El estrés del retículo endoplásmico y la enzima JNK son claves en diabetes La enzima JNK es crucial en el inicio de la resistencia a la insulina. El proceso se inicia con el estrés que sufre un organelo celular, el retículo endoplásmico, debido a nutrientes extra. Esta ruta relaciona la obesidad con la diabetes. Descrita por Gökham Hotamisligil y su grupo, de Harvard, abre la puerta a aplicar inhibidores de la JNK y chaperonas químicas. El estrés del retículo endoplásmico bloquea la acción de la insulina con otra activación. En concreto, la enzima JNK es una pieza clave en el inicio de la resistencia a la insulina, según Gökhan Hotamisligil, del Departamento de Genética de la Universidad de Harvard. El profesor Hotamisligil, de origen turco y afincado en Estados Unidos desde hace veinte años, ha pronunciado una conferencia sobre la disfunción del retículo endoplásmico en obesidad y diabetes de tipo 2 en la XI Conferencia anual del Hospital del Valle de Hebrón, en Barcelona. La inflamación de los procesos de dolor es diferente a la asociada a la obesidad. "Es una inflamación invisible, que ocurre a un nivel bajo y quizás deberíamos buscar otra palabra para ella", según Hotamisligil. Cuando esta inflamación se inicia, "la primera víctima es la hormona insulina, que deja de funcionar adecuadamente". En principio, el sistema inmune y el metabólico comparten muchas características. Cuando esto sucede, se disparan una serie de errores. La función de los organelos claves de la célula se altera. Uno de ellos es el retículo endoplasmático, al que Hotamisligil compara con "una factoría de proteínas". Al alterarse, este organelo celular no puede realizar bien su función en el tráfico de proteínas ni de calidad del control de ese tráfico. Es como un dispositivo clave para el metabolismo y el primer sensor del estrés que generan los nutrientes extra. En síntesis, el hallazgo hecho por Hotamisligil sobre este orgánulo es que el estrés en el retículo endoplásmico bloquea la acción de la insulina. La activación de la enzima JNK es crucial, un puente entre el estrés que sufre el retículo endoplásmico y la aparición de la resistencia a la insulina. Ésta es la ruta descubierta por el equipo de Hotamisligil. Los hallazgos se han hecho en modelos animales, pero en la enfermedad humana también se ha observado el importante papel que desempeñan el retículo endoplásmico y JNK. Según Hotamisligil, se han iniciado ensayos experimentales con inhibidores de JNK. Estos agentes, probados en modelos animales, funcionan tanto en arterioesclerosis como en diabetes de tipo 2 y su uso es seguro en humanos. De hecho, el grupo de Hotamisligil publicó en Nature que bloquear la JNK es "muy efectivo en diabetes". Otros fármacos, las chaperonas químicas, que ya están indicados para otras patologías, también funcionan "muy bien". Actúan en el estrés del retículo endoplásmico (RE), según Hotamisligil. Su grupo también publicó en Science que fijar el estrés del RE con compuestos químicos es efectivo en diabetes. Entre ellos, figuran salicilatos (derivados de la aspirina) y antiinflamatorios. Además, su laboratorio va a probar, entre otros, compuestos como el ácido fenil-butírico en un ensayo clínico de fase II, de 30 pacientes, diagnosticados de diabetes en fases iniciales y sin complicaciones. Tras cuatro semanas, se determinará su sensibilidad insulínica.