• II zyxwvutsrqponmlkjih yutrqponmljife I I I 1 - ; 1 : i i 1 AyUnt am ient o de Mad rid ! 1 - l-B-^li- - • r _ I I I I I I zyxwvutsrqpon toM EDiA FAM OSA; zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXV A SECRETO AGRAVIO: SECRETA VENGx\NZA. DE DON PEDRO CALDEW Ñ DE LA zyxwvutrponml BARCA. zyxwvutsrqponmlk H ablan en ella las Pcrfonas íiguientcs. zyxwvutsrqponmlkjihgfed El Rey Do» Sehajlían, Voa Lepi di Almyd» , Dd» Jum de SylvA. Vo» Liits de Btntnides, DÍ>» " Bernurdino. Vieja, El Duque de BergaoAi» , Manr ique, Criado, Lienír, Dama. Syten» . Crtad*» Celio, CriW í. Va B/fr^wCffi Vos SoldadíU É r r — " JO RN A D A tale» el Rey D o» Selxjltit» , D o» lepe de Alme)da , Manrique , criado, y gente de acomftíftHmento. í o f e. O tnv ety ^ j i a fenot. jars hepediío efta liceocia, yocta baveisceDíJo pot bien mi cafamistito: roas yo, que fiempte á ranti W atentó -fivo en TueftTO ftniblante, vengo a daros cuenta de n,i elección, y a fupUcatos, que en vueftra gracia pueda colgar las arraas, y que M arte ceda á amor la gloria, quando en paz reciba^ •en vez de alto taurél, fagrada O liva: yo os heíerviJq, y folameiíte efpero eftamerccd, por galardón poftreto, pues con efta licencia vertturofa •oy faldré a recibir mi amada efpofa. íiey.Yo elHmo vueflro gufto, y vueftro Sugmeny me alegro de vuefti-e caíamierito; (to, y á no eftár ocupado <n la guerra, que en A frica he Intentado, fuera vueflro padrino. ttffí.Ecerno dure efle laurel divino, que tus fieties corona. en oiucio yo vusítia fCTÍoaa» PRIM ERA . Vafe el Viey. f mtmparimi^U n ! Manr. Corteoto eftas. le/ ií.M al f¿:pEer» la dicha, y la gloria mía, dirsiinular fu alegría: felice yo , fi pudiera volar oy. Manr.M viento igualan Xo^f.Foco aprovecha, que el viesco es pereiofo Elemento: dieraoie el 'A mor fus alai, volara atrafado, y ciego; •pues quien al viento fe entrega, «las de viento navega, y las de amor fon de fuego. M ^Rr.Para que defengasarme pueda, creyendo que tienes caufa, dime I lo que vienes con tanta priílaí Lfpe.A cafarme» Manr.Y BO miras que es cru^T, digno de que al M undo áflomIjrCf qué vaya á cafarfe iin boíftbre con tanta priíTí, feñori Si oy, que te vás á ¿afar, del tnifijio viento te quéxas: que dezas que hacer, qué áeX3$ qtuado vavas I taviudut / j ^ fecréto Agrxy loj fecreú zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUT Ven^dn^d^ SattVcnJumde Syhamuifohemente vijlldo. J^ jía.Q uin liiferepce pansé volver í li, pAccü tilia, íaquel infclice <li.i, que tus uniE>rires dfsé! ^ i e n no tehiivicra pifidot pues (lempre mejor ha lido, á donde ao es conocido «i?ÍT, « l^ ue es defiifcbadia;.. geote ay aquíi iioes razón Térme en el mal que me veo. Í.e/ie.A guaráatei no I0 creo, fi es verdad! G es i!u(íon! D on Juan 5 J/<i»».Don Lope» tí^e.Dudíifos J . por tantos años, la ciencU, nun-ra creída hafti cy. Li NoM'ísa í^ofitaaa de fu furcuiTa fió N ave», que ciertas excede^' las fingi,Us de JaíTon. D ej o tfta alabanza , á quien pueda con mas dulce voz contar los famofos becLsSí de efta invencible N acíonf porque el gran l ui r de Camoei, efcribiendo lo que obro, con pluma, y efp::d3,jsaeftr»: yá el ingenio, y yi e! valor en eiía p.irtsr. Defpaes, Don tope ¡nvi£?io,,que voSf por niueití de vueííio padre, de tanta dicha mis brazos", volvifteis, me qusdeyoj ban fufpendido fus lazos, biín fabcis con quínra fima y i«i»;D etcneos, qus es forzofo de amigos, y de opinion, que me defienda, de quien que aora perdidos, hacen tanto honor, y valor tiene; el elcarmiento mayott; que hombre que tin pobre viene, pero en efcftoes confueto: D on Lope, amigo, no es bien . red íí difgraciado íbJ, que toque (i^.fücrte ímpoitunaíj ^ue nunca te dii mal quifta pecho de Flqaezas lleno. a la fortuna oca^ en; lo/ ií.V ueftris razones condeno, tíavia en Goa una íeñora. poique S da la fortuna Lija de un hombre, a quien knraagns bieais del faelo, grande cantidad de hacienda í l Cielo aa amigo dJ, codicia, y contratación. cotnQ,vo:! : vedioq uevi Era hermofa, era diícrcca, defde.la fortuna al Cieto. que apnque enemigas las dos, Aunque hsceis que aliento cobre^ en ella hicieron las pazes, en mi mayor mal eftás hermofuta, y difcrecioot mirad quao grande feri, Seryila tan Tcnturofo, Hial, que sj mayor que ferpobie; que merecí aJgun favor; y porque mi fentimiento perOj quien gan¿ al priariptQ, algún ali»io prevenga, que i la poítre no perdi&í ñ es po&ible que le tenga, Quien fué antes tan fstíce, efcuchad, Pon Lope, atento» que defpuet no declino' A la Conquifta famofa porque fon mui parecido» ¿e la India, quf eligió juego, fortuna^ y amor. para fu turaba ta noche, D on M^tnuel de Sofá, unkoin!>!7|' y para fu cuna, el Sol,(hijo del Gobernador amigoi, y ran amigos, M anuel de Sofá ). por si paliamos juntos los dos, de mucha refolucion, que afiiiflieron en dos cuerpos mui valiente, mui cortés, un sima, y un corazón: bizarro, y cuerdo, que yo, K o codicia de riq«íza, aunque le quit¿ la vida, £ co codicisde honor, no he de quitarle el ^ no r^ obligo nueftroí defeca zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA D e V iolante epi morado, a tan atrevida acción, (que eíle es el nombre que como toeajE con ^ x« I e s oc^jifioa i¡ mi TS&tBra w zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA í,' Pedro Calderón, quedan r-pitlenáo iquell» y S mi áeükliá eciRon.) afrenta: O tyraao error en Goa, publicamente, de los hombres ! O vil ley « ra mi competidor. del M undo ! que unarazon, Poco cuiilado me daba ó que una (inrazon pueda fu amorofa pretenfion, manchar el altivo honor, porque íífado, como era, cantos anos adquirido! ti fiiforecido yo, Y que la antigua opinioB la pena del defpreciado de honrado, quede pofttidi Lizo mi dicha mayor. i lo fácil de ttni vc7! Ufl día, que el Sol hermofo Q ué el honor, ííendoun diamaotiV faliara (pluguiera á Dios un frágil foplo ( ay D iosl) puedazyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPO fepuUara eterna noche abrafarle, y conruialrkl fu continuo reípUndor) y qué fiendo fu expleodor lalió con el Sol V iolante;' mas que el Sol puro, un alient» baftabi p:diils^ yo, firva de nube a éfte Sol! que aun el uno no fallera» M acho del cafo me aparto para que falieran dos» llevado de U pafsion; D e criados rodeada, perdona, vuelvo al fuceffa: i la M arina llego, Apenas él pronuncife donde eflaba mucha geoíte, tales raiones, D on Lope, porque en aquella ocaííon ' quando mi efpada veloxl havia llegado una N ave pafsó de la vaina al pecho; al Puerto, y fu admiración ' tal, que a todos pareció, ¿ il> caufa a aqueíle concur fo» que imitaron trueno, y rayo, y a mi defdicha la dio. juntos, mi efpada, y fu voz. Eftabamos en un corro Bañado en fa mifraa fangre, de mucha gente loi do«, muerto en lí' arena cayó, todos Soldados, y amigos, "t «pando para mi defenfa quando á la villa pafs¿ tomé una Iglefia, a quien dl4 V iolante: iba tan airofa, en aquel fitlo lugar que alli ninguno dex& la Sagrada Religión de poner el alma en ella, de Francilco, que por fet porque fu planta veloz fu padre el Gobernador, era el móvil, que llevaba me fué forzofo efcondermeí tras si la imaginación. con tanto allombro,y teraor|í D ixo un Capitan : Q ué bella que tres dias, un fepulehro mugir! ¡L quien refpondi& habité vivo: quien vi6, D on M anuel; Y como tal que fiendo el contrario el muerto, Ira (ido la condicion: fuelle el fepultado yol iSeri cruel. N o por ello A l cabo de los tres dias, lo digo, le replicó, ^ por amiftaJ, y favor, fino por v¿r que ha efcogido» el Capitan de la N ave, como hermofa, lo peor. que a nuefttos Puertos llegA , Y o cotonees d i i e; N inguno y que a Lisboa venia, lus favores mereció, ' en ella me recibió porque no ay quien lús merezci, una noche, cuyo manto y fi ay alguno, foi yo. fué de roi vida ocalíon. M entís, dixo ¡Aciui no puedo En ella N ave efcondido profegulr, porque la voi eftuve, hafta que el velos muda, la lengua turbada, monftruo del viento, y del igai* frió el cuerpo, el coiaso» los piélagos diuldia palpitante, los fentidos ' de Ñ eptuno: injufto cagA ^o nmenpi, y vivo el dolor, zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA M ^ ^ fecrm " J^ray U, fecréü de la viJj; o fu pflfdoo, DO dé pot iafáme ai hoinbr« que fufre fu desfeóoof, o ie d^ por difculpado,! fi fe venga, que es error dar á la afrenta íaftigo, y no al cañieo perHba. Q y he llegado i Lisboa, adonde tan pobre.eftci, que no oíl.iba-entrar en elU; efta» mli fortunas Con," ya 00 ttiftfí, fiuo aligrer, pues me dieron ocafion de llegat, i vneftros brazos., cftos, itiií wces os doi, íí un hombre tan ínfeliee puedemereeerdevosi •• ó gran Don Lope di A 'ineydj^ tal in.erced, honra, y favorv JLo^e.'Vtenymenee (fcucKé, i ¡ Vengdií^^ entre lo» dos, y templando el contento, y la triftsia, queden en igual balanza mi. alegría, y vueftra penajtní guíío) y vueflro dolor; mi rentura, y »ueftfa queia;^ porque el pefar, Ó-el pUcer matar i ninguno pueda. Y o me be cafado en Caftilir». por poder, con la mas bella mugeti mas para ferpropria,, es lo menos a bellezas con la mis noble, mas rici', roas-virtuofa, y mas euerdav que pudcr en el penfamieDi» hacer dibuxos la idea4 D oñi Leonor de Mendosa? es fu nombre,' y o / con elta D on Bírdino^raJ lib,' llegara á A ldea-Gillega», donde faígo rrecibills. Pon Juan de SyNa^ las íjuexaf^ con can vcnturofas tnuedrafi. que en lagryraas anegadasconjo veis, y un bellff barca dais defáe el pecha a !a lengua? tan veoturofo la elpEra-,, y atentamente Ee penfado» que juzga por perczofiíque no ay opinion que pu.eda», pydel tiempo Tas ligera* j o r mas fabtil que difcurra^ alas,, porque el bfép que tarda,, tener dadota la vaeftr?. no llega bien quaiido llega. Q uien en naclíndo, no vivcr Efta es mi dicha mayor, fügeto i las inclertencias por tér quaoto la acreclentl del tiempo, y. de la fortuna? Tueftri venida, BbD. J.aan; Quien í'e libra, quien fe excepta: 00 os de temor, no os dé peh^ de una intención inal fegura,: venir pobre; rico foJ, dé un pecho doble, que alieuta» mi cafa, amigo, mí meía, lii ponzoña de una manoi mis caballos, mis criados, y el veneno dfe una lengua!m i honor, mi vida, mi hacisníí, N ingunos,íolo (iichofo todo es vueftro, ccnfolaos» puede lliamaríe él que. dejra,.. ,• de que la fortunados dexai como vos,.limpioTu honor» zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA .un amigo verdaderOi y caHigada fu ofenfaí. y que no ha «eniiio-fueMa; Honrado eftais, npg.ras fombrasrcontra vos, q*ie no m quitó Mo deslurobran, rio ofcfcurezcaq. efte valor que os alientít vueftro honor antiguo; y oy efta alma que os anima, de nueftra amiftad fe tea y efte brazo que os deffendííTa virtud aqueffSs pjantaíjN ó ro - refpondáii, dexad tan coBÍormetnen ce opueftaíi, las corcefanas fineias,qu? una cóa calor confume» entre ami'gos exenfada», y otra con frialdad p^enetra,í y venid a donde fea: ¿éndo veBfinollí doSfc teftigo vueftra perfonasy eft'indó ¡unt!"5> fe teroplatt dt la dicKa que rae cfpíriV , .^ que oy en Lisboa Ka dé entrjr qut £«n<nt<»ncc»' de fuerte,.zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA falud m « ftgata-, f cleita*^ V os eRaJs trifíc, yo alegrci, jatcafflijjiUdifitKocíaí : in- , : L i t 4 mi efpofat y eftastrei íégua» de M ar, gara mi 4e fiiegPi. zyxwvutsrqponm liéiBQi' yutrq Vedro CAdmn. De Don zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJI hemos Je venir con ella, qae de eflotra parte efta. fin duda. 3Frt«»i Pires no pretfnda con mi huraiídaddesluckfe, Don Lope, vueftra nobIfZí, porque el' M undo, n&la fangrc,fino el veftido refpefta, í . í Jí t es engaño dtl M uaJoj. que no sé,, ni conJídera, que ai cuerpo le vifte el oro^ pero al alma la N obleza, venid conmigo: fiifpiros, ofreced viento i las velas» fi es que en los M ares del fuegoBáseles de amor navegan. Vunfe los dow f ínnr.'ío me quiero adelantar emalglina Barca de eftas, que llaman M uletes, y oyr fiendo coio con muletas,, pediré-a mi nueva ama^ fas albricias, de que llega fu efpofo, que el primer dia^ diría» aibriciís qualqniera; porque fale de foriadak (I es lo mifmo que doncella» yafe, y /" I' Von Benrardino-, vieja, ^ Dom Leonor, y iyrenai, á oi»erlir la porfía de aqwfta melanclioliJ, aquí puedes defcanfar,venciendo el ligor aqül del Solv que en fus rayos arde? el Cielo tu vida guarde. v/tfe. L « » . Fuefe ya, Sytena? Lew.O yenos alguieoí Syren. Sofpéchcíj que eftamos folas las dos. tM B.Pues taiga mi pena ( ay D i » I ) de mí vida, y de mi pecho; falga en lagrymas deshe'c-ho el-dolor que me provoca, el fuego- que al alma loes» remitiendo fns eno|os, en lagrymas ¿ lo» o;'osi y en lufpiros. a la boca» Y fin par, y fía íofsiego todo lo abrafen vfloces, pues fon de fuego mis voceí, y mis lagrymas de fuego; abrafen quando navego tanto Mari y viento laoto, mi viía> y m' foegp qaanro' confamc el fuego vtoleoto,pues mi vor es fuego, y vientoj mis lagrymas fuego, y llánto.5íre» .Q ué dícesi fefiorai advierteen tu peligro, y tu Honor, leowiTu, que fabes mi dolor, tu, que conoces wi muerte, me reportas de efla fuerteíT u, de mi llanto roe alexaií tu, que calle me aconfejasl Svws.Tu inútil quera cfcuchandoeftoi.zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPO LÍO ». A y, Syr?na, quandO' fon inútiles las queras! Q ueiafe una flor conftante, fiel A urafus.ho)ásKiere, quando el Sol caduco muere en tumulps de diamante; Q ueiafe uD monte arroganteie las in jórias del viento, quando le ofende violento, y el eco, N ympba vocal,, quexandofe dé fu mal, refponde el ultimo aecenw: Q uexafe, porqws a^nar f»'»®»' una yedraj fi perdió? ^ •Btrnard.Ea Ta falda lifenget» de efte monte, coronader de flores, donde ba llamada a Cortes la Primavera-, puedfeí défcanfar, en tantot bella Leonor, que dichofollega Don Lope, tu efpofo^ y perdona al dulce llunto; aunque no es gran marabillá»que con fentimiento igual á vlfta de Portugal, tederpidasdííCaftllla. 'I«»».Iluftre Don Berpardino dcA lmeyda, mi trerno llanto no es ingratitud a tanto liOBor, como me previno la fuerte, y la dicba mia; viendo tan cercano el bien», gufto ha fidó, que tambiet». ay lágrymas dé alégt'a, JiríJ.Cuerdíimeote te difculp» la difcreción liíbngera, erdüro ttmicor que ámo! yne y aunque pordtfculpa fuera,, y coa acccnto fiiave te agradeciera lá culpa: fe quera una fiinpl' ayei' yo (quiero dár mas íugar zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA jr eir amotofa prift»» J fecreto J^ravtOy ficmd Véffgdnza, afii aliviará pretende: quantofe puede befar, que al fin la quexa fe eDtlende, fin ofender á mi Dios. í) fe ignora la ctacion: lefla.Q iiien foisf Mmr.'íl metior etl i J* Quexafe el M ir 4 la tierri, de Don Lope mi feñor, qoaado en lepguit de agua toca mas no el hablador menor, los libios de opuefta roca: que veloz me he adelantaáo Q uexafe el fuego fi encierra por albricias deque viene. rayos, que al M undo hacen guerra; Iwu.D efcuido fuá, bien dectí, qué mucho, pues, que rai alieaco tomad: y de qu¿ fervis fe riada al dolor violento, á Don Lope! A &w.Hotnljre! que tlfütt fi fe q ui no , moace, piedra, efte humor, ya noosavifa, ave, flor, eco, Sol, yedra, que es gentii-hombre fu nombre» troaco, rayo, M ar, y vientol heon.X de qué fpls gentil-horabrej SyrenSr, mas qae remedio áfsi ¿í« Br.D e la bocíde'ia rifa: cooGgues defsfpetadaí criado a quienje prefiere» Don I,uis muerto, y tu cafada, a los mayores cuidados, qué pretendes?zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCB Leoa.Aj de mi! es PenJaaga de criados, D i, Syrena hermofa, di, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGF hecha del palo que quierin: D j q Luis muerto, y muerta yo; quandíi guardo, M iyoidomof pues ü el Cielo m e forao, quando algún reftiJo efpeto nie yerisen efta caltna, de mi amo, Camarero; fio gufto, lía ser, fin alma> M aeftrefala, quando tomo muerta SI, cafada no: pata mí el mejor bocado; Lo que yo ana vez amí, Secretario poco amigo, lo que una vez aprendí, i]uando fus fecretos digo; podré perdeilo < ay de rol!) Cabalteriio extremado, olviiirla no podré: quando por DO andar & pie» oUido doade huvo fei con achaque de pfiealle miente A mor: como fe haUira falgo £ caballo a la calle: burlada verdad tan claraí quando alguna cofa fu¿, Pues la que conftante fuera, tal, que fe guarda de mf» no olvidára, 5 quifiera, foi entonces-fu V eedor, no quiíiera, fi olvidara. y defpues fu Contiior, M ira tu lo que Cemi, >u» á todos defie atli guando fu muerte cfcuehé, o cuento, a todos lo avifo, pues forzada me casé, quando hurto lo que quiera folo por feugarme en mi», dqla phta Kepoftero. yá U voz uUioii aquí Defpenfero quando íifo: fe dífpida del dolor, TÍ foi valiente quando huyo» y foi fu Cachero, el dia hafti las A ras, A mor, que fus amores me fia: te acompaád, aqui le quedas, ' j y afsi claramente arguyo, : porque atreverte no puedas que foi por tan varios míjdoi» 3 las Aras del honor, firviendoie fiempre "afs!, S4t A iw íí.D ichof o yOjque lie llegad»» i cada oficio de por fi, 'í Tcnturofo yo, que he fidoí ' y rourmurandüleiXÓáes. feiice, yo que he veoidoi 11 íiMsn k fttfíiUtmtíy syrena. Tcf, lice, yo qiie he dado Salen Don Bernwdlnc, j Den huís, f el primero labio mió Cclie. criada» & la cilampa de eíle pie, Iwí.Soi M ercader, y trato cñ ios diamantei» que lleno de flotes, fué queoy fon piedras, y rayos f uctoaaateí Priraarera en el Eftio, del Sol. que perfecciona, cíluinifia y pues he llegado i w ú fSftjco grano l» al«af»<tíi iBínai ^ l « f o , y voflví ifcbe& r. zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA T)¿ Dof} T?edro Calderón. paíroderJeí- jíb oj hafti Caflilla, lea» .A lma de Ii pina rafa, yyutrqponmljifedcaUSOMLJIA en eftj A l Jc a, v¡ la iiiarabilla cuei po de mi phania;(a.' del Cielo, reduciJa en una D.iraa, SjTí» D ifíimulí, y .calla aoríj que acompañaii, y luego de la fama que y i v ! 0 ¡a razoo (upe, que »á cafaJa, 6 a cafarfe, que tienes pata admirarte. y como ftiEle en todas eraplearfe l « ÍJ. Y o foi quien es eftaparta efte caudal mas bien, porque las bodai zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFED ñenfa lograr la ocaííon, ca ta gala, y la ¡ oyj einpíízan todas: laviendo 4 tiempo llegado» enfeñaros quillera algunas de cllaij en que pueda mi defío que inís lucientes fon <jue las Eflrella?, hacer el felice cmpUó> por vér fi la ociffoo, con eldefed, tantos años efprrarip.^ hacen en el camino algún empleoT rai g o Joyas que vef dír, Bí f s. L3 prevínclqn.y la adverteoela ha fí¿o de innumtrable riqueza: acertada, Jbuen tiempo bavcis venido; y enere otras, uoa Firmtaa, pueí^yo por divertirla, y alegrailj, sé que oj ha de parecer <iue « ña ti ifte, una Joya he de feriarla; bien, porque de ella fofpecho, »qui efperad, y llegaré primero que adorne ell« bizarría, a prevenirla. Luis. Pnes aora quiero fi es que la firmeza mia ^ué la lleveis, fefior, para bailante llega s vérfe en.vueílro prcfcOí prueba de mi verdad, efte diamante, Un Cupido de diamance» que viflofu valor, y fu excelencia, traigo de grande valor, no dudo yo, f rüorj que os dé licencia que qulfe hacer al A mor de llegar a* fus pies. Bern.Es piedra raraj yo de piídras femejantesj ^ue fondo! qué caudal! qud l¡n,p¡^ „ ch ttí porque labrándole afsi, A quí, divina Leonor, quando alguno leculpaíla ha llegado un M ercader, de vario, y fácil, le hsllaffa en cuya mano has de ver firme, folamente en mi. Joyas de grw de valor. Un Coraion traigo, en quicft Ticas, coftofas, y bellaj; Bo ay piedra faifa nioganíj áiviJrte ua peco el pefar, fortijat bellas, y en una que yoite qqiero feriar anas memorias fe v ea. lo que te agradárede ella». Una eCmeraldaqge havia Eíle diam.inte, farol, me hurtaron el csmíno* ijue con luz bcrmofa, y nuevá, f por el color imagino, iara fu llmphza prueba que perfffto le tenia. er luciente hijo del Sol, Eftaba con u'q Z aphyra, Tiene por teftjgo aquí: mas la efmeralda Ile;varoB toma el diamante. Leon.Qah veci fol3roeBte,;y me dcxaroa » Bír»,D {ra.-. Lf « . A u n n » l o ereo i efta aiuf piedra que miro. 9*r» .% i ha de llegar, Lee» .Aj de ni« Y afsi dixe a IBIS defvelQi;: efte diamante es el mifmo: como con tanta venganza dile que llegue, Syrena, me llcvafteis la efperans», faqucme A mor deefta pena, para dexainie los lelosi de efte encanto, de cft» ib yf m » , Si gufta Fueftr^ belleza, í f te diamante que v4t, deícubriré por ihaí gloria* Juz que con el Sol fa mides, el corazon, las meinotias, di á Don Luis de Benauidef, el amor, y Ij ifirmízí. prenda mia, y fuya es: B« -» .E1 M ercftdcr es difcreto: « mis lagrymai meclegao^ (jué bien J lasj.(?y!í bellai, í Ó es el mifmo, oy C¡bri yo, para dar gufto de y<;llís> «orno a mis manos «ojvjá» las fué aplicando fu cf f Sttí i^rín.DifíimuIa, q üey i llcgaa» i i M M . Au n q u e vHcdcat joyat l Í '««ífs.Tofoi, hcíBiofafsñw*» , M lei, c« » g € s c« e ce í í í zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA I .A/' ' g femtA Vengan'K^. A fecretó Agray 'w IjzyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYX pira moftfarlas, haveii llegado á mala ocafíon. Y yo en v¿r fu hermofo alaráe contento buf l^ ^ tenido, Cihteíhovieríís venido: — litfs.Y bien, por poder fe advi-irtey por poder boifar mi fuerte, -por poder desearme encalma, por poder quitarme el alma, .por poder darme la mu.«ie» Efta dices que crcifle, y no fué vana apariencia, que fi creifte mi aufencia, es lo mifmo, bien dixifte. l e f s . N o puedo, oo puedo ( ay trilte!) - ííf ponder, quJ eltá conmigo, ,no mi efpofo, mi enemigo: mas porque me-culpas fiel, lo que'le diiere & él, .también hablaré configo. M Ci pero haveJs veniíjo tarde. Q ué fe diiera de mi, fi quando cafada foi, íi quando efperando eftol ^ ^ a nti noble efpofo, aqtti 1j puliera, 00 m i triftwa, u fino mi imaginidon, en véreíle .corazort, efleaflior, yef laiirmeíal IzyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA í N o lo» moftreis, que no es bien, £glttt.Dtií Ufe, Don Bern» rdin» , que tan fin tiempo miradas, jjr Mífflrí^ííe. lí/> e.Q aando la fama. en lenguas dilataSij aora .defeftiinadas •vueftra rara hermofura encarecía, infmotlas vusftraseftén» • por fé^ s amaba yo, por feos tenia, Y tomad vuellro diamante, ' Leonor. dentro del alma idolatrada: que yo sé que pierdo en él Q uando os mira fufpenfa, y élevad» Uaa luz hermofa, y fiíl, al mifmo Sol feme}aote. el alma , quefls amaba, y os quería, «nlpa la Imagen áe fu phantasis, N o culpéis la condicioo, • cue en mi tan efquiva hallaftei», 1 que fpis viftamayof, que imaginada. culpaos á vos, qae Ilegaíleis V os fola I vos podéis acieditarosi fin tiempo, y fia ocalion. dichofo aquel que lléga á mereceroi, ifowr.Ya Don Lope mi feñor y mas dichofo, (I acertó k eftimaroT. tí llega. LKíí.A f riepdef dichaigoJl m / s como ha de olvídiros, ni ofenderoH mal que compira a mi mal, A f. que quien antes de beros pudo amaros, ni dolor í « ri doiofl m4l OS pcdii ..olvidar défpües de v¿ros. veneno! UiV .Q ue crueldiSI Yo me íjrm^tendída antes q ^ os vieflt -vaf . Bír;?. A recibirle llegaemot. y vivo., y muerto,íotó en vos eftaba; todos, y efcucbemos porque-foía.iuna fombra vueftra amaba, la primera necedad; pero bafl& que fombra vueftfa fuefle: •orque an novio, a quíen le place X>ich0fayo mil veces, fí pudiefle ]a D am a,ya» erl a llega, amares, como el alma Imaginabr, «orno necedades ¡oega. que la Heuda coman arsi.pagába €s tahúr que dice.-y hace, •vafe, l a vida, quaodo Jiumildemc rindieJlc. Luh.Q ae me podra refponder, PK calpatf íigó, qulndo témerofa, mager ran fteii, « viana, y cobarde, mi amor llega á miraros, mudable, inconftante, y vana, ffi no pago un amor tan generofo: y moger, enfin, muger, D i vos, y DO de mi. podds quex^ os, que pufda fatisfacer pues aunque yo Os eftime co m o l elpolo, ata mudanza., ytu oW doí €s impasible, como fois.flmitos. I.ea».H,iver tu miíwte creído, I-Die.A oia, tio^y feflor. hivertu vi'laHlorádo, me dad los bratOJ Íav¡ ab f . íauf aa mi mudanza ha diáo, Be^n.Y ferSn eternos kxos cjueá mi olvido n o t a podides de deudo, amillad, y amotí oue» quando te llego S vét, y porque no culpí aora ' Inoef tiryadef pof ada, ^^ la dilación; a embarcar viera», y determinada, nos lleguemos. « f o i mudable, o muget; ' M í í . O y el M ar^ aífpQÍéiiis por poder. zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJ w De Don Pedro Calderón, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQ ' 9 icgunJa V enus adori« M así-.y pues que con tants gloria D ama, y galao le han cafado, /perdonad, iiobltiSenado,' que aqui fe acabó ta hiílorta. vmfr, CÍ/ w.Señor, pues que de « ftáíuerte hallarte tu defengaño, -vuelve eo li, prevén el dsño, de tu vida, y de en muerte: yk no^ y eftylo, nf medio, que lu debas ekgir, iHÍf.Si ay, Celio. Cdh.Q ni\ esl W f . M o ri r, que es el ultimo remedio; muera yo, pues vi cafada a Leonor, pues que Leonor dexo burlado mi amor, y mi efperanza burlada: mas qué me podrí matar, fi tos zelosme han dexado, <on vida, aunque mi cuidado me pretende coofoUr, dándome alguna efperanaa, yues quando a fu efpófo babl¿, « onmigo fe difculpo de fu olvido, y fu tiiudaniil Cíiís.Como difculpar contlgol Siga mi fuerte atrevida lufin contra tanto honor, porque he de amar á Leoiiof^ aunque me cueñe la vida. zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDC JO R N A D A SEG U N D A . Sale» Syren/f,y Manrique» JÍ> i»r.Syreni de mis entrañas, que para augmentar mi penaj eres la mifmaSytena, pues enantoras, y cogañasa Duelate vér el rigor con que tratas mis cuidados, que también a los criados hiere de barato amor. D ame un favor de tu m an o . S^'fí».Pues qué puedo darte A Í(í»r.M ucbo puedes; pero nO quiero bien mas foberaoo, qu» aqueffe verde lifton, < oa que yaces deílarada, por D ama de'la lacada, ó fregona del tufan. ^ ren.U na cinta quieren Mftnr.Si» S^rea.Yí aqueffe tiempo pafsó, que un galan fe contento con vna cinta. M ^ar.Es afsl: pero íi yo fa tuviera, defparramaado coaceptos, mil y ciento y un foneto» -oy en tu alabanza hiciera. •S^reH.Vor verme tan foneteadá te la doi, y rete aora, porque viene rol fenora. á mil locuras te pones. Lftij.Eñas fueroh fus razone», « tira (í ba^blaronconmigot Y o me i rm e rendida antes que o» viefle, y vivo,y muerto, ííempre en vos eftaba, :ffí •porque fola una fombra Tueftra amaba, pero bafló que fombra vueftra fueíTe: D icbofa yo mil veces, fi pudieíle Vafi Manrique, y ftle Letmrt amaros como el aln:i3 imaginaba, X « « . Y á vuelvo determinada, t^uela deuda coniun aisi pagaba efto, Syrecia, es f otrof o, h vida, quando humilde meriodielle. declarefe nií rigor, Uif culpatengo, quando temorofa, •porque mi vida, y mi honor y cobarde mi amor llega a miraros, yá no es iiüa, es de mi efpofoí íí no pago un amor tan generofo; D ilc á Doo Luííy que pues c» ÍDe vos, y n « d é m i podéis quexarbs, principal, noljle, y honrado, -pues aunque yo oi'efiíme como ^ polb, por Efpanol, y Soldado, es impofsiblficotno fois, amaros, obligado á fer cortés, o, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA y puedo que afsi me ha .dado que-nna iiiuger» no l eo nó r» difculpa de fu mudan«a, porqwe bada faber fea mi loca efpct-anza . á un noble, que una mugec « n cn o , y ^unal dorado. l e fuplka , que fu amór Si ha de matarme el dolor, «Ivide; qtie marabilla írtejor es el gufto; Cielos; cuidado en 1a « l i e tal, y (í he de morir desEÍoi, que no fufre Portugal •Hjor es morir de amor.. gelanteps de Caftillaí i9C •HH' i ^o ij fecrtU ^ fecreto zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQP que con lagryraas bálñada vuelvo á pedirle Ce vuelva á Caftilla, y fe refuelva a no hacerme inaj cafadat porque fiera, y ofendida, £ no lo hace, vive Dios, : ^ t]ue podrá fei que á, los do» . . nos venga icoftar la vida, '^ ríu.D e tfla fuetee lo diré, fí puedo vérlr, 6 Hablalle* lM í7.QH»ndo faltaje la calle» mas no hables en elU, ve • a bnfcarle á la pofsda^ ^í-eB.M ucho. ftñora, te atreves..wííjÍí. Salí DoaLi>fe,'DonjHiin ,y Manrique, . f» i .! Siempre, Manrique,: parece-, que al pallo/que yo eftoizyxwvutsrqponmlkj tiiftffi ru eftas conteoto, y alegre. ÍÍ/ » » r.Y dime, qual es m.cj;or> en pafúfines diferentes, la alegrij. ola triftezal Lí / í . La alegría. Matir.Vaes qu<?, quiere» que dexe yo lo nitjor por loprot! tu que tienes . la Eriftcza, que esla malí, eres quien mudarte d«bes, y pallarte a [» íkgriaí pues fera mas conveniente, que e 1 ir yo de alegre á trifte, venir tu de trifte a aleare. l ííS.V os eftais trifte, feirorf mui poco mi pecha os debe, ó yo le debo mui póco, p»es Tueftro dolor no fíente. le^e.Forzofas obligaciones, heredadas djgp'amente con la fangre, á quien obligaa divinas, y humanas leyes, me dán vocM, y recuerdia de efta blanda paz, y de eftc ct«id9, en que vace« oy mis heredados iauteles. ElfamofoSebaftiaQ nueñro Rey, que vtva_IIeropre heredero deles fiólos, á la imicac^pu yutrqponmljifedcaUSOMLJIA del Phenix, cy al Africa hace guerrí, noay Caballeroqije quede en PorHkgal, que á las vocet de la fama oadie duermei Quifíer?Ie acorapaííar á la {ornada, y por verrat cafadcí, no me he ofrecido» bafta que licencia lleve de tu boca, Leonor mia, efl-a merced has de hacerme, en efte cafo has de honrarme-, yefte gufto he de deberte» leí» .Bien ha íído menefter con prevenciopes, hacerme oraciones que me anitnen,. y difcurfos que me alienten» V os aufente, fenor.mio, y por mi coflfejoisufente, fuera proattociar yo mifin» la fentencia de mi ji)u?rte» 1,0/if. Ay honor, mucho me dcbest Juan.'íi fe acerca, la jornadav l í ^ f . N o queda ea toda LisboaFidalgo, iii Caballero, que fer no pieofe el primero,, que merezca cterní-loa con fu niufrcf. Aíaw.sjufto es^ mas no pienfo de efta fuerte tener yo Lo i en mi rouerw, ni Comedíá, ni.EDtreroes» t,fl^e.Laego tu no pie»fas'if al Africa» M«í¥í,Podt;a.fer que vayaí masferá á ver por tener mas que decir, no a mstir, quebrando en v jno. la l ey en que viro,.y creo, pues s.lii explioar no veo, qaeíea M oro,ni Cbriftiano}, no matar dice, y Iqs dos eftome veréiSiguardar, que yo oo he de Interpretar los Mandamientos ds D ioi. JLi^eM i Leonor? Lew.Efpofo mío» vos tanto tiempo fin vércneí Q uexofo vir5.el A mor, de los indaote^-que pierJp.. I.í/íf.Q ué Caf tdl^ a que eftais! ceflen las lifonfas, c^ffen las reperidas UheMs:mirad que los Ppítoguefes. al fentiinleQto desamo» la raion, porqu^el que qulCíC: w dol o que dice, quita áe valor a lo que Rente; f £ en vos es ciego el amor, en mi mudo, Síaw .Y jde effa fueítfr Idoa TOt), fin que lo.diga « a a ü cademoBiAdo ^ \ zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA isitp >i V T>e DVn " ' . M ro Cáíder&n^ zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLK rti Q uiea hiciera casrJamcD » nlle ng u l, pues que no puede zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFED de simirmo ooriinirad, segaros la voluotad; porque en partes diferentef, lo que la vlJa o» concede. pudiera la voz quesarfe, M as porque veáis que eftimo fin que el ptcho lo^íupicffe! vueftra inclinación valiente, Pudieti feotir el pccbo, y i no quiero que el amor, fin que la-voz lo uixeflei fino il valor me aconreje. pudiera yo, Gn que yp,^ Servid oy áSebaftiati, llegara i oírme, n i i vérmrí cuya vida el Gíclo augmente, cciDmigo mifmo culparme, que es la íangre de los N obles, y coumigOsfáeTend'erme: patrimonio dé los Reyes. •porque unas vecss cobarde, Que no quiero que fe diga, como atrevido ctras vece», qu; las cobardesmugeres, tengo vergiieDía de.roí: quitan el valor á un hombre, qué ul diga! qué lal picnfeí quaiido es razón que le aogmenteni Qiié tenga el Uoflor mil ojo£ Éfto el alma osaccnfcja, para ver loque le pefe, aunque como el alma os quiere; mil oidosparaoirlo, mas como agena ló dice, y ana lengua folamentev fi como propria lo (ícute. vajit para quenatfede todo! f jjn.H tf zis vifto «n vueftra vida Fuera todo lenguas, fucffe, i^ual valor! y«<í».D¡gnamente nada oídos, nada ojas,^ es bien, que lenguas, y plumas porque oprimido ds vérfe de la fama la celebren. zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA guardado, no rompa e! peeto, Xopi.\ vos, quíí me aeoafcil^s^ ycsraomina lebleate, J« » » . Y o , Don^Lope, de otra fuerte A ora bien, fuetia es quexarme, os refpondiera. Lí/ie.Decid. mas no sé por doa.da empiece, J«rf».Q uien yá colgó los lautelei 4jue como en guerra, y en pat i de M arte, y blanda paz vivi tao honrado fiempre, ciñe de palma las (lenes: pata quesírme ofendido, para qué otra: vér, decidme, 00 es mucho que no aprendicfie La de liinpi.tr los pavefes razones; porque ninguno tomados de orin, y polvo, previno lo que no teme. en queaora yac¿n, y ducrment OíTarí decir Ii leiiguu, Y o fuera ¡ufto que fuera, que tengo j lengas, detente, a no eftar por ella muerte BO pronuncia, no articules retirado, y efcondido, mi afrenta, qué (i me ofendes, y no es razón ofrecerme, podri fer que caftigada porque á los o ¡os del Rey con mi vida, o.fcÓB mi mnrrte, llega mal u 13" dcllnquente. liendoof;nror, y ofendido, Si efto me difculpa á mi, yo me agravie,! y yo mí vengue» í bailante difculj.» tiene, N o digas que tengo leloí} I •1 • L quien Saldado filé Soldado; yá lo di!te, ya no puede no os vais, amigo, y creeJme, volverfe aí pechcPla voi; aunque un hombre os acobarde, pofsible ES que tal diíefle, y una muger os aliente. i/ afii fio que defde e 1 coraron ^ Xo/í.V algamtf DiosI quien pudiera al labio confutna, y ijuemc. acorifejjrfe prudente, el pccho, efte aliento, eft» {i en laocauon ay alguno, refpiracion fácil,'éfte que á si niifmo le aconfejel veneno infame, de lodoí Quien hiciera de si otra tan diainto, y diferente, mitad, con él pudiell'e que otros defcanfar! pero mál digo. Iiicei ji7¡ ^ fiema A^'dyioy ficreU Vtngím^d. que me quedaíle dixefle, taf í r fus ef tños fbelen, por pírecetle que eílaba y elledcfde el pecho al Ubiol excusado, y parrcerle, A qué afpitl, 4 qaé fcrpiente que es dár diígtifto a .Leooprt matá fu proprío veneno í si puede fer. Y no puede A mil Citíos, falarasrce, fer también, que efte g i l i a porque quiere rai.iolor, mire á pane difereqie) que él me mate, y yo leengendrí» y apretando roas eFcaíb, Z clos tengo; yá lo dixe: quando firva, quatxlo efperf, valgame Dios! quienes efte quando miré, quando qtiiera, Caballero CafteHano, en que me agravia,ni ofetidcl í^uc á mis puercas, y á mis redei,. E- ooor, es quien es, y yo y a mis umbrales, clavado», foi quien foi: y nadie puede eñatua viva parecer torrar fama taa fegur», la calle, en la vlfita,. ni OptniDB tan excelente. en lalgleíía, atentamente^ Pero sr puede ( ay de mi!) es gy.rafol de mí honor, que al Sol claro, y Umpio tieropre» bebietvfofus «ayos (iempre^ ñ una nube no le tcrypfa, V algaroe Dios! qpé feri yutrqponmljifedcaUSOMLJIA por To nwnos C¿ le atríve,. darme Lsonop, íicUtaentefino le mancha, le-enturbia, Ucencia para aufentirme; y al fin, al fin,,íe obfcurcce,. y con-un femblatite alegre,, Ay., honor, mas fubtileias, no folo <larm« licencia, que decirme, y proponerme^ ' I ffno Jecirrae, y. hacerme M as tormentos:que:me afl'ixan,, difcurfo tales, que aun elloí^ roas penas que me atormenten, ¡.,1 zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA a e o b H g ^ ani que füefle,; mas fofpechas que me maten,, «juando'yo no lo intentara» mas temore» que me cerquen, Y qu¿ fera, finalmente, mas agravios que m t ahoguen,, decirme Don Juan de Sylva^ y mas lelos que me afrenten» que ni tire vaya,,ni aufentel N o , pues no podrás matarme, Eu mas razón no eítuiriera» fi mayor poderUOIDB DO tienes, •ue aqui mudailos^viniefien que yo fabré proceder de mi amigo, y. de mleípopL callado, cuerdo, y prudente,, eonff/os,,y pjrectresi advertido-, cuidádofoj N o fuera mejor, si fuera, felicito, y afsifteote,que fe mudara^ las fuener, bada tocar laocalToa: y que Don ).uan.iBe animaHe» de mi vida, y de mi muerte; y Leonor me.detavieílef y. eo tanto que efta fe Uega, SH mefpr fuera, mejor! valedme, Crelosy valedrae¿ vaf i,. pero ya que el cargo ei efte„ Sale Syrenu con m» nn, y M« m~ iiabtemos en eldefcargo,. que tras ella, vaya, que^el bonor no quiere: ^ / « a.Ef caparme no he podido afm^ por tatt futñile» dií^ tf os. de M anrique, pata-entrar condenar, infusamente. en cafa-, todi^ el LugarN o puede (i r que Leonor oy (ígurepdómfr Ka venido: lalesconfejós me.di fle, qu¿ haré» A /íi»r.Tapada dé aiar^ por.fetine&le, como es, qué miras, caminaí y calla, ?aroni>, fagas-, prudente,, con el arte de batalla, porquet quedándome yo, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA y. el tallazo de picar: n i ot'iBloa no padeciefle? lá de entrecano-pliote, Bien puede fer, pues que dicci. que con viéntq en popa vuelj^^ «jue-diel confijo-, y, ló^entCo: son el manto dé tici ÍRsiai^ N » {iiudé ftc que Den Juaas zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA íl; [1 á •• ¡'•íi I 1 A c zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA P^^ro Caldero». fj De Don zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIH no la qüi.TO. S;'r<»-Pc>t ncí jídwr. Porque sé que ella me ama: no es caufa baftante» Syren.Si. Munr.Li que yo tengo de atnir,. me ha de mentir, engañar, y fe hade b(urlir de tni, ^ dar zelos cada mora Eneo, tnaliratarme, defpedit|ne, y en ef tf to hade pedirme, que es la cofa que mas fiento} porque (i al ñn es coííurobrc en ellai, tengo por jufto' i i Hacer dtfde luego gufto lo que ha de fer pefadiimbre. * Syrea.^ es hermofa eíla fcñcta» M i n r. N o : pero e» puerca. Sjíren.En verdaiHn. que es murBoena caliJidi ^ Jtfoar.A trope un ojo le llora, y otro aieite. Syreih'Ei entendidil el m o ñ o que fáíe ac ju v líi» » '. l l a n t o dice eniicndo y o, Efte mono que aqui fale,. mas qiianto la dicen-, aOf. utsqonieSOMFEDA fu papel un cfempo hizo^ que es-entendida-, entendida. de rÍ7.ado, y de pcrfUzo, S^ rn.PoT mireftra de que es verdad, fué raartyr, y; copf tílorque amarle á (u g^fto; efptrp, N o e» de aljofir lo enfartado, efte lifton, folo qüiíroi liendres fon, con que me alegtOnaíáBr. Dé mui buena volíintad.que dfefde lexos miradoj Syremfíy trifte de mi! M iaí-.Q ué ha CJoí parece un penacho negrO' ^ rw . M l m-arido viene alli, de blancas mofeas nevado» vayaíé prefto de aquiji A quella fiibtiL varilla que es un D iablo mi marido: es barba-de la ballena, dé vuelta á la calle preftoj facada de la cotilla", que en tanrb, feñor, queérpaffSi que fué entrfgar i mi pena le efperaré en eíla cafai Ib' mifmo que una coftilla; Mánr.ía buen fagrado.te has puefto»vara de virtudes llena^ qucaqui vivo yo, y víndré a que hace bueno el pecho, y buenl' en eftandó aflégurada, V'*/'la efpalda mas eminente, Syren.fí un bellacoy una taimadai que yá todo talle miente bien dentro dé cafa entré, por la barba d : Ballenafin que fuefle coaocidarl a zapatilla. que eftás lindamente le he engañado; miU ndoaora en mis maooi,, aunque él mas,, paea rae ha d exi i o cafo fué, donde fabras, tan afrentadai y cotridaf que vivieron dos enanosque djxera que era feij fin encootraiTe jamásI iroitnportaba, aunque lo fiieffé» Elle es un guante, y no ay duJ» ^ no importabas que direfle, de que como RHifenor, que necia, y que fucia fea: mucho tiempo eftufo en muda,, Pé ro az e i te u n o i o i m l i preguntafelo al olór,y « tro arrope! .no por D i o v febo de cabrito íudaEfta cinta es dé una D ami:. y atttr fi Ilot&ran Iqs dot ¿ cg rán porte: j»ero ya^ zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA una cof a, entoiices si' qpe caliaríi mas fue tope y cfcinslas de inafcote, habla, 6 defcubtece, y fea, dtf tngiino tu fachada, porque callando, y tapadaj dice boba, fobre f ía: aunque en tu brio, cnnReíro, que indicio de todo dÍ5r S^rew.No dices mas' M arir, N o sé m«»^ re n . Y a quantas ha dfclio eílot M m r.A ntea foFiuurrecatads: no he hablado, a fé d« quien fino cinco todo oy,. que y á eftot muí reformado^ ^••««.Gracias al Cielo, que veo, un hombre firme, ycoaílante; yo tampoco fo!'amantede (lias de nueve. Manr.Si cteOiyporque m-c creas á mi, de todas nioílrarte quieroun favor, fea el prirnero S V4 J fecnto 'J^ray iüj fécmd VéhgdUT^d. l eí s . Ll o to UB3S muertas memorias qite vienen vivas en él, ^ rew.Q nien bienquiere, tardeol viíl » Líds- Como el que iHüerte me ¿i6 Sale Leonor. efta piefente, brotó L««».Syreoa? S^re».S«nora d U t recianre fangre-Ia herida. lípn.Q uanto maufencia mé cueñal Efte bombte h.i de obligarme, habUftele? Syren.'í h refpuefta confegttlrrae, y ofenderme, ea efte papel te embiaí 3 matarme, y a perderme, y de palabra rae dixo, (que aun fuera menos mataime) ^ ijHC (i él una vf e te hablára, ' •ítt ii no fe aufirita de aqirt. él fe fuera, y ce desara. Syrcjj-Pues tu Jo puedes tiacer. Lcon.Coa mayor caufa me añixo; Leo/f, Comoi para qué el papel toinaflei J^ rf s.O yen Jo lo que é\ dice, Syren.Viti traeiie^íl papsl. que en oyendole una ves LeoB.Ay penfamiecito crucl, fe aufeotara de Lisboa. que fácil entrada hallaftfe tM S.Como, Syícna, podr¿f en mi pecbo! Sjrey.Pues qué importí queatriitco de que fe vaya, que le come», y l e4e« t impofsibles fabté hacer! Leo.i.Zño es bien que de mi creasl como vcodia í la voz, Setena, reporta; ^ ríB.Ef cucha atenta. con abrafarle, y rompet-le: A ora es al aaocbeccr, cniisridemc, necia, y fea, afm que csi la hora roas feguraí rogándome que le veaj porque ni temprano eí, que eftoi oauerca por leerle. pira que a un hombre conOlcaDj ^ re » . Q u é cu'pa tiene el papal, ni tarde, para temer, que viene mandado aquit que la vecisdad lo note: íeñora, para qua afsl de mi f enor, ya tu v¿Sk vengáis tu colera en éll qu^ nunca viene á'efta tíori; leoB.Pues (í le tomo, veras, D on LUÍ», no duda que eft^ que es folo para roraperli. en Li calle, y podra entrar SJ'rí».H.f^mpeledfefpues de leerle. ' ' á efta fala donde habléis írfuB.Eflo si, ruégame mas: los dos, y entonces podrís perada eftás, y por ti decirle tu parf crt; rompo la nema, y le leo, Oyele lo que d¡!t?rs, por ti fotó. S j rm . ^ i lo veo: y obre fortuna derpaer. ábrele, pues. Leí» . D iíe afsi. l í ú ^ . T an ftéilrtiente j o dice», Lí^'cBt/ff.Leonor» fi yo pudiera obíáeecrtei 11 zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA qas no le d- x3 i que hi" cer y pudiera olvidan vivir pudieraj ti L al temor, ni aun st bonoc fuíra contigo liberal, (í fuera qae dudar, ni que teín;ri .i UOIDB bailante yo conmigo á no quererte. 'I' zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA ve ya por D an Luis: A mor, M i muirte injufta, tu rigor rae adviertf, VafrSytena. fimi vidi eti^ámarte perfevera, aunque en la ocañon éfté, plaguiera a D ios, y de uña veí muriera,' foi quien foi, vencetm.e pueJOj qoicn de tantas no acierta con fu muerte. no es liviandad, honra es - í Q ae te olvide pretendes i como'puede la que efta óciCoti>'tíé pufo, : •> defpreciado olvidSf', y aboríscido? ella m : h.i de defcode^^ I ño ha de quexarfé del dolor el tabioí qnequandoalk-me f áltíra, Q uicretiia tu, qu; (í obligado quedo, quedira yo, que también yo olvidará defpass favorecido, ' c Cupiera darme la maerrc. que el bien puede elvidaife, no el igtav'O l Uno fupiera venccíJ^' $)irí».t,lorJ5, leyendo el papfil} Tcrab l iado eftoii caSi paffí f o aen f i a « f ladaíglotia?; - zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJE q as UD picaron, un taiuiajo»' que mis ojos han llorado,' U no aíeice, y o tro ari cp eí Hi\ De Dofí ? eiro CMeh» , JV zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVU iros á fírvír al R í y : \ fuiftc 3 Flandes. iKÍi.Si filt, que aqucílo yo lo diré: D onde dimos an aflahó,' y murió valiente en él un Don Juan de Eenavidei, Caballero A ragone's: la equivocación del oombre Salen Sjrenei. y Do» Luís coma dio caula para encender a ehfcunts. q ue futfle yo el rriuerto,'qOíint» es L^ ooor. Luh.Ay de mit una mentira fe tree! cuantas vccís efpeié llegó la nueva i Toledo, «fta ocaílon, ya quillera no haverla llegado 4 ver. zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA leos.Ef lo-diré yo mas b ien, Le í» . Y a f íñor Don Luis eftafa que (ín vida la lenu, • 2. en mi cafa, y i teneis y con vida lalloréf U pcafioo que ha» defeadoc pero callo aqui, atmi^ae aqttl hablad apriíla, porque os pudiera encarecer os voW afs, que cemerofa los fentimieBCOs que hice» de mi mKma, tengo al pie f las triftesasque parsé. Eo efcdlo, perfualíonei A. rillos de yelo, y el alma de muchovpttdieron fer 5 mi aliento puede Ujcer baftantes i tjue en T ol eda al corazon un cuchillo, me cafaíle por poder. y a la garginta un cordel» l » t í . Y o le fupeen elcamino» IW íi.Ya fabeís, Leo no r hermofi» É es que olvidado no haveii y penfando deshacer io" pillados guftos, y ya el cafamienco, corrt pe ignorais.fi) que fabeis, hafta que os vi, y osJiabI¿ qUc en Toledo nueílra patria^ con equivocas rszoñss, |Krdpaadme, os qnife b íea. ea trage de M ercader. • • defJe que en la V ega os v i líe» .E£laba cafada ya, n BD dia al amanecer, -kO : y pues os defengañé-,'*?'' yutrqponmljifedcaUSOMLJIA ^ue augmentando nuevas florea k qué hsTsls-venido íquil ••"r q v •I campo hermofoi tal v<a Lf/ ü.SoIo he vetiido, por vér ]q que las manos rob aroa G ay ocaííon de qucxarme, •teftituyerOD los pies: - . . f í íi. que G culpando tu fé, y l fabeis. Leí» .E^ Brad, yo. t '.JE defcanfov iré luego-JFlandeSji ^ ferc mas. brev e: ya sé, donde una bala me dé, que muchos dias rondañei» porque la potvora cumpla tni calle, y a mi defdén, lo que me dfreció otra it% , co nftanté ííempre, tuv iftclí Syren,Ctnis fube la éfcáíera. amor firme, y firme fé, iítf a.A y, Cielos! qué puedo hicert haftaique os favorecí: obfcura efllaquefta fati, (qué no ha ¡legado i vencer ique aqui te quedes es bien, lagrymas de amor, que lloran porque á tí f o l b te hallen^ ípí hombres que quieren b i enF) y havietido entrado qitlcri «i» ' Y i j v o rcci d o ya, podrás irte, Caílíllik ítendo tercera fiel | que ocaííon avra otra la noche ( qué uo configucQ para acabar de qucxarte. « a s reía, y un papelt ) ^ rí » , T o voi contigo también» " Tratabatiios de cafarnos, Vanfi las <(ue ReM o, plenr© que es ¿ 0 0 Lope, y el víeolo inirtno, fe me figura que es éU fíms efcuciiaí lí me oye» ique projirio del coieclo fue! que á cales riefgos fe ponga una principal magcr! f I % Uando os hiciero n merced una G lnst» , y fu¿ fiiem 3 I « K . Q u é confflfioa és:£lla, gnc a m i deCiicha i g u ^ i r i 6 A fecreto J^ray lo, la voi, viendo que un hombre raí preguctiba el nombré en mi cafa, ofendida la paciencia, y turbada, callando, <)oi refpuefta con la efpaáaé Svren.Por quanto aqua fe viera otifcuri efta la fali, y la noche funefts, yá de fombras cubierta baxa: no sé la cafa, ni U putrt» , que otra vez no he llegado aquí ( fortofa pena! ) teinerofa Syrena, y Leonor, rae han dexado, confuTo, y lio feniido. S» le Doiijuaii como a ohfcuras, y encuentra con D.on Luis, y ¡« can las efpadaS' ^ j i u n . h cftas horas no huíjsrao encettdido una lux! mas <^u¿ es efto» qiiiea es? no tne rcfpondel l/d'i.'M allé puerta-por donde i'aür. I .Vafe tentando fitj aira fuert/ii ^«¡in.RelpQnda prefto, i I lengua Je azero, lo dirá mí efpada. Sale Qm Lope a QbfcurxSi y kUnrique.: Le^ .Raido de.cuchillad.as, ^ i obfoiiras el a pofentpí JuJ^n.^í]al los paflos (ientO» A ífl» r.V ol.poríuz. icjjf.A^qui efpa4..is!|í' ' •yí es fuerza que me aflombrfé y » *» . Y a le he dicho otra Vez, que áiga iíl nombre.. •lope.Qarten n(i nonibre preguntal Jnan- C^ ien .porjueihíblejs. !tplp«cho, .que abrira v.ueftto p u h o mil bocas fon efta punta áe efte az6ro. í,fi> ».Luzprefto. f I •n ' •Salen U¡mor,^¡i SyKem.y Manrique fetret^ VengdnTi^d, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXW un infeliz fuceffoS ' J« a» . C o m a puede fer effo, (í el que yo digo que e n dentro íflá,-cola es cierra, pues no pudo falir por efta puert.t, utsqonieSO que vos entrafteís! Ls^.D igo, ^ ue etJ yo. Jwun.Eü cofa extrañal I Xop'-O, quanto a jjn hcjnbrt ilaña tL un ignorante íLBigol <jue no puedan los ,cuerdos,1os mas íablo» «elar de un necio amigolos agravios! JJ^ Í Pues ñ por cofa cierta «eneis que /ientro4ia enttajo, fuerte, y determinado, guárdame üquella.paeitx «n tanto, fi eíTo pafla, que yo examino toda aquefta cafa. 3r««»-Pues no faldrá por ella, mirar.feguro puedes. Xflf É.M ira que,en ella quedes, y no te apartes de <l a: vaft, oy ferá cuerdamente, ;fi es que ofendido fo], .el mas prudeotéí y a la venganza mía .tendrá ex;roplos el M undo, porque en csjlar la fundo. Ea, •Mancique,-gü1a .con eíía luz. ¡W anrN o oflb, que yo de duendes fot poco golofo. if iíB.N o entréis, feñor, aquii yo fol celBgOi 1,- zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA que affe^uraros efle quarto puedo. .con I» ? :''íope. Pues de qué tienes miedo}I,¡)6f.t>on Jiian? J« « » .P.on Lo.pei Jtí(»»>-.Deiodo. Ls^í.Suelta, digo! ^ l ,eín.^ y Cielos! Lope.-Qué es^ ao» y tu vete dé aqui, que antes es dicha, Ju an . í n cfta quadra entraba que falte otro cefligoá mi defdicha. qníndo un })oinbre laliai ^oma lux, y entrafe. y por jitra farteji Lfffe.A lgúnlionribre feria, •V» Manriqtte. que robarla intentaba. I.W 3. A y, Syr&na, q ae f ueítc J,íff».Hombre» y«rf!J.Y:pr6guntando es eñatan^ iradal quien era, ;U refpuefta dio « llaodQ . zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPON clloi defefperaila XTF/ IF.Difsimular convicnev «I?, •jor darme aquí la muertí! no crea, que yo puedo pues ya es fuería que tope tener tan baxo miedo, a Don Luis efcondido (ay O l oj !) D XopCé que mi valor condene. El pensó que falia Bueno fuera, á fé mia, poria puerta q ui entraba mataros- yo era el tnifmo^ue falia, 5 mi quarto, allííftabas que tan defconocH» ^ ' miS r.' -ij. j• r zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA Di Bon Tedro « lis pM qu¿ ffll pot£a , duda lo ba pallado} y ¿ Le ba vifto D oa Lope, .yá U t a Jbailado; ^ ué haré» irme nopuedo; |iorque,en defdiciias t a a m , oprimidas las plantas, íadeD as.pooe el m iedo ,de cobardes prífiiones: toda ftii coofufion de confafíosM u fig/c Don luis,con la effada dcfauds, y rebeaade , y Don Lope ir^ el tan la hg., y la effad» iefnHdn, If l f í.N o os eacubraís, Caballero. Xw's.Betened, feñor, la efpadai, que en la fangré de un reridid% «ñas que le Jluñra, le mancha. Y o foi deCaflilla, donde f o r los.zelos de una D ama, tí k na Caballero la imietce, cuerpo i.cuerpo eo la campínjj, V ine'á aippararrac a Lisboa, donde eñoJ, por eíla caufsj ¿ a Caftilla deftetrado; lie fabido efta mañana, ^ue aquí un herüiano del «aucii^A cauielofameiue anda encubierto, por veogarfe, COD traición, y con ventea» C o a efte cuidado, puei, fot efta calle p;iílaba, i^uando, [fes Ivotnbres me cmbiñea a [as puertas de efta cafa, Tiendo que aunque tflcorazoB ílgunas veces fe engaña, era iropofsible defeofa i n n t r a t r e s de m an o arinad at Subime por la cfcalera, y ellos por ver que eftaba ea fagrado, ó por no hacer tan dudofa laTsngania no rae figuieron. y eftuve « n efla primera fala, efperando á que fe Fueíleiif' y fin tiendo foflegada Ja caile, basar.me «(liife: pero al falir de la quadra tepe un hombre, que me dl*0, quien va; yo qué iiiiaginabá que eran mis propriOs contrariof, > 0 les rcfpoodo palabra: ana faU en oua ctih&jl . ^ y cMem. zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWV hada aquí. Etta es la cau^ de ha^ej'tue hallado, feñort efcondjdo en v-aeftra cafa: aora dadme la muerte, que corao yo dicho ayá la verdad, y no padezca a^ una virtud, (ia.cauft m crirí alegre, rindiendo * el ser. la vJda, y él airaa 3 un honra4o feailmieDio, y no a nnainfattté vénganla* Jt-efe-Pueden juntarte en un hombre confufiones-mas tatirañas! af , lantos aflombrcs, y micdoí, •penas, y defJicbas tanta!»! •Sj en lacatle efte.hombre ( C H toi! ) tantos pefares me daba: qué vendí á l darme efeondidó dentro d« mi mifma cafat Bífta, bafta penfaioieBco, iufrimiento, balta, bafta, que verdad puede fer todo; y quando no, aqui no ay caufí para jnayores « « remos, lufre, dirsimuía, y calla. Caballero Cafteliano, yo me hucl goic q« eaya (¡do contra una traición fagrado vueftro mi cafa: eo ella, á fer oy folteto, os firvíera, y hofpedara, porqae unÓ b al l ero debe amparar nobles defgraclas:' l o que podré hacer por vor^ fera acudiros «á quintas ocaíonef oy fe ofteican, porque 4 effe lado mi efpada, contra tresbmI, os íuceda •otra vez «olfer lacfpalda: y aorá, porque falgais mas fecreto de «iJ cafa, podráis falir del jardín, por aquella puerta faifa, yo la abriré, y «ambíi-n haga p rev encl ^ can rccatada, porque criadot, que al fia fon enemigos de «iaCt, DO ruenten qué os hallé CO ellai y fea fuerzs qnfi vay» a todo fatijfacieodd, de quíi ha 'fiáo lacaufa: porque aunque cs« j¿tto ^ite Sadie c ' ' ¿lijlte y l-f -l I' zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA iI 18 A fecretó Agru'plo, Jecretd P'evgdn'Kd'- , dude una verdecí tio. clara, y yo d< mi milmo lenuio la latiíficcion que biíía: Q uisa de tina malicu Jiuyeí yutrqponmljifedcaUSOMLJIA quien de una fofpseha.e.Ccápií quiín di una Isngua.fe Hbfaí qui;n de una ihteníion.ffi guarda y fi llegara á creer, ciné es ¡ creer ) C JlegTrs & imagj'iau, á penlar, t|Uí alpui-n gudü poner maochaen mi hunuTi qué'cs en mi boDOtl en mi opinion, y en mi fama, y en la voz tan (obm^nte de una criada, una tlcUvai í o curiara, vive.DiaSv vidas, que no le quicJra, fangrc, que no le vertiera-, alm is, que, no le facara, y eftas rompiera dcfpuet, a fer vifibles las almas. V enid, iréos alumbrando haftaque filgsis. Ifcíi.Eladi' tengo la voz en el'pf cho: qoe Portogucfa ar-rog^rclal L' í. i- Vanfi lia d<>s.. 4 Xítfw.Aun m ior iiifuceJiiov Syrcna, que yo p; ofaba,. fojo una vez vino.el mal, menor dicl que fe efperaba; ya puedo lub'ar, y.yi puedo mover lis eladas-p'anus: ay .Syrena, en queme Tuelva a rffpir^r el alma. que él fe fie de nofotros^ para que deaqui no falgai y tu, Syren», no dígas lo que entre los tres nos paffa, á ninguno, ni- a Doa Juan. Sale Den Jria» . Juan.Tiato Don Lope fe tarda, que me ha dado algún cuidado» 1.9/e.Por Dios. Don Juan , linda griefe es hacerme andar afsí bufcando coda la cafa, ííendo cierto, que ful yo: tomad orto poco el acha, sudadla ros. Juan- Pm qu¿i, fi y i aqui me deCengaña el líber que fuííleií vosí y í conozco mi ignorancia. Lfpe.Coa todo, Bavemos los dos fegunda vez-de miralla. Lec».Q ué pradenciatan notableí Juan.Qné valor, y qué arrogancia! ^ rí s . C ^ é temort Lepe.Ds efta manera^ el que de vengarle trata, harta mejor ocaííbn, fijfre, difsimula, y calla. JO RN A D A Sxle DmJ¡ian,y T ERC ERA . Mf J«/«».D onde eftáTíoaLopel iíísr.Q uando liicióen Falacia, yo aquí me qued/. ]Fa<t».Bufcale, y di, que yo le eítoi eígérando.. Vafe M/Ufiqtte. Sale Don- Lop cm /» « • QueJar^tne imagiiiiindo JiO^í.LeoDori a folaj, fin mi, y codmigo, lf9».Sv;ñor, pues qué intentasl el dudofo fin que Ggó, ya no fupiíl • la caufa^ y la obligación qiie tiene con que él entró, y ya fupifte quien á hacer difcurfos vitiie que yo no Ke í?do cu'padal en la opioion d^e un amigo. Lcf e.Ts] pudiera imaginat Y o de Don Lope . quien re elt ifna, y quien te amal tanto, que no ha celebcado. no, Lsonor, folo te digo, amigo ma« obligado ^ue yá que aqíii fe declara, la antigüedad hafta oy: con nofotros. Leon.Ti él nO dixo , buefped en fu cafa foi. que aqtii de Caftitia eftflba fu hacieada gallo, y és miai aufente por una macrteí fu íida, y alma me fia: .V. zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA pues yo> fi'ñori no sé nada. pues ocmo, Cielos, podré Ttípfi N o te dlícalpes. Leonor, fer ingrato i tanta fí, mira, mira que me matas: | amiftad, y cortesía» tu.Loonor, pues de quehavia» i f Íkbsrloí pera bada, ' " a,; .'rf i á Podré yo sét, y c^lar. . >> • zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJ Jí T>e Don Vdr& Calderón^ C¡ eftamos folos Jos do», ^ us fu limpio honor padeiea, a aconfejarijíe con vos fin que mi vida le ofrezca en una duda qne tengo. para ayudarle i vengar! t t f c. Y i para oir me prevengo íodré yo ver raurmuTar, alguna defdicha ffiia; i'f>* queefte Caftellano adore decid, JtM ií.üa cafo me embla 3 Leonor, que la enamore, un amigo a pregiintar, y le dé lugar Leonor, y quierole coníakar ypidcciíniio fu honor, con vos. Lfffe.Y esl yo lo lepa, y él lo ignore? Jugando un dia i'' N o podré, pu-s fi ¿I quedara dos Hidalgos, fe^ofréciA iaciifecho, ficndomia una duda, eo cafo cal la venganza, en eñe dia, foriofa, fobrela qaal ;al Careliano tnatira: uno i otrodefmiotió: 'A él l?n él, yo le vengara, con las voces, no io oy» prudente, advertido, y fabio, entonces el defmentido,. ñas d: ia intención del íabio « n amigo lo ha fabido, iatisíaccion no fe alcanza, y que fe murmura de él, li el brazo de la venganza y por ferio tan fie!, s o es el cuerpo del agiavio. efta duda fe ha ofrecido: y á Don Lope le diré, Si eftc tendrá oblígacio» <lara, y defcubiertamente, de decirlo claramente que no hable al Rey, ai fe aufeotK alx>tro que efta innocente; aias fi me dice, por qu¿, o fi dcxar-Es razón < omole refponderé que padeica fuopinJon, la cíiurat duda mayor pues él DO bafta a vengarlof jes efta, que al que el valor lí lo calla, es agraviarle} •eterno honor le previene, f|\ y (í lo dice, es error filien dice que no le tiene, de amigo: qual es me/ or, ft quien le gaita el honor, que l o diga, o que locallel ^ ud dcb; hacer un amigo Icf í.D exadrae pénfar un poco: en cal cafo? pues enciendo, honor, mucho te adelantas, que (i le callo, le efundo, que una duda fobre tantas, y le.ofendo, G lo digo: baftará a volverme loco; 6 cadigo «fendolezyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA en otro fogcto toco ÍUagravio, yo fui fu efpejo, lo qne ha paflado por mí, por qué bien no le aconíejot Bo n Juan pregunta por M as el mifmo viene allí, luego alguna cofa vio; no ha de qucíarfc de mi. L: ré que U diga! no: Í1 me ha de dáf el confefo. zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA pero qué la cal le sL Sale Doa Lope, y Manñqitet Don Jtian, yo he confiderado,, lí^ f.V uélvete, M anrique, y di, fi es que mi voto he de dar, que luego á la'Quinta voi, que no puede un hombre eftit ' ' que cfperandoa hablar eñoi ignorante, y a|!ravíado: al Rey. M anr.V oa Juan efta alU, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA aquel que ha dlfshniiUdo V viene á híb lüíe, -vafe, fu ofenfa, por rio vengalla, í t f t . k y de mi.' es quien culpado fe halla, qii¿ pue.ie ha»er fucedido? porque co im cafo tan grave £ qué puede haver venido? Bo yerra el que no lo fabe, D on Juan, pues qu¿ a y por acal £BO el que lo fabe, y calla, O como un cobarde efta Y yo de misé decir, fiempre á fu temor rendido! que fi Ufi aiDÍgOi qoitl TOft itlí^ f *'^ '^ ''" Lope amigo, yo yengOn C» fienáo. T® •i 16 ' A fecreto Jgváy ioj feefeu Vengdnlf^. que todos faben la defdicb^ mía! £endo quleo fotnos Roí dos, dame tus pies, ferá fíti? mi boca, tal me llegüra á decir, íí con fu aliento ellas efpheras toca* tal pudiera prefumir "t - zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA Eey.Ha Don Lope de Alineyda, fi tuvier* ¿e mi cal imAgifllra,, en A fiica efla-efpada. yo venciera, que el pr¡m;" to en quien réng l u. la M oiifca arrogante bizarr-ia. mi deldichaifiicra en él; iíf í.Pues pudiera quedar la efpada mía porque es cofa mui (jniel, en la vaina, en la guerra (J fe os mueftri^ para dicha caía i cara^ quando voi, grao feñor.iaciis lavueftr-af Y DO sé que en ta!, rigor Con vos voi a morir , qué caufa hoviera» aya razón que ao aflombre-, i'í zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA que en Portugal;, feilor, me detuviera y que fe le pueda í u n hombre: cn aquefta ocaííon^ Rey N o eftaw cafadot decir, no' tenéis honor: lajIic.Si feñor , mas el ferio na ba eftcrvad» darme el amigo mayor el fer quien foi, porque antes oy me H an» el mayor petar, tcttigo tener miyor heaor, s mayor Sma» os Dios, otra vez 1<? digcjy Bí^ . Como, rf Gítfn cafada, ífue íí yo me lo diitra,. í mí la muerte rae.dier»,. quedara vaeftra efpoíaf Lr^^.Mui honrad» y- foí- mi- mayor amrgov en ver, que o» haofrecido ^uan^Yo quedo- aora de vo». a efta einpreffa ua SuldaJto en fu matido,. enfe5ado,eíro diré, que es noble, es »aronlI, y mas bntiera, y á efte amigo avjfaré qae i vucftro lado, gran feáor, no fíier» catle. quedad con Dios» j. Vafe Dfn Jit» n. Lp^í.Quíen duda que entre los doipafla el ca(<s q ue ponia Cn tercero, y qfte fabto que Leonor matarme inténtal Pues el que fupo mi afi:enta, fabrá' la venganzi) mSa, y el Nbindo lo de faber; bafta honor no íy qU8 cfper.ar» que quirfl-U-ga a íofpechar, no hade tl»-oar,á> creer,, ui efpt rar á fuctder el ma!, y pues fu muians» é „ ^ , ~ Jogri tí a basa eíjpetanaa, Tolveré, donde, cpntemplo» qne dé (u traición esemplo» y elcírmifnto mi' Tenganza, S-ítli el Rey y atompuriarntentot. Itíj'-^jflqufl ínEla Qiíinw , que del Reyla llamaael vulgo, aquelh rrocb* duerma. di^Oy que no me he quedir py eo Lisboü eflé la gentetnda p< svcnida, que d«fde allj.faidra la mwinddai i competir aon plumes, y colores ilcl Sol los rayoi, del Abril las flprej. líf f íCobarde al Rley me llego. af». qoc cfta pena, cfta rabia 1 y cfte fuíggt^ cobarde me t56ne, que fofpícljo' « tetvctgieazaK dolor,)! cobardia^ Vi •: pues fi aniss por mi fama oí acadia, aora per la fuya, y por la mii} y no es inroaveniente í mi defea el aufentarras de etia,. Rey, Afsi !o cre»^ que yo ¡o tii»e, porque no era jufto j defcaCaros tan prefto y de efto gufto; q en Tueftta cí& , aunqjie la etpprefla « «fe podréis hacer, Don Lope, tnavor falta» Vafi el Rey,y acpmpañamUnto. lí/ ií.V álgame el Cielo! qué esel t» porque paitan mis fentidosV A 'ma, qué havelsefcHchadof Ojos,.qué e» laque haveií viftof T an publica es yá mi^frenta, que ba llegado a los oídos del Rey? qué mucho, Ií es fuerza fcr los poftrero» los miosí Ay hombre mas iofélice! no fuera menos caftigo, €ielos, defatar un rayo, que con mercal precipicioine abrafJra, viendo anees el iocendio, que el avifo: que la palabra del Rey» que grave, y fevero diko, que yo haré falca Pero qué rayo mas fíPheniidelasdeCíic^»* • fiii ceniza de rai mif" " ®' Cayeran fobre mis ombroi elEís raontwj y zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA ^ 'T>e DonPedro Caldero». Quien puro el honor en « f i s fépulchros, ie yeJti, FaenazyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA que C5 tan frágil» y quien bíio que me fepültaran vivo: experiencias en redoma, meinos pefo fuccan, menos, no havitfndo erperitncia en vlilricií que ella a&enta en que he caíJb, Pero acortímüs dífcurfo», a í u p grao pefadumbte, porque fera tin ofendido y l iefmayado me rindo* culpar las columbres necias, A y hotiof, mucho me debet» proceder en infinito. júntate á cuentas conmigo: Y o no bafto á rrducftlis, qué quexas cienes de mil ( con tal condición oacimoi tn qué, dime, ce he ofcndM ot yo vivo para vengarlas, A l bereditdo valor BO para emendarías vivo» BO he juncadoel adqoiritiail Iré con el Rey, y luego luciendo la vida en mü Tolvi^adome del camioor defprecro al mayor peligroí qué ocaííon avri, también Y o , por no ponerte á riefgo> la teodrcpara' el caftigo. toda mr Vrda. no he li4o JLa mas publica veDganzai con el humi'ide Gort¿i, fcrás que el M ondo aya vHloí con el Caballero aiiiigoi fabrá el R.ey, fabrá Don Juaov con el pobre liberal, fabra el M undo, y aun lo» ligio» con el Soldado bien qtiiftoí futuros, Ciclos, quien es Cafado. ( ay de mi! ) cafado, un Portugue's ofendido, en qué he filtado; en qué he (ídij. Raíflla demtrkilUias áentr<t,yfHU Dcu cWpado? no hrce elección fíM» riñtuda ce» otros i qtte de noble fangre, de antiguo uem kujendt. M Íor? Y aora á mi efpofa y««».Cobarde$, el fatisfccho no la quiero» ño la cftiuio? PuM fi yo en nada be faltado, foi y o , que no el dcfmentrJo. 4 £ en mis coftumbres no ha hafli}» I , Huye, q uecsrsyc fa elpada. vtifii acciones, que te ocaffonen, l e í e . N o es Don Juan aquel i^tte rolrol con ignoríDCia, ó con vicio, i vueftio lado me hállate, por qué me afrcntasí poí qncj Ctr» dtntroMmrta foK En qué Tribanal fe ha vifto yuan.Si eftais conmigo, condenar al innocentei lope.Yt poco fuera el M undo. fentencias ay (Ít) deliro» huyeron: decid, qué ha fiaío, kiformaciones fin cargol fi la ocafioD que ccnris .y (ín culpas ay cafligo» no nos obliga i feipuirlos! O locas leyes del M uado! 3r»tó».Ay Don topci muerto eftoií que un hombre que por si hfco oy nuevamente recibo qnanto pudo para honrado, la afíenra que en !a venganza' no fepa fi efti ofendido! pensé que eftahaen füotvidof Q ué de agena caufa, sora mas ay de mi! ha Cdó cogañ» » Tenga el defi-fto á fer míoporque bafbote no ha 6da para el mal, no para el bieoi la vénganla i fepultar pues nunca el M undo ha tenido un agravio recibido. ^or las virtudes de aqusi Q oando fiie aparté de vtM^ ief te en mas' Pues por qu¿ ( dig4 llegué hafta eíVe proprio (ítibecra vez)'han de tener que bace el M ar, con el fio, i efte en menos, por los viciol' zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA que vOs ptopríobaveii vcnJáaf^ I de aquellA que facilmeote que ts de votVerá la Q üin» i rindió A lcazar tuB'iltivd adonde haveis rpdücído í l as facilci lifonias Tueftra cafa, prcviiníeflí^a fefúllrianoapetílot ^ zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA Hcgofc 2t Jgraylo, fety^t^ Venganza. A fecreto zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTS porque dijo la venganza, lltgué, pues, y tu efta parte lo que la ofenfa no dijco. vaf u eíliban en un corrillo lo^í-Porque dixo la venganza uno»' bombres, y alpjílar^ lo que la of'enfa no dijtol el uao <1 los otros díxot Luego fí me vengo yo Acjueíie es Don Juan de Sylvi» de aquella que me cfendió, Y o oysndo mi nombre mifmo» la publico, clam eftá, que es Is que lie oye mas fácil, que la venganza dirá apliqué cnirambos oidos. So que la defdicha no : ' O tfti pregunió .: Y quien es y defpues de haver vengada eñe Don Juam N o has oido mis ofentas atrevido, ( le relpondió ) iu faceílol el vulgo dirá engañado! pues efte fué rl dífmenddp efte es aquel ofendido, de M anuel deSoíá; Y,o, y no aquel deísgfaviado. que yá uo pude itfrirlo, y quando la mano mis r;ico la efpada, y ^an tiempo fe bañe en fangre efte día, talf.s razones le digo; ella mi agravio dirá, Y o foi aquel que maté pues la venganza (abiá á Don Manuül nij enemigo quien la ofenfa no fabia. tan preño, que dezyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGF nú agravio l'ues ya no quier© bufcarla i» ulcima razón nodi^o: t ay Cielos!) publicamente, Y o (oi el defagrsviado, £ao encubrirla, y celarla, que nofoi el defHieDiidGU que uo of;nd¡do prudente, pues con fu'fangre quedó fufre, diiümula y calla. lavado avi Uonor, y limpio, Q ue dd fecreto colijo dixc. Y cerrando los ojos, mas honra,' mas alabanza; figiiiendolos he .venido callando mi intento rijo, Iiaña aqui, porque me huyeron porque dixo la venganza luego, que es ufado eftylo, lo que el agravio^po dixo. fer cobarde el maldiciente; Pues de Don Juan, que atrevida y afsi, ninguno fe ha vJfto zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJI fu honorha-relHtüido, Tállente, que todos hacen no dixo el otro Suldado, i las efpilda» fu ofició, efte es el defagraviado, Efta es mi pena, Don Lope, fino, efte es el defm:ntido. y vive Dios, que atrevido, Pues tal mi venganza fea, que loco, y defefperado, obrando dilcreto, y fabio, de aqui noj^ e precipito que apenas el Sol la vea, al M ir, ó cpo efta eípad» porque el jjue crey& mi agravio, oii pruprja vida me quito, me bañara que la crea. porque me mate el dolor, Y harta que pueda lograrla filie es aquel defm:ntido, con mas fecreta ocaGoo, dixo, no aquel fadífecho: ofendido corazón, Q uien en el M undo previno füfre, difsiamla, y calla. fu dcfdichii no hizo haito Barquero l aquel que la fatisfizo? Aquel que pufo fu vida dtléfpindoí\J peligro, por quedar muerto, y honrada antes: que afrentado, y vivo! M ís no es aísi, que mil veces por vengarfe'nn atrevido, por fítiiñcerfe honrado, publico fu agrario mUaiiO| SaJí un Barquera» Jargi.Señbri Líf e.N o tienes un Barco apreftado? Bai'q.ií, no faltará para ti; aunque en una ocafíon vienes, que (íguiendo íSébáftiaa nueftro Rey, que el Cielo guarde, fu Quinta efta tard: la, yut Ayunt amient o de Madrid t>e Don zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIH Tedra Calderón. los Barcos vienen, y yin. jpí.l'ucs prevenle, porque tengo Ue ir harta mi Quinta yoi Sar^.Hj de ferlu;gpi Ltf/>e.Pues noí iv^iA I momfncc e prevengo.. M yi, qujnJo efteis mas dtfcuiJaJo. Lííí/ .To, teiior Don Lope, ertimo, merced que pagar eípero, oy, comoforaftero, masyutrqponmljifedcaUSOMLJIA zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDC a pídiros no me animo, ü/tlt Don Luis l'eyentia u» papel, que en efta ocafion me Iioareis> •MÍj.Oin vez quiero leer por empeñaros, f :nor, letras, de mi v i Ja Jueces, con eíie competidor, porque ya es placer dos veces de quten voi, me defendeii; el repttido placer» fuera de que y i los dos, Ifs. Efta noche ra el Rey á Ja Q u!ff. que cftaroos smigos creo, 11 ta, entre la gente podréis venir difpues yi le hablo, y le veo fímulado , donde svrá ocafion para del modo que elloi con vost que acabemos , vos de qucxaros, Lu^e.CrPo!o. pero mirad y yo de difculparme. Dios o» Tueftfo tieígo con cui.faJo, Uonor. que amiftad de homfcre agraviado, no es mui íegura amiftad, Qu¿ no aya un Barco, en que pucd» Ltñs.Yo al contrario íieuto, y digoj yaílar! o fuerte importuna! quando fu amiílad proturo, plegue a Dios, que ¡afortuna de quif n no eftaré íéguro, nunca iin gufto me conceda. fíloefloi de mi eneroigoí Líjií.teyendo viene un papel: Xí/ie.Aunque arguitos podia quien mi venganza prcvicnel con raíon, o Sn razón, ^ quien dudara que viene feguid vos vaefíra opioion» Jeyendo mi afrenta en ¿lí que yo feguiré la miar; Q ué cobarde es el honort y decidme, qué bufcaii nada efcucho,. nada veo, por aqui» Lwíí.Un Barco quíliérSjf qae fer mi pena no creo, en que hafta la -Qaiota fjera Luis, Don Lop? es eíle. Lff/t.Rfgor^ del Rey. tofe,A -tiempo Ilega5f| dlfbimolemos, y dando que es podré fervir, creed. rienda a toda la pafsibn, que y f le tengo fieiado, erperemos ocaíon, I« » .Q ca(ion lagencaha dado fufriendo. y difiimulandoj á recibir tal mercedj y pues la Serpiente halaga que íiecdo tanta, no ha havido con pecho de pfenfas lleno, en que palLr; y yo quiero yo, hifta verter.iBi veneno, ve'r facciütii queconíidero, que otra vf i no ha fucedido. esbien qne lo mifmo haga^ líiff.Pues coomigo iiéi?; Heg¿ af t En muipoco. Caballero, mi ofrecimieato eftimais, la ocáííon de inl vénganla, paes quenada me mandaij, Ikíí.QiiüI hombre en et Mundo alcanssl «jomdo-ferviros efpcro. mayor ventura que yo» nf^ Y o quedé tan obligado lef e. A mis manos ha venido, de vueftra gran corteíia,. V en ellas has de morir. ap, dífcrrcion. y valentía,; Iwíí.Qué-m'e vlnipíle S fervir átf4 que en tisboa os he bufcado, de tercero.fu maridb! paraque avufftro valor • JV • S«./ Í el Barquero* fervir mi efp^di pudiera, Bar q. Y i et Barco ha llegado. quandocrra vez pretendiera L9j7e.Entrad Tengarfeel competidor, j " " Barco primero, que aquí osfcufcaaventajado;:zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA porque yo á un crtádo -eípef0| y tanto, que de efta fuerte pero no, vos le-«rp<rad, t.retende diro» la muerte^ ^ e s conocéis al cfiaUo^ • A y ,¡n am i e n Venganz^. A fecreto Jgr^viof fecreta zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVU junto al T cxo , en fu f ref curl que al BarfO nes vamo s y a, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPON conttmplaocio tu hermofurai Syiena^ y la dicha jnia: ío lo , y a una tuerd » siad o , Taque aquella cinta bella qo e r o eftatá inui f eg au , para aliviar mi efperanze, le ie .Bu líad aleiiad o VOÍ, y culpando lamudanzat qae allj el^eramo» lo$ d o i, empecé á llorar ccxi ella; Lw í.Q ^ ea vtfto igual ventura? *jF« Jjslabala con placer» ¿1 me lleva ¿e ftfta luerte y lín A guila que m rv i i adonde a lu L q d w íne.aHe.TO. llegarla al labio, pens¿ U f e . Y o de tfta tuerte le ilksí) .^ue era .eoXa de' comer: donde le daré la muerte, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJ 1)3X0 de.uaapi:dra ytpji Us doíf y con gran tefolucion S í r^ . El criado wo vendrá yne .arrebatóme el Ufloo, en mil horas, fegwi creo: y volvió a fubir arriba; mas que et aqfoellp v«8» •jf a, aunque con gran ligéreet Jefaítdo el Barco efta, .lubir a (u nido quiera, rompida la cuerda: D ios « p| iade hallar un.caldero., fole los puede Ubrjir, .que ponerme en la cabeza: ^ue fin .duda que en el M ar «con eftj .ocalion fe pierde « ndrÍQ -fepulchro los doi. v ^ t* :de tu liñon la menioriai Sale» Manrique, y SyuH» , .efta es, Syrena, la hiftoria, litnr.Syrena, cuyo mirar llamada d A guila verde. felpende, enaínora, encant?, jyrm.Pues óyeme lo que a om, »ienes acaro acf cuchic defpues aca me pafsó: & ÍU orilla como cant» filiando en el campo yo, U S y renad e la M ari volar un A guila vi-, O ye un Soneto oportuno, .^ue era la mifma, pües viendfl hetoico, graye.ydif críte» no fer ípf a de comerj no te paieica Importuno, la cinta dexocaer p rq u e efte es elutsqonieSOMFEDA un Soneto ÍUDto á mli y yo acudiendo de los mil y ciento y nno. á ver lo que ha via caido, Mwriqfe un fapd,y Ite. Jiall'é enire las í ores pueft» C l ati verde, qiie en termino fucciot», la cinta, mira íi es efta. fuccinta pudo hacerte aquel Dios dnto M ínr.N otab le fucefio ha fido» tj? fangre, que gobierna el globo quiatq, S^ rts.M as notable f crí aofa para que V enus eftuvieíe en ^ Inta. la venganza. l a Ptimaverajus.colores pinta, tóíwr.M tjor e« por quien yo traigo en eñe labyriotho dexarlo pwa defpues, jamaño coebo pafla deCorintho que;faie alxamptórenora. v af * el corazón, aias negro, que ia tinta* Sale Daña Leomr. O y tu erprr.inza a mi .temor fe ¡unte, Líon.Sytena? Syre».SeBora? porque en fu verde, y amartlleíluts M ucha A mor fl'mas, y coleras barrunte: es mi triííiza. S^ « » .Puet > 0 <3ae como i mi de fu *olor me pintf, fabré que esía caufa yo? no poJrá b « er,aunq ue en barpon mea^fuate, Lioa^ Yí la fabés, pero efcucha: que fu efperanzi. no fe laicaramiote. Cefde la noche trifte ^ n a . Q a é lindo Soníto has hechoj «lúe, en tantas conFufionesabrafada, pero enleña, á vé|r fi » verde T ro y a k mi cafa viíte, la cinta. quedando yffde todos difculpaía; tífitir.En bien ft iroe icuuit D on Juan mas engañadój lo qu&la cinta fe ba betbO i libre D on Lu'tif Po n Lo f e aSégurada; yut ü ar^ . N o entreis co él, poique-efta iadrjd De Dott Tedro Cálderoff. ^cfpufs que porTiSufeoci» i]uc quiere hjcer en efta beitoofa QiiDtaf adonde la txcqlf Dcia de la naturaleza borda, y pint* fiinpaña, y monee alcivo, tnas ellimada de Don Lepe vira: perdí, Syrena, el miedo, ^Ue a mi proprio refpt&p le teoili p ues fi efc ap airae p ued o t de laace tan forzolo, la ofiadift ya Ha freno me alienta,^ue pel/gro paflado no efcarraieoM j aaqueño fe ha llegado vér a Don Lope mas amante aora, p^tque defengañjdp» l ij l go temió, fu defcngañoadci;a, y en amor le coDTiette: ó ifuancos han amado de efta f aersl o (jiunrni han qaeiido, T « ib i n do por gra c ias loi agraviosi D i cfte error no han pndido Ubrarfe los ma» doflos, los mas fabiOK <]ue ta mugcr mas. cuerda, de haver amado, amada no fe ajeiicrdúc^ijandú Don Luis me amaba, p^TEíló que á Pon Lais- aborreciai guando lin culpa eftaba,; pirício que. temía: y p C qué loco extrémot) ni amo querida, ni culpada tcmos antes amo olvidada, y ofendida, ' ' íntcs me ay-evo qúando eftoi culpada, y pueí para mi vida o jí lÍKue al Rey;Do.n Lope en. la- jornadí, efcriSo que Don Luis á vérme Venga, y tcngj fin mi aiflor , porque él le teagí. el que de si mifino htiye, DíBícj.Dtffl Lwí» L«(j.V aIgaroe el Cielo! Lf f i h. í ^ é tan laítimofa difcuwe el viento í En tierra no sy.nadtf» Leí)».En las ondas fe defdubi'e del M ar un buko, q ueyi' íiendp trémulas Us luce» del dia, no (e tftmina quien ei. JW A R.Olhdsprcíunie efcaparfe, pues parecct que áci> nofocros te induce piedad del CiHo, llegu^moí ^oode valieaces !e ayuden nucftros brazos. m Sgle Dj>!t Left mpjifti.o , | ee» ufta JáiHt Lefe.Ay de mi! ^««n.LLega. Lofí.O tierp, pátria.dulce del b»mbí!l. Jmn.Qaé es !o que vfot Don Lope! L«(i»,£fppf*l íof e. N o pude ' hallar puerco mas¡.p!'iidoro, que el que en tal favor acud^ a mi fatiga! ó Leonor, o mi bien: nO f s bien (fue dude» Que rl Cielo me hij- prevenido con fus favores comuncí tan grande dicha, en difcuf&t» de tan grande peíadumbrei amigo' Jw/íB.Q ué ba fído efipí tfl^í.La mayor laftima incluye aquefta veorura inia, que vi^^l M undoi. Lítfw.Corao ayude el Cielo mis V fpcranz», Don " Jtmn, Sa/czyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA y vivo efteisi 00 ay quien cuJpe fua^Ka te comijielicorazort a la fortun4, audqncufafle tan grandes rigores'fufre, de fu tragicá coftumbre. fín que fe rinda 3 los golpei L(>^í.Hjblé'al Rey, burquso« J ?oír dé Una, y otra psfadumbre. y como hallan)» DO pude, F«n.S:ñor Don juanvpues no viene fleté un barcoi jrftands ya con vos Don Lope» y« « n,N o pude |>ara hacer que el agua futqueji crpiraric. aunque él me di»Q, a mi un galan Cabatlero, quedantes q ueenelM at fepult«r cuyo nombre apenas fiípe,» Sol fus rayos, vendrá. que ptenfo que .era un Don Luit Jíf.Ctimo puede, fí yJ cubrent» de Benavídcs, acude, i] M jndo lóbregas fombrasiii dici^ndome, que porf er y al Cielo palidas nubes» forsftero, i quien fe fttple ífl-A mi me tuvo vjolcmai un cortés atrevimiínto, uiigrjn difguftoque-rúíe,: rae ruega que os It culpo ycipcH r no paifdei nidia ! D el >LKI zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA .SCázyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA ^ficretú J^rayiff, pcretd V€iJgan^* quien efpera, calla, y fufre.» tp :Jirifle,q ué ín el Bú e o l o / t. Bi ea havemot aplicado^ la traiga, que es bien procure honor, coa cuerda efpetaoza vér en la «í^uiota del Rey diftimulada venganza la gente, quando fe junte. S agravio difsininlado. O bligóme i que le diefle Bien la ocafion advetiii jHn lugar, y apenas httve quando la cuerda coi té, Centrado con ¿1, y el Barca quando losaremos tomé, .de los dos el peto fofre, para apartarme de allii ^ne el Barquero aoií no havia entrada, ii hacieado que-pretendía guando el cabo, i quien le padrcn acercarme, y bien logré las mifmas agaas del M ar» ^ mi intento, pues que matéíalta, porque fe- recude ai que ofenderme qúeriaí tina onda rceiamertie,: ( teftigo es eft« puñal) a cuyo guipe no pud»' ^ agrcdbr de mi afrenta, «efiftir , aunque tott)¿ 5 quien di-ea urna vtolei3f»i 5os remos: al fin, no rave monumento de cryftal.' fuerza, y les dos en, el Batc»^ Bien en la tierra^rotnpt' entrandQspQt, las ásales el Barco-, dando a entender, ondas del M ar, padeíwioí' que eflo pudo fuceder» mil Taladas inquieiudes. nn fofpecharfe de mi: V a de los montes de aguapues y i que, conforme á ley/ ecupe las altas cambfes,, de honrado, maté primctOH ya en bovedss de M pliir al galánf matar efpero ifepulchro en fu arena tuve.^ a Leonoi, no diga el Rey, A l fin, guiado i eft^a parte, riendo qu» íii fangre eímitúJ S vifta yá de lis luces3 tí lecho, que aun no violó, pí' de tierra, cíiocanJa el Barco», zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA que aun no vaya, porque yo-de arena, y agua fe cubr«é en Bii cafa BO haga falta,! 11 gallardo Ciballero, 'lÍ!. •» yues efta noche ha de v¿r' a quien yo librar no pUde». I el fin de mi desagravio, por apartarnos la faerza medio mas prudeníeí y fab}»> del golpe, fiiniae fe ayudopara acabarlo de hacer» á si oiilmo, ferte'dio : T'f'^ yutrqponmljifedcaUSOMLJIA Leonor ( ay-dtf mi!j Leonor», al M ar, donJfrle fepulte bella, como Ikenciofat fu olvido. A y de mii* zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJ taD--»nfelia, como Eiermofa, Caé. dffinayada. tuina fatal de mi ho« or. ^ f t , Leonori iJeonor, que al dolor rendidá(, n i bien, mi^fpora. no totbw^ ta I á y al fentimiento poftradaj. ta kerinofixr.a: ay Cielo mio! deso la muerte loriada WD yrio manfo difcurre en Us manos de la vida, por el cryftal de fus roanos. ha de morir, mis iotenioí» A y, Don Juan, la pefadumbrcc folo los he de fiir, de vérrae af$i> no fué mucho» f ./ porque los fabrin callar, que la r indielú» no fufrea dé todos qnatío ilementdi. corazones de niuger, AIÜ al A gua, y V iento cocrege ^ que eftas lagrymas.ffcuclieo::. la media venganía mia; llevadla al lecbo entre todos. y aqui la otra misad fij Uevattlit. entre dos. mi dolor.de Tierra, y Paego^ bien en U8 homboe luce, í pues efta noche mt^afa que callando fus agravios, «f» piralb intrépido thtiCir, aun h s venganzas íepslre! VI -.4 ^¿e^^al q« arto bfe-de-pegai^de.ef o íaeric ha dc^Tengarft ü i.'ii ¥ i: 'i r'ji^r üe Dm Vdro Calderón, cuyas plantas liroagein | y *, entanto que fe abrara, zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDC N yrophas del M ar, que obedlSBtél offido, atrevU o, y ciego • con tanta quietud las cercan^ la muerte á Leonor daté^ es vér un monte porcatil. porque prefumao que fué es ver una errante felva, " Upgtiento veraugo el fiiego ; ' pues vifta, dentrú del M ar, üicare acendrado de él parece que fe menean.el hoBor que Me iluftr&{ A D ios, dulce patria mia, y i que U liga enfucló que. en él efpero que yúelv}, una mancha can cruel puefto que es lá caufa fuya» y en una experiencia cal, donde ceñido me Veas por leí crydales no Ignoro^ ' de Lautel entrar trianiphatite^ w e falga acendrado et o to g: de mil viaorlas fangfféHta», Sn aquel baxo mecál>' dando á mi honor nueva fama, de la liga que ceniay nuevos criuinphos a la Iglefia^ y fu valor desluflrabat qae efpero vén aTji c[ M ar las manclias U t I ' ' D f » / ra. Fueg o , ftfígOé de la gran defdicha miar ' Rgf.Q ué voces, D aqüe, fon eft'aí» el vienco la Heve luego DK^'F'uego dicen, y azia alli ápnde no fe fepa de ella, U Q uinta que efta m asxercí:' la tierra ande por DO vell»,' r(í no roe engaño, esyjcenizasla haga el f uegor a de D ón Lope'de A iroeydí; ' porque afsi el mortal aliento,fe efta abrafaodo. RtyíYa^ ea que a corbar el Sol featTeve, en impeto falir de ella, fonfuma, lave, arda, y lleve hischa ua V olcan de humo, y fuegQj lifiíTi, agua^ fuego, y.vienco,zyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXWVUTSRQPONMLKJIHGFEDCBA vmJíílas nubes, y la»xencellás: Snksi tlPe/i e/Dti^e Je BergatK/l ip grande incendio, al parecer; accmpañamientó. de todas partes la cercan IXWílPeDfindo el M ar que dormi»^ parece ¡mpofiible cofa jclundoSoIen fu cf pb erai. ' que nadie elcaparfe-puedaf • minfamence retrata acerquémonos a ver • 4 fus ondas las^ ñrelh» . ' fi ay contra el fuego defenfa. l igf M íic, D úque,.por elM arí* V uqSthaT, tal temeridad» qiie aunque ppiie por la tierras». Sfjr.D'iique, acción piadora n eiU , me pareció que tardaba, no temeridad. qijlanto por aqui es mas cercí r y haviendo eftado-la» aguas laa dulces, y lilbngírai, f [ne el Ciirlo, NáV cifo aauli i vio contemplaadd eii'icllit» . ba íido jufto venir ¿onde tantos Barcos rea, eáyoí Plfanate parecen" " n i l ábrafados Cometas,. wilaladosG yfnes. pues formando efta campetenciai unos con las alas rorrea, y i)tros con los remos vnelaa* HM^.A íoici ofrece oca Con noche apacible, yf ref ca. far-FniTí la Tierra, y el M atieleicófa vjfta es efta, Sais Dm JuÁn mdh defaud» *Jítan^Aaacpe cenizas mi vida fea, ke ác facar á Do d Lo p e; que es fu quario el que fe quCaaHi^ Ké^.Detened aqueíTe ho m bre. Da^.DefefpeTado.-T^uéintentasl Jiimilíe% 3i en el Mundo fama'* I de una amiftad Verdadera; y pues que prefente eftis, es bien que lacíufaTepat» A penas, 6 g r« a feño r,' no s teco g im o s, apenas, guando en uo pimtO', ua iaftaDte ' c rec ió el fiiego de- maaera» que parece que to maba Tco g am a de fu Tío lcáe^S po ique mirar taptai ^ l i » ^ zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCBA Í W A zyxwvutrponmljihgfedcaWVUTSRQPONMLKJEDCB fecrem Jermc, Vejfgdfi^a. i S i .-Wí z en bueno denfo anegada; D on Lope áe Alnteyda efti pues quanJo librada intenta con fu eipefaLy yo quifieií mi valor, rindió lavida Ubrarloí. en mis brazos ; dura penat: Sale Manrique, tiifte horror! íuert« Íacefjeí A ííwr.Echando ehifpai, Aunque uo confutlo roe dcEíi, como Diablo de Comedia, y ei, que yá podré ftrvíras;, falgo huyendo d: mí cafa, pues libre de efta mancrak que íoi de efta T rcy» Eneas. en mi cafa no haré faira; A l M ar me voizyxwvutsrqponmlkjihgfedcbaZYXVUTSRQPONMLKJIHGFEDC i ar^^jir, con vos iré, donde. aunque mtaor daiio fuer^i i i tener mi vida fa^^,^ quemarme, que bebtr agua. Jí ay defdicha qua ^ í lewgflí Sale Dfl« Lepe tj^dh difnudo , f /kíM y vos, valiente Don {uacii a Lftaer e» ¡as brizos decid í quien fe ajTonfe/a pniert-n, !. con vos comoba de ven^ if ti ií^ í.Piadofot Ciclos, clemcpcifi, fin que ninguac^ lo^fepitt porque aunqueartiefgue mi yidit,: y no diri la venganza efcapar U fuya pueda: lo qu.: no diro la afr^tifad Leonor) Rfj-.Eí Don Lope» Bí^'.Notable defdicha ha lííoi If l / f . Yo JííiíB.Pucs óigame vi^flfa Aitcii» Ioi, feñor, (i es que me dtsa aparta porque es razoa, el feniimiento, no el fiiego, que folo cíle ca^fft Cepa: alma, y vila con qiie pueda DUOIDB OB Lope fofpsclws tuvo, conoceros, p» ti hablaroj, que padaron de fofpeclíaí»qaaodoyidi, y iiaia acentaj y llegaron. £v?tdadeis & elh deW iclii, aefte fomísro, y en reToliicion.tJB-cuSfáí,, 3 efte horfór, á efta tiagedi», pordara fecreto Agt^ivio* yace en palidai cenisas también V cnsaasa/Íccíetat cfta m aer» beldad, efti íl G U in m j tp en ^ IM ar, flor en tamo fuego etada, . porque en uo Barco fe entra que Tolo el fuego pudiera, con él foío, afii el fecretij abrafarla, que dcinvidia al A gua, y Fuego4e entrega, qulfo que no refpljndficíf porque el que fppo eljAgwvío» Ef ti, feñor, fué roí eípofaj folo la V engansa fepa. noble, altiva, tjonrad?, boncftíj 'Rey. Es ei cafo raas notrible, que en los latios de la fama que la Antigüedad celebra, dexi eíVa aíibaníJ eterna. porque fccrctí V enganza Efta ej mi efpijfa, k quien y« requiere fecreta Qfepfa. quife con tinta terneza J-; 'IV Ja.tw.Efta esverdadífajjiftori» . de amor, porque Gents m» f del gran Don Lope de A ímíjáí^i eloo *érla, y-cl w rderh. dando con fu admirJfíon Con una tan grao defdlcba.. fin á la Tragicoii>¿dia, como en ti to ífaego embuelw» N. C o n l icencia: M E n S e v l l í á , D R I N O , . e n la M e rcad e r c^ l e" de I m p re n t a de L i b ro i r, G e n o v a . l e . e n