ocio jazzCorner Imprescindibles MILES DAVIS Bitches Brew (2 de 2) La música es algo espiritual. El negocio de la música no lo es. VAN MORRISON L A primera sesión de grabación fue precedida de una fuerte discusión entre Miles y Teo Macero. Miles no soportaba a la secretaria de Macero y le dijo que la echara. Teo por supuesto se negó y ahí empezó todo. Antes del inicio de la sesión de grabación, palabras altisonantes, insultos y casi, casi llegaron a las manos. Una fuerte tensión que a punto estuvo de dar al traste con la grabación. Quizás todo fuera una treta del propio Miles que así provocaba la descarga de adrenalina de sus músicos lo que les llevaría a una mayor creatividad. No era la primera vez que utilizaba estos trucos. Si se escucha atentamente se pueden oír las directrices de Miles a los músicos. A Miles le gustaba trabajar así. Sus músicos debían prestarse mucha atención los unos a los otros, a las señales que él les hacía, indicaciones que podían hacer variar el rumbo de la canción en segundos. Pero se tiene la sensación de que los músicos no saben muy bien por donde les quiere llevar Miles. Los músicos cuando acabaron las sesiones no entendían lo que allí se grabó. Algunos dijeron que era demasiado improvisado. No les gustó el resultado final. José Ramón García Amo Coordinador de Informática Biblioteca Nacional de España Bitches Brew fue pionero en la aplicación del estudio como un instrumento musical, con multitud de efectos de estudio que fueron una parte integral de la música. Miles y su productor Teo Macero utilizan el estudio de gra203 verano 2011 bación como un instrumento más, aplicando, en fase de postproducción, efectos de eco y reverberaciones. Por lo tanto, Bitches Brew no sólo se convirtió en un clásico, un disco polémico por su enorme innovación musical, sino que también se hizo famoso por su uso pionero de la tecnología de estudio. El resultado es un disco abstracto, difícil de catalogar. No es rock (es mucho más complejo) pero tampoco es el jazz tradicional hecho hasta entonces. Miles, para muchos aficionados al jazz, murió musicalmente hablando cuando se metió en el jardín de lo electrónico y abandonó lo que se llama ahora “unplugged” o lo que es lo mismo, lo acústico. Ese sentimiento de traición lo hemos sentido muchos pero creo que es injusto y es de justicia reconocer la enorme aportación que hizo Miles a la música con este disco y otros posteriores. La crítica fue muy dura con él y su música. Sony acaba de publicar una versión ampliada de Bitches Brew: dos vinilos, tres CD que incluyen canciones inéditas, un DVD de extraordinaria calidad que contiene la actuación de Miles el 4 de noviembre de 1969 en Copenhague, un libro de 48 páginas y un póster. Vamos, una joya. El montaje final de lo que allí ocurrió fue este maravilloso disco, uno de los grandísimos discos de jazz. Un disco imprescindible donde los haya.