PRINCIPALES PUNTOS DE LA REFORMA LEY RIESGOS DE TRABAJO LEY 26773 Antes que nada es pertinente aclarar que esta norma actúa en forma complementaria con la Ley de Riesgos del Trabajo 24.557 y sus modificatorias y con el Decreto 1694/09. Los principales cambios introducidos por la reforma se encuentran en los arts. 1,2,3,4,8,17. IOPCION EXCLUYENTE La ley 26.773 en su art. 4 establece que: Los obligados por la ley 24.557 y sus modificatorias al pago de la reparación dineraria deberán, dentro de los quince (15) días de notificados de la muerte del trabajador, o de la homologación o determinación de la incapacidad laboral de la víctima de un accidente de trabajo o enfermedad profesional, notificar fehacientemente a los damnificados o a sus derechohabientes los importes que les corresponde percibir por aplicación de este régimen, precisando cada concepto en forma separada e indicando que se encuentran a su disposición para el cobro. Los damnificados podrán optar de modo excluyente entre las indemnizaciones previstas en este régimen de reparación o las que les pudieran corresponder con fundamento en otros sistemas de responsabilidad. Los distintos sistemas de responsabilidad no serán acumulables. El principio de cobro de sumas de dinero o la iniciación de una acción judicial en uno u otro sistema implicará que se ha ejercido la opción con plenos efectos sobre el evento dañoso. Las acciones judiciales con fundamento en otros sistemas de responsabilidad sólo podrán iniciarse una vez recibida la notificación fehaciente prevista en este artículo. La prescripción se computará a partir del día siguiente a la fecha de recepción de esa notificación. En los supuestos de acciones judiciales iniciadas por la vía del derecho civil se aplicará la legislación de fondo, de forma y los principios correspondientes al derecho civil. De la lectura de la norma aludida se desprendes tres cuestiones sustanciales, a saber: 1) EXCLUSIÓN: Los damnificados PODRAN OPTAR de modo excluyente entre: a) las indemnizaciones previstas en la LEY DE RIESGOS DEL TRABAJO, o b) las que les pudieran corresponder con fundamento en ACCIDENTES DE DERECHO CIVIL. 2) OPCION: El principio de cobro de sumas de dinero, o la iniciación de una acción judicial en uno u otro sistema, implicará que se ha ejercido la opción. 3) ACCION CIVIL: Las acciones judiciales de derecho civil solo podrán iniciarse una vez recibida la notificación fehaciente prevista en el artículo 4 de la Ley 26773 (ver pag 3 seg. Párrafo). II- REPARACION PLENA La nueva ley 26.773 propone otorgar una “reparación plena del daño”, una “cobertura justa, rápida y plena”, de “prestaciones plenas” (mensaje de elevación del PEN), bajo el objetivo de reparar con criterio de “suficiencia” (art. 1), añadiendo a las prestaciones dinerarias una indemnización equivalente a un 20% adicional de las previstas en la ley 24.557 y en el Decreto 1694/2009, destinada a compensar “cualquier otro daño no reparado” por aquéllas. (art. 3). Los objetivos son la cobertura de los daños derivados de los riesgos del trabajo con criterios de suficiencia, accesibilidad y automaticidad de las prestaciones dinerarias y en especie establecidas para resarcir tales contingencias. Conforme el artículo 2 los fines de la reparación son: La reparación dineraria se destinará a cubrir la disminución parcial o total producida en la aptitud del trabajador damnificado para realizar actividades productivas o económicamente valorables, así como su necesidad de asistencia continua en caso de Gran Invalidez, o el impacto generado en el entorno familiar a causa de su fallecimiento. Las prestaciones médico asistenciales, farmacéuticas y de rehabilitación deberán otorgarse en función de la índole de la lesión o la incapacidad determinada. Dichas prestaciones no podrán ser sustituidas en dinero, con excepción de la obligación del traslado del paciente. III- PRESTACIONES DINERARIAS a) Imposición de pago único de las prestaciones dinerarias: El cuarto párrafo del art. 2 de la ley 26773 establece el principio general indemnizatorio según el cual “es de pago único, sujeto a los ajustes previstos en este régimen”. Evidentemente, a partir de esta modificación se ha receptado la doctrina emanada del precedente de la CSJN dictada in re “Milone” (Fallos 327:4607) en donde se reprocha la alta de excepción alguna para supuestos en los que la forma de pago a través de una renta vitalicia sea una respuesta inadecuada frente a las necesidades de la víctima, compartiéndose en este aspecto aquéllas opiniones que sostienen que hubiera sido de mejor técnica legislativa dejar la opción al beneficiario acerca de la forma de percibir la indemnización, en un todo de acuerdo con la revisión del Convenio N° 17 de la OIT. Cabe destacar que la reparación dineraria se computará desde que acaeció el evento dañoso o se determinara la relación causal de la enfermedad profesional, razón por lo cual a la indemnización que el sistema especial reconoce se le deben agregar los intereses respectivos desde aquellas fechas. b) Ajuste periódico de las prestaciones dinerarias El artículo 8° de la ley 26773 establece que “Los importes por incapacidad laboral permanente previstos en las normas que integran el régimen de reparación, se ajustarán de manera general semestralmente según la variación del índice RIPTE (Remuneraciones Imponibles Promedio de los Trabajadores Estables) publicado por la Secretaría de Seguridad Social del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, a cuyo efecto dictará la resolución pertinente fijando los nuevos valores y su lapso de vigencia”. Esta norma va de la mano junto con lo dispuesto en el artículo 17 en el que, luego de derogarse los artículos 19, 24 y los incisos 1, 2 y 3 del artículo 39 de la ley 24557 y sus modificatorias, se establece en su primer párrafo que “Las prestaciones indemnizatorias previstas en la citada norma, quedan transformadas en prestaciones indemnizatorias dinerarias de pago único, con excepción de las prestaciones en ejecución”. Esta parte de las modificaciones al régimen de accidentes y enfermedades profesionales (que incluye el ya tratado incremento del 20% en el monto de las prestaciones que se venían pagando hasta la sanción de la nueva norma) ha sido saludado por calificada doctrina que, junto con la imposición de una indemnización adicional de la transformación de las prestaciones dinerarias de renta vitalicia en prestaciones dinerarias de pago único, como el argumento central para la plena realización del sistema de aseguramiento obligatorio. En este orden de ideas cabe recordar que al momento de establecer cuál será la indemnización correspondiente para el trabajador que pretenda el resarcimiento previsto en la ley especial (prestaciones dinerarias de los arts. 11, 14, 15 y 18 de la ley 24557), que la indemnización por incapacidad permanente definitiva (IPD) continúa fundándose en el Valor Mensual del Ingreso Base previsto en el art. 12 de la LRT, norma que computa las sumas sujetas a la cotización de la seguridad social, a lo que deberá añadirse, de acuerdo al nuevo sistema, la variación semestral del RIPTE que toma en cuenta los promedios de las remuneraciones resultantes de las convenciones colectivas de trabajo. A ello se agrega que se introduce un mecanismo de actualización automática de dos veces al año (marzo y septiembre) de las prestaciones dinerarias por gran invalidez, incapacidad laboral permanente y por fallecimiento (a las que remite el art. 15.2 de la LRT). Y claro está que, para poder acceder a esta reparación, se deberá cumplimentar (igual para aquellos que prefieran reclamar por la ley civil) con el procedimiento administrativo previo previsto en el art. 4° de la ley N° 26773 que establece que “Los obligados por la Ley 24557 y sus modificatorias al pago de la reparación dineraria deberán, dentro de los 15 (quince) días de notificados de la muerte del trabajador, o de la homologación o determinación de la incapacidad laboral de la víctima de un accidente de trabajo o enfermedad profesional, notificar fehacientemente a los damnificados o a sus derechohabientes los importes que les corresponde percibir por la aplicación de este régimen, precisando cada concepto en forma separada e indicando que se encuentran a su disposición para el cobro. Los damnificados podrán optar de modo excluyente entre las indemnizaciones previstas en este régimen de reparación o las que les pudieren corresponder con fundamento en otros sistemas de responsabilidad. Los distintos sistemas de responsabilidad no serán acumulables”.