red(1039) la guerra contra el paraguay en sus fotografías

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Red Patrimonio Paysandu
RED(1039) LA GUERRA CONTRA EL PARAGUAY EN SUS FOTOGRAFÍAS
jueves, 08 de noviembre de 2007
Biblioteca Nacional invita a la inauguración de la exposición
"La guerra contra el Paraguay en sus fotografÃ-as"
"Ver duele"
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Sala Vaz Ferreira. 18 de Julio 1790
12 de noviembre de 2007, hora 19.
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Declarada de interés nacional por Presidencia de la República.
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La Guerra contra el Paraguay en sus fotografÃ-as
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La Guerra contra el Paraguay ocurrida entre 1865 y 1870, fue llamada de la "Triple Alianza" porque la República
Argentina, el Imperio del Brasil y la República Oriental del Uruguay se unieron en alianza ofensiva y defensiva contra el
gobierno paraguayo presidido por Francisco Solano López.
No fue una guerra más dentro de la historia sudamericana, fue la gran matanza del pueblo paraguayo. Todos los
paÃ-ses que participaron de esta conflagración sufrieron grandes pérdidas de vidas humanas y gastaron enormes
sumas de dinero. Pero el Paraguay, paÃ-s que prometÃ-a un desarrollo industrial y cuya población era de 1.300.000
personas, fue liquidado. Al fin de la contienda sólo quedaron 200.000 sobrevivientes, y la mayorÃ-a eran mujeres,
ancianos y niños.
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Esta colección denominada originalmente " La guerra contra el Paraguay" , y difundida por anuncios como " La guerra
ilustrada" , ocupa el tercer lugar en la historia de la fotografÃ-a bélica del mundo y la primera guerra fotografiada en
Sudamérica. Las fotos de la Guerra contra el Paraguay (1864 - 1870) integran una importante colección adquirida en
1956 por la Biblioteca Nacional, al historiador José MarÃ-a Fernández Saldaña. La colección completa incluye piezas
que no pertenecen a la serie de Bate & CÃ-a., empresa fotográfica establecida en Montevideo en 1861.
La fotografÃ-a es el soporte no tradicional más antiguo considerado documento de archivo. La documentación
registrada en soportes no tradicionales es abundante, diversa y compleja; plantea inconvenientes desde el orden
jurÃ-dico hasta técnicos para su almacenamiento y climatización. Esta exposición es producto de la labor de custodia,
conservación y difusión del patrimonio documental, tarea primordial de la Biblioteca Nacional.
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La mayorÃ-a de las imágenes de esta guerra fueron registradas por la casa W. Bate & CÃ-a. Transcurrido el primer año
bélico de la Triple Alianza, la casa Bate, con afán lucrativo, decidió enviar un equipo de fotógrafos al frente de batalla y
a su regreso editar una carpeta con copias originales. La publicitaron con avisos que anunciaban ofrecer " preciosas
vistas fotográficas" , y al precio módico de nueve pesos, el cliente podÃ-a obtener " las ruinas de Itapurú" , " prisioneros
paraguayos tomados por Flores" o " una familia de indios pampas" .
Según el equipo de historiadores que desarrollaron su labor en la Biblioteca Nacional, el fotógrafo comisionado fue
Javier López, quien serÃ-a el autor de las dos primeras colecciones, aunque en su segundo viaje al Paraguay lo
acompañaron dos ayudantes. Posiblemente uno de ellos fuese Esteban GarcÃ-a, lo cual ha generado confusión sobre
la identidad del autor de las fotografÃ-as. La nómina total debe haber superado los cuarenta registros.
Existen registros anteriores de conflictos bélicos en forma de daguerrotipos, como la Guerra entre Estados Unidos y
México (1846 1848), las guerras Sikh en la India inglesa (1848 - 1849) y la de Birmania (1852), y en el caso de la
Historia Nacional, las referidas al sitio de Paysandú (1864). Sin embargo, no se les considera de la misma importancia
por haberse tratado de imágenes ocasionales -de las cuales se conservan muy pocas- y no de coberturas
periodÃ-sticas.
Es asÃ- que la historia de la fotografÃ-a bélica comienza con los registros tomados por Roger Fenton sobre la Guerra de
Crimea (1854-1856). HacÃ-a apenas quince años que se habÃ-a dado a conocer la primera máquina fotográfica. La
Guerra de Secesión de los Estados Unidos fue el segundo registro de imágenes bélicas, recogidas por el equipo de
Matthew Brady (años 1861 a 1865).
El tercero fue la Guerra de la Triple Alianza contra el Paraguay. La crÃ-tica fotográfica no siempre menciona la existencia
de esta colección, ya que aunque se ha publicado en numerosas ocasiones, no ha sido objeto de estudio sistemático.
A modo de reparación con la Historia, sus protagonistas y la posteridad, estas imágenes que hoy son exhibidas por
primera vez ante el público, son producto de una celosa vigilancia y conservación de la Sección Materiales Especiales,
y de una investigación rigurosa y metódica, llevada a cabo durante un largo perÃ-odo por historiadores uruguayos
apasionados por el tema y sus complejidades.
La fotografÃ-a que lleva como leyenda " montón de cadáveres paraguayos" exhibe el horror de aquellos cuerpos
enflaquecidos y mutilados, quemados por el sol de los esteros. El coronel León Palleja, jefe de la BaterÃ-a Oriental, en
su Diario recuerda: " se veÃ-an como relámpago volar por los aires los miembros y las ropas de los jinetes y las
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monturas y los miembros de los caballos. El campo quedó repugnante de cadáveres mutilados y caballos
despanzurrados" .
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Mirar el dolor de los demás
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" Montón de cadáveres paraguayos" , nos enfrenta al dolor injusto que produce la guerra, siempre vivida como una
injusticia radical y que de algún modo, nos compromete. La escritora estadounidense Susan Sontag ha escrito que las
fotografÃ-as de lo atroz ilustran y corroboran los hechos. También violentan una prohibición vigorosa como lo es
presentar los rostros descubiertos de nuestros muertos.
El escritor Henry James afirmó: " la guerra ha agotado las palabras" . Si es asÃ-, el lenguaje fotográfico ha podido
establecer una relación distinta con los sucesos bélicos. Sontag afirma que hoy los vivos estamos lejos de aquellos
muertos y ya no podemos comprender cabalmente lo que ellos padecieron: " No podemos comprender lo espantosa, lo
aterradora que es la guerra, y cómo se convierte en normalidad" .
 " La cámara es el ojo de la historia" repetÃ-a Brady, quien persistió en fotografiar la guerra estadounidense aunque le
costara el quiebre de su empresa. La fotografÃ-a ha sido medio y testigo de innumerables atrocidades. La fascinación
que despierta la fotografÃ-a captada por un ojo alerta ante un instante único, se debe a que el espectador percibe que
asiste a un hecho inesperado. La cámara objetiva y convierte el suceso en objeto. Esta Guerra contra el Paraguay
puede leerse como un relato transparente de la realidad.
El antropólogo brasileño André Toral reflexiona que, lejos de convertirse en un éxito editorial, las fotografÃ-as
reafirmaban la impopularidad de esta guerra, ya conocida por las levas compulsivas y sus acciones sangrientas. Por
eso, las imágenes " & no permitÃ-an enorgullecerse, incluso desde su fase inicial. Viendo al enemigo prisionero, o en
montañas de cadáveres, sólo se conseguÃ-a sentir pena" .
¿Cuál es nuestra reacción al ver el dolor de los otros? La modernidad nos dice que el sufrimiento es un error o un
crimen. Algo que exige reparación. Pero el dolor persiste previo y posterior a la foto. Las imágenes del dolor nos
persiguen.
¿Pueden fotografÃ-as como éstas convocarnos a un compromiso antibélico? Kant teorizó sobre la universalidad de la
razón y de la ética. La modernidad nos hizo tomar conciencia de los otros, promovió la democracia y los derechos
humanos como requisito universal.
El escritor londinense John Berger reflexiona sobre los conflictos bélicos actuales y sus imágenes y recuerda cómo
esas guerras se llevan a cabo " en nuestro nombre" . Pero si esas imágenes nos horrorizan, deberÃ-amos " enfrentarnos
a nuestra propia falta de libertad polÃ-tica" . Cabe la pregunta: en el Uruguay de aquel entonces, ¿los ciudadanos
eligieron libremente formar " la triple Alianza" para destruir a la próspera República del Paraguay liderados por el
general Venancio Flores?
El poeta español Juan Malpartida ante las fotografÃ-as de guerra, siente que su inocencia proclama que hay algo
obsceno en ese dolor. Y su moral proclama que hay algo que debe saber. "Yo no he hecho eso, no haré eso", es el
discurso que trata de poner a salvo mi inocencia; pero mi responsabilidad polÃ-tica me lleva a decirme: "nadie deberÃ-a
hacerlo". De la tensión entre ética y polÃ-tica está forjada la historia.
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Obras citadas:
Berger, John, " Mirar" , 1998, ediciones de la flor" , Argentina.
Cortés Rocca, Paola, " IconografÃ-a de la violencia" , Relics & Selves: Articles. Princeton University.
Malpartida, Juan, " Letras libres" , abril 2004, www.letraslibres.com
Paz, Octavio, " El viento entero" , 1965, The Caxton Press, Delhi.
Sontag, Susan, " Ante el dolor de los demás" , 2003, Alfaguara, Argentina.
Toral, André, " Entre retratos e cadáveres: a fotografia na Guerra do Paraguai" , 1999.
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Director de la Biblioteca Nacional: Dr. Tomás de Mattos
Proyecto y conducción: Lic. Graciela Gargiulo
Preparación de fotos: Magdalena Costa
Selección y montaje: Lic. Elisa Piffaretti
Digitalización: Pablo Borges
Investigación histórica: Licenciado Alberto del Pino Menck, Profesora Alicia Fernández, Profesor Jorge Villa.
Producción: Prof. Helena Corbellini
Diseño: güear.
Difusión: Viviana Fosalba y Andrés EchevarrÃ-a.
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* Las colecciones custodiadas en la Sala de Materiales Especiales son de uso exclusivo de investigadores, quienes
encuentran en estos documentos la posibilidad de introducirse en la Historia y sus fuentes. Los medios técnicos
permiten hoy que el público en general conozca y aprecie parte del acervo allÃ- custodiado. Los interesados pueden
acercarse a un tema como el conflicto expuesto. Asimismo, es un objetivo de la Biblioteca Nacional, insistir en la
divulgación del material iconográfico atesorado.
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