Resolución sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación, incluyendo la protección de los delegados sindicales en todos los niveles La Conferencia General de la Organización Internacional del Trabajo: Reconociendo que el Convenio sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación, 1948, y el Convenio sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva, 1949, constituyen un progreso de las normas internacionales en materia de derechos sindicales; Considerando que para los trabajadores y las organizaciones sindicales la libertad sindical implica el ejercicio libre y eficaz de las funciones de los delegados libremente elegidos por los trabajadores, a través de las organizaciones sindicales, en todos los niveles, incluidos los lugares de trabajo; Subrayando que la actividad de estos delegados en todos los niveles, incluidos los lugares de trabajo, puede abarcar tanto las cuestiones de remuneración y de horas de trabajo como las de higiene y seguridad y cualesquiera otras condiciones de trabajo; Comprobando que en algunos países se restringe el derecho de los trabajadores a establecer y mantener organizaciones de su elección, y que en otros países los delegados libremente elegidos por los trabajadores a través de sus organizaciones sindicales no pueden ejercer libremente sus funciones y son a veces víctimas de medidas especiales tomadas por los empleadores, por los gobiernos, o por ambos, contra sus derechos de representantes de los trabajadores; Notando con preocupación, en particular, que la Comisión de Expertos en Aplicación de Convenios y Recomendaciones ha señalado repetidas veces a la atención de la Conferencia Internacional del Trabajo el hecho de que en algunos países, incluso países que han ratificado los Convenios antes mencionados, se ponen trabas al libre ejercicio de la negociación colectiva a favor de los trabajadores mediante disposiciones constitucionales y legislativas que: a) subordinan la creación de organizaciones sindicales a una autorización gubernamental, sin la cual tales organizaciones no tienen existencia legal; b) aplican restricciones a los derechos de los sindicatos a elaborar sus estatutos, organizar su administración y sus actividades y formular sus programas; y c) prohiben a los trabajadores organizar sindicatos con independencia del partido político gobernante; Notando con preocupación, asimismo, que los empleadores de algunos países, contando a veces con el apoyo de la autoridad gubernamental, han adoptado medidas radicales para impedir que los trabajadores a su servicio se organicen en sindicatos o se han negado a entablar negociaciones colectivas con los delegados sindicales de dichos trabajadores sobre cuestiones de remuneración y otras condiciones de trabajo; Recordando que el Convenio sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación, 1948, da a los trabajadores el derecho de constituir las organizaciones que estimen convenientes y el de afiliarse libremente a las mismas, así como el de organizar sus actividades sin la menor intervención de las autoridades públicas; y que el Convenio sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva, 1949, protege a las organizaciones de trabajadores contra todo acto de injerencia de los empleadores o de sus organizaciones y preconiza la adopción de medidas adecuadas para estimular y fomentar entre los empleadores y las organizaciones de empleadores, por una parte, y las organizaciones de trabajadores, por otra, el pleno desarrollo y uso de procedimientos de negociación voluntaria, con objeto de reglamentar, por medio de contratos colectivos, las condiciones de empleo; Con objeto de promover los derechos de los trabajadores a actuar libremente en defensa de sus intereses sociales, profesionales y económicos, 1. Invita a los Estados Miembros que aun no lo hayan hecho a ratificar el Convenio sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación, 1948, y el Convenio sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva, 1949, y a dar pleno cumplimiento a sus disposiciones; 2. Insta a los Estados Miembros que han ratificado los Convenios antes mencionados y que continúan, sin embargo, aplicando disposiciones legales, prácticas, o ambas cosas, incompatibles con las exigencias de dichos Convenios, a que adopten medidas inmediatas para eliminar tales disposiciones y prácticas; 3. Invita al Consejo de Administración de la Oficina Internacional del Trabajo: a) a que adopte todas las medidas adecuadas, en particular mediante la aplicación del mecanismo relativo a los convenios y recomendaciones, para garantizar la plena aplicación, por los Estados Miembros que los hubieren ratificado, del Convenio sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación, 1948, y del Convenio sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva, 1949; b) a que niegue al Director General que prepare para el Consejo de Administración un informe completo sobre todos los aspectos de los derechos de los delegados sindicales en todos los niveles, incluidos los lugares de trabajo, a fin de que el Consejo de Administración pueda considerar la posibilidad de incluir esta cuestión en el orden del día de una próxima reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo.