C O R T É S COMO EMPRESARIO ECONOMICO Y LA M A N O DE OBRA ESCLAVA Charles VERLINDEN JJnwBTSidüd de Gante H A C E ALGO MÁS DE VEINTE AÑOS, p u b l i q u é en Mélanges u n ar- tículo dedicado a R i c h a r d Konetzke, titulado " E l genovés Leonardo L o m e l l i n i , hombre de negocios del marquesado de Fernando C o r t é s en M é x i c o " . E n el texto me ocupaba, en p r i m e r lugar, de u n contrato del 26 de marzo de 1542 firmado en Válladolid entre " e l m u y ylustre señor D o n Fernando C o r t é s , m a r q u é s del Valle y Leonardo Lomelin, ginobes, estante enesta v i l l a " , mediante el cual C o r t é s v e n d í a por ocho años, a partir del I de enero de 1543, a L o m e l l i n i 5 000 arrobas de a z ú c a r por a ñ o , procedente de los "ingenios que su s e ñ o r í a tiene al presente e tuviere de aqui adelante durante el dicho tiempo de los dichos ocho annos en la N u e v a E s p a ñ a " . El contrato prueba, como lo d e m o s t r é en el artículo citado, que el equipo industrial de los ingenios de C o r t é s estaba ya bastante impulsado, tanto en el de T u x t l a , cerca de Veracruz, como en el de Tlaltenango, cerca de Cuernavaca. 1 o 2 3 S e g ú n F^ Chevalier, en 1549, dos años después de la muerte de C o r t é s , en el ingenio de Tlaltenango, h a b r í a habido unos 60 esclavos negros, hombres y mujeres, a d e m á s de 120 esclavos indígenas de ambos sexos. Estos últimos h a b r í a n si1 VERLINDEN, 2 A G N M , Hospital 1967, ^ C H E V A L I E R , 1956, iv, pp. de Jesús, p. 106. 176-184. leg. 270, exp. 8, doc. 86. V é a s e t a m b i é n GARCÍA \1ARTÍNEZ, 1969, p . 138. 771 772 CHARLES VERLINDEN do reemplazados m á s tarde (1556) por 150 negros, hombres, mujeres y niños. Las proporciones entre sexos y edades son m á s claras en Orizaba en 1580: 72 hombres, 44 mujeres, 7 n i ñ o s , o sea, 123 negros en total. U n contrato firmado entre C o r t é s y Lomellini el 11 de mayo de 1542 versa sobre el tráfico de negros destinado a procurar esta mano de obra. El primer artículo estipula: " P r i meramente que el dicho Leonardo Lomelin aya de vender y por la presente vende al dicho señor m a r q u é s quinientos negros de las yslas de Cabo Verde, de los quales an de ser los dos tercios de machos y la una tercia parte de hembras que sean de hedad desde quinze años fasta veynte v seys; y aun que sean de u n a ñ o mas o menos por esto no se desfaga la v e n t a ' ' . 4 3 Las islas portuguesas de Cabo Verde eran desde entonces un puerto franco donde se cargaban negros con destino a A m é r i c a . L a edad que se prevé en el contrato abarca, al parecer, tanto a los hombres como a las mujeres, estas ú l t i m a s destinadas sin duda alguna al trabajo de la casa y a la reprod u c c i ó n , en tanto que los hombres, en pleno vigor, se adecuaban perfectamente al trabajo de la plantación. Estos esclavos t e n í a n que ser "sanos de dar y de domar conforme a la costumbre", es decir, que iban a ser domesticados como bestias de carga. N o p o d í a n ser "endemoniados". T e n í a n que ser entregados en Veracruz a m á s tardar un a ñ o y medio d e s p u é s de la firma del contrato, salvo en caso de fuerza mayor. El que recibía la entrega t e n í a derecho a quedarse con tres cautivos por cada centenar llegado a su destino. Se consideraba que el transporte era m u y aventurado y las p é r d i d a s posibles en el transcurso del trayecto probablemente elevadas, pues C o r t é s se compromete a pagar en el plazo de dos meses d e s p u é s de la entrega de "qualesquier piecas", o sea, de cualquier fracción del encargo. El precio era " p o r cada pieca de las sobredichas setenta y seys ducados de oro de minas de perfecta l e y " . Esta cantidad es muy baja si se compara con u n precio fijado catorce años d e s p u é s ^ CHEVALIER, 3 1 9 5 6 , p. A G N M , Hospital 68. de Jesús, leg. 270, exp. 4. CORTÉS COMO EMPRESARIO ECONÓMICO 773 6 (1556) para negros de la misma procedencia. Esto sugiere que L o m e l l i n i debe haber sido el primero en asumir los riesgos de semejante entrega y que todavía no h a b í a calculado el riesgo de la operación. Por otra parte, hemos observado m á s arriba que, en 1549, el ingenio de Tlaltenango contaba ú n i c a m e n t e con 60 negros, hombres y mujeres, y que el resto de la mano de obra esclava todavía era i n d í g e n a , lo cual i n dudablemente se explica por la mengua considerable durante el transporte o incluso después de la llegada. H a y otra estipulación que es a ú n m á s reveladora. Lomellin i admite que, si no ha entregado los quinientos esclavos en el plazo de u n a ñ o y medio previsto en el contrato, C o r t é s p o d r á adquirirlos en E s p a ñ a al precio que sea y a expensas del genovés. Es, pues, evidente que son los inicios de la trata de negros con destino a M é x i c o porque, unos años m á s tarde, u n mercader experto no hubiera admitido condiciones tan draconianas. E n 1524 nos encontramos t o d a v í a en una etapa de la trata de negros con destino a M é x i c o en la que ésta es una p r o l o n g a c i ó n de la que se dirigía a la P e n í n s u l a I b é r i c a desde fines del siglo X V . L a situación cambia bruscamente poco d e s p u é s de la fecha del contrato que estamos estudiando hasta el punto que, en 1553, el virrey Luis de V e lasco sugiere que se disminuya el n ú m e r o de licencias de i m portación. 7 8 Y es que las "leyes nuevas" promulgadas en Barcelona el 22 de noviembre de 1542, y por tanto ligeramente posteriores a los dos contratos firmados en aquel a ñ o por C o r t é s con L o m e l l i n i , prohiben someter a ú n m á s a esclavitud a los amerindios. C o r t é s , quien sin duda estaba bien informado, quiso abastecerse de esclavos negros. Silvio Zavala, en su obra Los esclavos indios en Nueva España, proporciona indicaciones acerca de los esclavos indígenas de C o r t é s antes de los cambios que tuvieron lugar en 1542. Los tributos que recibían los encomenderos a veces consistían en esclavos y los caciques seguían traficando con 9 6 CHEVALIER, 1 9 5 6 , p. 7 VERLINDEN, 1 9 7 7 , pp. 8 Cartas de Indias, 9 ZAVALA, 1981. 68. 354-358. 1 8 7 7 , p. 2 6 3 . CHARLES VERLINDEN 1 ellos." Se trataba de la continuación de costumbres aztecas. En 1531, Cortés demanda a funcionarios reales que le habían sustraído esclavos que le correspondieran en tributo. El mismo a ñ o se habla de 80 esclavos que le debía entregar la ciudad de Toluca t a m b i é n corno tributo ^ C¡ ortés emple¬ aba a estos esclavos en las minas de oro En las minas de M o z i n M o t y u Pinar y Zacatala C o r t é s empleaba seis " c u a d r i l l a s " de esclavos i n d í g e n a s N o sabemos de c u á n t o s individuos estaba compuesta una cuadrilla pero I^uno de G u z m á n tenía tres cuadrillas con u n total de 300 esclavos Así, tal vez no eran menos de 600 esclavos los que C o r t é s empleaba en estas minas. E n otras minas en Colima Guaxaca y Teguantepeque C o r t é s empleaba t a m b i é n a esclavos i n d í g e n a s para la extracción del oro en 1532 En 1536 adquiere una mina de plata en Sultepec con 20 esclavos indígenas y sus útiles de trabajo (herramientas y bateas) M á s tarde adquiere otra en el mismo lugar con 50 esclavos en tanto C|ue se asocia con u n tesorero real cjue t a m b i é n aporta minas en Sultepec con 100 esclavos i n d í g e n a s y seis negros ' E n este caso, parece ser que los seis negros t a m b i é n están destinados a las minas pero son muy poco numerosos t í a b í a a d e m á s seis en las minas que tenía C o r t é s en Taxco, donde h a b í a por lo menos 100 esclavos i n d í g e n a s . 11 12 14 15 16 1 18 Pese a todo ello, a partir de 1530, en un memorial d i r i gido al emperador, C o r t é s formula sus dudas sobre la legitimidad de reducir a esclavitud a los indígenas. A la luz del ' ^ ZAVALA , 1 9 8 1 , p. 25. 11 K.EEN, 1 9 6 3 , p p . 7 4 y ss., 1 8 7 , 1 9 5 . V é a s e p . 2 0 1 , acerca de la asamblea de C o y o a c á n en la que C o r t é s reglamento la c o n t i n u i d a d del sistema t r i b u t a r i o con los caciques. V é a n s e p . 2 6 7 y ss., acerca del empleo que hizo C o r t é s de esclavos i n d í g e n a s en las minas de T l e t i z t l a c ^ ZAVALA, 1 9 8 1 . ^ ¿AVALA, 1 9 8 1 , p. ^ ZAVALA, 1 9 8 1 , p. 26. 1 3 ZAVALA, 1 9 8 1 , p. 27. 1981, 1 Nosotros seguimos l a o r t o g r a f í a antigua reproducida p o r Z A V A L A , p. 5 4 . ^ ZAVALA., ^ ZAVALA, 1958, 26. pp- 1 9 8 1 , p. 55. 1 9 8 1 . Para 1 5 4 0 - 1 5 4 7 , en Tehuantepec, V é a s e B E R T H E , 1 2 2 - 1 3 1 y ''Aspects' , 1 9 6 5 , pp. 189-209. CORTES COMO EMPRESARIO ECONOMICO uso que él hizo de los esclavos como empresario e c o n ó m i c o , no podemos considerar sino como casuísticas las distinciones que hace entre las condiciones de r e d u c c i ó n a la esclavitud, tanto m á s cuanto que es evidente que los esclavos pasaban de mano en mano, desde el conquistador que se a d u e ñ a b a de ellos hasta el explotador económico que los utilizaba y quien ya no se planteaba la cuestión de la legitimidad de su condición de esclavos. T o d a v í a en 1549, dos años después de la muerte de Cortés, h a b í a 99 hombres y 89 mujeres esclavos de raza indígena en sus posesiones en Cuernavaca, según el inventario de la s u c e s i ó n . E n cambio, en la " r e l a c i ó n " de S i m ó n Pasca de 1551, no he encontrado esclavos y, a d e m á s , los negros que se mencionan son poco numerosos. U n a vez se compran cinco y otras dos veces sólo uno. Se trata entonces del pago de los salarios a los indígenas que, por lo tanto, son libres. Los dos negros que se adquieren por separado, uno es "her r a d o r " y otro "pastor", pero una compra de 39 negros "bocales y ladinos" está destinada " p a r a el servicio y beneficio del y n g e n i o " . E n una ocasión, es incluso cuestión de gastos " q u a n d o se perdieron los esclavos" en Taxco, pero no he encontrado que se les haya sustituido por negros en las minas de este lugar. Se menciona t a m b i é n a negros en T u x t l a , pero sin precisar el n ú m e r o . Estas pocas indicaciones bastan para subrayar lo interesante que sería estudiar, m á s de lo que se ha hecho hasta ahora, la contabilidad de la explotación de empresas que se multiplican a partir de la segunda m i t a d del siglo X V I . Desafortunadamente carecemos de estas cuentas, incluso de las de la época de C o r t é s . 19 20 21 Las cifras que hemos dado son casi todo lo que se puede saber de la mano de obra no libre en las empresas de C o r t é s , por lo menos en el estado actual de las investigaciones. Estos datos p r o v i e n e n , en su m a y o r í a , de las investigaciones de Silvio Z a v a l a y de las m í a s . S e r í a conveniente llegar 1 9 Sobre el m e m o r i a l de 1537, v é a s e Z A V A L A , 1 9 8 1 , p . 1 0 1 , n . 180, d o n d e se citan varios pasajes. Z A V A L A , 1 9 8 1 , p . 62. V é a s e m á s a r r i b a , p . 1, las cifras, sin d u d a parciales, que p r o p o r c i o n a C H E V A L I E R , 1956. A G N M , Hospital de Jesús, leg. 98, exp. 6. 2 0 2 1 776 CHARLES VERLINDEN a consideraciones de c a r á c t e r m á s general. E n p r i m e r lugar, se tiene la i m p r e s i ó n de que, incluso en la é p o c a de C o r t é s , el empleo de m a n o de obra esclava es t o d a v í a m u y e s p o r á d i c o en M é x i c o . Esto nos lleva a pensar que, de los 500 negros que se encargaron en 1542, deben de haber llegado m u y pocos a su destino. Para entonces, la m a n o de obra esclava t o d a v í a es i n d í g e n a en su inmensa m a y o r í a y trabaja en las minas. Los negros, como lo vemos t a m b i é n en la contabilidad de 1551, trabaj a n sobre todo en labores a g r í c o l a s , p r i n c i p a l m e n t e en los ingenios. No obstante, en 1553 la población negra parece haber aumentado considerablemente. El virrey Luis de Velasco habla de 20 000 negros en el informe al emperador al que ya hemos aludido, pero es obvio que se trata de una cifra destinada a justificar medidas represivas implantadas por el temor a que la mano de obra negra se sublevara, ya que por lo visto era m á s combativa que la amerindia. Por otra parte, a mediados del siglo X V I I h a b í a ú n i c a m e n t e 35 000 negros en M é x i c o , en una época en la que la trata de esclavos estaba mucho m á s desarrollada. En el informe de 1553, se trataba del proyecto de fundación de una hermandad dedicada a garantizar la seguridad. A consecuencia de u n complot que se d e s c u b r i ó a finales de 1537, h a b í a cundido el miedo y, en 1548, se introdujeron medidas de policía que recuerdan a las que se h a b í a n tomado en E s p a ñ a y en Italia en la edad media. Así pues, era normal que, al proponer la creación de la hermandad, el virrey proporcionara una cifra elevada que diera realidad al peligro negro. Desafortunadamente no tenemos medio de saber en c u á n t o esa cifra sobrepasaba la realidad. N o obstante, por lo que hemos constatado en los documentos relativos a la mano de obra esclava en las empresas de C o r t é s , nos inclinamos a considerar 22 23 24 25 26 27 2 2 Cartas de Indias, ^ NÍARTÍN, 2 4 V E R L I N D E N , V I I , 1980, 1970, i 9 8 7 , p . 263. p. 58, n. 30. p. 78. 2 5 Colección, 1927, p . 85. 2 6 DAVIDSON, 2 7 V E R L I N D E N , 1955, i , p p . 481-501; 1977, n , p p . 667-969. 1966. CORTES COMO EMPRESARIO ECONOMICO 777 que el n ú m e r o de negros en la realidad era mucho menos elevado. No hay que olvidar, empero, que la trata de negros estaba dirigida esencialmente a la E s p a ñ o l a o H a i t í , hasta que en 1534 expiró la licencia de Gorrevod, la cual volvieron a comprar sus sucesores, como era natural después de la d e s a p a r i c i ó n de la población taino. 28 29 T r a d u c c i ó n de Isabel Vericat. SIGLAS Y AGNM REFERENCIAS A r c h i v o General de la N a c i ó n , M é x i c o . ' 'Aspects" 1965 ''Aspects de l'esclavage des Indiens en Nouvelle Espagne pendant la p r e m i è r e m o i t i é d u x v i è m e s i è c l e " , en Journal de la Société des Américanistes, pp. 189-209. B E R T H E , J e a n Pierre 1958 " L a s minas de oro del M a r q u é s del V a l l e en T e h u a n tepec", en Historia Mexicana, v u : 1(29) (jul.-sep.), pp. 122-131. 1877 Cartas de Indias. 1927 Colección de documentos Iberoamérica. M a d r i d . 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