Asociación Cultural Révolté Historia de Mallén. Contemporánea La “Huelga Revolucionaria” de octubre de 1934 en Mallén. por Iván Heredia Urzáiz Historiador Esta obra está bajo una licencia Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 3.0 España de Creative Commons. Para ver una copia de esta licencia, visite http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/3.0/es/ o envie una carta a Creative Commons, 171 Second Street, Suite 300, San Francisco, California 94105, USA. La “Huelga Revolucionaria” de octubre de 1934 en Mallén Hace setenta años, durante el mes de octubre de 1934, España se vio sacudida por un movimiento revolucionario de carácter socialista sin precedente alguno. Tradicionalmente los violentos sucesos revolucionarios de Asturias y Cataluña han acaparado todas las miradas de los estudiosos de la época, restando importancia a los acontecimientos ocurridos en otros puntos de la geografía española donde se produjeron violentos enfrentamientos entre las fuerzas del orden y los revolucionarios. Por este motivo, y aprovechando el setenta aniversario de estos sucesos, creo que es preciso revisar qué ocurrió durante aquellos días de octubre de 1934 en Mallén. En este sucinto estudio y ante el carácter local de la publicación, nos vamos a centrar en los sucesos que se produjeron en Mallén, eso si, quiero remarcar que a la hora de comprender la huelga revolucionaria que se produjo en esta localidad hay que tener en cuenta que no fue un suceso aislado, sino que se produjo en otras localidades cercanas entre las que destacan Uncastillo, Ejea de los Caballeros, Tauste y Sos. Así, aquí sólo se traza la visión parcial de un suceso que tiene unas connotaciones mucho más amplias geográfica, política, sociológica y temporalmente. El 1 de octubre de 1934, el presidente del gobierno Ricardo Samper presentó su dimisión. El presidente de la República, Alejandro Alcalá Zamora, en lugar de convocar elecciones para solucionar la crisis política decidió que Alejandro Lerroux formase un nuevo gobierno. La decisión de éste de incluir a tres ministros de la CEDA (Confederación Española de Derechas Autónomas) en el nuevo ejecutivo acabó alarmando a los máximos dirigentes socialistas quienes decidieron que había llegado la hora de encender la mecha de la revolución. El movimiento revolucionario socialista fue presentado como la última carta que le quedaba a la izquierda española para hacer frente al fascismo. Los líderes socialistas afirmaban que si la revolución triunfaba, el fantasma del fascismo se desvanecería, el socialismo se impondría y los trabajadores vivirían en su ansiado Estado socialista. Si por el contrario el levantamiento popular fracasaba, la implantación del fascismo en España sería imparable. Así y alentados por la retórica insurreccionalista de los altos dirigentes socialistas, el día 5 los mineros asturianos se rebelaron contra el Estado y las elites que lo gobernaban. En Cataluña Luis Companys declaró la República catalana dentro de la República Federal española, en Aragón una serie de pueblos vivieron breves momentos del sueño revolucionario y en Madrid Lerroux, tras declararse el 2 Asociación Cultural Révolté estado de guerra, dio carta blanca a las fuerzas del orden para reprimir la huelga revolucionaria. En la provincia de Zaragoza, la revolución de octubre de 1934 tuvo una especial relevancia. En primer lugar porque, al contrario del movimiento anarcosindicalista de diciembre de 1933, fue una revolución eminentemente rural que brotó en aquellas localidades donde existía un alto índice de sindicación ugetista. Y, por otro lado, el fracaso del movimiento supuso el aplazamiento del sueño revolucionario y la adopción, por parte de las diferentes fuerzas políticas de izquierda, de una estrategia eminentemente política y unitaria para lograr un fin: conquistar el poder y evitar el progreso del fascismo en España. El día 5 de octubre a las 6 de la mañana, elementos afectos a UGT de Mallén proclamaron por las calles del pueblo el Comunismo Libertario, saliendo armados con algunas escopetas y escasas pistolas. Tras cortar las líneas telegráficas, telefónicas y los accesos por carretera al pueblo, los «revolucionarios» se dirigieron al ayuntamiento del cual se apoderaron tras desarmar a los tres alguaciles. Tras esto, subieron al balcón de la casa consistorial y colocaron la bandera del Partido Socialista. Posteriormente, según relata la prensa de la época, se dirigieron al cuartel de la Guardia Civil comunicando a sus ocupantes que se había declarado la revolución social en España. La negativa de los guardias civiles a deponer las armas hizo que los rebeldes sitiaran el cuartel y tras un breve pero intenso tiroteo se apoderaron de él. Por la tarde, mientras algunos insurgentes se hallaban reunidos a las afueras del pueblo, llegó una compañía con la que mantuvieron un nuevo tiroteo que se saldó con la muerte del cabo de la Guardia Civil, Vicente Revilla Rodríguez. Igualmente, un guardia y un paisano, Pascual Ibáñez, fueron heridos. Tras estos sucesos muchos de aquellos que habían participado en los sucesos huyeron del pueblo, pero al volver las fuerzas del orden les esperaban para arrestarlos. Una vez sofocado el movimiento, se clausuró la Casa del Pueblo y la Guardia Civil practicó numerosas detenciones preventivas y diversos registros en algunos domicilios de la localidad. Algunos miembros socialistas de la concejalía fueron arrestados y en su lugar se impusieron a miembros de partidos tradicionalistasconservadores. Pero el conflicto en este pueblo no acabó ahí, pues como refleja el diario Heraldo de Aragón, el lunes día 8, mientras en Zaragoza se respiraba con alivio ante la noticia del fin de la huelga revolucionaria en Cataluña, en la localidad de Mallén se registró una nueva agresión a la Guardia civil. Al parecer tres «revoltosos», como los califica Heraldo de Aragón, hicieron «varios disparos contra la pareja de la Benemérita, y al repeler ésta agresión, haciendo uso de los fusiles, se entabló un violento tiroteo» en el que murió un vecino. Como consecuencia de estos actos, la guardia civil hizo efectivas nuevas detenciones. 3