A Charlyne Le Importa November 18, 2009 —– Cada martes, el esposo de Charlyne, Bob, comparte desde la perspectiva del pródigo, más de dos décadas después de su divorcio y vuelta a casar. —– “Y entiendan que ésta es tu mano; Que tú, Jehová, has hecho esto.” Salmos 109:27 Oro al Señor para que me ayude a llevarte hacia donde quiero llegar por el camino largo, pero en esencia yo no me casé con la otra mujer porque en el fondo, yo sabía que eso estaba mal. Charlyne y yo estábamos divorciados, y el mundo y la ley decían que siguiera adelante con mi vida, pero algo me seguía recordando que yo todavía estaba casado. “Pero a los que están unidos en matrimonio, mando, no yo, sino el Señor: Que la mujer no se separe del marido; y si se separa, quédese sin casar, o reconcíliese con su marido; y que el marido no abandone a su mujer.” 1ª Corintios 7:10-11 Me doy cuenta que no hay dos situaciones iguales, y que tu cónyuge ausente puede tener un arreglo totalmente diferente, pero la mayoría de los hombres y mujeres que conocemos, Y QUE HAN VUELTO A CASA, han pasado por lo que yo hice y viví. No se necesita de un científico de la NASA para descubrir que hay algo equivocado cuando yo me encontraba en el hogar de otro hombre, tratando de hacer felices a sus hijos, sentado en su mesa, comiendo de la comida comprada con el dinero de la pensión para sus hijos, viendo televisión en el aparato que compró su trabajo, siendo el deleite de la vida de su esposa abandonada y mucho más… Mientras tanto, mi esposa desconsolada y nuestros tres hijos estaban, literalmente, luchando por sobrevivir mientras oraban porque un marido y un papito reaccionara, volviera en sí, volviera al Señor y volviera a casa donde pertenecía. Lamentablemente, la mayoría de la gente casada que abandona a su cónyuge se han involucrado o se involucrarán con alguien andes de volver en sí. La progresión natural de cualquier relación mantenida es hacia el matrimonio. Aún cuando tu cónyuge ausente que el arreglo ilícito que mantiene se mantenga tal como está, yo puedo asegurarte que la tercera persona involucrada en tu matrimonio está presionando y presionando para lograr legalizar el pecado del adulterio. Estas otras personas presionan muchísimo a tu pródigo para casarse. Una esposa que ora, parada firme ante Dios, es una amenaza para una relación pecaminosa. Estas otras personas sienten que pueden ganar control si son capaces de presionar a tu cónyuge para “casarse” con él o ella. Sólo que hay un gran problema, Dios no reconoce estas relaciones adúlteras como matrimonio, y seguirá dando convicción de pecado al pródigo de su conducta impropia, independientemente de lo que los papeles en el Registro Civil puedan decir. La otra persona le dará ultimátums a tu pródigo. Podemos abandonar a la esposa de pacto sin siquiera voltear atrás, pero temblamos cuando la que usurpa su lugar proclama un “ó si no…”. De mi experiencia personal, la iglesia a la que la otra persona y yo asistíamos (si, los pródigos asisten a la iglesia y oyen a los pastores decirles la verdad a otras personas), estaba construyendo un nuevo templo que debía estar terminado para una Semana Santa en particular. Me dijeron que debíamos estar casados antes de esa fecha o nuestra relación terminaría. También se me ordenó que me olvidara de Charlyne antes de eso. ¿Cómo podía una persona que solo yo conocía hacía solo unos meses estar mandándome a olvidar a la que había sido mi esposa por diecinueve años? “Mas, oh amados, no ignoréis esto: que para con el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento.” 2ª Pedro 3: 8-9 Mucho de lo que pasé no lo haré público, pero me siento guiado a compartirles un incidente que con frecuencia está en mi corazón. La otra persona y yo estábamos terminando de cenar en un restaurante italiano cuando recibí un mensaje de mi empleador. En ese tiempo, los teléfonos celulares sólo se encontraban anclados en los autos, así que dejé mi tarjeta de crédito en la mesa y salí a buscar un teléfono público. Cuando regresé a la mesa, mi compañera de cena me dio la tarjeta de crédito y un recibo. “Sólo quería ver cómo se veía”, me explicó. Abrí el papel para leer “Señora de Robert E. Steinkamp” firmado allí. Nunca antes había visto este nombre escrito con la letra de ninguna otra persona, excepto la de Charlyne. Sencillamente no se veía bien. Me sentí atrapado. Mi indigestión aquella noche no fue por la comida italiana, pero vino del pensamiento que pronto podría haber una “Señora Robert E. Steinkamp”, que no era realmente la “Señora Robert E. Steinkamp”. Temor y temblor vinieron sobre mí, Y terror me ha cubierto. Y dije: ¡Quién me diese alas como de paloma! Volaría yo, y descansaría. Ciertamente huiría lejos; Moraría en el desierto. Me apresuraría a escapar del viento borrascoso, de la tempestad.” Salmos 55:5-8 Algún tiempo después, oía una cita en el radio del auto que me tocó profundamente. Dijeron que el misionero mártir Jim Elliot había dicho, “Un hombre no es tonto si renuncia a lo que no puede tener para ganar lo que no puede perder”. El Espíritu Santo me reveló que yo estaba renunciando a Charlyne, a quien no podía perder, por alguien más, una mujer de mentiras, a la cual no podría retener. ¿Puedes ver lo que el Espíritu Santo de Dios estaba haciendo, en respuesta a las oraciones de Charlyne? Estaba enviando flecha tras flecha de Su verdad hacia mí, y lo siguió haciendo hasta que la burbuja de egoísmo que me rodeaba se reventó. Allí fue cuando este pródigo volvió a casa. Como “stander”, firme en la fe, no sientas que tus oraciones han fracasado, o que has fallado en la restauración de tu matrimonio si tu cónyuge entra en una relación fuera de pacto. Sólo fallarás si te rindes. Es la reputación de nuestro Señor Soberano la que está en juego, no la tuya, y El hará exactamente lo que te ha prometido, pero en Su tiempo y no de acuerdo a la agenda de nadie. Aquí les presento mis 5 “P´s” para ayudarlos si se enfrentan con el matrimonio fuera de pacto de su compañero: ? Plegarias – Aprende a orar por tu esposo o esposa que está siendo empujado al matrimonio (¡mi esposa lo sabe todo en ese tema!) ? Propuesta – Recuerda que es la otra persona la que debe haber propuesto el matrimonio, no tu pareja. ? Paz – Descansa en la paz de Dios confiando que El tiene a tu cónyuge en sus manos hoy, no importando que palabras fueron balbuceadas a alguien más. Dios dice que tú y tu amado o amada siguen casados. ? Propósito – Re-enfoca tu propósito al mantenerte firme en la fe. ¿Es cobrársela a la otra persona y traer a tu pareja al hogar, o estás orando para que todos los involucrados lleguen a tener una relación personal con Jesucristo? ? Promesa – Reclama las promesas que Dios te ha dado y aférrate a ellas. Dios nunca cambia, ni siquiera cuando un cónyuge es desobediente. “Mi consuelo en mi aflicción es tu Palabra, Porque tu dicho me ha vivificado.” Salmos 119: 50 Dios te bendiga, Bob Steinkamp Rejoice Marriage Ministries, Inc Post Office Box 10548 Pompano Beach, FL 33061 USA http://rejoiceministries.org (sitio Web del Ministerio) http://rejoiceministries.org/r.php?num=tizwl (Libreria) http://rejoiceministries.org/r.php?num=1qrwh (Radio 24/7) Share this: Click to share on Twitter (Opens in new window) Click to share on Facebook (Opens in new window) Click to share on Google+ (Opens in new window) Related Devotional Copyright© 2016 Rejoice Marriage Ministries, Inc. Unless otherwise noted, scripture quoted are from THE HOLY BIBLE, NEW INTERNATIONAL VERSION®, NIV® Copyright © 1973, 1978, 1984, 2010 by Biblica, Inc.™ Used by permission. All rights reserved worldwide.