Resumen: M-002 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 Efectos del estado civil y ámbito de residencia sobre algunos indicadores de riesgo aterogénico en población geriátrica del nordeste argentino Mussart, Norma B. - Coppo, José A. - Coppo Diego J. Fac. Ciencias Exactas UNAM Fisiología Humana, Fac.Cs. Exactas UNNE Sargento Cabral 2139 - (3400) Corrientes - Argentina. Tel./Fax: +54 (03783) 425753 - E-mail: jcoppo@vet.unne.edu.ar ANTECEDENTES El estado civil condicionaría determinados hábitos de vida 13 , que podrían repercutir sobre los indicadores de riesgo aterogénico. La circunstancia de estar casado, soltero, viudo o separado implicaría diferencias en la dieta, actividad física, horas de sueño y consumo de alcohol y tabaco 12,14,19 . Por otra parte, el ámbito de residencia (zona geográfica, clima, altitud, tipo de agua de bebida, densidad poblacional, grado de contaminación ambiental) también influiría sobre el modus vivendi de las personas (alimentación, tipo de ocupación laboral, estrés) 2,3,4,8,18,20,26 . En el nordeste argentino se han estudiado indicadores de riesgo aterogénico en población general de Corrientes 1 y Misiones 7 , incluyendo personas sanas y enfermas. El propósito de este trabajo fue investigar la influencia del estado civil y lugar de residencia sobre los valores plasmáticos de algunos parámetros indicadores de riesgo aterogénico inherentes al metabolismo glucídico y lipídico en ancianos clínicamente sanos de las provincias de Corrientes, Misiones y Chaco, en el entendimiento que esta franja poblacional es la más expuesta a la morbimortalidad por aterosclerosis 3,9,15,16 . MATERIALES Y MÉTODOS Diseño experimental. Se empleó un diseño prospectivo de bloques completamente aleatorizados 24 . Las unidades experimentales fueron 320 personas razonablemente sanas 5 con edades entre 60 y 92 años, aproximadamente 50% de cada sexo, exentos de medicación. Ritmo circadiano y efecto post-prandial quedaron marginados del diseño debido a que las muestras se tomaron a la misma hora, en condiciones basales y bajo ayuno previo. Las unidades experimentales se particionaron alternativamente en bloques con presunción de homogeneidad. Las variables dependientes (cuantitativas continuas) fueron los valores plasmáticos obtenidos en el laboratorio. Las variables independientes (categóricas) a considerar alternativamente acorde a la presunción de variabilidad indicada por las referencias bibliográficas, fueron el estado civil (sujetos casados, viudos, separados, solteros) 19 , el ámbito de residencia (urbano, rural y personas internadas en instituciones geriátricas y asilos) 15,20,25 y la zona geográfica (provincias de origen) 1,7 . Toma de muestras y determinaciones de laboratorio. Las muestras se tomaron en el domicilio del encuestado, en horario matutino (8-9 AM), con la persona descansada, bajo ayuno de 12 horas y en posición sentada. Por venopunción radial o cefálica se obtuvo sangre, que tras coagular fue centrifugada para separar el suero. En un espectrofotómetro Labora Mannheim 4010 digital se efectuaron determinaciones bioquímicas de colesterol total CT (método oxidasaperoxidasa, lecturas a 505 nm, reactivos Wiener), triglicéridos TG (enzimático GPO-PAP, 505 nm, Wiener), glucosa GL (oxidasa-peroxidasa, 505 nm, Wiener) y fructosamina FR (azul de nitrotetrazolio, 546 nm, Boehringer). Por electroforesis realizada en aparato Chemar CHF-I-3 con soporte de gel de agarosa (Sigma), buffer de veronal sódico y coloración Fat Red 7B (Biopur), se separaron las lipoproteínas alfa (HDL), prebeta (VLDL) y beta (LDL), valorándose ulteriormente en un densitómetro Citocon 440. Procesamiento estadístico. La normalidad distributiva fue verificada por test de Wilk-Shapiro. Se efectuaron estadísticas descriptivas paramétricas de tendencia central (media aritmética) y dispersión (desvío estándar). El análisis de la variancia (ANOVA) se realizó por modelo lineal a dos vías (bloque x tratamiento), previa verificación de homogeneidad de la variancia (test de Bartlett). Las comparaciones de medias se llevaron a cabo mediante el test de Tukey y la correlación por el test de Pearson. Los cálculos se realizaron en un programa informático (Statistix 1996). Para todas las inferencias se estipuló un nivel de p < 0.05, por debajo del cual se rechazó la hipótesis nula de igualdad 24 . RESULTADOS Y DISCUSIÓN La Tabla 1 muestra que las concentraciones plasmáticas de GL y FR fueron significativamente más altas en viudos y más bajas en casados, con valores intermedios para separados y solteros. Para CT, las personas viudas y casadas registraron medias significativamente más altas que las de personas solteras y separadas. La predominancia de TG fue alta en separados y baja en casados, pero las diferencias no resultaron significativas. VLDL fueron altas en solteros y bajas en casados. Las lipoproteínas indicadoras de riesgo aterogénico (LDL) fueron significativamente más altas en viudos y casados, con respecto a solteros y separados. El factor de protección (HDL) apareció significativamente elevado en separados y solteros, con relación a viudos y casados. Resumen: M-002 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 Tabla 1. Valores según el estado civil de las personas encuestadas estado civil parámetro soltero casado separado GL (g/l) 0.93 a ± 0.10 0.89 a ± 0.08 0.92 a ± 0.09 FR (umol/l) 328 a ± 46 309 a ± 43 331 a ± 48 a b CT (g/l) 2.08 ± 0.44 2.44 ± 0.51 1.97 a ± 0.38 a a TG (g/l) 1.31 ± 0.27 1.26 ± 0.23 1.42 a ± 0.30 a b HDL (%) 36.2 ± 4.6 31.5 ± 4.2 37.4 a ± 5.2 a a VLDL (%) 12.5 ± 2.4 9.6 ± 1.9 12.4 a ± 2.2 a b LDL (%) 51.3 ± 7.2 58.9 ± 8.4 50.2 a ± 6.9 (ξ ± DE). viudo 0.99 b ± 0.13 363 b ± 51 2.36 b ± 0.49 1.35 a ± 0.27 33.7 b ± 4.4 10.2 a ± 2.1 56.1 b ± 8.2 ξ: media aritmética, DE: desvío estándar, GL: glucosa, FR: fructosamina, CT: colesterol total, TG: triglicéridos, HDL-VLDL-LDL: lipoproteínas de alta, muy baja y baja densidad. En cada fila, letras distintas indican diferencias significativas (test de Tukey, p < 0.05). Se asevera que el cambio de estado civil provocaría importantes modificaciones del estilo de vida 13 . Así, la viudez y el divorcio implicarían estados de estrés que frecuentemente conducirían a desarreglos en la dieta y los hábitos cotidianos. En las mujeres la separación matrimonial suele inducir intentos de reducción de sobrepeso 14 y en los hombres estimularía el mayor consumo de tabaco y alcohol 12 . En este estudio, las personas casadas exhibieron deseables bajos niveles de GL, FR, TG y VLDL, pero también indeseables tasas de HDL y LDL. En las mujeres casadas o en pareja, el estrés marital incrementaría hasta tres veces más el riesgo de eventos coronarios 19 . Las mujeres tendrían más probabilidad que los hombres de sufrir infarto agudo de miocardio antes de los 70 años. Si bien el estrés laboral sería la principal causa relacionada con el aumento de disfunciones cardíacas en los hombres, algunos estudios habrían demostrado que en las mujeres sería más importante el estrés marital antes que el laboral 19 . El hecho de estar casado correlacionaría significativamente con el sobrepeso 14 . En este trabajo, los viudos registraron las más altas concentraciones de GL, FR y CT, ocupando el segundo lugar en la nómina de más altos valores de TG y LDL, con bajos niveles de HDL. Los separados registraron los niveles más altos de TG y -junto a los solteros- las más altas proporciones de HDL. Según algunos trabajos, ser separado o divorciado frecuentemente llevaría al consumo excesivo de alcohol, con los consiguientes trastornos lipídicos del plasma 23 . La ruptura del vínculo matrimonial habitualmente conduciría a nuevas relaciones de pareja, generalmente inestables. Los pacientes con enfermedad cardíaca que están felizmente casados sobrevivirían más tiempo en comparación con los que mantienen relaciones inestables. Una buena relación marital ayudaría a cumplir más estrictamente la dieta recomendada, los ejercicios y la medicación 10 . El estado civil de las personas influiría sobre los hábitos de vida, la obesidad y el consumo de cigarrillos 13 . Tabla 2. Valores según ámbito de residencia y provincia de origen (ξ ± DE). ámbito de residencia provincia de origen parámetro urbano rural geriátrico Corrientes Chaco Misiones GL (g/l) 0.91 a ± 0.12 0.88 a ± 0.09 1.07 b ± 0.15 0.91 a ± 0.11 0.95 a ± 0.14 0.93 a ± 0.13 FR (umol/l) 334 a ± 49 302 b ± 45 359 c ± 53 334 a ± 49 335 a ± 50 331 a ± 48 a a a a a CT (g/l) 2.21 ± 0.46 2.13 ± 0.42 2.18 ± 0.45 2.18 ± 0.45 2.15 ± 0.43 2.16 a ± 0.43 TG (g/l) 1.26 a ± 0.28 1.35 a ± 0.32 1.30 a ± 0.28 1.27 a ± 0.49 1.42 b ± 0.52 1.25 a ± 0.47 HDL (%) 35.4 a ± 5.1 39.8 a ± 5.4 33.3 a ± 5.1 34.5 a ± 5.1 33.8 a ± 4.9 35.2 a ± 5.2 a a a a VLDL (%) 10.4 ± 2.2 10.5 ± 2.2 11.0 ± 2.4 10.8 ± 2.3 11.0 a ± 2.3 9.4 a ± 2.1 a a a a a LDL (%) 54.2 ± 8.2 49.7 ± 7.7 55.7 ± 8.4 54.7 ± 7.9 55.2 ± 8.1 55.4 a ± 8.3 ξ: media aritmética, DE: desvío estándar, GL: glucosa, FR: fructosamina, CT: colesterol total, TG: triglicéridos, HDL-VLDL-LDL: lipoproteínas de alta, muy baja y baja densidad. En cada fila, letras distintas indican diferencias significativas (Tukey test, p< 0.05). La Tabla 2 muestra que los ancianos internados en asilos e instituciones geriátricas registraron los más altos valores de GL, FR (significativos) y LDL, así como los más bajos de HDL (no significativos), ocupando el segundo lugar en importancia de elevaciones de CT y TG (no significativos). El ANOVA no declaró diferencias significativas para VLDL en ningún grupo. Para la interpretación de estos datos es necesario tener en cuenta que los ancianos internados son generalmente los más viejos y de más quebrantado estado de salud. En contraposición, ancianos orientales recluidos en asilos habrían registrado disminuciones de FR y CT, quizás como consecuencia de estados de subnutrición 25 . Personas de la tercera edad que serían competentes y aún tendrían mucho que aportar a la sociedad, cada vez con más frecuencia son confinadas en instituciones geriátricas para liberar a la familia de su responsabilidad directa. Los cuidados que antes se prodigaban en el hogar serían hoy traspasados a las instituciones, suprimiendo un nexo sociológico de fundamental importancia. “Las personas, al igual que los animales heridos, quieren ir a su casa para morir” 6 . En este estudio, los gerontes residentes en áreas rurales del nordeste argentino (campos o pueblos menores de 2000 habitantes) exhibieron las mayores concentraciones plasmáticas de HDL y TG, así como las menores de LDL, CT, GL y FR. Concordantemente, mejicanos de la tercera edad residentes en predios rurales, especialmente varones, habrían mostrado menores valores de CT e insulina, así como altos índices de C-HDL, en comparación con los habitantes de centros Resumen: M-002 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 urbanos, quienes habrían exhibido niveles más elevados de C-LDL. Las diferencias fueron atribuidas al hábito de vida y a la dieta, que en el medio rural era baja en lípidos y alta en carbohidratos y fibra 2 . En áreas urbanas de Latinoamérica la prevalencia de diabetes tipo 2 sería del 7-8%, en tanto que en zonas rurales disminuiría al 1-2%; el envejecimiento sería estadísticamente trascendental para esta afección, desde el momento que su prevalencia es del 5% hasta los 30 años y se eleva al 20% o más después de los 60 años de edad 3 . En personas diabéticas de áreas rurales del sudeste asiático, FR habría sido más alta que en pacientes urbanos con la misma afección, quizás porque estos últimos dispondrían de más adecuados controles 20 . Estudios realizados en comunidades rurales hindúes revelaron que el tabaquismo habría resultado mayor en hombres (51%) que en mujeres (5%); los fumadores habrían mostrado menor nivel educacional y alta prevalencia al consumo de alcohol, que los predispondría a mayor riesgo de enfermedad coronaria 20 . Tiempo atrás, la población rural de países latinoamericanos habría tenido un estilo de vida más sencillo, con menos estrés, mayor actividad física, alimentación más sana y bajo nivel de CT. La obesidad habría sido excepcional y el riesgo aterogénico menor. Sin embargo, investigaciones recientes que compararon mejicanos residentes en áreas urbana y rural, revelaron que entre ellos no se habrían registrado diferencias significativas en los niveles lipídicos plasmáticos (CT, TG, HDL, LDL), circunstancia que se atribuye a una transición en los hábitos de la vida rural, especialmente alimentarios 8 . En el presente estudio, personas de la tercera edad que residían en áreas urbanas revelaron los más más bajos niveles de TG (no significativos) y los más altos de CT. Coincidentemente, se ha reportado que el CT aumentaría más intensamente en gerontes residentes en áreas urbanas que en zonas rurales 4 . En nuestro país, la mayor cantidad de individuos senectos reside predominantemente en las zonas urbanas (15.4% mujeres y 11.6% hombres), siendo menor la población de áreas rurales (11.6% mujeres y 11.3% hombres) 22 . En el ámbito urbano, mejicanos adultos habrían registrado alta prevalencia de obesidad, tabaquismo, hipertensión y diabetes, con el consiguiente aumento del riesgo coronario 2 . Comparando gerontes residentes en áreas rurales y urbanas, se demostró que estos últimos mostrarían mayor riesgo aterogénico, debido a la mayor incidencia de diabetes, obesidad central y hábitos dietarios relacionados con altos ingresos de grasas y bajos de carbohidratos y fibra, que condicionarían aumentos de CT (como en el presente estudio) y también de TG y C-LDL 15 . La zona geográfica de residencia (latitud, altitud, clima) y el estilo de vida por ella condicionado, harían variar el intervalo de referencia de los parámetros útiles para evaluar riesgo aterogénico, más aún en ancianos 21 . Sin embargo, las diferencias entre gerontes de Corrientes, Chaco y Misiones fueron escasas (Tabla 2), quizás por la contigüidad territorial, etnia análoga y hábitos similares. La única diferencia significativa fue el más alto nivel de TG obtenido por ancianos de Chaco, quienes también registraron -no significativamente- los niveles más elevados de GL, FR y VLDL, así como los más bajos de CT y HDL. Los residentes en Corrientes mostraron valores ligeramente más altos de CT y más bajos de GL y LDL. En gerontes de Misiones se hallaron tasas algo más altas de HDL y LDL y más bajas de FR, TG y VLDL. En el conjunto de ancianos de las tres provincias aquí estudiadas se constataron correlaciones significativas entre edad y TG, así como entre TG y CT. Según otros estudios, en gerontes de Corrientes, la elevación de TG no habría acompañado en forma lineal al aumento de CT 1 . En residentes de Buenos Aires 11 , así como en norteamericanos 5 , no se habrían verificado asociaciones de TG con edad y sexo, como las registradas en el presente estudio. En individuos jóvenes y adultos de Tucumán, CT habría registrado promedios de 2.02 y 2.08 g/l en hombres y mujeres respectivamente 17 , tan altos como los aquí obtenidos para personas de la tercera edad (2.33 y 2.02 g/l respectivamente). Igualmente altos serían los niveles de CT relatados para habitantes del sur argentino, donde habría aumentado hasta 2.59 g/l a los 60 años en mujeres y 2.69 g/l a los 50 años en hombres, para luego declinar ligeramente 9 . Las correlaciones negativas halladas entre C-HDL y TG en pobladores sanos de la patagonia, tanto de varones como mujeres 9 , coincide con el alto grado de asociación lineal entre HDL y TG aquí obtenido para ancianos sanos. En el sur argentino los niveles de C-HDL habrían sido significativamente más bajos en pacientes con enfermedad coronaria que en controles sanos (0.41±0.10 versus 0.49±0.13 g/l) 9 . Un estudio realizado en 280 ancianos de Corrientes, agrupados según quinquenio de edad a partir de los 60 años (27.5% varones y 72.5% mujeres), reveló que 102 (36.4%) fueron hiperlipémicos. El CT elevado fue un hallazgo común a todos los grupos, con mayores valores en mujeres que en varones de cada grupo 1 . Las diferencias con los niveles aquí obtenidos seguramente se deben a que no se trataba de gerontes sanos. Pacientes coronarios acusarían TG significativamente más altos (1.69±1.04 g/l) que en los controles sanos (1.34±0.66 g/l) 9 . En Misiones, para diabéticos tipo II se hallaron valores de FR mayores de 320 umol/l en el 58% de pacientes sin compromiso vascular y en el 73% en pacientes con compromiso vascular, así como diferencias para CT > 2 g/l (50 y 71% en cada grupo), CT > 2.40 g/l (14 y 37%), TG > 1.50 g/l (86 y 66%), TG > de 2 g/l (36 y 53%), C-HDL < 0.40 g/l (43 y 61%), C-LDL > 1.60 g/l (7 y 29%) y GL > 1.40 g/l (36 y 68% respectivamente). El estudio resalta que entre los mecanismos implicados en la aterogénesis, debería prestarse especial atención a la glicosilación proteica y a las alteraciones lipoproteicas propias de la diabetes 7 . CONCLUSIÓN Con referencia a la situación de agregación familiar, los gerontes viudos acusaron los más altos niveles de indicadores de riesgo aterogénico y las tasas más bajas del factor de protección. Los individuos solteros y separados exhibieron los Resumen: M-002 UNIVERSIDAD NACIONAL DEL NORDEST E Comunicaciones Científicas y Tecnológicas 2005 valores más altos de HDL y los más bajos de CT y LDL. Los ancianos casados revelaron altas concentraciones de CT y LDL. La pérdida del cónyuge aparece como la causa más importante de desajuste metabólico. En cuanto al ámbito de residencia, la internación en instituciones geriátricas produjo los desequilibrios más marcados, en tanto que la vida en el medio rural se manifestó como la más conveniente para la salud de los ancianos. BIBLIOGRAFÍA 1. 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