Jesucristo nace pobre y humilde pero en una Familia. El amor de

“María es la que sabe transformar una cueva de animales en la casa de Jesús,
con unos pobres pañales y una montaña de ternura”
(Papa Francisco, La alegría del Evangelio, n. 286)
Jesucristo nace pobre y humilde pero en una Familia. El amor de sus
padres –María y José- llena de felicidad toda su vida porque nunca está sólo. Al
bajar a la tierra el Hijo de Dios convierte la Humanidad y la Iglesia en una
Familia. Todos –pastores o Reyes- somos iguales ante el Niño Dios. También
nosotros formamos parte de la Familia de Nazaret.
¿Cuidamos la familia como lo hacen Jesús, María y José? Sólo el amor –presencia, servicio y escucha;
sonrisa, perdón y cariño- mantiene unida a la familia, fuente de felicidad y de paz. Rezar por las familias es
querer a los demás.
PARRÒQUIA DE SANT FRANCESC D’ASSÍS: FELIZ NAVIDAD 2013
(Año de la Familia)