Cultura de Turquía Desde sus inicios la rica y variada cultura turca ha estado marcada por el nomadismo y el Islam, que ha contribuido a erigir ejemplares construcciones. Baile El Horon es el baile del Mar Negro. Es un baile masculino en el que cada hombre va vestido con un traje negro muy ajustado con adornos de plata, moviéndose rápidamente al son del kemençe, un instrumento musical muy parecido al violín. El Kasik Oyunu o Baile de la Cuchara es típico de la zona de Konya y Silifke. Es un baile en el que participan hombres y mujeres vestidos con trajes de vivos colores al ritmo que producen con las cucharas que llevan en las manos. La danza egea es el Zeybek. Es una danza masculina de ritmo lento. Cada uno de los hombres simboliza el ritmo y el coraje, reciben el nombre de efe. El Kiliç Kalkan es la danza de Bursa. En el baile participan sólo hombres ataviados con el traje de los primeros soldados otomanos. Al ritmo que producen las espadas chocando unas contra otras y sin música, reproducen la conquista otomana de la ciudad de Bursa. Música Los Asik o trovadores han transmitido la música popular a lo largo de los siglos, cantando de pueblo en pueblo acompañados del saz, instrumento musical parecido a la mandolina. La música militar otomana y la música religiosa de los Derviches Danzantes o Mevleviler completan el conjunto de la música popular. La primera es interpretada por el Mehter Takimi, en el Museo Militar de Istanbul. La música ritual que acompaña la danza de los Derviches está dominada por el sonido de la flauta ney. De estas épocas de apogeo de la música turca se ha conservado, entre otros instrumentos, el santur, un objeto parecido a la lira con 12 cuerdas, el saz, que se empezó a emplear en el siglo XII, o el tanbur, con más de un metro de longitud y que se debe tocar con una púa muy gruesa. Los pueblos del Mar Negro también conservan el kemençe, un instrumento de unos cincuenta centímetros y que tiene tres cuerdas y un arco, y el çeng o arpa de más de 14 cuerdas, que se sigue tocando en las ceremonias conmemorativas de Mevlana, en diciembre. Narguile El narguile o pipa de agua es una tradición muy arraigada en la población turca. Aunque no es de origen turco, llegó a Turquía en el siglo XVI y desde entonces es muy popular entre los locales. Probablemente el narguile surgió en un país asiático, pero no se extendería por todo el país hasta la llegada del tabaco de América. Ya durante el Imperio Otomano se establecieron los diferentes partes del narguile: - Lüle: En esta cazoleta se coloca el carbón que calienta el tabaco y el tabaco// - Ser: Es el tubo metálico que une el lüle con el agua de la base// - Shishe: Este recipiente, que puede ser de cristal, cerámica o metal, se llena de agua y miel, normalmente// - Marpuch: Es el tubo flexible por el que se aspira para fumar// - Sipsi: Son las boquillas que se enganchan al marpuch. El narguile o pipa de agua, nombre que viene del persa “narguil”, se conoce en los países árabes como “shisa”, en Irán se denomina “kalyan” y en otros muchos países como “chachimba”. Hammam Los primeros turcos que se asentaron en la Anatolia, allá por el siglo XI y en aquel entonces ocupada por los romanos, intercambiaron con este pueblo algunas costumbres como el baño romano. Tradición que con los años se fue expandiendo por todo el país, de ahí que son muchos los sitios turcos en los que aún se pueden observar viejas ruinas de algunos baños como el de Éfeso, Afrodisias o Perge. En Bursa se conserva el rito de “lavar a la novia”, que consiste en alquilar un baño turco unos días antes de una boda sólo para las mujeres. Allí éstas no sólo disfrutan de los masajes y baños, sino que también cantan y bailan mientras dura la fiesta. El típico baño turco cuenta con tres fases. La llamada por los romanos “Apoditorium” corresponde a la primera fase en la que hay que pasar a una sala grande en la que normalmente se dejan todas las pertenencias y en la que hay que ponerse el peştemal (una fina toalla de tela). En la siguiente fase se accede a una sala redonda de temperatura intermedia con unos nichos pegados a la pared que se llenan de agua caliente y fría. Mojados se pasa a la sauna a sudar el tiempo que cada uno crea oportuno. De vuelta a la sala grande se puede optar por el “peling” (se frota la piel con un guante especial para abrir los poros y realizar una limpieza profunda y reactivar la circulación sanguínea). Antes de concluir el baño con un masaje a la turca, hay que enjabonarse. Los baños turcos, que normalmente están decorados en su interior con mármol para mantener el calor, también llegaron a cumplir una función social y cultura. Sinan fue el arquitecto que más baños turcos erigió en Estambul. Se calcula que de los más de 150 hammam que había en Estambul en el siglo XVIII, la mayoría fueron obra suya, como el Hammam de Mihrimah Sultán. Baño de Çekirge- La ciudad de Bursa aún conserva este maravilloso baño con agua termal Hammam de Suleymaniye- Es de los únicos baños tradicionales turcos de Estambul que dan servicio a la vez a hombres y mujeres. Takunya- Hoy en día estas zapatillas de madera han sido sustituidas por zapatillas de plástico. Kese- Así se llama el guante con el que los trabajadores de los hammam abren los poros a los clientes. Alfombras y Kilims La alfombra más antigua que se ha encontrado en Turquía pertenece al siglo V a. C. Descubierta en el valle de Pazirik, donde habitualmente se asentaban los pueblos nómadas turcos, se cree que las utilizaban para tapar el suelo y recubrir las tiendas durante los fríos inviernos de las zonas montañosas. Desde aquel período se estima que los turcos no han dejado de tejer alfombras que también han servido, a partir de la conversión al Islam de los pueblos nómadas, para orar. Las alfombras turcas, que se han realizado en lana, lana y algodón o seda con tonalidades vistosas, cambian dependiendo de la región en la que se manufacturen. Están las alfombras de punto anudado y kilims, que son un poco más rugosas, pero carecen de “pelos”. Kilims- Cada región turca emplea una técnica distinta en la manufacturación del punto de los kilims. Los primeros adornos de los kilims, probablemente, se realizaron en la prehistoria. Alfombras de la Corte- Por su calidad y originalidad los sultanes turcos solían elegir las alfombras de Uşhak y Kumkapi para decorar sus palacios. Nudo persa- También conocido como el nudo de Senneh, esto nudos consiguen alfombras más sólidas y con motivos más minuciosos. Alfombra de oración- Cuando los nómadas turcos de la Anatolia se convierten al Islam, las alfombras ya no sólo tenían un uso cotidiano, también servían para orar. A partir de ese momento en las alfombras se representaba el nicho. Adornos- Los primeros kilims turcos se adornaban con dibujos geométricos. Con el tiempo se fueron añadiendo nuevos diseños como enormes dibujos florales en los laterales.