LA LITERATURA DEL SIGLO XV (Transición al Renacimiento. Vida y pensamiento del siglo XV. La lengua literaria) La crisis del sigloXV Etapa de transición: final de las formas de vida de la Edad Media Anuncio del Renacimiento. -Crisis del teocentrismo: ordenación social en función de un concepto religioso, del que depende la visión del mundo. Se pone de manifiesto la crisis de los valores vigentes en, por ejemplo, el Libro de Buen Amor, la situación moral reflejada en el ámbito eclesiástico, la importancia del dinero en el orden social, se trata de una obra del siglo XIV. -Las nuevas ideas y los nuevos valores están ligados al antropocentrismo y al individualismo que difundirá el Renacimiento. -Crisis religiosa: cisma de Occidente, principios del siglo XV; la cristiandad está dividida, la gobiernan tres papas simultáneamente. -Crisis política: luchas dinásticas en el seno de la monarquía (Pedro I en el siglo XIV; en el siglo XV: Enrique III, Juan II, Enrique IV y por fin los Reyes Católicos, con los que se produce la fusión de Castilla y Aragón y la culminación de la Reconquista en 1492). A lo largo de este siglo son constantes los conflictos entre la nobleza (que se resiste a perder sus privilegios feudales) y la monarquía (que pretende someter a su autoridad a la nobleza, que durante la Edad Media había llegado a ser más poderosa en ocasiones que el propio monarca). También se producen conflictos entre los diversos reinos peninsulares: Castilla, Aragón, Portugal. Los problemas étnicos de los judíos, moriscos y conversos, los decretos de expulsión, la limpieza de sangre (cristianos viejos y cristianos nuevos o conversos) y el nacimiento de la Inquisición en 1478, como un tribunal religioso. La pésima situación económica. -Crisis social: decadencia del feudalismo y progresivo desarrollo del comercio y la economía monetaria, el desarrollo de las ciudades (vs castillo), burgo y burgués y la presencia en los núcleos urbanos de artesanos y mercaderes. (frente a la presencia exclusiva en la Edad Media de labradores). La literatura del siglo XV -Documento, testimonio, reflejo de la época y de la crisis que la dominaba. -Evasión, que enmascara a veces la realidad histórica y convierte a la literatura en una falsa realidad, sobre todo la vinculada con la aristocracia, que está sometida a un proceso de idealización. -El rey, el cortesano (noble) y el mecenas. En tiempos de paz, la Corte de los reyes (la de Juan II, en el siglo XV) se convierte en un núcleo cultural donde se desarrollan diversas manifestaciones artísticas, como expresión de refinamiento y medio de entretenimiento. Entre estas manifestaciones artísticas destaca la literatura cortesana, que se desarrolla extraordinariamente en esta época y cuyas producciones son recogidas en los Cancioneros. El mecenas es el principal apoyo de los artistas. Se trata de un príncipe o persona poderosa que protege o patrocina a los artistas en general y a los poetas en particular. Los Cancioneros son recopilaciones poéticas de diversos autores. Recogen obras de autores desconocidos y gran variedad de composiciones poéticas, de muy diverso valor. Representan un panorama indirecto de la sociedad cortesana por los temas que abordan sus composiciones y que reflejan sus costumbres, sus valores, su visión del mundo. Los Cancioneros más importantes del siglo XV son los siguientes: En Castilla, Cancionero de Baena, recogido por Juan Alfonso de Baena; pertenece a la primera mitad del siglo XV. Está dedicado a Juan II y reúne la producción de poetas de la corte de Enrique II, Juan I, Enrique III, y Juan II. En Aragón, el Cancionero de Stúñiga, que recopila la obra de poetas de la corte de Alfonso V de Aragón. Existen otros Cancioneros, recopilados a principios del siglo XVI, pero que contienen poetas del siglo anterior, como el Cancionero General de Hernando del Castillo, Valencia, 1511. Si en la lírica escrita las recopilaciones de textos de diversos autores y núcleos cortesanos son los Cancioneros, en la lírica y la narrativa oral, tradicional las recopilaciones son el Romancero. Modelos literarios: -Influencia del Renacimiento italiano (vs influencia francesa, sobre todo de la épica y la lírica provenzal en los siglos anteriores). -Vigencia de los temas alegóricos, que tienen una tradición clásica grecolatina y se revitalizan en la Divina Comedia, de Dante (1265-1321). Esta obra fue modelo de autores españoles, como el Marqués de Santillana o Juan de Mena. -Petrarca, Cancionero. Este autor es modelo de humanista, que conoce el mundo clásico y defiende el antropocentrismo cultural. También después influirá en los poetas del siglo XVI y XVII, dando lugar al petrarquismo, que es una recreación del amor cortés en la lírica. -Boccaccio, Decamerón (relatos engarzados por un marco narrativo) y Fiammeta desarrollo de una temática amorosa idealizada) -Influencia de la poesía provenzal, trovadoresca (y también de su continuación en la lírica gallego portuguesa): el amor cortés. La lengua literaria del siglo XV: Influencia italiana: difusión del Humanismo, valoración del mundo clásico grecolatino, traducción al castellano de obras clásicas. Principio literario “imitatio”: los modelos literarios aportan su prestigio y autoridad al autor que los respeta. En la lengua literaria se imita también el latín, a través de latinismos léxicos, y sintácticos, cultismos... sin renunciar al desarrollo del castellano como lengua literaria. -Juan de Mena (1411-1456) Laberinto de Fortuna, dedicada a Juan II (modelo de obra culta), pero también valoración de las lenguas vernáculas, interés por la cultura popular, el lenguaje cotidiano y la “naturalidad” en la expresión. Ejemplo: colección de “Refranes que dicen las viejas tras el fuego”, del Marqués de Santillana (el mismo autor de las “serranillas” y los “Sonetos fechos al itálico modo”). Puede mezclarse en una obra el estilo elegante y el habla popular, como por ejemplo el Libro del Arcipreste de Talavera (o Corbacho), de Alfonso Martínez de Toledo. La literatura del siglo XV Géneros literarios de siglo XV Géneros en verso: I) Poesía culta y cortesana: a) Poemas alegórico-narrativos: Modelo: la Divina Comedia, Dante. Intención: política, doctrinal + visión satírica de la época e invectivas contra la Fortuna. Ejemplos. Comedieta de Ponza, Marqués de Santillana. Laberinto de Fortuna, Juan de Mena. b) Canciones y decires: Canciones (poemas líricos) y decires (poemas narrativos), ambos subgéneros forman parte de la poesía cortesana de Cancionero del siglo XV. La canción era una poesía lírica destinada al canto. Solían ser poemas de arte menor y sus temas eran religiosos y amorosos, a veces incluían elementos narrativos. Ej: Cancionero de Baena (corte de Juan II, de Castilla). El decir era una poesía compuesta para la recitación o la lectura. Eran composiciones de arte mayor u octosílabos y los temas eran muy variados: burla, sátira, alabanza, epitafios (plantos o elegías, como las Coplas a la muerte de su padre, de Jorge Manrique). También existía el decir lírico-narrativo, con elementos alegóricos. Ej. Triunfete de Amor y Querella de Amor, del Marqués de Santillana. II) Poesía tradicional: Romancero: son recopilaciones de obras líricas (tema amoroso) y narrativas en verso (tema épico o novelesco) de creación y difusión oral, de autores anónimos. La métrica es el verso octosílabo, con rima asonante en los pares y sueltos, sin rima los impares (recuérdese que procede de la fragmentación del verso irregular de los cantares de gesta), son versos que no forman estrofa, se agrupan como una “serie” de versos. Géneros en prosa: a) Tratado doctrinal o prosa didáctica: Intención: exposición de una doctrina con finalidad moralizante y didáctica. Ej: “El Corbacho” o Arcipreste de Talavera, Alfonso Martínez de Toledo. Alecciona a los jóvenes contra el loco amor, señalando los vicios de las mujeres. Obra misógina y antifeminista. b) Crónicas particulares o prosa histórica: Como se recordará el inicio de la prosa histórica en castellano está ligado a Alfonso X en el siglo XIII, pero su planteamiento es colectivo “Crónica general” y “General Estoria”. En el siglo XV interesa la dimensión particular. El texto histórico se centra en figuras históricas, en personajes ilustres concretos. En estas obras se mezcla la materia histórica y novelesca. Ej: Crónica de don Pero Niño o Victorial, de Gutierre Díez de Games. Crónica del condestable don Álvaro de Luna (valido de Juan II). Esta obra es una defensa y apología de nobles, un reflejo del mundo cortesano y un reflejo también de los problemas políticos de esta época. A veces se trata sólo de retratos físicos y espirituales de personajes, semblanzas o biografías. Ej: Generaciones y semblanzas, de Fernán Pérez de Guzmán o Claros varones de Castilla, de Fernando del Pulgar. c) Prosa narrativa de ficción: -Libros sentimentales: novelas breves (vs novelas caballerescas) narración en 1ª persona (expresión de sentimientos) estructura narrativa: suma de cartas y tratados técnica: tratamiento alegórico destinada a la lectura del público cortesano; dificultad del lenguaje, latinizante. Este género evidentemente está vinculado al mundo cortesano, cuyos valores representa. Son esos valores gentileza y cortesía, frente a los valores guerreros: audacia y valentía. Tema: historia amorosa en la tradición del amor cortés, según la cual se establece una relación de vasallaje entre el caballero (siervo) y la dama (dueña). Se reflejan en estas obras, a través de los personajes, arquetipos y modelos lejanos al realismo, porque lo exige la idealización del amor y de la dama. Los protagonistas pertenecen siempre a la nobleza. El desenlace es siempre desgraciado por la intensidad de la pasión y la imposibilidad de la consumación (amor desgraciado, inalcanzable). El amor es un sentimiento inalterable, los personajes no evolucionan. La fidelidad llevada a su último extremo desemboca en la muerte. La intención es didáctica, mostrar “ejemplos de insuperables amadores” (modelos de amor cortés). -Libros de caballerías: novelas de larga extensión protagonista: héroe caballeresco que busca aventuras, el ejercicio de las armas por deseo de exaltación individualista, para demostrar sus cualidades personales (valiente guerrero y leal enamorado) al servicio de su dama (vs héroe épico, movido por ideales colectivos, patrióticos o religiosos) ; el amor no es motor de la acción. El personaje es un arquetipo, no evoluciona; la acción le sirve para poner a prueba sus cualidades, que se suponen de antemano. Tema: hazañas y aventuras extraordinarias de un héroe también singular, dotado en su más alto grado de las virtudes del honor, lealtad y generosidad. Lucha con el fin de adquirir méritos para ser digno de la dama a la que ama. Es un “caballero andante” en busca de aventuras, peligros, para demostrar su valentía y su amor. Intención: idealización de la vida caballeresca. Ahistoricismo, exotismo de espacio y tiempo. Protagonistas: modelo de virtudes. Ej: Amadís de Gaula (argumento): Amadís, hijo de un matrimonio secreto es criado lejos de sus padres. Se enamora de Oriana, libera a ésta y a su padre Lisuarte. Una riña entre Amadís y Oriana provoca el retiro y la penitencia de amor del caballero. Son expulsados de la Corte por calumnias. Amadís y Lisuarte se enemistan; Amadís defiende a Lisuarte contra su enemigo y Lisuarte, en agradecimiento, le otorga a Oriana como esposa. Género teatral: Poemas dialogados: Danzas de la Muerte. Teatro religioso y teatro profano: Juan del Encina (mezcla temas religiosos y profanos) Ej: composiciones con motivo de la Navidad, la Pasión y la Resurrección y también teatro profano de tema amoroso. Otros autores: Lucas Fernández y Gómez Manrique. Comedia humanística: La Celestina, de Fernando de Rojas. Temas y tópicos literarios Amor: Poesía influencia de la poesía trovadoresca provenzal, “amor cortés”. El amor ennoblece; el sufrimiento amoroso derivado de la no correspondencia también. Relación de vasallaje: superioridad de la dama (“dueño”) frente al galán (siervo). Obstáculos del amor: dama esquiva, que defiende su honra con el desprecio o el desinterés por el galán. Cualidades del enamorado: discreción, constancia, obediencia, lealtad, fidelidad, sacrificio (amor doliente). El poeta es un cortesano; el amor es el eje de su existencia; alabar a la dama y servirla es el constante ejercicio al que se consagra el enamorado, con más o menos esperanza de obtener recompensa; a veces sin ninguna. En ocasiones, la dama pertenece a una clase más elevada y la pretensión del enamorado es una osadía. El amor no correspondido proporciona el sufrimiento que dota de no bleza y generosidad al sentimiento. El amor se convierte en una especie de religión y a veces llega a identificarse con ella. El lenguaje está basado en la alegoría y el concepto básico es la oposición de contrarios (antítesis, vida-muerte). Fortuna: En la mitología romana es la divinidad que personifica la circunstancia caprichosa y cambiante, favorable o desfavorable, que se produce en la vida de los hombres y de los pueblos. Se representaba con los ojos vendados, con alas, con un pie sobre una rueda y el otro en el aire. Sus atributos son el globo terrestre, el cuerno de la abundancia, la rueda o disco y el timón o el delfín. Este concepto, el de la Fortuna, está vinculado a la poesía doctrinal y suele explicar el destino del hombre, que es un azar ciego o un instrumento de la voluntad divina. Sátira política: Se trata de obras de la poesía cortesana, de intención crítica, de dimensión social o política. Una de las figuras históricas más denostadas en la época fue el valido don Álvaro de Luna; también pueden ser objetos de sátira otros cortesanos o el propio rey. Estas composiciones se recogen en Cancioneros se difunden de forma anónima, a través de pliegos sueltos. Ej: Coplas de la Panadera (relato de la batalla de Olmedo, 1445, puesto en boca de una mujer que seguía al ejército). Coplas del Provincial. Coplas de Mingo Revulgo (críticas contra la Castilla de Enrique IV. La primera es una alegoría de un rebaño de ovejas que denuncia la deshonestidad de los nobles; la segunda plantea el símil de un monasterio corrompido; se propone a través de él una renovación moral tanto de los políticos como del pueblo. Doctrinal de Privados, del Marqués de Santillana, contra don Álvaro de Luna.