XDO. DE INSTRUCCIÓN Nº 3 SANTIAGO DE SANTIAGO RUA VIENA S/N, 3ª PLANTA.- POLIG. FONTIÑAS.- SANTIAGO DE COMPOSTELA Teléfono: 981.54.04.33 904100 N.I.G.: 15078 43 2 2013 0008146 DILIGENCIAS PREVIAS PROC. ABREVIADO 0004069 /2013 Delito/falta: HOMICIDIO POR IMPRUDENCIA Denunciante/querellante: Procurador/a: D/Dª Abogado/a: D/Dª Contra: Procurador/a: D/Dª Abogado/a: D/Dª AUTO Que dicto, Luis Aláez Legerén, Magistrado-Juez del Juzgado de Instrucción Nº 3 de esta ciudad; en Santiago de Compostela, a 13 de enero de 2014. HECHOS PRIMERO.- El día 10 de diciembre de 2013 por la procuradora Dª. María Jesús Fernández-Rial y López, en nombre y representación de CRISTOBAL G.R. Y OTROS, ha sido presentado un escrito formulando recusación de los peritos D. Juan Carlos Carballeira Rifón y D. José Manuel Lamela Riveira, por estimar que concurre en ellos un interés al menos indirecto en la causa,. SEGUNDO.- El día 10 de diciembre de 2013 de 2013 por la procuradora Dª. María Jesús Fernández-Rial, en nombre y representación de APAFAS, ha sido presentado un recurso de reforma frente al auto de fecha de 2 de diciembre de 2013, formulando en el propio escrito recusación de los peritos Sr. Lamela y Sr. Carballeira por estimar que concurre en ellos un interés al menos indirecto en la causa, que debe conllevar que se deje sin efecto su designación y se acuerde haber lugar a la recusación de los mismos. TERCERO.- El día 16 de diciembre de 2013 se recibió en el juzgado un escrito del Ministerio Fiscal oponiéndose a la recusación. CUARTO.- Por providencia de 7 de enero de 2014 quedaron los autos para dictar la resolución procedente. RAZONAMIENTOS JURÍDICOS ÚNICO.- Las referidas acusaciones han formalizado causa de recusación de los peritos Sr. Lamela y Sr. Carballeira por estimar que concurre en ellos un interés al menos indirecto en la causa al tratarse de Técnicos de la Administración Pública con importantes intereses económicos perturbados por el procedimiento. En similar sentido ya se han pronunciado otras acusaciones en diversas ocasiones. La recusación de los peritos tiene una normativa específica. El art. 468 de la LECrim -de supletoria aplicación al procedimiento abreviado (confr. art. 758 LECrim EDL1882/1 )-, establece que "...los peritos podrán ser recusados por las causas y en la forma prescrita en los artículos 468, 469 y 470 (...)”, y entre dichas causas figura el interés directo o indirecto que pueda tener el perito en la causa La imparcialidad de los peritos es una exigencia que está vinculada a la necesidad de que se garantice que la prueba pericial responda exclusivamente a los especiales conocimientos técnicos de su autor. La eventual parcialidad de los peritos por su relación objetiva o subjetiva con el procedimiento adquiere relevancia en los supuestos en que dicha pericia asume las características de prueba preconstituida y no cuando pueda reproducirse en el juicio oral, ya que, en este último caso, el órgano judicial, con la superior garantía que implica la inmediación y la posibilidad de contradicción, podrá valorar todas las circunstancias del desarrollo de la misma y sopesar, en su caso, la influencia que en el desarrollo de la prueba pudiera tener un eventual interés del perito con el hecho y con las partes. Ello es lo que justifica, en última instancia, que el art. 467 de la Lecrim limite las posibilidades de recusación de peritos nombrados judicialmente a los casos en que la pericial no pudiera reproducirse en el juicio oral (ATC 126/2004, de 19-4). Se alega un posible interés de los peritos por su vinculación con la Administración interesada en el resultado del procedimiento. Frente a ello puede argüirse, por un lado, que la Lecrim en ningún artículo dispone que no puedan ser nombrados judicialmente peritos que sean funcionarios públicos sino que, por el contrario, prevé expresamente la posibilidad de su intervención (art. 465); y, por otro, que en el desempeño de su cometido dependen funcionalmente del juez y no de la Administración y deben servir con objetividad a los intereses generales, con pleno sometimiento a la ley y al derecho, so pena de incurrir en responsabilidad criminal (arts. 459 y 460 del C.P). Son muchas las sentencias que se pronuncian sobre la posibilidad de emisión de informes periciales por funcionarios públicos, incluso en causas en que existan intereses de la Adiministración. Como resumen de la jurisprudencia existente al respecto, basta con aludir a la Sentencia del Tribunal Supremo de fecha 29-05-2009, num. 611/2009 EDJ2009/111460 , en la que se afirma que "... tiene declarado esta Sala, respecto al valor que tienen los dictámenes periciales emitidos por los Inspectores de la Agencia Tributaria, como es exponente la Sentencia 192/2006, de 1 de febrero, que dichos informes, en causas en las que la referida Agencia inicia mediante denuncia el procedimiento penal, que la vinculación laboral de estos Inspectores, que tienen la condición de funcionarios públicos, con el Estado, titular del ius puniendi, no genera un interés personal que les inhabilite, por lo que ni constituye causa de recusación ni determina pérdidas de imparcialidad, con cita de las SSTS 1688/2000 de 6 de noviembre, 643/1999, 20/2001 de 28 de marzo, 472/03 de 28 de marzo, 3 de enero de 2003 y 2069/2002 de 5 de diciembre de 2002 ". Según esta última sentencia "... la admisión como Perito de un Inspector de Finanzas del Estado en un delito fiscal, no vulnera los derechos fundamentales del acusado, atendiendo, precisamente a que el funcionario público debe servir con objetividad a los intereses generales, sin perjuicio, obviamente, del derecho a la parte a proponer una prueba pericial alternativa a la ofrecida ...". En suma, en virtud de esa doctrina vinculante para los órganos de la jurisdicción, no puede prosperar, al carecer de base, el intento de recusación, ni cuestionarse, a priori, la imparcialidad de los peritos actuarios por el hecho de ser técnicos integrados en la Administración, ya que ello de ningún modo genera interés personal en la causa ni les inhabilita como técnicos especializados para actuar como peritos objetivos e imparciales y sin perjuicio, naturalmente, de la valoración que podría hacerse de la pericial una vez practicada la prueba. Vistos los preceptos legales citados y demás de general y pertinente aplicación DISPONGO Que debo rechazar y rechazo la recusación de los peritos D. Juan Carlos Carballeira Rifón y D. José Manuel Lamela Riveira. Contra este Auto cabe recurso de reforma y subsidiario de apelación en el plazo de 3 días ante este Juzgado o recurso directo de apelación en el plazo de cinco días para la Audiencia provincial de A Coruña. Así lo acuerdo y firmo. DOY FE