CAPÍTULO 1. Europa: De la diversidad cultural y la fragmentación política a la integración. La Unión Europea. Introducción: una cultura común en una Europa diversa. (pág. 41-­‐42) Europa, una realidad geográfica que en realidad no es un continente, carece hoy en día de unidad política y está habitada por un gran número de pueblos con culturas, lenguas y religiones diferentes que ocupan una gran variedad de paisajes naturales. Sin embargo su trayectoria histórica, que incluye la cultura grecorromana y cristiana, ha permanecido siempre por encima de las diferencias, hasta que tras las tragedias de la primera mitad de siglo sirvió como base para la creación de la actual Unión Europea. Sin embargo el proceso integrador tiene aún un largo camino por recorrer. Nació como Comunidad Económica Europea con una serie de medidas encaminadas a suprimir barreras aduaneras y fomentar los intercambios comerciales, pero, desde el principio, su objetivo último ha sido la unificación política. Desde 1958 funciona en Estrasburgo el Parlamento Europeo. Desde 1991, con el Tratado de Maastricht, la Comunidad se llama Unión Europea, los vínculos políticos se han estrechado, ha progresado la política exterior común y se han superado todos los obstáculos para implantar en el 2002 una moneda única: el EURO. La UE (Unión Europea) está hoy formada por veintisiete Estados. Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 1 1.-­‐ Un medio natural favorable y variado. 1.1.-­‐ Un relieve contrastado sobre una superficie reducida. (pág. 42-­‐46) La disposición actual del relieve europeo es el resultado de al menos cuatro grandes ciclos orogénicos que diferencian una Europa septentrional antigua y rígida, de una Europa meridional joven y geológicamente activa. De acuerdo a estos ciclos se pueden establecer cuatro grandes unidades estructurales: • Las cordilleras del Noroeste de Europa (Irlanda, Highlands escoceses y la cordillera escandinava): El aspecto morfológico de estas cordilleras ha sido profundamente modificado por la erosión glaciar, que talló aristas en las cumbres y dilató los valles fluviales, formando los fiordos de la costa noruega, acusando además, el impacto de los vientos atlánticos que descargan en ella su humedad. • El complejo herciniano: macizos de las zonas internas, afectadas por los movimientos alpinos y por ello casi totalmente metamorfizadas y granitizadas, que fueron violentamente fracturadas y basculadas como el Macizo Galaico, los sectores centrales del Macizo Ibérico, Macizo Central Francés, los Vosgos, la Selva Negra alemana, etc. • La Gran Llanura Europea: presenta una forma triangular que progresivamente se estrecha hacia el Oeste, cubriendo gran parte de la antigua Unión Soviética europea, Polonia, Alemania septentrional y sur de Suecia. • Las cordilleras alpinas: resultante de la compresión entre los escudos africano y euroasiático, y consiguiente levantamiento del amplio geosinclinal de Tethys, presentan dos ramas principales; la meridional, de estilo jurásico que engloba el Atlas africano, Sicilia, los Alpes dináricos, el Pindo, Creta y el Taurus, prolongándose en Asia con el Himalaya y la otra, la septentrional, formada por las cordilleras Béticas, el Pirineo, las principales cordilleras de los Alpes, los Cárpatos, prolongándose en Asia por el Pamir septentrional y el Tien-­‐Shan. 2 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 1.2.-­‐ Un clima moderado. (pág. 47-­‐49) Por su latitud Europa se encuentra en la zona de climas templados. Sin embargo, su relieve tan contrastado genera en realidad una enorme variedad de climas. Europa se halla inmersa dentro de la circulación zonal del flujo del Oeste, éstos vientos de componente Oeste, los westerlies, son constantes en las capas altas y en superficie se ven restringidos por la imbricación de tierras y mares, la disposición del relieve y por la alternancia de los campos de presión. El océano Atlántico y el mar Mediterráneo actúan en general como moderadores del clima, extendiendo su influencia hasta zonas muy al interior pero a pesar de ello, la presencia de la Depresión de Islandia y del Anticiclón de las Azores, responsables de buena parte de los contrastes climáticos que existen en el occidente europeo, unidos a los centros térmicos euroasiáticos (el Anticiclón térmico invernal y las Depresiones estivales de superficie) regulan el régimen pluviométrico de la Europa Oriental. Si bien, unos y otros, afectan esporádicamente a todo el conjunto, a menudo, las perturbaciones asociadas al Frente Polar que llegan hasta la Rusia Europea y el Anticiclón oriental, que influye hasta las proximidades de la costa atlántica hacen que exista una amplia variedad de contrastes climáticos. En consecuencia, se deduce la existencia de tres grandes áreas bioclimáticas: la atlántica, la continental y la mediterránea. ÁREA CLIMÁTICA DE EUROPA ATLÁNTICA: Con un clima templado oceánico, se extiende desde el Oeste de Escandinavia hasta el Noroeste de la península ibérica. Como formación vegetal existe el bosque caducifolio (hayas, robles, castaños, fresnos, etc.) y en cuanto a su régimen pluviométrico, la mayor parte de la Europa atlántica, permite la existencia de unos ríos que se caracterizan por la regularidad de su caudal y una escasa Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 3 velocidad, haciendo posible su navegabilidad, frente a los ríos de los sectores montañosos, que facilitan el aprovechamiento hidroeléctrico. ÁREA CLIMÁTICA DE EUROPA CENTRAL Y ORIENTAL (CONTINENTAL): Hacia el interior paulatinamente se van degradando los rasgos climáticos oceánicos, dando paso a una mayor oscilación térmica y a unas precipitaciones que caen fundamentalmente en verano, debido al área de bajas presiones térmicas que en esta estación ocupa la Europa central y oriental, dominio ya de un clima templado. Tras un invierno frío, seco y soleado, el calentamiento estival posibilita la llegada de las borrascas atlánticas, alcanzándose el máximo pluviométrico en verano. Las formaciones vegetales se suceden en bandas dispuestas según los paralelos: la tundra, la taiga, el bosque mixto y la estepa. Al igual que los ríos oceánicos, son también ríos de llanura que suponen excelentes vías de comunicación, si bien permanecen helados en invierno, en verano son navegables. ÁREA CLIMÁTICA DE EUROPA MEDITERRÁNEA: Se extiende desde Portugal hasta el Mar Negro y constituye una zona de transición entre las regiones templadas y los desiertos cálidos. En verano, con la ascensión en latitud del Anticiclón de las Azores, predomina un tiempo seco y soleado, con altas temperaturas y una fuerte evaporación que provocan una gran aridez. En invierno se ve afectada por el paso de las perturbaciones del Oeste que provocan lluvias, a menudo de tipo torrencial. Al poseer un verano seco y un invierno húmedo, la vegetación es muy característica, con árboles y arbustos esclerófilos (encinas, alcornoques y coníferas). De todos los medios bioclimáticos europeos, el más rico en diversidad y matices es el mediterráneo. Debido a la irregular distribución de las precipitaciones, la navegabilidad de los ríos mediterráneos es escasa y se utilizan principalmente para fines agrícolas y para la producción hidroeléctrica. MACIZOS MONTAÑOSOS: Asimismo, la existencia de macizos montañosos origina una gran diversidad de escalonamientos bioclimáticos, en función de la latitud, alejamiento del Océano y diferencias de orientación y exposición de sus vertientes (montañas escandinavas, Pirineos, Alpes, Cárpatos, Cáucaso, etc. 4 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 2.-­‐ La diversidad de pueblos y culturas: una Europa heterogénea. (pág. 53) Sobre estos medios ecológicos, muy favorables, ha surgido una gran diversidad de paisajes culturales, resultado de milenios de adaptación del hombre al medio natural y de su rica y compleja historia de la ocupación humana del territorio europeo. Hoy, Europa es un mosaico de pueblos y culturas. 2.1.-­‐ Los europeos: la décima parte de la población mundial. Evolución de la población y densidades. (pág. 53-­‐ 56) Sin incluir a la población rusa, Europa sumaba 534 millones de habitantes en el año 2008, de los cuales 508 viven en la Unión Europea (736 millones si incluimos los Estados europeos de la CEI). La densidad media ronda los 106 hab./km2, aunque varía enormemente de una región a otra, fruto de la realidad natural por una parte y la económica por otra. Sin embargo, se denota que los grandes polos demográficos, que acogen densidades superiores a los 200 hab./km2 dependen cada vez menos de los recursos naturales y más de las actividades económicas. Estos núcleos crean la denominada megalópolis europea, que va desde la cuenca de Londres hasta el valle del Po, agrupando grandes áreas industriales (norte de Italia, pasillo hullero franco-­‐belga, área del Rin…), áreas portuarias (Rotterdam, Bremen, Marsella, Génova…) y áreas metropolitanas como Lisboa, Madrid, Barcelona, Marsella, Roma, Nápoles, Múnich, Budapest, Belgrado o Bucarest. PAÍSES MÁS POBLADOS DE EUROPA (2008) Países Millones Densidad hab./Km2 Alemania 82,2 230 Francia 62,0 113 Reino Unido 61,3 252 Italia 59,9 199 España 46,5 92 Polonia 38,1 122 Rumanía 21,5 90 Europa (sin CEI) 534 106 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 5 2.2.-­‐ Pueblos y culturas. (pág. 56-­‐60) La comprensión de las etnias, las lenguas y las religiones son fundamentales para poder comprender los conflictos políticos y sociales que existieron y en algunos casos persisten en el presente afectando a diversas regiones europeas. DIVERSIDAD ÉTNICA Y LINGÜÍSTICA: La población europea se ha ido formando a base de numerosas migraciones que, procedentes en su mayor parte de Asia y en oleadas sucesivas, han aportado grupos étnicos y culturas diferentes. Esta realidad explica el mosaico de pueblos y lenguas (más de cuarenta) que se extienden por el continente. En total, en Europa se hablan unas cincuenta lenguas, de las cuales unas cuarenta pertenecen al grupo o familia indoeuropea. Las principales son las eslavas (ruso, ucraniano, bielorruso, polaco, búlgaro, checo y serbocroata), las germánicas (alemán, inglés, holandés, sueco y noruego), las latinas (francés, italiano, castellano, portugués, catalán y rumano), las lenguas bálticas (lituano y letón), las célticas (gaélico y bretón), el griego, el albanés y el romaní, el idioma de los gitanos, pero existen otras, las no indoeuropeas, las finougrias de la familia urálica (húngaro, finés y estonio); el turco, de la familia altaica y el euskera, considerada por algunos como preindoeuropea. El mayor número de hablantes corresponde a las lenguas eslavas (unos 270 millones), seguidas de las latinas (220 millones) y las germánicas (200 millones). Las lenguas más habladas son el ruso, el alemán, el francés, el italiano, el inglés, el castellano, el ucraniano y el polaco. DIVERSIDAD RELIGIOSA: El cristianismo, bajo sus diversas modalidades (dividida en tres corrientes: la católica, difundida en el oeste; la protestante en el noroeste y la ortodoxa en el este, fuente permanente de conflictos), es la religión predominante y ha constituido un factor decisivo en la estructuración política europea. De hecho el mismo concepto de Europa hacía referencia en la Edad Media a los territorios de fe cristiana. También existen otras religiones minoritarias, de entre las que destaca la musulmana (3,5%), extendida tanto en las áreas tradicionales (Albania, Bosnia, etc.) como en la Europa occidental como fruto de la inmigración. Tras el Holocausto, la población judía, anteriormente siempre muy importante, se ha reducido a tan sólo 1,5 millones de practicantes en todo el continente. 6 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 2.3.-­‐ Una larga historia: el mapa político cambiante. (pág. 61-­‐69) Sin contar a Rusia, Europa suma en 2008 un total de 47 países, en general de un tamaño muy modesto. La historia política de Europa narra básicamente los esfuerzos de los distintos pueblos llegados al continente por dominar una porción del territorio y fundar un Estado. Hasta la Edad Moderna los Estados nacían, se expandían, retrocedían y desaparecían con relativa facilidad. Desde el Imperio Romano se han sucedido varios intentos de unificación política, pero la diversidad de pueblos y culturas los han hecho fracasar y ha impuesto por norma general la fragmentación política. Fue a principios del siglo XVI, con el establecimiento de las monarquías autoritarias, cuando se formaron los primeros grandes Estados modernos, resultado de uniones pactadas o anexiones forzadas. LOS IMPERIOS EN EUROPA: Diversos intentos de unificación de pueblos y territorios europeos terminaron fracasando, ya que la fuerza de la diversidad terminaba por triunfar sobre la fuerza de unificación. Así ocurrió con la fragmentación del Imperio Romano y el nacimiento de los Estados germánicos del principio de la Edad Media. Lo mismo sucedió con el Imperio de Carlomagno, con el Sacro Imperio Germánico o con el Imperio de los Habsburgo, continuado en el Imperio Austro-­‐Húngaro. La fuerza disgregadora de los pueblos volvió a triunfar con la caída del imperio ruso-­‐soviético, con la división de Checoslovaquia y la fragmentación de Yugoslavia. LA EMERGENCIA DE LOS ESTADOS-­‐NACIÓN: Al finalizar la Edad Media, Europa era un complejo mosaico de imperios, reinos, ducados, obispados y ciudades libres, pero sólo una minoría de la población tenía un sentimiento de identificación con estas entidades políticas. La propagación de los ideales de la Revolución Francesa, con el lema de “libertad, igualdad y fraternidad”, acelerada con la expansión del Imperio Napoleónico, despertó en los pueblos del este de Europa un sentimiento de identidad nacional en torno a una lengua hablada por las clases populares. En la segunda mitad del siglo XIX, mientras las pequeñas unidades territoriales se unían para formar los Estados de Alemania e Italia (1871), los pueblos sometidos al poder de los imperios en Europa Oriental iniciaron las guerras de independencia: griegos en 1830, húngaros en 1863, polacos, checos, eslovacos, rumanos, croatas, serbios y búlgaros en 1878. LOS CAMBIOS EN EL MAPA POLÍTICO DE EUROPA EN EL SIGLO XX: Los tres cambios del mapa político europeo en el siglo XX se han producido al final de la Primera Guerra Mundial (1918-­‐1921), al final de la Segunda Guerra Mundial (1945) y tras la desaparición de la Unión Soviética y la pérdida de su influencia en Europa del Este (1989–1990). Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 7 Naciones de Europa en 1919 Naciones de Europa en 2014 8 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 3.-­‐ Europa Occidental-­‐Europa Oriental: de la confrontación a la integración. (pág. 69-­‐87) Entre todas las divisiones regionales que admite el Viejo Continente, la dominante desde la Segunda Guerra Mundial fue la confrontación entre la Europa Occidental y la Oriental. Esta división hunde sus raíces en las fracturas históricas del continente, y todavía a principios del siglo XXI sigue siendo la más significativa. La línea que dividió Europa entre 1948 y 1989 sigue separando diferentes niveles de riqueza y desarrollo, a pesar de que buena parte de los países del Este se han incorporado con éxito a la Unión Europea, habiendo reducido significativamente sus diferencias socioeconómicas. 3.1.-­‐ Europa Occidental: inicio y primeras etapas del proceso hacia la integración económica y política. (pág. 71-­‐78) Los Estados de Europa occidental, que llevan manteniéndose en su mayoría desde el final de la Edad Media, concentran las regiones más desarrolladas y ricas del continente. Fue aquí donde tras la Segunda Guerra Mundial se puso en marcha el proceso de integración. El fin era evitar ulteriores conflictos mutuos, garantizar la defensa ante agresiones exteriores y armonizar las políticas económicas para favorecer los intercambios comerciales. Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 9 3.2.-­‐ El gran reto de las últimas ampliaciones hacia Europa Centro-­‐Oriental. (pág. 79-­‐87) Tras el gran esfuerzo llevado a cabo para crear y consolidar la Unión Europea y su complejo sistema institucional, surgió un reto tan importante como inesperado fruto de la desmantelación del sistema soviético. El área centro-­‐oriental muestra algunas características comunes derivadas de su pasado histórico, de la fuerte impronta dejada por el sistema soviético en sus estructuras económicas y territoriales, pero también grandes diferencias que han condicionado sus posibilidades y el tiempo necesario para su plena integración en la Unión. Pero a pesar del notable retraso en su desarrollo, todos estos países mostraban un fuerte sentimiento europeo. Estos países habían debido soportar repetidos cambios de fronteras, conflictos interétnicos, la implantación del socialismo y su desplome (1989-­‐1991) y la transición radical de estructuras político-­‐ económicas a comienzos de los años noventa. La economía de estos países ha estado sometida a cambios profundos (economías de transición), no sólo ha habido que desmontar el sistema colectivista de la agricultura (granjas estatales, sovjoses, cooperativas y koljoses), sino que se han desmantelado también los grandes complejos de minería e industria pesada, a la vez que se han potenciado las industrias ligeras, antes marginadas, y se han tenido que desarrollar los transportes y el resto de los servicios. Países Superf. miles 2 de Km Países Bálticos Estonia Letonia Lituania Grupo Visegrád Polonia Chequia Eslovaquia Hungría Europa Balcánica Rumanía Bulgaria Eslovenia Croacia Bosnia-­‐Herzegovina Serbia Kosovo Montenegro Macedonia Albania 174,8 45,1 64,5 65,2 533,5 312,7 78,8 49,0 93,0 644,00 237,5 110,9 20,2 56,6 51,1 88,4 10,9 14,0 25,7 28,7 Millones de habitantes (2008) 7,0 1,3 2,3 3,4 63,6 38,0 10,2 5,4 10,0 54,6 21,3 7,6 2,0 4,5 3,9 7,4 2,1 0,6 2,0 3,2 Crecimiento medio (2005-­‐ 2010) -­‐0,4 -­‐0,3 -­‐0,5 -­‐0,5 -­‐0,1 -­‐0,2 -­‐0,0 0,0 -­‐0,3 -­‐0,1 -­‐0,4 -­‐0,7 -­‐0,0 0,1 0,1 -­‐0,1 2,0 -­‐0,3 0,1 0,6 Densidad (2008) 2 Habs./Km 40 29 36 52 110 123 129 110 108 85 90 69 99 81 77 84 196 43 79 111 Capital Tallin Riga Vilna Varsovia Praga Bratislava Budapest Bucarest Sofía Liubliana Zagreb Sarajevo Belgrado Pristina Podgorica Scopie Tirana Miles de habitantes (2009) 394 712 543 1.707 1.183 423 1.656 1.920 1.125 195 705 192 1.102 211 145 481 407 Países de Europa Centro-­‐Oriental: Crecimiento de la población y densidad. El proceso de adhesión de algunos países de Europa Centro Oriental (PECOs) se inició muy pronto y se ha desarrollado de forma muy rápida. En 1994 se presentan las primeras candidaturas, las de Hungría y Polonia, seguidas en 1995 por las de Rumanía, Eslovaquia, Letonia, Estonia, Lituania y Bulgaria y, en 1996, por las de Chequia y Eslovenia. Los países bálticos tienen la particularidad de haber sido territorios pertenecientes a la Unión Soviética desde la Segunda Guerra Mundial. Fueron privilegiadas en cuanto a las inversiones recibidas de Moscú, logrando establecer una rica agricultura y una industria diversificada de tipo urbano y portuario. La evolución de la última década ha sido muy positiva en el caso de Estonia y Letonia, pero más problemática en Lituania. Los tres países se han integrado en el Consejo Báltico. 10 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. Los países del Grupo de Visegrád (Polonia, Chequia, Eslovaquia y Hungría), durante la etapa socialista, fueron “democracias populares” y formaban parte del CAME o COMECON (Mercado Común de los Países Socialistas). Las buenas condiciones iniciales, una tradición cultural centroeuropea, la decidida posición de sus gobiernos y la llegada de los fondos comunitarios, facilitaron el proceso de integración y de convergencia. La Europa del Sureste o Balcánica se encuentra en bastante peor situación, exceptuando a Eslovenia. Se dividen en Balcanes Orientales (Rumanía y Bulgaria incorporados en enero de 2007 –sexta ampliación-­‐) y Balcanes Occidentales. 4.-­‐ El funcionamiento de la Unión Europea. (pág. 87-­‐96) 4.1.-­‐ Las instituciones comunitarias. (pág. 87-­‐94) La Unión Europea tiene un sistema institucional original, en el que los Estados miembros aceptan distintas cesiones de soberanía a favor de los órganos comunitarios, que trabajan por el bien común y a la vez por los diversos intereses nacionales. La organización institucional se puede resumir así: • Instituciones decisorias: Comisión Europea, Parlamento Europeo y como instituciones complementarias el Consejo Europeo y el Consejo de la Unión Europea (Consejo de Ministros). • Instituciones consultivas: Comité Económico y Social Europeo y Comité de las Regiones. • Instituciones jurisdiccionales: Tribunal de Justicia Europeo y Tribunal de Cuentas Europeo. • Instituciones monetarias y financieras: Banco Central Europeo y Banco Europeo de Inversiones LAS INSTITUCIONES DECISORIAS: EL CONSEJO EUROPEO DE JEFES DE ESTADO Y DE GOBIERNO Y EL CONSEJO DE LA UNIÓN EUROPEA O CONSEJO DE MINISTROS: Creado en 1974, el Consejo Europeo de Jefes de Estado y de Gobierno es la institución con mayor rango político y con la más alta función decisoria de la Unión Europea, a veces se le denomina también Cumbre Europea. Está compuesto por los Jefes de Estado o de Gobierno de todos los Estados miembros, más el presidente del Consejo y el presidente de la Comisión Europea. El presidente es elegido por unanimidad por los Jefes de Estado y de Gobierno y ratificado por el Parlamento, por dos años y medio, que podrán ser renovables. El Consejo Europeo es la institución encargada de fijar las orientaciones y prioridades generales y dar los impulsos necesarios para el desarrollo de la Unión. En paralelo al Consejo Europeo, el Consejo de la Unión Europea o Consejo de Ministros es el principal órgano decisorio de política de cada día. Está formado por un representante del gobierno de cada uno de los Estados miembros, normalmente son miembros de derecho los Ministros de Asuntos Exteriores, pero puede constituirse en formaciones diferentes con los Ministros del ramo, según los asuntos a tratar (agricultura, transportes, economía y finanzas, etc.). Se reúne en Bruselas y Luxemburgo. Está presidido por un grupo de tres Estados miembros durante un período de seis meses (uno es el que ostenta la presidencia rotativa en el semestre, el segundo es el Estado que la ejerció y el tercero es el que la va a tener en el semestre siguiente. La misión fundamental del Consejo es la de ejercer, por un lado, el poder ejecutivo, junto con la Comisión y, por otro, el poder legislativo, aprobando, modificando o rechazando las propuestas enviadas por la Comisión, en codecisión con el Parlamento. LA COMISIÓN EUROPEA: Le corresponde proponer y ejecutar la política comunitaria, propone la legislación (reglamentos y directivas), gestiona las políticas comunes, ejecuta el presupuesto y dirige la administración. Es un órgano colegiado integrado por 18 miembros designados, libremente por los Gobiernos de los Estados por un período de cuatro años renovables, su presidente es nombrado por el Consejo Europeo y es confirmado en su función por el Parlamento. Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 11 EL PARLAMENTO EUROPEO: Es el órgano que establece el control político sobre las instituciones comunitarias y tiene un papel decisivo en la elaboración, modificación y aprobación de la legislación europea. Sus miembros son elegidos por sufragio universal directo para un período de cinco años (750 representantes más la Presidencia). Tiene su sede en Estrasburgo. En lo que se refiere a competencias, participa en la actividad legislativa de la Comunidad, aprueba el presupuesto tras haberlo establecido conjuntamente con el Consejo de Ministros y la Comisión, ejerce funciones de control político sobre las actividades de la Comisión, del Consejo de la Unión Europea y del Consejo Europeo. LAS INSTITUCIONES CONSULTIVAS: EL COMITÉ ECONÓMICO Y SOCIAL (CES) es un organismo consultivo formado por 344 miembros, que representan a los distintos estamentos de la vida económica y social. Su cometido consiste en garantizar que la Comisión, el Consejo de Ministros y el Parlamento europeo conozcan el punto de vista de los distintos grupos sociales (empresarios, trabajadores, consumidores y actividades diversas) acerca de las actuales prioridades comunitarias. Tiene su sede en Bruselas y sus miembros son propuestos por un período de cuatro años, con carácter renovable. Su misión es proteger a la “sociedad civil organizada” europea y velar por las mejores condiciones de vida de las personas, sobre todo de los colectivos más desprotegidos. EL COMITÉ DE LAS REGIONES: Está compuesto por 344 representantes de las entidades regionales y locales, nombrados por el Consejo a propuesta de los Estados por un período de cuatro años. El Comité debe ser consultado antes de que se tomen decisiones de la UE sobre asuntos que conciernen al gobierno local y regional, tales como la política regional, el medio ambiente, la educación y el transporte. LAS INSTITUCIONES JURISDICCIONALES: EL TRIBUNAL DE JUSTICIA (TJE): Es el órgano central del ordenamiento jurídico de la Unión Europea. El Tribunal de Justicia Europeo (TJE) está formado por 27 jueces (uno por cada Estado miembro) y 8 abogados generales, nombrados por un período de seis años prorrogables. Tiene su sede en Luxemburgo. Sus tareas esenciales con garantizar la aplicación uniforme del derecho comunitario, anular las normas que sean incompatibles con el acervo jurídico común y contribuir a la creación, consolidación y expansión del derecho comunitario. EL TRIBUNAL DE CUENTAS (TEC): Fue creado por el Tratado de Roma y es el encargado de comprobar que los gastos de la UE se efectúan de acuerdo con su normativa presupuestaria y sus objetivos. Es un órgano colegiado compuesto por 27 miembros, nombrados por el Consejo por un periodo renovable de seis años, tras consulta con el Parlamento. LAS INSTITUCIONES MONETARIAS Y FINANCIERAS: EL BANCO CENTRAL EUROPEO (BCE): El BCE fue creado el 2 de mayo de 1998 y entró en vigor el 1 de enero de 1999, sustituyendo al Instituto Monetario Europeo, tiene su sede en Frankfurt y está formado por el Consejo de Gobierno, que formula la política monetaria de la Unión Europea y el Comité Ejecutivo, que la pone en práctica. El BCE ejerce el control de la masa monetaria europea y es el responsable de la estabilidad del euro; tiene el derecho exclusivo de autorizar las emisiones de billetes y monedas de euros. EL BANCO EUROPEO DE INVERSIONES (BEI): Es el encargado de contribuir a un desarrollo equilibrado, a la integración y a la cohesión económica y social mediante la financiación de inversiones que fomenten los objetivos de las políticas comunitarias: mejorar las infraestructuras de transportes y telecomunicaciones, proteger el medio ambiente, incrementar la competitividad internacional de la industria, fomentar el progreso económico de las regiones menos favorecidas, apoyar las actividades de las pequeñas y medianas empresas o 12 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. mejorar la seguridad del abastecimiento energético. Se sede está en Luxemburgo y controla el Fondo Europeo de Inversiones (FEI). 4.2.-­‐ El fracaso del Proyecto constitucional y el nuevo Tratado de la Unión. (pág. 94-­‐96) Las últimas ampliaciones han puesto de relieve las dificultades de funcionamiento de una Unión con 27 miembros en la que las decisiones se han de tomar por unanimidad. De una situación de parálisis institucional surgió el ambicioso proyecto de dotar a la Unión de un Tratado Constitucional que, sin embargo, recibió el no de franceses y holandeses en 2005. Para salvar al menos parte de las necesarias reformas salió adelante el llamado Nuevo Tratado de la Unión, en el Consejo de Lisboa de diciembre de 2007, que finalmente ha sido ratificado por todos los miembros. Sus principales líneas son el refuerzo de la figura del presidente del Consejo, el impulso de una política exterior común, una toma de decisiones más ágil al eliminarse la unanimidad, etc. 5.-­‐ Una densa urbanización. Metrópolis y ciudades. (pág. 96-­‐99) 5.1.-­‐ El proceso de urbanización. Diferencias regionales. La U.E es el conjunto regional más densamente poblado del planeta, como resultado de un proceso urbanizador con un largo pasado histórico. La tasa alcanza el 77,7%, aunque lo característico es que la mayoría de las concentraciones urbanas son pequeñas y medianas ciudades, donde las aglomeraciones de más de 200.000 habitantes acumulan sólo al 40% de la población total, frente al 65% de Estados Unidos por ejemplo. Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 13 De hecho ninguna de las grandes ciudades europeas encabeza el listado de aglomeraciones urbanas mundiales. No obstante, en la Europa del Este esta urbanización es mucho más acusada, fruto del control del crecimiento de las ciudades ejercido en época comunista y del tardío éxodo rural. En líneas generales podemos diferenciar en Europa tres grandes espacios urbanos: • La megalópolis europea del cuadrilátero Liverpool-­‐Havre-­‐Basilea-­‐Hamburgo, que concentra a 130 millones de habitantes entre el pasillo del Rin y los principales puertos del mar del Norte. Este gran espacio caracteriza el espacio urbano europeo y en realidad es reflejo del pasado histórico, cuyos centros económicos fueron basculando desde Venecia hasta Amberes y Ámsterdam y después Londres. • Las capitales nacionales. • El área mediterránea, que cada vez adquiere mayor peso. 5.2.-­‐ Tipos de redes urbanas en Europa. (pág. 99-­‐101) Existen diferentes modelos de redes urbanas en Europa, entre las que podemos distinguir: o El modelo parisino, en el que una gran metrópoli polariza un extenso espacio regional poco urbanizado que se caracteriza por el mayor peso de la capital. Este modelo es aplicable a todos los países de Europa central y oriental. o El modelo renano presenta una red densa y equilibrada en la que no existe ninguna ciudad dominante. Es aplicable a Alemania, Flandes, los Midlands y el norte de Italia. o Entre ambos modelos existen espacios con redes urbanas menos definidas, en algunos países claramente bicéfalas (España o Italia), o redes urbanas laxas e irregulares, localizadas preferentemente en regiones periféricas como el Mezzogiorno, Andalucía, Castilla o Escocia. En cuanto a la funcionalidad de las ciudades europeas se puede apuntar hacia la multifuncionalidad, aunque hay algunas claramente especializadas en la industria, el turismo, la educación, el transporte marítimo, etc. Por último es destacable el proceso de redistribución periférica de la población que, en la actualidad, afecta a la mayoría de las grandes metrópolis de Europa occidental. 6.-­‐ La Unión Europea, gran potencia económica. (pág. 101-­‐106) 6.1.-­‐ Producciones energéticas y dependencia de hidrocarburos. (pág. 101-­‐106) Por sectores, las principales fuentes energéticas de la UE son la energía nuclear (31%), el gas natural (29%), el petróleo (20%) y el carbón (12%), mientras que las renovables alcanzan ya el 8%. Esta estructura ha venido evolucionando con el tiempo, reduciéndose paulatinamente la dependencia del carbón hacia la energía nuclear, el gas y las renovables. La producción de carbón ha estado tradicionalmente muy extendida, aunque en la segunda mitad del siglo XX ha descendido notablemente al tiempo que aumentaban las importaciones. La extracción del petróleo se ha desarrollado desde la primera crisis del petróleo de 1973, generando una fuerte actividad económica en el litoral noruego, inglés y escocés, pero es muy limitada, pues sólo abastece el 20% de las necesidades del continente, que importa grandes cantidades de petróleo en bruto que se refina en los grandes puertos de entrada (especialmente Rotterdam) y, cada vez más, en el interior. 14 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 15 Las fuentes de gas natural están mejor repartidas por el ámbito comunitario, aunque también se importa en su mayor parte. La energía nuclear, que parecía la panacea energética, detuvo su expansión en los años ochenta, aunque últimamente se está reactivando*. Por otro lado, las energías renovables se están impulsando activamente, tanto para reducir las emisiones de CO2 como para reducir la dependencia energética. Y es que Europa consume el 20% del petróleo producido a nivel mundial, así como el 16% del gas natural, el 10% del carbón y el 34% del uranio. Es por ello que, hoy en día, la UE depende en un 70% del exterior (frente al 35% de los USA, o el 80% de Japón). 6.2.-­‐ Desigual distribución de las regiones industriales. (pág. 106-­‐109) La reestructuración de las antiguas regiones industriales, junto al nacimiento de nuevos núcleos, es un hecho de innegables repercusiones en la vida socioeconómica de la UE y en la ordenación de su territorio. El declive de las tradicionales regiones industriales (siderurgias, centros textiles y de construcción naval) no se ha detenido en la actualidad y, en general, estas regiones han visto reducida su importancia económica y han pasado a representar situaciones sociales críticas con bolsas de paro del 40% y un saldo migratorio muy negativo. El problema se centra en los denominados países negros, inicialmente los pioneros de la revolución industrial: centro de Inglaterra, Ruhr, Valonia, Lorena, norte de España, Silesia… La política de reconversión, canalizada a través de los FEDER y el FSE (Fondo Social Europeo), no ha tenido siempre el mismo éxito en todas las regiones. Así la cuenca del Ruhr ha salido mejor parada por su situación geográfica o por la existencia de otras industrias más diversificadas desde un principio. El mantenimiento de la excesiva concentración espacial no sólo ha sido tradicional (las industrias se colocaban en los puertos de entrada de materias primas), sino que se ha acusado durante la segunda mitad del siglo XX a pesar de la crisis de la siderurgia y los astilleros. Las grandes regiones metropolitanas también han sido desde el siglo XIX importantes centros industriales y, a excepción de Alemania, el fenómeno es muy intenso en casi toda la UE (Londres, Île-­‐de-­‐ France, Madrid, etc.). Por lo general se trata de industrias muy diversificadas, aunque con predominio de los sectores de transformación. La excesiva concentración espacial ha obligado a los gobiernos a tomar medidas para equilibrar el desarrollo económico de sus territorios. Sin embargo la industrialización de las zonas rurales es todavía muy puntual, aunque tiene grandes potenciales (excepto en zonas de montaña). En definitiva, en el espacio comunitario existen unas naciones mucho más industrializadas que otras, si bien no con un nivel de desarrollo homogéneo, sino con grandes desequilibrios regionales internos. La gran potencia industrial sigue siendo Alemania (30% de la producción), seguida del Reino Unido, el Benelux, el norte y el centro de Francia y el norte de Italia. En los últimos años destaca el desarrollo del llamado arco latino, en el Mediterráneo Occidental, con una industria muy diversificada basada en las empresas de pequeño y mediano tamaño. Por último, no hemos de olvidar el papel de los países del Este, que desde los noventa han acogido a numerosas industrias deslocalizadas desde Europa occidental. 6.3.-­‐ Los problemas de la producción agraria. (pág. 110-­‐115) La Europa comunitaria presenta unas condiciones muy favorables para la agricultura, pero sus diferencias climáticas y topográficas han formado históricamente unos paisajes agrarios muy variados, tanto 16 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. en su producción como en sus formas de explotación y propiedad. Generalmente se distinguen dos zonas: la mediterránea y la continental. Aunque la producción agrícola sólo aporta el 2,3% del total del PIB y emplea al 5,3% de la población, ha sido una pieza clave de la integración económica europea, a través de la Política Agraria Común (PAC). Sin embargo, lo cierto es que la UE es una gran potencia agropecuaria: es el cuarto productor mundial de cereales, el primero de remolacha azucarera, segundo en el porcino, produce el 60% del vino, el 75% del aceite de oliva, etc. La producción se orienta preferentemente hacia la ganadería, a la que se destina el 50% de la producción cerealera. En la Europa septentrional y occidental predominan las explotaciones ganaderas intensivas de orientación lechera, mientras que en el interior conviven sistemas mixtos agrícola-­‐ganaderos. En la Europa mediterránea destacan los tradicionales cultivos de secano junto a una agricultura de regadío más novedosa que, en general, predomina sobre la actividad ganadera. En la actualidad se tiende cada vez más a la especialización regional, distinguiéndose varias regiones como las cerealistas, las ganaderas (especialmente bovinas), las mixtas de policultivo o policultivo-­‐ganadería. Finalmente están las regiones altamente especializadas como las del cultivo de invernadero y de especies tropicales del sur de España, las regiones de vinos de calidad, los arrozales del delta del Po, Ebro, Valencia, etc.; y la floricultura holandesa y de Liguria. Paralelamente a este proceso se ha venido realizando la interpenetración del sector agrario con el resto de sectores económicos, que se traduce en la existencia de una potente industria agroalimentaria. La UE también destaca por ser una de las primeras potencias pesqueras del mundo y el primer mercado de productos pesqueros transformados y procedentes de la acuicultura. Sin embargo, el mercado comunitario depende cada vez más de las importaciones desde terceros países, mientras que sus flotas deben cada vez más acudir a caladeros muy alejados de los tradicionales del Atlántico nororiental. Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 17 7.-­‐ La política de desarrollo regional de la Unión Europea. (pág. 115-­‐119) 7.1.-­‐ Ampliación del espacio comunitario y aumento de los desequilibrios regionales. (pág. 101-­‐117) Entre los países fundadores de la CEE no existían excesivos desequilibrios regionales, pero con las sucesivas ampliaciones y la crisis económica de 1973 se hizo necesaria la creación de instrumentos para su corrección como el FEDER (1975), que se venían a añadir al FSE y el Fondo Europeo de Orientación y Garantía Agraria (FEOGA). Las recientes ampliaciones han incorporado a países cuya renta per cápita a duras penas alcanzaba al 50% de la de la UE-­‐15 Hoy en día destaca el eje económico París-­‐Ámsterdam-­‐Londres, pero también otros cuatro radiales de gran crecimiento: el de Reino Unido-­‐Irlanda; el que une el norte de Italia, el este de España y el sur de Francia; el del Danubio y el que forman las costas septentrionales y occidentales del Báltico. 7.2.-­‐ Los fondos estructurales y los objetivos de la política regional. (pág. 117-­‐119) Para luchar contra los desequilibrios se ha mejorado recientemente la coordinación entre los fondos de ayudas (FEDER, FSE, FEOGA e IFOP), en segundo lugar desde 1989 se ha reestructurado el sistema de ayudas, estableciendo cinco tipos de objetivos prioritarios según sus características y además la Comisión se reservó la posibilidad de llevar a cabo programas propios: las Iniciativas Comunitarias, dirigidas a atender problemas específicos de ciertas regiones. Desde 1994 funciona también el Fondo de Cohesión, que financia proyectos de ámbito de la protección del medio ambiente y de las redes de transporte (por ejemplo la mayor parte de las autovías españolas se han construido con esos fondos). La Agenda 2000, en previsión de la futura ampliación al Este, introdujo algunas reformas, señalando tres objetivos: regiones menos desarrolladas, regiones en crisis estructural y regiones que necesitan ayuda para la educación, formación y el empleo. Cincuenta años después de su creación, la búsqueda de soluciones para paliar las diferencias regionales de la UE sigue siendo un reto que se ha de buscar para lograr el objetivo de igualdad y armonía en el desarrollo que, desde un principio, se había impuesto en el proceso. CONCLUSIÓN: Hacia una nueva reorganización del espacio europeo. (pág. 119-­‐120) A la tradicional distinción física del continente se añadió el factor político-­‐económico para definir el área occidental de la oriental durante la Guerra Fría. Hoy en día, en la división de Europa se comienza a usar una combinación de criterios económicos y geopolíticos que no sólo incluyen a los Estados, sino también a las regiones, proceso que se encuentra todavía en pleno proceso de configuración. De hecho, las nuevas relaciones económicas y comerciales entre Estados y regiones que genera la integración europea, están dando lugar a la formación de nuevos lazos, creando nuevos conjuntos regionales que en muchos casos superan la profunda división existente entre el Este y el Oeste. En la nueva configuración de Europa destaca un núcleo de regiones centrales que incluye la cuenca de Londres, Benelux, oriente de Francia y centro de Alemania. Por otra parte se sitúa el arco atlántico, la fachada mediterránea, las regiones del Mar del Norte, Escandinavia, el arco alpino, la diagonal despoblada que comprender regiones del interior de Francia y España y los países del Grupo de Visegrád y la franja de Europa Oriental y Suroriental. 18 Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. De esta forma, asistimos a una nueva reorganización de los espacios regionales de Europa, más compleja y dinámica que la conocida hasta ahora y que supera las divisiones tradicionales y que cada vez prescinde más de las fronteras de los Estados. Geografía regional del mundo: Desarrollo, subdesarrollo y países emergentes. 19