análisis político No. 35 SEP/DIC 1998 INSTITUTO DE ESTUDIOS POLÍTICOS Y RELACIONES INTERNACIONALES (IEPRI) UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Francisco Leal Buitrago FUNDADOR William Ramírez Tobón DIRECTOR Fernando Cubides Cipagauta EDITOR Gonzalo Sánchez Gómez ASESOR EDITORIAL Sandra Patricia Martínez B. ASISTENTE EDITORIAL Diana Marcela Rojas EDITORA VERSIÓN ON LINE Carlos Germán Sandoval ASISTENTE EDITORIAL VERSIÓN ON LINE ASESORES EDITORIALES INTERNACIONALES Klaus Meschkat ALEMANIA María Isaura Pereira de Queiroz BRASIL Daniel Pécaut FRANCIA Eric Hobsbawm INGLATERRA Norbert Lechner CHILE Thomas Fischer ALEMANIA Charles Bergquist ESTADOS UNIDOS Catherine LeGrand CANADÁ UNIBIBLOS Impresión Siglo del Hombre Editores Distribución CONTENIDO ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA DE LA DIFERENCIA CULTURAL EN COLOMBIA Mary Roldán INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS FRENTE A AMÉRICA LATINA Giovanni Molano Cruz POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS Y CULTIVOS ILÍCITOS EN COLOMBIA Juan Gabriel Tokatlian DEMOCRACIA ULISES REVISITADO. CONSTITUCIONALISMO Jon Elster COMPROMISOS PREVIOS DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR Y PROCESO DE PAZ Ana Teresa Bernal / Álvaro Valencia Tovar /Francisco Leal Buitrago TESTIMONIO DIARIO DEL DESPEJE. CRÓNICA DE UN TRABAJO DE CAMPO Fernando Cubides RESEÑAS ¿QUÉ ES LA GLOBALIZACIÓN? De Ulrich Beck Por Hugo Fazio Vengoa BIBLIOGRAFÍA TEMÁTICA CAPITAL SOCIAL Miguel García Y Juan Carlos Rodríguez Y ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA DE LA DIFERENCIA CULTURAL EN COLOMBIA fenómeno generalmente conocido como La Violencia. Los acontecimientos en esta zona -considerada de suma importancia estratégica tanto por su ubicación geográfica como por sus recursos naturales- impulsaron al Gobernador de Antioquía a tomar la inusitada decisión de enviar un oficial militar de alto rango (en vez de los visitadores administrativos comúnmente encargados de investigar crímenes de origen partidista en el Departamento durante este período) para que éste llevara a cabo una extensa investigación de la región y definiera una estrategia para restaurar el orden público allí. En su informe el Coronel encargado resaltó el estado de abandono de la región, la ausencia de autoridades antioqueñas en la mayoría de las localidades, el resentimiento local hacia Antioquía, la falta de "civilización", y el carácter inculto o inmoral de los habitantes, los cuales, anotó, en su Mayoría no provenían de Antioquía sino del Caribe y otros departamentos colombianos. Basando su decisión en el contenido de este informe 3 el gobierno regional optó unos meses más tarde por designar a Urabá como zona militarizada y le entregó el manejo de orden público a las Fuerzas Armadas. Mary Roldan* INTRODUCCIÓN El 21 de agosto de 1950 el Inspector de Policía de El Carmelo en Urabá informó a las autoridades antioqueñas que el corregimiento y "todo el valle del río San Juan y comarcas circunvecinas, está invadida por bandoleros armados en guerrillas"1 . El ataque empezó a las cuatro y media de la mañana y duró hasta las dos de la tarde del siguiente día. Los "bandoleros" arrasaron con los "principales almacenes, llevándose la casi totalidad de la mercancía, mientras que otra parte de los bandoleros atacaba despiadadamente el edificio de la Administración de Rentas y la Inspectoría de la policía." La contienda dejó varios heridos, entre ellos dos policías y varios agentes de rentas, y un policía muerto. El número de civiles muertos en cambio no se pudo establecer con precisión, pues los cuerpos de estos habían sido arrojados al río San Juan y despedazados por tiburones. Aterrado, el Inspector urgió al gobernador "enviar un fuerte destacamento del Ejército Nacional permanentemente" para contrarrestar la influencia nefasta del "personal civil local" quien el Inspector tildó de ser "enemigo [s] del actual gobierno"2 . En general, aquello que denominamos La violencia ha sido considerado como un fenómeno cuya razón de ser fue el odio partidista que culminó en más de 200.000 muertes en toda Colombia entre 1946 v 1966. La ma yoría de estas muertes ocurrieron entre la población rural de unos pocos departamentos (siendo Antioquía uno de estos). 4 Un análisis pormenorizado de los El ataque guerrillero de 1950 en El Carmelo representa el inicio local del * Historiadora, profesora del Departamento de Historia Universidad de Cornell, Estados Unidos. 1 Archivo privado del señor gobernador de Antioquia (en adelante, APGA), 1949-1950, Oficio #86 de J. A. Echavarría, Inspector de Policía, a Braulio Henao Mejía, 23 de agosto de 1950. 2 Ibid. 3 APGA, 1951, tomo 5 “informe de la Comisión de la región de Urabá", Coronel Luis Abadía, Ejército Nacional, 4ª Brigada, Medellín, 6 de octubre de 1950. 4 Paul Oquist, Violence, Conflict and Politics in Colombia, Academic Press, 1980, cuadros 1.4 y, 1.5, 9. 3 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … municipios o áreas mas afectados por la violencia en este último resalta cómo la intensidad, duración, motivación y repercusiones de la violencia variaron significativamente según la ubicación geográfica de ésta. A pesar de que ha sido el área del suroeste antioqueño (Urrao, en particular) la que históricamente ha sido considerada como el epicentro de la violencia en Antioquía durante la década del cincuenta, Por ejemplo, el mayor número de muertes, desplaza mientos forzosos y, ataques contra la propiedad ocurridos entre 1948 y 1953 tuvieron lugar en sólo un número reducido de municipios, casi todos, como los de Urabá, ubicados en la periferia geográfica del departamento y no en la zona centra 5 . Más aún, los episodios de violencia partidista vividos en la zona central rara vez suscitaron una respuesta draconiana por parte de las autoridades antioqueñas. Este ensayo sugiere que al crear un marco de análisis de la violencia Y establecer una tipología de esta última, es necesario considerar la existencia de distintos tipos de violencia cuyas características fueron producto en parte de factores geo-culturales. La experiencia de la violencia en Urabá, por ejemplo, nos obliga a tomar en cuenta cómo conflictos no necesariamente de origen partidista (como por ejemplo la lucha por la tierra y/o por el monopolio o acceso a recursos naturales) contribuyeron de ma nera determinante al desencadenamiento de la violencia en regiones fronterizas o periféricas6 . Examinado a través de esta otra óptica un ataque como el que ocurrió en El Carmelo en agosto de 1950, podría entenderse no sólo como el resultado de la oposición liberal a un gobierno regional. conservador sino también como un rechazo más complejo, dirigido contra el poder regional y en protesta a la subordinación económica y cultural de las gentes y los recursos de la zona. Así interpretó el gobierno regional el significado de los acontecimientos en Urabá. Es decir, menos como un incidente exclusivamente partidista y más como un acto de insubordinación local contra el poder del estado regional, un repudio a los valores y las costumbres "antioqueñas" y una grave amenaza al incipiente desarrollo capitalista en un área de incalculable valor estratégico y económico para el departamento. En contraste, el gobierno departamental frecuentemente militarizó y toleró -en ocasiones hasta impulsó- la creación de grupos paramilitares para contrarrestar la violencia en las zonas de Urabá (incluyendo algunos municipios hoy considerados parte del occidente como Dabeiba), el Magdalena Medio y el Bajo Cauca. En ocasiones en que la violencia partidista afectó los municipios de la zona central, el gobierno departamental abordó el problema de orden público a través de la negociación, la sustitución de empleados públicos y el desplazamiento de la policía, pero nunca sólo a través de la represión o la ocupación militar. 6 Ver Darío Fajardo, Violencia y Desarrollo, Bogotá, 1979, Carlos Miguel Ortiz Sarmiento, Estado y subversión en Colombia, La Violencia en el Quindío Años 50, Bogotá, 1985; José Jairo González Arias y Elsa Marulanda Álvarez, Historias de Frontera, colonización y guerras en el Sumapaz, Bogotá, 1990., Gonzalo Sánchez y Donny Meertens, Bandoleros, garnonales y campesinos, Bogotá, 1983; y Alejo Vargas Velásquez, Colonización y conflicto armado, Bogotá, 1992. 5 Mary Roldán, Génesis and Evolution of La Violencia in Antioquia, Colombia 1900-1953. tesis de doctorado sin publicar, Harvard University, 1992, y, en el libro Hegemony and Violence: Class, Culture and Politics in Twentyeth Century Antioquia (en publicación). 4 ESTUDIOS PERIFERIA Y CENTRO: MARCO TEÓRICO VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … UN pobladores o habitantes de la periferia eran percibidos por las autoridades antioqueñas y por los habitantes "civilizados" del interior como personas en las Cuales no se podía confiar, pues su comportamiento v creencias contrastaban con las del ideal cultural promovido por las autoridades y la élite regional. Más que el reflejo de unas diferencias bien marcadas de apariencia fisiológica o de origen racial (que por lo general no eran tan evidentes como para distinguir entre los habitantes del interior y los de la periferia), la atribución de diferencias culturales y de características específicas a los habitantes de la periferia se utilizó para construir una ideología del "otro"7 que simultáneamente contribuyó a consolidar y reforzar una identidad regional y legitimar la exclusión política, social y económica de aquellos que parecían desviarse en su comportamiento dia rio de dicho ideal8 . Desde la época colonial se empezó a tejer en Antioquía un discurso de diferencias culturales que tuvo como punto de partida las diferencias climáticas, económicas y étnicas de distintos espacios geográficos dentro de la región. Ya para fines del siglo diecinueve y principios del siglo veinte estas percepciones de diferencias geoculturales constituían un especie de mapa en el imaginario de las élites regionales. Éstas distinguían entre las áreas centrales de colonización como el oriente cercano, suroeste, norte y el área de Medellín y su inmediato entorno, y las zonas periféricas como Urabá, el Magdalena Medio, noroeste y Bajo Cauca. Las áreas de asentamiento central eran imaginadas como lugares en donde se reproducía o era acogida una serie de valores -devoción a la Iglesia Católica, "blancura", legitimidad, matrimonio y capitalismomientras que las zonas perifé ricas eran asociadas con comportamientos que subvertían o impedían la reproducción de dichos valores. Las gentes de la periferia típicamente eran descritas como personas caracteriza das por prácticas como el concubinato o unión libre, la prostitución, la vagancia, la migración estacional, la ausencia de propiedad privada o de asentamientos agrícolas permanentes, la disidencia política y la falta de una identificación prioritaria con el culto católico (pues en estas zonas competían con él los chamanes, las curanderas, etc.) El "otro" se asociaba con la criminalidad, la corrupción y la insubordinación, comportamientos que amenazaban la estabilidad de la identidad antioqueña, la autoridad y la prosperidad departamental. A su vez, la "habilidad cultural y la satisfacción de normas de "respetabilidad"9 , estaban ligadas al concepto del "medio cultural, la noción de que "la raza y la identidad nacional10 podían estar asegurados o ser alterados por el entorno físico, 7 Sander L. Gilman, Difference and Pathology, Stereotypes of Sexuality, Race and madness, Cornell University Press, 1985, 22 y Lisa H. Malkki, Purity and Exile: Violence, memory and National Cosmology Among Hutu Refuges in Tanzania, University of Chicago Press, 1995. 8 Peter Wade, “Race and class: The Case of South American B1acks”, Ethnic and Racial Studies 8 (2), April 1985,233-249. 9 George Mosse, Nationalism and Sexuality, Midle Class Morality and Sexual Norms in Moderm Europe. University of Wisconsin Press, 1985. Traducción de la autora. 10 En este caso se sustituiría la identidad "regional". Además de su condición de aisla miento físico las zonas periféricas típicamente habían sido pobladas por gentes oriundas de otras regiones colombianas (muchas veces de origen afro-caribeño) y/o indígenas, y no por gentes del interior de Antioquía. A consecuencia de este patrón demográfico, los 5 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … psicológico, climático y moral en el que se vivía"11 . En términos espaciales e ideológicos, Medellín y los pue blos dentro de la zona central (como Marinilla en oriente) cumplían con el criterio de la "antioqueñidad", estos eran descritos en el discurso oficial en revistas como Progreso (órgano de la Sociedad de Mejoras Públicas de Medellín) como lugares poblados por gente de "raza noble y fuerte, sana, valerosa y trabajadora, cuna de libertadores y héroes"12 Los pueblos de la periferia o frontera aledaños a ciertos ríos como "Nare, Nechí, Cauca, Barroso, San Juan, Armá"13 y Atrato en cambio, eran descritos como lugares insalubres poblados por gente de descendencia africana, indígena o forastera (no-antioqueña), etc., considerados desde los días del geógrafo Manuel Uribe Ángel como "enfermizos", Indolentes", y de "una naturaleza apasionada e inconstante, de espíritu supersticioso, y predispuestos al 14 fetichismo y la anarquía" . construido y desplegado por los líderes políticos y hombres de nego cios antioqueños (grupos compuestos de individuos afiliados a ambos partidos) estaba basado en estas jerarquías de la diferencia cultural. El acceso a la caridad, la educación, los servicios públicos, la movilidad social y la participación política estaba condicionado por la aceptación de nociones "burguesas" que regían el orden social. Al sugerir la existencia de dicho proyecto y del uso de estereotipos para adelantarlo, no es mi intención sugerir que las características que se utilizaban para diferenciar los grupos de un lugar de aquellos residenciados en otro existían en la realidad o que una distinción de Jure existía entre las zonas periféricas y las centrales, ni tampoco que en lugares en donde existían diferencias observables de producción, organización y creencia, estas últimas eran estáticas o inherentes a las personas allí residenciadas. Pues el significado del comportamiento era cuestión de interpretación. lo que era representado como lujurioso o amenazante por los habitantes identificados con un proyecto de "antioqueñida" podía ser visto como simple expresión normal de la sexua lidad por los habitantes de la periferia. Más bien quiero marcar la profunda y ampliamente diseminada presencia en Antioquía de estereotipos basados en supuestas diferencias culturales y la influencia que estas tuvieron en la construcción de la identidad regional. Lo que de ahora en adelante llama ré un "proyecto hegemónico regional"15 , 11 Ann Laura Stoler, "Sexual Affronts and Racial Frontiers: European Identities and the Cultural Politics of Exclusion in Colonial Southeast Asia, "Comparative Studies in Societv and History” 34 (3), 1992, 536. Traducción de la autora. 12 Progreso, órgano de la Sociedad de Mejoras Públicas de Medellín: 19, 11 de octubre de 1927, 294. 13 Ibid. 21, 4 de diciembre de 1927, 326. 14 Manuel Uribe Ángel, Geografía de Antioquia, París, 1886, 255 y 296. Ver también las descripciones de Remedios (177), Zaragoza (187), Frontino (definido como parte de Urabá por Uribe Ángel) (257) y Cocorná (282). Estos estereotipos fueron adoptados y reproducidos en numerosas obras regionales y hasta en PL Bell, Colombia: A Commercial and Industrial Handbook, U.S. Department of Commerce, Special Agents Series, No.206, Washington, Government Printing Office, 1921. 15 Utilizaré el término "hegemonía" en el sentido en que lo usó Antonio Gramsci, es decir, como algo cuyo poder “depende no sólo de la expresión del los intereses de una clase El geógrafo James Parsons que fue siempre un gran admirador de la dominante sino también de su aceptación como la “realidad normal” o el “sentido común” por aquellos que en la práctica están subordinados a este [poder]". Ver Raymond Williams, KeyWords, A Vocabulary of Culture and Society,, Oxford University Press, 1976, 145 y Quintin Hoare y Geoffrey No well Smith, eds., Antonio Gramsci, Selections from the Prison Notebooks, New York, 1971, 161. 6 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … sociedad antioqueña, por ejemplo, reconoció que los antioqueños come ten "una herejía etnológica" Cuando "los habitantes se refirieren a sí mismos como la raza antioqueña" e ident ifican dicha raza como "blanca", pues "la Antioquía contemporánea es producto de una mezcla inicial de españoles, indios y esclavos negros"16 . La creencia de los ant ioqueños de ser miembros de una raza aparte (basada en valores netamente "blancos"), alegó Parsons, se encontraba "firmemente enraizada en la conciencia popular" a pesar de que ya para la década del cuarenta los censos regionales mostraban que la preponderancia de la sangre mixta... constituía una flagrante contradicción a la aseveración de que Antioquía es una provincia de blancos". 17 de fronteras y oposiciones entorno a las cuales una identidad interna puede ser marcada como distintiva. Para la élite antioqueña y los habitantes comunes v corrientes quienes tomaron parte en la construcción de barreras culturales entre los habitantes de las áreas centrales y los de la periferia, los límites de una noción de comunidad compartida fueron forjados en espacios que habían sido durante mucho tiempo objetos de deseo -ya fuera por su ubicación estratégica , sus recursos naturales o su potencial para ampliar el poder económico y político antioqueño- que, por varias razo nes históricas, habían resultado difíciles de controlar o resistentes a la dominación regional. Estos fueron los sitios en torno a los cuales se peleó y forjó la identidad y el poder antio queño. La noción de una "comunidad imaginada"18 propuesta por el politólogo Ben Anderson para entender la construcción de la identidad nacional a partir de la demarcación de diferencias culturales y muchas veces míticas entre los habitantes de un país y los de otro, nos puede ser útil para entender la relación entre la emergencia de una identidad regional y las diferencias culturales en Antioquía. Las diferencias culturales se construyeron y desplegaron para distinguir entre distintas áreas antioqueñas e imbuir éstas con significados simbólicos como parte de un proceso más amplio del establecimiento del control político cuya base fue la identificación local con un proyecto regional del poder y con las formas específicas del comportamiento individual inherentes en el ejercicio de dicho poder. En otras palabras, las comunidades requieren de la existencia URABÁ: EL OSCURO OBJETO DEL DESEO Urabá siempre ha sido objeto de raptores. Atraídos por rumores de inmensa riqueza, los españoles intentaron subyugar a la gente indígena de la zona pero se toparon con una resis tencia activa que se manifestó a través de la guerra y el suicidio colectivo 19 . Incapaz de establecer su autoridad incondicionalmente, el gobierno español optó por prohibir la navegación y el comercio a lo largo del Atrato, el río que conecta el interior de Antioquía con las regiones auríferas del occidente y el Chocó con el Caribe. 20 Más de una fortuna comercial antioqueña fue consolidada a través de la exportación ilícita de oro y la importación de telas y productos de lujo de Jamaica, Santo Domingo y Panamá a lo largo de Urabá. 16 19 James Parsons, La Colonización Antioqueña en el Occidente de Colombia, Bogotá, 1979, 19. 17 Ibid., ver Cuadro #1, "Composición Racial en Antioquia", 20. 18 Benedict Anderson, Imagined Communities, Verso, 1991. Francisco Duque Betancur, Historia de Antioquia, segunda edición, Medellín, 1968, 47-119. 20 William F. Sharp, Slavery on the Spanish Frontier, University of Oklahoma Press, 1976, 38. 7 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … En la década de 1830 comerciantes pudientes antioqueños presionaron al gobierno central para que Urabá fuera asignada a la jurisdicción oficial de Antioquia, para así monopolizar el control del comercio que cruzaba Urabá desde Cartagena, Panamá y el Caribe21 . El control de la zona se justificó explícitamente en términos del potencial económico que representaba Urabá para la región de Antioquia: “Es necesario elevar nuestra patria al puesto a que la llama su situación en el Golfo [ ...] llamando a los mares de Antioquia a las poblaciones del mundo mercantil". 22 que la futura flota comercial de Antioquia izará con gloria el pabellón nacional."24 Un poema titulado "El Progreso", incluido en el mismo número, resume de manera viva y brutal cómo se pensaba asegurar la penetración y posesión de Urabá: Progresar es violar. El indio, el monte, la cascada ululante, el bosque puro, la azul diafanidad del horizonte, la Fauna, el océano... todo eso, en pro del vellocino del futuro, sufre las violaciones del Progreso. 25 Progresar es violar. Y sin embargo, bienvenido a mi patria, tú, el amargo violador del paisaje rumoroso... Bienvenido a mi patria, tú, el de pies de hierro para el valle florecido, Bienvenido a mi patria, tú el Burgués de las fraguas, del sórdido alarido: a pesar del paisaje, silenciario de la Belleza herida, de la trémula esencia de la vida... 26 A pesar de estos intentos antioque ños, el control político de Urabá pasó primero a manos del departamento del Chocó en 1847 y después al departamento del Cauca. Antioquia lo gró acceder al control de Urabá sólo en 1905 cuando a raíz de la pérdida de Panamá, el gobierno central decidió confiar la administración de esta zona al departamento percibido como aquel con la trayectoria de colonización más exitosa y amplia en Colombia 23 . La industrialización, extracción y subordinación de áreas fronterizas como Urabá se constituían en ele mentos esenciales para lograr la aspiración antioqueña de dirigir los destinos económicos y políticos de Colombia: La importancia de Urabá para la prosperidad antioqueña constituyó uno de los temas principales del primer número de la revista Progreso en 1912, dedicada a marcar el inicio de una moderna era en el desarrollo capitalista. Se pensó inicialmente en construir una línea de ferrocarril y carreteras entre el Atrato y Amagá que unieran Urabá con el interior de Antioquia y así asegurar el futuro económico de Antioquia y su independencia política. Urabá brindaría “puerto seguro, en aguas propias, en serán los seguros vehículos de esta máquina poderosa de nuestro progreso regional, llamado a revolucionar, con incontestable impulso y, merced a las riquezas de sus minas y a los productos de sus fábricas, que ya empiezan a consolidar su imperio, la vida pasada de la Nación, encaminando sus aspiraciones al logro de la paz, del bienestar económico y, de la buena administración... 27 21 María Teresa Uribe de Hincapié, Urabá, ¿ Región o Territorio? Un análisis en el contexto de la política, la Historia y la etnicidad, Medellín, 1992, 21. 22 Discurso del Gobernador Aranzazu a la Asamblea Regional en 1833, citado en María Teresa Uribe de H., Urabá, ¿Región o Territorio?, 22. 23 Ibid., 27. 24 Progreso “Juegos Florales”, 1912, 14. Ibid., F. Jaramillo Medina, “El Progreso”. 26 Ibid. 27 Ibid., 14. 25 8 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … Más aún, según los autores de Progreso, el desarrollo capitalista manejado por una administración netamente antioqueña traería para Urabá (y Colombia entera) el fin del "caudillismo del siglo diecinueve" y de la "barbarie" típica de las zonas incultas. reproducción de la cultura regional, su organización económica y el orden político, y definían en última instancia, los parámetros del poder, la identidad y el concepto de la ciudadanía en Antioquia 30 . "Higiene," no redistribución, concluyó Restrepo, solucionaría el problema "inexistente" de la tierra en Antioquia. Nunca fue puesta en duda la necesidad de civilizar zonas como Urabá, aunque se borrara o negara el papel jugado por la coerción en tal proyecto. Carlos E. Restrepo, por ejemplo, dedicó la mayor parte de una reseña del libro Problemas Colombianos escrito por Alejandro López a comprobar que "el parcelamiento y la población" en Antioquia "se han ido verificando sin injusticias ni trastornos revolucio narios, y, antes bien, como un desarrollo natural del trabajo y de la austeridad de costumbres."28 Restrepo rechazaba el argumento de López en que este último alegaba que de no haber sido monopolizada la tierra para la creación de haciendas de ga nado por unas pocas familias antioqueñas en la zona del río Cauca, entre 50.000 y 100.000 campesinos habrían podido escapar de los males sociales creados por el desempleo y la falta de acceso a la propiedad. No había sido la concentración de tierra la que ha bía impedido la colonización de Urabá y el Bajo Cauca, insistió Restrepo, sino la ubicación geográfica de estos lugares, pues sus condiciones insalubres e inmorales inhibían el establecimiento permanente de colonos antio queños. Los "antioqueños", insistió Restrepo, "como los ingleses y los sue cos" sólo se establecen en lugares donde también pueden establecer un "hogar", pues para el antioqueño "el hogar es todo" y "el hogar no prospera donde hay paludismo"."' 29 Las coordenadas del espacio doméstico aseguraban la Las observaciones de Carlos E. Restrepo también señalan la intolerancia del antioqueño hacia las diferencias culturales. Tanto Restrepo como otros estadistas antioqueños se vieron obligados a reconocer que el antioqueño del siglo diecinue ve tenía fama de ser de "raza pendenciera"31 cuya "psicología primitiva y ruda" había constituido una barrera, antes no traspasada, a la penetración de gentes e ideas extrañas"32 , pero insistían en que el antioqueño del siglo veinte había dejado atrás su carácter beligerante y xenofóbico,. El antioqueño de hoy no es el de ayer. Hay que ver el hombre de la ciudad, para darse cuenta de ese cambio admirable. El trabajo, el civismo y el anhelo de progreso moral y material son las miras en que se orienta hoy el antioqueño 33 . Lugares como Urabá, descritos una y otra vez como incultos, serían redimidos por la presencia y ejemplo moral de este "nuevo" antioqueño, quien sin tener 30 John y Jean Comaroff han notado la existencia de discursos coloniales parecidos al de Restrepo en el caso de Suráfrica y anotan cómo "en un mundo impulsado por la propiedad y el decoro, el hogar era investido de valores elementales, en Marcando las imágenes de la propia identidad de la clase media, de la producción, la sexualidad y el género" en Etnography and the Historical Imagination, Westview Press, 1992, 43. 31 Ricardo Olano en Progreso, 1926: 4, 24 de septiembre, 48. 32 Progreso, 1912, “Juegos Florales", 13. 33 Progreso, 1926: 4, 24 de septiembre, 48. 28 Progreso, 1927:21, 4 de diciembre, 326. Énfasis mío. 29 Ibid. 9 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … que recurrir a la violencia, seduciría a las gentes de la frontera y las convencería de la superioridad de los valores culturales regionales y de las ventajas que representaría emular el modo de ser antioqueño. de la colonización regional, quienes soñaban con recrear el éxito de la colonización cafetera del siglo diecinueve en Urabá y el Bajo Cauca, el retrato aterrador de la vida cotidiana, pintado con dexteridad por personas como Ospina, aseguró que muy pocos serían los paisas atraídos a hacer "patria" allí. Los esfuerzos de promover la colonización en Urabá hechos por aquel par de incansables emprendedores, Gonzalo Mejía y Camilo C. Restrepo, tampoco tuvieron gran éxito. Estos dos liberales, quienes durante muchos años habían abogado por reorientar el comercio y la inversión pública hacia Urabá, donde un puerto reforzaría el poder departamental, surgieron como los defensores más entusiastas v consistentes de construir una carretera que uniera Urabá y, Antioquia. Un contrato finalmente se celebró para la construcción de la carretera al mar entre Antioquia, el gobierno central y algunos inversionistas extranjeros en 1926. 36 El potencial de la zona parecía no tener límites: algodón en Dabeiba y Cañasgordas; ganado en Chigorodó; oro, petróleo y el cultivo de bananos ("el [cultivo] más remunerador de todos los cultivos del mundo"37 ) en el resto de Urabá, y la extracción y beneficio de todos estos productos, para Antioquia. Otro estadista antioqueño, Pedro Nel Ospina, intentó mitigar la imagen negativa que Carlos E. Restrepo había pintado de zonas fronterizas como el Bajo Cauca y Urabá para encaminar la colonización antioqueña en las primeras décadas del siglo veinte hacia estos lugares. Pero la imagen de inmoralidad, violencia y promiscuidad que pintó Ospina al describir la vida diaria de un pueblo como Cáceres en el Bajo Cauca poco o nada calmarían la ansiedad antioqueña frente al "otro" de la frontera. En un artículo publicado en 1926 pero basado en unas memorias escritas en 1919, Ospina contó cómo al regresar un día a su hacienda la encontró en manos de la cocinera y un solitario vaquero, pues "el resto del personal estaba en Cáceres, en las ruidosas y ruinosas fiestas mensuales del paquete"34 La cocinera era de armas tomar: todo un hombre, como lo son casi todas en aquellas lejanas comarcas en que cada día suele llegar cargado con alguna sorpresa amenazante o cuando menos con algún cuidado. Llamaba Andreíta y cargaba al cinto enorme revólver, precursor de las bertas alemanas, y largo y ancho machete, la hoja clásica de los bajeros. 35 Pero las hordas de colonos antio queños que no tardarían en llenar el vacío que representaba Urabá en el imaginario de sus gestores regionales nunca llegaron. ¿Por qué no? En primer lugar, a pesar del retrato pintado por la élite regional de Urabá como una "región riquísima e inexplorada", lista a ser convertida en "un campo de trabajo, de energía y de lucha [para] ... nuestra juventud", 38 la realidad era otra. Urabá sí había sido explorada y colonizada, mas no por Es difícil imaginar a la viril Andreíta como la compañera preferida de un colono antioqueño empeñado en reproducir el hogar patriarcal y heterosexual que formaba la base fundamental de la felicidad doméstica regional. Así, a pesar de la insistencia de promotores 36 Progreso, 1926: 4, 24 de septiembre, 51-54. Ibid. 38 Progreso, 1927: 9, 8 de febrero, 140 34 37 Progreso, 1926: 7, 1 de diciembre, 104-105. 35 Ibid., 105. 10 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … antioqueños. Dos grupos étnicos y culturales -unos, colonos que huían de la expansión forzosa de grandes haciendas ganaderas en Montería (departamento de Bolívar en ese entonces), y otros, ne gros oriundos de Bolívar, Panamá y el Magdalena Medio- quienes habían buscado refugio en la zona después de las guerras civiles del siglo diecinueve, ocupaban pueblos como Damaquiel, San Juan de Urabá, El Carmelo y Arboletes en el costado superior nororiental. 39 En el interior de Urabá por el golfo, pueblos como Necoclí habían sido colonizados por familias negras, quienes mantenían amplios nexos económicos, familiares y religiosos con Cartagena. 40 Aquellas personas emigrantes de Cartagena y otros pueblos caribeños que llegaron a Urabá cuando ya había sido distribuida la mayor parte de Id tierra baldía en el norte de la región pasaron a Carepa, Chigorodó y Apartado en medio de la zona donde se trazaría la carretera al mar. 41 Sólo Turbo, donde va existía una colonia de migrantes chocoanos, logró atraer algunos antioqueños, sobre todo a Partir de 1935, cuando el gobierno regional oficialmente impulsó la colonización de esta zona. 42 zona. Los sinuanos, en cambio, se asemejaban más al patrón de colonización típica de los antioqueños: tumbaban monte, sembraban pasto, criaban ganado, extraían madera y montaban cultivos permanentes de productos agrícolas 43 , pero Id rivalidad entre sinuanos desplazados por ganaderos antioqueños en Bolívar (hoy Córdoba) creaba poca base de entendimiento entre estos dos grupos. El segundo factor que pudo haber inhibido el establecimiento permanente de una presencia antioqueña tenía que ver con los mecanismos empleados para subordinar e imponer la autoridad regional en Urabá. De poco servía la riqueza natural de la zona sin carreteras o medios de comunicación que la uniera a Antioquia. El sueño regional de transformar a Medellín en la esplendorosa reina de todo el occidente colombiano y hacer bajar a nuestro gran río de todas las poblaciones que se empinan en las crestas de, sus montes... cablecillos aéreos y carreteras automoviliarias que Vacíen los frutos ubérrimos de nuestras tierras y los minerales de nuestras minas en las toldas apropiadas de los mismos vagones al mar y que asegurarían que Medellín sería siempre el centro material y moral de nuestra gran raza antioqueña, raza que come mucho frisol con tocino, como los americanos del norte, y, mucho maíz, también como ellos. 44 Las distintivas tradiciones culturales y étnicas encarnadas por estos colo nos dieron lugar a patrones de cultivo y formas de organización económica igualmente diversas en la zona. Los migrantes negros del Caribe y el Chocó, por ejemplo, tendían a reproducir estrategias de supervivencia económica basadas en la pesca, la agricultura de subsistencia y la extracción esporádica de productos naturales del monte y los abundantes bosques que pululaban en la no tenía riesgo de cumplirse mientras la única forma de llegar a Urabá fue ra a pie, a lomo de mula o en canoa. Precisamente a raíz de su distancia y 43 Ibid., 99 y, ver también las tipologías y descripciones regionales en Virginia Gutiérrez de Pineda, Familia y Cultura en Colombia, Bogotá, 1975. 44 Crónica Municipal, órgano del Concejo de Medellín, Año XXVI (981), Medellín, 12 de octubre de 1937. 39 María Teresa Uribe de H., Urabá, op. cit. 41. 40 Ibid., 95-96. 41 Ibid., 46. 42 Hermes Tovar Pinzón, El movimiento campesino en Colombia durante los siglos XIX y XX, Bogotá, 1975, 41. 11 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … difícil acceso surgió el monótono discurso regional enfatizando la necesidad de construir la Carretera al Mar. A falta de volunt arios antioque ños, los líderes regionales establecieron colonias penales y echaron mano del trabajo forzoso como castigo para determinados crímenes (la vagancia, el desempleo, la homosexualidad, el estupro y el concubinato 45 ), para así asegurar un adecuado número de obreros para ésta y otras obras en las zonas más retiradas o inhóspitas de Antioquia. Si la posibilidad de empleo en las obras públicas era limitada por la existencia de un ejército de reserva de presos - y Carlos E. Restrepo ya había notado que los antioqueños sólo migrarían a zonas como Urabá atraídos por un "buen jornal" 46 ,- entonces el único otro incentivo material capaz de atraer el interés antioqueño sería el acceso a la tierra. Pero el tamaño de las concesiones, la distribución de baldíos y el tipo de explotación económica que caracterizaban a Urabá, precluían esta posibilidad para todos menos los individuos más pudientes o bien conectados. He aquí la paradoja de la penetración antioqueña en Urabá: la mayoría de los "colonos" antioqueños atraídos a la zona resultaron ser terratenientes, ganaderos y concesionarios de bosques absentistas mas no las legiones de colonos pobres, quienes reproducirían las "costumbres austeras", la devoción al culto o las pequeñas fincas familiares asociadas con la colonización cafetera del siglo diecinueve, patrón de colonización que se constituyó en el elemento central del mito y la identidad regional. La mayor parte de la tierra y recur sos naturales (bosques y productos de extracción) en Urabá formaban parte del patrimonio nacional. El que pudiera comprobar que residía permanentemente y había hecho mejoras en determinado lote de tierra baldía tenía derecho a peticionar para que el gobierno central le otorgará título. En principio la fortuna personal del suplicante no afectaba el resultado de dicha solicitud, pero en la práctica, un sistema de titulación inadecuado, incompleto y fraudulento garantizaba que la mayoría de las propiedades -aún aquellas consideradas como privadasno gozaran de títulos legales que establecieran límites precisos. La propiedad se determinaba típicamente a través del ejercicio de la coerción, la rosca" y el poder adquisitivo. 47 A principios del siglo veinte grandes extensiones de tierra en Urabá habían sido adjudicadas a inversionistas privados, quienes lograron conseguir títulos de tierras baldías o concesiones con derecho a explotar los bosques nacionales. Estas concesiones y la concentración del poder económico que crearon dieron pie a numerosos litigios y conflictos, sobre todo entre los habitantes de la región y los propietarios de origen antioqueño. Derechos a más de 271.830 hectáreas de bosques se concedieron en 21 contratos a distintos inversionistas privados entre 1900 y 1939 en Urabá para la extracción de sisal, tagua, chinchona, maderas, y palma 48 . Las concesiones se otorgaban en contratos de 10 o 20 años, 45 Ver Código de Policía, Ordenanza Número 50, 30 de abril de 1914, Imprenta Oficial, Medellín, Capítulo 10, artículo 98 y Código de Policía, Ordenanza Número 46 de 1925, Medellín, Imprenta Oficial, Capítulo 12, artículo 114. En éste último la definición de la vagancia se amplió al incluir los que andan de pueblo en pueblo sin ejercer una industria u oficio capaz de proporcionarles honradamente la subsistencia. 46 Progreso, 1927:21, 4 de diciembre, 36. 47 Catherine LeGrand, Frontier Expansion and Peasant Protest in Colombia, 1830-1936, University of New Mexico Press, 1986, 136-7. 48 Panorama Estadístico de Antioquia (en adelante, PEA), DANE, Imprenta Oficial, 1981, cuadro 8.1.1.1 “Explotaciones forestales contratadas en bosques nacionales 1900-1939”, 385-7. 12 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … cada una de ellas incluía hasta 15.000 hectáreas. 111.460 hectáreas adicionales fueron otorgadas en concesión en once contratos entre 1940 v 1953 49 . argüían también que los contratos habían perjudicado a "gente pobre, la economía y el comercio de la región”52 y que los vecinos se habían visto obligados a vender la tagua que extraían a cambio de "precios extremadamente bajos y arbitrarlos" que no reflejaban el valor del produc to en el mercado mundial. 53 La extracción de chinchona, sisal y tagua -empresa en la cual individuos podían fácilmente participar sin tener Capital propio- fue sustituida por una casi exclusiva concentración en la explotación en grande de maderas en la década inmediatamente anterior y durante los primeros años de La Violencia. La extracción de madera para fines comerciales en contraste con la extracción en pequeña escala de tagua y otros productos naturales, requería de una fuerte inversión de capital para poder cubrir su transporte y procesamiento. De hecho, la mayoría de concesiones otorgadas entre 1940 y 1952 fueron dadas a corporaciones como Maderas del Caribe, Exportadora de Maderas Urabá Ltda., etc. 50 La concesión de una parte importante de los bosques nacionales suscitó protestas por parte de los vecinos de Chigo rodó, quienes se quejaban de sentirse más y más marginados económicamente a medida en que se concentraba el control de la tierra y los recur sos en la zona. Setenta y siete colonos se quejaron al gobierno central en 1927 insistiendo que las tierras reclamadas por inversionistas privados no estaban "vacías, sino pobladas por colonos durante más de 50 años". 51 Los colonos Estaba en juego no sólo la cuestión de un ingreso en efectivo crítico para la supervivencia de los vecinos de la zona -ingreso que muchas veces constituía la tenue diferencia entre la subsistencia y el hambre-, sino también la supervivencia de formas colectivas de producción, propiedad o usufructo. Los habitantes de pueblos como Chigorodó no se resistían al capitalismo en sí, pues la falta de todo menos algunos productos agrícolas desde tiempo atrás había obligado a los urabeños a formar parte de una economía de mercado. Lo que preocupaba a los habitantes de Chigorodó era la institucionalización de un sistema de producción que les prohibía el acceso a tierras hasta entonces consideradas públicas los ponía a merced de las decisiones de monopolistas. La inconformidad de los habitantes de Chigorodó no era una situación aisla da. Los vecinos de Pavarandocito también se quejaron en torno a las concesiones de bosques al gobierno central. El concejo municipal de este último lugar venía protestando por la adjudicación de baldíos ante el Ministerio de Hacienda desde 1899. Igual que los habitantes de Chigorodó, los de Pavarandocito alegaban que "dicha adjudicación iría en contra de los intereses del municipio cuyos habitantes viven de la extracción de tagua de 49 PEA, cuadro 8.1.1.2 “Concesiones forestales otorgadas en bosques nacionales su evolución, 1940-1952”, 387-8. 50 Ibid. 51 Colombia, Archivo Nacional, Ministerio de Industrias, Correspondencia de Baldíos (de aquí en adelante, ANCB), petición enviada por los habitantes de Chigorodó al Ministro de Industrias, 20 de febrero de 1927 y, carta enviada por los mismos habitantes al Procurador General, el Congreso y los periódicos principales con fecha de 1927, tomo 65, 435. Quiero agradecer la generosidad de Catherine LeGrand quien muy gentilmente me envió copias de este material cuando se enteró que yo estaba tratando de trazar una correlación entre La Violencia y los conflictos en torno a la tierra y, recursos naturales en la región de Antioquia. 52 Ibid. 53 ANCB, carta de Chigorodó, 25 de agosto de 1927, tomo 64, 572. 13 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … bosques baldíos". 54 También temían la pérdida de la autonomía local y preguntaban si la adjudicación incluía todo el pueblo". Veintiséis años más tarde, los vecinos del lugar aún se quejaban ante el gobierno central del efecto nefasto de grandes concesionarios quienes “monopolizan el mercado" de tagua. 55 Conflictos en torno a las tierras públicas (en que el promedio de cada concesión era de más de 2.200 hectáreas) también surgieron en Turbo entre 1918 y 1931. 56 sugerir que más que un conflicto partidista, esta violencia representaba un repudio a la agricultura capitalista intensiva. 58 Los colonos de Cañasgordas con la ayuda de la gue rrilla liberal basada en Camparusia, igualmente invadieron varias grandes haciendas (pertenecientes a miembros de ambos partidos), erradicando los cultivos comerciales y sembrando maíz y fríjol. 59 En resumen, Urabá experimentó un crecimiento económico sin precedentes en los años inmediatamente anteriores al inicio de La Violencia. El efecto doble de la migración hacia Urabá de otras partes del Caribe y la conversión de amplias extensiones de tierra baldía en empresas privadas para la producción intensiva de artículos comerciales hicieron que el costo de los artículos de la canasta familiar en Urabá pasara a ser el segundo más alto en todo Antioquia (superado sólo por el costo de estos en Zaragoza, otro pueblo fronterizo que experimentaba un crecimiento parecido en esos años). 60 Grandes parcelas de tierra anteriormente públicas eran convertidas a diario en propiedad reservada para la construcción de la carretera al mar o en propiedad privada dedicada a la explotación intensiva capitalista. Comercializadoras de madera y aserríos empezaban a monopolizar el uso de los bosques locales, y grandes cultivos de caucho, arroz, cocos y haciendas ganaderas se extendían por la región. Con la posible excepción de la carretera, ninguna de estas empresas requería de mano de obra intensiva, y muy pocas llega ron a beneficiar a los habitantes de la región, quienes eran en su mayoría pobres sin tierra. La lucha por el acceso a la tierra en la zona de Urabá continuó hasta la época de La Violencia y aunque la filiación partidista indiscutiblemente jugó un papel en estos conflictos, también jugaron un papel determinante las diferencias socioeconómicas de los litigantes. Todos los casos de invasiones de tierra o conflictos en torno al acceso a ésta ocurridos en Antioquia entre 1948 y 1953 (excepto cuatro) tuvieron lugar en Urabá e involucraron pequeños colonos y grandes terratenientes. 57 Los colonos de Pavarandocito, por ejemplo, destruyeron el producto comercial (caucho) cultivado por un consorcio de capitalistas estadounidenses y colombianos, sustituyendo el cultivo de caucho con sembrados de fríjol, plá tano y maíz, acciones que nos llevan a 54 ANCB, petición enviada por el Concejo municipal de Pavarandocito al Ministro de Hacienda, Bogotá, 24 de septiembre de 1899, tomo 19, folios 8 y 10. 55 ANCB. telegrama del personero, Pavarandocito al Ministro de Industria, 29 de julio de 1925, tomo 63, folio 384. 56 LeGrand, Frontier Expansion, Apéndice D, 187. 24 contratos cubrían más de 25,477 hectáreas fueron concedidos en la región de Turbo en este período. 57 Archivo de la Secretaría de Gobierno de Antioquia (en adelante, ASGA), Pavarandocito, 14 diciembre de 1950; Uramagrande, 4 de marzo de 1952; Urama, Dabeiba, Urarco, Buriticá, Carepa, Murri, Mutatá, Caraúta, Platanales y Frontino, 28 de abril de 1952; y, Cañasgordas, 3 de julio de 1952. 58 ASGA, Caucheras, Pavarandocito, 14 de diciembre de 1950. 59 ASGA, Cañasgordas, 3 de julio de 1952. 60 PEA, cuadro 6.1.2.2 y 6.2.3 “Valor promedio semanal de un mercado de víveres, 1923-1941”, 253-6. 14 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … Hago énfasis en la situación econó mica de Urabá en vísperas de La Vio lencia no para sugerir una simple correlación entre pobreza y violencia, sino más bien para resaltar las tensiones, diferencias culturales y patrones de organización social que a lo largo de muchos años habían moldeado el contacto entre los habitantes de Urabá y las autoridades e intereses económicos antioqueños. La relación muchas veces conflictiva entre estos grupos y la desigualdad en la distribución del poder económico y político en la región constituyeron el telón de fondo de La Violencia e influenciaron de manera crítica su desarrollo en la década del cincuenta. DIFERENCIAS VIOLENCIA OFICIALES Y de apellido Bolívar, habitante de Turbo y descrito como dueño de "propie dades y (es) hombre rico", insistía en la existencia de la "chusma" y acusaba a "Ramón Hincapié" de liderarla, pero otro individuo con propiedades en San Juan y Arboletes aseguraba que la misma banda había atacado esta otra zona en el mismo día en que se le acusaba de operar en Turbo, algo imposible. Propietarios ansiosos insistían en que el gobierno les mandara tropas para proteger sus propiedades, algunas de las cuales eran tan grandes que el Coronel observó que ocupaban una buena parte del terreno entre Damaquiel y San Juan, convirtiéndose en "paso obligatorio" para cualquier transeúnte en la zona. El Coronel puso en claro que en su opinión el temor a la extorsión más que razones partidistas impulsaban los muchos rumores de inminente desorden en Urabá, pues los terratenientes de la región se quejaban continuamente de haber sido "amenazados por la banda de Hincapié" que pasaba de hacienda en hacienda solicitando armas y víveres y extorsionando a los mayordomos y peones de éstas sin distingo políticos. CULTURALES, POLÍTICAS Informes detallados del estado de orden público en Urabá comisionados por las autoridades antioqueñas ha cen evidente cómo la presencia de determinantes no-partidistas llamaron la atención del gobierno regional e influyeron sobre las políticas adoptadas por éste para controlar el orden público en la zona. El Coronel Luis Abadía llevó a cabo una detallada investigación de cinco áreas críticas en la región de Urabá -San Juan de Urabá, Arboletes, Damaquiel, Necoclí y Turbo- en octubre de 1950. 61 Al comienzo de su recuento el Coronel enfatizó que los ciudadanos más ricos de la región "sienten por todas partes a los bandoleros" sin poder dar cuenta de la ubicación exacta de estos. Un señor Pasando al pueblo de Damaquiel, el oficial notó que cien civiles armados de machetes se habían aparecido en el puerto pensando que el Gobernador había enviado a la policía para restaurar el orden público. Al enterarse de que no era la policía sino el Ejército -con personal de Bolívar y no de Antioquia 62 - el que había llegado, el mo tín 61 62 Archivo privado del señor Gobernador de Antioquia (de aquí en adelante, APSGA), “informe de Comisión Región Urabá", (1951), tomo 5, Coronel Luis Abadía, Ejército Nacional, Medellín, 4a Brigada, 16 de octubre de 1950. Por razones de espacio, la autora ha omitido asignar, en los párrafos que siguen, pie de páginas pormenorizados en las citas extraídas de este documento; en caso de hacer referencia a información extraída de otro documento, este último será debidamente anotado. Cabe anotar que en Antioquia se vivió un fenómeno bastante importante en torno a la percepción local del personal de la Policía y el Ejército en distintas zonas que iba más allá del comúnmente comentado problema de "los chulavitas", es decir, de policías conservadores cundiboyacenses. Por su aislamiento físico y el alto costo de mandar tropas desde Medellín a Urabá por avión, frecuentemente operaban en la zona soldados de Cartagena y no tropas Antioqueñas, en varias ocasiones el personal de 15 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … se dispersó. La actitud de los habitantes de Damaquiel convenció al oficial de que muchos habitantes desconfiaban de Antioquia y de sus autoridades. Las observaciones del Coronel revelan además hasta qué punto las jerarquías de diferencia cultural imbuían e influían sobre las evaluaciones oficiales de las condiciones locales y el fenómeno local de violencia. Damaquiel, por ejemplo, era descrito como: malidad y en donde la ciudadanía no se mostró hostil hacia el gobierno regional fue Arboletes; la economía allí andaba "en plena marcha" y no había indicios de "chusma": "todo el mundo salió a recibirnos con manifestaciones de simpatía". El Coronel Abadía concluyó su informe con una explicación de por qué, puramente desde el punto de vista del interés propio, Antioquia debería remediar los problemas creados por la violencia en Urabá. Esta última representa para la economía nacional una de las fuentes de más amplio porvenir; y si se relaciona con Antioquia, los aspectos económicos que (sic) representan esos rincones alejados del departamento, son fundamentales y de unas proyecciones incalculables en el futuro de los intereses del mismo. dolorosamente abandonado... no hay quien represente la autoridad... la más grande indolencia (ilegible) por su abandono, por el ambiente hostil y desconfiado. Los hombres no trabajan sino que a esa hora se encontraban todos tendidos en sus hamacas, reflejando en sus rostros el rictus de una raza vencida y atormentada por la pereza. El fenómeno de la violencia en Urabá, según la opinión del oficial militar, se podía resumir en cuatro factores: la ausencia de autoridades regionales; la falta de vías de transporte; la indiferencia de los antioque ños y la falta de moralidad y civilización entre los habitantes de la zona. Además, mientras productos locales como la manteca, el arroz, el plátano y el maíz fueran exportados a Cartagena, y bananos y cocos fueran exportados a Panamá, en vez de enviarlos hacia Antioquia en donde podrían abastecer "los escasos mercados" del departamento, concluyó el militar, Antioquia no tenía riesgos de poder establecer su hegemonía en la región. Aunque la incipiente construcción de la carretera al mar era vista como un indicio positivo de que Antioquia va loraba Urabá, el departamento necesitaba hacer más por los habitantes de la zona - mostrándoles que "Antioquia toda vive pendiente de ellos"- para así superar el "aislamiento" y "resentimiento" sentido por una gran parte de la población. En fin de cuentas el problema de la violencia en Urabá se reducía al problema de la civilización: El pueblo se había convertido en el lugar preferido para "efectuar concentraciones", lanzar ataques hacia pue blos vecinos y como punto de salida de fugitivos hacia Panamá. Los habitantes de San Juan eran descritos en términos parecidos a los de Damaquiel y el pueblo era caracterizado por estar arruinado con "multitudes de casas abandonadas... en el estado más espantoso de suciedad." Atemorizados por el reciente ataque de unos mil hombres armados, y resentidos con las autoridades antioqueñas, los habitantes de San Juan habían huido del lugar antes de que llegara la comisión oficial a investigar la situación de orden público. El único pueblo en que el Coronel detectó la semblanza de norBolívar notaba en sus informes que eran recibidos con más agrado por la ciudadanía rasa que lo que habría sido cierto para el personal de Antioquia. A su vez, tanto el gobierno regional y algunos propietarios (conservadores, pero también liberales) percibían que el Ejército simpatizaba con los habitantes de Urabá en parte por tener algunos nexos familiares, culturales y raciales en común. 16 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … hay necesidad de hacer llegar hasta esos lugares los aspectos morales y cívicos del pueblo antioqueño, que son garantía para la redención de muchos hombres que en esas apartadas regiones, viven una vida primitiva de relajación moral y mental. "pacto" hegemónico antioqueño. Tal vez de igual importancia, como "ninguna he gemonía es total" (según Gramsci), y todo arreglo hegemónico debe re-negociarse continuamente, siempre existe la posibilidad de que la hegemonía puede ser "disuelta". 64 En el interior de Antioquia, este "pacto" o "arreglo" hegemónico al que hace referencia Grarrisci había sido construido en torno a una negociación (la cual podía muy bien no ser equitativa) en la que la participación real de los habitantes en el departamento -en sus servicios, su inversión, su política- suponía una adhesión (al menos en apariencia) por parte de estos a las normas de comportamiento, los valores y las formas de organización social del ideal regio nal. Al no acogerse a estas normas, los urabeños ponían en juego su participación en dicho pacto. Pero, por otra parte, el Departamento tampoco ofrecía a los habitantes de Urabá las "concesiones" o beneficios que la obediencia había conferido a los habitantes del interior. El desafío urabeño al poder regional frustraba las ambiciones de control antioqueñas a la vez que dejaba al descubierto las bases exclusivistas sobre las cuales eran cons truidos los derechos a la ciudadanía y la participación en el Departamento. Urabá no estaba integrada al resto de Antioquia, sus habitantes no se identificaban como antioqueños, no dependían de Antioquia para satisfa cer sus necesidades básicas y no consideraban a las autoridades regionales como los legítimos representantes de la ley. La situación material de Urabá era además crítica: no existían reservas de gasolina ni barco motorizado que pudiera patrullar la costa; el transporte aéreo ocurría esporádicamente según el capricho de Avianca; las comunicaciones eran reducidas a mensajeros que viajaban a pie o en canoa porque faltaba el servicio de radio o no existían líneas de telegráficas que unieran a la mayor parte de Urabá con Medellín,- el servicio de correo lo proveían particulares; y los únicos representantes de la autoridad regional se reducían a unos agentes de rentas o un inspector de policía. En semejantes condiciones, se lamentaba el Coronel encargado de la investigación, pocas esperanzas existían de que los urabeños cambiaran de actitud frente a Antioquia. LA PÉRDIDA DE CONTROL Si como sugiere Gramsci, la hegemonía presupone "que se tome en cuenta los intereses y las tendencias de los grupos sobre quienes se ejercerá la hegemonía, y que se forme un cierto equilibrio de negociación63 , entonces la incapacidad de imponer y mantener el orden en Urabá por parte de Antioquia tendría que interpretarse parcialmente como resultado de la falta de necesidad por parte de los urabeños en participar en el Grupos armados incrementaron sus actividades violentas en los meses inmediatamente posteriores a la investigación militar realizada en octubre de 1950. Estos grupos concentraron sus seguidores en dos áreas: el valle del río San Jorge en el alto Sinú y a lo largo de la carretera al mar entre Dabeiba y Turbo. La guerrilla liberal con bases en Antioquia, Bolívar y lo que hoy en día es el Departamento de Córdoba 63 64 Antonio Gramsci, Selections from the Prison Notebooks, op. cit., 161. Comaroff and Comaroff, Ethnography and the Historical Imagination, 30. 17 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … operaban en todo Urabá. Los "bandoleros" establecieron una extensa red de campamentos, retenes y sistemas de abastecimiento que aprovechaban el conocimiento local y las viejas rutas del contrabando que cruzaban todo el territorio. Miembros de la guerrilla pasaban fácilmente de trabajar en la carretera a ser agricultores o trabajadores estacionales, migrando de una parte de Urabá a otra y formando así una fuerza omnipresente e invisible. antes del anterior incidente, agentes de la Administración de Rentas en el Chocó también se habían ofrecido para colaborar con las autoridades antioqueñas pero en el control de contrabando. El plan fue frustrado porque ni el Chocó ni Antioquia disponían de una lancha motorizada con qué patrullar los ríos frecuentados por los contrabandistas en Urabá. 67 El Gobernador antioqueño confesó que tampoco tenía una lancha con qué patrullar Turbo. En últimas fue el Departamento de Orden Público de Cartagena el que se vio obligado a rogarle al gobierno central para que éste hiciera un plan de defensa naval para Urabá, y para que proveyera seis estaciones de embarcamiento para lanchas motorizadas, estaciones de patrullaje a lo largo del río, tres lanchas y dos aviones. 68 La consolidación de fuerza guerrillera estuvo acompañada por el desarrollo de un amplio mercado en el contrabando de armas. Explosivos y armas transitaban desde Puerto Obaldía y el Golfo de Urabá por el río León hasta llegar al río Chigorodó, de ahí por toda la carretera al mar hasta el río Atrato, y de éste al río Sucio en Pavarandocito a través de Puerto Arquía hasta Urrao. 65 Además, la dina mita y otros explosivos destinados al uso de la Carretera al Mar eran robados y revendidos o filtrados a grupos guerrilleros que operaban en Urabá y otras partes de Antioquia. En diciembre de 1950, por ejemplo, el Goberna dor de Bolívar le advirtió al Gobernador de Antioquia que iba a ser introducida una gran cantidad de armas desde Panamá por la zona de Sapzurro/Acandí a lo largo del río Atrato cuyo destino final era la Carretera al Mar. El Gobernador de Bolívar ya había enviado una tropa desde Cartagena, pero insistió en que para poder tener efecto, Antioquia tenía que hacer lo mismo. De nada valió esta advertencia, pues el Departamento de Antioquia no tenía ni lanchas equipadas de armas ni hombres disponibles con qué impedir la introducción ilícita de armas a la región de Urabá. 66 Un mes Impedido por la falta de personal y armas, y por la pérdida de confianza por parte de los habitantes de Urabá, quienes poco creían en la capacidad del gobierno regional para defender sus vidas o intereses, el (siempre) tenue control ejercido hasta ese entonces sobre Urabá por el Departamento de Antioquia quedó aún más resquebrajado. Asustado además por la posibilidad de que trabajadores simpatizantes de la guerrilla se tomaran la Carretera al Mar y cerraran la única vía de acceso terrestre entre Antioquia y Urabá, lo cual marcaría el fin a cualquier pretensión de control en la región, Braulio Henao Mejía optó por de 1950; APGA, 1950, tomo 3, respuesta de Braulio Henao Mejía a Roberto Cavalier, 10 de diciembre de 1950. 67 APGA 1950, tomo 8, telegrama (en clave y descifrado al revés) enviado por la Secretaría de Hacienda, departamento del Chocó a Braulio Henao Mejía, 15 de noviembre de 1950. 68 APGA, 1950, tomo 8, telegrama enviado por el Departamento de Obras Públicas, Cartagena, a Braulio Henao Mejía, 12 de diciembre de 1950. 65 APGA, 1950, tomo 2, telegrama enviado por el Coronel Abadía al Gobernador Braulio Henao Mejía, 4 de diciembre de 1950. 66 APGA, 1950, tomo 3, telegrama de Roberto Cavalier a Braulio Henao Mejía, 9 de diciembre 18 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … entregar la responsabilidad de mantener el orden público al cuerpo de ingenieros del Ejército Nacional en ene ro de 1951.69 órdenes de los líderes del Partido Liberal de Medellín, “los conservadores también están engrosando las turbas del pillaje". 72 El Gobernador reiteró su perplejidad frente al fenó meno de La Violencia a nivel local en una carta dirigida a su amigo, el Ministro de Relaciones Exteriores, Gonzalo Restrepo Jaramillo: Por esta época también empezaron a rondar rumores de que en algunas instancias la violencia en Urabá era resultado de conflictos económicos. El Inspector Nacional de Bosques informó al Gobernador, por ejemplo, que muchos de los habitantes locales se habían quejado de las acciones de un aserrío de propiedad de un destacado miembro del Partido Liberal en Medellín. Era La situación de orden público en todo el occidente continúa siendo inquietante. Decididamente no puedo saber si se trata de un millar de hombres en desorden, o si su extraordinaria movilidad los hace aparecer un gran número. Mucho más grave que la torcida inspiración política inicial y que las actuaciones en pandilla o guerrilla contra el gobierno y contra las instituciones, que era lo que veníamos contemplando hasta hace un par de meses, es lo que estamos presenciando ahora o sea grupos de verdaderos vándalos entregados absolutamente al pillaje como principal motivo, compuestos ya de elementos de los dos partidos. Ya hay chusmas de una y otra clase que actúan separadamente para robar y, que de paso asesinan, incendian y violan; y las hay mezcladas en las mismas tareas a lo largo de toda la carretera al mar pero muy especialmente en Dabeiba y Cañasgordas... sin que falten asesinatos aislados en toda la extensión hacia Chigorodó. 73 opinión unánime de los vecinos... en el sentido de que la Empresa ha fomentado, apoyado y sostenido el Estado de Inseguridad reinante allí, con fines de obtener un monopolio económico de los productos forestales que abundan en la región . 70 Mientras Antioquia no poseía una lancha con qué patrullar la región, la empresa de maderas a la que hacía alusión el Inspector poseía cuatro camiones, una lancha con motor y tenía acceso a otra lancha y una ametralladora.71 No se trataba sencillamente de un negociante liberal colaborando con la guerrilla para desestabilizar un go bierno regional conservador, pues como el mismo Gobernador se vio obligado a informar al Presidente, cuando este último sugirió la posibilidad de que la guerrilla simplemente seguía las En la misma carta el Gobernador hace referencia a conversaciones anteriores con el Presidente en que se había 69 APGA, 1951, tomo 7, telegrama enviado por Braulio Henao Mejía a Gonzalo Restrepo Jaramillo, Ministro de Relaciones Exteriores, Bogotá, 30 de enero de 1951. 70 APGA, 1951, tomo 7, informe escrito por L. Ramírez, Inspector Nacional de Bosques, 18 de enero de 1951. 71 APGA, 1951, tomo 4, Chigorodó/Carretera al Mar, informe sobre Surambay, 15 de diciembre de 1950. 72 APGA, 1951, tomo 7, Carta de Braulio Henao Mejía a Laureano Gómez, 28 de febrero de 1951. 73 APGA, 1950-51, tomo 6, Carta de Braulio Henao Mejía a Gonzalo Restrepo Jaramillo, 1 de marzo de 1951. 19 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … discutido la necesidad de militarizar la región de Urabá: por miembros de grupos armados afiliados a la oposición. El Visitador Especial del Directorio Conservador de Antioquia, enviado a informar sobre el estado del partido en el occidente, por ejemplo, advirtió a sus superiores que Es de mayor urgencia que nunca la realiza ción inmediata del plan sugerido por el doctor Urdaneta, o sea declarar todo aquello zona militar, entregarla al ejército con plena autoridad y, con plena responsabilidad y, dotar a éste, pero rápidamente, de todos los elementos necesarios para que pueda cumplir esta misión en corto plazo y sin desdoro. 74 grandes haciendas situadas en los municipios de Antioquia, Cañasgordas, Frontino y Dabeiba... están en la zona ocupada por los bandoleros [...] las haciendas situadas en zonas afectadas por la violencia liberal, están a cuidado de liberales. En un paraje denominado La Mesa o La Meseta cerca y visible de Uramita, paraje de propiedad de los XX [conservadores], habitan campesinos con certificados conservadores y carnet liberal. [...] Lo cierto es que después se encuentran cadáveres en encuentros militares, cadáveres pertenecientes a los bandole ros, con recomendaciones conservadoras [...]del Comité de Frontino, Dabeiba y Antioquia.76 La decisión de militarizar a Urabá fue catalizada en parte, como lo admitió el mismo Gobernador, por el temor del efecto que podría tener una violencia indiscriminada sobre la propiedad en la zona: aquí sufrimos el permanente clamor de gentes aterradas y arruinadas de la población campesina o la perpetua y, justificada queja de numerosos colonos que han creado verdadera riqueza en esas regiones y, cuyas propiedades están siendo también asoladas, las cosechas robadas o destruidas y sus hombres de trabajo asesinados o dis persados en busca de salvar sus vidas. Te estoy hablando con toda intimidad y sobre monstruosas realidades. 75 Conservadores pudientes abandonaban sus intereses partidistas "dizque para defender sus intereses [económicos]" no sólo al tratar de evadir la guerrilla liberal, sino para protegerse de las acciones de conservadores "muy pobres" quienes, resentidos por estar excluidos del poder económico y, la política local, invocaban la lealtad partidista para justificar la organización de grupos paramilitares que se dedicaban a "asesinatos y robo genera"77 . La violencia ejercida por la con- Propietarios conservadores, además, coludían con miembros de la oposición y abiertamente desafiaban su partido y el gobierno, adoptando medidas autónomas para enfrentar la situación de orden público en sus lo calidades. En muchas partes de Urabá, como en otras zonas fronterizas, propietarios afiliados con un partido protegían y empleaban con regularidad a miembros de la oposición o negociaban el derecho a trabajar o habitar en áreas controladas 74 75 76 Archivo de la Secretaría de la Gobernación de Antioquia (en adelante, ASGA), 1953, tomo 8, “informe Correspondiente al municipio de Frontino, Elaborado por Mario Javier Mesa, Visitador Especial del Directorio Conservador", 17 de diciembre de 1952. 77 ASGA, 1953, tomo 8, “informe Correspondiente al Conservatismo de Dabeiba", Mario Javier Mesa, Visitador Especial del Ibid. Ibid. 20 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … trachusma "inclusive a conservadores"78 llevó al Comité de Cafeteros de Antioquia a pedir que el Ejército protegiera haciendas conservadoras situadas en pueblos como Juntas de Uramita en donde la Policía Nacional "no puede actuar [...] porque Inspolicía Cestillal siembra pánico mediante comisiones civiles armados mezclados guardias". 79 Filiación política, violencia y clientelismo estaban claramente implicados en estos episodios de desorden público, pero no de la manera en que un conflicto definido en torno a una división meramente liberal/conservador sugeriría. Los intereses económicos divergentes creaban rupturas entre miembros de un mismo partido y los llevaba a adoptar diversas estrategias de supervivencia. El desarrollo de grupos informales de protección organizados para defender ciertos intereses durante este período, además, estableció las bases para la generación de grupos de seguridad privados, paramilitares, "auto defensas" y matones a sueldo que hoy en día abundan en Urabá y otras zonas fronterizas en donde se vivió intensamente La Violencia de los años cincuenta. El mercado laboral también estuvo íntimamente ligado a un mercado de influencias, en donde la consecución de documentos falsos para trabajadores y dependientes o la capacidad de pagar extorsionistas se constituían en los determinantes del poder. Estas redes de influencia y clientelismo recientemente construidas en zonas fronterizas garantizaban que el desorden público no perjudicaría una economía pujante, ni que fuera “casi imposible obtener trabajadores". A mediados de 1951 el gobernador de Antioquia, Braulio Henao Mejía anunció que "había hecho todo lo posible en su capacidad como Gobernador"80 por restaurar el orden público en Urabá, pero que había fracasado. No quedaba más remedio que entregarle la región al Ejército; éste podía establecer cuarteles y conducir "batidas" para defender a la ciudadanía. El bombardeo y el racionamiento de víveres y otros artículos de consumo como azúcar, café, cigarrillos, fósforos y sal se volvieron medidas rutinarias. Se restringía además la movilidad de los habitantes y en especial de los trabajadores de la zona a través de un sistema de salvoconductos regulado por la Cuarta Brigada. De todas las tropas militares presentes en diversos sectores de Antioquia para el mantenimiento de orden público en noviembre de 1953, casi la tercera parte estaba estacionada en Urabá. 81 La transformación de la región en un Estado ocupado fue total. CONCLUSIONES Mientras más éxito tenga un régimen, más desaparecerá su ideología en el dominio de la práctica hegemónica; mientras menos éxito tenga, más estarán expuestas sus reglas 82 invisibles a ser retadas. Y podríamos agregar, más pronuncia da será la necesidad de recurrir a la coerción. En una serie de artículos publicados en la primera mitad de 1994, el diario regional El Colombiano hizo 80 APGA, 1951, tomo 6, telegrama enviada por Braulio Henao Mejía al alcalde de Turbo, 27 de marzo de 1951. 81 APGA, 1955, tomo 2, "Cuadro demostrativo de las comisiones de orden público destacadas en la jurisdicción de la 4a Brigada (Disposiciones radiogramas números DGE-787 y DGE-S3-56-36 del presente año)”, noviembre de 1953. 82 Comaroff and Comaroff, Ethnography and the Historical Imagination, op, cit., 30. Directorio Conservador, 17 de diciembre de 1952. 78 APGA, 1952, tomo 4, telegrama del alcalde de Cañasgordas quejándose al Gobernador de que la contrachusma roba indiscriminadamente en el municipio, 14 de octubre de 1952. 79 APGA, 1951, tomo 5, Comité de Cafeteros, Antioquia, Juntas de Uramita, 5 de octubre de 1951. 21 ESTUDIOS VIOLENCIA, COLONIZACIÓN Y LA GEOGRAFÍA … un recuento histórico de Urabá y concluyó que la violencia endémica se debía a que Antioquia no había pero el Departamento insistía en pensar que algún día lo logr aría. logrado realizar los proyectos que había desarrollado para la región. Dedicó sus energías a promover e impulsar el desarrollo de los pueblos de la cordillera y dejó un territorio sin su presencia, en una posición fértil y estratégica para el refugio de sus enemigos.83 La serie sobre Urabá criticaba abiertamente la política regional con respecto a la zona y simpatizaba con el dilema de los urabeños. Pero a pesar de esta aparente compasión, la serie reproducía precisamente el discurso colonialista y las categorías de representación que por muchas décadas habían caracterizado y definido la relación entre Urabá y Antioquia y que de alguna forma seguían disimulado las complejas bases materiales y culturales de la violencia en la zona. Urabá en 1994 seguía siendo el mismo objeto de deseo que había sido en 1912; aún "vacía" y en espera de la dominación antioqueña, aún "propicia a la insurgencia"84 ; aún la víctima del conflicto entre distintos rivales ideológicos; aún la virgen seductora y tabula rasa esperando ser creada por el deseo antioqueño. Para evitar que los lectores ignoraran las referencias colonialistas, el periódico acompañó cada número de la serie sobre Urabá con la representación gráfica de un buque armado con un fusil AK-47 sobre el cual era sobrepuesto el contorno del mapa de Urabá con una bandera antioqueña sembrada en toda la mitad. El proyecto de dominación antioqueña en Urabá hacía mucho había fracasado 83 El Colombiano, “Urabá y los procesos del caos (2)," Medellín, 21 de marzo de 1994, 8B. 84 El Colombiano, "Urabá, tierra propicia a la insurgencia (14)," 4 de abril de 1994, 6B. 22 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS FRENTE A AMÉRICA LATINA* desde principios de los años noventa la UE ha modificado sus relaciones con el subcontinente latinoamericano, tomando posición frente a los Estados Unidos y buscando un equilibrio de fuerzas ante la influencia norteamericana en la región. Hoy, desde el Río Grande hasta la Patagonia, toda América Latina está cubierta por una completa red de rela ciones con la Unión Europea. Estas relaciones son canalizadas básicamente por los acuerdos de cooperación que la UE ha establecido con la región latinoamericana. 87 Giovanni Molano Cruz** INTRODUCCIÓN América Latina se encuentra en una posición desfavorable en la pirámide de preferencias internacionales de la Unión Europea (UE). 85 En primer lugar la UE orienta sus relaciones exteriores hacia los países de la Asociación Europea de Libre Comercio y los principales países industrializados (Estados Unidos, Japón, Canadá, etc.). Enseguida la preeminencia recae sobre las relaciones con los países del sur del Mediterráneo y algunos países de África, el Caribe y el Pacífico (ACP), cuya relevancia se ve ensombrecida por los países de Europa central y oriental. Y finalmente, en el último lugar, se encuentran los países de América Latina y Asia 86 . Se podría deducir entonces que América Latina no ocupa un lugar significativo para la Europa comunitaria. Sin embargo, Ante la pregunta sobre cuáles son las principales dificultades para sus relaciones con Europa, los latinoamericanos no dudan en responder que la Política Agrícola Común representa uno de los mayores obstáculos. 88 Así la literatura sobre las relaciones entre los países latinoamericanos y la Europa comunitaria generalmente hace énfasis sobre el objetivo de la política Europea de Cooperación de favorecer los vínculos entre las dos regiones; mientras que la Política Agrícola Común es abordada como una política que provoca efectos negativos sobre las relaciones UE- América Latina. Para algunos autores estas dos políticas europeas están enmarcadas por las relaciones económicas, 89 mientras que otros las consideran desde una perspectiva amplia de las relaciones internacionales o específica de las relaciones permanentes90 como * Este trabajo fue preparado para participar en el coloquio "Comercio y cooperación entre la Unión Europea y el Mercosur en el sector agrícola", organizado por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Francia y Solagral en la Escuela Nacional Superior de Agronomía de Montpellier el 2 y 3 de abril de 1998. Para la presente publicación se han agregado algunas notas de pie de página con el fin de reforzar ciertas reflexiones. ** Sociólogo, estudiante de posgrado en la Universidad de Ginebra, Suiza. 85 Utilizamos la denominación Unión Europea porque de acuerdo con las disposiciones del Tratado de Maastricht, ella engloba "las Comunidades europeas [y] las políticas y formas de cooperación instauradas por el presente tratado". Cfr. L'Union Européenne. Les traités de Rome el de Maastricht. Textes comparés, París, La Documentation Française, 1992. 86 Cfr Fazio H. "La política exterior de la integración europea" en: Análisis Político No. 27, IEPRI-UN, 1996, p. 45- 57. 87 Renaux G., Les relations entre l'Union Européenne et I’Amérique Latine, Club de Bruxelles, Bruxelles, 1994. 88 Grillie, The European Cornmunity and Developing Countries, Cambridge University Press, London, 1994, 24. 89 Van Klaveren A. "Les relations EuropeAmérique Latine: entre l’illusion et le réalisme" en: Cahiers CERCAL No. 7, ULB, janvier 1997, p. 11- 42. 90 Baicochi G, "La relazione tra 1'Unione Europea e l' America Latina. Dalla 23 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … una definición clara de cada política europea, o analizándolas de manera tangencial, tienden a confundir los objetivos comunitarios con la retórica europea hacia América Latina. 91 En general estos trabajos reflejan los diferentes intereses de la acción exterior europea así como la complejidad de los mismos. Pero los enfoques analíticos no permiten distinguir las conexiones entre los distintos niveles de la acción exterior de la UE ni aprehender las relaciones de fuerza y los conflictos entre la Política Europea de Cooperación y la Política Agrícola Común. Los estudios prestan atención a los principales temas de la agenda Unión Europea- América Latina sin considerar el contexto de la formulación de las políticas comunitarias. Latina. Para discernir las interacciones y comprender los motivos del conflicto entre estas dos políticas comenzamos por presentar un panorama de la PEC. En seguida abordamos el estado actual de esta política en el caso de América Latina, para luego describir la organización de la PAC y sus vínculos con los países latinoamericanos. Finalmente, a manera de conclusión, presentamos algunas reflexiones en torno a la formulación de la PEC y la PAC. LA POLÍTICA COOPERACIÓN EUROPEA DE El tratado de Maastricht, cuyas disposiciones entraron en vigor en noviembre de 1993, consagra la cooperación al desarrollo dentro del marco de las relaciones exteriores de la UE. La Política Europea de Cooperación al desarrollo, con sus características y dinámica propias, constituye en efecto un componente de la Política Exterior Común. A pesar de que corresponden a dos capítulos diferentes del Tratado, estas dos políticas deben desarrollarse paralelamente de acuerdo con el conjunto de las acciones exteriores europeas. Esta exigencia está inscrita en el artículo C de la carta constitutiva de la UE, el cual estipula en su segundo párrafo que Sin embargo, en los hechos las relaciones entre la UE y América Latina están determinadas por la organización de las políticas comunitarias. En este sentido, resulta significativo para el análisis no solamente el estudio de lo que se puede ganar o perder frente a la UE, sino también la identificación de los diferentes factores e intereses que articulan las políticas europeas. El objetivo de este artículo es aportar a la comprensión de la Política Europea de Cooperación (PEC) y la Política Agrícola Común (PAC) frente a América La Unión velará, en particular, por mantener la coherencia del conjunto de su acción exterior en el marco de sus políticas de relaciones exteriores, en el ámbito de la seguridad, de la economía y del desarrollo. El Consejo y la Comisión tendrán la responsabilidad de garantizar dicha coherencia y asegurarán, cada cual conforme a sus competencias, la realización de tales políticas. dimenticanza all'apertura reciproca", Politica Internaziotiale, No. 22 (4), ott -cic. 1994; Sánchez Cimetti G, "La Communauté Européenne et 1' Amérique Latine: soutien a la démocratie ou défense de ses intéréts?" en Sánchez López G, Les chemins incertains de la démocratie ett Amérique Latine?, Paris, L'Harmattan, 1993, p. 201-237. 91 Ramjas A, "Las relaciones Unión EuropeaAmérica Latina. Hacia una nueva era de entendimiento" en: Análisis Político No. 28, IEPRI-UN, 1996, pp. 85-90; Tokatlian J., Carvajal L., "Tendencias de la cooperación internacional en la Posguerra Fría" en Colombia Internacional, No. 27, CEI UNIANDES, Bogotá, p. 18 -2 7 24 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … En este sentido, no es sólo una política altruista sino también una política que, considerando los intereses mutuos de las partes implicadas en los acuerdos de cooperación y ayuda al desarrollo, contribuye a la defensa de los intereses de los países comunitarios. 92 No obstante, el mundo en desarrollo no es homogéneo; por ello, la UE adelanta una política de cooperación a partir de una clasificación geográfica que va desde los países menos avanzados (África) hasta los nuevos países industrializados (Asia), pasando por los países de ingreso medio (Cuenca del Mediterráneo, América Latina) y los llamados países en transición (Europa Central y Oriental). equilibrios macroeconómicos impulsados por las instituciones de Breton Woods y la participación en el comercio internacional son los motores del desarrollo. La orientación de la lucha contra la pobreza se basa en la búsqueda de un equilibrio geográfico de la cooperación que permita atender las necesidades de las capas de población menos favorecidas de los países con ingresos medios. En tanto, los objetivos de consolidar la democracia pluralista y el respeto de los derechos humanos que provienen del consenso europeo sobre la proyección universal del Estado democrático liberal, reflejan la estrategia comunitaria de condicionar la cooperación para el desarrollo según el comportamiento del país receptor. Los artículos 130y a 130u del título XVII del Tratado de Maastricht definen los objetivos de la cooperación comunitaria para el desarrollo. Estos objetivos son: a) el desarrollo económico y social durable de los países en desarrollo y particularmente de lo menos favorecidos; b) la inserción armoniosa y progresiva de los países en desarrollo en la economía mundial; c) la lucha contra la pobreza en los países en desarrollo; y d) la consolidación de la democracia y el Estado de derecho así como el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales. Estos objetivos se inscriben en la perspectiva de los resultados de la Conferencia de la Organización de las Naciones Unidas sobre el medio ambiente y el desarrollo, organizada en Río de Janeiro en 1992. Se argumenta que el desarrollo es un proceso a largo plazo, en donde cada etapa exige consideraciones de durabilidad y viabilidad económica, demográfica, social y política. La lógica adoptada asume por lo demás que los Para alcanzar estos objetivos las instituciones europeas cuentan con un sistema de cooperación que está dividido grosso modo en dos partes: 1) la cooperación y la ayuda al desarrollo dirigida a los 71 Estados ACP, programa que se rige por la Convención de Lomé IV y que es financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo a partir de contribuciones especiales pero no por el presupuesto de la UE; y 2) la cooperación con el resto del mundo en desarrollo, que está financiada en su totalidad sobre el presupuesto gene ral de la UE. Esta distribución es válida para la PEC en general pero su gestión es comp leja y hace intervenir diversos actores de la Comisión de las Comunidades Europeas. De hecho, la gestión de la cooperación esta repartida entre cinco comisarios, dos direcciones generales (Dirección General de Relaciones Exteriores, Dirección Gene ral de Desarrollo) y la Oficina Humanitaria de la Comunidad Europea. Además otras direcciones generales, como las encargadas de la agricultura y el medio ambiente, también tienen competencia y el Banco Europeo de Inversiones asegura la financiación de algunos 92 Sobrino Heredia M, "La comunitarización de la política de cooperación al desarrollo en el Tratado de la Unión Europea". e n Recherches et Réalisations: mélanges, Pedone, París, 1995, p. 335. 25 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … aspectos de la Política Europea de Cooperación. Desde finales de la década de los 80 la UE ha modificado su política de cooperación con América Latina, tanto sobre los aspectos cuantitativos como cualitativos. Entre 1976 y 1983 las obligaciones del presupuesto comunitario para la región alcanzaron 314 millones de ecus, mientras que en el período 1984-1989 la cifra fue de 1022.8 millones de ecus. 95 Este incremento de la cooperación comunitaria se explica por dos factores. Por una parte, porque los países latinoamericanos han logrado el establecimiento formal de la democracia y porque, superada la "década perdida", el subcontinente es considerado como una zona económicamente emergente. Por otra parte, las nue vas condiciones del orden interna cional -pos-Guerra Fría- han provo cado una segmentación de la estrategia europea frente a los países en desarrollo, en la cual la atención tiende a focalizarse en las regiones "útiles" y a aislar aquellas que han "fracasado" en sus procesos de desarrollo e industria lización. 96 Desde esta óptica, Pero la cooperación europea no es de la competencia exclusiva de la Comisión puesto que ella está orientada por el principio comunitario de subsidiaridad. Esto significa que la Comunidad "sólo interviene en la medida en que los objetivos propuestos no pue dan ser alcanzados por los Estados 93 miembros". No obstante, en virtud del artículo 130x la Comisión está habilitada para emprender iniciativas de coordinació n de las políticas de cooperación para el desarrollo de los Estados miembros. Y en su artículo 130V el Tratado de Maastricht sugiere a la Comunidad tener en cuenta los objetivos de la PEC en la realización de las otras políticas comunitarias que son susceptibles de afectar de una u otra forma los países en desarrollo. Es decir que la coherencia de la cooperación al desarrollo con los objetivos del conjunto de las políticas comunitarias es un criterio de la estrategia de la PEC.94 LA POLÍTICA EUROPEA DE COOPERACIÓN HACIA AMÉRICA LATINA Europa está interesada en participar en este proceso de crecimiento [en América Latina] y en contribuir a la profundización de las reformas así como en la reducción de los riesgos de inestabilidad originados en las fuertes tensiones sociales. 97 93 De acuerdo con este principio hasta hoy los países comunitarios "han juzgado indispensable mantener sus propios programas bilaterales de cooperación al desarrollo" OCDE-CAD, Communaué Européenne, Serie des examens en matiére de coopération pour le développemmt No. 12, OCDF París, 1996, p. 13. 94 Desde comienzos de los años noventa el criterio de la coherencia es considerado por el conjunto de países industrializados que buscan adelantar relaciones eficientes con los países en desarrollo. Sin embargo, la Unión Europea es la única que en su carta constitutiva establecida en el Tratado de Maastricht, inscribe este criterio como un objetivo de su política de cooperación al desarrollo. Cfr Hofbink P, "Coherence and development policy: the case of European Comunity", trabajo presentado en la conferencia "Globalization, Competitiveness and Human Security: Challenges for Development Policy and Institutional Changé", Viena, septiembre de 1996. Así en 1992 un nuevo reglamentomarco fue adoptado por la Europa comunitaria, reforzando las relaciones de 95 Cfr Commission Européenne, Toutes formes Faules d’aides avec les PVD d'Amerique Latine et d’Asie. Annexe statisfique du 17 eme Rapport annuel, Bruxelles, octubre 20 de 1994. 96 Pries F, Les Grands Debats Européenns, Seuil, París, 1995, p. 468. 97 CCE, Unión Européenne-Amérique Latine. Actualite et perspectives du renforcement du partenariat 1998-2000,. Bruxelles, 25. 10. 1995 COR1 (95) p. 3. 26 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … cooperación para el desarrollo con América Latina y ampliándolas al campo de la cooperación económica, lo cua l ha permitido incrementar la cooperación con los países más ricos de la región que hasta ese momento eran escasamente considerados por la PEC. Desde entonces la intensificación de las relaciones de la UE con América Latina es el resultado de una conjugación de motivos donde el interés económico y la estrategia política frente a los Estados Unidos juegan un papel preponderante, inclusive si los documentos europeos minimizan estos argumentos haciendo énfasis sobre un deber histórico y un pasado común. 98 relaciones entre grandes grupos continentales. Pero el marco bilateral también es significativo puesto que refleja las motivaciones y el peso de cada país comunitario en la orientación de las relaciones exteriores de la UE. Por ello el balance bilateral es necesario para comprender las relaciones regionales UE-América Latina; sin embargo, los objetivos de este artículo no nos permiten presentar las numerosas relaciones de cooperación que países como España, Italia, Alemania, Francia, Holanda o Suecia han establecido con diversos países latinoamericanos. 99 Para planificar la PEC frente a América Latina, orientada por "tres ejes prioritarios: compromiso mutuo en favor de la democracia, del desarrollo social y de la competividad internacional" 100 , la Comisión adopta una perspectiva financiera escalonada en cinco años. Pero la autorización para desembolsar fondos es acordada cada año. De esta forma la cooperación con los países latinoamericanos se convierte en un tema de negociación directamente relacionado con la orientación general de la financiación de la UE. En concreto, el presupuesto de la PEC para América Latina, está sometido al presupuesto general que comprende los países asiáticos, los países mediterráneos y los países de Europa central y oriental. Este presupuesto representa cada año entre 4 y 6 por ciento del presupuesto global de la Política Europea de Cooperación y no comprende ni los recursos financieros destinados a los países asociados de la Convención de Lomé IV, ni aquellos concentrados en el Fondo Europeo de Desarrollo. En otras La Política Europea de Cooperación hacia América Latina contiene dos dimensiones: la ayuda al desarrollo y la cooperación, moduladas de acue rdo con los diferentes niveles de desarrollo logrados por cada región o país. De esta forma, algunos países son los principales beneficiarios de la ayuda al desarrollo, mientras que otros con mejores rendimientos económicos son los socios privilegiados de las actividades de interés mutuo, es decir de la cooperación económica. De hecho, el enfoque de la cooperación comunitaria es regional (Comunidad Andina, América Central, Mercosur) o específico (México, Chile, Cuba) pero siempre en función de los indicadores económicos de cada país y/o región. El enfoque regional es una característica de las relaciones exteriores de la UE, en el cual el esquema tradicional de relaciones entre Estados-Nación es superado progresivamente por un sistema de 98 No sobra señalar que la celebración del "Encuentro de dos Mundos" también contribuyó a la renovación de un discurso común y al acercamiento en varios niveles entre los países europeos y los latinoamericanos. Al respecto véase por ejemplo Remechie -Martynow. A. (sous la direction), Demain: le Nouveau Monde, Dialogues Amérique Latine/Europe, La Découverte, París, 1993. 99 Véase al respecto Freres C (coordinador), La Cooperación al Desarrollo bilateral de la Unión Europea con América Latina, AIETI, Madrid, 1997. 100 CCE, Unión Européenne -Amérique Latine. Actualité et perspectives du renforcement du partenariat. 1996-2000, op.cit. 27 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … palabras, la PEC hacia América Latina es financiada de la misma forma que las otras políticas comunitarias: sobre el presupuesto general de la UE. No obstante, en comparación con otras regiones, la cooperación europea con América La tina aumentó sensiblemente a lo largo de los años 80 y comienzos de los 90 para ubicarse en un poco más del 10% del total de dicha cooperación entre 1993 y 1994. 101 Mediterráneo, Medio y Cercano Oriente, Sudeste asiático, América Latina y cooperación Norte-Sur". LA AYUDA AL DESARROLLO Consiste principalmente en la cooperación clásica al desarrollo, es decir la ayuda financiera y técnica, y puede ser atribuida tanto al sector público como al privado. Este tipo de cooperación privilegia al sector rural, el mejoramiento del nivel de seguridad alimentaria e incluye las acciones en favor de la población rural más necesitada. El 10% de la ayuda financiera y técnica es consagrado a la protección del medio ambiente y al desarrollo sostenible, particularmente de la selva tropical; mientras que el 15% está reservado a las acciones de ayuda humanitaria. Una atención particular es acordada al papel de las mujeres en la gestión de la ayuda al desarrollo, así como en la protección de la infancia y los grupos étnicos minoritarios. Las acciones que tienen un efecto sobre la estructura económica y sobre las instituciones también son un campo estratégico, de allí que el diálogo con las instituciones internacionales y los donantes bilaterales sea una constante. 103 De igual ma nera el apoyo a la integración regional es un objetivo prioritario, particularmente en lo que concierne el comercio intrarregional, la consolidación de ins tituciones regionales, el transporte y la comunicación. La importancia relativa de la PEC hacia la región también fue marcada por la entrada de España y Portugal a la Europa comunitaria. A partir de 1986 la óptica política española, guiada por un deseo oficialmente explícito de modificar los portafolios de la cooperación comunitaria en favor de la región latinoamericana, se impuso progresivamente sobre la visión francesa constantemente motivada por favo recer el grupo de países ACP. En este proceso ha sido determinante la actitud de diferentes países comunitarios que rechazan pagar los costos de una cooperación con los países ACP en la cual al parecer solamente París obtiene los beneficios. Sin embargo, los esfuerzos desplegados por España para incorporar varios países latinoamericanos en la Convención de Lomé fueron aislados y sólo consiguieron incluir a República Dominicana y Haití en el grupo ACP. 102 Pero en general desde 1988 la PEC dirigida hacia América Latina se encuentra bajo la tutela directa de la Dirección General de Relaciones Exteriores y particularmente de la división "Relaciones Exteriores: En 1976 Bolivia fue el principal país beneficiario de la ayuda al desarrollo pero la principal región receptora de la cooperación financiera y técnica es América Central. En Honduras desde 1977 y luego en Nicaragua desde 1979, la Europa comunitaria comenzó sus ayudas de urgencia alimentaria y a los refugiados. A comienzos de los 90 la 101 OCDE-CAD, Rapport Annuel 1996, OCDE, París, 1997, p. 133. 102 Sobre la acción política y diplomática española en favor de América Latina a finales de los 80 véase Del Arenal Moyua C, "La adhesión de España a la Comunidad Europea y su impacto en las relaciones entre América Latina y la Comunidad Europea" en: Revista de Instituciones Europeas Vol 17, tiro. 2, .Madrid, mayo-agosto 1990. 103 28 Cfr Renaux G (sous la dir.), op.cit. INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … región centroamericana recibió más de 500 millones de ecus, es decir la mitad del total de fondos consagrados al subcontinente latinoamericano. Esta cifra estuvo repartida en: un 47% para el conjunto regional y un 53% distribuido en la ayuda a cada uno de los países centroamericanos (Costa Rica, Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, Panamá). En segundo renglón están los países de la Comunidad Andina (Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú, Venezuela) que obtuvieron durante la misma época 400 millones de ecus, de los cuales el 12% estuvo destinado a la integración regional y el 78% representó la suma total de la ayuda a cada país. No obstante, los sectores más pobres de los países con ingresos me dios, como Brasil que recibió 600.000 ecus en 1992, también son beneficiarios de la ayuda financiera y de la cooperación técnica. industria agroalimentaria o la pesca, el sostenimiento de reestructuración económica y la realización de microproyectos en las zonas rurales 104 . Un proyecto agrícola, de un programa de irrigación, por ejemplo, es adelantado en seis u ocho años, mientras que los microproyectos rurales tienen una duración de dos o tres años, como es el caso de los créditos agrícolas y de ciertos proyectos industriales. También existen proyectos que son realizados en un año, como aquellos que consisten en ayudas a la investiga ción agrícola. La prioridad del sector agrícola y rural de la ayuda financiera y técnica, que está focalizada tanto a nivel de cada país como a nivel regional, es comprensible no solamente por las características económicas de la mayoría de países latinoamericanos, sino también por la proyección política europea que busca validar la experiencia de la integración comunitaria en el orden internacional. De hecho, la Europa comunitaria ha construido gran parte de su identidad a partir de cuestiones agrícolas y rurales, "tanto desde el punto de vista interno como externo los agricultores son actores esenciales del proyecto político europeo"105 . Sin embargo, con base en el rápido crecimiento de las ciudades latinoamericanas, la UE también adelanta el programa denominado URB-AL cuyos objetivos son establecer relaciones entre actores locales de ciudades latinoamericanas y europeas. De igual manera, existen intercambios universitarios de estudiantes e investigaciones que son canalizados a través del programa ALFA, específico para la región latinoamericana. La ayuda al desarrollo se traduce principalmente por la financiación de programas. Un programa está conforma do por varios proyectos que son adelantados con diferentes ritmos, según las oportunidades definidas sobre el terreno. En 1993, por ejemplo, fueron adelantados 78 proyectos con un presupuesto global que se acercaba a los 719 millones de ecus. Desde los inicios de la cooperación financiera y técnica con América Latina en 1976 hasta los años 90, el sector rural ha representado tres cuartos del total de dicha cooperación. Así, entre 1976 y 1988 sobre un total de 246 proyectos, el 74.3% correspondía a las actividades de la agricultura. De hecho la Comisión estima que en el caso latino americano la distribución de los proyectos programados por la Comunidad revela, a través de los años, una evolución constante hacia las acciones por el desarrollo de las instituciones, el crédito a la 104 105 Ibidem p. 73. Le Naelou A, Politiques Européennes de Développement avec les pays du Sud, L'Harmattan, París, 1995, p. 85. 29 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … LA COOPERACIÓN ECONÓMICA América Latina continental se beneficia de la cooperación económica. Por lo demás, es importante señalar que desde comienzos de los años 90 el subcontinente se ha convertido en una de las regiones más dinámicas para las exportaciones europeas. Entre 1990 y 1993, por ejemplo, estas exportaciones aumentaron en un 57%, mientras que aquellas del sudeste asiático crecieron un 43% y las correspondientes al conjunto de los países en desarrollo lo hicieron en un 25%. Estos porcentajes contrastan con el 2% de las exportaciones europeas hacia los países industrializados, el 8% de la evolución de las exportaciones hacia los Estados Unidos y Canadá, y la disminución hacia el Japón (- 1%) y los países de la Asociación Europea de Libre Comercio (- 4%). 107 Si la cooperación financiera y técnica privilegia los países con pequeñas y medianas economías, la cooperación económica -que alcanzó 33,6 millones de ecus en 1993 después de totalizar 20,7 en 1991- se dirige particularmente a los países más competitivos en la economía mundial. La cooperación económica, concebida en el interés mutuo de la UE y los países latinoamericanos, busca apoyar las políticas macroeconómicas y los programas estructurales de liberalización del comercio y apertura a las inversiones. Sus objetivos son hacer el entorno de estos países más favorable a la inversión y obtener el mejor partido de las perspectivas que ofrecen al incremento de los intercambios internacionales, incluido el mercado único, reforzando la presencia de técnicos, de la tecnología y del savoir-faire de todos los Estados miembros, particularmente en el sector privado y en las industrias medianas. 106 Desde sus orígenes la UE ha emprendido una serie de relaciones económicas aisladas con varios países latinoamericanos. Pero estas relaciones no constituían un plan de acción global. Se recuerda, por ejemplo, que en 1957 un protocolo adjunto al Tratado de Roma garantizaba a la República Federal Alemana un comercio privilegiado del banano proveniente de América Latina. Es a lo largo de los años 70 hasta comienzos de los 80, que la Europa comunitaria firma sus primeros acuerdos comerciales con América Latina. Con Argentina (1971), Brasil (1973), Uruguay (1973), México (1975) y el Pacto Andino (1983) fueron establecidos acuerdos pero sin ningún tipo de preferencia comercial especial. Estos acuerdos, denominados de primera generación, buscaban no obstante desarrollar y diversificar los inter- A diferencia de la ayuda en el plano financiero y la cooperación técnica, que no exigen la firma de acuerdos para su ejecución, la cooperación económica se desarrolla principalmente en función de acuerdos de cooperación a nivel nacional o regional. El acuerdomarco de cooperación firmado por la UE y el Mercosur el 15 de diciembre de 1995 para crear una zona de libre comercio, es sin lugar a dudas el más significativo. Pero en general toda la 106 Cfr CEE, Réglement fro. 443/92 du Conseil du 25 fevrier, relatif a Faire financiere et technique et a la coopération économique avec les pays en développement d'Amérique Latine et d'Asie, p. 3 y 4. 107 Smith R, "La relación económica entre América Latina y la Unión Europea" en: Revista de la Cepal o. 56, agosto de 1995, p. 100. 30 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … cambios entre las dos regiones. En la década de los 80 se establecieron los acuerdos de segunda generación, que se extendieron a nuevos países y nuevas temáticas. La cooperación europea integró entonces los sectores industria les, científico y tecnológico y temas novedosos como la protección del medioambiente y la lucha contra el tráfico y consumo de drogas. Hoy los llamados acuerdos de tercera generación son cualitativamente diferentes de los anteriores puesto que, además de considerar explícitamente la cooperación económica, incluyen una cláusula sobre el respeto de los derechos humanos y el establecimiento de los principios democráticos,108 así como una cláusula evolutiva que permite extenderlos a cualquier sector si las dos partes lo desean. cuenta las tasas de crecimiento económico", y por ello se ha establecido el programa ALURE, especial para el sub continente. Sin embargo, más allá de los programas de formación y la financiación del intercambio científico y tecnológico, la promoción de inversiones europeas es el aspecto más relevante de la cooperación económica con América Latina. Dicha promoción se adelanta por medio de dos instrumentos financieros de tipo general y un programa específico para América Latina. El primero es el European Comunity International Investment Partners (ECIP) que también esta destinado a los países asiáticos y a aquellos de la cuenca mediterránea. Su objetivo es promover las inversiones privadas de la UE bajo la forma de joint ventures con los inversionistas latinoamericanos. En la gestión del ECIP participan instituciones financieras de los dos lados del Atlántico, como bancos de desarrollo, bancos privados y comerciales y las instituciones multilaterales. Los criterios establecidos van desde la viabilidad de las inversiones hasta el impacto sobre la balanza comercial y sobre la balanza de pagos, pasando por la creación de empleos locales y la toma en cuenta del rol de las mujeres en los procesos de desarrollo. Todos los bancos europeos de desarrollo participan en el programa ECIP, mientras que del lado latinoamericano están asociados cuatro bancos mexicanos, tres chilenos, dos argentinos, dos colombianos, dos venezolanos, un banco peruano, uno boliviano y uno de Costa Rica. Con el horizonte de favorecer el interés mutuo y, de contribuir al desarrollo y la participación de las economías latinoamericanas en el mercado mundial en general y en el europeo particularmente, la cooperación económica se concentra en tres sectores: el savoir-faire económico, científico y energético, el entorno económico y comercial y las acciones relacionadas con el sector privado. La cooperación en el sector energético merece una atención particular de la UE, "teniendo en 108 Aquí debemos señalar dos excepciones: Cuba y México. No obstante las diferencias en el plano político, la L; E mantiene una posición frente a la isla que garantiza una ayuda humanitaria y ciertas acciones en favor de la población. Cuba no ha firmado acuerdos con la UE sin embargo, algunos señalan que próximamente será incluida en los acuerdos de Lomé. Cfr Mouradian A-M , (Mlenaces sur la convetion de Lomé) en Le Monde Diplomatique, Juin 1998, p. 7. El acuerdo con México no comprende la cláusula democrática porque este país estima que aquella es una cues tión de soberanía nacional. El segundo instrumento general de financiación es el Banco Europeo de Inversiones (BEI), que en 1993 desembolsó su primer préstamo con dirección a América Latina. Los préstamos del 31 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … BEI son otorgados para inversiones económicas, técnicas y financieras y tienen como objetivo contribuir al desarrollo económico y social de los países beneficiarios. Finalmente, el programa particular para la región denominado AL-INVEST, creado en 1993 con un monto global de 41 millones de ecus sobre el presupuesto general de la UE, busca fomentar las inversio nes directas, las operaciones conjuntas y las alianzas estratégicas inter- firmas, especialmente entre las pequeñas y medianas empresas latinoamericanas y europeas. Los actores seleccionados para participar en este programa son los grupos de empresas, las organizaciones o asociaciones profesionales, las sociedades locales o regionales y las instituciones que posean competencia en la actividad económica. En concreto AL-INVEST cons idera dos aspectos. Por una parte, la multiplicación de contactos y relaciones entre empresas europeas y latinoamericanas. Por la otra, la creación de una red de nodos conjuntos de empresarios. En ambos casos el objetivo es establecer sistemas que faciliten la comunicación y los intercambios de oportunidades entre empresarios, es decir lugares de encuentro y formación que fortalezcan los intercambios de tecnología y savoirfaire.109 De hecho, desde finales de la década de los 80 América Latina es una de las principales regiones de la inversión directa europea. Durante 1987- 1990, por ejemplo, Europa representó el 25% de la inversión mundial total en la región latinoamericana. Siendo el Reino Unido el principal inversionista, seguido en orden descendente por Alemania, España y Francia. Mientras que Brasil, Argentina, México y Chile han sido los principales destinatarios de los flujos de inversión europeos. 110 En cuanto al aspecto comercial, el único instrumento utilizado por la cooperación económica europea hacia América Latina es el Sistema General de Preferencias (SGP). El SGP, a pesar de que comúnmente es presentado como un mecanismo eficaz de la cooperación europea para el desarrollo en general, es ante todo un instrumento de la ayuda financiera y técnica complementario de la cooperación económica. Esto significa que el SGP no es negociado por las partes interesadas sino otorgado unilateralmente por la U E. Desde el punto de vista técnico se trata de un mecanismo complejo que otorga a los países en desarrollo una tarifa de aduana preferencial con relación a los países industrializados. Por lo demás las negociaciones multilaterales en materia comercial han reducido progresivamente las ventajas ofrecidas por el SGP. El SGP comunitario ha sido positivo en algunos casos como en los programas de preferencia comercial otorgados a los países centroamericanos durante los años 80 o el Programa Especial de Cooperación establecido a comienzos de los 90 para apoyar a los países andinos en su lucha contra el narcotráfico. Sin embargo, en realidad se trata de un sistema de graduación de derechos de aduana según los productos de cada país, cuando los países considerados alcanzan cierto nivel económico, los productos favorecidos salen del SGP. En el estudio subyacente a la graduación de derechos de aduana la UE considera el nivel general de desarrollo del país interesado y por ello a partir de este año varios países latinoamericanos podrían ser completamente excluidos del sistema. Además el SGP no es aplicable a los 109 América Latina, Fuentes, efectos y políticas, Fondo de Cultura Económica, México, 1995, p. 71. Renaux G. op. cit. p. 82. French-Davis R, Griffth-Tones S, Las nuevas corrientes finanáeras hacia la 110 32 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … productos que son objeto de una política comunitaria, como aquellos de la Política Agrícola Común. LA POLÍTICA COMÚN precios y la solidaridad financiera entre los Estados miembros. 111 Las instituciones comunitarias están encargadas de gestionar y poner en marcha la PAC. Sin embargo, la Comisión y el Consejo de Ministros son sus principales actores; y los grupos de presión nacionales así como los intereses propios de cada Estado miembro también juegan un papel decisivo en las orientaciones de esta política. Desde el momento en que Bruselas negocia una apertura de los mercados, los agricultores europeos expresan su desacuerdo en las calles de las principales capitales, en las carreteras y en las vías ferroviarias y por medio de lobbies. De hecho la PAC es uno de los temas de tensión entre la s orientacio nes de Bruselas y las acciones políticas de los Estados miembros más poderosos. 112 AGRÍCOLA Desde los orígenes de la UE la Política Agrícola Común es una de las condiciones sine qua non para construir y mantener la integración comunitaria. De hecho la PAC representa la forma más acabada de integración económica de la UE. Sobre todo porque la autosuficiencia alimentaria ha sido una preocupación constante de los Estados miembros y porque la gestión de la producción agrícola siempre ha sido complicada en razón de los factores naturales. Estos elementos revelan la importancia de la PAC para la UE y favorecen la comprensión de los principios del mercado común agrícola. En efecto en el artículo 38 del segundo título del Tratado de Roma, firmado en 1957, se argumenta que "el funcionamiento y desarrollo del Mercado Común para los productos agrícolas debe estar acompañado de una Política Agrícola Común de los Estados miembros". En este sentido el Tratado establece en sus artículos 39 a 46 los siguientes objetivos para la PAC: a) incrementar la productividad agrícola, b) asegurar el nivel de vida equitativo de la población agrícola; c) estabilizar los mercados; d) garantizar la seguridad de provisiones y e) asegurar precios razonables para los consumidores. Mientras que el mercado común agrícola, institucionalizado en 1962, está basado en tres principios: 1) la unicidad del mercado, que implica la libertad completa de intercambios entre los países miembros; 2) la preferencia comunitaria, que asegura la protección de los mercados europeos contra las importaciones y las fluctuaciones del mercado mundial y 3) la estabilidad financiera para garantizar la unicidad de La PAC descansa sobre tres mecanismos: el financiamiento comunitario, la organización de los mercados agrícolas y la política socio-estructural. Con base en la decisión del 14 de enero de 1962 la Comunidad creó el Fondo Europeo de Orientación y Garantía Agrícola (FEOGA), el cual disfruta de un poco más de la mitad del presupuesto total de la UE. El FEOGA es alimentado, de una parte, por los ingresos provenientes de las deducciones sobre las importaciones de terceros países y, de la otra, por el impuesto al valor agregado. De esta forma, funcionando como una caja de compensación, el FEOGA reembolsa los gastos que efectúa. No obstante, el financiamiento comunitario del sector 111 Bentolilla M, "La nouvelle Politique Agricole Commune" en: Problemes Politiques et Sociaux No. 723, La Documentation Française, Paris, 1994, p. 5. 112 Cfr "Les sénatours prennent la defense de la politique agricole commune" en Le Monde , junio 5 de 1998, p. 8. 33 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … agrícola está fundado sobre la solidaridad entre los miembros de la UE, lo cual significa que cada país no recibe la misma cantidad que desembolsa. La sección Garantía del fondo permite intervenir sobre los mercados financiando los gastos necesarios para sostener los precios. Mientras que la sección Orientación asegura el financiamiento de las acciones destinadas a mejorar las estructuras agrícolas.113 Aunque el nombre de los sistemas de precios varía de acuerdo con los productos, es posible distinguir tres tipos de sistemas. Los precios de orientación, que son fijados con base en los precios del mercado del año precedente, sirven de referencia teórica a los agricultores para orientar la producción. Los precios de intervención que, además de garantizar los ingresos mínimos de los cultivadores, permiten al FEOGA comprar los productos que el mercado europeo o externo no absorbe. El tercer sistema de precios determinado por los ministros de agricultura es el de protección, cuyo objetivo es defender el sector agrícola europeo frente a la competencia externa. Los tres sistemas de precios cubren de una u otra forma aproximadamente el 94% de la producción agrícola: el 70% de los productos disfruta de los tres precios (cereales, azúcar, productos lácteos, carne bovina, ovina y porcina, vinos de mesa y algunas frutas y le gumbres); el 21% de los productos (frutas y legumbres, huevos y aves de corral, entre otros) son solamente protegidos de las importaciones de terceros países por medio de derechos de aduana o a la importación y el 3% de los productos (tornasol, soya, tabaco, lino, cáñamo, entre otros) es cubierto por los precios de garantía o intervención. 115 En cuanto a la organización de los mercados, ella está basada sobre el principio del mercado único, el cual implica que los productos agrícolas circulen libremente en todos los Estados miembros con precios únicos. Los precios internos del mercado comunitario son, sin embargo, más elevados que los precios externos del mercado mundial. Por ello el desfase entre estos precios, en caso de importación o exportación, son compensados por los derechos de importación o las subvenciones otorgadas a la exportación. El consumidor en caso de importación y el contribuyente en caso de exportación soportan la diferencia de precios.114 De esta forma la organización de los mercados agrícolas realiza el principio de preferencias comunitarias, asegurando el consumo de productos europeos, ya que ella protege el mercado único de las importaciones de bajo precio o las fluctuaciones mundiales. Por lo demás la organización de los mercados se apoya sobre tres sistemas de precios fijados cada año por el Consejo de Ministros de Agricultura. Las estructuras agrícolas son el conjunto de condiciones de producción y trabajo en la agricultura. Es decir la cantidad y la distribución por edad de la población agrícola, la cantidad y la dimensión de los cultivos, las herramientas técnicas, la calificación profesional de los cultivadores, los grupos de productores, la comercialización y la transformación de los productos agrícolas, etc. Las estructu- 113 Bentolilla M, op. Cit Cfr Fumey G, L'agriculture Bans la nouvelle économie mondiale, PUF, París, 1997, p. 76. 114 115 34 Bentolilla .tit, op. cit. p. 6. INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … ras agrícolas son generalmente muy constantes, por diversos factores, frente a aquellas del sector 116 industrial. Esta situación genera un retardo significativo de las condiciones socio-económicas de las personas que trabajan en la agricultura con relación a otros grupos económicos. Para remediar esta situación, la política socioestructural, que constituye el tercer soporte de la PAC, ha sido establecida con el fin particular de modernizar el sector agrícola. Sin embargo, la financiación destinada a resolver los grandes problemas estructurales de la agricultura europea es mínima. De hecho, solamente el 5% de los gastos de la sección de orientación del FEOGA toman el camino de las reformas estructurales; mientras que el 47.8% del presupuesto comunitario corresponde a los sistemas de precios de la sección garantía.117 Este desequilibrio, denominado "lógica productivista" por algunos analistas, 118 provoca excedentes que afectan las relaciones comerciales con los terceros países en general. LA PAC Y LA LATINOAMERICANA miembros. No obstante, la producción agroalimentaria autosuficiente aumentó a comienzos de los noventa. La utiliza ción de los mecanismos de restitución de exportaciones ha permitido que la Comunidad exporte cantidades crecientes de productos agrícolas, aumentando de esta forma su participación en el mercado mundial. Entre 1991 y 1992, por ejemplo, la Europa comunitaria produjo el 129% de su consumo en cereales, el 123% de sus necesidades en azúcar y el 115% del consumo de carne bovina. En la actualidad la UE es el segundo exportador agrícola y el primer agro- importador en el mundo. De allí que su política agrícola condicione significativamente el equilibrio de los mercados internacionales y juegue un papel determinante en el crecimiento económico y la organización de la producción de los países en desarrollo. Bajo este contexto, a comienzos de los años 80 los otros países tradicionalmente exportadores, y particularmente los Estados Unidos, sintiéndose amenazados reaccionaron con una guerra comercial que provocó una disminución de precios en el mercado mundial. Fue entonces cuando, por ejemplo, Uruguay fue sacado del mercado egipcio debido a la sobreproducción europea de carne bovina.119 REGIÓN Los objetivos de la agricultura europea han sido alcanzados tal v como fueron proyectados y concebidos por el Tratado de Roma. Desde los años 80 la Europa comunitaria ha logrado una producción agro-alimentaria autosuficiente, así como la consolidación de la integración entre los Estados La PAC no ha estado entonces exenta de efectos negativos. Incluso en el plano interno esta política ocasiona repercusiones sociales críticas y ciertas consecuencias dramáticas sobre el medio ambiente. Por lo demás, una de las principales críticas a la PAC son los crecientes gastos que genera al presupuesto general de la UE, cuya pobla ción agrícola 116 Moussin N, Acces á L' Unión Européenne. Droit éconornie, politiques, Editorial Euro, París, 1996, p. 454. 117 CCE, Budget general de L'Union Européenne pour 1'excercice 1996: synthese chifrée, Office de Publications Officielles des Communautés Européennes, Bruxelles, 1996. 118 Fumey G, op. cit. 119 Schmieg E, "Cohérence betwen Development Policy and Agricultural Policy" en Intereconomies, January-February, 1997 p. 33-40. 35 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … representa menos del 10% del total de la población activa. Tal situación ha llevado en consecuencia a la UE a revisar su política agrícola. En 1992 el Consejo adoptó oficialmente una reforma de la PAC basada en tres objetivos principales: 1) la gestión de la producción por medio de una reducción de precios -de cereales y carne bovina principalmente- y una detención de cultivos con el fin de recuperar la fertilidad del suelo, 2) el mantenimiento de un ingreso compensatorio para los agricultores y el fomento de la ganadería extensiva de calidad y 3) el apoyo a la población agrícola respetando y valorando el medio ambiente. Sobre el plano internacional, el sostenimiento de la producción y el intercambio de los productos agrícolas europeos fueron, por primera vez, abordados en las negociaciones comerciales multilaterales de la Ronda Uruguay Con la firma del acuerdo de Marrakech en mayo de 1994, la UE se comprometió a reducir progresivamente el apoyo interno de precios en un 20%, la protección a la frontera en un 36% en promedio y el volumen de las exportaciones subvencionadas en un 21%, así como los apoyos financieros en un 36%. La UE también adoptó el compromiso de importar menos del 5% de su consumo en un plazo de seis años y de mantener los ajustes a la importación existentes para favorecer a los países abastecedores. No obstante, en la práctica las restricciones tarifarias para los productos agrícolas no han sido cambiadas completamente, mientras que los compromisos relativos a la exportación no son aplicados, por una parte. Por la otra, aunque la reforma de 1992 ha representado sacrificios importantes, la UE ha sido incapaz de valorizar en el plano externo las decisiones adoptadas en el marco de la reforma de la PAC. Incluso si mecánicamente dichas decisiones han favorecido la disminución de la presencia de productos agrícolas europeos en los mercados mundiales. 120 Sobre este telón de fondo son comprensibles las seis querellas relacionadas con productos agrícolas que algunos países latinoamericanos han presentado ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) en contra de la UE. 121 Pero a diferencia de otras regiones en desarrollo que son afectadas por el régimen europeo de exportaciones agrícolas,122 es el régimen de protección a las importaciones de la PAC con sus sistemas de precios el que perjudica principalmente a América Latina. Aunque, en relación con otros países del mundo en desarrollo, los países latinoamericanos mantienen cierta diversidad en sus exportaciones, los productos agrícolas no dejan de ser una proporción importante en los intercambios internacionales del subcontinente. Estos productos están efectivamente en el primer lugar de las exportaciones de materias primas, representando 25.9% de los ingresos de 120 David F, Les échanges comerciaux dans la nouvelle économie mondiale, PUF, Paris, 1994, p. 161. 121 Focus Bulletin d’Information de I'OMC No. 21 aout 1997, p. 2 et 3. 122 Véase al respecto Jadot y et al, Les contradictions des politiques européennes á 1'égard des pays en developpe ment , Solagral, Paris, 1996. Este trabajo analiza principalmente los efectos negativos de la exportación de los excedentes agrícolas europeos en el desarrollo de algunos países africanos, pero también incluye un estudio sobre Bolivia. 36 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … las exportaciones latinoamericanas.123 De hecho, ciertos productos, como el jugo de naranja, los camarones, las frutas de zonas templadas o las flores, tienen en América Latina una importancia bastante significativa. Por lo demás la región es la principal productora de café y bananos y uno de los más importantes proveedores mundiales de azúcar, soya, aceite de soya, carne bovina, trigo y maíz. 124 Considerando pues este perfil de especialización internacional, el subcontinente se ve efectivamente influenciado por la PAC. En concreto los países latinoamericanos se encuentran en competencia directa con algunos países europeos (España, Portugal, Italia, Francia, Grecia) y con los países asociados reunidos en la Convención de Lomé IV, en lo que se refiere a productos agrícolas. Particularmente el azúcar, la carne bovina y el banano proveniente de los países ACP continúan vendiéndose en la UE con los mismos precios garantizados que son otorgados a los agricultores europeos. 125 La situación se hace más problemática al considerar que, por una parte, la UE preconiza en los foros internacionales la liberalización interna y externa de la economía, mientras que, por la otra, ella mantiene un mercado agrícola desleal a la luz de las reglas del "libre juego del mercado". Una incoherencia que afecta por supuesto la credibilidad de las acciones exteriores europeas frente a los países latinoamericanos. Desde esta perspectiva las relaciones con los países de Mercosur son significativas. El Mercosur, que ha firmado acuerdos- marco con Chile cuya integración al Tratado de Libre Comercio norteamericano se ha dilatado- y Bolivia - país clave para ganar el Pacífico- , representa el principal objetivo estratégico y económico de la UE en América Latina. Los países de este grupo regio nal representan la mitad de los intercambios comerciales de la UE con todo el subcontinente. Paralelamente a la liberalización comercial, la estabilización macroeconómica y al impulso del crecimiento en los cuatro países del Cono Sur latinoamericano, la UE incrementó fuertemente sus exportaciones en la región. ¡Mientras tanto, las exportaciones de Mercosur aún encuentran serios obstáculos para ingresar al mercado comunitario. De hecho, el grupo latinoamericano está en déficit comercial con la Unión Europea. Hoy alrededor del 60% de las exportaciones del Mercosur hacia los países comunitarios se concentra en productos agroalimentarios. Entre ellos la carne, el trigo y las frutas, teniendo un peso importante en las exportaciones totales de la región, son limitados por barreras no tarifarias originadas en la PAC. 126 123 ALADI, "Apreciación general de los resultados de la Ronda Uruguay y su impacto en la integra ción regional" en Integración Latinoamericana #201 junio de 1994, p. 43. 124 Benavente J. M, "Rasgos distintivos de las economías latinoamericanas y sus sectores primarios" en Revista de la Cepal No. 45, diciembre de 1991, p. 43 y 44. 125 La convención de Lomé desaparecerá el próximo año, sin embargo, inicialmente los cambios en cuanto a las preferencias comerciales al parecer no serán muy radicales, según se desprende de las declaraciones de Joao de Deus Pinheiro, comisario europeo encargado del grupo ACP, quien sostiene: "El futuro acuerdo para el período 2000- 2005, conservará esencialmente las particularidades de la convención actual, con ciertas mejoras". Cfr Le Monde Diplomatique, juin 1998, p. 7. 126 Castilho M, Quenan C, "Le projet d'une zone de libre echange entre le .Mercosur et 1'Unión Europpéenne; quelles perspectives?" en: Annales d'Amérique Latine et des Caraibes, No. 14-15, Institut d'Etudes Politiques d'Aix-en-Provence-CREALC, 1997. 37 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … En este sentido el dinamismo agrícola del grupo latinoamericano explica el hecho de que algunos Estados miembros, algunos representantes comunitarios e importantes grupos de presión hayan buscado excluir el sector agrícola del acuerdo- marco de crear una zona de libre comercio entre el Mercosur y la UE. De allí las declaraciones de Manuel Marín, vicepresidente de la Comisión Europea, en procura de reducir las tensiones en el interior de la UE: "Las negociaciones deberán respetar la cuestión agrícola, que es el principal tema de inquietud de los países europeos". No obstante, y a pesar de que reconocen el obstáculo que representa el sector agrícola, los responsables europeos minimizan su alcance cuando señalan que las tarifas de aduana son bajas y que las importaciones de productos agrícolas sensibles representan apenas el 14% del comercio total entre los dos mercados. Las principales trabas a las exportaciones de Mercosur con destino al mercado europeo no son únicamente las medidas tarifarias sino también los mecanismos internos de apoyo a la agricultura comunitaria.127 Las relaciones entre la PAC y la región latinoamericana están inscritas entonces en el marco de las acciones exteriores europeas. De esta forma la UE oscila entre la voluntad por preservar la PAC y la necesidad de abandonar su especifidad agrícola en provecho de nueva áreas geopolíticas y económicas más vastas. banano es producido en varios países latinoame ricanos, sin embargo, en América Central la comercialización de este produc to representa un poco menos de un tercio del total de exportaciones y alrededor del 12% del PNB regional. Honduras y Guatemala obtienen un cuarto de sus cifras de exportaciones de la venta de banano, mientras que para Costa Rica y Panamá el porcentaje es menos elevado, pero también significativo. Un millón de personas, es decir aproximadamente el 3.5% de la población regional, trabajan en los cultivos centroamericanos de banano. 128 Sin embargo, las exportaciones y los empleos de la economía bananera se ven seriamente afectados a partir de 1993 como consecuencia de la Organización Común del Mercado del Banano. Este mercado, sustentado en la lógica y los instrumentos de la PAC, limitaba entonces de manera general las importaciones de banano latinoamericano con un derecho de aduana del 20%. Más adelante, en marzo de 1994, se llegó a un acuerdo con los productores que permitió aumentar las cuotas de importación de bananos latinoamericanos. Sin embargo, la medida no fue satisfactoria v en 1995 Guatemala, Honduras y México junto con los Estados Unidos (en 1997 se les uniría Ecuador), expresaron su inconformidad ante la OMC en contra del régimen aplicado a la importación, la venta v distribución de bananos en la Unión Europea. A comienzos del año en curso la OMC condenó y juzgó discriminatorio el régimen europeo a la importación de bananos. No obstante la UE continúa favoreciendo a los productores europeos de las Islas Canarias y las Antillas francesas así como aque llos del grupo ACP, en detrimento de América Latina que En lo que se refiere a los países centroamericanos, principales beneficiarios de la ayuda financiera y técnica, con sus objetivos de favorecer el sector rural y la integración, el desenvolvimiento de la denominada "guerra del banano" es ilustrativo. El 127 Buxedas M, "Mercosur-UE. Ne pas exclure 1'agriculture” en: Courier de la Planete No. 32 janvier-février 1996, p. 33. 128 Cfr. Développement et coopérations, No. 3, 1992, p. 6. 38 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … produce bananos a más bajo precio y de amplia aceptación por los consumidores alemanes e ingleses. luego, en el campo de las relaciones internacionales no supone ninguna novedad resaltar las influencias y tensiones entre una política con vocación al exterior y otra con orientación al interior. Pero lo significativo en el caso de la Unión Europea surge de la naturaleza de su régimen político. La articulación entre "lo interno" y "lo externo" -a pesar del aparente poco sentido que estas nociones puedan tener actualmenteno es la misma en un Estado Federal que en un régimen internacional. Y mucho menos en un régimen que no es ni lo uno ni lo otro, como es el caso particular de la Unión Europea. En este sentido, a partir del caso latinoamericano, se pueden precisar dos ejes problemáticos en la formulación de la Política Agrícola Común y la Política Europea de Cooperación. Sobre esta situación Bruselas argumenta constantemente las paupérrimas condiciones de trabajo que persisten en las zonas bananeras latinoamericanas bajo el control de firmas estadounidenses. Sin embargo, para los latinoamericanos resulta paradójico que la UE condicione sus bananos con normas sociales y ambientales, mientras que las exportaciones de África occidental, cuyas prácticas impiden a los trabajadores organizarse además de degradar el medio ambiente, no tengan ningún problema de acceso al mercado único y, por el contrario, sean subvencionadas a través de desembolsos comunitarios. La "guerra del banano" ejemplifica, pues, el debate dentro de la UE entre las presiones por una liberalización acelerada de los intercambios comerciales y la invención de condicionalidades sociales y/o ambientales a la importación. De la misma forma que la exigencia europea a los países latinoamericanos de respeto a los derechos humanos y los principios democráticos, como condición de acceso al mercado común, frente a la elasticidad del mismo tema en el caso de los países asiáticos. En primer lugar está el conflicto de intereses. Los objetivos de la PAC están esencialmente dirigidos a la consolidación de la integración europea, es decir, del mercado único. Mientras que los objetivos de la PEC conciernen, por un lado, los intereses hacia el desarrollo económico y social de los países latinoamericanos, es decir, la cooperación técnica y financiera, por el otro, la dinámica del comercio mundial, o sea, los intereses mutuos de latinoamericanos y europeos que promueve la cooperación económica. Es cierto que tal y como son definidos en los tratados de la Unión Europea (Roma y Maastricht) los objetivos de estas dos políticas no están per sé en conflicto. En CONCLUSIONES El enfoque analítico que hemos adoptado, describir comparativamente la Política Europea de Cooperación y la Política Agrícola Común, aunque sencillo, permite distinguir las confluencias y contradicciones entre estas dos políticas europeas. Desde OBJETIVOS E INSTRUMENTOS DE LA POLÍTICA AGRÍCOLA COMÚN Y DE LA POLÍTICA EUROPEA DE COOPERACIÓN HACIA AMÉRICA LATINA Política Agrícola Común Política Europea de Cooperación 39 INTERNACIONALES Campo de acción LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … Mercado Común América Central y América del Sur Y economía mundial • Aumento de la • Desarrollo económico v social durable productividad • Inserción armoniosa en la economía agrícola mundial • Aseguramiento del nivel Objetivos • Lucha contra la pobreza de vida de la población • Consolidación de la democracia v el Estado agrícola • Estabilidad de los de derecho mercados Cooperación al desarrollo Cooperación • FEOGA económica: (más de la mitad del • Ayuda financiera y • Acuerdos presupuesto regionales y comunitario) Instrumentos • Inversiones: • Preferencias técnica: (sometida al (ECIP; BEI comunitarias ALINVEST) • Política socio-estructural bilaterales presupuesto que incluye • Sistema General de sólo en el peso financiero asigfleja no el mismo sentido los campos de nado a cada política en el presupuesto acción de las dos políticas son a priori comunitario sino sobre todo en el rol diferentes. Sin embargo, en la práctica que juegan los grupos de presión y los los instrumentos de la PAC están Estados miembros en el momento de frecuentemente en contradicción con debatir cada política. Evidentemente, en los objetivos de la PEC de fomentar a presencia de dos intereses legítimos, los largo plazo la participación de los unos internos y los otros externos, la países latinoamericanos en la confrontación se resuelve en favor de economía mundial en general, y en el los primeros. Por lo demás el sistema mercado europeo en particular, por decisional de la UE es otro elemento una parte. Por la otra, las estructural a considerar, puesto que consecuencias de la PAC también diversos actores institucionales alcanzan los objetivos de la cooperaparticipan de una u otra forma en la ción al desarrollo, particularmente en formulación de la dos políticas. La sus propósitos de favorecer el sector Comisión Europea, que ejecuta y está rural y la actividad agrícola de los paífacultada para proponer, el Parlamento ses latinoamericanos. Por el contrario, Europeo, que participa tanto en las acla realización de la PEC en América tividades legislativas y presupuestarias Latina no ejerce la misma presión socomo en las iniciativas de política exbre los objetivos de la PAC, a pesar de terior, y el Consejo de Ministros, que que los objetivos comunitarios de representa los intereses de los Estados cooperación, que son determinantes en miembros. La influencia ejercida por la consolidación de la UE como polo cada una de estas instituciones varía en mundial, están íntimamente relacionafunción de los procedimientos en vigor dos con la problemática agrícola euroy de las coyunturas políticas y sociales. pea. Resulta claro que una evaluación del rol de cada una de las instituciones El segundo eje problemático es de comunitarias y el papel que juegan otros carácter estructural. La relación de actores en la elaboración de la PAC y la fuerzas entre la PAC y la PEC es amPEC, en sus vínculos con América pliamente desequilibrado, lo cual se reLatina, requiere estudios de largo 40 INTERNACIONALES LAS CONTRADICCIONES DE LAS POLÍTICAS EUROPEAS … aliento analítico y empírico. Nosotros nos limitamos a afirmar, con base en nuestra exposición, que el fortalecimiento de relaciones y acuerdos son necesarios pero no suficientes para potencializar las oportunidades estratégicas que la UE, en su rivalidad política y comercial con los Estados Unidos, percibe en el subcontinente latinoamericano. Sobre todo cuando América Latina ha comprendido que nunca es bueno colocar todos los huevos en el mismo canasto. 41 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS Y CULTIVOS ILÍCITOS EN COLOMBIA LA FUNESTA RUTINIZACIÓN DE UNA ESTRATEGIA DESACERTADA mente lucrativo en manos de grupos (mafias, criminalidad orga nizada, etc.) de la sociedad. 3. Se asume que un tratamiento fuertemente coercitivo en los centros de provisión de drogas es más efectivo tanto en términos de resultados (metas, logros, etc.) como de recursos (asistencia, presupuesto, etc.); lo cual implica que en el balance costo-beneficio se percibe como más ventajoso, al menos para Washington, la concentración de los esfuerzos antinarcóticos en los polos de oferta. 4. Se asume que los efectos de una mayor y mejor erradicación de cultivos ilícitos, como uno de los pilares esenciales de la lucha antidrogas en los epicentros de oferta, serán de tres tipos para los países donde se produce la demanda de drogas ilegales: menor disponibilidad de sustancias psicoactivas, mayor precio de las mismas para los que usan drogas y menos potencial de pureza de aquellas; todo lo cual reduciría el consumo de narcóticos. (Como consecuencia de este triple efecto, se supone, a su vez, que la criminalidad urbana ligada al asunto de las drogas descenderá). 5. Se asume que los efectos de una mayor y mejor erradicación de cultivos ilícitos para los países donde se produce la oferta de drogas ilegales serán varios: entre otros, reducir el precio del cultivo ilícito en las zonas de producción, disminuir el poder de los traficantes, contener la violencia generada por el narcotráfico sobre los sectores más vulnerables de la población ligados a esos cultivos, y evitar la mayor degradación ambiental generada por los plantíos ilegales en áreas frágiles y valiosas. Juan Gabriel Tokatlian* Sobre qué base se apoya la política antidrogas de Estados Unidos es la pregunta fundamental desde la que aquí se pretende abordar el tema de las drogas. La fumigación con herbicidas responde, al menos conceptualmente, a una racionalidad apoyada en cinco presupuestos: 1. Se asume un vínculo entre la demanda y la oferta en la exis tencia y expansión del fenómeno de las drogas ilícitas en el que, implícitamente, se rechaza la noción de que la demanda genera la oferta y que, por lo tanto, es necesario colocar el acento de la represión en los polos de cultivo, produc ción, procesamiento, transporte y tráfico de narcóticos más que en los epicentros de consumo de sus tancias psicoactivas y de realización de mayores ganancias de la empresa transnacional ilegal de los narcóticos. 2. Se asume que las estrategias punitivas diseñadas y aplicadas por los Estados, tanto donde se manifiesta la demanda como donde se desarrolla la oferta, son pertinentes para atacar el fenómeno de las drogas ilícitas a pesar de que, de hecho, éste surge, evoluciona y crece en el ámbito no estatal como expresión mercantil de un negocio ilegal alta* Sociólogo e internacionalista, investigador del Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Colombia. En ese sentido, resulta fundamental efectuar un recorrido histórico sobre la 42 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … política de fumigación impuesta por Estados Unidos sobre Colombia como parte de la narcodiplomacia entre los dos países. EL EMPUJE INICIAL gobierno del presidente Julio César Turbay Ayala (1978-1982), Washington comenzó a presionar en forma reiterada para que Bogotá utilizara químicos en la erradicación de los cultivos de marihuana, particularmente en la Guajira 131 . FUMIGADOR Ya en 1978, Colombia se había convertido en el primer productor y exportador de marihuana a Estados Unidos. De las aproximadamente 10.000 toneladas de marihuana introducidas a ese país, entre el 60% y el 65% provenía de los traficantes colombianos. Para la época se calculaba que en Colombia había 25.000 a 50.000 hectáreas cultivadas de marihuana 132 . Sin duda, la fumigación ha sido uno de los temas más controvertidos en la lucha por la erradicación de cultivos ilícitos en Colombia 129 . La toxicidad de los herbicidas utilizados y la importancia que adquirió en la estrategia internacional de Estados Unidos contra las drogas, hicieron de éste un tema esencialmente polémico 130 . Durante el 129 Los problemas ecológicos y, los efectos negativos sobre los derechos humanos derivados de la fumigación química de cultivos ilícitos en Latinoamérica en general se analizan en Rosa del Olmo, "Herbicidas y derechos humanos en América Latina", en Rosa del Olmo, ¿Prohibir o domesticar? Políticas de drogas en América Latina, Editorial Nueva Sociedad, Caracas, 1992. 130 Durante la administración del presidente Jimmy Carter (1976-1980), dos piezas claves de la política internacional antinarcóticos de Estados Unidos eran la interdicción y la erradicación. El freno al contrabando de drogas tenía la dimensión de problema fronterizo: evitar su ingreso a territorio estadounidense y comprometer a los países productores y a aquellos utilizados como punto de tránsito en la tarea de mejorar los sistemas de control y represión de la salida de narcóticos. Desde los setenta, el esfuerzo por erradicar manualmente las plantaciones de marihuana ya no era percibido en Washington como suficiente y positivo. La Casa Blanca y el Congreso comenzaron a coincidir en la necesidad de utilizar herbicidas para terminar con los cultivos tanto de marihuana (en particular en Colombia) como de opio (en particular en Turquía). En Latinoamérica, la erradicación con herbicidas se dio en México y en Jamaica. A mediados de los años setenta, la "Operación Cóndor" en México, buscó la destrucción de las plantaciones de marihuana y fue presentada como un éxito resonante en la lucha contra las drogas. Los resultados iniciales parecieron muy alentadores: se redujo el área cultivada, disminuyeron las exportaciones de marihuana a Estados Unidos y se interrumpieron temporalmente los canales de acceso a ese mercado. A finales de la década, la Todo parece indicar que Washington le propuso al gobierno de Turbay la idea proporción de la oferta de marihuana mexicana a Estados Unidos se había disminuido al 10% (aunque a mediados de los ochenta volvió a representar el 35%). Un factor que ayudó a la caída de las importaciones de marihuana mexicana hacia Estados Unidos fue el rechazo del consumidor estadounidense por la marihuana rociada con paraquat y el ascenso de la producción marihuanera en Estados Unidos con una variedad más potente y menos peligrosa. La "exitosa" experiencia mexicana (y la de la "Operación Bucanero" en Jamaica) motivó a Estados Unidos a persuadir a Colombia para seguir la misma táctica para acabar con la producción nacional de marihuana. 131 Sobre las relaciones entre Estados Unidos y Colombia en materia de drogas ilícitas durante la administración del presidente Turbay véase Juan Gabriel Tokatlian, "La política exterior de Colombia hacia Estados Unidos, 1978-1990: El asunto de las drogas y su lugar en las relaciones entre Bogotá y Washington", en Carlos G. Arrieta, Luis J. Orjuela, Eduardo Sarmiento y Juan G. Tokatlian, Narcotráfico en Colombia: Dimensiones políticas, económicas, jurídicas e internacionales, Ediciones UNIANDES/Tercer Mundo Editores, Bogotá, 1990. 132 Véanse U.S. Congress, Select Committee on Narcotics Abuse and Control, Fact Finding Mission to Colombia and Puerto Rico, U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1979 y Asociación Nacional de Instituciones Financieras, Marihuana: Legalización o represión, Biblioteca ANIF, Bogotá, 1979. 43 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … de emprender un programa de erradicación con herbicidas en Colombia, pero éste prefirió lanzar una ofensiva militar contra la producción y el contrabando de marihuana me diante el despliegue de la "Operación Fulminante" contra el negocio de los narcóticos en la Guajira. Así, a partir de octubre (cuando se anuncia) y noviembre (cuando se comienza) de 1978, y mediante el decreto 2144, aproximadamente 10.000 soldados de la Segunda Brigada son destinados a un gran operativo con el fin de acabar con la producción y el tráfico de marihuana en la costa atlántica colombiana. colombiano con un plan para erradicar químicamente la marihuana fueron más sutiles. Por su parte, el Procurador General de la Nación, Guillermo González Charry, viajó a México en junio de 1979 con el fin de conocer los resultados de las tareas de erradicación de cultivos de marihuana con paraquat en ese país 133 . El presidente Turbay se mostró renuente a comenzar un programa de fumigación con herbicidas por la controversia internacional alrededor del paraquat y por las preocupaciones ecológicas internas 134 . De alguna manera, Bogotá buscó una salida técnica para evitar un problema político con Washington. En efecto, luego del viaje del Procurador a México, el gobierno reunió una comisión de científicos para estudiar y evaluar la utilización de fumigación con herbicidas para atacar la produc ción de marihuana. Esta comisión se opuso a la erradicación con químicos. De allí la decisión pasó al Consejo Nacional de Estupefacientes (CNE) creado por el Decreto 1188 de 1974. La amplia composición del CNE y su papel relativamente importante en el proceso de adopción de decisiones en materia de drogas ilícitas, le otorgaban una voz singularmente rele vante en ciertos aspectos de la política antinarcóticos. Siguiendo las conclusiones presentadas Con esta "Operación" no se cuestionaba el ánimo de colaboración con Washington en la lucha antinarcóticos ya que se adoptaba un mecanismo aún más contundente que la erradicación química: se comprometía a los militares en el combate contra la marihuana. Se transaba la erradicación, que no contaba con mucho respaldo de algunos sectores del Estado y de la opinión pública, por la militarización, que al menos gozaba de cierto consenso en el Ejecutivo colombiano. El debate suscitado en el seno de la sociedad estadounidense por el uso del paraquat y la polémica en torno al costo de su utilización, contribuyeron a que Washington aceptara, transitoriamente, la táctica escogida por Bogotá. Finalmente, hacia 1979-1980 aún estaba en vigencia la Enmienda Percy que prohibía el uso de recursos federales para aplicar en el extranjero herbicidas prohibidos domésticamente. 133 Al mismo tiempo, en abril de 1979, visitaban el país seis congresistas estadounidenses tres de ellos del Comité de Abuso y Control de Narcóticos. Según el informe producido por los legisla dores, sus conversaciones con el mandatario colombiano acerca de la erradicación química no avanzaron positivamente. 134 No obstante, a pesar de esta posición del Ejecutivo nacional, en sus recomendaciones los miembros del Legislativo estadounidense insistieron en que debía desarrolla rse un "programa efectivo de erradicación" (lo cual suponía claramente el uso de productos químicos) en territorio colombiano. Véase, U.S. Congress, Select Committee on Narcotics Abuse and Control, Fact... op. cit., p. 10. Sin embargo, ni en el Ejecutivo ni en algunos sectores del Legislativo de Estados Unidos se abandonó la exigencia de medidas más drásticas para destruir la marihuana, como es la erradicación con defoliantes. En me dio de la "Operación Fulminante", los gestos para comprometer al gobierno 44 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … por los expertos, el Consejo determinó no aplicar el procedimiento de erradicación de cultivos con herbicidas, aunque se habían efectuado ensayos experimentales con paraquat en la Sierra Nevada de Santa Marta con participación del Ejército 135 . complejidad que adquirió años después, la Embajada de Estados Unidos en Colombia no operaba proconsularmente y Colombia era percibida en medio de la Guerra Fría como una aliada firme de Washington por su postura fuertemente anticomunista. En resumen, el gobierno colombiano se rehusaba a poner en marcha un programa masivo de erradicación con paraquat, pese a la insistencia de la administración del presidente Carter. Aunque en 1981 el Legislativo estadounidense derogó la Enmienda Percy y las presiones del gobierno del presidente Ronald Reagan (1980-1988) en materia de fumigación química aumentaron, Colombia no cambió su conduc ta. El Ejecutivo colombiano tenía muchos elementos a su favor para probar su "mano dura" contra las drogas y demostrar su estrecha colaboración con Washington en va rios aspectos de la lucha antinarcóticos: para 1981 ya se habían firmado con Estados Unidos los Tratados de Extradición (1979) y de Asistencia Legal Mutua (1980). EL MOMENTO FUMIGACIÓN DE LA Desde el inicio del cuatrienio del presidente Belisario Betancur Cuartas (19821986), el Ejecutivo estadounidense volvió a reiterar su tesis sobre la erradicación con químicos y comenzó a presionar a Colombia para su utilización136 . Simultáneamente, en agosto de 1983, una misión de congresistas estadounidenses estuvo en el país e intentó persuadir al mandatario conservador de promover y llevar adelante la fumigación de la producción de marihuana, lo cual fue rechazado 137 . El argumento de Betancur no difirió del que en su mome nto expresó Tur bay. Sin embargo, el gobierno conservador modificó su posición en 1984. Sin duda, el asesinato del ministro de Justicia, Rodrigo Lara Bonilla, fue el motivo subyacente para producir tal viraje, viraje que incluyó la aplicación de la extradición de nacionales a Estados Unidos y una mayor militarización de la lucha antidrogas en Colombia 138 . A su vez, Colombia poseía y usaba argumentos científico-técnicos para rechazar la alternativa de la erradicación. Por el momento se dejaba de lado esta táctica en la estrategia contra las drogas, sin que ello agrietara sensiblemente las relaciones entre Bogotá y Washington. 136 Sobre las relaciones entre Estados Unidos y Colombia en materia de drogas ilícitas durante la administración del presidente Betancur véase Juan Gabriel Tokatlian, op. cit. 137 Véase U.S. Congress, Select Committee on Narcotics Abuse and Control, International Narcotics Control Study Mission U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1984. Finalmente, a comienzos de los ochenta, Bogotá aún poseía cierto margen de maniobra en algunos aspectos de la lucha contra las drogas. La imagen externa del país aún no estaba totalmente narcotizada, el fenómeno de las drogas ilícitas en el plano mundial no tenía ni la dimensión ni la 138 En lo referente a la fumigación, la decisión generó bastante controversia, desatando disputas interburocráticas que ampliaron el espacio de debate público. A pesar de ello, no se logró alterar la decisión de fumigar tomada por la administración. Las escasas manifestaciones no gubernamentales contrarias a la erradicación 135 Ministerio Público, Informe del Procurador General de la Nación, Guillermo González Charry, al Congreso Nacional, Procuraduría General de la Nación, Bogotá, 1980, p. 30-33. 45 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … Con los decretos de estado de sitio posteriores al crimen de Lara se consideró la pertinencia de que las reunio nes y decisiones del Consejo Nacional de Estupefacientes tuvieran un carácter confidencial. Durante los primeros días de mayo de 1984 se discutió en el CNE la posib le aplicación del paraquat en la fumigación de cultivos de marihuana, en especial aquellos ubicados en la costa atlántica colombiana. El 14 de mayo, el Consejo Nacional de Estupefacientes aprobó la realización de tareas de erradicación, pero dejó en el Consejo de Ministros la decisión acerca de la aplicación de productos químicos. El 22 de mayo, el Consejo de Ministros aprobó la erradicación con herbicidas. glifosato, pues ello implicaba que la erradicación química se imponía independiente del producto seleccionado para rociar los cultivos ilícitos. En esencia, se adoptaba la sugerencia estadounidense de erradicar, pero se contemplaba una opción colombiana de fumigación vía otro defoliante; el cual, presuntamente, causaba menos daño. Los relativamente bajos costos internos resultaban opacados debido al apoyo y la felicitación que recibía la administració n por parte del Ejecutivo y del Legislativo estadounidenses. Este tercer componente - fumigación, más extradición y militarización- de la nueva ofensiva colombiana contra las drogas motivó un gran respaldo de las autoridades en Washington y ge neró promesas de mayor asistencia. Para evitar las polémicas que había generado la eventual utilización del paraquat, se optó por el glifosato para iniciar la fumigación de la producción de marihuana. Es decir, se dio luz verde a esta medida pero se le otorgó un carácter supuestamente autónomo a la decisión. Washington, por su parte, rápidamente aprobó la escogencia del Para finales de 1984, según fuentes estadounidenses, se habían erradicado 3.400 hectáreas de cultivos de marihuana (según estadísticas colombia nas, el total erradicado llegaba a 3.171 hectáreas), y para 1985, la erradicación alcanzaba 6.000 hectáreas (2.375 hectáreas según datos nacionales). La cobertura de fumigación con herbicidas llegó a 12.000 hectáreas (9.700 hectáreas según fuentes estadounidenses) para 1986. Estas acciones condujeron a que el área de marihuana cultivada se redujera y a que las exportaciones a Estados Unidos descendieran. Colombia parecía seguir la "exitosa" experiencia mexicana. Los comentarios elogiosos de las autoridades en Washington se multiplicaron139 . química no pudieron configurar una coalición socio-política gravitante en esta materia en el país ni lograron desplegar una "diplomacia ciudadana" en el exterior orientada a buscar adherentes, conformar grupos de trabajo y presión o establecer mecanismos para ampliar el debate de opciones en torno a la lucha contra las sustancias psicoactivas ilícitas. El término "diplomacia ciudadana" lo utiliza Cathryn Thorup. Según ella, ese término "es utilizado para referirse a las acciones de los ciudadanos y los grupos no gubernamentales que ellos forman- de un país respecto de terceros países. Imp lica la usurpación de papeles considerados del dominio exclusivo de los actores gubernamentales. En contraste con los grupos domésticos de interés político, que tradicionalmente actúan dentro de un escenario nacional específico, la diplomacia ciudadana se da en la arena exterior o transnacional". Cathryn L. Thorup, “Diplomacia ciudadana, redes y coaliciones transfronterizas en América del Norte: Nuevos diseños organizativos", en Foro Internacional Vol. XXXV, No. 2, Abril-Junio 1995. En 1985, según estimaciones del Departamento de Estado de Estados 139 Véase U.S. Congress, Select Committee on Narcotics Abuse and Control, Latin America Study Missions Concerning International Narcotics Problems, U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1986 46 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … Unidos sólo se habían cultivado en el país 8.000 hectáreas de marihuana. La oferta de este producto colombiano a Estados Unidos -que había alcanzado el 80% del total ingresado a ese país- disminuyó a menos del 25%. Al parecer había indicadores elocuentes que parecían demostrar una verdadera victoria contra la marihuana mediante el uso del glifosato. No obstante, para 1988, Colombia se convirtió nuevamente en el principal exportador de marihuana a Estados Unidos, con una producción cercana a las 8.000 toneladas métricas140 . el país. En diciembre de 1985, se decidió aplicar el herbicida garlon-4 para destruir aproximadamente 1.000 hectáreas de ese cultivo ilícito. Sin embargo, hacia comienzos de 1986, se optó por descontinuar esta práctica. El garlon-4 demostró ser altamente peligroso y perjudicial. Además, la compañía fabricante del herbicida, la Dow Chemical Corporation, se rehusó a proveerlo a Colombia por temer que se demandara su utilización142 . Así entonces, se inició la política de fumigación contra la marihuana y la coca en el país. Al aceptar la exigencia estadounidense para utilizar esta táctica, el gobierno del presidente Betancur aceptaba, de hecho, el argumento de que el "flagelo" de los narcóticos estaba localizado en los polos de producción; lo cual vulneraba la concepción oficial acerca de la naturaleza multilateral y del alcance internacional del asunto de las drogas. De forma paralela, comenzó a reducirse gradualmente, aunque de manera notoria, el margen de maniobra del gobierno colombiano en cuanto a la lucha antinarcóticos. La presión de Washington sobre Bogotá en el frente de las drogas ilícitas fue cada vez más ostensible y difícil de responder mediante estrategias autónomas de respuesta al fenómeno del narcotráfico. De hecho, el éxito colombiano fue pírrico. La fumigación había dado resultados parciales alentadores, pero la producción ya se movía de la costa atlántica al departamento del Cauca, donde el rendimiento por hectárea aumentaba (de 1.1 toneladas métricas por hectárea a 3.5). Se redujeron las dimensiones de los campos cultivados con marihuana pero no su produc ción total, camuflándola con cultivos lícitos 141 . Ahora bien, si la fumigación química de marihuana en Colombia no arrojaba resultados satisfactorios ni permanentes, en la erradicación de los cultivos de coca con herbicidas las conclusiones no fueron más alentadoras. A partir de 1984, y con el apoyo estadounidense, el gobierno colombiano buscó identificar un químico efectivo y no dañino para terminar con la producción de coca en LA FUMIGACIÓN CONTINÚA... En 1986, el gobierno del presidente Virgilio Barco Vargas (1986-1990) hereda una situación más intrincada y preocupante que la de las dos administraciones anteriores en cuanto al 140 Véase U.S. Department of State, Bureau of International Narcotics Matters, International Narcotics Control Strategy Report, U.S. overnment Printing Office, Washington DC-, 1989. 141 La actitud del productor colombiano no fue muy diferente a la del estadounidense. En efecto, luego de la ineficaz Operación Delta 9 de 1985 para erradicar la marihuana en Estados Unidos, la producción se desplazó a pequeñas parcelas, parques nacionales, sótanos privados y cultivos hidropónicos. 142 Véanse U.S. General Accounting Office, Drug Control: U.S.-Supported Efforts in Colombia and Bolivia, U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1988 y Clifford D. May, "US Secretly Grows Coca to Find Way to Destroy Cocaine's Source", The New York Times, 12 de Junio de 1988. 47 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … asunto de las drogas ilegales 143 . Los ingresos al país por concepto del nego cio de la cocaína crecían sin ningún tipo de control, mientras que los narcotraficantes incrementaban sus inversiones rurales y urbanas. Se calculaba que el 80% de la cocaína y el 25% de la marihuana consumida en Estados Unidos eran proveídos por traficantes colombianos y los indicadores de la demanda estadounidense no mostraban un descenso del consumo de drogas 144 . glifosato. Al año siguiente, la labor de erradicación se incrementó de modo notable. En 1986, se fumigaron 12.000 hectáreas de marihuana. En 1987 se erradicaron con glifosato 10.368 hectáreas de marihuana 146 . En 1988, el total del área fumigada no superó las 4.400 hectáreas aproximadamente. La erradicación de hectáreas de coca pasó de 2.000 en 1985 a 760 en 1986, a 460 en 1987 y a 230 en 1988147 . Las causas de esta disminución fueron de diversa índole. Primero, los resultados de diferentes informes técnicos, tanto oficiales como no gubernamentales, indicaban los efectos negativos del uso de herbicidas y mostraban que la disrupción temporal de la producción no significaba, a mediano plazo, el fin del cultivo 148 . Por Socialmente, la penetración del narcotráfico era creciente; lo cual se evidenciaba tanto en los sitios de producción y procesamiento como en los lugares en los que expandieron su inversión y finca raíz. Políticamente, por medio del soborno, la intimidación, el uso directo de la fuerza y la cooptación, la presencia y la proyección del negocio de las drogas se manifestaban en franco ascenso. Además, la violencia generada por este fenómeno se multiplicó después de la aplicación de la extradición en 1984 mediante el narcoterrorismo y se elevó visiblemente a través de sus organizaciones paramilitares, con centros de operación en diferentes regiones del país; pero con particular importancia para la época en el Magdalena Medio 145 . 146 Para el nuevo gobierno liberal era primordial otorgarle mayor intensidad a las acciones antinarcóticos iniciadas en la segunda mitad del mandato conservador. Barco, preocupado por las dimensiones impresionantes que ya tenía el narcotráfico, creía necesario abordar el fenómeno en todos sus aspectos. Se pensó que la erradicación química debía continuar para la marihuana, mientras se impulsaba la erradicación manual de la coca. Aunque las críticas a estos procedimientos eran constantes, no se había conformado una coalición con capacidad de veto para frenar la fumigación con herbicidas de cultivos ilícitos en particular y para cuestionar la totalidad de la lucha contra las drogas ilegales en general. Como se indicó, en mayo de 1984 el Ejecutivo autorizó la fumigación de la producción de marihuana en la zona de la costa atlántica colombiana; en especial en la Sierra Nevada de Santa Marta y la Serranía de Perijá. Entre 1984 y 1985, según datos del gobierno nacional, se habían erradicado 5.446 hectáreas utilizando 11.418 galones de 147 Véase U.S. Department of State, Bureau of International Narcotics Matters, op. cit. 148 Véanse "Erradicación de narcocultivos con medios mecánicos: Minjusticia", El Espectador, 12 de Octubre de 1988; "Los químicos anti-marihuana", El Espectador, 24 de Octubre de 1988. "Cortan, fumigan y queman la marihuana", El Espectador, 25 de Octubre de 1988; y "Terminó la destrucción de cultivos de marihuana en Corinto, Cauca", El Espectador, 8 de Noviembre de 1988. Sobre los estudios en cuanto a la erradicación y sus efectos, véanse Firma Consultora Ecoforest Ltda., "Declaración de efecto ambiental para la erradicación de cultivos ilícitos en zonas de jurisdicción de Corinto", Ministerio de Justicia, Consejo Nacional de Estupefacientes, 143 Sobre las relaciones entre Estados Unidos y Colombia en materia de drogas ilícitas durante la administración del presidente Barco véase Juan Gabriel Tokatlian, op. cit. 144 Véase Bruce M. Bagley, "Colombia and the War on Drugs", en Foreign Affairs, No. l, Vol. 67, 1988. 145 Véase Carlos G. Arrieta et al., op. cit. 48 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … ejemplo, de 8.000 hectáreas cultivadas de marihuana en 1985 se pasó a 13.000 en 1987 149 . por la realización de actividades que colocaban en un mismo escenario a narcotraficantes y soldados, y dificultades para atacar simultáneamente todos los puntos de la red del negocio interno de los narcóticos 150 . Segundo, los reclamos de la pobla ción en las regiones donde se llevaba a cabo la erradicación se multiplicaron, no sólo por las consecuencias ecológicas de la aplicación de herbicidas, sino también por la carencia de programas de sustitución de enverga dura que hicieran frente a la pérdida del cultivo de productos ilícitos que resultaban más rentables. Tercero, en 1988 la estrategia gubernamental para combatir el narcotráfico había variado levemente. El Ejecutivo promovía y respaldaba una mayor participación de las Fuerzas Armadas en la lucha contra las drogas, pero deseaba evitar algunos de los problemas derivados de su anterior compromiso directo en este frente, por ejemplo: reclamos y críticas de campesinos por las tareas emprendidas por los militares a nivel regional, riesgos de mayor soborno y corrupción 150 Las áreas de concentración de la acción estatal antidrogas pasaron a ser laboratorios urbanos y centros de procesamiento rurales; campañas de arresto de bandas de sicarios en ciudades como Medellín; labores de inteligencia militar; e intentos de captura a los líderes reconocidos del narcotráfico. De allí que se redujeran en intensidad y alcance las tareas de erradicación química y manual. En una línea similar de "replanteamiento" del papel funcional de las Fuerzas Armadas en el combate contra los narcóticos para lograr más "efectividad" y menos "tensiones" entre la población civil local y los militares, se escuchaban pronunciamientos en Estados Unidos. De acuerdo con la ley antinarcóticos estadounidense de 1986 y con un Executive Order del presidente Reagan del 5 de mayo de 1987, se debía convocar una comisión que preparara un informe para el primer mandatario en torno a cómo y con qué instrumentos confrontar el fenómeno de las drogas. Se reunieron 127 individuos del sector público y privado, expertos en salud y justicia, congresistas, banqueros, educadores, sindicalistas y deportistas, entre otros. Este grupo, presidido por Lois Haight Herrington, organizó una serie de conferencias que contó con cientos de participantes, evaluó distintas iniciativas y finalmente produjo un informe. Una de sus recomendaciones principales en el área de erradicación y respecto a la política estadounidense frente a los países productores indicaba lo siguiente: "Concentrar los recursos para erradicación en la destrucción de centros de refinación y laboratorios de procesamiento en vez de la destrucción de cultivos ilícitos". Y agregaba: "No apoyar la sustitución de cultivos o programas de reemplazo de cultivos en el exterior con fondos de Estados Unidos". Véase The White House Conference for a Drug Free America, U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1988, p. 134. En esa misma dirección de "reubicar" el rol de las fuerzas armadas en la lucha anti-narcóticos se pronunció David Westrate, director asistente para operaciones de la DEA, en una conferencia organizada en mayo de 1989 por el World Peace Foundation. Véase Gregory F. Traverton, Combating Cocaine in the Supplying Countries: Challenges and Strategies. A Septiembre, 1988; Corporación Autónoma Regional del Cauca, "Diagnóstico preliminar y agenda de tratamiento de emergencia para la erradicación de cultivos ilícitos en zonas de jurisdicción del municipio de Corinto", Informe Técnico No. SRN-GGA-032, Cali, Septiembre 19, 1988; Inderena, "Evaluación de la declaración de efecto ambiental para la erradicación de cultivos ilícitos en zonas de juris dicción de Corinto, Cauca-Fase I", Concepto Técnico 11/88, Ministerio de Agricultura, Bogotá, Septiembre 26, 1988; Ministerio de Justicia, “Erradicación de cultivos en Corinto, Cauca", Comunicado de prensa, Septiembre 29, 1988 y Ministerio de Justicia. "Fumigación cultivos de marihuana - zona de Corinto, Cauca", Acta No. 8 del 25 de Agosto de 1988 y Acta No. 9 del 15 de Septiembre de 1988. 149 La producción masiva de marihuana en la costa atlántica se trasladó al Cauca con un rendimiento mayor. La producción de marihuana para ser fumada se vio acompañada de la de aceite de marihuana y de hachís; lo cual representaba en Estados Unidos un negocio más lucrativo. Así mismo, en el Cauca y el Tolima comenzaron las plantaciones de amapola para la obtención de heroína. 49 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … Cuarto, había un alto grado de frustración de las autoridades nacionales respecto a los resultados efectivos de la política de fumigación de marihuana. Estados Unidos seguía siendo el mayor consumidor de marihuana colombiana y los traficantes continuaban diseñando nuevos mecanismos para sacar su contrabando de narcóticos hacia el exterior. Hubo logros importantes desde 1986 pero indudablemente el fenómeno persistía, al punto de que en 1988 Colombia fue, otra vez, el mayor productor de marihuana (seguido de México y Estados Unidos). Por todo lo anterior, Bogotá matizó su política de erradicación química. Sin abandonarla le dio una dimensión distinta: fumigó pero menos. Como la política de erradicación y fumigación manual y aérea no ofreció resultados tangibles, en 1990 su lugar en la estrategia colombiana antidrogas perdió centralidad. El acento real de la "guerra contra las drogas" se ubicó entonces en el campo militar y en la aplicación de la extradición por vía administrativa. ilícitas; con lo cual pudo amortiguar ciertas exigencias de Estados Unidos en esta materia. OTRA FUMIGACIÓN IMPOTENTE La administración del presidente César Gaviria Trujillo (1990-1994) he redó pobres resultados de la política de erradicación151 . Fumigación experimental durante el gobierno del presidente Turbay, fumigación masiva durante el mandato del presidente Betancur y fumigación discontinua durante la gestión del presidente Barco. Todas igualmente ineficaces, torpes y deplorables. El país había ensayado el paraquat y el glifosato para detener el avance de los cultivos de marihuana y el garlon-4 para frenar las plantaciones de coca. Mercancías ilícitas diferentes, herbicidas legales distintos, consecuencias prohibicio nistas semejantes: la narco-criminalidad organizada colombiana diversificaba de modo eficiente la producción, el procesamiento y el tráfico de drogas, mientras los gobiernos la combatían con acciones que no afectaban estratégica y seriamente ni el negocio, ilícito ni el poder creciente de los traficantes nacionales. Aunque estos antecedentes no podían pasar inadvertidos para un mandatario que pretendía reorientar la lucha antinarcóticos con el ánimo de ensayar nuevas iniciativas como la política de sometimiento, las experiencias de las administraciones previas no parecieron muy útiles a Gaviria. El gobierno del presidente Barco asumió unos costos internos gigantescos mediante el uso sostenido de la extradición de nacionales a Estados Unidos entre agosto de 1989 y agosto de 1990. Probablemente, ello explique por qué Washington no presionó más al país en términos de una política de erradicación química más vehemente y por qué Bogotá tuvo un margen de maniobra moderadamente mayor para definir algunos aspectos internos de la estrategia antinarcóticos. El reconocimiento internacional -en particular en Europa- del esfuerzo colombiano contra las drogas le dio adicionalmente un espacio relativo de maniobra al gobierno para dar más énfasis a uno u otro instrumento punitivo en el combate contra las sus tancias psicoactivas 151 Sobre las relaciones entre Estados Unidos y Colombia en materia de drogas ilícitas durante la administración del presidente Gaviria véase Juan Gabriel Tokatlian, "Política pública internacional contra las drogas de la administración Gaviria y las relaciones entre Colombia y Estados Unidos", en Varios Autores, Drogas ilícitas en Colombia: Su impacto económico, político y social, Santafé de PNUD/DNE/Editorial Ariel, Bogotá, 1997. Conference Report, World Peace Foundation, Boston, Julio 1989. 50 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … En efecto, repitió la táctica de la fumigación química, pero esta vez con respecto a la amapola 152 . En términos prácticos, en los últimos meses de la administración Barco se había dejado de fumigar con químicos ya que desde 1989 el acento de la represión fue colocado en otros terrenos: en especial en la aplicación de la extradición por vía administrativa. En aquel momento, el asunto de la erradicación con herbicidas no parecía incidir de modo significativo en las relaciones entre Bogotá y Washington. En realidad, la erradicación manual de coca continuaba. Ello, sumado a la disminución de las hectáreas dedicadas al cultivo de marihuana, hacía, por el momento, innecesario situar el procedimiento de la fumigación en el centro de la narco-diplomacia entre Estados Unidos y Colombia. No obstante, el descubrimiento de que el país se estaba convirtiendo en un incipiente, aunque importante, punto de plantación de amapola alteró esta situa ción. señalando que, según fuentes oficiales, se habían descubierto 2.000 hectáreas de lo que denominó la "flor maldita"153 . A finales de 1991, el DAS indicó la existencia de 2.500 hectáreas de amapola cultivadas en el país 154 . Sin una explicación acabada o una jus tificación pormenorizada de su aparentemente sorpresivo desarrollo en el país, la Policía Antinarcóticos señaló que durante ese año En efecto, los hallazgos iniciales de cultivo de amapola se produjeron en 1983 en el Departamento del Tolima. En septiembre de 1991, la revista Semana presentó una extensa nota sobre la irrupción de la amapola en el país, El gobierno anunció entonces la erradicación manual de 1.406 hectáreas de amapola, el decomiso de 17 kilos de morfina y 30 kilos de opio y la destrucción de 5 laboratorios de base de morfina en Neiva 156 . se presentó un incremento inusitado de cultivos de amapola a lo largo del macizo colombiano en jurisdicción de los departamentos de Huila, Tolima, Cauca, Boyacá, Cundinamarca, Caquetá, Antioquia, Callos, ,Meta, Nariño, Risaralda y Santander, principalmente155 . Así, entre 1983 y 1991, el cultivo de amapola se había extendido a 12 departamentos. 152 También, como en situaciones anteriores, se reincidió en el debate sobre la fumigación química con un tono de fuerte elitismo moral: por un lado, los "duros-buenos-inteligentes" no contami nados por el narcotráfico y, por el otro, los "blandos-malos-estúpidos" que expresa o inconscientemente le hacían el juego a éste. Probablemente el comentario de un miembro del gabinete del presidente Gaviria resuma bien este último punto. En medio de la relativamente escasa polémica sobre al erradicación química de la amapola, el 21 de febrero de 1992 el ministro de Justicia, Fernando Carrillo, señaló que había "una especie de manto de complicidad que se está tendiendo con argumentos ambientalistas (contra la fumigación con herbicidas), haciéndole el juego a los intereses del narcotráfico". Véase, El Tiempo, 21 de Febrero de 1992 153 Semana, 10 de Septiembre de 1991 Véase, Departamento Administrativo de Seguridad, Dirección, "Aspectos de interés sobre el cultivo de amapola" (mimeo), Santafé de Bogotá, Noviembre de 1991. 155 Policía Antinarcóticos, Policía antinarcóticos. Balance actividades 1992, Policía Santafé de Bogotá, 1992, p. 18. 156 Policía Antinarcóticos, Policía antinarcóticos. Balance actividades 1991, Policía Santafé de Bogotá, 1991, p. 18-20. Cabe mencionar que a partir de mayo de 1991 se comenzó a identificar y decomisar heroína colombiana en Es tados Unidos. Véase Joseph B. Treaster, "Colombia's Drug Lords Sending Heroin to US", The New York Times, 14 de Enero de 1992. 154 51 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … Por lo tanto se esperaba que ha biéndose erradicado el 56% (1.406 de las 2.500 indicadas por el DAS) de las hectáreas descubiertas en 1991, la cuestión de la amapola no adquiriera proporciones preocupantes; al menos si las cifras de las plantaciones existentes eran acertadas y si la destruc ción realizada era de tal magnitud 157 . No obstante, en enero de 1992 el Consejo Nacional de Estupefacientes autorizó la fumigación con glifosato158 . La decisión del CNE el 31 de enero de 1991 en favor de la fumigación manual y por aspersión aérea controlada de los cultivos de amapola mediante el uso de glifosato, se entiende si se miran los siguientes aspectos: En primer lugar, la determinación no pareció obedecer a una presión inusual de Washington sobre Bogotá ni a un condicionamiento ostensible de Estados Unidos sobre Colombia respecto al futuro de la colaboración en materia de drogas psicoactivas. La voluntad gubernamental de emprender la fumigación química de los cultivos de amapola no parece haber sido una concesión a Estados Unidos, no obstante existir razones en Bogotá para querer evitar reacciones negativas de Washington al rechazo de US$ 2,8 millones de dólares en ayuda oficial estadounidense para crear una unidad antidrogas en el Ejército, a semejanza de la ya existente en la policía 161 . Indudablemente, funciona rios de la Drug Enforcement Agency (DEA) y de la Embajada de Estados Unidos en Bogotá promovieron la fumigación de la amapola y se sintie ron complacidos En marzo de 1992, el director de la Policía Antinarcóticos, Brigadier General Rosso José Serrano Cadena, indicó que la producción de amapola podía llegar a las 10.000 hectáreas 159 . Un mes después, informes de prensa basados en afirmaciones de funcionarios gubernamentales, daban cuenta de la posible existencia de 20.000 hectáreas sembradas de amapola 160 . 157 Por ejemplo, México había erradicado en 1989 algo más de un tercio de sus plantíos de amapola y en 1990 algo más del 45% de éstos. En efecto, México destruyó 3.000 hectáreas de las 9.600 hectáreas cultivadas de amapola en 1989 y 4.650 hectáreas de las 10.100 hectáreas cultivadas de amapola en 1990. Véase U.S. Department of State, Bureau of International Narcotics Matters, International Narcotics Control Strategy Report, U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1991. Comparativamente, entonces, el porcentaje erradicado por Colombia era muy alto. 158 Véase Policía Antinarcóticos, El glifosato en la erradicación de cultivos ilícitos, Policía Nacional de Colombia, Santafé de Bogotá, 1992. 159 Esta afirmación la hizo el General Serrano Cadena en un seminario sobre el glifosato organiza do por el Centro de Estudios Internacionales de la Universidad de los Andes. 160 Edgar Torres, "Amapola: Se disparan cifras", El Tiempo, 19 de Abril de 1992. De acuerdo con un cuidadoso estudio auspiciado por la entonces recientemente establecida Consejería para la Defensa y Seguridad Nacional, los plantíos de aproximadamente 20.000 hectáreas de amapola estaban ahora distribuidos en 17 departamentos en 113 localidades del país. Véase Presidencia de la República, Consejería para la Defensa y Seguridad Nacional, "La amapola en Colombia", (mimeo), Santafé de Bogotá, 1992. 161 Véase El Espectador, 28 de Febrero de 1992. Además, Estados unidos no podía exagerar su demanda en favor de la fumigación química por parte de Colombia pues no podía demostrar en el terreno de la destrucción de cultivos de amapola una actitud consistente. No se podía entender ni justificar bien un reclamo inusitado de Washington sobre Bogotá cuando el país no era un productor siquiera medianamente significativo de heroína y cuando de los diez países con mayores plantaciones de este producto ilícito, cinco aplicaban la erradicación aérea (Guatemala. India, México, Pakistán y Tailandia), uno utilizaba sólo erradicación manual (Burma), uno no usaba ningún procedimiento de erradicación (Afganistán), en uno se desconocía si erradicaba o no (Irán) y dos apenas sí lo hacían de manera mínima (Laos y Líbano). Véase, Michael Childress, "A System Description of the Heroin Trade", en RAND Note , 1994, p. 12 52 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … con la medida oficial de llevarla a cabo162 . Ante el crecimiento de la producción de amapola, el gobierno pareció optar por no perder tiempo y aplicar una táctica punitiva en términos de erradicación; ensayando, nue vamente, la ya vieja política de fumigación química. Como en épocas anteriores, surgieron voces críticas al uso de herbicidas. Pero también, como en otros momentos históricos, el gobierno las desestimó, fustigó a los opositores y siguió adelante con su iniciativa de fuerza 164 . En segundo lugar, el uso del g1ifosato parece haber sido una determinación resuelta del gobierno del presidente Gaviria por la sorpresa y la preocupación que despertó en círculos oficiales la dimensión lograda por el fenómeno de la amapola/heroína en el país. A partir de 1992, fue escaso el esfuerzo colocado para erradicar la coca y la marihuana. Por ejemplo, en 1992 se destruye ron 944 hectáreas de coca y 100 hectáreas de marihuana, mientras en 1993 fueron destruidas 846 hectáreas de coca y 138 hectáreas de marihua na163 . el país no era un productor importante, ni en términos de cantidad ni de calidad, de coca, sino que Colo mbia era el escenario principal del procesamiento de cocaína y del tráfico de ésta hacia los mercados consumidores. Por el otro, que Estados Unidos había logrado una muy eficaz sustitución de importaciones mediante el desarrollo de su variedad nacional de marihuana, la sin semilla, y que con ella se abastecía la demanda doméstica en EE.UU., lo cual generaba una caída en el cultivo colombiano de marihuana. Si bien esta interpretaciones eran correctas, sólo lo eran parcialmente. En la década de los noventa, Colombia había concentrado un conjunto de ventajas comparativas y competitivas en el negocio ilícito de los narcóticos que hacía del territorio nacional un espacio privile giado para la producción y procesamiento de distintas sustancias psicoactivas ilegales. El cultivo de coca persistió v se amplió, tanto en cantidad como en calidad. A su vez, las heladas en Estados Unidos que afectaban ocasionalmente las plantaciones de marihuana y el incremento episódico de la represión en el cultivo de marihuana en México, produjeron, en distintos momentos, el resurgir de los cultivos de marihuana colombiana. La infraestructura establecida le permitía a Colombia plantar más coca y marihuana si ello le resulta rentable a la narco-criminalidad organizada en el país. 164 El negocio ilícito de la heroína en los ochenta y noventa parecía seguir un curso similar al de la marihuana en los sesenta y setenta. Para el caso de la marihuana, el "triángulo" de producción hemisférico lo constituían México, Jamaica y Colombia. Se reprimía más en un país, en particular mediante el uso de herbicidas, y el cultivo se movía al otro aunque siempre regresaba al sitio inicial de mayor cultivo. Y así sucesivamente. Un “triángulo" semejante se produjo con la amapola entre México, Guatemala y Colombia. También, en este ejemplo se utilizó la fumigación química para atacar el negocio, con resultados idénticos 162 Así mismo, aquellos contribuyeron a legitimar el uso del glifosato mediante la divulgación de opiniones de científicos de ese país y de estudios como el de la firma LabatAnderson de Arlington, Virginia, realizado para el Departamento de Estado, y en el que se afirmaba la eficacia práctica y la ausencia de toxicidad de ese herbicida en su aplicación en Guatemala. Véase U.S. Department of State, "Estudio conciso del medio ambiente para la erradicación de la ama pola y la marihuana en Guatemala" (mimeo), Washington D.C., 1987. En Colombia, también durante los noventa, se publicaron trabajos de expertos nacionales que indicaban el presunto bajo daño ecológico de la fumigación aérea con glifosato. Al respecto, véase, entre otros, Luis Eduardo Parra Rodríguez, "Impacto ambiental de los cultivos ilícitos en Colombia", en Coloquio, Año 3, No. 3, Marzo 1997. 163 Véase Ministerio de Justicia y del Derecho, Hacia un compromiso global frente al problema de [ti droga, Imprenta Nacional de Colombia, Santafé de Bogotá, 1994, p. 14. Los totales de destrucción de amapola fueron: 12.864 hectáreas en 1992 y 9.821 hectáreas en 1993. Siendo un productor más importante que Colombia en términos de cantidad y calidad de heroína, México erradicó en esos mismo años 11.220 hectáreas y 13.020 hectáreas, respectivamente. Véase Mexican Government, Drug Control in México, National Program 1989119_94: Progress asid Results, Procuraduría General de la República, México D.F., 1994. Lo anterior respondía, en parte, a dos nociones que desde la administración Betancur habían predominado entre los funcionarios y especialistas colombia nos en materia de drogas psicoactivas. Por un lado, que 53 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … Como ha sido evidente en el caso colombiano y en otros ejemplos internacionales, atacar aislada y temporalmente un cultivo ilícito es orientar la política pública antidrogas hacia el eslabón menos decisivo de la enorme y compleja red de la empresa ilegal de las drogas psicoactivas, y situarla en el espacio con mayor impacto social negativo sobre los colonos, el campesinado y la población indígena y con menor incidencia real sobre la narcocriminalidad organizada. Sin embargo, durante 1993 el boom de la amapola siguió expandiéndose. Según un nuevo informe de la Consejería para la Defensa y Seguridad Nacional, el negocio cubría ahora 18 departamentos: La administración Gaviria había decidido enfrentar el fenómeno de las drogas psicoactivas desde una perspectiva distinta (con énfasis en la política de sometimiento) y con una estratagema desagregada del mismo (separando el narcotráfico del narcoterrorismo; para lo cual el Presidente sostuvo que "si bien el narco-terrorismo es nuestro problema, el narcotráfico es un fenómeno internacio nal"). No obstante, en el caso de la amapola repitió lo hecho por gobiernos anteriores en el campo de la coca y la marihuana. Las victorias fueron tan pobres y efímeras como en ocasiones previas. Un comportamiento gubernamental basado sólo en sanciones negativas y carente de incentivos positivos, alimentado por la ilusión de una fumigación técnicamente sana, terminaba por contribuir a un deterioro ambiental y un descalabro social mayor en las áreas de cultivo. en 174 municipios colombianos que representan el 17% del total de municipios del país han sido descubiertos cultivos de amapola. Los municipios productores de amapola se encuentran en los departamentos de Huila (28). Cundinamarca (19), Boyacá (19), Cauca (19), Nariño (18), Santander (12), Tolima (11), Valle (9), Meta (7 ). Antioquia (6), Cesar (5), Norte de Santander (5), Risaralda (4), Caquetá (3), Quindío (3), Caldas (3), Bolívar (2) y. Putumayo (1) 165 . El gobierno no enfrentó al narcoterrorismo ni al narcotráfico en el campo material. En la lógica de la apertura económica de comienzos de los noventa resultaba incongruente imponer más restricciones y mejores controles al libre movimiento de capital. Como bien lo resumió un informe de 1993 de la Junta Interna cional de Fiscalización de Estupefa cientes de Naciones Unidas con sede en Viena: La Junta recomienda que el blanqueo de capitales se a los de la marihuana. De hecho, ni se eliminó el problema original de los cultivos ilícitos, ni se desmanteló la parafernalia que ha permitido que las plantaciones ilegales continúen en todas esas naciones. 165 Presidencia de la República, Consejería para la Defensa y Seguridad Nacional, "La amapola en la tradición colombiana: producción para la especulación, auges regionales y violencia" (mimeo), Santafé de Bogotá, 1993, p. 70. En 1992, se habían destruido 12.864 hectáreas (9.561 con glifosato) de amapola. Durante 1993, se erradicaron 9.821 hectáreas pero en 1994 los cultivos de amapola seguían proliferando. Durante 1994, se erradicaron 5.314 hectáreas (4.676 hectáreas mediante fumigación aérea). Sin embargo, de acuerdo a estimativos de las autoridades estadounidenses, en ese año las plantaciones de amapola se mantuvieron en aproximadamente 20.000 hectáreas, dato que el gobierno colombiano nunca refutó. Véase U.S. Department of State, Bureau of International Narcotics Matters, International Narcotics Control Strategy Report, U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1995. 54 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … considere un acto delictivo en la legislación colombiana y que los reglamentos bancarios se hagan más estrictos para permitir la cooperación multilateral... Colombia tiene una larga historia de vio lencia y actividades antigubernamentales. De cualquier modo, el tráfico de drogas se está infiltrando en la vida comercial legal... 166 . tión antinarcóticos del mandato de Ernesto Samper (1994-1998)167 . El deseo y la fuerza de supervivencia política del Presidente hicieron que optara por "norteamericanizar" por completo la lucha contra las drogas en Colombia. Samper se convirtió en el mandatario que impulsó la mayor criminalización del fenómeno de las drogas en los últimos años, al tiempo que en Colombia se eclipsó notoriamente la probabilidad de discutir sobre la pertinencia o conveniencia de la legalización de las drogas, como él mismo lo había sugerido a finales de los setenta ante el fracaso de la estrategia represiva contra la marihuana impulsada por el presidente Turbay y estimulada desde Estados Unidos. Desde la sociedad se escucharon expresiones aisladas y circunstanciales contra la fumigación química. Nunca se logró conformar una ins tancia de presión cohesiva, seria y afirmativa frente a esa determinación gubernamental. A pesar de comentarios individuales y ocasionales que ponían en duda la efectividad a largo plazo de la medida oficial, el Ejecutivo no recibió críticas sustantivas ni impedimentos a su accionar por parte del Legislativo o del Judicial. El gobierno pudo llevar a cabo la política de erradicación con herbicidas con muy poco condicio namiento interno. El resultado obvio no podía ser muy positivo; por el contrario, el encumbramiento del emporio de la amapola en el país era una demostración adicional de los límites de la política pública antinarcóticos de Colombia y de las dramáticas consecuencias internas del prohibicionismo acérrimo en Estados Unidos. La "norteamericanización" de la "guerra contra las drogas" que encabezó Ernesto Samper significa que la estrategia prohibicionista de Estados Unidos en el caso de los polos de producción, procesamiento y tráfico de narcóticos es asumida y adaptada en su totalidad por los centros de oferta de sustancias psicoactivas ilícitas. Dicha estrategia consiste en la aceptación y aplicación de varias tácticas punitivas para doblegar, hipotéticamente, al narcotráfico: la militarización de la lucha antidrogas que implica un involucramiento creciente y directo de las Fuerzas Armadas -ejército, armada, fuerza aérea- en ese combate tradicionalmente de naturaleza policiva; la erradicación química de cultivos ilegales mediante el uso intensivo de herbicidas cada vez más agresivos; el incremento de la criminalización y el rechazo a la FUMIGACIÓN TOTAL El fantasma omnipresente de los narcocasetes, que revelaban los aportes del narcotráfico a su campaña presidencial, acompañó desde un inicio la ges- 167 Sobre las relaciones entre Estados Unidos y Colombia en materia de drogas ilícitas durante la administración del presidente Sampe r véase Juan Gabriel Tokatlian, En el límite: La (torpe) norteamericanización de la guerra contra las drogas, CEREC/Editorial Norma, Santafé de Bogotá, 1997. 166 Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes, Informe de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes correspondiente a 1993, Naciones Unidas, New York, 1993, p. 47 -48. 55 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … legalización como alternativa para confrontar el fenómeno de los narcóticos; la inadmisibilidad de la negociación tácita o expresa para incorporar lenta o definitivame nte a los narcotraficantes a la sociedad y la extradición de nacionales como herramienta clave para doblegar el narcotráfico. En breve, "norteamericanizar" la "guerra contra las drogas" conduce a transferir los mayores costos de la misma a los países productores/procesadores/traficantes que son los que, en realidad, padecen las consecuencias más desfavorables de la demanda de estupefacientes en los epicentros de consumo como Estados Unidos y los países más industrializados. se hizo evidente con la denominada Operación Conquista en el sur del país durante 1996; a lo cual se debe sumar el complejo acuerdo marítimo colomboestadounidense firmado en 1997 y las señales positivas emitidas desde Bogotá para operativos aéreos más intensos en tareas de interdicción de acuerdo a los planes hemisféricos de Estados Unidos en ese frente. A su vez, Colombia aceptó en 1997 a través de un memorando bilateral el hecho de que la asistencia militar estadounidense estuviese condicionada al respeto de lo s derechos humanos de parte de las brigadas encargadas de realizar operativos contra las drogas (La Enmienda Leahy de 1996 establece que la ayuda antinarcóticos estadounidense no puede ser En esa dirección, Colombia durante el gobierno del presidente Ernesto Samper se convirtió en el epítome de la "norteamericanización" de la lucha antinarcóticos. Es decir, Estados Unidos ha obtenido, en términos de conjunto de medidas y políticas punitivas, con aquel gobierno más de lo que había logrado con los cuatro previos mandatos; de quienes extrajo políticas puntuales altamente represivas pero nunca casi todos sus objetivos. Samper ya no pudo sugerir la idea de legalizar los estupefacientes y aún si lo hubiese deseado no tuvo espacio ni capacidad para asegurar una lenta incorporación de los traficantes nacionales a la sociedad colombiana. Su administración emprendió la mayor y más fuerte erradicación química conocida en las últimas dos décadas utilizando el glifosato masivamente, ensayando además el imazapyr, un herbicida granulado más potente y proyectando el uso del tebuthiuron, un granulado aún más devastador que los dos mencionados. otorgada a unidad alguna de las fuerzas de seguridad de un país extranjero, si la Secretaría de Estado tiene evidencia digna que indique que tal unidad ha cometido graves violaciones a los derechos humanos). Adicionalmente, la aprobación de las leyes de extinción de dominio (1996) y aumento de penas (1997) se ubicaron en la perspectiva de una criminalización creciente de los distintos esla bones del negocio ilícito de las drogas. Por último, el asunto de la extradición, aunque sin retroactividad, se reinstaura el año pasado. La administración liberal fue nacionalista en la retórica pero en los hechos aceptó sin vacilación el diagnóstico estadounidense sobre las drogas. Aprovechando la debilidad interna y externa de la administración Samper, el gobierno en Washington ha logrado el American Dream: "norteamericanizar" en Colombia la "guerra contra las drogas"168 . Así mismo, la inclusión de las Fuerzas Armadas en el combate antinarcóticos 168 En la medida que crecía la "norteamericanización" de la "guerra contra las 56 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … En lo que corresponde a la táctica de la fumigación química, el gobierno incluso se anticipó a las exigencias del Ejecutivo y del Legislativo de Estados Unidos. Muchos meses antes de que circulara y de se hablara del infausto "Memorando Frechette" que hacía exigencias a Colombia para adoptar leyes, medidas y acciones draconianas en materia de lucha antidrogas, el presidente Samper lanzó en febrero de 1995 su plan integral contra los narcóticos que excluía el tema de la extradición pero que incluía el anuncio de la "Operación Resplandor" destinada a terminar "en un plazo de dos años, y de manera definitiva, todos los cultivos ilícitos existentes en el país”169 . La firmeza en la política de erradicación sería evidente. Por ejemplo, en 1994 Colombia (los gobiernos de Gaviria y Samper) había erradicado 4.094 hectáreas de coca. En 1995, la administración Samper erradicó 25.402 hectáreas de coca y en 1996, la erradicación fue de 9.711 hectáreas. (En los cinco años que cubría el período 1990-1994, el total de hectáreas de coca erradicadas había sido de 7.154). En 1994, las administraciones de Gaviria y Samper habían erradicado 5.314 hectáreas de amapola. En 1995, el gobierno Samper erradicó 5.074 hectáreas de amapola y en 1996, la erradicación fue de 6.044 hectáreas170 . Durante 1995-1996, se utilizó masivamente el glifosato para destruir los cultivos ilícitos 171 . Sin embargo, la ilusión de acabar definitivamente con las plantaciones ilícitas probó ser, otra vez, errónea. Para 1996, el gobierno estadounidense calculaba que las hectáreas dedicadas a la siembra de coca en Colombia llegaban a 53.800 (datos independientes en Colombia ubicaban la cifra de coca cultivada cercana a 80.000 hectáreas172 ; lo cual significaba superar a Bolivia drogas" en el país, Washington fue elevando la asistencia policiva y militar antinarcóticos para Colombia. En efecto, en 1995 la ayuda fue de US$ 51.4 millones de dólares (US$ 18.9 millones del programa de International Narcotics Control; US$ 21.9 millones del programa de Foreign Mlilitary Sales; US$ 10 millones del programa de Foreign Military Financing y US$ 600.000 del programa de International Military Education and Training); en 1996 llegó a US$ 73.9 millones de dólares (US$ 22.9 del pro grama de International Narcotice Control; US$ 10.4 millones del programa de Foreign Military Sales, USS 40.5 millones de acuerdo a la Sección 506 (a) (2) del Foreign Assistance Act de 1961 y USS 100.000 del programa de International Military Education and Training) y en 1997 alcanzó los US$ 136.4 millones de dólares (US$ 46.6 millones del programa de International Narcotics Control; US$ 75 millones del Foreign Military Sales, US$ 14.2 millones de acuerdo a la Sección 506 (a) (2) del Foreign Assistance Act de 1961 y US$ 600.000 del programa de International Military Education and Training). Véase, United States General Accounting Office, Drug Control. US. Counternarcotics Efforts in Colombia Face Continuing Challenges, U.S. GAO, Washington D.C., 1998, p. 16. 169 Ernesto Samper, “Palabras del Señor Presidente de la República, Ernesto Samper, en el acto de presentación de la política contra las drogas" (mimeo), Santafé de Bogotá, Febrero 6 de 1995. 170 Presidencia de la República, Compromiso Colombia: Por un país libre de drogas, Presidencia de la República, Santafé de Bogotá, 1997, p. 11-13. 171 De acuerdo con el Ejecutivo, la erradicación química de 1996 desarrollada a través de la Operación Conquista -"una de las mayores operaciones militares en la historia de Colombia" según el gobierno- se enmarcaba en la "lucha contra los carteles y las narcoguerrillas". Véase Colombia: La lucha contra las drogas ilícitas. 1996 Un año de grandes progresos, Presidencia de la República, Santafé de Bogotá, 1997, p. 11 y 24. Ahora bien, la fumigación con herbicidas en 1996 en el sur de Colombia resultó tan poco eficaz en términos del desmantelamiento efectivo del negocio ilegal de las drogas como la de años anteriores. La diferencia fue que en 1996 se aceleró la presencia del paramilitarismo en el sur del país. 172 Véase, Varios Autores, Drogas... op. cit. 57 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … quien era tradicionalmente el segundo productor sudamericano de coca detrás de Perú), que Colombia tenía 4.133 hectáreas de marihuana (en 1992, las hectáreas de marihuana en el país alcanzaban sólo a 1.650 hectáreas) y que ya se producían en Colombia 63 toneladas métricas de heroína. podía afirmar que desde su llegada al poder en agosto de 1994 se habían batido todos los récords históricos de fumigación química en el país: más de 120.000 hectáreas con cultivos ilícitos habían sido fumigadas con herbicidas en cuatro años. Pero paradójicamente, ello mostraba aún más lo equivocado, nocivo e infecundo de la erradicación química de plantíos ilegales: según fuentes colomb ianas, en 1981 las plantaciones de coca y marihuana en Colombia ocupaban aproximadamente 25.000 hectáreas, mientras en 1998, las cosechas de coca, marihuana y amapola se esparcían en casi 100.000 hectáreas. No obstante, la mayor sorpresa nacional en 1996 provino del hecho de las grandes marchas campesinas en el sur del país; en especial en el Caquetá. Colombia, perpleja y tardía mente, descubrió que había dejado de ser procesador de sustancias psicoactivas y se había transformado en productor de cultivos ilegales, que el Estado no existía en una porción estratégica del territorio nacional y de que el poder regional lo ejercían los grupos insurgentes (en particular, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARO) y que la violencia no podría resolver el entramado de problemas sociales, políticos y econó micos de fondo que se habían encubado por décadas en ese espacio geográfico de la nación173 . Más aún, según estimativos estadounidenses los datos sobre drogas ilícitas en Colombia fueron cada vez más negativos. Por ejemplo, en 1990 la producción de heroína era insignificante y había 32.100 hectáreas cultiva das de coca y 1.500 hectáreas cultivadas de marihuana, mientras en 1996 el país producía 63 toneladas métricas de heroína, tenía 53.800 hectáreas cultivadas de coca y poseía 4.133 hectáreas cultivadas de marihuana 174 . La ceguera política interna de civiles, policías y militares en el gobierno y la subordinación del Ejecutivo colombiano ante Estados Unidos condujeron a que en 1997 se repitiera la fumigación indiscriminada con herbicidas (masivamente con el glifosato y de modo experimental con el imazapyr). En 1997, Colombia fumigó 41.847 hectáreas de coca y 6.962 hectáreas de amapola (manualmente se erradicaron 22 hectáreas de coca, 25 hectáreas de amapola y 261 hectáreas de marihuana). En 1998, la adminis tración Samper A ello hay que agregar que en el mercado estadounidense la cocaína y la heroína se tornaron más baratas y más puras. En 1981, el precio por gramo de la cocaína era US$ 275.12 y la pureza de 47.53%, mientras en 1996 el precio por gramo era US$ 94.52 y la pureza de 68.61%. En 1981, el precio por gramo de heroína era USS 3,374.40 y la pureza de 6.73%, mientras en 1996 el precio por gramo era US$ 1,126.57 y la pureza del 41.48% 175 . Así entonces, la racionalidad que justificaba una fuerte política de erradicación química en los polos de oferta ha probado ser total- 173 Véanse Varios Autores, Conflictos Regionales: Amazonía y Orinoquía, IEPRI/FESCOL, Santafé de Bogotá, 1998 y Graciela Uribe, "Caquetá: Contexto y dinámica de las marchas campesinas", en Coloquio, Año 5, No. 3, Marzo 1997. 174 Office of National Drug Control Policy, The National Drug Control Strategy, 1998 , U.S. Government Printing Office, Washington D.C., 1998, p. 90. 175 Ibid., p. 88. 58 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … mente equivocada. En efecto, se suponía que la destrucción masiva y forzada de drogas ilícitas en los puntos de producción y procesamiento iba a generar menor disponibilidad de narcóticos en los centros de demanda, una elevación en los precios de venta al consumidor y una menor pureza de las sustancias psicoactivas ilícitas. Hoy se consiguen en Estados Unidos más drogas, de mejor calidad y a menor valor. evaluado el papel perverso de la fumigación con herbicidas en ese proceso de destrucción ya que fuerza un movimiento geográfico de los cultivos ilícitos y, por lo tanto, un mayor desastre ambiental179 . Aún a pesar de que organizaciones como Greenpeace y el Worldwide Fund for Nature y la firma Dow Agrosciences, que produce el tebuthiuron, se han opuesto al uso de este herbicida, el gobierno de Estados Unidos ha insistido en su pertinencia técnica por su carácter inofensivo 180 . En Colombia, la empresa estadounidense Dowelanco que manufactura el tebuthiuron se negó a vender el químico para ser usado en el país. Mie ntras tanto, muchas organizacio nes no gubernamentales ambientalistas se opusieron al uso de ese herbicida 181 . Además, se debe sumar que en términos de consumo de drogas ilegales y criminalidad vinculada a los narcóticos, la situación estadounidense no ha mostrado avances positivos. Por ejemplo, en 1988 el número de consumidores ocasionales de heroína se ubicó en 167.000 y en 1995 se elevó a 322.000, mientras el total de fuertes consumidores de heroína pasó de 692.000 en 1992 a 810.000 en 1995. La demanda general de heroína que llegó a 1.800.000 personas en 1988, alcanzó a 2.400.000 individuos en 1996 176 . En 1990, el total de arrestos vinculados al fenómeno de las drogas (consumo, venta, distribución, manufactura, etc.) llegó a 1.089.500, mientras que en 1996 trepó a 1.128.647. En 1990, el total de prisioneros federales encarcelados por delitos ligados al fenómeno de los narcóticos fue de 53.5%, mientras en 1995 fue de 59.9% 177 . Ahora bien, el uso del tebuthiuron en Colombia en nada modificará la demanda de drogas en Estados Unidos. En 179 Cabe destacar que crecientemente se reconoce en Naciones Unidas el problema derivado de la fumigación química de cultivos ilícitos. En efecto, en un reciente estudio del Programa de Naciones Unidas para el Control de Drogas se señala: “Finally, the environmental impact of herbicides used to eradicate illicit drug cultivation is also a cause of concern ". United Nations, International Drug Control Programme, "Economic and Social Consequences of Drug Abuse and Illicit Trafficking", en UNDCP Technical Series, No. 6, 1997, p. 37. 180 Véanse, Jeremy Lennard, "Drugs Crops Face ‘Toxic Rain' from US", Manchester Guardian , 26 de Abril de 1998; Tod Robberson, "Drug War Herbicide May Harm Environment", The Miami Herald, 2 de Mayo de 1998 y Diana Jean Schemo, "Pushed by U.S., Colombia Plans New Attack on Coca", The New York Times , 20 de Junio de 1998. 181 La opinión de Alfredo Rey, presidente de Dowelanco en Colombia, negándose a suministrar el tebuthiuron, al gobierno nacional, así como las reacciones negativas ante ese herbicida por parte de las organizaciones no gubernamentales ambientalistas se pueden ver en El Espectador, 16 de Abril de 1998. Finalmente, el costo ambiental para Colombia de la erradicación química no ha sido suficientemente cuantificado. Se ha estimado que "por cada hectárea de amapola se destruyen en promedio 2.5 hectáreas de bosque (y que) en los cultivos de coca, la relación es de 1 a 4 y para los de marihuana es de 1 a 1.55"178 . Sin embargo, no se ha 176 Ibid., p. 75. Ibid., p. 84. 178 Ministerio de Justicia y del Derecho, op. cit., p. 14. 177 59 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … cambio, más fumigación química en el país sólo crea condiciones propicias adicionales para nuevos y mayores problemas internos 182 . asunto de los narcocultivos. Pienso que éstos no se erradicarán ni con fumigaciones ni con actos de fuerza. El narcocultivo, más que un problema judicial, es un problema social, derivado de la miseria de los miles de campesinos dedicados a esta actividad, arruinados por las equivocadas políticas agrarias de este gobierno (el de Ernesto Samper). Los países desarrollados deben ayudarnos a ejecutar una especie de "Plan Marshall" para Colombia, que nos permita desarrollar grandes inversiones en el campo social, en el sector agropecuario y en la infraestructura regional, para ofrecerles a nuestros campesinos alternativas diferentes a los cultivos ilícitos... Ello será complementado por una reforma agraria integral. que vaya más allá del limpie criterio distributivo y ayude a los campesinos con centros de acopio, seguros de cosecha, transporte r valor agregado local, que contribuya a crear una industria alimentaria capaz de competir eficientemente en los mercados. Resulta también indispensable, para afrontar con éxito el tema de los narcocultivos y todas sus implicaciones que pueda llegarse a una solución del conflicto armado interno 184 . UNA BREVE REFLEXIÓN FINAL Como bien lo afirma Molano, "la fumigación de cultivos ilícitos (en Colombia) es una operación más espectacular que efectiva”183 . El riesgo que hoy corre Colombia con la aplicación obsesiva y obsecuente de la fumigación es enorme. De insistir en la táctica inconveniente e improductiva de la fumigación química, el país podría verse sometido a una potencial catástrofe humana, ecológica y política. El gobierno del presidente Samper intensificó como ningún otro la fumigación masiva y forzada de cultivos ilícitos. No fue por falta de represión en el epicentro de las plantaciones que la política de erradicación química demostró su torpeza e ineficacia. Hacia el futuro se hace imperativo reevaluar en profundidad los méritos de esa política. Habrá que observar en detalle si la propuesta del presidente Andrés Pastrana en esta materia resulta pertinente y aplicable. Al respecto, en su propuesta de paz, el entonces candidato por la Gran Alianza por el Cambio señaló: íntimamente ligado al problema social y a la violencia está el 182 Una crítica en Estados Unidos a la política de erradicación química en Colombia por sus efectos sobre el lamentable estado de los derechos humanos en el país, así como a la presión de Washington en favor de la fumigación y de un mayor compromiso militar en la lucha antinarcóticos se encuentra en Coletta Youngers, "Coca Erradication Efforts in Colombia", en WOLA Briefings Series: Issues in International Drug Policy , Junio 2, 1997. 183 Alfredo Molano, "Contradicciones en pasta", en Estrategia, No. 269, 30 de Enero de 1998, p. 37. En este aspecto de los cultivos ilícitos hay un nivel de coincidencia parcial, aunque relevante, con la insur gencia. En efecto, para el Ejército de Liberación 184 Andrés Pastrana, "una política de paz para el cambio, (mimeo, Santafé de Bogotá. 8 de Junio de 1998. pp. 16-17) 60 INTERNACIONALES POLÍTICA ANTIDROGAS DE ESTADOS UNIDOS … Nacional (ELN) es importante, en el contexto de “un manejo autónomo y soberano" de ese fenómeno, "combatir el negocio del narcotráfico en el territorio nacional"; para lo cual, y en términos del química en Colombia? ¿Cómo se ligará, en los hechos y me didas concretas, el tema del diálogo y la paz con la insurgencia, el control y la supresión de los cultivos ilícitos en el sur del país y el desmantelamiento del paramilitarismo en esa zona y una futura reforma agraria regional o nacional? ¿Aceptará Estados Unidos un eslabonamiento temático entre política antidrogas internacional, paz interna colombiana y relaciones bilaterales entre Washington y Bogotá? ¿Cómo incidirá la política doméstica (burocrática, partidista, intra-estatal) estadounidense en la actitud oficial de Washington hacia Bogotá en materia de combate antinarcóticos? Estos y muchos otros interrogantes en el frente de la lucha contra los narcóticos en Colombia se irán develando a finales de 1998. Es prematuro avanzar respuestas específicas y certeras. Lo único cierto es que no será fácil ni inmediato reducir la enorme incidencia del narcotráfico en la vida social, económica, política y militar del país. cultivo (ilícito) y la erradicación del negocio (de las drogas) se tendrá muy en cuenta la necesidad de buscar alternativas económicas para el campesinado. ligado a la siembra y fuentes de ingreso sustitutivas para la población relacionada con las diferentes actividades del narcotráfico. Y en esa dirección, "es responsabilidad de toda la comunidad internacional promover grandes planes de desarrollo con apoyo y gerencia que permita sustituir cultivos". Así mismo, para las FARC el asunto de los narcóticos es, ante todo, "un grave problema social que no puede tratarse por la vía militar, que requiere acuerdos con la participación de la comunidad nacional e internacional" 185 . En el primer cuatrimestre del go bierno Pastrana se podrá constatar si se produce un cambio significativo en la política de fumigación del país. ¿Go zará el nuevo mandatario colombiano de un margen de maniobra suficiente frente a Washington para intentar una estrategia antidrogas más sofisticada que no se apoye de modo privilegiado en la represión en los núcleos de producción, procesamiento y tráfico? ¿Se iniciará una política severa de extradiciones que compense la presión estadounidense en favor de una mayor erradicación 185 Véanse los planteamientos de la guerrilla en el documento “La paz sobre la mesa” compilado por el comité Internacional de la Cruz Roja, la Comisión de Conciliación Nacional y la revista Cambio 16, Mimeo Santafé de Bogotá. Mayo 1998. 61 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … ULISES REVISITADO COMPROMISOS PREVIOS Y I. INTRODUCCIÓN. Comúnmente se sostiene que las constituciones políticas son instrumentos para establecer un compromiso previo o una autolimitación, que han sido creados por el cuerpo político para protegerse de sus tendencias, predecibles, a tomar decisiones insensatas. Que yo sepa, el primer postulado al respecto se encuentra en el Tractatus TheologicoPoliticus (VII.1) de Spinoza, en el que compara a los reyes que dan instrucciones “a sus jueces para que, al administrar justicia, no tengan consideraciones con las personas, ni siquiera con el mismo rey”, con Ulises atándose a sí mismo al mástil y ordenando a su tripulación que ignore cualquier pedido suyo para ser desatado. Lo que me propongo es evaluar la validez y utilidad de este punto de vista. El artículo es también un ensayo de autocrítica. En Ulises y las Sirenas sostuve que “en las democracias modernas algunas instituciones pueden ser interpretadas como instrumentos de compromiso previo”, citando como ejemplos la existencia de la banca central independiente y del sistema de elecciones periódicas186 . Aunque anoté que la metáfora de Ulises es sólo parcialmente válida, y en particular que la idea de la sociedad atándose a “sí misma” es discutible, ahora creo que tomé la idea con mayor seriedad de lo que merecía. Como en muchos otros casos, transferir conceptos que se usan para estudiar lo individual al comportamiento de las colectividades, como si éstas pudieran ser vistas como grandes individuos, puede ser muy engañoso 187 . En la reconsideración de mis puntos de vista ha influido un comentario crítico de mi amigo y mentor, el historiador noruego Jens Arup Seip: “en la política, la gente nunca trata de limitarse a si misma, sólo de limitar a los demás”. Aunque esta afirmación es muy extrema, probablemente está más cerca de la verdad que la idea de que la autolimitación es la esencia de la elaboración de una constitución. Daré primero un ejemplo sencillo y luego aduciré algunas consideraciones generales. En las primeras etapas de la elaboración de la primera constitución francesa, se dio un fuerte enfrentamiento tácito entre el Rey y la asamblea constituyente. Luis XVI amenazó implícitamente a la asamblea en julio de 1789, al concentrar tropas alrededor de Versalles donde la asamblea se encontraba reunida, y al dar, en septiembre, la orden a un regimiento que se encontraba en Flandes de marchar sobre París. Sus acciones desencadenaron los eve ntos decisivos ocurridos en París el 14 de julio y el 5 y 6 octubre que, en retrospectiva, fueron momentos cruciales de la revolución. La asamblea, victoriosa, no olvidó la lección cuando estableció, en la constitución de septiembre 3 de 1791, que “el poder ejecutivo [v.g. el Rey] no puede hacer que ningún regimiento militar de la frontera pase o permanezca temporalmente a treinta mil toises [aproximadamente 59 kilómetros] a la redonda del cuerpo legislativo, excepto por solicitud o autorización de este último”. Éste no fue un acto de autolimitación. El rey no tomó parte en esa restricción de sus poderes. Tuvo 186 187 CONSTITUCIONALISMO Jon Elster Universidad de Columbia John Elster, Ulysses and the Sirens, Cambridge University Press, Cambridge, 1984, pp. 89ss. Ver John Elster, Solomonic Judgements, Cambridge University Press, Cambridge, 1989, pp. 176ss. 62 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … poder de veto en la constitución, pero no sobre la constitución. Supongamos ahora, como un caso putativo de autolimitación, que un grupo de constituye ntes estipulan, por mayoría simple, (i) que la legislación está restringida por algunos derechos de propiedad, y (ii) que (i) sólo puede ser modificado por una mayoría de dos tercios en la siguiente legislatura. Este no es necesariamente un acto de autolimitación. En primer lugar, es imposible aceptar el punto de vista — defendido notablemente por Sieyès— de que una vez que la mayoría ha hablado, su opinión se convierte ipso facto en la voluntad general188 . La mayoría ata a la minoría, y eso es todo. En segundo lugar, debido al sufragio limitado, la mayoría en un momento dado entre los constituyentes puede representar una minoría en la población. Anticipando futuras extensiones del sufragio, pueden entonces tratar de limitar la libertad de acción de las mayorías futuras. En la convención federal, de acuerdo con Thornton Anderson, “los Padres Fundadores [...] al defender la propiedad en contra de mayorías esperadas de no-propietarios, vincularon su descendencia mediante un sistema poco flexible y de baja adaptación”189 . En tercer lugar, aun con sufragio universal, la mayoría puede actuar estratégicamente para atar a la minoría, constitucionalizando una ley en vez de promulgarla como un estatuto ordinario. Supongamos que el 51% de los constituyentes están a favor de la propiedad pero temen que su punto de vista pueda convertirse pronto en una opinión minoritaria dentro de la población. En este caso, pueden afianzar su punto de vista usando su mayoría del 51% de tal manera que se requiera una mayoría del 67% para desmontar la provisión. En estos casos, no es posible hablar de autolimitación. Tampoco nuestro caso es necesariamente una autolimitación en un sentido estricto (pero más adelante se verá uno menos estricto). Cuando Ulises se ató al mástil e hizo que sus remeros pusieran cera en sus oídos, fue para hacer imposible que él sucumbiera al canto de las Sirenas. Las constituciones, en comparación con la legislación ordinaria, se diseñan usualmente para hacer difícil pero no imposible la modificación de sus provisiones. Aunque algunas constituciones poseen disposiciones inmunes a las enmiendas, esto ni siquiera constituye una limitación en el sentido estricto porque siempre existe la alternativa de la acción extraconstitucional. El individuo que quiere limitarse a sí mismo puede encomendar su deseo a instituciones externas, fuera de su control, que evitan que cambie de opinión. Si recibe una gran herencia debe evitar derrocharla adquiriendo un certificado que no pueda ser reconvertido en efectivo durante un año. Pero no hay nada externo a la sociedad, a excepción del caso de los compromisos previos a través de instituciones internacionales con poderes de imposición, tales como el FMI. De hecho, los intentos de limitar a la sociedad con mucho rigor pueden tener el efecto contrario. Al comentar su trabajo como miembro del comité constitucional en la asamblea francesa de 1848, Tocqueville escribió que “he pensado largamente que, en lugar de intentar hacer eternas nuestras formas de gobierno, deberíamos prestar atención a hacer que los cambios 188 En la primera asamblea constituyente francesa (1789 - 1791) este punto de vista tuvo la implicación práctica de que no se llevara ningún registro del número de votos a favor y en contra de una proposición dada (A. Castaldo, Les méthodes de travail de la constituante, Presses Universitaires de France, París, 1989, p. 272 - 273. 189 T. Anderson, Creating the Constitution: The Convention of 1787 and the First Congress, Pennsylvania State University Press, University Park (PA), 1993, p.15. 63 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … metódicos sean un asunto sencillo. Consideradas todas las posibilidades, lo encuentro menos peligroso que la alternativa opuesta. Pienso que uno debería tratar a los franceses como a aquellos lunáticos con quienes hay que tener el cuidado de no limitar, por temor a que se enfurezcan por la restricción”190 . Dicho esto, la idea del compromiso previo constitucional sí tiene algún valor. Distinguiré tres usos de la idea: funcional, explicativo y normativo. En el modo funcional, nos preguntamos si las disposiciones constitucionales existentes de hecho tienden a tener efectos restrictivos benéficos sobre un grupo de actores políticos, independientemente de por qué (y por quiénes) fueron establecidas en un principio. Aunque los requerimientos de una supermayoría para enmendar la constitución ciertamente no han sido establecidos con el propósito de evitar las mayorías cíclicas, pueden, como veremos, tener tal efecto. Aun cuando los requerimientos de que las enmiendas constitucionales pasen por dos legislaturas sucesivas ciertamente no han sido adoptados con el propósito de superar la inconsistencia en el tiempo, pueden tener ese efecto, como también veremos. En el modo explicativo, nos preguntamos si las disposiciones existentes fueron establecidas con el propósito de restringir la libertad de acción de los individuos que votaron por ellas, y la de los individuos que en el futuro estén en la misma situación. La decisión de la asamblea constituyente húngara, en 1989 – 1990, de crear una poderosa corte constitucional con la facultad de echar abajo la legislación parlamentaria, fue un acto explícito de autolimitación. (Un contraste ilustrativo es el caso de Rumania, donde, en 1991, la asamblea estableció la posibilidad de rescindir las decisiones de la corte constitucional.) Las decisiones por mayoría en el parlamento para restringir al ejecutivo también pueden ser instancias de autolimitación, si el ejecutivo sur ge de dicha mayoría. Un ejemplo de esto lo constituye la decisión del parlamento constituyente checo que, en 1992, le prohibió al gobierno el manejo del banco central. Es fácil confundir los enfoques funcional y explicativo, v.g. para admitir explicaciones funcionales sin pruebas. En Ulises y las sirenas que, entre otras cosas, fue una cruzada contra las explicaciones funcionales, cometí exactamente el mismo error cuando argumenté que el sistema de elecciones periódicas “puede ser interpretado [...] como un método del electorado para autolimitarse y para protegerse de su propia impulsividad”191 . Obviamente, ningún electorado ha hecho nunca algo de esa naturaleza. Si los votantes pierden los medios para revocar a voluntad a sus representantes, la 191 Ibid., p. 90; las itálicas irrelevantes han sido eliminadas. No fui el primero en admitir este tipo de razonamiento. En la asamblea constituyente francesa, Lally-Tolendal argumentaron que “Ce fut [...] un beau mouvement que celui qui porta les deux Chambres du parlement britannique à se dépouiller elles-mêmes de plusieurs parties du pouvoir exécutif, dont elles avaient été mises en possession dans des temps de troubles, et à les restituer à la prérogative royale [...] elles voulaient défendre le peuple contre ellesmêmes” (8, p. 517-18: el subrayado es mío). En la Convención Federal, Madison sostenía que “las comunidades democráticas pueden ser inestables, y guiadas en su acción por los impulsos del momento. - Como los individuos pueden ser sensibles a sus propias debilidades, y pueden desear el consejo y control de amigos que los protejan de las turbulencias y violencia de la pasión incontrolada” (I, p. 430 - 31: el subrayado es mío). A partir de aquí los numerales romanos se refieren a los volúmenes I y II de M. Farrand, de. (1966), y los numerales arábigos a los Archives Parlementaires. Série I: 1789 - 1799, París 1875 - 1888. 190 Alexis de Toqueville, Recollections: The French Revolution of 1848, Transaction Books, New Brunswick, 1990, p. 181. 64 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … explicación seguramente tiene que ver más con los motivos de los políticos que con los de los votantes. No obstante, la confusión no es del todo irredimible. En algunos casos, la aproximación funcional puede explicar el mantenimiento de las instituciones que fueron originalmente introducidas por razones completamente diferentes. Las justificaciones cambiantes a favor del bicameralismo constituyen un ejemplo de esto. En el modo normativo, nos preguntamos si son deseables nuevas restricciones constitucionales al gobierno. Se ha argumentado, por ejemplo, que la constitución debe garantizar la independencia de los medios de comunicación de propiedad del Estado, allí donde éstos existan; que en un país rico en petróleo como Noruega debe contemplarse en su constitución que parte de las ganancias petroleras se reserven para respaldar futuras pensiones; que un presupuesto balanceado debe constituir un requerimiento constitucional; que se tienen que constitucionalizar límites temporales para los políticos electos; que el derecho a la vida debe ser protegido en la constitución; etc. En estos casos hay que argumentar que estos asuntos necesitan una regulación y que deben regularse por la constitución y no por la ley. En otros casos, podemos preguntamos si un asunto que ya está regulado por la ley ha de recibir protección constitucional. Se podría argumentar, por ejemplo, que las leyes electorales deben ser constitucionalizadas; que el banco central debe ser regulado por la constitución y no por la ley (como en la mayoría de los países); que ciertas restricciones legales de las libertades constitucionales básicas deben formar parte de la constitución misma, etc. A la inversa, naturalmente, podemos preguntarnos si las disposiciones constitucionales existentes han de ser transformadas en leyes estatutarias o quizás abolidas del todo. Procedo ahora de la siguiente manera. En la sección II, explico qué entiendo por constitucionalismo para nuestros efectos. En la sección III discuto los instrumentos de compromiso previo y las razones para su uso, concentrándome en el comportamiento individual. La sección IV se basa en las secciones II y III para considerar algunos instrumentos y fundamentos lógicos del ámbito constitucional. En la sección V discuto algunas objeciones normativas y obstáculos empíricos para el compromiso previo. En la sección VI hay una breve conclusión. II. CONSTITUCIONES Y CONSTITUCIONALISMO Sustantivamente, una constitución se caracteriza por el hecho de que regula los rasgos más fundamentales de la vida política. Procedimentalmente, se caracteriza por el hecho de que es más difícil cambiar la constitución que promulgar la legislación ordinaria. Legalmente, se caracteriza por el hecho de que la constitución es prioritaria sobre la legislación ordinaria en caso de conflicto. La idea del constitucionalismo, entendida como una propensión general a cumplir con la constitución y con la revisión judicial, no puede ser reducida a la sola presencia de una carta política con esos rasgos. Aunque éstos obtienen constitucionalismo, no pueden garantizarlo, como se ve en el caso de la constitución de la India. Cuando la corte suprema de la India ha echado abajo legislaciones por inconstitucionales, el parlamento normalmente ha respondido enmendando la constitución. El parlamento austríaco le ha dado el mismo trato arrogante a la constitución. Aunque estas prácticas están en perfecta conformidad con la constitución, violan el constitucionalismo. El constitucionalismo asegura que el 65 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … cambio constitucional será lento, comparado con la vía rápida de las políticas ordinarias del parlamento. En la mayoría de los países, la necesidad de una supermayoría para las enmiendas constitucionales, junto con la poca frecuencia de grandes mayorías en el parlamento, garantizarán que, de hecho, las constituciones cambien lentamente. En los países con una larga tradición constitucional, los poderosos acuerdos políticos pueden disuadir a los políticos de jugar constantemente con la constitución con el fin de promover objetivos de corto plazo o fines partidistas 192 . Debido a que el tema de este artículo es el compromiso previo y el constitucionalismo, sólo me ocupo de los rasgos de la constitución que la hacen más resistente al cambio, v.g. las reglas formales que gobiernan las enmiendas de la constitución, y no los acuerdos políticos que pueden actuar como barreras de facto al cambio constitucional. Las reglas formales pueden dictarse de antemano. Los acuerdos políticos, por el contrario, no se crean; evolucionan de modos que no se entienden muy bien. Ellos no hacen parte del repertorio de instrumentos de compromiso previo. Procedo, por lo tanto, a un examen de lo s procedimientos de enmienda. Con la excepción de Nueva Zelandia, es más difícil enmendar la constitución que promulgar la legislación ordinaria. (Usualmente, sin embargo, las constituciones son adoptadas por mayoría simple.) Los principales obstáculos para las enmiendas constitucionales son las salvaguardias absolutas, la adopción por una supermayoría en el parlamento, el requerimiento de un quórum mayor que el de la legislación ordinaria, las demoras, la ratificación estatal (en los sistemas federales), y la ratificación mediante un referendo. Muchas constituciones establecen también que la constitución no puede ser enmendada durante un estado de emergencia. En Alemania, una enmienda, aun si pasa por la vía establecida en la constitución, puede ser declarada inconstitucional por la Corte Constitucional Federal, si se la considera contraria a los principios constitucionales fundamentales193 . También es posible observar conjunc iones, disyunciones e intercambios entre estos principios. Adicionalmente, la constitución estadounidense abre la posibilidad, que nunca ha sido usada, de enmendar la constitución apelando a convenciones constitucionales especiales. El propósito, formulado con frecuencia, de constitucionalizar convenciones periódicas para revisar la constitución, hasta donde sé, nunca ha sido implementado 194 . 193 J.E. Finn, Constitutions and Crisis, Oxford University Press, Oxford, 1991, p. 190. 194 En los Estados Unidos, esta idea fue defendida por Thomas Jefferson, y duramente criticada por James Madison (S. Holmes, “Precommitment and the Paradox of Democracy”, en Elster y Slagstad (eds.) Constitutionalism and Democracy, Cambridge University Press, Cambridge, 1988, pp. 215221). En Francia, se discutió en la Assemblée Constituante de 1789 - 1791 (30, pp.36ss.). Exis te una aproximación en la Constitución de Pennsylvania de 1776, la cual llamó cada siete años a la elección de un Consejo de Censores para revisar la constitución y proponerle las enmiendas necesarias a una convención especialmente convocada. La constitución polaca de 1791, que convocó a una “dieta constitucional extraordinaria” cada veinticinco años, sólo estuvo vigente dos años. Una disposición similar existe en la constitución polaca de 1921, cuya vida también terminó 192 En contraste con los “acuerdos constitucionales” que pueden sustituir o complementar constituciones escritas (Marshall 1984), estos “acuerdos políticos” pueden pensarse como “acuerdos metaconstitucionales”. Como en el caso de violaciones de los acuerdos constitucionales, la violación de los acuerdos meta-constitucional provocará sanciones políticas en lugar de legales — derrota electoral o revolución en vez de una revisión jurídica adversa. 66 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … Algunas constituciones ofrecen salvaguardias absolutas a los derechos. El artículo 79 (3) de la constitución alemana establece que los derechos básicos son inmunes a las revisiones. Del mismo modo, el artículo 57 de la constitución búlgara establece que los derechos fundamentales son irrevocables 195 . Las constituciones rumana y húngara afirman que se protegen los derechos en el sentido de que sólo pueden ser modificados extendiéndolos, nunca restringiéndolos. Algunas de estas constituciones también ofrecen la misma protección de las formas básicas de gobierno, v.g. la organización federal del país (Alemania) o la forma republicana de gobierno (Rumania). Aunque la constitución estadounidense no hace que la igualdad de votos de los estados en el Senado esté exenta de enmiendas, se acerca a esa figura al estipular que “ningún estado será despojado, sin su consentimiento, de la igualdad de su Sufragio en el Senado”. Las supermayorías varían desde la unanimidad (el liberum veto en Polonia antes de 1791), hasta el requerimiento de una mayoría de tres cuartas partes (Bulgaria: ver más adelante), dos terceras partes (en muchos países) o tres quintas partes (Francia y las repúblicas Checa y Eslovaca). Cuando estas cifras se refieren a la mayoría de los votos y no a la de diputados, se combinan usualmente con altos quórum; una combinación común es un quórum de dos tercios y una mayoría de dos tercios. En Canadá —un país donde las luchas sobre los procedimientos de enmienda han estado en el centro de la política durante varias décadas— la mayoría de las disposiciones requieren el consentimiento del parlamento federal y de dos tercios de las provincias, lo que representa el cincuenta por ciento de la población. El procedimiento de enmienda en sí mismo, sin embargo, puede ser enmendado solamente por una decisión unánime. Las demoras se pueden imponer de varias formas. En Noruega, las enmiendas tienen que ser propuestas durante la vigencia de un parlamento y adoptadas durante otra. En Suecia, tienen que pasar por dos parlamentos sucesivos. En Bulgaria, un camino para la enmienda constitucional se describe como sigue: “Un proyecto de enmienda será debatido por la Asamblea Nacional en el período comprendido entre un mes y tres meses a partir de la fecha de su presentación. Una enmienda constitucional requerirá una mayoría de tres cuartos de los votos de todos los miembros de la Asamblea Nacional, en tres votaciones en tres días diferentes. Un proyecto que reciba menos de tres cuartos pero más de dos tercios de los votos de todos los miembros será elegible para una nueva presentación después de no menos de dos meses y no más de cinco. Para que pase en esta nueva lectura, el proyecto requerirá una mayoría de dos tercios de los votos del total de los miembros.” (Art. 154 - 155). Una vez que ha sido adoptada una enmienda en el parlamento, puede pasar a otra instancia para su ratificación. En los países organizados federalmente, se requiere comúnmente el respaldo de alguna proporción de las legislaturas estatales. La ratificación por referendo popular es opcional en algunos países y obligatoria en otros. De nuevo, es posible que se requiera que un cierto porcentaje de los electores registrados voten la enmienda, o bien la imposición antes de que estuviera lista para su implementación. 195 No obstante, el artículo 158 sugiere que el artículo 57 es enmendable. Del mismo modo, el artículo 148 de la constitución rumana y el artículo 79 de la constitución alemana, que enumeran las cláusulas protegidas de la constitución, no se incluyen a sí mismos. Para una discusión de este enigma, ver P. Suber, The Paradox of Self-Amendment, Peter Lang, Nueva York, 1990, p. 101 y passim. 67 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … de requerimientos de una combinación de participación y mayoría. Debido a que estos procesos toman tiempo, tienden a servir también como un freno. Estos obstáculos pueden combinarse de diferentes formas. En primer lugar, por conjunción: la constitución puede requerir, como en Noruega, tanto de una demora como de una supermayoría. En los sistemas federales, es posible que se requiera el voto favorable tanto de la mayoría de los ciudadanos como de la mayoría de las repúblicas que componen el estado federal. En la constitución Suiza de 1848 existe una disposición de este tipo; Canadá tiene un sistema similar pero bastante más complicado. En segundo lugar, por disyunción: en Francia, por ejemplo, las enmiendas pueden ser adoptadas o bien por mayoría simple en el parlamento y sometiéndolas posteriormente a un referendo, o por mayoría de tres quintas partes del parlamento sin referendo 196 . Un caso típico es la transacción disyuntiva, en la cual las demoras pueden acortarse a cambio de una mayoría más grande. Entre los países que tienen transacciones de este tipo están Francia, Bulgaria, Noruega (pero sólo con respecto a la delegación de la soberanía nacional) y Finlandia. En términos generales, los instrumentos más importantes de compromiso previo constitucional son las supermayorías y las demoras. Como veremos más adelante las lógicas para usar unas u otras son bien diferentes. III. COMPROMISO PREVIO INDIVIDUAL : POR QUÉ Y CÓMO . En general, el compromiso previo encarna una cierta forma de racionalidad en el tiempo. En un momento 1 un individuo quiere hacer A en un momento 2; pero predice que, cuando llegue el momento 2, querrá o podrá hacer B, a menos de que se le impida hacerlo. En tales casos, el comportamiento racional del momento 1 puede involucrar medidas preventivas para evitar la elección de B en el momento 2. Discutiré dos razones por las que un individuo puede desviarse predeciblemente, en el momento 2, de lo que en el momento 1 planeaba hacer para el momento 2; y en consecuencia tomar medidas en el momento 1 para evitar las desviaciones en el momento 2: pasión e inconsistencia en el tiempo197 . El primer fenómeno es bien conocido; el segundo algo menos. Este último significa, a grandes rasgos, que los planes trazados en el momento 1 son internamente inconsistentes, de tal 197 Otra razón, que no discutiré, es un cambio predecible de los deseos en una dirección que el agente, en su encarnación previa, considera indeseables. Este caso difiere de aquél de la pasión en que se supone que el cambio de deseos es duradero, y de aquél de las preferencias inconsistentes en el tiempo en que lo que causa el cambio de preferencias es un cambio real en el agente y no simplemente el paso del tiempo. El objeto del compromiso previo podría ser el de prevenir el cambio de preferencias en sí mismo (como cuando la gente se niega a tomar el primer trago o a fumar el primer cigarrillo porque temen enviciarse) o el de evitar que el agente actúe según un nuevo tipo de preferencias cuando éstas surjan (como en el caso del noble ruso discutido por D. Parfit, “Later selves and moral principles”, en Montefiore (ed.), Philosophy and Personal Relations, Routledge and Kegan Paul, Londres, 1973, p. 145). No incluyo estos casos porque ellos no tienen una analogía en el compromiso previo constitucional. 196 En la más famosa enmienda bajo la Quinta República —que estipulaba la introducción de la elección del Presidente por voto directo— el General de Gaulle no utilizó ninguno de esos procedimientos. En vez de esto, procedió directamente a un referendo, justificándolo mediante un artículo de la constitución que, de acuerdo con la mayoría de las opiniones judiciales, no era aplicable a enmiendas constitucionales (G. Burdeau, F. Hamon y M. Troper, Droit Constitutionel, 22ª. ed. Librairie Générale de Droit et de Jurisprudence, París, 1991, pp. 480ss.; también J. Lacouture, De Gaulle, vols. I-III, Seuil, París, 1990, vol. III, pp. 572ss.). 68 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … manera que el individuo no tiene incentivos para aferrarse a ellos cuando llegue el momento 2. Puede subdividirse en inconsistencia en el tiempo provocada por descuento hiperbólico e inconsistencia en el tiempo provocada por interacción estratégica. Pasión Las personas pueden actuar en contra de su buen juicio bajo la influencia de pasiones que hacen que se desvíen de los planes trazados en un momento más tranquilo. Aquí, uso “pasión” en un sentido extenso que cubre no sólo ira, codicia, temor y similares, sino también estados como embriaguez, ansiedad por drogas adictivas y otros sentimientos viscerales 198 . Hay varios mecanismos mediante los cuales la pasión puede causar esta discrepancia entre planes y conducta. En primer lugar, la pasión puede hacer que se piense con el deseo sobre las consecuencias de la conducta. Antes de ir a una fiesta, decido dejar mi carro al final de la velada y tomar un taxi a casa. Cuando llego allá y me embriago, me convenzo de que estoy en perfectas condiciones de manejar hasta la casa. En segundo lugar, la pasión puede ser tan fuerte que sobresale por encima de todas las demás consideraciones. Antes de un encuentro poco placentero, resuelvo mantener la calma. No obstante, cuando me provocan, estallo sin detenerme a considerar las consecuencias. En tercer lugar, puedo saber, aun en el momento 2, que estoy actuando en contra de mi buen juicio. Si trato de dejar de fumar y voy a una fiesta donde me ofrecen un cigarrillo, puedo aceptarlo a pesar de saber, en el momento de aceptarlo, que no debo hacerlo. En el primer caso, actúo con una visión distorsionada de las consecuencias; en el segundo las ignoro completamente; en el tercero, la tentación supera incluso la conciencia cabal de las consecuencias. En el segundo caso, estoy sordo a los incentivos que van más allá de los deseos del momento. El primero y tercer casos no tienen esta implicación. Si los incentivos son lo suficientemente fuertes, resistirán la invasión de las pasiones. Por lo tanto, tengo anticipadamente un estímulo para fortalecerlos suficientemente, elevando los obstáculos, como veremos. Estos mecanismos tienen en común una tendencia a que la pasión provoque desviaciones de los planes determinados de antemano. Esto es algo que nos ha sucedido a todos. En efecto, a la mayoría nos ha ocurrido con tal frecuencia que estamos, o deberíamos estar, en capacidad de aprender de la experiencia. Si fuéremos perfectamente racionales, nunca dejaríamos que la pasión interfiriera en nuestros planes. Sin embargo, al ser irracionales y saberlo, podemos seguir los cánones de la “racionalidad imperfecta” y comprometernos previamente, con anticipación, de manera que el comportamiento que buscamos evitar llegue a ser prohibitivamente costoso o físicamente imposible. En Ulises y las Sirenas doy muchos ejemplos de este tipo de comportamiento. Aquí ilustraré el comportamiento mediante dos ejemplos de conductas de compromiso previo en adictos a la cocaína. Un caso en el que el compromiso previo toma la forma de hacer que el comportamiento sea prohibitivamente costoso, ha sido descrito por Thomas Schelling: En un centro de adicción a la cocaína en Denver, a los pacientes se les ofrece la oportunidad de someterse a extorsión. Pueden escribir una carta 198 Para una discusión sobre el lugar de la visceralidad en la explicación del comportamiento, ver G. Loewenstein, “A visceral theory of addiction”, por aparecer en Elster y Skig (eds.), Getting Hooked: Rationality and the Addictions, y “Out of control: Visceral influences on addiction”, manuscrito sin publicar. 69 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … autoincriminatoria, una carta que, preferiblemente, confiese su adicción a las drogas, depositar la carta en la clínica, y someterse a un programa aleatorio de pruebas de laboratorio. Si el laboratorio encuentra evidencia de uso de cocaína, la clínica envía la carta al destinatario. Un ejemplo es el de un médico que dirigió la carta a la Junta Estatal de Examinadores Médicos, confesando que se había administrado cocaína y violado las leyes de Colorado, y solicitando que su licencia fuera revocada 199 . Un ex-adicto a la cocaína amenazado por una recaída, aún es suficientemente dueño de sus facultades como para que le afecten las consecuencias de ser débil ante la tentación. Él sabe que puede experimentar una ansiedad lo suficientemente fuerte como para que supere las consecuencias ordinarias de una recaída, pero espera neutralizarla imponiéndose costos extras. Mientas esté bajo la influenc ia de la cocaína, el adicto puede no estar en absoluto en capacidad de tener en cuenta las consecuencias, aunque éstas sean severas. Para limitar el consumo, por lo tanto, uno debe usar la estrategia del compromiso previo para que el comportamiento indeseado se haga físicamente imposible: Jeannette, madre soltera de dos niños, vive en una vivienda subsidiada en una zona económicamente deprimida del centro histórico de una gran ciudad norteamericana. Trabaja como cajera en un restaurante de comidas rápidas, devenga un salario cercano al mínimo legal [...] Un viernes por la tarde, después de recibir su pago semanal, recibe una llamada telefónica de uno de sus novios ocasionales, quien le cuenta que acaba de conseguir algo de “crack” (base libre de cocaína) y unas cervezas, y que planea hacer una fiesta esa noche con unos amigos. Jeannette está invitada a que “vengas, metas un poco y te diviertas”. Después de unos momentos de indecisión, Jeannette acepta la invitación. Le dicen “trae algo de dinero, para pagar el crack que vas a usar”. Jeannette cuenta cuidadosamente su paga semanal, calcula la cantidad de dinero que necesita para comida, arriendo y otras necesidades de la semana siguiente, y entonces se “compromete previamente” a usar para el crack sólo aquellos dólares que no son “necesarios” para la semana siguiente. Deja sus niños con una amiga del edificio para que los cuide durante la noche, y le da también a su amiga todo el “dinero necesario” para la semana entrante, diciéndole “no me lo devuelvas antes del lunes, no importa cuánto te lo suplique” 200 . Inconsistencia en el tiempo provocada por descuento hiperbólico Cuando los individuos planean su comportamiento en el tiempo, típicamente descuentan el bienestar futuro, a un valor presente más bajo. Cuando se enfrentan con opciones en las cuales los efectos en el bienestar se sentirán en varias ocasiones en el futuro, eligen aquélla para la cual la suma de los valores presentes de tales efectos es la mayor. Aunque existe un amplio acuerdo acerca de esta descripción general, hay dos visiones con respecto a la forma exacta de la función de descuento. Los economistas neoclásicos ortodoxos suponen que el descuento es exponencial, en el sentido de que el bienestar, t unidades de 200 E. Gardner y J. David, “The neurobiology of chemical addiction”, por aparecer en Elster y Skig (eds.), Getting Hooked: Rationality and the Addictions. 199 T.C. Schelling, “Self-control”, en Loewenstein y Elster (eds.), Choice over Time, Russell Sage, Nueva York, 1992, p. 167. 70 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … tiempo hacia el futuro, se descuenta del valor presente en un factor de rt , donde r es el factor de descuento en un período. Los psicólogos conductistas sostienen que el descuento es hiperbólico, de manera que el bienestar, t unidades en el futuro, se descuenta del valor presente en un factor de 1/1+kt, donde k es una constante positiva 201 . En lo que sigue, asumiré la segunda perspectiva 202 . Tal vez la intuición central detrás de esta perspectiva es que los individuos tienen una fuerte preferencia por el presente en comparación con cualquier fecha futura. Si reciben una gran suma de dinero hoy, tal vez decidan gastar inmediatamente la mitad y distribuir el resto de manera uniforme para el resto de su vida. Una diferencia importante entre las dos perspectivas es que los individuos que descuentan el futuro hiperbólicamente tenderán a desviarse de sus planes a menos que tomen medidas precautelativas. Esto se ve en la figura 1. El agente tiene que elegir entre una pequeña recompensa que estará disponible en el momento 2 y una recompensa mayor que estará disponible en el momento 3. Las curvas muestran cómo estas recompensas futuras se descuentan (hiperbólicamente) del valor presente en los momentos previos. Antes de t* cuando el valor presente de la recompensa mayor está por encima de aquél de la recompensa menor, el agente trata de elegir la recompensa mayor. Sin embargo, después de t*, domina el valor presente de la recompensa más pequeña. En el momento 2, por consiguiente, el agente elige la recompensa menor. Con descuento exponencial, nunca puede ocurrir tal cambio de preferencia: si se prefiere una opción en un mome nto dado, se preferirá siempre. Para exhibir casos de este tipo, debemos buscar instancias en las que no estén involucradas las pasiones o las ansiedades. Ainslie sostiene que el descuento hiperbólico explica por qué la gente toma la decisión de dejar de beber, fumar o apostar y luego fallan en ese propósito, y tal vez esté en lo correcto. No obstante, estos casos no constituyen una evidencia decisiva del descuento hiperbólico, dado que la desviación de los planes iniciales puede deberse también a que se piense con el deseo o a ansias más fuertes. Ser incapaz de ahorrar para Navidad o para la vejez, de acostarse temprano o levantarse temprano, y de hacer ejercicio físico, constituyen casos más contundentes. En todas estas situaciones es relevante la oración de San Agustín: “Dame castidad y continencia, sólo que aún no.” (Confesiones VIII. vii.). Ser incapaz de mantener las propias resoluciones es atribuible simplemente al tiempo, no a impulsos o a ansias de alguna naturaleza. Para ilustrar el uso del compromiso previo en este contexto, consideremos el problema de los ahorros inadecuados. Las instituciones, otrora populares, de los clubes de Navidad “ofrecían la inusual combinación de inconveniencia (los depósitos eran hechos personalmente cada semana), iliquidez (los fondos no podían ser retirados hasta finales de noviembre) y bajo interés (en algunos casos, cero interés). Por supuesto, la iliquidez fue la raison d’être de los clubes de Navidad, dado que los clientes buscaban garantizarse los fondos para pagar los regalos de 201 Para esta última teoría, ver especialmente G. Ainslie, Picoeconomics, Cambridge University Press, Cambridge, 1992. 202 Existen fuertes evidencias empíricas de que el descuento en animales es hiperbólico. En D. Laibson, “Golden eggs and hyperbolic discounting”, manuscrito, Departamento de Economía de MIT, 1993, se presentan evidencias sobre el comportamiento económico. Para mi propósito, basta que exista evidencia suficiente de descuento hiperbólico para que valga la pena seguir esta idea. 71 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … Navidad”203 . Más generalmente, de acuerdo con David Laibson todo activo ilíquido provee una forma de compromiso previo [...] Una pensión o un plan de retiro es el ejemplo más claro de activos de este tipo. Muchos de estos planes se benefician de un tratamiento impositivo favorable, y la mayoría de ellos inhiben efectivamente a los consumidores de usar sus ahorros antes del retiro. Para IRA, los planes Keogh, y los planes 401 (K), los consumidores pueden acceder a sus activos, pero deben pagar una penalización por retiro anticipado. Adicionalmente, los préstamos sobre parte de estos recursos son tratados legalmente como un retiro anticipado y, en consecuencia, están sujetos a penalización. Un mecanismo menos transparente de compromiso previo es una inversión en un recurso ilíquido que genera un flujo continuo de beneficios, pero que es difícil vender debido a costos de transacción sustanciales, a problemas de información, y/o a mercados incompletos. Como ejemplos están la compra de una casa, de electrodomésticos, o la emisión de acciones de un negocio personal204 . En el modelo formal de Laibson los instrumentos de ahorro ilíquido son definidos por el hecho de que “una venta de este activo debe iniciarse un período antes de que se reciban las ganancias reales”. Una analogía es el cierre de las licorerías los sábados, de forma que la gente deba comprar sus bebidas el viernes si desean asegurar su farra para el sábado. El cierre de los sábados reduce de hecho el consumo de alcohol por parte de los grandes bebedores 205 . Inconsistencia en el tiempo provocada por interacción estratégica Supongamos que Adán debe tomar una decisión (l o r), luego Eva debe tomar otra decisión (L o R). Ambos ganan pagos que dependen de las decisiones de ambos 206 . En la figura 2, el primer número al final de cada nodo terminal representa el pago de Adán, y el segundo el pago de Eva. Se supone que los pagos de Eva están condicionados por a > c y a > d. Por lo tanto, ella tiene un incentivo para inducir a Adán a moverse a la izquierda, usando una amenaza, una promesa o una combinación de ambas. Supóngase primero que a > b > c > d. Entonces Eva puede amenazar con que se va a mover a la derecha si Adán se mueve a la derecha. Sin embargo, esa amenaza no es creíble. Él sabe que ella no se va sacrificar moviéndose a la derecha, así que él se mueve a la derecha, sabiendo que ella se moverá a la izquierda. El resultado será peor para Eva y mejor para Adán que si la amenaza hubiera sido creíble. Supongamos ahora que b > a > d > c. Entonces Eva puede prometer moverse a la izquierda si Adán se mueve a la izquierda. Una vez más, sin embargo, esta promesa no es creíble. Adán sabe que una vez él se mueva a la izquierda ella tendrá interés de moverse a la derecha. Como resultado, él se moverá a la derecha y Eva también, dejándolos a ambos en peor situación que si su promesa hubiera sido creíble. Supongamos, finalmente, que b > a > c > d. Eva puede exhibir tanto la zanahoria como el garrote, prometiendo moverse a la izquierda si él se mueve a la izquierda y amenazando con moverse 205 G. Edwards et al., Alcoholic Policy and the Public Good, Oxford University Press, Oxford, 1994, p. 137. 206 Los siguientes esquemas se encuentran en, Jon Elster, The Cement of Society, Cambridge University Press, Cambridge, 1989, pp. 272ss. 203 R. Thaler, The Winner´s Curse, The Free Press, Nueva York, 1992, p. 98. 204 Laibson, op. cit.. 72 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … a la derecha si él se mueva a la derecha. Ninguno de estos mensajes es creíble; Adán se mueve a la derecha, y Eva se mueve a la izquierda; él está mejor y ella peor de lo que estaría si la promesa / amenaza hubiera sido creíble. Concentrémonos ahora en el segundo caso, en el que existe una secuencia de movimientos que sitúan a Adán y Eva mejor de lo que están en el resultado de equilibrio (2,d). Debido al problema de credibilidad, este plan óptimo es inconsistente en el tiempo. Si Adán cree en la promesa de Eva, ella no tendrá ningún incentivo para cumplirla. Para ilustrar este predicamento, consideremos la relación entre el sindicato y la administración de una firma 207 . Primero, el salario se establece por negociación colectiva; luego, la firma decide cuántos empleados va a contratar. La firma sólo se preocupa de las ganancias; el sindicato se preocupa tanto por el salario como por el empleo. Es posible mostrar entonces que para cualquier nivel de salario alcanzado por la negociación colectiva, seguida de una decisión de empleo que maximiza la ganancia, por parte de la firma, existe una combinación salario / empleo que es estrictamente mejor para ambas partes. No obstante, dado que una promesa, por parte de la firma, de establecer un nivel de empleo no óptimo, no será creíble, no es alcanzable dicho resultado óptimo. O consideremos políticas de despidos en las firmas 208 . Puede parecer claramente beneficioso para las firmas estar en capacidad de despedir empleados cuando las condiciones comerciales estén malas y, aun más, poder elegir a cuáles empleados se despedirán. Los trabajadores, por su parte, tienen un interés claro en su seguridad laboral. Es más, una mayoría de los empleados querrían que los despidos se rigieran por la antigüedad. De otro lado, no obstante, la firma también tiene interés en la seguridad laboral y en despidos por antigüedad, puesto que tales prácticas reducen la rotación de personal y por lo tanto aumentan la productividad y (siendo iguales otras cosas) la ganancia. Las firmas que no cuentan con sindicatos no pueden, sin embargo, estar en capacidad de hacer promesas creíbles de que los despidos se harán por antigüedad. Si la firma se mete en líos, usualmente querrá despedir a los trabajadores menos productivos o, más generalmente, usar la política de despidos que maximice sus posibilidades de sobrevivir. Sabiéndolo, los trabajadores no creerían en promesas de que los despidos se harán por antigüedad. Al actuar de acuerdo con esa creencia, tenderían a renunciar con mayor frecuencia, reduciendo así la productividad y aumentando la probabilidad de que la firma se meta de verdad en problemas. El compromiso previo puede usarse para superar esta variedad de inconsistencias en el tiempo. Una técnica genérica es la de quemar los propios puentes: mejorar el resultado para uno mismo (y tal vez también para la otra parte) ya sea eliminando algunas de las opciones propias o asociando una penalización a su uso 209 . Si Eva puede hacer un contrato, que se pueda hacer cumplir, para que un tercero pague una penalización si ella va hacia la derecha, su promesa de ir hacia la izquierda puede ser más creíble. La firma puede colocar un bono que perderá si rompe su promesa de establecer un nivel de empleo que no maximice la ganancia. En el caso del despido, la firma puede darle credibilidad a la promesa permitiendo o estimulando la 207 Para una discusión más completa de este ejemplo, consulte Elster, The Cement…, p. 172173. 208 Lo siguiente se basa en Elster, The Cement…, p. 277-278. 209 Esta idea surge originalmente de T.C. Schelling, The Strategy of Conflict, Harvard University Press, Cambridge, 1960. 73 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … sindicalización. El sindicato puede actuar como alguien que exige el cumplimiento de la promesa, y por lo tanto disminuir la probabilidad de que surja de nuevo la ocasión de cumplirla. La sindicalización es, en ese sentido, favorable para la firma: ésta necesita al sindicato para poder hacer promesas creíbles de que los despidos serán hechos realmente por antigüedad. Como los sindicatos también buscan elevar los salarios de sus miembros, la firma puede, naturalmente, decidir que, globalmente, es mejor no tener sindicato. Para concluir, hemos visto que los instrumentos de compromiso previo individual funcionan de tres maneras. (i) Pueden, como en el caso de Ulises y las Sirenas, hacer que sea físicamente imposible llevar a cabo ciertas decisiones. (ii) Pueden, como en el caso de médico adicto, hacer que ciertas elecciones sean más costosas de lo que han sido. (iii) Y pueden, como en el caso de los ahorros ilíquidos, hacer que ciertas decisiones sean más dispendiosas en tiempo de lo que han sido. En los casos (i) y (ii) , el agente se compromete previamente en el momento 1, porque es una decisión específica que quiere evitar en el momento 2. En el caso (iii), no hay una decisión particular que quiera impedir. Después de todo, puede haber a veces buenas razones para retirar los fondos. El compromiso previo tiene sólo la intención de asegurar de que no tomará la decisión por la razón equivocada, con base en un impulso súbito. Se ve fácilmente que, con una excepción, cada una de estas tres tecnologías puede engancharse a cada una de las tres razones del compromiso previo. La excepción es que las demoras no pueden usarse para ayudarles a los individuos a superar los problemas de credibilidad. IV. COMPROMISO PREVIO CONSTITUCIONAL: ¿POR QUÉ Y CÓMO ? Existen varias razones por las cuales las sociedades desean comprometerse previamente, en particular mediante cláusulas astringentes de enmienda en las previsiones que regulan los aspectos más importantes de la vida política. Éstas incluyen las razones que subyacen al compromiso previo individual — superar la pasión y la inconsistencia en el tiempo— y algunas que son específicas de la toma de decisiones colectivas. Entre los instrumentos de compromiso previo que pasan del caso individual al colectivo están los mencionados (i) y (iii), pero no (ii). La idea de que la toma de ciertas decisiones sea menos probable haciéndola más costosas, no tiene un análogo en el caso constitucional210 . En lugar de esto, está la idea de (iv) hacer que ciertas decisiones sean más difíciles de ejecutar de lo que han sido, al requerir mayorías más grandes. Por otra parte, la idea constitucional de (v) separación de poderes no tiene un análogo en el caso individual. Antes de discutir la lógica del compromiso previo constitucional, quiero señalar que la imposición de demoras y supermayorías se encuentra no sólo en los procedimientos de enmienda sino también en el proceso político ordinario. Daré algunos ejemplos más adelante. No obstante, estos controles en la legislatura no tendrían una función muy restrictiva de no ser porque están protegidos por la constitución. Son restricciones que sólo funcionan porque en sí mismas están incorporadas en restricciones. Si la cláusula constitucional que requiere una mayoría de dos tercios en el Congreso para derogar un veto ejecutivo, pudiera abolirse por una mayoría simple en el 210 Ver, sin embargo, los comentarios sobre el Banco Central de Noruega (más adelante), para una excepción parcial a esta afirmación. 74 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … Congreso, no tendría mucho sentido 211 . La constitución polaca actual ofrece algunos ejemplos interesantes. Como un remanente de la anterior constitución comunista, contiene una provisión de que el parlamento puede echar atrás decisiones de la corte constituciona l que revocan leyes del parlamento. Aunque la constitución no dice nada sobre la mayoría parlamentaria que se necesita, la ley sobre la corte constitucional especifica que se necesita una mayoría de dos tercios. Sin embargo, como la ley puede modificarse por mayoría simple, la supermayoría es esencialmente ficticia. Ningún parlamento puede atar efectivamente a parlamentos futuros mediante la legislación ordinaria 212 . En 1992, durante la creación de la “Pequeña Constitución” de Polonia, se observó un ejemplo de tales autocompromisos ficticios en los que la ficción se hizo muy evidente. En la constitución creada por las Conversaciones de la Mesa Redonda, en 1989, la Sejm (cámara baja) necesitaba una mayoría de dos tercios para derogar un veto del Senado. En su propio reglamento interno, la Sejm adoptó también el principio de que requería una mayoría simple para aceptar enmiendas del Senado de la legislación ordinaria, y una mayoría de dos tercios para enmiendas de leyes constitucionales. Esto implicaba que un proyecto enmendado que recibiera menos del 50% (67% en leyes constitucionales) pero más del 33% de los votos en la Sejm, estaba muerto —no pasaba ni la versión enmendada ni la no enmendada. Para superar este problema, se intentaron dos soluciones. En julio de 1992, la Sejm cambió su reglamento interno de tal manera que un proyecto enmendado pasara automáticamente a menos que hubiera en la Sejm una mayoría de dos tercios en contra de la enmienda. Esta solución eliminaba la indeterminación inherente al sistema anterior, pero con el costo de darle poder legislativo decisivo al Senado. La mitad del Senado, junto con un tercio de la Sejm, podía decidir sobre el destino de cualquier ley, incluyendo cambios a la constitución. La segunda solución fue la adoptada en la pequeña constitución, en la que las enmiendas del Senado se aceptan a menos de que sean rechazadas por una mayoría de los diputados de la Sejm. Para que pasara la pequeña constitución, incluyendo esta provisión, la Sejm primero reformó de nuevo su reglamento interno. El 16 de octubre, los diputados introdujeron una vez más el procedimiento original para las leyes ordinarios, pero decidieron que en el caso de las enmiendas constitucionales sólo habría una votación sobre la adopción de la enmienda de la Sejm. Si la enmienda no lograba obtener dos tercios de los votos, era rechazada, mientras que antes debía tener en su contra dos tercios para ser rechazada. En seguida, la Sejm procedió a votar rechazando las enmiendas del Senado a la pequeña constitución. Pasión Se ha dicho que las constituciones son “cadenas con las que los hombres se atan a sí mismos en sus momentos de lucidez para no morir por su propia mano el día de su locura”213 , o lazos que Pedro cuando está sobrio impone a Pedro cuando está ebrio 214 . Los artífices de la Federal Convention y de l’Assamblée Constituante, por ejemplo, se refieren contantemente a la necesidad 211 213 Estoy abstrayendo de los posibles efectos restrictivos de convenciones metaconstitucionales (nota 7 previa). 212 J.N. Eule, “Temporal limits on the legislative mandate”, en American Bar Foundation Research Journal, 1987, pp. 379-459. John Potter Stockton, citado en Finn, op. cit., p. 5. 214 Holmes, op. cit, p. 176. Ver también un respaldo parcial a esta metáfora en F. Hayek, The Constitution of Liberty, University of Chicago Press, Chicago, 1960, p. 180. 75 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … de contener las pasiones mayoritarias215 . Para lograr este objetivo, fueron adoptados diversos instrumentos. Primero, ambas constituciones contienen un conjunto de derechos individuales (adoptados en el caso norteamericano como las primeras nueve enmiendas) que evitan que una mayoría apasionada adopte medidas antiliberales y tiránicas. En varias constituciones modernas, como vimos, estos derechos son irreformables: imposibles de cambiar, no sólo difíciles de cambiar. Segundo, ambas constituciones del siglo XVIII incluyen instrumentos de compromiso previo como las demoras y las supermayorías en el proceso legislativo ordinario, respaldadas por demoras y supermayorías en los procedimientos de enmienda constitucional. En ambas asambleas, el bicameralismo se justifica por sus efectos de desaceleración del proceso político, permitiendo que se enfríen las pasiones y que la razón (o el interés) tomen de nuevo el control216 . Adicionalmente, se suponía de entrada que la cámara alta era menos susceptible a las pasiones 217 . Para la mayoría de los diputados de l’Assamblée Constituante, el veto real suspensivo era visto, de manera similar, como un dispositivo de demora y enfriamiento —un freno a las mayorías apasionadas. Para los constituyentes norteamericanos, el veto ejecutivo tenía un carácter y una función diferentes. En la constitución de los Estados Unidos se requiere una supermayoría, en lugar de una demora, para derogar el veto. Se pretende que la supermayoría reduzca la probabilidad de leyes insensatas fundamentadas en intereses permanentes y no para evitar leyes que pudieran surgir de pasiones momentáneas218 . A pesar de que existía d’enthousiasme, accroître la puissance d’un roi victorieux, ou, dans des circonstances difficiles, établir en faveur du prince une dictature quie deviendrait perpétuelle. Deux Chambres, au contraire, délibérant séparément, assurent la sagesse de leurs résolutions respectives, et rendent au Corps législatif la marche lente et majestueuse don’t il ne doit jamais s’écarter”. (8, p. 555). 217 Para Madison, “El uso del Senado es contar en sus procedimientos con mayor frialdad, con más sistema, y con más sabiduría, que la rama popular” (I, 151; subrayado agregado). Cuando Mounier sugería que aquellos que encontraron que la palabra “Senado” olía demasiado a aristocracia, podrían considerar más aceptable “Chambre des conservateurs” (8, p. 556), también se refería a la naturaleza menos inflamable de la cámara alta y no simplemente a los efectos calmantes del bicameralismo. Los mecanismos diseñados para garantizar una sabiduría o frialdad superiores por parte de los miembros de la cámara alta incluían números más pequeños, mayor permanencia, renovaciones parciales, elecciones indirectas, requerimientos de edad superiores y requisitos de propiedad más restrictivos. 218 De acuerdo con Madison, “una negativa en el ejecutivo no es necesariamente por su propia seguridad sino por la seguridad de una minoría en peligro de opresión por parte de una mayoría injusta o interesada” (I, p. 108). El gobernador Morris fue más específico. El 19 de julio de 1787 sostenía que la cámara alta era necesaria como control “a la propensión de la primera 215 En Philadelphia encontramos referencias a “la turbulencia y locuras de la democracia” (Randolph: I, p. 51), “la furia de la democracia” (Randolph: I, p. 59), “las pasiones populares [que] se difunden como fuego sin control y se hacen irresistibles” (Hamilton: I, p. 289), “veleidad y pasión” (Madison: I, p. 421), “la turbulencia y violencia de la pasión sin control” (Madison: I, p. 430), y a la “precipitud, volubilidad y excesos de la primera rama” (Gob. Morris: I, p. 512). En París, Lally -Tollendal (8, p. 516) se refiere a que la asamblea ha sido “entrainée par l’éloquence, séduite par des sophismes, égarée par des intrigues, enflammée par des passions qu’on lui fait partager, emportée par des mouvements soudains qu’on lui communique, arrêtée par des terreurs qu’on lui inspire”. Otros hablan de “les prestiges de l’éloquence, l’effervescence de l’enthousiasme” (Grégoire: 8, p. 567), “les causes d’erreur, de précipitation ou de séduction oratoire” (Sieyès: 8, p. 597), o sobre “l’erreur, la précipitation, l’ambition” (Robespierre: 9, p. 81). 216 En París, Mounier observó que la mayoría podría incluso necesitar protección contra su propia tentación de abdicar del poder: “Une seule Assamblée … pourrait, dans un moment 76 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … una suposición generalizada de que los arranques emocionales podrían sacudir a las masas pero no a las élites, éstas debían ejercer su influencia restrictiva en la cámara alta más que como una minoría de la cámara baja (o de ambas cámaras). Aunque las supermayorías legislativas pueden servir como baluarte contra las que podrían llamarse pasiones permanentes, como las animosidades étnicas, los fanatismos religiosos o las fuertes ideologías igualitarias, veremos que la idea tiene sus problemas. Inconsistencia en el tiempo provocada por descuento hiperbólico En la sección II vimos que muchas constituciones imponen una demora entre la primera propuesta de una enmienda y su adopción final. En la sección III vimos que las demoras pueden servir para superar los problemas asociados con el descuento hiperbólico. No podemos inferir, por supuesto, que las cláusulas de demora existen para evitar las inversiones temporales provocadas por el descuento hiperbólico. Aun después de haber sido identificado y caracterizado por R.H. Strotz en 1955 219 , este último mecanismo, que yo sepa, nunca ha sido citado como una razón del compromiso previo constitucional. Las demoras han sido introducidas para contener la pasión, no para contrarrestar el descuento hiperbólico. Pero, a pesar de que la idea no puede servir para fines explicativos, podría tener algún valor para fines funciona les y especialmente normativos. En los Estados Unidos existe hoy una fuerte exigencia no sólo de un presupuesto balanceado sino de una enmienda constitucional de balance de presupuesto. No es un debate que yo conozca bien, pero sospecho que el principal argumento para la enmienda es que, sin la constitucionalización de este objetivo, el Congreso no podrá resistir a los muchos grupos de interés que llevan a cabo su cabildeo en busca de gasto en tal o cual actividad. No obstante, es al menos concebible que el Congreso (esto es, los representantes individuales) también adolece de la tendencia a procastinar que es inherente al descuento hiperbólico. Debido a la preeminencia del presente sobre cualquier fecha futura, el Congreso, como San Agustín, se dirá que balancear el presupuesto es una buena idea —en el futuro. Pero cuando llega el futuro, siempre lo hace en forma de un presente nuevo al que se aplica el mismo razonamiento. La enmienda de balance de presupuesto podría superar esta procastinación. Para que se adopte la enmienda, sin embargo, es posible que se tenga que estipular que sólo entrará a operar en el Congreso siguiente o incluso en un futuro más distante. La idea de la demora, de hecho, cumple aquí dos funciones. Una vez se adopta la enmienda, la demora entre la propuesta y la adopción la protegerá de ser abolida. Para que se adopte, es posible que haya que imponer una demora artificial entre la adopción y la implementación. Esta última idea podría defenderse en otros terrenos. Un problema que ha azotado a la mayor parte de la legislación constitucional, ya rama a legislar demasiado involucrándose en proyectos de papel moneda y expedientes similares” II, p. 52). Dos días después, citaba los mismos fenómenos —“Emisiones de papel moneda, larguezas para el pueblo— una remisión de deudas y medidas similares” (II, p. 76) — como razones para un fuerte control ejecutivo. Mason, de manera similar, sostenía que “A pesar de las precauciones tomadas en la Constitución de la Legislatura, ésta se asemejaría tanto a aquélla de los estados individuales, que debería esperarse con frecuencia la aprobación de leyes injustas y perniciosas. Esta medida restrictiva [el veto ejecutivo] era, por lo tanto, esencialmente necesaria”. (II, p. 78). 219 R.H. Strotz, “Myopia and inconsistency in dynamic utility maximization”, en Review of Economic Studies, No. 23, 1955-56, pp. 165180. 77 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … sea en su etapa fundacional o en un proceso de enmienda, es el de que los constituyentes se encuentran invariablemente en un conflicto. Por una parte, la misma naturaleza de una constitución requiere que ellos legislen según el interés de todos y para un futuro indefinido. Por otro lado, también tienen motivos partidistas a corto plazo que les imponen sus electores. Estos últimos motivos serían considerablemente menos importantes si la legislación tuviera lugar bajo un velo artificial de ignorancia creado por un requisito de que las decisiones no entrarán en vigor hasta, digamos, diez años después. Obviamente, la idea es utópica y probablemente indeseable por otras razones. Las exigencias de creación o revisión constitucional tienden a surgir en momentos de crisis en los que la espera es un lujo que no se puede pagar. Inconsistencia en el tiempo provocada por interacción estratégica En años recientes ha emergido una especie de consenso sobre la necesidad de un banco central independiente220 . Aunque la independencia usualmente se provee por estatuto, al menos un país (la República Checa) ha elegido consignarla en la constitución. En otro país (Noruega), la regulación estatutaria permite que el gobierno instruya al Banco, pero requiere que el parlamento sea informado de esto. El requerimiento fue incluido para elevar los costos políticos de la intervención gubernamental en lugar de hacerla más difícil o demorada como en el caso usual. Aunque no hace parte de la constitución, sí estaba pensado como un instrumento de compromiso previo cuasi-constitucional. En otros países, una convención tácita puede proteger el banco de la intervención política. El argumento estándar es que un banco central independiente es un instrumento de compromiso previo para superar la inconsistencia en el tiempo provocada por la interacción estratégica. Me concentraré aquí en la versión del argumento en la que los jugadores principales son el ejecutivo y la central sindical. Supongamos que el ejecutivo puede establecer la tasa de expansión monetaria y, por ende, de inflación. Se ocupa tanto de la tasa de inflación como del nivel de empleo. Supongo por ahora que estas preocupaciones se derivan de su concepción del interés público y no de motivos partidistas o electorales. El sindicato sólo se preocupa por el salario real de sus miembros, que es una función del salario nominal y de la tasa de inflación. Primero, los sindicatos y empleadores negocian sobre los salarios nominales, dadas sus expectativas sobre la tasa de inflación. Luego, el gobierno establece la tasa de expansión monetaria y, por lo tanto, de inflación. Supongamos además que el gobierno (i) anuncia que seguirá una política de cero inflación, (ii) el sindicato y los empleadores creen en el anuncio y acuerdan un salario nominal de acuerdo con él, y (iii) el gobierno se apega a la política anunciada. La tasa de desempleo producida por consiguiente se denomina “tasa natural de desempleo”. Por varias razones, el gobierno puede creer que esta tasa es demasiado alta. Suponiendo (i) y (ii), el gobierno puede decidir entonces generar empleo expandiendo la oferta de dinero, lo que puede llevar a salarios reales menores y mayor empleo. Sin embargo, si el sindicato y los empleadores conocen el objetivo del gobierno, esta política no funcionará. A la expectativa de que el gobierno usará su control discrecional sobre la política monetaria 220 Ver especialmente A. Cukierman, Central Banck Strategy, Credibility and Independence: Theory and Evidence, MIT Press, Cambridge, 1992, fuente principal de lo que sigue. El argumento clave fue presentado por primera vez por F. Kydland y E. Prescott, “Rules rather than discretion: The inconsistency of optimal plans”, en Journal of Political Economy, No. 85, 1977, pp. 473-491. 78 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … para crear más empleos, aquellos ajustarán el salario nominal en un nivel superior para contrarrestar la inflación. Específicamente, fijarán un salario nominal esperando que el gobierno fije la tasa de inflación que sea óptima, dados el salario nominal y sus objetivos. La inflación real y la inflación esperada serán iguales, y la acción del banco central no tendrá efecto sobre el empleo. La tasa de inflación, no obstante, es positiva, en detrimento de todos. Para el gobierno, lo mejor sería hacer un anuncio creíble de inflación cero y luego proceder a inflar; la segunda mejor opción sería hacer un anuncio creíble de inflación cero y luego no proceder a inflar; lo peor es un anuncio creíble, por autocumplido, de una tasa de inflación positiva. Ya que un anuncio de inflación cero nunca es creíble, el gobierno está atascado en el peor escenario. La misma conclusión se obtiene si se examinan otras razones por las cuales el gobierno podría querer expandir la oferta de dinero, como el deseo de ingresos o el deseo de reducir el déficit en la balanza de pagos. Si los constituyentes o legisladores logran comprender este predicamento, pueden responder mediante una política de compromiso previo que puede adoptar dos formas. Por una parte, pueden optar por reglas en vez de la discrecionalidad y escribir normas monetarias específicas directamente en la constitución. Esta opción, no obstante, es indeseable o no factible. Una simple regla mecánica, como el crecimiento cero de la oferta de dinero, aunque sea factible, proveería muy poca flexibilidad para ajustarse a eventos futuros. Inversamente, una regla que tratara de especificar respuestas óptimas a todas las contingencias sería imposiblemente compleja. Por otra parte, pueden encomendarle la discrecionalidad a un banco central independiente en lugar del ejecutivo. Para aumentar la independencia de la dirección del banco y la probabilidad de que ésta tomará las decisiones correctas, se han adoptado algunas medidas. En países con ejecutivo dual, la dirección del banco puede ser nombrada por el presidente y no por el gabinete o el parlamento, sobre el supuesto de que ésta probablemente será más conservadora que activista, esto es, pondrá más el énfasis en la estabilidad de precios que en el empleo. La constitución también puede prohibirle explícitamente al ejecutivo intervenir en el banco. Aun más, es posible constitucionalizar la estabilidad de precios como objetivo del banco. En el espíritu de Schelling, uno puede también tratar de fortalecer el banco despojándolo de algunos de sus poderes. Así, para proteger al banco de la presión informal por parte del ejecutivo, es posible prohibirle explícitamente emprender la financiación del déficit. La creación de bancos centrales independientes ilustra la idea de la separación de poderes como un instrumento de compromiso previo. La separación de poderes, naturalmente, puede servir también a otros propósitos. Puede garantizar la especialización funcional y evitar que una rama del gobierno interfiera indebidamente en las funciones de las demás. Un ejemplo de esta última idea es la asignación al azar de jueces a los casos, para evitar que el ministro de justicia selecciones jueces “confiables” para casos “delicados”. Como lo muestra este ejemplo, la separación de poderes puede servir para proteger el interés público de la interferencia partidista. Un argumento similar puede usarse de hecho para tener un banco central independiente. Si el ejecutivo tiene control directo sobre la política monetaria, puede usar tal instrumento para mejorar sus posibilidades de reelección en lugar de atender el interés público. Pero el 79 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … argumento anterior muestra que la independencia puede ser necesaria incluso si el ejecutivo sólo actúa motivado por consideraciones de interés público. Eficiencia Además de los motivos que vienen del caso individual, el compromiso previo constitucional tiene algunas razones que son específicas para tal caso. En particular, el uso de supermayorías puede justificarse mediante consideraciones de eficiencia —y de valores estrechamente relacionados con ésta tales como la estabilidad y la consistencia agregada— que no tienen un equivalente en el caso individual. Creo, de hecho, que tales argumentos para las supermayorías son más fuertes —al menos en el sentido funcional, si no necesariamente en el explicativo— que aquellos relacionados con la protección de las minorías. Las minorías étnicas, religiosas, lingüísticas y otras, parecerían merecer absoluta protección bajo la forma de provisiones no reformables, más que la protección más débil que ofrecen las supermayorías. La estabilidad es un valor en sí mismo. Dentro de ciertos límites, es más importante tener alguna constitución que no esté a merced de las mayorías fluctuantes que no tener ninguna constitución en particular. La planeación y la inversión por parte de los individuos tendrá un horizonte temporal más largo y dará más frutos si pueden estar razonablemente seguros de que se mantendrán ciertos derechos básicos. Los partidos políticos pueden también operar con mayor eficiencia si pueden suponer que hay un marco de elecciones e instituciones dado. Por supuesto, uno podría negar que lo que es bueno para los partidos políticos existentes es también bueno para la sociedad. En Estados Unidos, por ejemplo, un remezón profundo del sistema político podría permitir la emergencia de nuevas fuerzas políticas y el aumento de la participación política por encima de su triste nivel. Aunque esto puede ser cierto, no hay razón para creer que un sistema en constante cambio tendría estos efectos benéficos. Probablemente, en mi opinión, induciría a la fatiga y a la anarquía. Richard Posner ha observado que las supermayorías también son útiles para reducir los costos de transacción. Las votaciones de mayoría simple tienden a estimular la búsqueda de ganancias. Si la votación de una mayoría simple pudiera cambiar la forma básica de gobierno o expropiar la riqueza de una minoría, se dedicarían enormes recursos a buscar y a resistir dicha legislación221 . Nótese que esta afirmación sugiere o presupone que existe una diferencia sistemática y sustancial en el potencial de búsqueda de la gananc ia entre los asuntos constitucionales y aquellos que son materia de legislación ordinaria. Que yo sepa, esta afirmación no puede probarse. En cualquier caso, parece claro que, si es válida, la afirmación pertenece al modo funcional de análisis, más que al modo explicativo. Esto es aun más cierto para el siguiente argumento a favor de la eficiencia. Sabemos, por la paradoja de Condorcet y por el teorema de Arrow, que con una votación por mayoría simple pueden surgir mayorías cíclicas. Esta inconsistencia agregada, aunque es diferente de la inconsistencia en el tiempo, no es menos indeseable por sus efectos subversivos sobre la estabilidad. Se ha demostrado que si imponemos unas restricciones relativamente débiles a las combinaciones admisibles de preferencias individuales, una regla de mayoría del 64% garantiza que las preferencias sociales nunca serán 221 R. Posner, “The constitution as an economic document”, en George Washington Law Review, No. 56, 1987, p. 9. 80 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … cíclicas 222 . Podrían, sin embargo, ser incompletas en muchos casos, si ninguna propuesta puede lograr la mayoría requerida 223 . En la legislación ordinaria sin statu quo —v.g. la votación del presupuesto anual—, este problema sería muy grave. En el contexto constitucional, con un statu quo bien definido, la incompletitud es menos problemática. En resumen, hemos visto que en el contexto constitucional, el compromiso previo sirve para contrarrestar la pasión, la inconsistencia en el tiempo (ambas formas), y la ineficiencia. De éstas, todas con excepción de la última tienen analogías individuales. Los principales instrumentos usados para lograr tales objetivos son las demoras, las supermayorías (un caso limitante de éstas son las provisiones constitucionales no reformables) y la separació n de poderes. De éstos, sólo las demoras tienen una analogía en el caso individual. V. OBSTÁCULOS Y OBJECIONES A LOS problemas. En primer lugar, puede no existir ninguna tecnología con las propiedades requeridas. Las personas que se enfurecen con facilidad podrían decidir establecer un compromiso previo contra esta tendencia, pero no es claro qué podría funcionar para este efecto. No pueden mantenerse apartadas de todas las situaciones que podrían provocarlas. Tampoco ayuda definir fuertes incentivos adicionales que podrían contrarrestar la emoción. Como se ha mostrado en trabajos neurofisiológicos recientes, algunas reacciones emocionales no pasan por la parte pensante del cerebro 224 . En segundo lugar, aun si existe una tecnología de compromiso previo que sí funcione, al menos con alguna probabilidad, su uso podría implicar costos mayores que los beneficios esperados. En términos de la figura 1, un agente racional no se comprometerá previamente si los costos de hacerlo exceden la diferencia (señalada con una línea gruesa en la figura 1) entre el valor presente de la recompensa mayor y aquél de la recompensa menor. En términos de la figura 2, consideremos primero el caso de las amenazas. Eva no elegirá comprometerse previamente si los costos de hacerlo exceden (a-c). Consideremos en seguida el caso de las promesas, en el que ambas partes ganarían con el compromiso previo de Eva, siendo la ganancia de Adán 1 y la de Eva (a-d). Si Eva asume todo el costo x del compromiso previo y (a-d) < x < (a-d+1), no se comprometerá previamente. El compromiso previo, aunque beneficioso en el conjunto, es irracional individualmente. Si Adán contribuye a que el compromiso previo le convenga a ella, Eva simplemente se apoderará del dinero y evitará comprome terse previamente. Cualquier promesa por parte de Adán de contribuir COMPROMISOS PREVIOS El compromiso previo, aun cuando es deseable, puede no ser factible; cuando es factible, puede no ser deseable. Ilustraré tales proposiciones con ejemplos del compromiso previo individual y constitucional. El caso individual El compromiso previo requiere una tecnología apropiada. Involucra una acción individual sobre el entorno externo de tal manera que a su vez éste restrinja las acciones futuras del individuo. El entorno relevante puede consistir en otras personas y sus acciones, pero también puede ser un simple objeto o sistema físico como Antabuse o un seguro con un dispositivo de demora. La confianza en una tecnología da lugar a varios 222 A. Caplin y B. Nalebuff, “On 64% majority rule”, en Econometrica, No. 56, 1988, pp. 787814. 223 Debo esta observación a Aanund Hylland. 224 Notablemente el trabajo de Joseph le Doux, como se resume en D. Goleman, Emotional Intelligence, Bantam, Nueva York, 1995. 81 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … después de que Eva cumpla su promesa no sería creíble —a menos de que él pueda apelar a una tecnología de compromiso previo suficientemente barata. En tercer lugar, un agente racional podría abstenerse de un compromiso previo si el instrumento involucrado es demasiado rígido. Consideremos a una persona que contempla un tratamiento hospitalario voluntario pero irreversible para un problema de drogas. Puede decidir libremente someterse o no al tratamiento, pero una vez haya entrado no puede salir antes de tres semanas. (Esta opción existía en Noruega.) Si la persona cree que podrían surgir problemas urgentes en su trabajo durante este período, quizás no quiera correr el riesgo de no poder enfrentarlos, sabiendo que el cínico personal del hospital será sordo a sus súplicas de que ésta es una excepción genuina y no una excusa para consentir su hábito. El caso constitucional Un dictador, no menos que un gobierno democrático, podría querer atarse a sí mismo mediante una constitución. Podría, por ejemplo, tener la intención de comprometerse previamente a una política, por un término fijo, que creara un ambiente conducente al crecimiento económico sostenido. Un ejemplo es el de China en los ochenta. Cuando la agricultura china fue liberalizada y se permitió el desarrollo de la propiedad privada de la tierra, los agricultores no podían saber si este estado duraría y si se les permitiría conservar sus ganancias. En consecuencia, se acortó su horizonte temporal y con frecuencia prefirieron usar sus ganancias para consumo suntuario en lugar de reinvertirlos en la agricultura. Los líderes chinos quizás hayan querido comprometerse previamente a una política de no intervención, pero no había forma de hacer creíble tal compromiso. Dado que tenían todo el poder, eran incapaces de inhabilitarse a sí mismos para interferir 225 . Como se anotó antes, el compromiso previo efectivo puede requerir una separación de poderes que por definición no puede obtenerse en una dictadura 226 . Supongamos, sin embargo, que existe la tecnología. Aunque, como se anotó antes, el problema de los costos excesivos no surge en este caso, la asamblea constituyente podría aún evitar ciertos actos de compromiso previo debido a los peligros de la rigidez excesiva. Como dicen los abogados constitucionalistas, la constitución no es un pacto suicida227 . En la Convención Federal de Philadelphia, por ejemplo, George Madison observaba que “Aunque le tenía un odio mortal al papel moneda, como no podía prever todas las emergencias, no estaba dispuesto a atar las manos de la Legislatura. Observó que la última guerra podría no haberse llevado a cabo si hubiera existido tal 225 Elster, Solomonic…, p. 199. Ésta es también una parte central de la historia narrada por Douglass North y Barry Weingast (“Constitutions and commitment: The evolution of institutions governing public choice in seventeenth-century England”, en Journal of Economic History, No. 49, 1989, pp. 803-832), en su reconstrucción de la economía política inglesa del siglo XVII. Después de la gloriosa revolución, la “amenaza de remoción [que fue hecha creíble por la Revolución de 1648] limitó al capacidad de la Corona para ignorar” al parlamento (p. 817). Al mismo tiempo, “la creación de un aparato judicial políticamente independiente expandió enormemente la capacidad del gobierno para prometer el cumplimiento de sus acuerdos, esto es, para atarse a sí mismo” (p. 819). Finalmente, “al crear un equilibrio entre el Parlamento y la monarquía —en lugar de eliminar a esta última como ocurrió luego de la Guerra Civil— los intereses parlamentarios garantizaron límites sobre sus propias tendencias hacia la acción arbitraria” (p. 829). La afirmación final es similar a la de Lally-Tolendal citada en la nota 6, y puede estar abierta a objeciones similares. 227 Paráfrasis del salvamento del Juez Robert Jackson en Terminiello vs. City of Chicago, 337 U.S. 1, 37 (1949). 226 82 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … prohibición”228 . De manera similar, cuando en 1946 el parlamento italiano decidió en contra de constitucionalizar la estabilidad de la moneda, una de las objeciones se refería a la necesidad de que el gobierno estuviera en libertad de actuar en tiempo de guerra 229 . En tiempos de guerra, apelar a poderes de emergencia enumerados en muchas constituciones puede ser suficiente para evitar que se lleve a cabo el pacto suicida. Es posible imaginar, sin embargo, golpes repentinos a la economía que no son emergencias en este sentido y no obstante son lo suficientemente grandes para que una adhesión rígida a una política monetaria tenga un impacto desastroso sobre el empleo. Como se anotó antes, la sociedad puede estar en una mejor situación teniendo una política monetaria encomendada a la discrecionalidad de la dirección de un banco central la cual, aunque se ocupe principalmente de la estabilidad de precios, también tenga algún juego en materia de empleo. La constitución podría restringirla al poner énfasis en el objetivo de la estabilidad de precios, pero no hasta el punto de convertirla en mera ejecutora de una política preestablecida. Pero, una vez más, existe un riesgo: la dirección del banco podría llegar a tener principios inesperada y desastrosamente rígidos, o tal vez estar más preocupada por su reputación entre otras direcciones de bancos centrales que por el bienestar de la sociedad. Un remedio contra este peligro podría ser una disposición constitucio nal que permita que una supermayoría en la legislatura deponga a la dirección del banco. La separación de poderes utilizada como instrumento de compromiso previo requiere ser aumentada mediante controles y equilibrios. Surge un problema diferente cuando la necesidad de compromiso previo entra en conflicto con el deseo de compromiso previo. Por una parte, uno puede estar de acuerdo con Cass Sunstein en que “las provisiones constitucionales deberían estar diseñadas para enfrentar precisamente aquellos aspectos de la cultura y tradición de un país que tienden a producir daño en sus procesos políticos”230 , como el prejuicio étnico o religioso. Por otra parte, tales provisiones tienen pocas posibilidades de adoptarse, debido precisamente a que la cultura y la tradición operan contra ellas. Como lo observaron Przeworski y Limongi, “los abogados del compromiso […] no consideran los procesos políticos mediante los cuales se establecen tales compromisos”231 . Dados los fuertes sentimientos contra los turcos que hay en Bulgaria, por ejemplo, sería en realidad deseable tener escrita en la constitución una fuerte protección a las minorías étnicas. No obstante, dado que la mayoría en la asamblea constituyente también alberga dichos sentimientos, la constitución búlgara de 1991 contiene la más débil protección de los derechos de las minorías que existe entre las nuevas constituciones de Europa del Este. Uno puede esperar que los artífices de la constitución se comprometan previamente contra pasiones repentinas, pero no contra pasiones e intereses permanentes. 230 C. Sunstein, “Constitutionalism, prosperity, democracy”, en Constitutional Political Economy, No. 2, 1991, p. 385. 231 A. Przeworski y F. Limongi, “Political regimes and economic growth”, en Journal of Economic Perspectives, No. 7, 1993, p. 66. Existen argumentos similares en F. Gunter, “Thomas Jefferson on the repudiation of public debt”, en Contitutional Political Economy, No. 2, 1991, p. 285; y Posner op. cit., p. 10. 228 I, p. 309. F. Spinelli y D. Masciandaro, “Towards monetary constitutionalism in Italy”, en Constitutional Political Economy, No. 4, 1993, p. 217. 229 83 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … El hecho de que la constitución búlgara sí asegure cierta protección para los derechos de las minorías se debe en gran parte a la presión del Consejo de Europa. Agentes externos con capacidad de influencia sobre el proceso de creación de las constituciones pueden, en efecto, tratar de proteger a un país de sí mismo. En la confección de la constitución de Alemania Occidental de 1949, por ejemplo, las potencias occidentales de ocupación trataron de forzar en el país una estructura descentralizada que evitaría la reemergencia del nacionalismo alemán232 . Con mayor drasticidad aun, la constitución japonesa de 1946 fue escrita en su totalidad por las fuerzas de ocupación norteamericanas. De manera similar, una minoría que haga una constitución puede tratar de proteger a la mayoría de los intereses y pasiones permanentes que animan a esta última. Esta fue una autointerpretación dominante entre los constituyentes norteamericanos, aunque ésta debe enfrentarse a la opinión alternativa de que la minoría simplemente se estaba protegiendo de la mayoría. Sin embargo, éstos no son casos de autocompromiso. Son más bien ejemplos de la tendencia perenne de los políticos a tratar de abrirse paso atando a los demás, independ ientemente de que resulten beneficiados quienes quedan atados. No obstante, no puedo coincidir con Przeworski y Limongi cuando aducen este argumento en contra del compromiso previo, en general, y en contra del compromiso previo discrecional, en particular. Ellos sostienen que “las mismas fuerzas que empujan al estado a intervenciones discrecionales subóptimas, también empujan al estado a un compromiso subóptimo”. Pero esto no puede ser correcto: como hemos visto, un estado puede ser “empujado” a intervencio nes discrecionales subóptimas incluso cuando quienes confeccionan políticas están preocupados exclusivamente por el bienestar de la sociedad. Por cierto, las intervenciones discrecionales, tales como subsidios a industrias en problemas, son con frecuencia resultado de presiones políticas e intenciones de reelección. Sin embargo, esta situación no es necesaria para que se produzca un resultado subóptimo. La falta de tecnología para crear un compromiso vinculante creíble puede arrojar el mismo resultado. VI. CONCLUSIÓN El compromiso previo es una instancia de la idea general de que menos puede ser más. Al atarse uno sus propias manos o quemar sus propios puentes, es posible lograr un mejor resultado, juzgado según los propios estándares, que si uno tiene total libertad de acción. Otra instancia de la misma idea es que la ignorancia puede ser la dicha. Saber más puede empeorar, en lugar de mejorar, las cosas. Por supuesto, uno no puede normalmente descartar información que se tenga, pero es posible abstenerse de adquirir información que podría provocar sufrimiento sin sentido o llevarlo a uno a actuar de forma indeseable. Estos dos mecanismos puede interactuar. Así, hace algunos años, había voces en el gobierno noruego que se oponían a la exploración de petróleo al norte de los 62 grados de latitud. En contra de aquellos que sostenían que eso no podía causar daño alguno y podría ser útil para saber si había o no petróleo en dicha región, tales críticos replicaban que si se hallaba petróleo ahí, sería una presión irresistible sobre los políticos para que empezaran inmediatamente la explotación. Los críticos fueron vencidos, y demostraron estar en lo cierto. Posteriormente, uno 232 J.F. Golay, The Founding of the Federal Republic of Germany, University of Chicago Press, Chicago, 1958, p. 5. 84 DEMOCRACIA ULISES REVISITADO … de los partidos políticos noruegos propuso una enmienda constitucional para garantizar que los ingresos por el petróleo por encima de cierto nivel fueran reservados para el pago futuro de las pensiones. Una vez más, quienes pretendían el compromiso previo fueron derrotados. Su motivo proclamado, claro, era garantizar el bienestar de las generaciones futuras. Un motivo más importante fue hacer una oferta por los votos de los de mayor edad. Como lo muestra este último episodio, las demandas de compromiso previo no tienen que representar un deseo tan loable como proteger a la sociedad de sí misma. De hecho, la sociedad no es un actor unitario que pueda comprometerse previamente a sí “mismo”. Tampoco un individuo es un actor unitario en el sentido pleno del término. En efecto, muchos actos individuales de compromiso previo se llevan a cabo debido a que el individuo está en cierto sentido dividido, y una parte del ser quiere protegerse de otra. Aun cuando el individuo no es unitario, hay una parte que gobierna y que puede comprometerse en una planeación a largo plazo para restringir las tendencias a la acción miope de las otras partes. La razón por la que las sociedades no son unitarias es muy diferente. Están conformadas por muchos individuos, ninguno de los cuales, o ningún subconjunto de los cuales, es el que “gobierna”. En los siglos anteriores, la élite educada tendía a pensarse como gobernante, asumiendo la tarea de restringir y refrenar las pasiones de la mayoría. En las sociedades contemporáneas, esta analogía del compromiso individual ha perdido cualquier fuerza que hubiera podido tener. Una vez que las líneas divisorias dentro de la sociedad se ven horizontales y no verticales, la idea del compromiso previo constitucional aparece bajo una luz diferente. Ningún grupo tiene un derecho inherente a representar el interés a largo plazo de todos. Los reclamos manifiestos en este sentido son usualmente oportunistas e hipócritas. La implicación es que el motivo más importante que hay tras el compromiso previo individual — restringir la pasión y el impulso— es el menos importante del compromiso previo constitucional. La necesidad de estabilidad es una consideración primordial. La necesidad de vencer la inconsistencia en el tiempo, aunque secundaria, puede ser también una consideración importante. 85 DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR … FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR Y PROCESO DE PAZ ANÁLISIS POLÍTICO: En los procesos de paz en El Salvador y en Guatemala, la participación de las Fuerzas Armadas en la mesa de negociación fue determinante para su éxito. ¿Es conveniente o no la participación de los mandos militares en el proceso de paz en Colombia? Ana Teresa Bernal, Álvaro Valencia Tovar, Francisco Leal Buitrago ¿Deben o no participar las Fuerzas Armadas en los procesos de negociación con el movimiento insurgente? Desde que se iniciaron los procesos de paz en el país, hace ya más de una década, esta inquietud ha estado rondando en el ambiente y la cúpula militar ha mostrado siempre una actitud negativa. Su argumento central es que las negociaciones de paz son un asunto de carácter político y no específicamente militar y que, por tanto, le corresponde a las autoridades civiles llevarlas a cabo. ANA TERESA BERNAL: La formulación de la pregunta induce ya una respuesta afirmativa. Desde luego, si en esos dos países centroamericanos la participación de las Fuerzas Armadas en la negociación fue un factor exitoso, lo más natural es que consideremos altamente conveniente un hecho semejante para Colombia. Los mandos militares no sólo podrían sino que deberían participar en nuestro proceso de paz. Sin embargo, en experiencias recientes tanto en El Salvador como en Guatemala, la participación de las Fuerzas Militares ha sido determinante para el éxito de sus procesos de paz. La cuestión militar constituye uno de los ejes centrales de todo proceso de negociación; el papel de los órganos castrenses en el período del posconflicto, sus doctrinas e hipótesis de guerra, la reforma de la Policía, la incorporación de los excombatientes de la guerrilla en las Fuerzas Militares, etc. Por ello, para muchos observadores, es central que las Fuerzas Armadas participen en unas discusiones que puedan determinar su futuro institucional y no que guarden el sentimiento de que se está negociando "a sus espaldas". Para responder a estos interrogantes Análisis Político ha invitado a tres expertos sobre el terna. Ana Teresa Bernal, directora de Redepaz, Red de Iniciativas por la Paz, el general (r) Álvaro Valencia Tovar y Francisco Leal Buitrago, decano de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas de la Universidad de los Andes. Ahora bien, entre nosotros, las Fuerzas Armadas han establecido una especie de cerco que las separa de la sociedad civil. Seguramente esto ha ocurrido así por la fuerza de la necesidad, sobre todo en períodos de guerra más o menos intensa como los que vivimos desde hace bastante tiempo. La existencia de un enemigo interno que se camufla entre la població n civil no ofrece ciertamente garantías para una política de apertura y de confianza entre unas Fuerzas Armadas que, no obstante representar legítimamente al conjunto de la sociedad, encuentran en ella un sector que cuestiona esa legitimidad, y una sociedad civil que asiste al enfrentamiento dividida entre la distancia autoprotectora y el compromiso debido. Sin embargo, de manera paradójica, la señalada separación entre las Fuerzas Armadas y la sociedad civil no favorece aquella relación de confianza que debería predominar entre ellas. Un factor adicional que aumenta esa distancia es el reconocido carácter no 86 DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR … deliberante de nuestras Fuerzas Armadas. Se conocen los pros y los contras de este hecho, pero no es posible eludir la impresión de que, en determinadas circunstancias como las de un enfrentamiento bélico prolongado y sin horizonte definido, quienes ponen los muertos en el cuerpo a cuerpo de cada día, estarían, como ninguno, interesados en una solución favorable y duradera. Sentadas nuestras Fuerzas Armadas en una mesa de negociación, no sería propiamente su carácter no deliberante lo que sufriría mengua. En cambio, ganaría en realismo y en propiedad un diálogo que fuera más allá de la legítima pero quizás insuficiente representación de los mandos militares en su jefe supremo, el Presidente de la República. reediten las de los últimos diá logos a partir de 1982. Para las instituciones armadas y su futuro dentro del nuevo orden que pueda emerger de unas negociaciones de paz exitosas, la presencia y participación activa del estamento militar contribuiría a que el papel de la Fuerza Pública corresponda a las necesidades de la defensa nacional ante contingencias que en el pasado representaron pérdidas territoriales, humillaciones y menoscabo a la soberanía y al honor nacional que de ninguna manera podrán repetirse. Podría pensarse que durante las etapas iniciales de las negociaciones el estamento militar estuviese representado por oficiales de alta graduación en retiro, suficientemente compenetrados con el pensamiento castrense como para ser sus leales intérpretes, en tanto oficiales en actividad podrían actuar como asesores de los negociadores acreditados por el Gobierno. Una vez se hayan alcanzado niveles de seguridad y comprometimiento de la insurgencia en la negocia ción, el alto mando debería entrar en forma directa al proceso. Es muy posible que, superados los primeros escollos previsibles en la falta de una tradición de conversaciones directas con miembros de las Fuerzas Armadas, se logre crear el clima de confianza necesario para el avance hacia la negociación. ÁLVARO VALENCIA TOVAR : Dadas las profundas diferencias entre los procesos de paz de las naciones centroamericanas y Colombia, las experiencias de El Salvador y Guatemala deben adaptarse a nuestra situación, afectada por factores y circunstancias que allá no se contemplaron. La participación en las mesas de negociación de miembros de las Fuerzas Armadas en actividad, conveniente y necesaria como es, deberá estar condicionada a la seriedad del proceso y a la verificación de que la paz ha pasado a ser un objetivo de la subversión y no una etapa de la lucha revolucionaria prolongada como hasta el presente lo ha sido. No podrían someterse los mandos de institucio nes profesionales como son las nuestras a una posible burla en el caso de que se FRANCISCO LEAL BUITRAGO: Creo que es conveniente la participación directa del estamento militar en un proceso de paz en el país, no sólo por las experiencias positivas que sobre el particular hubo en El Salvador y Gua temala, sino también por las características del conflicto armado en Colombia. Acerca de esas características, cabe destacar lo prolongada que ha sido la confrontación armada y el hecho de que las autoridades civiles abandonaran desde un inicio su responsabilidad en la formulación de directrices políticas y estratégicas para orientar las acciones militares. Entre numerosas consecuencias negativas, estos factores 87 DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR … contribuyeron a aislar a los sectores castrenses de contextos sociales importantes, a radicalizar en extremo su visión del conflicto, a personalizar al "enemigo", a improvisar en aspectos sustantivos y a desconfiar de la clase dirigente. Además de otras bondades, el solo papel pedagógico que implicaría esa participación militar sería suficiente para justificarla. en cambio, de manera dramática y dolorosa es el ya de por sí elevado costo en vidas humanas irremplaza bles, y la posibilidad de una prolonga ción casi ad infinitum de la guerra. Nosotros no podemos ver la guerra con la frialdad del analista o del jefe militar que, como en una partida de ajedrez, hacen cálculos de pérdidas y ganancias con unas fichas llamadas "hombres". Con toda su carga de ridiculización, es preferible que nos llamen "almas candorosas" por no estar dispuestas a entrar en la lógica desalmada del Moloch de la guerra que se fortale ce con más y más sacrificios humanos. Como civiles desarmados y pacifistas, y a la vuelta de uno de los siglos más desgarradoramente inhumanos de toda la historia, creemos que no queda ya una sola causa verdaderamente no ble que necesite el sacrificio siquiera del menos noble de los hombres (por fortuna las mujeres les llevamos en esto una notable ventaja). ANÁLISIS POLÍTICO: Actualmente se halla en curso una reforma interna de la institución tendiente a mejorar su capacidad operativa en la guerra de contrainsurgencia. Este cambio ¿es favorable o desfavorable para alcanzar la paz? ANA TERESA BERNAL: Para mí, no cabe la menor duda de que el desbordamiento de la violencia en una sociedad está directamente relacionado con la pérdida o la inexistencia del monopolio efectivo de la fuerza en manos de un Estado legítimo. En ese sentido, si mejorar la capacidad operativa de la institución armada para la guerra de contrainsurgencia tuviera un efecto claro en la recuperación del monopolio estatal de la fuerza, esto sería favo rable para la pacificación del país. De todas maneras, el cese del enfrentamiento armado no podrá ocurrir hasta tanto no exista un acuerdo en esa dirección y los distintos actores armados reconozcan y concedan una nueva legitimidad a ese monopolio. ¿Será un voluntarismo ciego e ingenuo poner el dedo en la llaga de la responsabilidad y la culpabilidad de los seres humanos que conformamos estas sociedades, en la prolongación o en el cese de la guerra? ¿Estamos determinados por fatalidades históricas a consumirnos en una horrenda cadena de matanzas, o es posible apelar a esa potencia desconocida que es la voluntad humana? ÁLVARO VALENCIA TOVAR : La reforma militar es urgencia inaplazable, cualquiera que sea el futuro de la paz o de la confrontación. No se trata de un simple cambio interno "tendiente a mejorar su capacidad operativa en la guerra de contrainsurgencia", como lo expresa la pregunta, sino de una transformación trascendental en todos los órdenes de su existencia profesional, frente a la cual los vocablos de reforma y cambio resultan insuficientes. Una Lo que desde nuestra óptica ciudadana es cuestionable y se nos muestra lleno de inquietudes es que el sólo incremento de la capacidad operativa de las Fuerzas Armadas -que por lo demás se está haciendo todo el tiempo con inmensos costos para el precario tesoro público-, no garantiza ni una victoria más rápida ni un aumento significativo de su poder disuasivo sobre el adversario. Lo que se incrementa, 88 DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR … transformación de este tipo de ninguna manera podría resultar desfavorable para la paz, porque ésta deberá formar parte de su nuevo panorama intelectual y de la revaluación de su papel dentro de la realidad nacional, sea que se llegue o no a la paz tan ansiada por el pueblo colombiano y por las mismas Fuerzas Militares. convalecencia, a la cual podrá y deberá contribuir en forma decisiva, particularmente en los sectores rurales desquiciados por la confrontación armada. Y si la guerra ha de prolongarse, deberá adecuarse a sus nuevas y dramáticas perspectivas, frente a una insurgencia crecida por el poder económico y el correspondiente incremento de su capacidad de combate. Los ejércitos, como todas las organizaciones humanas pero de manera más acentuada por su carácter y su función, sufren periodos de estancamiento que según su profundidad pueden traducirse en decadencia. El nuestro no ha sido una excepción, pero históricamente siempre ha hallado dentro de sí mismo las energías renovadoras para superar sus propias crisis. Confronta en la hora actual lo que podría definirse como el Cuarto Momento Militar del Siglo XX. El primero se registró bajo el gobierno del general Rafael Reyes a comienzos de esta centuria, cuando fue preciso sacudirse de la postración en que lo dejaron las guerras civiles que lo politizaron y convirtieron en hueste desmoralizada aunque valerosa, como lo demostró en el campo de combate. El segundo ocurrió cuando en el Conflicto Amazónico de 1932-34 reveló su incapacidad para enfrentar una agresión externa. El tercero, a comienzos del decenio de los sesenta, a la salida de la violencia bipartidista que lo comprometió contra su voluntad en una reyerta sectaria que minó gravemente su contextura profesional, hasta convertirlo en alternativa de gobierno contrariamente a su tradición y su carácter. El cuarto lo vive en la encrucijada actual, cualquiera sea su desenvolvimiento hacia la paz o la continuación del conflicto armado. Ambas estrategias requerirán cambios profundos en su mentalidad, su liderazgo, su doctrina, su filosofía, sus procedimientos tácticos, sus relaciones con la sociedad rural y urbana. El sentido de la transformación propuesta debe contemplar como prioridad los órdenes morales, afectados por las desfavorables circunstancias que han rodeado su quehacer en el presente decenio y por los golpes adversos sufridos a manos de una guerrilla que en breve tiempo desbordó los parámetros de la lucha irregular, para adquirir la capacidad de atacar bases militares mediante concentración de fuerzas numéricamente superiores y mejor armadas que el mismo Ejército. Una transformación de esta naturaleza, cuyo propósito debe ser llevar las cosas a un plano más elevado mediante la vigorización de la esencia espiritual de sus valores históricos, resultará válida ante cualquiera de las dos hipótesis contempladas hacia el futuro. Alcanzar la paz o enfrentar esta nueva fase del conflicto armado. Y no tiene por qué afectar desfavorablemente la búsqueda de la paz. Por el contrario, deberá contemplar como la hipótesis de más favorable realización la de alcanzar ese objetivo y por consiguiente preparar el Ejército para su logro. Los altos mandos actuales lo aceptan así. Se impone el diseño de una doble estrategia ante esas dos eventualidades. Si se alcanza la paz, su papel deberá rediseñarse para un país en prolongada FRANCISCO LEAL BUITRAGO: No tengo dudas sobre la conveniencia de adelantar cambios en las 89 DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR … instituciones militares, tendientes a mejorar su capacidad operativa en la guerra de contrainsurgencia. El monopolio legítimo de la fuerza constituye una función central en el Estado moderno y para ello se requiere la eficiencia de los orga nismos establecidos para garantizarla. Y esa eficiencia se mide por los resultados en el cumplimiento del objetivo y no por la dureza y la prolongación de la represión. Por eso se requiere una combinación adecuada de manejo político -que no ha existido o no ha sido apropiado- y una gran capacidad técnica y operativa -que tampoco se ha dado-. Esta combinación óptima debe cumplir un papel ante todo preventivo y disuasivo. eventuales asesorías extranjeras requerirían necesariamente de análisis nacionales y sobre todo de decisiones políticas autónomas del país. ANÁLISIS POLÍTICO: Recientemente en un foro organizado por El Tiempo, el general Fernando Tapias afirmó que "la paz no fracasará por interferencia nuestra". ¿Ve usted un cambio cualitativo en la actitud y el papel de las Fuerzas Armadas en los procesos de paz por venir o espera que haya continuidad en relación con las políticas anteriores? ANA TERESA BERNAL: Con la sola información que puede reunir una lectora apresurada de los diarios y de las publicaciones especializadas, pero con la irredenta confianza de quien sólo sabe esperar lo mejor para su país, diría que sí, que sí empieza a vislumbrarse un cambio de actitud frente a los procesos de paz en quienes dirigen las Fuerzas Armadas. Hay que creerle al general Tapias porque es la única manera de que pueda demostrarlo. Además, se puede encontrar más de un motivo para su sinceridad, como la lealtad que le debe al Presidente de la República en el inicio mismo de un nuevo gobierno. Todo está por verse, pero la disciplina con que los mandos militares parecen estar asumiendo la orden de despeje de la zona de distensión en los Llanos es un signo interesante de buena voluntad frente a un proceso tan lleno de preguntas. Lo que está por fuera de toda discusión es que sin el respaldo de las Fuerzas Armadas ninguna política de paz llegará a feliz puerto. En el caso concreto del conflicto armado del país, es conveniente que el Ejército adquiera una mayor capacidad operativa que se refleje en una mayor eficacia, para que, combinada con las medidas propiamente políticas de un proceso de paz, produzca resultados importantes, como la disuasión, la reducción del tiempo de la confrontación que aparece como muy prolongado hacia el futuro- y la aceptación por parte de los militares de estar dispuestos a cambiar, bien para la guerra o bien para la paz. No obstante, el problema radica en que no creo que las instituciones militares tengan la capacidad de reformarse por sí solas en lo que es fundamental. En otras palabras, me atrevería a plantear como hipótesis que cualquier reforma que se esté gestando no va a corregir más que aspectos tácticos y posiblemente técnicos -ambos necesarios pero no suficientes- y que una reestructuración profunda de orden estratégico requeriría necesariamente de aportes externos a la institución, no sólo militares sino también políticos y no sólo nacionales sino también internacionales. Pero unas No hay que negar por otra parte el gran repunte en credibilidad pública y en la eficacia de su trabajo, dado por la Policía Nacional. Hoy se le ve remozada, y no es difícil encontrar entre sus viejos detractores a entusiastas par- 90 DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR … tidarios de hacer alianzas con ella para la búsqueda de la paz. La lección que se desprende de todo esto es que, en efecto, la ciudadanía no está en la orilla opuesta de las instituciones armadas más que cuando éstas han perdido su capital de confianza por la insistencia en conductas lesivas del tejido social. entrar a "conversar" debió de existir un desacuerdo del mando militar por cuanto, sin reciprocidad alguna, se entregó un espacio estratégico que ha costado mucho conservar. Sin embargo, ese muy probable desacuerdo no trascendió al público por cuanto los comandantes militares acatan la autoridad presidencial y su fundamento en la Constitución. Más que un fortalecimiento de su estructura y medios -esto también-, la modernización de nuestros cuerpos armados pasa por el más firme respeto de los derechos humanos de los asociados. Si consideramos que el derecho a la paz es el gran derecho síntesis de cada individuo y de toda la sociedad, siendo además un derecho de rango constitucional, por si hiciera falta, el respaldo decidido de las Fuerzas Armadas a los procesos de paz será la mejor prueba de un cambio profundo de actitud. En el cuatrienio precedente, los desacuerdos salían a la luz como en el caso del despeje del municipio de Uribe, anunciado por el Presidente de la República en un discurso improvisado durante una visita a los Llanos Orientales, en forma que no correspondía a una política predeterminada ni, como en el caso actual, a un proceso de paz en curso. Cuando un oficio escrito por el Comandante del Ejército a su superior inmediato, el Comandante General de las Fuerzas Militares, en el que le exponía las consecuencias que ocasionaría la inconsulta medida, se conoció por los medios de comunicación, quedó planteada una discrepancia que prácticamente subsistió por el resto del periodo presidencial. El apoyo editorial que los principales medios de comunicación brindaron al Comandante del Ejército, hizo imposible su destitución pero falseó la autoridad presidencial. El contraste con la situación actual es evidente. ÁLVARO VALENCIA TOVAR : De aceptar la validez de la tesis precedente, la declaración del general Fernando Tapias, Comandante General de las Fuerzas Militares, en el sentido de que "la paz no fracasará por interferencia nuestra" es parte consecuencial de la transformación en marcha, que demanda nue vas actitudes ante la dinámica de los fenómenos en vertiginoso desarrollo. Puede apreciarse en la conducta pública de los altos mandos actuales la aceptación de las políticas del Gobierno Nacional en todo lo referente al proceso de paz, lo que no implica necesariamente acuerdo con éstas. Lo que viene ocurriendo es que el mando militar, consciente de la subordinación debida al poder civil, reduce sus discrepancias de criterios al ámbito discreto y reservado de la discusión de Estado. Es inocultable que en el caso del despeje unilateral de cinco municipios como simple prerrequisito para Quizá lo anterior no indique la evidencia de "un cambio cualitativo en la actitud y el papel de las Fuerzas Armadas en los procesos de paz por venir" como lo sugiere la pregunta, sino la aceptación de que existen modificaciones profundas en las circunstancias del país, en la relación estamento militarGobierno y en la voluntad de paz de la nación, expresada caudalosamente en las urnas. En consecuencia, la expresión del general Tapias seguirá teniendo validez, pero no en todos los casos por 91 DEBATE FUERZAS ARMADAS, REFORMA MILITAR … acuerdo con las políticas gubernamentales sino por disciplina institucional. FRANCISCO LEAL BUITRAGO: El cambio operado en la actitud de las Fuerzas Militares en este aspecto ha sido sustancial. Basta recordar que quizás el principal obstáculo que se presentó en los distintos ensayos gubernamentales del pasado para buscar la paz fue la actitud negativa de los militares y tras ella sus acciones principalmente encubiertas. En cuanto a un cambio en el papel de las Fuerzas Militares, falta ver aún si lo habrá. Pensaría que un cambio en este asunto depende mucho de la orientación política que se les brinde y en lo acertado que ella sea. Dadas las condiciones actuales del conflicto, las autoridades civiles y la clase dirigente si es que aparece de manera efectiva- no tienen el derecho a cometer errores crasos, como en el pasado. El problema de fondo en estos dos aspectos -actitud y papel- radica en el margen de tiempo que haya disponible para que el Ejército mantenga su actitud "sumisa" y eventualmente en la clase de papel que tenga que cumplir en el futuro próximo. 92 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO DE CAMPO EN EL ÁREA DE DESPEJE tenido una circulación lenta pero continua y obtenido cierto reconocimiento; leído hoy, algunos de sus capítulos resultaron predictivos, y sus conclusiones básicas han sido corroboradas por los hechos. ---------------------(*) Profesor, Departamento de Sociología , Universidad Nacional. Bogotá Fernando Cubides (*) 31. VIII. 98 Fué la posibilidad del despeje lo que me decidió a aceptar la invitación de los directivos de la "ASOCIACIÓN CAMPESINA AMBIENTAL DE LOS RÍOS LOSADA Y GUAYABERO". Era la segunda vez que me la hacían, y aun cuando estuve dispuesto a viajar en la primera ocasión, por los días de Semana Santa, los combates en Monterredondo, sobre la carretera a Villavicencio ( que convirtieron en figura de primer plano al "Comandante Romaña") con sus secuelas de tomas de rehenes civiles y las operaciones militares consiguientes me disuadieron. Al fin y al cabo no tengo representatividad alguna, ni un proyecto de investigación en curso que justifique mi viaje en estos tiempos a una región conocida ante todo por la ostensible presencia de la guerrilla, por las ocasionales incursiones del ejército y por los avatares del proceso reciente de colonización. Conocí a dos de los dirigentes de la Asociación con anterioridad cuando vinieron a mi oficina del CES a dar a conocer los fines que se proponían, y me buscaron para que sirviera de intermediario y en procura de orientación sobre cuestiones ambientales; tenían referencias de un trabajo que habíamos hecho con la Universidad hace cerca de diez años, cuando era el ente público al que nominalmente le correspondía toda la región que circunda a la Serranía de la Macarena. El informe fue publicado en forma de libro, harto voluminoso y, hay que decirlo, con un contenido muy heterogéneo y desigual. Hizo falta labor editorial , sentido práctico en la composición del texto, amén de corrección de estilo. Aún así el libro ha Ahora el viaje se llevaría a cabo junto con un periodista y camarógrafos del Noticiero TV-HOY, atraídos por la posibilidad de hacerse a una primicia cubriendo mediante un recorrido extenso y una serie de entrevistas, las reacciones de los pobladores del área de despeje. El itinerario propuesto supone que , tras volar hasta el municipio de La Macarena, al extremo sur de la Sierra, navegaremos río arriba por el Guayabero ( un río tan ligado a la historia de las FARC que aparece incluso en los pasillos de Jorge Villamil ) adentrándono s luego en el Parque Nacional TINIGUA, y descender en seguida por el Caño Perdido y el Río Losada, hasta un punto en la zona limítrofe entre el Meta y Caquetá que nos permita llegar a San Vicente de Caguán . El tiempo programado para el viaje es de siete días, contando con recorridos más puntuales para ver los planes de reforestación, conocer poblados que apenas se están formando y hacer entrevistas , asistiendo, tal vez , a algunas de las reuniones que la Asociación programe. El vuelo, con escala en Villavo, es corto y sin novedades. Al arribar al flamante aeropuerto de La Macarena- una pista que el profano escasamente distingue de los potreros circundantes, y en la que el avión de SATENA debe hacer un paso rasante antes de aterrizar para dispersar el ganado - tenemos la primera evidencia del tipo de conflicto que se ha vivido por acá: la requisa que adelantan 93 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… de modo conjunto ejército y policía es minuciosa pero selectiva, y es menester identificarse cédula en mano. Como muchos de su oficio, el coronel que manda la patrulla conjunta presume de fisonomista: mientras que el aparatoso equipo de los periodistas ( trípode, baterías, cámaras, cables, micrófonos y demás) y ellos mismos pasan indemnes; interroga sin embargo y con el mayor de los detalles a este cronista pues tanto el aspecto , la indumentaria como la cartografía y algunas aerofotografías que vienen en el equipaje, le merecen preguntas adicionales, cada una más suspicaz que la anterior. Si se limitara a preguntarme de qué lado de la guerra estoy le respondería con sinceridad que, a pesar de todo tiendo a estar del lado suyo, pero en cambio la preguntas suspicaces me desarman, logro farfullar algunos datos que no suenan convincentes. Del otro lado de la barrera ya, el "contacto" guerrillero que nos ha traído hasta aquí, y que fue el primero en pasar, sonreía, sonreía...Por fin, pasado el control, nos alejamos de la pista y nos reintegramos a la comisión. Los preparativos estaban en marcha antes de nuestra llegada pero faltan todavía detalles y en tanto se ponen a punto , conversamos con algunos de los que nos acompañarán en el trayecto: dos de los funcionarios de la Corporación Regional de la Macarena que tienen por sede de trabajo el municipio, el piloto conocedor del río que nos llevará hasta el paso del raudal , y algunos vecinos. Surgen historias de pescadores y de cazadores, y todas parecen seguir un libreto conocido. El tigre, el león ( así llaman por acá al puma americano ) el manao, el güío, sus hábitos, alternan con anécdotas que hablan de la riqueza pesquera del río Guayabero, ya casi legendaria. También se intercalan impresiones de bombardeos que ocurrieron en las proximidades del pueblo la semana pasada. Cada uno tiene algo que contar de la noche aquella, pero las historias no denotan que los hubiera alarmado en demasía aunque los cogiera de improviso y en el pueblo no hubiera luz cuando ocurrieron. "Fue preventivo", dice alguien, y los demás asienten. Estando en esas aparece un mensajero, viene a preguntar, de parte del Director del Parque, si tenemos permiso de ingreso o permiso para filmar. Primera noticia de que se necesitara, sorpresa por la eficiencia de un funcionario que logra adivinar nuestras intenciones, que por lo demás no habían sido anunciadas, salvo a los propios que nos conducirían. Decidimos pues allegarnos a la oficina del Director y tramitar lo que fuere necesario; comenzamos a hacerlo , persuadidos todos de su inocuidad, y en papel corriente pues no hay el formato requerido , cuando la lectura detallada del decreto , nos informa de que no era necesario tal permiso: allí mismo se habla de que " en aras de la libre información y por motivo de interés público..." etc., los periodistas pueden hacer su trabajo sin permiso alguno. De todas maneras el Director del Parque, había modulado con la mayor suavidad el requerimiento, y en su actitud daba a entender de que es del todo consciente de que la suya es apenas una sombra de autoridad, una autoridad espectral. Como todos los parques del llamado Sistema de Parques Naturales éste está muy afectado por la colonización, y es zona de tránsito, cuando no retaguardia de varios frentes guerrilleros. No puede ser más flagrante la contradicción entre las finalidades preservacionistas de la norma que los crea, y la realidad de una ocupación intensiva reciente, de una deforestación acelerada. El Director del parque, en el mejor de los casos apenas puede hacer unos cautos recorridos por los alrededores y se mantiene atrincherado en su oficina, con sus subordinados. Esfumada la oportunidad 94 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… de ejercer los visos de autoridad de que dispone, nos despedimos en buenos términos, no sin hacerle un breve entrevista en la que a título de consuelo expone algunos datos sobre el parque . Antes de embarcarnos, el periodista hace varias entrevistas: al alcalde, a algunos de los viandantes - uno de ellos se asusta y sale a la carrera, no sé de fijo si por la cámara y los micrófonos , o por la inevitable pregunta sobre el despeje. Las respuestas, todas, denotan cautela, podría decirse incluso diplomacia. De no ser por la espontaneidad y la emoción sincera que les producen las cámaras, se pensaría que los entrevistados se hubieran puesto de acuerdo; apenas hay matices. Son las típicas respuestas en las que el énfasis está en el "si " condicional... En algunas de las charlas colaterales aparecen los "paras" como otro espectro: Mapiripán está lejos de aquí, Vistahermosa también, tenemos suficientes evidencias de que el poder que ejerce la guerrilla por acá es incontestado, pero la referencia intermitente a los "paras" me comprueba que, para decirlo con pedantería " están en el imaginario político de los colombianos ". se deja impresionar por comisión alguna, y despliega tal actividad en la cocina que en poco tiempo ella sola daría abasto para alimentar a una legión de comisiones La comitiva se va compenetrando, las dificultades y las expectativas del viaje nos irán amalgamando, y la conversación no decae a la hora de la comida; las historias de cazadores y pescadores han sido reemplazadas por historias de guerra: se comentan las recientes acciones de guerra y en la concurrencia prima la admiración por el Mono Jojoy, por su astucia operativa. Incluso cuando parece que se lo descalificara lo que subyace es pura admiración : "Es que ese Mono Jojoy si es puro malo...", rubricado por una sonrisa. El otro gran tema de conversación que surge es el de la corrupción, son tantos los datos, personajes y anécdotas que se traen a cuento que el efecto es desmoralizante, lleva al fatalismo y al conformismo con la cosa. Las historias guerreras también cansan: todas dan a entender que el que no está en la guerra es un pobre diablo. Se pernocta bien: el fuerte rumor del río es el mejor de los sedantes, arrullo para el viajero, compensa de sobra el frío de la noche para el que no veníamos del todo preparados . El motorista es Pedro un diestro conocedor , criado a orillas del Guayabero, que ahora remontamos río arriba a buena velocidad. Hasta aye r había paso por el raudal ( Salto de Angosturas , figura en el mapa ) y estando todavía en invierno el resto del curso no tiene mayores dificultades de navegación. Al llegar al raudal, los ojos expertos dictaminan sin embargo: no hay paso. El río viene muy crecido por la lluvia : ni los más conocedores se atreverían a pasarlo así: la solución: pernoctar aquí e intentarlo mañana. El albergue de Doña Saturia está hecho para eso, y la contingencia es rutina para ella. Fuerte, bajita, membruda, no 1. IX. 98. - "! A pizarrear !". Amanece y el río sigue crecido, por lo visto llovió más anoche en las cabeceras. La palabra no deja dudas: se trata de remontar un trayecto por la orilla rocosa, haciendo rodar la lancha sobre troncos, tras haberle quitado el motor. No es pizarra propiamente la roca sobre la que rodamos, parece más bien basalto o roca granítica, en todo caso piedra muy dura, Hasta el más despistado de los hombres de ciudad llega a comprender la manera de hacerlo; pero el hombre de ciudad solo puede aportar fuerza bruta, en realidad la labor es muy exigente, y la escogencia de los troncos tanto como el 95 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… balanceo necesario, el nuevo punto de botada, y los amarres indispensables para que a la lancha no se la lleve el raudal, son cosa de expertos. Reembarcamos en fin, adelante del raudal después de un trayecto por trocha, los motoristas cuentan su aventura del cruce del raudal con la lancha sin pasajeros, y se hace un conteo de los ahogados recientes por la fuerza de las aguas. De aquí en adelante el motorista será "Chaqueto", el presidente de ASCAL-G, sigla con la que, aunque no muy eufónica, poco a poco nos iremos familiarizando; ellos mismos la emplean con sentido de novedad, como si la paladearan. En cuanto a "Chaqueto" por momentos parece preferir el apodo, pues algunos de sus homónimos no le hacen gracia: Carlos Castaño, hasta hace poco "Director del Sistema de Parques nacionales" , y, claro, el más conocido, el líder de los "paras". hace mucho organizaron un Seminario con un título que en principio me pareció inescrutable : "Sustentabilidad ambiental y perspectiva de género" tal vez no se sorprendan de saber que aquí impera para la mujer el mismo término despectivo que utilizan los muchachitos de los colegios de elite, aquellos que alardean de su machismo bilingüe en un graffiti del canal de la 127: "fucking guisa: it's so delicious ! ". El motor es apenas de 40 H.P. , la canoa va bien cargada, y talvez "emproada", recargada hacia la proa. Recorremos el curso sinuoso del Guayabero, trato de cotejar las aerofotografías - de 1986con el estado actual del desmonte a lado y lado de la ribera , con poca fortuna pues cuando creo reconocer un sitio ya hemos pasado por él. El viaje es fatigoso, lento, se suman nueve horas de navegación al final de la jornada. Por el camino, en uno de los puntos más antiguos de poblamiento, la Vereda El Tapir, recogemos , no sin titubear , a dos pasajeros que nos han hecho señas: son los jóvenes profesores del internado que funciona aquí. Uno de ellos, Nicolás, resulta ser alumno de Sociología de la Nacional, la otra, también es estudiante de la Universidad. Caigo en la cuenta que en esa vereda y en ese oficio de profesora rural es que tuvo su experiencia de campo, en un convenio que tiene con la comunidad la Asociación pro Defensa de la Macarena, Claudia Leal, economista, y su publicación como libro ( " A la buena de Dios, FESCOL 1995 ) es ahora una de las referencias obligadas de la literatura regional. Dado lo alto de la ribera respecto del curso del río, no es mucho lo que se vislumbra del poblamiento, como para haberlo comparado con el croquis, y la detallada descripción que hace Claudia de la vereda, pero los indicios de desmonte son claros: algunos desbarranques, vegetación menos Avanzamos a partir de aquí con más lentitud, no sólo el motorista es algo menos experto, sino que además es muy cuidadoso : viajamos con su joven esposa que tiene tres meses de embarazo. Terminamos por saberlo pues desde el principio le ha prodigado atenciones, y la trata con una delicadeza que conmueve, entre otras por lo inusual. Siendo la tala, corte y extracción de madera la actividad económica principal en estos contornos, el papel de la mujer es del todo subalterno, a diferencia de lo que ocurre en otras zonas de colonización. Las uniones son inestables, me cuentan, y no es infrecuente que la mujer tome la iniciativa de abandonar el hogar; por aquí el machismo se da silvestre, y se nos aparece como la ley de la vida. ¿ Qué dirían mis colegas del Grupo Mujer y Sociedad del CES, pienso yo, al saber que en el lenguaje del colono de esta zona a la cónyuge se la llama simplemente "la guisa" ? Ellas, que no 96 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… exuberante en las orillas, huellas de ganado. Pese al cansancio, y a la monotonía del trayecto, en algún momento creo reconocer la desembocadura del Duda, otro río célebre. asunto es recuperar el tiempo perdido en el raudal y la meta sigue siendo San Vicente de Caguán. Se van haciendo menos evidentes las huellas del desmonte, solo de cuando en cuando se escucha una moto-sierra, o hay claros en el monte, en los que se ve el "releseo" (el aprovechamiento de derribes anteriores). La riqueza principal que se ha estado extrayendo es el cedro o carrecillo; aún los ejemplares que se desecharon en los primeros derribos, muestran buen grosor. La trocha tiene unos cinco años, lo que coincide con los primeros informes acerca de la bonanza maderera. Vamos descendiendo. Sopor, bajo el bordoneo de los tábanos, las bestias chapotean en el fango y hunden sus patas hasta los mismos ijares, pese a lo aparatoso de la bajada y al maltrato la comitiva va en silencio y más de uno dormita sobre su bestia. El único encuentro en las tres horas y media que dura el trayecto, es con una pequeña recua que trae unos pocos bancos o toletes de cedro ya cortado. En la finca de "Chaqueto" vemos sus nacederos. Nos explica en detalle ( paciente ante la banalidad de muchas de nuestras preguntas ) la forma en que se "fundó", cómo escogió su finca: los caños veraneros lo decidieron a escoger el sitio. Buen conocedor de las huellas de distintos animales, su instinto de cazador a flor de piel ha quedado patente en la forma en que por el camino nos descubría las huellas de los distintos animales. Bien asentado de un golpe certero en un tronco, junto al principal nacedero ha dejado su primer machete a modo de símbolo. La corteza vegetal lo ha abrazado, pero el óxido promete acabarlo pronto. "Chaqueto" viene de San Luis, Antioquia, pero se siente bien aquí, y en los retazos de conversación ha dejado ver que conoce bien el país rural; trátese de los alrededores del lago Calima, o del norte del Cauca, del Magdalena Medio o de Por fin llegamos a la "rancha" de Don Lino, uno de nuestros acompañantes y anfitriones. La mezcla de los géneros, subraya el afecto. Es una buena construcción de dos pisos, sólida, en la que se ve a leguas lo cuidadoso de la escogencia de las maderas; una construcción que en su solidez y en los detalles de su acabado, denota la intención de echar raíces. Está a la orilla de uno de los brazos del curso alto del Guayabero, no muy lejos de la desembocadura del Papamene. Lo caluroso de la recepción de su familia, y el atractivo de la celebridad mediática que para el caso es el periodistapresentador, no impide que pasados los saludos y la novedad, la familia se concentre en el capítulo correspondiente de "Paquita Gallego". 2. IX. 98. Fue una buena noche la de anoche. Ahora, tras el desayuno las fotos de recuerdo y las despedidas, salimos a coger la trocha. Hay todo tipo de cabalgaduras. Algunas sillas, un caballo, la mayoría machos y mulas en enjalma que conocen la trocha, y por eso no parecen necesitar freno ni cabrestro. Vamos en dirección sur, hacia el corazón del parque Tinigua, la siguiente estación es la finca de "Chaqueto". La trocha por momentos es difícil, el invierno ha sido duro y la "trilla" del acarreo de madera, ablanda más el terreno. Las mulas evitan los malos pasos yéndose por el rastrojo, o por un paso menos transitado, entre bejucos y ramas y los más inexpertos, encaramados en mulas ingobernables sufrimos raspones , magulladuras, caídas, que no aminoran el paso pues el 97 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… Arauca, las distintas etapas hasta llegar aquí, se van hilvanando. Con intuición para los simbolismos, como con el machete, en su gusto por la música, que nos hace escuchar y que canta a medida que suena la pequeña grabadora, aparecen al tiempo los joropos, instrumentales, y el vibrante son montuno: " A caballo vamos p'al monte" pues le parece que éste canta a su obra colonizadora. Cuando preguntamos por el vivero que dé cuenta de su interés por la reforestación, nos dice que es común, y que está en otra vereda: lo que puede mostrar en su finca es que ha sembrado varios frutales, hay algunos cedros de uno y dos años de sembrados, y el borojó, de cual se sabe que tiene una buena demanda en estos tiempos. "Estoy fundado en el puro corazón del parque", reitera. Su casa es más reciente, de un solo piso, pero como casi todas las que iremos encontrando, con detalles de construcción y de menaje que denotan una escogencia cuidadosa de la madera, una adaptación al clima y a los recursos de la zona. Tiene potreros, comprados a un vecino, asegura , pero no tiene ganado. Y mirado en el mapa, geográficamente, éste punto además es el corazón del área del despeje sobre la que machacan los noticieros estos días. tumbado a uno. "A las mula hay que tratarlas mal, siempre mal" me alecciona Arturo, el baquiano de este trayecto, y para mostrarlo le da dos tremendos varazos en el cuello que la ponen a caminar a paso fino. El nombre de la vereda por cierto además nos dice que en esta zona hay una indefinición en los límites entre el Meta y Caquetá, y que es la gente la que escoge identificarse. El epicentro es la escuela y la cancha de fútbol . El mapa veredal que está en la escuela, muestra a 26 predios identificados con el nombre del propietario, y fundos de 2000 Has. en promedio según estimación gruesa. Los estatutos de la Asociación hablan de un máximo de 200 Has. pero la diferencia ha de estar entre el área cultivable, o el potrero permitido y el rastrojo, deduzco. El descanso es bienvenido, pues además está en la vereda una brigada de salud, es la primera vez que se adentra por aquí y es la oportunidad para un chequeo gratis de nuestras magulladuras y de los achaques que van apareciendo. Hay una buena concurrencia, pero no con motivo de nuestra llegada. Una de las atracciones es una adolescente que tiene pavor a la vacuna que le quieren aplicar, y no se deja por nada. Varios de los circunstantes se ofrecen voluntarios a convencerla, pero ni por esas : es pánico a la aguja; el forcejeo dura un buen tiempo, hasta que la presión del grupo la hace ceder. Tras ese desenlace, la veo huir a esconderse en su casa y sin querer, mientras me aplican a mi una inyección, a la luz del día. Y mientras mis partes magulladas se han vuelto el punto de atracción gracias al chacoteo de Pacho, alcanzo a ver que el asistente del odontólogo, ha ido a consolar a la muchacha en flor, y en la penumbra le soba, acucioso, el sitio de la punción. La pausa del mediodía y el almuerzo preparado con exquisitez y carne de monte, son breves para retomar la trocha, pues la jornada nos debe llevar hasta "Aires del Meta" uno de los núcleos que se ha estado formando recientemente. Tres horas más de mala trocha en medio de una vegetación espléndida y sobre mulas resabiadas en la carga de bancos de madera que a medida que se cansan se hacen más indóciles para el neófito, y a algunos terminan por tumbarnos. Con dolor aprendemos que la imprecación "maldita mula h.p.", hay que lanzarla, pero antes de que la mula lo haya La zona es llana con algunos escarpes. Se produce un relevo en nuestros 98 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… baquianos, ahora estaremos a la orden de Filomeno, todo un personaje veredal, él sí todo un anfibio. Alardea de moverse con la misma destreza en la selva que en los pasillos de la cumbre de gobernadores o de cualquier dependencia ministerial por encumbrada que sea. Muchos datos que vamos hilando por el camino nos confirman que el alardeo no es en vano: de todos los dirigentes de ASCAL-G es el que mejor se sabe mover en el mundo institucional, y el que mejor partido saca de ayudas, promesas y planes gubernamentales. vieron despistado y desadaptado: hizo su desmonte, reivindicó la propiedad del fundo al que aspiraba, pero no construyó vivienda ni sembró nada, desapareciendo un buen día sin despedirse. Sólo dejó la carpa en que se alojaba, hecha ya jirones. Por cierto , y es característico , que carpa y no cambuche, es la primera vivienda por aquí, según varios relatos. Los periodistas hacen su oficio, pero en los preparativos asisto a un amistoso forcejeo entre los dirigentes acerca de las tomas y entrevistas televisivas que luego las propias entrevistas, y la manera en que orientan al camarógrafo y aconsejan al periodista, me demuestran lo que era fácil intuir: en el corazón del bosque húmedo tropical hay la misma clara conciencia sobre el poder de la imagen, que en el seno de cualquiera de lo s círculos del gran poder económico de la metrópoli . La diferencia esta apenas en el poder que tienen, y en el grado de sutileza para controlar la emisión de las imágenes que ofrecen. Pernoctamos en la escuela, y antes de caer rendidos asistimos a una pequeña danza de los millones: de una hamaca a otra Filomeno delinea con uno de los funcionarios toda una estrategia, presionando aquí, alegando más allá, "como tacar el asunto" para obtener nuevos recursos de dependencias públicas con destino a varios pla nes veredales. Una pequeña lección de picaresca criolla. A la hora de la sobremesa se forma una especie de tertulia y el interrogante principal que hacemos los forasteros es cómo piensan controlar el arribo de nuevos colonos, algo que aparece en los estatutos de la Asociación, impecablemente redactados, santanderistas. ¿De qué manera garantizarán esa exclusión? La respuesta la tienen a flor de labio, pero no resulta convincente: una de las expresiones más recurrentes de su parte es la de consenso: "Si hay un consenso entre nosotros no tiene por qué venir más gente", fue frase con la que se quiso zanjar la discusión. (Luego, al revisar las notas de mi diario, se me ocurrió la pregunta impertinente pero del todo necesaria sobre qué harían los directivos de la Asociación en caso de que por razones políticas y militares la guerrilla decidiera estimular la colonización a raíz del despeje o de algunos de sus desenlaces. Me prometí hacer la pregunta más adelante, pero apenas ahora, al escribir estas notas, la vuelvo a recordar) 3. IX.98. La partida se demora pues se están haciendo las tomas de las entrevistas, y ante la ineludible pregunta: "¿Y de la coca qué?", fuimos a ver un plante cercano. Relativamente cerca de la zona habitada, es un parche en medio de una zona de bosque. Al llegar se hace la entrevista, pero la toma no tiene la espectacularidad necesaria, pues apenas Se pasa luego a otras historias de la gente de por aquí, y una llama mi atención: la del sicario venido de Medellín que no tuvo éxito en fundarse, pese a que recibió ayuda cuando lo 99 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… hay plantas pequeñas, algo enmalezadas: es un plante abandonado, y el periodista decide que frente a imágenes de cultivos exuberantes que ahora son fáciles de conseguir, éstas no son importantes, así es de que se graba tan solo la entrevista. El dueño del plante, pequeño, bromista, se bate bien ante las preguntas. significa, Filomeno nos lo explica con detalle y da ideas para el libreto; se cerciora de que el camarógrafo y su asistente hagan las tomas más importantes y anoten en su bitácora los nombres correctos, Hay piña , hay borojó, hay cedro sobretodo, y en apenas dos años la naturaleza ha vuelto por sus fueros: el bosquecito se va tupiendo. De ahí en adelante, vamos todo lo rápido que el camino permite: se trata de llegar a "El Rubí", que nos lo han pintado como un pueblo nuevo al que ya llega carretera . Por fin después de muchas despedidas estamos listos para partir cuando anuncian el almuerzo. Las cabalgaduras son un poco mejores que las de ayer, por lo menos tienen silla y freno, y a simple vista parecen menos resabiadas. El almuerzo es rápido pues va apareciendo clara la discordancia en nuestras percepciones: ellos están interesados en que recorramos el mayor trayecto posible, no importa el tiempo; y nosotros vamos acosados por el tiempo. La relatividad consiste aquí en que no se sabe todavía en qué punto se cruzarán la equivocada percepción del espacio que tenemos los citadinos, con la deliberada equivocación sobre el tiempo que ellos nos ofrecen . Pero ahora haciendo las cuentas queda claro que a sabiendas nos han dicho menos tiempo para cada trecho que recorrimos con el fin de no desanimarnos de entrada; pero la cosa no resiste más si se quiere recorrer el camino propuesto y estar de regreso el sábado en Bogotá. De nuevo la trocha, fangosa , difícil, sobre un terreno de arcilla que deja manchas en la ropa que ni el blanqueador mas fuerte borrará después; al poco tiempo hay la posibilidad de detenernos a mirar la zona reforestada: una pequeña vertiente de unas 4 Has., en donde se pueden ver cedros jóvenes, frutales, un platanal abandonado. Es palpable para quien lo haya dudado que así sea buscando un efectodemostración, hay aquí como propósito común ver las ventajas de la reforestación a pequeña escala. Para que no dejemos de apreciarlo en lo que 4. IX.98. "¿ Qué diablos hago yo aquí ? " La pregunta es para mí inevitable pues hasta aho ra , fuera de mis observaciones, no he llevado a cabo nada de lo que me propuse. Ha sido un viaje frenético; y el grueso de la iniciativa, y del atractivo ha estado en lo que logren hacer los hombres de la T.V. Todo en este viaje ha estado en función de esas imágenes. La insatisfacción no sólo proviene de que me vea reducido a acompañante o comparsa de los hombres de T.V., o de que, por eso, a ojos de todos los que nos encontramos sea una especie de testigo impertinente. Es sobre todo a causa de lo escéptico que soy frente al ecologismo del que hace gala la Asociación. En dos oportunidades anteriores, sin habérmelo propuesto, he servido de mediador, junto con otros colegas, para tratar de reconciliar los fines de la norma con la realidad de la ocupación. En ambas he visto naufragar toda una flotilla de buenas intenciones. Hay que ver el entusiasmo que le pusimos a lo que creíamos en su momento que era "el modelo Caguán", cuando ese río y el poblamiento de sus riberas apenas comenzaba a figurar . 100 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… "Ingenuos", nos dijeron, y éramos ingenuos. Hay que ver lo que es el Caguán ahora. Recordaba también cuántas energías aplicamos para que la Macarena recibiera un tratamiento distinto del que se le aplicó, y para que hubiese una concertación, y un punto de encuentro entre el preservacionismo y las necesidades elementales de los colonos, para comprobar después que ninguno de los problemas se ha afrontado, no han hecho sino intensificarse. El ecologismo ha sido en esos casos el preludio de la abolición de una norma obsoleta frente a la realidad de la ocupación, pero la ocupación se ha intensificado luego de abolida sin freno ni control alguno, la guerrilla ha incrementado su poder territorial, y todo ello ha sido la antesala de una intensificación de la guerra. nos resume sus orientaciones etnográficas y nos conecta con Rousseau, "el más etnógrafo de los filósofos", y un autor dilecto para mí. Más que las lecciones prácticas o la disciplina del diario de campo, lo que he querido asimilar y ratifico en cuanto puedo es esa "curiosidad plena de simpatía por las costumbres campesinas y el pensamiento popular" en que uno y otro nos aleccionan. No he perdido esa simpatía básica, lo difícil es aplicarla en una zona de colonización en que las costumbres campesinas apenas subsisten, en que hay tanta movilidad, en que tantas regiones se mezclan, y varias épocas se superponen sin un patrón reconocible. El líder campesino que nos recibe en El Rubí, que será nuestro anfitrión y uno de los fundadores del poblado, nació en Medellín, y a todas luces no es un agricultor. Todo esto lo vamos sabiendo en charla informal "off the record" . Toda su experiencia es la del aserrador, arriero de mulas por trochas de monte, y comerciante de madera. Su etapa anterior fué Arauca ( recordé que en los últimos informes que escribió Alfredo Molano sobre la región identificaba a "los araucanos" como los más activos comerciantes de madera, pero no porque fueran araucanos de origen sino porque allí lideraron la explotación de la "tolúa" como se llama por allá al cedro, hoy casi acabado en esa zona). Su casa es amplia, bien hecha, de dos pisos, y es la única construcción en la ribera derecha, junto con un embarcadero de madera. El Rubí está en la otra ribera y ya va adquiriendo fisonomía de pueblo aunque no tiene plaza, ni iglesia, Consiste en una calle larga, cruzada por otras dos, al final de la cual está la escuela. Tiene un comercio muy activo, y aunque incipiente como poblado, denota esmero, limpieza, labor compartida. Y el virtuosismo ya anotado en el trabajo de la madera. No parece haber mucho ambiente aquí para aplicar la ley de reservas campesinas ( 160 de 1994 ) cuya paternidad se debe sin duda a Alfredo Molano, y que se hizo pensando en estas regiones. Una minirreforma agraria a la medida de las zonas de colonización reciente, que no se ha aplicado todavía en los cuatro años que lleva de promulgada. Molano, consejero especial para el tema en el gobierno y la Asociación que promovió han buscado aplicarla sobre todo aquí, pero han tropezado con toda suerte de resistencias, abiertas unas, soterradas las más. He querido tener la disciplina del diario de campo, recojo puntualmente lo que me parece digno de anotar; teniendo siempre presente mis modelos clásicos para el género: sobre todo las enseñanzas de Levi-Strauss en Tristes trópicos en ese formidable capítulo que siempre hago leer a mis estudiantes cuando emprenden un trabajo de campo - en que con el título "Un vasito de ron", 101 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… Frente a otros que he conocido recién fundados ( Remolino del Caguán, Puerto Toledo sobre el Güéjar, Puerto Concordia sobre el Ariari, y varios más ) revela de entrada una preocupación más consistente por el bienestar común: la escuela está bien construida, el puesto de salud tiene la dotación mínima, y , bueno lo que venimos a ver: la sede de la Asociación Campesina y el lote que la circundan, hechos recientemente y con consignas y un aviso destacado, dejan clara la voluntad que hay detrás, el ánimo pionero y fundacional con el que se han construido. " No talar demesuradamente " dice una de ellas, y el relativismo del adverbio, llama mi atención . Para tener apenas tras años desde que se comenzó, y para las distancias que lo separan de San Vicente o de cualquiera de los epicentros regionales con los que se lo pudiera relacionar, es mucho lo que se ha avanzado; definitivamente no es un pueblo-campamento, sino un pueblo con vida propia desde el comienzo. El poblado, junto con los 47 Kms. de carretera que ya han construido, es el principal orgullo de los fundadores. Para escoger el sitio del pueblo hubo una especie de referendo entre las veredas; en cuanto a la carretera, no niegan que atraviesa el parque, pero es su gran necesidad si quieren estabilizarse. " Por aquí todo está muy despejado, como puede ver" responde un colono con socarronería ante la ineludible pregunta sobre el despeje. Y subraya con un gesto de la mano lo que quiere decir, la respuesta para el buen entendedor tiene doble significado: tanto que el desmonte no tiene reversa, como que no existe otra autoridad que la que ellos mismos se den, o hayan aceptado por que a todas luces les conviene. Por aquí el tal despeje no entrañará novedad alguna. " ¿ Y la guerrilla ? " pregunta uno para seguir pecando de obvio: " Si acaso por el camino se la encontrarán " nos responde. Si además de la obviedad, pecara uno por dar crédito solo a lo que ve, la guerrilla no tiene presencia en la zona; pero en verdad su poder es notorio y las alusiones no dejan duda. Cuando se habla del acatamiento a las restricciones sobre la caza y la pesca, cuando se refieren a los litigios de linderos que pudieran surgir, cuando se menciona el tope de 150 bancos (o toletes) de cedro por mes como cuota para cada colono, cuando el comerciante de madera alude apenaspero con evidente satisfacción- a la seguridad y a las garantías para su actividad, cuando se protocolizan ventas de los fundos cuya posesión reclaman mediante un acta que se levanta en la Junta de acción comunal de la vereda... en fin, cuando los actos comunitarios o de intercambio requieren el respaldo de una autoridad. Concordia, San Luis, Medellín, Puerto Nare, son los puntos de procedencia más mencionados; a simple vista en este frente de colonización predomina todavía la gente de Antioquia, y nosotros, lectores de Ospina Vásquez y de Parsons, que creíamos que era un asunto de los libros de texto, o de las caricaturas del colono al estilo de "Zoociedad" tenemos que admitirlo: "the antioqueño colonization" está vigente. A diferencia de lo que ocurre en los cascos urbanos de los municipios a despejar , en donde predomina la incertidumbre, para los habitantes de estas zonas el despeje, que no implica ningún cambio en lo cotidiano, equivale reconocer de jure lo que ya existe de facto , como si por momentos se resolviera la vieja dicotomía de Montaña Cuellar, país formal, país real. 102 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… Y equivale, a no dudarlo, a una victoria neta de la guerrilla, y así lo comentan, off the record , claro está, con un claro dejo de orgullo. con El Losada, y luego por el Guayabero hasta el municipio de La Macarena. Aguas abajo la lancha va a una buena velocidad, y vamos bien advertidos de lo que hay que hacer en caso de que nos encontremos con una lancha que sube: tirarnos al piso. Siendo el curso del caño muy sinuoso, y rápida la bajada, los encontrones ocurren con alguna frecuencia, y lo que los lancheros hacen cuando es inevitable, es tratar de pasar por encima de la otra lancha, un deporte de alto riesgo, claro está. Los periodistas hacen su trabajo, y llevan tras de sí a un corrillo de niños que no se quieren perder ninguna de las tomas ni de las entrevistas. Tras una serie de tomas sobre el trabajo de aserrar madera, al rayo del sol del mediodía en un sector tan desmontado que no hay una sombra, salvo la de un tocón bajo el cuál nos vamos turnando y mientras se evapora la humedad de la cámara que ha impedido grabar, se imparten algunas nociones sobre el manejo de la cámara que la Asociación acaba de comprar para producir sus propias imágenes. Deliberamos sobre el recorrido que falta, y pareciera que, bajo este sol de justicia, las distintas percepciones del tiempo y del espacio se van a encontrar por fin; hacemos cuentas, nos sinceramos con nuestro anfitrión y con nuestro baquiano sobre lo que falta hasta San Vicente del Caguán, y descubrimos que , en el mejor de los casos estaríamos llegando el Domingo... Hasta San Juan, puerto sobre el Losada faltan por lo menos 9 horas en lancha, y cuatro más por carretera, sin contar con ningún retraso; la cosa puede ser más larga, aunque más segura, por trocha. "Imposible" acepta por fin Pacho que insistía en llegar a San Vicente a hacer nuevas entrevistas; debe emitir el primer informe especial el Sábado , y eso significa que no puede llegar más tarde de la 1:00 p.m. si quiere editar y preparar la emisión. Pero el viaje es tranquilo, y solo nos encontramos con una lancha que venía despacio. En un recodo, la lancha hace un círculo ancho para regresar: han hecho una seña. Nos despabilamos del adormilamiento, y en el sitio más alto de la ribera que hemos visto ahora y ya en curso del Losada, dos hombres armados nos esperan. "Son de la móvil " nos tranquiliza el lanche ro, y al acercarnos nos recibe "El Tío", un comandante guerrillero, todo sonrisas. Lo raído del pantalón verde oliva contrasta con la cartuchera de la pistola, la canana y los arreos de cuero, que se ven de calidad. " ¿ Cómo les fue ?" es el saludo. " Vaya ésta si es móvil " pensé para mis adentros: nos habían sugerido un encuentro por la ruta de salida que teníamos inicialmente, y nos los hemos encontrado por la que decidimos a última hora. Frases amables, y casi de rutina, naturalidad. Pero sus palabras, sin ser intimidatorias, sí revelan que ha seguido al detalle lo que hicimos. Ante la insistencia, leve, de Pacho de ejercer su oficio y pedirle la entrevista, "El Tío" se niega y añade con modestia: "Si lo ven a uno después en el pueblo cuando baje de civil, le echan mano " El argumento, me parece, tiene su toque de coquetería masculina ; la razón principal la añade después: "Tenemos gente para que dé declaraciones. Ahora no es cosa de que Se impone entonces el regreso por La Macarena por una ruta distinta a la que nos vinimos. Abreviamos las despedidas, una nueva serie de fotos de recuerdo, y a la lancha, a todo lo que pueda el motor. Vamos ahora bajando por el Caño Perdido, que en esta época de invierno es todo un río; empataremos 103 TESTIMONIO CRÓNICA DE UN BREVE TRABAJO… cualquiera vaya por ahí diciendo lo que se le ocurra" . Ante esa formulación del principio de autoridad y de la división del trabajo, y de su noción del momento político, no se insiste más. Se intercambian algunas frases sobre lo positivo del despeje. "El Tío" pregunta en fin cuando se emitirá el noticiero, y expresa un apoyo rotundo a ASCAL-G. Estrechar las manos a modo de despedida, es un gesto sincero de parte y parte. fueron 20 los de esta jornada futbolera ) fue de 9 minutos. Tal vez en esa mezcla indiferenciada consista la postmodernidad, pienso. Luego me entero que los voceros de los colonos y los habitantes de cada uno de los puntos que recorrimos se reconocieron en el informe sintiéndose bien representados. No se trata de encuestas o mediciones de audiencia, son los ecos que llegan, "Radio bemba ", pero no son menos verídicos. El retorno hasta La Macarena no trae novedades. 21. IX.98 5. IX . 98 . - 8:00. a.m. En el aeropuerto, mientras esperamos el avión, llegan casi al tiempo, un mensajero del Director del Parque, a pedir el pago del valor de la entrada, y Don Pacho, un colono de Concordia Antioquia que se fundó por aquí en los 60's, y que habiendo sido entrevistado por Pacho en los programas que hizo sobre la Macarena a comienzos de año vino a saludarlo visiblemente agradecido. Nos cuenta entre otras que por fin tiene escrituras de propiedad, para poderle dejar a los hijos lo trabajado. - 7:30 p.m. Se emite el primer "Informe especial sobre La Macarena" en el noticiero TV Hoy : dos minutos y medio de duración. Los combates en Montecristo y en Tisquisio ( Bolívar ) son la noticia principal. 6. IX. 98. 7:30 p.m. Segundo informe especial sobre la Macarena, de algo más de tres minutos de duración. Los siete días de viaje ( 211 Kms, sumando trocha y río, según mis cuentas ) se resumen en esos cinco minutos y algo más de despliegue informativo. Aunque Pacho nos había hecho la consabida advertencia sobre el tiempo de la TV, no puedo evitar cierta decepción: el tiempo que le asignaron a los goles ( y 104 RESEÑAS ¿QUÉ ES LA GLOBALIZACIÓN? ULRICH BECK, ¿QUÉ ES LA GLOBALIZACIÓN? FALACIAS DEL GLOBALISMO. RESPUESTAS A LA GLOBALIZACIÓN, Barcelona, Paidós, 1998. otros, la globalización se convierte en una excelente coartada que permite explicar el por qué de las políticas de ajuste o simplemente es una justificación de que nada se puede hacer por cuanto nos encontramos a merced de fuerzas y procesos que trascienden la voluntad y la capacidad de la acción política. Los últimos consideran la globalización como una nueva forma de imposición de Occidente, con su cultura, tradiciones, formas de vida y consumo. por Hugo Fazio Vengoa No es del todo aventurado decir que si la década de los años ochenta transcurrió bajo la impronta de los discursos sobre el postmodernismo, el tema de la globalización se ha convertido en la trama de los años noventa. Ante la gran proliferación de acepciones y usos que se le da el término, el reciente libro de Ulrich Beck adquiere toda su actualidad ya que nos presenta una sugestiva lectura de la globalización que trasciende los reduccionismos en que han caído la mayor parte de los discursos contemporáneos sobre este importante tema. En efecto, en los medios de comunicación, en los discursos políticos y obviamente también en los círculos académicos el uso de este término se ha popularizado y se recurre a él para denotar las grandes transformaciones que caracterizan al mundo contemporáneo o para explicar por qué tal o cua l política se ha vuelto una práctica corriente. Las virtudes del libro se pueden resumir en tres aspectos. En primer lugar, el autor establece una clara e imprescindible diferencia entre globalización, globalismo y globalidad, diferenciación “que tiene la virtud de desmarcarse de la ortodoxia territorial de lo político y social que surgió con el proyecto del Estado nacional de la primera modernidad y se impuso omnímodamente a nivel categoría e institucional” (26). La primera significa los procesos en virtud de los cuales los Estados nacionales soberanos se entremezclan e imbrincan mediante actores transnacionales y sus respectivas probabilidades de poder, orientaciones, identidades y entramados varios. La globalización es, por lo tanto, un proceso que crea vínculos y espacios sociales transnacionales, revaloriza cultura locales y trae a primer plano a terceras culturas. Pero, ¿qué se entiende por globalización? ¿Cuál es la esencia de los procesos y situaciones que se asocian con la globalización? No es unívoco el sentido que la literatura especializada y de divulgación le da al término. Algunos lo utilizan para dar cuenta de los grandes cambios que, en los últimos tiempos, han introducido transformaciones sustanciales en el ámbito de la economía, la política, la sociedad y la cultura en el plano nacional y a escala planetaria. Para otros, la globalización, como proceso impersonal que no se asocia a ningún país o sistema en particular, que soslaya las relaciones de poder internacional, es un buen sustituto de la difunta expresión “nuevo orden mundial”, acuñada por el entonces presidente norteamericano, George Bush, en vísperas de la guerra del golfo, para definir el mundo de postguerra fría. En Por globalismo el autor entiende la concepción según la cual el mercado 105 RESEÑAS ¿QUÉ ES LA GLOBALIZACIÓN? mundial desaloja o sustituye al quehacer político, es decir, la ideología del dominio del mercado mundial o la ideología del liberalismo, que termina reduciendo la globalización a una dimensión unidimensional, la económica. En la tercera parte del libro, Beck señala un conjunto de errores recurrentes del globalismo, a saber el economicismo, la identificación del comercio mundial libre con riqueza y disminución de las desigualdades, la desatención a que las relaciones transnacionales operan básicamente en el interior y entre determinados centros económicos y financieros de alcance mundial (Norteamérica, Sudeste asiático y la Unión Europea), la escenificación de la amenaza que termina transfiriendo todo el poder a las empresas multinacionales, la supeditación de la política a los dictados de la economía y el mito de la linealidad que ignora el significado de lo local. Esta crítica al globalismo le sirve igualmente al autor para desmitificar los discursos antiglobalización basados en los proteccionismos: negro (repliegue a los valores de la nación), verde (defensa del medio ambiente) y rojo (nostalgia por el Estado social de izquierda). en momentos de crisis como los que actualmente vivimos, convertir a la globalización en una coartada que permitiría explicar el por qué de la necesidad de las políticas de ajuste o simplemente utilizarla como una justificación de que nada se puede hacer por cuanto nos encontramos a merced de fuerzas y procesos que trascienden la voluntad o capacidad de acción política. Este discurso se basa en la prédica de que los Estados si no quieren actuar contra su propia sociedad, tiene n que desarrollar la competitividad internacional, es decir, deben actuar a favor de que los actores económicos internos dispongan de una sagacidad para internacionalizar sus actividades y hacer atractivos sus países para suscitar la atención de los grandes inversionistas y empresas multinacionales. Esta interpretación ideológica de la globalización sugiere que liberalización, privatización y transnacionalización son procesos no sólo inevitables, sino deseables. A partir de este presupuesto, el autor se interna en una segunda dimensión del problema. Si la globalización no se reduce a su dimensión económica sino que es un proceso multifacético que abarca y se expresa en las distintas instancias, entonces, la globalización puede ser visualizada a partir de la sociología y entendida como una sociedad “mundial”, lo que no significa homogeneidad, sino pluralidad sin unidad. Después de pasar revista a las principales ideas de grandes estudiosos de las relaciones internacionales, Beck concluye que la globalización no uniformiza ni produce resultados globales sino que interacciona con la localización, lo que vuelve ambivalente los procesos de globalización pues, de una parte, contribuyen a impulsar y expresar una nueva polarización y estratificación del mundo y, de la otra, evidencian el surgimiento de múltiples Por último, la globalidad nos introduce en la situación de que estamos entrando en una segunda modernidad, que “debe fundar y descubrir de nuevo la política” ( 30). La globalidad quiere decir que se rompe la unidad del Estado nacional y de la sociedad nacional, y se establecen unas nuevas relaciones de poder y competitividad, unos conflictos y entrecruzamientos entre, por una parte, unidades y actores del mismos Estado nacional y, por la otra, actores, identidades, espacios, situaciones y procesos sociales transnacionales (43). Esta distinción entre el discurso y la realidad de la globalización reviste una alta importancia. Es común, sobre todo 106 RESEÑAS ¿QUÉ ES LA GLOBALIZACIÓN? actores. A partir de estos planteamientos, la sociedad mundial deben entenderse como una sociedad plurilocal. política debe realizarse a través de toma de conciencia de política transnacionales y de la necesaria evolución del Estado nacional hacia un Estado de tipo transnacional. Pero, ¿qué se debe entender por un Estado de este tipo? Para el autor el Estado transnacional es un no-Estado nacional, es un no-Estado territorial, es decir, un aparato que se libera de la trampa territorial, reconoce la globalidad en su pluridimensionalidad y convierte a la norma y la organización de lo transnacional en la clave de la redefinición de lo político. Los Estados transnacionales tampoco deben ser percibidos como Estados internacionales o supranacionales, sino que como Estados globales “que se comprenden según el principio diferenciador incluyente como provincia de la sociedad mundial, de la que derivan su status en el mercado mundial y en la política mundial policéntrica” (155). En tercer lugar, ya en las primeras páginas, el autor nos había prevenido de que la globalización no apunta al final de la política, sino simplemente a una salida de lo político del marco categorial del Estado nacional para pasar a una política que se expresa y realiza a nivel mundial. En este plano se expresa una de las principales paradojas de las sociedad contemporánea. Hasta hace no mucho, durante la primera modernidad, vivíamos en un tiempo de la política, lo que implicaba constantes referencias al pasado para el manejo del presente y mantenía el objetivo de proyectarse hacia el futuro (utopías y pasiones). Con los cambios económicos, tecnológicos y comunicacionales de las últimas décadas, que auguran el advenimiento de la segunda modernidad, se ha comenzado a producir una transformación cultural que ha desplazado el tiempo de la política como vector estructurante de la sociedad por el tiempo de la economía y, sobre todo, del mercado, el cual a partir de la velocidad del consumo, de la producción y los beneficios desvincula el presente del pasado, transforma todo en presente e involucra los anhelos futuros en la inmediatez. Esto es lo que el autor denomina la sociedad de riesgo, cuando “el pasado pierde fuerza determinante para el presente, y en su lugar hace su entrada el futuro, es decir, algo no existente, sino construido y ficticio como causa de la experiencia y el quehacer presentes” (143). En tal sentido, con base en estos presupuestos el autor considera que la política no debe consistir en movilizarse contra la globalización y recurrir a una desvinculación o al proteccionismo, sino que debe estructurarse con base en el reconocimiento de la sociedad mundial y a través de una potenciación de la colaboración transnacional. No obstante, estos adecuados aciertos, el libro adolece también de algunas insuficiencias. En primer lugar, no explica como surge la globalización, como se inscribe en el desarrollo de la sociedad moderna. Con esto no quiero decir que para hacer legible el proceso deba situarse en una perspectiva histórica. El problema es que muchos de los indicadores que usualmente se utilizan para avalar la tesis de que el mundo se está globalizando no resisten una comparación histórica. A finales del siglo pasado, en plena época del Esto, sin embargo, no significa el fin de la política, sino su necesaria transformación para adaptarlo a la naturaleza de los procesos en curso. A juicio del autor, esta reconstitución de la 107 RESEÑAS ¿QUÉ ES LA GLOBALIZACIÓN? imperialismo, en muchos aspectos, se vivían una situación similar a la actual. En ese sentido, queda abierto el interrogante de ¿cómo surge la globalización? En segundo lugar, el autor tampoco es muy prolífero a la hora de señalar cuales han sido los factores que, como tal, han permitido que hayamos ingresado a esta presunta nueva era. En este plano, un análisis que involucre una perspectiva de análisis en términos de larga (desarrollo histórico del capitalismo y del sistema mundial), mediana (coyuntura de las décadas de los sesenta y setenta) y corta (la caída del muro de Berlín y el fin de la guerra fría) precisa el momento en el cual convergen una serie de factores que han hecho posible la universalización de la globalización. No obstante, estas omisiones, el libro constituye un gran avance frente a los discursos que se ha n popularizado sobre la globalización. En ese sentido, es de vital importancia para cualquier persona interesada en los problemas globales del mundo de hoy. 108 BIBLIOGRAFÍA CAPITAL SOCIAL WALZER, Michael, “Pluralism and social democracy” En Dissent, Vol 45, invierno 1998, p. 47 - 53 Reseach, Vol 57, otoño 1990, p. 591 614. WALZER, Michael, “The civil society argument: the good life” En The new Statesman & Society, Vol 2, octubre 6, 1989, p. 28 - 31. HOFSTETTER, C. 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