ESDE 1 Estudio Sistematizado de la Doctrina Espirita ¡Bienvenido a las Nuevas Clases! Copyright Bezerra de Menezes Kardecian Spiritist Center Clase Siete Fundamentos de la Doctrina Espirita 1) La Existencia y Unicidad de Dios 2) La Existencia de los Espíritus 3) La Jerarquía de los Espíritus 4) La Reencarnación 5) Comunicabilidad de los Espíritus 6) Ley de Causa y Efecto 7) Libre Albedrío 8) Pluralidad de los Mundos Habitados 9) La No Existencia del Cielo e Infierno La Existencia y Unicidad de Dios Dios es la inteligencia suprema, causa primera de todas las cosas. Dios creador del Universo*, es eterno, inmutable, inmaterial, único, omnipotente, soberanamente justo *El Universo comprende todos los seres animados e inanimados, materiales e inmateriales. y bueno. La Existencia de los Espíritus El Espíritu es un ser inteligente, individual e inmortal. El hombre es un Espíritu ligado a un cuerpo físico a través del Periespíritu. Los Espíritus tienen sus individualidades antes de la encarnación, y continúan siéndolo después de separarse del cuerpo. Sus cualidades son las mismas que las del Espíritu encarnado, de modo que el hombre de bien es encarnación de un Espíritu bueno y el hombre perverso lo es de un Espíritu impuro. La Jerarquía de los Espíritus Los Espíritus pertenecen a diferentes clases y no son iguales en Poder, Inteligencia, Saber y Moralidad. Derecho y Moral Los Espíritus pertenecen a diferentes órdenes, según el grado de perfección a que han llegado. No existe entre esos órdenes una línea de demarcación trazada a modo de barrera, pudiéndose así multiplicar o restringir voluntariamente las divisiones; pero, si sé consideran no obstante, los caracteres generales, puede reducírselos a tres órdenes principales. Primer orden: a los que han llegado a la perfección, los Espíritus Puros. Segundo orden: a los que están a mitad de la escala; Espíritus que se ocupan en la consecución del bien. Tercer orden: a los Espíritus Imperfectos, que están aún al principio de la escala, siendo sus caracteres la ignorancia, el deseo del mal y todas las malas pasiones que retardan su progreso. La Reencarnación Es el proceso natural que permite encarnar sucesivas veces con la función de permitir el perfeccionamiento de los Espíritus. Las diferentes existencias corporales del Espíritu siempre son progresivas, nunca retrógradas; pero la rapidez del progreso depende de los esfuerzos que hagamos para llegar a la perfección. Comunicabilidad de los Espíritus La posibilidad de comunicación entre los Espíritus encarnados y los desencarnados mediante la mediumnidad. Ley de Causa y Efecto Es el mecanismo de retribución ética universal a todos los Espíritus, según el cual nuestra condición actual es el resultado de nuestros actos pasados. Libre Albedrío Es la noción de que los Espíritus son responsables de sus actos durante toda su existencia. Pluralidad de los Mundos Habitados La Tierra no es el único planeta con vida en el universo. Los Espíritus encarnados constituyen la Humanidad, que no está circunscrita a la Tierra, sino que puebla todos los mundos diseminados en el espacio. La No Existencia del Cielo e Infierno No existe el cielo ni el infierno eternos: la felicidad o infelicidad relativas después de la muerte las determina el estado moral y psicológico del individuo. Conclusión de los Fundamentos de la Doctrina Espirita 1) La Existencia y Unicidad de Dios 2) La Existencia de los Espíritus 3) La Jerarquía de los Espíritus 4) La Reencarnación 5) Comunicabilidad de los Espíritus 6) Ley de Causa y Efecto 7) Libre Albedrío 8) Pluralidad de los Mundos Habitados 9) La No Existencia del Cielo e Infierno El Espiritismo no es una luz nueva, sino una luz más brillante, porque surge de todos los puntos del globo, por la voz de aquellos que vivieron antes. Haciendo evidente lo que estaba oscuro, pone fin a las interpretaciones erróneas y debe reunir a los hombres en una creencia común, porque no hay sino un solo Dios, y sus leyes son para todos; en fin, él marca la era de los tiempos predichos por Cristo y por los profetas. El objeto esencial del Espiritismo es el mejoramiento de los hombres. No es necesario procurar sino lo que puede ayudar al progreso moral e intelectual. El verdadero Espirita no es aquel que cree en las manifestaciones, sino aquel que aprovecha las enseñanzas dadas por los Espíritus. Pues de nada sirve creer, si la creencia no le hace dar un paso al frente en el camino del progreso y si no le torna mejor hacia su prójimo. Próxima clase: Existencia de Dios y Pruebas de Su existencia