La enfermedad meningocócica: Ayude a prevenirla La enfermedad meningocócica es una grave infección que se puede prevenir con una vacuna. Se recomienda la vacuna antimeningocócica conjugada para todos los niños y adolescentes entre 11 y 18 años de edad. Los niños deben recibir esta vacuna entre los 11 y 12 años de edad y luego se les debe administrar una dosis de refuerzo a los 16 años. Síntomas de la enfermedad meningocócica Los síntomas de enfermedad meningocócica generalmente son: aparición repentina de fiebre, dolores de cabeza y rigidez en el cuello. Puede comenzar con síntomas similares a los de la influenza (gripe), y con frecuencia causar también náuseas, vómitos, sensibilidad a la luz, sarpullido y confusión. Aún con tratamiento antibiótico, las personas mueren en alrededor del 10-15% de los casos. Aproximadamente el 15% de los sobrevivientes presenta discapacidades a largo plazo, como pérdida de una o más extremidades, sordera, problemas del sistema nervioso o daño cerebral. Cómo se propaga la enfermedad meningocócica La enfermedad meningocócica se puede transmitir de persona a persona. Las bacterias se propagan mediante el intercambio de secreciones respiratorias y de garganta durante el contacto físico cercano o prolongado (por ejemplo, al toser o besarse), especialmente si se vive en el mismo hogar o dormitorio universitario. Muchas personas portan las bacterias en la garganta, pero no padecen la enfermedad meningocócica. Como hay muchas personas portadoras de la bacteria, la mayoría de los casos de enfermedad meningocócica parecen ser al azar y no están vinculados a otros casos. Si bien cualquier persona puede contraer la enfermedad meningocócica, tienen un mayor riesgo los adolescentes y los estudiantes universitarios de ingreso reciente que viven en los dormitorios de la universidad. Prevención de la enfermedad meningocócica Lo bueno es que hay una vacuna para ayudar a prevenir la enfermedad meningocócica y puede prevenir 2 de las 3 cepas que más comúnmente causan la enfermedad. Se recomienda habitualmente la vacuna antimeningocócica conjugada para todos los niños y adolescentes entre 11 y 18 años de edad. Los niños deberían recibir la primera dosis de esta vacuna, conocida como vacuna antimeningocócica conjugada, en la consulta médica de rutina a los 11-12 años de edad. Se recomienda que los adolescentes reciban una dosis de refuerzo a los 16 años. Si su hijo adolescente no se puso la vacuna en la consulta de rutina, hable con el médico sobre si la puede recibir ahora, especialmente si su hijo se va a mudar a los dormitorios universitarios. Los CDC crearon un video para darle más información acerca de la enfermedad meningocócica y cómo prevenirla. Este video presenta a una doctora de los CDC experta en meningitis, y lo más importante es que también es una mamá preocupada. Puede descargar el video o el podcast en CDC-TV o ver el material en su teléfono celular. Vacunas para adolescentes Su hijo preadolescente o adolescente corre el riesgo de contraer otras enfermedades que se pueden prevenir con vacunas, como la tos ferina (pertussis) y el VPH. Si su hijo no ha ido al chequeo de rutina del año anterior, haga una cita ahora y pregúntele al pediatra cuáles son las vacunas recomendadas. Fuente: Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades www.cdc.gov/spanish