreras de comunicación y a facilitar la participación activa del alumno sería conveniente: Rev Logop Fon Audiol 2000;XX(1):37-43 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 21/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Perea Costa, M. L.—EL SÍNDROME DE USHER: IMPORTANCIA DE UN DIAGNÓSTICO PRECOZ. IMPLICACIONES EDUCATIVAS – Determinar la mejor ubicación posible del alumno dentro del aula, cerciorándose de que pueda ver bien la pizarra, al profesor y al resto de los compañeros. – Cuidar el ritmo de las intervenciones en clase, de modo sea posible seguir la conversación por parte del alumno/s con síndrome de Usher. – Controlar factores como la distancia adecuada a la que signar, la posición y el tipo de iluminación, tipo de contraste preferido para la pizarra, tamaño de cuanto en ella se escriba y del material distribuido en el aula, uso de indumentaria de alto contraste (colores uniformes evitando rayas y estampados), signar en un espacio reducido, etc. – Utilizar, cuando sea necesario, recursos tecnológicos (programas informáticos de ampliación de imágenes o cambio de contraste, línea Braille en el teclado de los ordenadores, telelupas, etc.) que permitan un mejor y más cómodo acceso a la información por parte del alumno con síndrome de Usher, etc. A menudo los padres y profesionales en contacto con chavales con síndrome de Usher se preguntan qué cambios teóricos deben introducirse en la programación educativa. ¿Tiene sentido que mi hijo siga sus estudios de mecánica? ¿no sería mejor buscarle un empleo fácil, cerca de casa que le garantice un futuro estable sin grandes peligros? En mi opinión es de fundamental importancia ofrecer a los alumnos con síndrome de Usher el aprendizaje de todas aquellas técnicas que les ayuden a mantener su autonomía e integridad física y psíquica. Sobre esta base casi cualquier elección profesional tendrá sentido y podrá hacerse realidad. El objetivo primordial es evitar que nuestro alumno, nuestro hijo o hermano se haga dependiente a medida que la pérdida visual aumente y sienta imperiosa la necesidad de asistencia permanente por parte de adultos y oyentes; debemos evitar que se sientan incapaces de orientar sus vidas y decidir su futuro, así como procurarles la serenidad y el equilibrio emocional necesario para poder utilizar todos los recursos que están a su alcance. Creo necesario que se informe al alumno, de acuerdo con sus capacidades y nivel de desarrollo, del problema visual al que debe hacer frente. En el caso de los más pequeños los padres pueden recurrir a explicaciones funcionales (como que deben tener cuidado al cruzar una calle o al montar en bicicleta porque sus ojos no ven bien por arriba, por abajo y por los lados, o que de noche o en días nuRev Logop Fon Audiol 2000;XX(1):37-43 blados es mejor que se cojan de la mano de alguno de sus acompañantes si no ven bien el camino, etc.) para paulatinamente ir ampliándolas y profundizando a medida que el muchacho madura. En muchos casos esta información no sorprenderá al chico que ya tiene fundadas sospechas de que algo no marcha como es debido en sus ojos, por lo que podrá dar lugar a sucesivas preguntas con las que satisfacer su curiosidad y quizá abrir una vía de diálogo con los padres. Son tres las necesidades fundamentales del muchacho que habrá que considerar tras el diagnóstico: Necesidad de apoyo psicológico – Por parte de la familia, como lugar en el que poder compartir sus miedos, expresar sus sentimientos y encontrar información veraz y consejo sobre las múltiples decisiones que deberá tomar en el futuro. – Por parte de profesionales especialistas en sordoceguera. – A través del contacto con otros niños y adultos con síndrome de Usher con los que poder compartir sus dudas y emociones y en los que poder encontrar modelos adultos positivos con los que identificarse. También la familia puede beneficiarse del contacto con otras personas con síndrome de Usher y con sus familiares encontrando en ellos una excepcional y única fuente de información y apoyo. Necesidad de técnicas de orientación y movilidad A medida que avanza la pérdida visual los chicos con síndrome de Usher experimentan un aumento de la dificultad para moverse autónomamente con cierta seguridad, por lo que dejan de asistir a reuniones, citas, fiestas, etc. si deben hacerlo solos. Comienza así el proceso de aislamiento social que a largo plazo genera dependencia emocional e inactividad. Las técnicas de orientación y movilidad enseñan a los alumnos a desarrollar un alto nivel de confianza, seguridad y autonomía en sus desplazamientos a través de la escuela, en casa o en trayectos habituales. Ayudan a los alumnos a mantener su autonomía e independencia física y emocional, lo que les confiere el control sobre sus decisiones y la sensación de manejar sus propias vidas. ¿Es necesario el uso del bastón? el bastón cumple tres funciones importantes: la de informar al resto de la comu41 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 21/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Perea Costa, M. L.—EL SÍNDROME DE USHER: IMPORTANCIA DE UN DIAGNÓSTICO PRECOZ. IMPLICACIONES EDUCATIVAS nidad de nuestra pérdida visual, la de protegernos físicamente contra obstáculos que pueden dañarnos o provocar caídas y la de informarnos sobre las condiciones del pavimento (bordillos, andenes, etc.), así como de posibles puntos de referencia. No siempre el alumno se encuentra en situaciones en las que necesita todas estas funciones. Por otra parte, a menudo el alumno no acepta el uso del bastón por lo que socialmente implica. En mi opinión el bastón es un recurso como tantos otros, que debe ofrecerse al alumno en distintos y sucesivos momentos de su formación, ofreciendo asimismo información sobre su utilidad (especialmente en condiciones de escasa iluminación o en trayectos no habituales) y los beneficios de saberlo utilizar. A veces una clase demostrativa (usando antifaz) sobre técnicas básicas de bastón puede dar a los alumnos información muy válida sobre las ventajas que ofrece. El objetivo no es enseñar esto o lo otro sino estimular a los alumnos a obtener toda la información y recursos necesarios para que puedan ser parte activa en la toma de decisiones sobre su formación y su futuro. Necesidad de técnicas de comunicación y petición de ayuda La necesidad de conocer técnicas de comunicación y recursos con los que poder dirigirse a personas oyentes se hace patente en situaciones de emergencia en las que el alumno se ha perdido o necesita ayuda. En muchos casos basta llevar a mano un bloc y un rotulador de alto contraste y a través de la escritura resolver la situación. En ocasiones el alumno necesita la ayuda de tarjetas de comunicación, con el contraste y tamaño más adecuados, con mensajes prefabricados del tipo «soy sordociego, por favor escriba en la palma de mi mano cuántas paradas faltan hasta la parada de Callao» o «soy sordociego, por favor ponga mi mano en su hombro y lléveme al anden de la línea 5 dirección Aluche» si se ha perdido en el metro, etc. Existen también tablillas de comunicación, de bolsillo, realizadas en plástico ligero y resistente. En su parte anterior aparecen en relieve las letras del abecedario y los números del 1 al 0, con alto contraste figura-fondo y bajo cada uno aparece el carácter en Braille. En la parte posterior aparece impreso el siguiente mensaje: Soy sordociego, por favor necesito ayuda, siga mi dedo para leer lo que quiero decirle. Para contestarme coja mi dedo índice y co42 lóquelo despacio en cada letra. A través del contacto con iguales y adultos con síndrome de Usher, así como con otro tipo de sordociegos, el alumno aprenderá o podrá comprobar la utilidad del alfabeto en palma, de la Lengua de Signos apoyada en las manos del interlocutor (Hands on) o del Braille. Sólo a través de la propia experiencia estos recursos, que en un primer momento se rechazan por sus connotaciones sociales, pueden desmitificarse y convertirse en un bien deseado. Por último, como parte de la programación del centro sería conveniente realizar periódicamente charlas informativas dirigidas al personal y a los alumnos sobre los problemas y necesidades de los niños con síndrome de Usher, incluyendo información básica sobre sistemas de comunicación y técnicas de guía. DÓNDE RECURRIR, DÓNDE OBTENER INFORMACIÓN España Programa de atención a personas sordociegas Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE) Paseo de la Habana, 208 - 28016 Madrid Tel:. + 34 - 91 350 36 97 Fax: + 34 - 91 350 79 72 E-mail: asesorci@once.es APASCIDE (Asociación Española de Padres de Niños y Jóvenes Sordociegos) Sta. María de los Reyes 8, 13 C - 41008 Sevilla Tel./ Fax: + 34 - 95 435 71 68 E-mail: apascide@arrakis.es Web site: http://www.arrakis.es/-apascide/ Italia Lega del Filo D’oro Vía Montecerno 1 60027 Osimo (Ancona) Tel.: + 39 - 071 - 72 451 Fax: + 39 - 071 - 717 102 E-mail: cdfilod@imar.net - Centro Diagnostico (Evaluation and Assesment Centre) Web Site: http://www.imar.net/filodoro/usher.html Rev Logop Fon Audiol 2000;XX(1):37-43 Documento descargado de http://www.elsevier.es el 21/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. Perea Costa, M. L.—EL SÍNDROME DE USHER: IMPORTANCIA DE UN DIAGNÓSTICO PRECOZ. IMPLICACIONES EDUCATIVAS EE. UU. American Association of the Deaf-Blind 814 Thayer Avenue, Suite 302, Silver Springs, MD 20910-4500 Tel.: + 1 - 301 - 588 65 45 Fax: + 1 - 301 - 588 87 05 NEWSLETTERS «USHER AROUND THE WORLD» (A newsletter by and for people with U. Syndrome) C/O Maggie King, Editor 2431 Prescott Lane - Westchester - IL 60164 Tel.: + 1 - 708 - 409 1247 E-mail: miking@interacces.com Hellen Keller National Center Headquarters, 111 Middle Neck Road, Sands Point, NY 11050 Tel.: + 1 - 516 - 944 89 00 Fax: + 1 - 516 - 944 73 02 BIBLIOGRAFÍA National Family Association for Deaf-Blind 5733 224th Street, Bayside, NY 11364 Tel. + 1 - 718 - 428 15 91 Fax: + 1 - 718 - 428 89 50 E-mail: CLARITAB@Juno.COM National Technical Assistance Consortium Headquarters Teaching Research Division Western Oregon University 345 N Monmouth Avenue. Monmouth, OR 97361 Tel.: + 1 - 503 - 838 88 07 Fax: + 1 - 503 - 838 81 50 E-mail: ntac@wou.edu DB-LINK Headquarters Teaching Research Division Western Oregon University 345 N Monmouth Avenue, Monmouth, OR 97361 Tel.: + 1 - 800 - 438 93 76 Fax: + 1 - 800 - 854 7013 E-mail: dblink@tr.wou.edu Web site: http://www.tr.wou.edu/dblink Rev Logop Fon Audiol 2000;XX(1):37-43 Boys National Research Hospital. Spotlight on Usher Syndrome: Vision and hearing loss. Hereditary Deafness Newsletter of America; 1994. p. 4. Comunícate con nosotros. Fundación ONCE, ASOCIDE. Davenport S. Different types of Usher Syndrome: Five Genes Recognized for Usher Type I. Deafblind Inquirer 1886;2. Davenport SLH, Pitsburgh MD. Screening for Usher Syndrome among Deaf and Hard-of-Hearing students. TRACES, Usher Syndrome Conference; 1995. Nuevos cuestionarios creados por S. Davenport se incluyen en su última publicación que saldrá al mercado estadounidense en 1999. Kimberling WJ, Moller C. Clinical and Molecular Genetics of Usher Syndrome. Journal of the American Academy of Audiology 1995;6:63-72. Miner I, Cioffi J. Usher Syndrome in the School Setting. Sands Point, New York: Hellen Keller National Center, Technical Assistance Center; 1997. Correspondencia: M. L. Perea Costa CNH - Istituto di Psicologia Reparto di Neuropsicologia del Linguaggio e Sorditá Via Nomentana 56 00161 Roma (Italia) E-mail: costa@ip.rm.cnr.rt 43