Consejo de la Magistratura RESOLUCION Nº 419/04 En Buenos Aires, a los 14 días del mes de octubre del año dos mil cuatro, sesionando en la Sala de Plenario del Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la Nación, con la Presidencia del Dr. Claudio M. Kiper, los señores consejeros presentes, VISTO: El expediente 93/03, caratulado "Szmukler Beinuz Rodríguez Marcela (consejeros) c/ Dr. Carlos Rubén Skidelsky", del que; RESULTA: I. La presentación efectuada por el Dr. Beinusz Szmukler y la Diputada Nacional, Dra. Marcela Rodríguez, por la que se Resistencia, denuncia Provincia al del titular Chaco, del Dr. Skidelsky , y se solicita su remoción por Juzgado Dr. Federal Carlos Rubén haber incurrido en mal desempeño, debido a su actuación en la causa Nº 117/2001, caratulada "Aeropuertos Argentinas 2000 S.A. C/ P.E.N. S/ Medida Cautelar". Los denunciantes le atribuyen al magistrado haberse arrogado una competencia inexistente y resolver que el Estado nacional que debía concesión; que abstenerse debía de rescindir el contrato de garantizar la participación del concesionario en igualdad de condiciones en otros concursos o licitaciones; abstenerse de exigir el pago del canon y que debía cumplir con las inversiones pactadas a la empresa Aeropuertos Argentina 2000 (AA2000). A criterio de los denunciantes la maniobra guarda similitud con los hechos denunciados en el expediente n 206/01 caratulada " Coppola, Marcelo Alberto C/ Titular del Juzgado Federal de Resistencia Dr. Carlos Rubén Skidelsky" en el que el mismo magistrado características, había pero ordenado en una beneficio cautelar de la de análogas empresa Correo Argentino S.A. (conf. fs. 7/8). II. En los términos del artículo 7 del Reglamento de la Comisión de Acusación, se requirieron las actuaciones mencionadas en la denuncia, que seguidamente serán analizadas. a) Causa Nº 117/01, caratulada, "Aeropuertos Argentinas 2000 S.A. c/ P.E.N. s/ Medida Cautelar" del Juzgado Federal de Resistencia. El 26 de julio de 2001, se presentó el apoderado de la empresa Aeropuerto Argentina 2000 S.A., Dr. Diego Raúl González, ante el Juzgado Federal de Resistencia, provincia del Chaco y solicitó medida cautelar anticipada a una acción ordinaria conforme lo establecido por el artículo 195 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. Dijo el peticionante que la medida tenía por fundamento en que el Estado nacional había incumplido numerosas obligaciones contractuales, y había realizado actos de carácter extracontractual en perjuicio de los intereses del concesionario que desnaturalizaron el contrato de concesión por la realización de vías de hecho. Se citó como precedente la causa "Sindicato de Trabajadores de Correos y Telecomunicacioes c/ Correo Argentino S.A. y Estado Nacional", que poseía un objeto de similar característica, consistente en haber impedido la rescisión del contrato de concesión por parte del Estado nacional (conf. fs. 9/47). El magistrado, el 31 de julio de 2001, resuelve: "1) Hacer lugar a la medida cautelar solicitada por la actora y en consecuencia ordenar al Estado Nacional, en su carácter de concedente de los Aeropuertos del Grupo A del Sistema Nacional Aeroportuario, que se abstenga respecto del concesionario Aeropuerto Argentina 200 S.A., de exigirle el pago del canon y el cumplimiento de las inversiones, y de rescindirle el contrato de concesión por esas causas, hasta tanto recaiga sentencia definitiva que resuelva sobre el fondo de la acción principal a plantearse. 2) Ordenar al Estado Nacional que ejecute las medidas positivas conducentes para hacer cesar los efectos jurídicos dañosos de los actos, hechos y omisiones impugnados. 3) Ordenar al Estado Nacional que habilite a la actora a competir en igualdad de condiciones en los concursos y/o licitaciones por los aeropuertos no comprendidos en el Consejo de la Magistratura Grupo A del Disponer que Sistema la Nacional codemandada Aeroportuario PROCONSUMER, concedido. 4) abstenga de se promover acciones judiciales y de ejecutar actos jurídicos y/o hechos materiales que obstaculicen o afecten el normal desenvolvimiento del servicio publico o puedan enervar la tutela conferida por los resolutorios 1 y 2. 5) Tener como Caución suficiente a los fines de la presente medida cautelar la garantía de ejecución del contrato de concesión" (conf. fs.50/3). Posteriormente, antes de la traba de la medida, presenta dos escritos, uno para que precise el sentido de la cautelar de acuerdo a lo que propone (fs. 88/96) y otro para que amplíe (fs. 97/107). En este último solicita "que el ORSNA se abstuviera de exigir la ampliación del monto de la Garantía de inversiones prevista en el numeral 10.2 del Contrato de Concesión" (fs. 107). El 14 de noviembre del mismo año el magistrado resuelve "Aclarar que el deber impuesto al Estado Nacional, en orden a abstenerse de exigir al concesionario Aeropuertos Argentina 2000 S.A. el cumplimiento de las inversiones, abarcan tanto las referidas a infraestructura, como aquellas destinadas a la remediación ambiental, con el alcance señalado en los considerandos precedentes. 2) Hacer lugar a la ampliación de la cautelar solicitada; en consecuencia, ordenar al Estado Nacional que intertanto recaiga sentencia definitiva en la causa principal anunciada por la parte actora, el cómputo de los plazos del primer período de evaluación de las inversiones previsto en el Contrato de Concesión, se debe efectuar de conformidad a lo dispuesto por la Resolución O.R.S.N.A. 250/00 y que la apreciación del incumplimiento temporal del Plan de Inversiones deberá aprobación por el considerarse O.R.S.N.A. a de partir los de Planes la efectiva Maestros de Ejecución de obras y programas de inversión, y evaluarse en función de la incidencia de la fuerza mayor que afecte su ejecución. 3) Disponer que el O.R.S.N.A. se abstenga de requerir la ampliación del monto de la garantía de inversión, hasta tanto se dicte sentencia en la causa principal a iniciarse. 4) Disponer que a los efectos del control externo de las obligaciones del Estado Nacional y Aeropuertos Argentinos 2000, surgidas del contrato de concesión del Grupo "A" de Aeropuertos del Sistema Nacional Aeroportuario, aprobado por Decreto 163/98, tome la intervención de la ley de Auditoría General de la Nación, tome la intervención de ley la Auditoría General de la Nación" (fs. 113). El 21 de enero de 2002, se recibe una nota suscripta por un Secretario de Corte Suprema de Justicia de la Nación que solicita la remisión urgente de la causa de referencia (fs. 121). El 30 de enero de 2002, el juez proveyó: "Sin perjuicio de que en el oficio que se provee, el Sr. Secretario de la Corte Suprema especificado de motivo por Justicia el de cual la Nación, requiere la no ha Causa, correspondería disponer su remisión a ese Alto Tribunal. Sin embargo, y previo a ordenar ello, habiéndose retirado oficio, según constancias de Fs. 120, deberá la parte actora devolver los mismos con la constancia de diligenciamiento correspondiente" (fs. 122). El 1 de febrero de 2002, Aeropuertos Argentina SA., se presentó solicitando la 2000 inconstitucionalidad del artículo 18 de la ley 25.561, que establece efecto suspensivo a la apelación de las medidas cautelares. Este planteo no tuvo acogida por el magistrado referido, atento que al momento la causa había sido remitida al tribunal superior (fs. 130/9 y 209). III. Citado en los términos del artículo 9 del Reglamento de la Comisión de Acusación el Dr. Carlos Rubén Skidelsky comparece a efectuar su descargo y acompañó un escrito, obrante a fs. 73/80, que en líneas generales dice: a) Con respecto a la competencia dijo: a.1) El peticionante alegaba que el Estado, a través de su conducta, había alterado las condiciones contractuales y que, en estas circunstancias, la exigencia de cumplimiento de la prestación a cargo de la empresa le provocaría perjuicios irreparables. Entre otros actos menciona el decreto 698/01, que modificó el cuadro tarifario de la concesión -dispuso el descenso de las tarifas de aterrizaje y estacionamiento para los vuelos de cabotaje-, y el convenio entre la ciudad autónoma Consejo de la Magistratura de Buenos Aires y el Estado Nacional relativo al Aeroparque Metropolitano, que determinaba modificaciones a los compromisos de inversión que surgían del contrato con AA 2000. a.2) Se consideró competente porque ella surgía, al menos en la instancia cautelar: i. en razón de las personas, al haberse demandado al Estado Nacional; ii. por la materia, al involucrar la prestación de un servicio público; y iii. por el territorio, en tanto los efectos jurídicos y las obligaciones emergentes se producen en la jurisdicción de su Juzgado. Citó los artículos 42 y 75, inciso 13 de la Constitución Nacional y el artículo 2, inciso 6, de la ley 48. a.3) No se consideró afectado por la competencia convenida en el contrato de concesión porque la cuestiones involucradas eran de naturaleza extracontractual, y que estos casos en sería competente el juez del lugar del hecho, a elección del actor (citó el artículo 5, inciso 4, del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación), por tratarse de delito o cuasidelito desde el punto de vista del derecho civil. Agrega que siendo varios los lugares del hecho el actor podía elegir legítimamente entre cualquiera de ellos. a.4) El propio Estado demandado en la causa consintió su competencia, pues no efectuó ningún planteo cuestionando su jurisidicción. b) Con relación a la omisión de aplicar el artículo 195 bis del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación, dijo que al fallar la medida cautelar originaria, el 31 de julio de 2001, no pudo haber considerado la reforma que fuera introducida al artículo mencionado, recién por el decreto 1387/01, el 1 de noviembre de 2001 y que fue publicado en el Boletín Oficial el 2 de noviembre de 2001. Aseguró que no se ignoró el derecho aplicable, sino que se resolvió sobre la base del derecho vigente al momento de decidir. c) invocado, Con relación sostuvo, que a la aún verosimilitud sin expedirse del derecho sobre su constitucionalidad los decretos del Poder Ejecutivo que fueron mencionados por el accionante le estarían ocasionando un perjuicio directo a los ingresos que por ley y contrato le corresponden. Invocó el principio que dice regir a toda contratación administrativa, que constituye el mantenimiento de la ecuación económico financiera. d) Con referencia al "peligro en la demora", sostuvo que ella surgía del virtual estado de indefensión material en el que se encontraba el concesionario para poder cumplir con sus obligaciones con respecto al Estado -cuando éste no había cumplido las suyas- y que le podían ser exigidas en cualquier momento. Entendió que debía brindar tutela jurisdiccional para que las diferencias económicas de las partes puedan dirimirse en una instancia de conciliación administrativa o judicial mientras se prestaba con regularidad el servicio público, resguardando así los intereses de la comunidad. e) Con relación a la disposición prevista en el tercer párrafo cautelares que del artículo afecte los 195, que recursos impediría del Estado, aquellas sostuvo textualmente: "En innumerables causas, entre las que cabe citar principalmente aquellas referidas a la reducción salarial, establecida por la misma ley, en donde existen más de mil beneficiarios, he dejado sentado el criterio que presidió también el razonamiento seguido en los autos que originan la presente. "Así, he sostenido que dicha normativa implica cerrar las puertas de la jurisdicción para los administrados, implicando ello el reconocimiento de una mordaza al Poder Judicial, que por convicciones personales, de orden moral, social y constitucional, no puedo aceptar." "Criterio este que, por otra parte, fue ya ratificado por la Excma. Cámara Federal de Resistencia, al confirmar la resolución recaída en los autos caratulados 'GONZALEZ MANUEL Y OTROS C/ ESTADO NACIONAL DIRECCION NACIONAL DE GENDARMERIA S/ AMPARO Y MEDIDA CAUTELAR", Expte. Nº EX1 150/01, entre otros". f) Con referencia, a la cautela contra la codemandada PROCONSUMER el magistrado expresamente expuso que en ningún modo le impedía a esa asociación el acceso a la justicia sino que la limitaba únicamente respecto a aquellas acciones que interfiriesen en asuntos del mismo perfil que el que estaba resolviendo y que no afectasen el servicio público que procuraba resguardar. g) Aclara también el juez denunciado que la demanda Consejo de la Magistratura principal luego registrada con fue el interpuesta n 501/01, y tramitó se fue en su juzgado caratulada como "AEROPUERTOS ARGENTINA 2000 S.A. C/ PODER EJECUTIVO NACIONAL S/ DAÑOS Y PERJUICIOS". Este procese fue remitido a la Cámara en lo Contencioso Administrativo Federal de Capital Federal, el 08/05/03, conjuntamente con el expediente Nº 2734/02, caratulado "Cámara Federal de Apelaciones de Resistencia s/ Informe en autos 'Van Lacke, Carlos A. por el Organismo Regulador de Aeropuertos Argentina 2000 c/ Poder Ejecutivo Nacional s/ medida cautelar'". h.) Finalmente expresó, con relación a la nota recibida por parte de un Secretario Letrado de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que le requería la remisión de los autos principales, que no fue acompañada de un acto jurisdiccional válido y que no encontró el fundamento jurídico que lo obligase a desprenderse de la competencia declarada y consentida y que cuando se recibió el oficio la causa se encontraba en trámite de apelación que debía sustanciarse. Consideró que debía primar los principios constitucionales de juez natural y debido proceso. Cumplida la etapa procesal mencionada y ante la recepción de un fax por el que se le informaba de la resolución de avocación, remitió las actuaciones. En la audiencia oral el Dr. Carlos Rubén Skidelsky ratificó lo expresado por escrito y contestó todas las preguntas que le efectuaron los consejeros (conf. fs. 82/108). El sentido de sus dichos fue que consideró que debía otorgar la medida cautelar solicitada, porque era procedente jurídicamente al encontrarse satisfechos todos los requisitos establecidos por la ley para ello y que por otro lado, no se excedió en la fundamentación para no adelantar su opinión sobre el tema principal. CONSIDERANDO: 1º) Que los hechos denunciados no constituyen causal de mal desempeño, en los términos del artículo 53 de la Constitución Nacional, por lo que corresponde desestimar el cuestionamiento efectuado respecto de la conducta de Carlos Rubén Skidelsky, titular del Juzgado Federal de Resistencia. 2º) Que, como bien lo expresan los denunciantes, los hechos denunciados guardan relación con aquellos denunciados en el expediente Nº 206/01, caratulado "Coppola Marcelo Alberto c/titular del Juzgado Federal de Resistencia-Dr. Skidelsy, Carlos R.". Con relación a este expediente también se ha postulado la misma solución que aquí se propone, en orden a los fundamentos que a continuación se reproducirán. 3º) Que se expresó en el expediente mencionado, que las medidas cautelares son por naturaleza medidas provisorias que no producen efecto de cosa juzgada porque, ante hechos sobrevinientes, pueden ser dejadas sin efecto, sustituidas, ampliadas o disminuidas. Se sostuvo también que estas medidas no pueden ser interpretadas restrictivamente si no que deben ser otorgadas con criterio amplio, a fin de evitar que la sentencia se torne de cumplimiento ilusorio frustrando el derecho invocado. El exceso en la cautelar requerida se encuentra compensado con la posibilidad de reclamar los daños y perjuicios que ella pudiera haber ocasionado. 4º) Que aplicando la doctrina precedente a este caso y, teniendo en cuenta que el magistrado denunciado ha expresado suscintamente cuales fueron los fundamentos por los cuales consideró que el ordenamiento jurídico lo autorizaba al dictado de una medida de estas características, es que podemos concluir que ha actuado conforme las potestades que legal y constitucionalmente le fueron conferidas. 5º) Con relación a la supuesta incompetencia que se le atribuye para el dictado de la medida cautelar, cabe citar lo expuesto en la obra de los juristas Roland Arazi y Jorge A. Rojas ("Código Procesal Civil y Comercial de la Nación comentado, anotado y concordado con los Códigos Provinciales". Ed. Rubinzal Culzoni - Tomo I - pág. 28 - Ed. feb/2001), cuando dice en su comentario al art. 2º del código ritual: "Formas de prorrogar la competencia. La prórroga puede hacerse en forma expresa, mediante un acuerdo de las partes concertado antes o después de suscitado el conflicto, o tácita: el actor al promover la demanda ante un juez incompetente y el demandado al no plantear la incompetencia cuando es notificado del traslado de la demanda. Por ello el Consejo de la Magistratura juez no puede declararse incompetente de oficio si se trata de la competencia territorial y el asunto es exclusivamente patrimonial (art. 1º, CPN)" y continua a párrafo seguido: "La interposición de la demanda ante un juez incompetente prorroga la competencia en favor de ese juez, respecto del actor; prórroga que se consolida si el demandado no opone la excepción de incompetencia o promueve la cuestión por vía de inhibitoria, cuando ello sea procedente (art. 7º). La prorroga expresa debe realizarse por escrito y puede dejarse sin efecto por las partes de manera expresa o tácitamente promoviendo la demanda sin oposición de la contraria, ante un juez distinto del acordado (Fassi y Yañez, Código Procesal Civil y Comercial Comentado, anotado y concordado, Astrea, 1988, 1-32-); por ello en caso de que se accione en base de un documento donde se haya convenido la competencia, un juez distinto del consignado tampoco puede declararse incompetente de oficio". El magistrado interviniente, ante la concurrencia de un particular solicitando derechos afectados, justicia en salvaguarda de sus pudo actuar a fin de garantizarle el acceso a la justicia en virtud de la urgencia invocada y siguió actuando mientras su competencia no fue cuestionada por la parte afectada por la medida cautelar. 7º) Que los requisitos para el dictado de la medida cautelar se encontraban cumplidos, a criterio del Dr. Carlos Skidelsky quien así lo fundamentó en su decisión. Ellos son verosimilitud del derecho, peligro en la demora y contra cautela, cuestiones de exclusiva y privativa valoración del juez de grado. Asimismo es dable aclarar, que se dejaron subsistentes todos los derechos y remedios procesales que a posterior pudieron ejercer la demandada en guarda a sus derechos y garantías y que las apelaciones tuvieron efecto suspensivo. Cabe puntualizar que, la Corte Suprema de Justicia de la Nación tiene dicho que "las medidas cautelares no exigen de los magistrados el examen de certeza sobre la existencia del derecho pretendido sino sólo de su verosimilitud. Es más, el juicio de verdad en esta materia se encuentra en oposición a la finalidad del instituto cautelar, que no es otra cosa que atender a aquello que no excede del marco de lo hipotético, dentro del cual, asimismo, agota su virtualidad" (fallos 306: 2060). 8º) Que fueron los propios mecanismos procesales previsto para salvar los eventuales errores de los jueces los que han impedido que la medida cautelar dispuesta por el Dr. Carlos Skidelsky haya causado estado, o se haya ejecutado. La existencias de estos remedios tiene por fundamento las distintas valoraciones que pueden existir acerca de cúal es la solución jurídica correcta para un conflicto, de modo de unificar los criterios y corregir los excesos o defectos, sin que, por lo tanto, sea necesario recurrir a medidas extremas, como la remoción del magistrado, pues en ese caso los jueces perderían la libertad de criterio y tranquilidad, que necesitan para cumplir con su función. En este orden de ideas ha sostenido Alfredo Palacios, en ocasión del juicio político de los miembros de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que: "así como ninguno de los miembros del Congreso puede ser acusado, interrogado judicialmente ni molestado por opiniones que emita en desempeño de su mandato; ni el Poder Ejecutivo puede atribuirse funciones judiciales, recíprocamente los magistrados no pueden ser enjuiciados por las doctrinas o convicciones que sustenten en sus fallos porque entonces desaparecería totalmente su indepen-dencia y quedaría abolido el principio de la separación de poderes" (Alfredo Palacios, "La Corte Suprema ante el Tribunal del Senado", Ed. Jus, Buenos Aires, 1947, pág. 252). 9º) Que la tarea de juzgar no se encuentra exenta de la posibilidad de error y negar esa hipótesis sería apartarse de la realidad. Con acierto se ha señalado que si cada juez se hallase sujeto al temor de responder patrimonialmente por la más mínima equivocación, sólo un mendigo o un tonto aceptaría desempeñar ese cargo ("Miller v. Hope, House of Lords", April 1. 1824). La necesaria serenidad que debe presidir el proceso de juzgamiento se vería seriamente resentida si el magistrado o funcionario debiera temer por las represalias que, en forma de juicios de responsabilidad o de denuncias, pudieran adoptar quienes están disconformes con el fallo, aunque en él hubiese efectivos desaciertos. Consejo de la Magistratura 10º) Que cada uno de los agravios expresados por los denunciantes fueron contestados satisfactoriamente por el Dr. Carlos Skidelsky en su descargo, con lo cual puede colegirse que no existió una decisión privada de fundamentos objetivos ni una intención espuria de beneficiar a una de las partes; por el contrario se trató de una decisión jurisdiccional de las que diariamente disponen los jueces nacionales cuando le llevan cuestiones urgentes que merecen una decisión rápida que si bien puede afectar un derecho, pretende prevenir un daño mayor. 11º) Que en reiteradas oportunidades este Consejo de la Magistratura ha sostenido que las decisiones de los jueces contienen a veces una mayor o menor dosis de opinabilidad la cual más allá de la amplitud o rigidez del criterio empleado, y del grado de discrepancia que pueda observarse, no puede ser considerada, siempre y sin más, como una manifestación de mal desempeño o delito en ejercicio de la función. Por otro lado las resoluciones de los magistrados son actos jurisdiccionales sujetos a ser revisados por otras instancias de control y que la ley le otorga a los interesados los mecanismo idóneos para hacerlo efectivo. Por ello SE RESUELVE: 1º) Desestimar el pedido de apertura del procedimiento de remoción del doctor Carlos Rubén Skidelsky, titular del Juzgado Federal de Resistencia, Provincia del Chaco. 2º) Notificar al magistrado denunciado, y archivar las actuaciones. Regístrese. Firmado por ante mí, que doy fe. Fdo.: Jorge O. Casanovas - Bindo B. Caviglione Fraga - Abel Cornejo - María Lelia Chaya - Joaquín Pedro da Rocha - Juan C. Gemignani (en disidencia) - Claudio M. Kiper - Luis E. Pereira Duarte (en disidencia) - Victoria P. Pérez Tognola - Miguel A. Pichetto - Marcela V. Rodríguez (en disidencia) - Pablo G. Hirschmann (Secretario General)