Base Neurológicas de la Estimulación Multisensorial Objetivo El objetivo principal de la estimulación multisensorial es el de mejorar las condiciones de vida de las personas con dificultad, trabajando las sensaciones y la percepción en un entorno de estímulos controlados y teniendo, el niño, la libertad para explorar, descubrir y disfrutar de diversas experiencias sensoriales. A partir de dicha interacción, se plantean establecer las vías de comunicación efectiva con el niño o niña como “persona activa” y no meramente receptiva en el proceso de interacción con el medio socio-familiar y educativo. Se trata de experiencias sensoriales agradables para estimular los sentidos primarios (vista, oído, tacto, gusto y olfato), el sentido vestibular y la propiocepción, sin necesidad de que haya una actividad intelectual. Bases Neurológicas Hay un mayor desarrollo neurológico cuando se produce un adiestramiento de estímulos debidamente adaptados para cada situación y sujeto. Cuando hay ambientes enriquecidos de estímulos adecuados, la actividad mental (conexiones neuronales) que se desarrolla en las personas es más alta que en el caso contrario, produciéndose así una plasticidad cerebral, de vital importancia por ejemplo para daños congénitos o adquiridos. La estimulación del desarrollo de cada niño o niña. Partimos de que los estímulos periféricos son capaces de modificar la organización espacial de la corteza cerebral, debido a la plasticidad neuronal y la reorganización cortical y de sus conexiones, con implicación en la recuperación de funciones tras una lesión cerebral precoz. A través de la ejercitación y la estimulación sensorial es posible modificar funcional y estructuralmente el cerebro, cambiar su organización somatotónica, incrementar las conexiones sinápticas, influir en la orientación dendrítica, etc. Es evidente que el cerebro es plástico, flexible, incluso en la edad adulta. Ésta es la base de la memoria y el aprendizaje. Nuestros contactos sinápticos cambian cada día, cada instante, almacenando constantemente nueva información. Pero se sospecha que, en nuestra infancia, el cerebro es todavía capaz de reorganizar de forma significativa rutas neuronales enteras. Así es cómo personas ciegas o sordas de nacimiento podrían rediseñar su cerebro para que las regiones que no reciben el estímulo esperado sean reclutadas por los sentidos que siguen viables. Se empieza a desarrollar una visión conceptual más compleja del cerebro, donde las funciones no estarían asignadas a regiones sino a circuitos o redes neuronales. Esta transformación se puede llevar a cabo porque el sustrato (cerebro) esté en condiciones estructural y funcionalmente (plasticidad, organización, mielinización), porque los estímulos ofrecidos sean adecuados en cantidad y calidad, aceptados por el niño y las respuestas sean reforzadas por el medio en que se encuentra. La estimulación multisensorial y el tiempo que se aplica no solo contribuye a la coordinación, el control y los reflejos musculares por participar directamente en el proceso de mielinización (responsable de la transformación de los mensajes interneuronales) también ayuda a acelerar el tiempo de reacción muscular y cerebral. La estimulación multisensorial también favorece ciertas funciones como son la lógica, razonamiento, el lenguaje, las matemáticas, el desarrollo artístico, la música, las emociones, el pensamiento intuitivo, etc., debido a su participación en el desarrollo eficaz de los hemisferios cerebrales. Potencialidades de la estimulación multisensorial En personas con dificultades, este tipo de estimulación consigue potenciar relaciones positivas fuera del centro y mejoras importantes en lógica, concentración y coordinación. Concretamente en personas con dificultades cognitivas se ha demostrados que la aplicación de estímulos es una de las terapias más ventajosas, aumentando el grado de autonomía, la tolerancia, el control emotivo y mejorando la reacción a estímulos sensoriales. Los resultados más positivos se han dado en personas con autismo, reduciendo hasta un 75% el daño autoprovocado y la agresividad en este tipo de pacientes. También se pueden beneficiar de la estimulación multisensorial todas las personas con dificultades en el lenguaje, en la percepción sensorial, con déficit visual, auditivo, motórico, o plurideficientes… Todos estos resultados ponen una vez más de manifiesto la importancia que tiene una adecuada estimulación multisensorial en todas las personas, especialmente en aquellas que posean algún tipo de dificultad.