APRENDER INGLÉS DESDE PEQUEÑOS 1. Cuanto antes, mejor. Cuanto más joven es el cerebro, mejor capta los sonidos, ritmo y vocabulario del nuevo idioma. Llena tu casa del sonido de los idiomas y deja que hagan “ruido en la cabeza”. El lingüista Stephen Krashen reconoce este como primer paso en la adquisición del lenguaje. 2. Cuida el ambiente. Que relacione el aprendizaje con algo agradable. Ha de ser un ambiente ameno, natural y sin forzar las situaciones. Nunca se debe obligar al niño a hablar en inglés. Al principio, lo más importante es que escuche y se familiarice con él. 3. Integrar el inglés en lo cotidiano. Leer su libro favorito en inglés, acudir a alguna obra de teatro, juegos o videojuegos, dibujos en inglés siempre que pueda ser… Son pequeñas cosas que hacen que la segunda lengua vaya adaptándose en su cerebro de forma natural y divertida.